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El efecto de la teoterapia en la autoestima 3

¿ES
¿ES UN
UN PECADO
PECADO
AMARSE A SÍ MISMO?
El efecto de la teoterapia en la autoestima
4 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 5

Néstor Chamorro Pesantes

¿ES
¿ES UN
UN PECADO
PECADO
AMARSE A SÍ MISMO?
El efecto de la teoterapia en la autoestima
6 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Derechos Reservados de Copia:


Néstor Chamorro Pesantes, 2000
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Consejo Editorial:
Ministerio Educativo Nacional.
Asociación Cruzada Estudiantil y Profesional de Colombia
(Centro Colombiano de Teoterapia Integral)
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A.A. 36053 Tel.: 664 8310 Cali - Colombia

Este libro no puede ser reproducido en todo o en parte, por ningún medio impreso o de reproducción sin permiso escrito del
editor.

Impreso en Colombia
Printed in Colombia

.
Las citas bíblicas fueron tomadas de la versión Reina Valera
El efecto de la teoterapia en la autoestima 7

A mi Amado Señor Jesucristo, Quien con


su infinito amor cautiva mi corazón; en
Quien encontré mi identidad y Quien
restauró mi valía como hombre,
haciéndome el hijo y siervo que ahora soy.
8 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 9

Contenido

Prólogo ............................................................................................. 11

Capítulo 1
¿ Es un pecado amarse a sí mismo? ................................................ 13

Capítulo 2
El autoconcepto y el crecimiento presonal ....................................... 27

Capítulo 3
Cómo aceptarse a sí mismo como hijo de Dios ............................... 41

Capítulo 4
La autoestima y la autoconfianza .................................................... 61

Capítulo 5
El liderazgo eficaz: característica de los
que gozan de autoestima y autoconfianza ........................................ 75

Epílogo ........................................................................................... 101


10 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 11

PRÓLOGO

N ací y me crié en una cultura tradicional que no respondió al


interés de un entusiasta joven, que se cuestionaba entre el
conocimiento adquirido y su propia necesidad insatisfecha.
Buscando una respuesta, me dediqué a profundizar en una filosofía, el
Marxismo, y en una estrategia, el Leninismo, que en un momento dado
me sirvieron como plataforma o marco referencial para presentar, no
tanto por convicción, sino como frustración, lo que a mi parecer era la
respuesta que mi cultura no me ofreció. No encontré respuesta en estos
sistemas, pero sin saberlo estaba dando el primer paso de lo que sería
la experiencia más importante de mi vida, a la que me entregaría de
modo absoluto, y que afectaría la vida de miles de hombres y de familias:
estoy hablando de la TEOTERAPIA, tratamiento integral de Dios para
el hombre, a través de la persona de Jesucristo.

Fue a través de este tratamiento, como comencé a desarrollar mi


verdadero autoconcepto, a través de la identificación con Cristo Jesús.
Llegué a conocerme, a saber quién era, cuánto valía, cuán amado era,
y para qué estaba aquí. Desde entonces para mí, siempre ha sido
revelacional mi identidad en las palabras del apóstol Pablo:
12 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Con Cristo estoy juntamente crucificado,


y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y
lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en
la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se
entregó a sí mismo por mí”
(Gálatas 2:20).
Compartiendo esta respuesta integral, he podido ayudar en casi
cuarenta años de ministerio pastoral, a muchos hombres y mujeres que
llegaron a los pies de Cristo, destruidos por la secuela del rechazo, y
que aprendieron a odiarse y menospreciarse como reacción al dolor
de las heridas emocionales que sufrieron.

En este libro, sin agotar el tema, presento esas verdades revelacionales


que nos ayudan a desarrollar un sano concepto de nosotros mismos, y
que nos permiten encontrar la “fuente” de la auoestima y la autoconfianza:
el amor de Dios manifestado en Jesucristo.

Es mi oración que, a través de las páginas de este libro, Dios Papá


restaure todas aquellas áreas de su vida en las que aún permanece en
esclavitud y, como fruto de verse como Él le ve, su vida nunca jamás
sea la misma.

Néstor Chamorro Pesantes


El efecto de la teoterapia en la autoestima 13

Capítulo 1

¿Es un Pecado Amarse a


Sí Mismo?
(Tomado del libro “Cómo vencer la depresión”, de Tim La
Haye, con permiso del autor.)

“Aquél, respondiendo, dijo: amarás al


Señor tu Dios con todo tu corazón, y con
toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y
con toda tu mente; y a tu prójimo como
a ti mismo.”
(Lucas 10:27)
14 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 15

S in excepción alguna, todas las personas deprimidas han tenido


problemas de autoaprobación. Al decir esto no hemos
descubierto nada nuevo, ya que prácticamente todos los seres
humanos tienen una inadecuada imagen de sí mismo. En algún momento
de su vida, hasta los más intrépidos y seguros de sí, se ven obligados a
luchar contra el autorrechazo. Si bien la mayoría recupera su confianza,
ninguno es inmune a él.

Existen algunas ideas equivocadas sobre el hecho de amarnos a nosotros


mismos. A continuación analizaremos algunos puntos que nos permitirán
tener mayor claridad y precisión sobre este asunto.

La mayoría de las personas comete un curioso error con respecto a la


autoimagen: permiten que la opinión de los demás influya y modifique
la opinión que tienen de sí mismas. Por el contrario, lo que una persona
piensa de sí misma afectará lo que otra gente piensa de ella.

Hay tres buenas razones por las cuales no deberíamos permitir que la
actitud de los otros influya sobre lo que pensamos de nosotros mismos.
La primera, es que debemos aceptarnos tal cual nos valoriza Dios, y
no según lo hagan los demás. La segunda, es que no siempre podemos
16 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

aceptar lo que los demás piensan de nosotros, pues pudieran estar


juzgando las apariencias y estar refiriéndose a algo totalmente. La
tercera razón es que lo que los demás piensan de nosotros generalmente
es un reflejo de nuestra propia autoimagen. Si nos sentimos inferiores,
exageramos el sentido de inferioridad y, por consiguiente, los demás
nos mirarán como inferiores.

Si creemos realmente que Dios nos ama y nos ha hecho para una razón
especial, tal como la Biblia lo enseña, podemos aceptar con gratitud
nuestra apariencia, capacidades, linaje, y medio ambiente. Una vez
que aceptamos estas cosas por fe en Dios y en su Palabra, resulta fácil
aceptarnos a nosotros mismos. Si rechazamos a una o más de estas
áreas, sufriremos la desdicha que acompaña al autorrechazo.

LOS TRÁGICOS RESUL


RESULTTADOS DEL
RECHAZO
Sería imposible analizar todos los resultados del autorrechazo porque,
práctica y literalmente, afectan todas las actitudes y comportamientos
en la vida de una persona. No obstante, expondré a continuación
ocho consecuencias de gran importancia.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 17

Depresión
El resentimiento que sigue al rechazo, debido a la apariencia física, las
capacidades, el linaje o el medio ambiente, lentamente se transforma
en autoconmiseración, que invariablemente desemboca en la depresión.
Esta depresión se agravará con la edad, a menos que aprendamos a
aceptar estas reacciones como instrumentos que Dios quiere utilizar en
nuestra vida, para su gloria. Algunos cambios en nuestro medio ambiente
o en las circunstancias de la vida pueden significar un alivio temporal,
pero a menos que modifiquemos nuestros esquemas mentales de
autoconmiseración, permaneceremos encadenados a la esclavitud de
la depresión.

Falta de fe personal en Dios


Es totalmente imposible desarrollar una fe vital y personal en Dios, a
menos que nos aceptemos a nosotros mismos. Nuestra , tanto de la
forma en que Dios hizo nuestro cuerpo, como de nuestro talento,
nuestros padres y del medio ambiente que nos dio, nos conduce a un
espíritu de sometimiento, que es lo que se espera de un cristiano alegre
y eficaz. Para lograr una óptima y vital relación con Dios, tenemos que
agradecerle por nuestro aspecto, por nuestro talento, por nuestros
padres, y por el medio ambiente en que vivimos. Esto es esencial, si
queremos vernos libres de la depresión.

Mucha gente se critica duramente a sí misma en público, pero los


cristianos deberían saber que no pueden censurarse verbalmente,
porque de hacerlo así, descienden del elevado nivel que Dios les fijó.
Bill Gothard, un gran hombre de Dios, sabiamente nos recuerda que,
por imperfectos que seamos, “Dios todavía no ha terminado con
nosotros”. Como hijos, Dios todavía nos está plasmando y retocando
para sus divinos propósitos. En lugar de rechazarnos, y de acuerdo
con la Biblia, tendríamos que presentarnos ante Él y anticipar por fe, lo
que Él quiere que hagamos en nuestra vida. Tal concepto espiritual
18 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

engendrará una actitud mental conducente a la productividad que, a su


vez, nos ayudará a aprobarnos a nosotros mismos.

Rebelión
El autorrechazo, cualquiera que sea su origen, avivará el fuego de
rebelión en nuestros corazones, contra Dios y contra nuestros
semejantes, sean los padres, el jefe, el socio de toda la vida, o cualquiera
que tenga autoridad sobre nosotros.

Vivimos en una sociedad rebelde. No es de sorprender que vivamos


en una sociedad desdichada. Meditemos un instante: a pesar de que la
ciencia y la tecnología han avanzado como en ningún otro momento de
la historia, brindando al hombre grandes comodidades imposibles 25
años atrás, la gente es hostil y, en su mayor parte, desdichada. Es el
resultado típico de la gente que se rechaza, pues, tienden a rebelarse
contra todos y contra todo lo que les rodea.

Ensimismamiento
Cuando alguien se rechaza a sí mismo, es difícil que pueda disfrutar de
los demás. Se vuelve hipersensible, e interpreta mal las actitudes de
los otros hacia su aspecto, sus capacidades, el origen de sus
antepasados o el medio ambiente del que proviene. Por lo tanto, se
condena a un ostracismo voluntario para evitar todo conflicto y los
sentimientos poco agradables que suscita. A medida que más se aparta,
más se entrega a rumiar sobre sus propias necesidades, sus sentimientos
y pensamientos. Como de cualquier manera no está satisfecho consigo
mismo, se torna cada vez más desdichado.

Excesivo énfasis en las cosas materiales


El rechazo hacia uno mismo crea desorbitadas ansias materiales. Las
mismas pueden manifestarse en forma de narcisismo, en el deseo de
El efecto de la teoterapia en la autoestima 19

dar demasiada importancia a los vestidos, o en el afán de amasar una


gran fortuna; pero nada de eso conduce a la felicidad. Resulta difícil
convencer a los jóvenes de que el logro de posesiones materiales no
engendra la felicidad. Puedo nombrar por lo menos a 15 hombres que
poseen grandes fortunas, para quienes el dinero no ha sido la fuente de
felicidad. En algunos casos, su riqueza destruyó la felicidad de que
gozaban cuando eran menos ricos.

Jesucristo dijo:

“Mas buscad primeramente el reino de


Dios y su justicia, y todas estas cosas os
serán añadidas.”
(Mateo 6:33).
A modo de contraste con lo que dije anteriormente, conozco
personalmente a millonarios que son muy felices, pero no fue el dinero
lo que les trajo felicidad. Su principal meta fue servir a Dios, y sus
posesiones materiales fueron el premio a su leal servicio.

Negativismo y ““fracasitis”
fracasitis”
Con frecuencia, escuchamos el proverbio popular de “conócete a ti
mismo”. Es un consejo peligroso para los oídos del que se rechaza,
porque él lo interpreta como: “conoce tu yo negativo”. La persona
frustrada recuerda el pasado como una amalgama de fracasos, afrentas,
insultos, y maltrato a los que estuvo sometido. De ahí concluye que:
“¡Nada me sale bien!»; «¡jamás tengo éxito!»; «¡estoy condenado al
fracaso!”. Puesto que la mente subconsciente tiende a hacernos ejecutar,
cumplidamente, lo que proyectamos en la pantalla de nuestra
imaginación, tal manera de pensar inevitablemente lleva al fracaso, no
porque carezcamos de un potencial de éxito, sino porque, de antemano,
proyectamos que habremos de fracasar.
20 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Imitacionitis”
Los que se rechazan no solamente se comparan con los demás, sino
que tratan de imitarlos, y esto puede ser una práctica nefasta. El Doctor
Maxwelaltz nos advierte lo siguiente: “Recuerden esto y recuérdenlo
todos los días: jamás serán felices, si se pasan la vida tratando de
ser algún otro. Dios los creó como individuos únicos en su género.
Son poseedores de una auténtica grandeza que les pertenece
exclusivamente. ¡ Úsenla, no la malgasten !. La malgastan cuando
tratan de ser algún otro, y digo que la malgastan, por la sencilla
razón de que no son ningún otro”.

Limitar a Dios en el uso que tiene previsto


para nuestra vida
Como resultado del autorrechazo, evitamos que nos utilice Dios, pues
Él ha proyectado un plan para cada uno. El máximo de felicidad se
logra cuando se realiza ese plan de plenitud; así, el resistirlo resulta en
la máxima desdicha. Al rechazarnos a nosotros mismos, no sólo nos
abstenemos de utilizar nuestros naturales talentos, sino que coartamos
a Dios, impidiéndole inyectar en nuestra vida su milagroso poder. ¡Una
vida de fe es una vida fascinante!. La mayoría de la gente jamás llega
a experimentar esa clase de vida, porque en lugar de aceptar la
declaración de Cristo “yo he venido para que tengan vida, y para
que la tengan en abundancia” (Juan 10:10b), se rechazan y, como
resultado de su incredulidad, provocan un corto circuito; por lo tanto,
el poder de Dios no los alcanza. Ellos jamás experimentarán la vida
abundante, en tanto no comprendan, por fe, que Dios los puede
bendecir.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 21

¿POR QUÉ LA MA
MAYYORÍA DE LA GENTE
TIENDE A RECHAZARSE?
Ya que el autorrechazo es un hecho universal, es preciso adjudicarle
una causa común. Analicemos las siguientes posibilidades:

Gente pequeña en un mundo pequeño


Todos comenzamos en el mismo punto de partida: gente pequeña
incapaz de producir. Ya se trate del niño que desea ayudar a su padre
a reparar el automóvil de la familia, y queda frustrado porque ve que su
sabio padre puede arreglar cualquier cosa, en tanto que él no lo puede
hacer; o se trate de la niñita cuya habilísima madre puede hacer una
torta prácticamente de la nada, mientras que ella apenas se puede
desenvolver en la cocina. A todos se nos plantea el mismo problema:
todos queremos realizar algo, pero nos falta la paciencia para dedicarle
el tiempo, el entendimiento y la experiencia, acordes con la tarea.

El ridículo en el niño
No hay individuo que al crecer no sea ridiculizado por sus padres.
Para muchos niños, el ridículo puede llevarlos a encontrar defectos en
su personalidad, lo que los llevará a un profundo autorrechazo.

Seamos más conscientes de los propios errores que de los errores de


los demás

Siempre ha sido un motivo de asombro para mí, el hecho de que algunos


perfeccionistas admiren a personas que, en su desempeño, son hasta
menos capaces que ellos, como resultado de la baja autoestima que
poseen. Los pecados del perfeccionista rondan a su alrededor,
precisamente porque busca siempre “ser perfecto”, y sus fracasos le
afectan más que a otros. En realidad, se torna obsesionado con sus
propios defectos.
22 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Padre, familiares, maestros, y amigos


críticos
La crítica constante es siempre perjudicial. Todos buscamos y
necesitamos el elogio, particularmente de los que amamos.
Desgraciadamente, los padres que se estiman poco, critican
desmesuradamente a sus hijos, casi como si trataran de exaltar su propia
importancia, centrando la atención sobre la torpeza e insuficiencia de
sus hijos. Para el niño, esta crítica es un rechazo. Si sus padres lo
rechazan, le resulta fácil rechazarse a sí mismo.

LOS SELLOS DE GARANTÍA DE LA


AUTOAPROBACIÓN
Las personas maduras no son perfectas por definición, pero al menos
han aprendido a aceptarse por lo que son; esto incluye, tanto sus fuerzas
como sus debilidades. Estas personas se proyectarán y tratarán de
ajustarse a un programa, para vencer sus debilidades. Sin darse cuenta,
este tipo de autoaprobación se manifestará inconscientemente en sus
acciones y reacciones y, a medida que crece y progresa en su vida
espiritual, madurará emocionalmente. Tal madurez será un cumplimiento
andante de los dos mandamientos, tal como fueron definidos por
Jesucristo, los que contienen los sellos de garantía de la verdadera
autoaprobación.

“Aquél, respondiendo, dijo: Amarás al


Señor tu Dios con todo tu corazón, y con
toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y
con toda tu mente; y a tu prójimo como a
ti mismo.”
(Lucas 10:27)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 23

Espíritu
Vacío
Plenitud de
Espiritual
la unción

Alma
Ama a Dios
Acepta corrección
Cuerpo
Acepta el Perdón Es responsable
de Dios en el cuidado
Emocionalmente de su cuerpo
equilibrado Se ama y se
Acepta a los acepta a
demás sí mismo
Yo

Aparte de estos dos sellos de garantía de la autoaprobación, según lo


entendió Jesús en el versículo citado, hay por lo menos siete más. Vamos
a analizar brevemente cada uno de ellos:

Ama y sirve a Dios


La persona que goza de autoaprobación, será un cristiano sometido a
la voluntad de Dios. No estará confundido en cuanto a su identidad, ni
constantemente impulsado por su ambición de éxito. Antes bien, la
preocupación por su relación con Dios y por servirle le harán tener en
menos sus ansias de satisfacer sus propios gustos.

Ama y acepta a los demás


Las personas maduras pueden amar a los demás, y compartir con
ellos los éxitos de la vida. La Biblia nos enseña que debemos alegrarnos
con los que se alegran, y llorar con los que lloran. Si nuestro vecino
gana en una rifa, un carro último modelo, ¿somos capaces,
honestamente, de regocijarnos con él?. El egoísta inmaduro refunfuñará:
24 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“¿Por qué nunca me pasan estas cosas a mí?”. Pero si muriera la


esposa del vecino, no es difícil llorar con él, sin desear una desgracia
similar. La persona verdaderamente madura amará y aceptará a los
otros por lo que son, y se alegrará por sus éxitos.

Se ama y se acepta a sí mismo


No debemos tener ningún reparo en amarnos a nosotros mismos.
Algunos cristianos piensan, equivocadamente, que el amarse a sí mismo
constituye un pecado, pero Cristo no dijo: “No te ames a ti mismo”,
sino “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, consciente de que el
amor a uno mismo, en su adecuada dimensión y perspectiva, es esencial.
Todo el mundo, en alguna medida, se ama a sí mismo, aún al acariciar
pensamientos de autodesprecio. Pero algunos se aman a sí mismos,
más que a Dios o a los demás. Jesús da un amplio margen para amarse
a uno mismo, siempre y cuando ese amor aparezca tercero en la lista
de prioridades (*). Es fácil advertir una adecuada autoaprobación,
por la manera como las personas aceptan el elogio sobre su trabajo o
su aspecto físico. En lugar de ignorar el elogio, con cierta vergüenza, o
de disculparse a sí misma, la persona madura reconoce cortésmente la
alabanza. Los que se rechazan se aturden y confunden, y aumentan su
desconcierto, diciendo algunas tonterías que no vienen al caso.

Es una persona responsable


Las personas maduras son de confiar, pues siempre aceptan la plena
responsabilidad de sus actos. Esto se observa especialmente cuando
las cosas salen mal. Los que cuentan con su propia aprobación jamás
echan sobre terceros la culpa de su errores, porque reconocen que su
seguridad y autoaprobación no dependen de una sola experiencia aislada
en la vida. Más les interesa aprender de sus errores, que urdir culpas
ajenas. Ese tipo de madurez hace excelentes líderes.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 25

Es emocionantemente expresivo
Las personas maduras gozan de la libertad no solamente de reír y de
llorar, si la ocasión lo exige, sino también de responder emocionalmente
a los que le rodean. Su gozo no depende de la gente o de las
circunstancias; ellos irradian alegría desde adentro. El apóstol Pablo
en su Epístola a los Efesios, declara que el hombre lleno del Espíritu
Santo tendrá una canción en su corazón, un espíritu de gratitud y una
actitud sumisa. Tal individuo jamás estará deprimido.

“No os embriaguéis con vino, en lo cual


hay disolución; antes bien sed llenos del
Espíritu, hablando entre vosotros con
salmos, con himnos y cánticos espirituales,
cantando y alabando al Señor en vuestros
corazones; dando siempre gracias por todo
al Dios y Padre, en el nombre de nuestro
Señor Jesucristo. Someteos unos a otros
en el temor de Dios”.
(Efesios 5:18-21)

Mantiene una flexibilidad creativa


La persona madura aflojará, si es necesario, y reajustará su programa
o su plan, cuando la ocasión lo demande. No llega al extremo de que,
para salirse con la suya, se muestre insensible a las necesidades de los
demás. Muchos desaprovechan las experiencias benéficas, por su
resentimiento contra circunstancias sobre las que no pueden ejercer
control alguno. La persona madura será lo suficientemente reposada y
positiva para que en el momento en que se produzcan las circunstancias
adversas, su mente creativa pueda imaginar una alternativa eficaz.

(*) Aunque respeto el planteamiento del autor, lo que siempre he enseñado, a la luz de la
Biblia, es que el orden correcto es: primero, amar a Dios; segundo, amarnos a nosotros
mismos; tercero, amar al prójimo. Amaremos a otros en la medida en que nos amemos a
nosotros mismos.
26 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Acepta la corrección y la crítica


Las personas maduras no se sienten amenazadas cuando alguien las
corrige o les propone un método mejor. Todo lo contrario, agradecen
la sugerencia de los demás y procuran encontrar mejores métodos
para la consecución de sus metas.

¿CÓMO MEJORAR NUESTRA AUTOIMAGEN?


Si asumimos que el logro de una buena imagen es muy importante para
superar la depresión, vale la pena detenernos un poco para considerar
algunos métodos que ayudan a su obtención. Aquí presento diez pasos
para alcanzar la victoria sobre la depresión:

Aceptarnos como criaturas de Dios


Agradezcámosle a Dios que somos objeto de su amor, y que nos hizo
tal cual somos. Hagámonos el propósito de agradecerle especialmente
por nuestra naturaleza o nuestro aspecto, que en alguna medida
lamentamos que sea como es. Conociendo que es Dios quien controla
los genes, durante la concepción, constituye un acto de desobediencia
resentirnos por las áreas de nuestra vida que no pueden ser cambiadas.
Agradezcámosle por lo que somos, y confiemos en Él para que nos
haga la persona que Él quiere que seamos.

Aceptemos el perdón de Dios por


nuestros pecados
Por supuesto que si constatamos pecados en nuestra vida, debemos
confesarlos. Cuantas veces nos examinemos en la pantalla de nuestra
imaginación, naturalmente enfocaremos nuestra atención en los errores
y pecados del pasado. Pero una vez confesados, demos gracias a Dios
por su perdón.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 27

Superponer a Dios sobre nuestra


autoimagen
Agradezcamos a Dios de una manera real y práctica, por su presencia
en nuestra vida. Recordemos, como lo hizo el apóstol Pablo, que “Todo
lo puedo en Cristo que me fortalece.” (Filipenses 4:13).

Visualicémonos a medida que Dios nos


moldea
No cedamos a la tentación de vernos a la luz de fracasos pasados.
Mirémonos como creciendo y madurando en la medida en que nosotros
y Dios lo deseemos. La Biblia nos dice:

“Haya, pues, en vosotros este sentir que


hubo también en Cristo Jesús”
(Filipenses 2:5).
Pensemos en nosotros mismos, como un reflejo de la mente de Cristo.

Visualicemos por fe las metas fundamentales


de nuestra vida y anotémoslas .
Si anotamos en un papel nuestros objetivos, activamos a nuestro
subconsciente para que nos recuerde las cosas que debemos hacer en
cumplimiento de nuestras metas. Oremos por ellas con fe, pues
requerimos el poder de Dios para posibilitar el logro de lo imposible.

Seamos siempre positivos


No hay lugar para el negativismo en la vida de un cristiano. Ligados
como estamos al divino poder de Dios, no debemos anticipar otra
cosa que el éxito. Evitemos al quejoso, al insistente, y al crítico; sobre
28 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

todo, evitemos imitarlo. Debemos mantener bajo signo positivo todas


nuestras conversaciones y nuestra mente. Prestemos atención a la clara
instrucción que sobre este asunto nos da la Sagrada Escritura:

“Por lo demás, hermanos, todo lo que es


verdadero, todo lo honesto, todo lo justo,
todo lo puro, todo lo amable, todo lo que
es de buen nombre; si hay virtud alguna,
si algo digno de alabanza, en esto pensad”.
(Filipenses 4:8).

Anticipemos la superabundante vida que


Dios tiene para nosotros
Dios ha proyectado para nuestra vida un plan completo, pero flexible.
Este plan incluye la buena, aceptable y perfecta voluntad de Dios:

“Así que, hermanos, os ruego por las


misericordias de Dios, que presentéis
vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo,
agradable a Dios, que es vuestro culto
racional.»
(Romanos 12:1).

Busquemos primeramente el reino de Dios


“Mas buscad primeramente el reino de
Dios y su justicia, y todas estas cosas os
serán añadidas”
(Mateo 6:33).
Este versículo deja claramente sentado, que el cristiano no puede
permitirse actitudes codiciosas o egoístas en su vida. Si bien no le
El efecto de la teoterapia en la autoestima 29

está vedado alcanzar posiciones o garantías materiales, nunca éstas


pueden ser su objetivo principal. Su primer objetivo es buscar el reino
de Dios y su justicia.

Entreguémonos a Dios para servir a los


demás.
No hay en la vida recompensa y gozo mayor que el servir a otros.
Además, esto hace las veces de terapia emocional. Los deprimidos
piensan demasiado en sí mismos; servir a Dios ayuda a la gente, nos
hace pensar en otros, y no tanto en nosotros. Personalmente, estoy
convencido de que Dios ha dispuesto la psiquis humana de tal manera
que, a menos que haga amigos, jamás podrá estar satisfecha. Las
recompensas por tales servicios no solamente significan un beneficio
para la eternidad, sino que nos ayudan en esta vida.

Demos gracias en todo


“Dad gracias en todo, porque esta es la
voluntad de Dios para con vosotros en
Cristo Jesús.”
(1 Tesalonicenses 5:18).
Este versículo brinda una garantía absoluta contra la depresión
emocional. Durante varios años he anunciado a miles de personas, en
conferencias sobre la familia, que la garantía absoluta contra la depresión
la encontramos en esta porción de la Biblia. Hasta ahora no he hallado
una sola excepción. Es absolutamente imposible que se deprima una
persona sana que está llena del Espíritu Santo y que da gracias en
todo.
30 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 31

Capítulo 2

El Autoconcepto y El
Crecimiento Personal

“Digo, pues, por la gracia que me es dada,


a cada cual que está entre vosotros, que
no tenga más alto concepto de sí que el
que debe tener, sino que piense de sí con
cordura, conforme a la medida de fe que
Dios repartió a cada uno.”
(Romanos 12:3)
32 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 33

LA C AP
CAP ACID
APACID AD DE VERNOS A NOS
ACIDAD OTROS
NOSOTROS
MISMOS

E
l autoconcepto es el conjunto de ideas que tenemos acerca de
nosotros mismos. Cada uno de nosotros, nos demos cuenta o
no, tenemos una imagen de nosotros mismos. Nos vemos, de
alguna manera, listos, pausados, cariñosos, bien intencionados,
perezosos, incomprendidos, meticulosos, o astutos; podríamos tomar
muchos adjetivos para describirnos. Este es el “yo” que está detrás de
la cara que se ve en el espejo; el “yo” que piensa, sueña, habla, siente
y cree; el “yo” que ninguno conoce completamente.

Todo el mundo tiene una imagen de sí mismo, buena o mala, pero


cualquiera que ella sea, esa imagen afectará su comportamiento,
actitudes, productividad y, en última instancia, su éxito en la vida. Dos
expresiones populares sobre la autoimagen, en el campo de la
psicología, ilustran esta tesis fundamental: «Somos lo que creemos ser».
«Lo que los demás piensan de mí, no es tan importante como lo que yo
pienso de mí mismo».

Los pensamientos engendran sentimientos, y los sentimientos engendran


acciones; por consiguiente, los pensamientos que nacen de nuestra
autoimagen afectan nuestras acciones, negativa o positivamente. El
que tiene una imagen de confianza en sí mismo, rendirá al máximo en su
34 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

capacidad; no así el inseguro, que carece de esa confianza. Esto explica


por qué algunos talentosos fracasan, y por qué triunfan algunos
mediocres.

Un autoconcepto saludable es fundamental para tener bienestar


emocional: nos sentimos cómodos con nosotros mismos y disfrutamos
de una paz interior duradera. Cuando se desarrolla un sano
autoconcepto, la persona lleva una vida útil y productiva: piensa con
claridad para lograr mejor rendimiento y se concentra en metas definidas
con la motivación suficiente para lograrlas.

Cuando se tiene una autoimagen adecuada, se enfrentan los problemas


de la vida y hay dedicación para resolverlos. La persona no tiene qué
dividir sus esfuerzos entre atender sus ansiedades interiores y enfrentar
la circunstancia del momento. Podrá gozar los logros obtenidos sin
presumir de ello; se desenvuelve competentemente en la vida, porque
sabe que ya «es». No está tratando siempre de «llegar a ser».

FILTROS P
FILTROS ARA VER LA REALID
PARA AD
REALIDAD
El autoconcepto proviene del conjunto de toda la vida; viene de ideas
pasadas. Es el resultado de vivir un proceso para llegar a ser mejores.
El autoconcepto es importante porque cada cosa que hacemos o
decimos, cada cosa que oímos, sentimos o percibimos, está influenciada
por la manera como nosotros nos vemos a nosotros mismos.

Los fotógrafos frecuentemente colocan un filtro rojo sobre el lente de


su cámara, para tomar fotografías de las nubes con películas en blanco
y negro. El filtro previene que algunos rayos de luz alcancen la película,
de tal forma que la fotografía muestra el cielo más oscuro, y más brillante,
el blanco de las nubes. El autoconcepto es como un filtro que discierne
o quita lo que nosotros no queremos ver u oír. En sentido contrario, el
autoconcepto da una idiosincrasia particular a nuestra conducta. ¿Quién
de nosotros no ve su nombre en medio de un montón de palabras de
El efecto de la teoterapia en la autoestima 35

una página?, ¿Y oye su nombre, anunciado en medio del ruido de un


aeropuerto, entre anuncios que no alcanza a comprender?. Esto se
llama oído selectivo. Es una función de nuestro autoconcepto.

La forma como nos vemos a nosotros mismos determina generalmente


nuestra reacción, lo que percibimos y, en términos generales, como
nos conducimos.

Veamos un caso: Imaginemos dos ejecutivos, A y B, en situaciones


idénticas. Cada uno llama a un subordinado y le delega un trabajo.

El ejecutivo A dice: “Tomás, estoy preocupado acerca de nuestras


relaciones con la Compañía XYZ. Sus compras han declinado
últimamente en una forma brusca. Usted sabe nuestra situación con
ella. Investigue y encontrará la causa de esta reducción de volumen.
Déjeme saber si se encuentra con algo que no puede comprender.”

El ejecutivo A tiene confianza en su habilidad para resolver la situación.


Él se ve a sí mismo como imposible de asustarse y capaz de lidiar con
cualquier cosa que la investigación de Tomás descubra, y deseoso de
no dejar la acción hasta que los hechos se hayan aclarado.

El Ejecutivo B, por otro lado, dice: “Jorge, la Compañía XYZ, ha


disminuido sus compras a nosotros por el tercer mes consecutivo.
Tenemos que ver esto y rápido. Ahora, vaya y visítelos. Hubiera
deseado ir, pero estoy muy ocupado aquí. Hable con el agente de
compras, ¿cuál es el nombre de este señor? Hum....(revolviendo
papeles)....aquí está...Fernando. No.... Mejor hable con el Ingeniero
Jefe, es un buen muchacho ...llamado...este ... el nombre se me escapa
en este momento .... pero usted lo podrá saber por medio de Fernando.
Pero no se acerque a Samuel Triana, de cualquier forma sabrá lo que
pasa, y podrá usar su visita como señal de que estamos asustados de
la XYZ. Necesito tener algunas respuestas en este asunto... El jefe
está sobre mí, pero bueno…..”
36 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

El ejecutivo B está, obviamente, actuando con menos confianza. Él


parece asustado por la situación. No confía en que Jorge use su sentido
común, guiado por sus indicaciones explícitas de lo que debe y no
debe hacer. Posiblemente, porque a él también le falta confianza.

CAMBIOS CONTÍNUOS EN EL
AUTOCONCEPTO
Aunque el autoconcepto general es importante para comprender la
conducta humana, se vuelve crítico también para comprender el
desarrollo en nuestro desempeño profesional, laboral o ministerial. Bajo
una perspectiva psicológica y fría, podemos decir que un cambio de
conducta en el trabajo, para mejor o peor, significa un cambio en el
autoconcepto.

Los seres humanos constantemente cambian de conducta, como


podemos ver si nos examinamos a nosotros mismos y a otros, en una
forma suficientemente crítica. Es una observación muy superficial decir
que «fulano de tal» es la misma persona que hace cinco años atrás.
Técnicamente, no es exactamente la misma persona hoy que ayer. Ante
El efecto de la teoterapia en la autoestima 37

todo, es un día más vieja. Debe haber aprendido algo nuevo, por
imperceptible que esto sea. Su percepción de los hechos de hoy es
diferente, aunque esta diferencia sea tenue e indetectable. Quizá no le
haya pasado nada “significativo”, ninguna promoción, o accidente,
ni disturbio anímico, pero será diferente, aunque solamente una persona
con la sabiduría de Salomón se dé cuenta de ello. En todo hombre, el
cambio de conducta es constante.

Cuando lideramos a otros, ya sea en el trabajo o en el ministerio, a


veces tenemos dificultades para pensar en cambios en la conducta de
nuestros discípulos o subalternos, y esto viene de nuestra inhabilidad
para discernir los cambios, porque a veces nos escudamos detrás de
pensamientos mentirosos como: “No se puede enseñar a perros
viejos, nuevos trucos” o “Nació así”, o “Él siempre ha sido así
desde que lo conozco.”

Por otro lado, algunas veces, los cambios superficiales de conducta


han sido considerados erróneamente básicos. Por ejemplo, considerar
el simple cambio de conducta que viene con el aumento de
conocimiento y habilidades, fruto de entrenamiento y adiestramiento
adecuado. Si lo que queremos es que ellos crezcan en el sentido
profundo de la palabra, es necesario algo más efectivo y básico para
que se desarrollen. Este profundo crecimiento es, naturalmente, un
cambio en el autoconcepto. Es lograr que crezca el discípulo o
subalterno que es caprichoso o poco serio en sus juicios, o a quien le
falta ímpetu o decisión: que se encamine hacia la seriedad o hacia la
firmeza o decisión.

LA CLA VE P
CLAVE ARA CRECER
PARA
Como consecuencia de que una persona cambie su percepción de sí
misma, también cambia su actitud hacia la vida, hacia sí misma, hacia
su trabajo, etc. Este crecimiento trae notables cambios en la conducta
exterior.
38 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Este crecimiento demanda la plena participación de la persona. Una


persona cambia porque quiere hacerlo, no porque se le dice que cambie
o porque es lo que hay qué hacer. El crecimiento implica cambios en el
hombre mismo, en cómo usa sus conocimientos, en los fines con los
cuales aplica sus habilidades y, en resumen, en la visión de sí mismo. El
asunto es bien claro. La persona que crece es porque se examina a la
luz de Dios y, mientras hace esto, emerge con nuevo sentido de
motivación, con un más agudo sentido de dirección, y un mayor deseo
vital de vivir en la dimensión para la cual Dios le diseñó. De esta
manera, crece en su autoconcepto, lo que le llevará a un continuo
desarrollo personal.

CONFLICTOS EN EL AUTOCONCEPTO
Cada ser humano tiene varios “yo”, pues, asume diferentes roles: padre,
esposo, hombre de negocios, ejecutivo, jugador de football, etc. Pero
a veces hay conflicto entre alguno de esos papeles, y la disconformidad
aparece. Tales conflictos traen tensión, sentimientos de culpa, y
compensación.

Déjeme ilustrarle con un ejemplo familiar: «Un hombre se ve a sí mismo


como un buen padre y un buen hombre de negocios. Como padre,
pasa tiempo con sus hijos, pero como hombre de negocios se siente
abrumado con la demanda de su tiempo. ¿Qué es lo que hace?
Obviamente, no puede estar en su hogar con su familia muchas de las
noches y también, al mismo tiempo, estar afuera de su casa en sus
obligados viajes de negocios. No puede conciliar ambos autoconceptos
simultáneamente. Por lo tanto, ¿qué es lo que pasa?. Se las arregla,
dedicándose a sus negocios de lunes a viernes, y a su familia los fines
de semana».

Esto parece una solución fácil. Por lo tanto, ¿cuál es el problema? El


hombre de nuestro ejemplo ha tenido que modificar ambos
autoconceptos y pudiera sentirse insatisfecho con esta necesidad. Por
El efecto de la teoterapia en la autoestima 39

lo tanto, su disconformidad, su insatisfacción psicológica, y el conflicto


básico en sus autoconceptos, puede mostrarse en su conducta. Puede
criticar sin cuidado a sus asociados o subordinados que no sigan su
ejemplo, y dejen su vida familiar de lado durante la semana. O puede
enojarse con sus hijos, quienes sin darse cuenta, atienden sus propias
actividades los fines de semana, ignorándolo a él. Y si por casualidad
su hijo adolescente desarrolla cualquier problema emocional, tal como
“rechazo por su padre”, nuestro hombre realmente explota: ¿Cómo
puede ser esto?, ¿No he dado yo a mi muchacho cada fin de semana?”,
preguntará.

Cuando en nuestros diferentes roles (autoconceptos) hay conflictos,


nuestra conducta será inefectiva. Por definición, la conducta efectiva
consiste en la conducta integrada, mientras que la conducta sin integrar
es la conducta de los conflictos.

IRREALISMO EN EL AUTOCONCEPTO
Agregado a los conflictos en el autoconcepto, como una causa de
conducta inefectiva, está el asunto crucial de la disparidad entre “cómo
nos vemos a nosotros mismos” y “cómo nos ven los otros”. Una realista
autovaloración ha costado a muchas personas su trabajo. Piense en
los hombres que han sido despedidos, postergados o desplazados,
porque “no dan la medida del zapato en el trabajo”. ¿No ha
quedado en muchos de esos casos el refinado sabor de la
inadaptabilidad, de una rígida inhabilidad de la persona para ajustar
sus impresiones a un nuevo rol cuando los tiempos cambian?.

Más familiar son los casos trágicos de los hombres que no saben
envejecer con gracia, y resultan ridículos con conductas y actitudes
que no corresponden a su edad. Son innumerables las equivocaciones
que ocurren cuando no hay una comprensión realista de nuestro
verdadero valor.
40 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Por ejemplo, tomemos el caso del vicepresidente de una compañía,


que fracasa en su labor porque él nunca se da cuenta de su incapacidad
para soportar el rigor de ser un hombre clave. Hay muchas causas de
fracaso, generadas por la disparidad entre “¿quién soy yo?” y “¿quién
creo que soy yo?”.

Infortunadamente, no sólo el fracaso inmediato viene de la diferencia


de autoconcepto; más insidioso es el efecto de una parcial o remilgada
autovaloración. Si bien es cierto que el realismo en la visión individual
de sí mismo es buena y tiene relación con la efectividad en el trabajo,
también es cierto que cada uno de nosotros puede aumentar su
efectividad por el simple hecho de desarrollar un autoconcepto, más
cierto y más realista.

En resumen, mientras más realista sea el concepto que uno tiene de sí


mismo, mayor garantía habrá en su efectividad personal. Voy a narrar
un ejemplo que enfatiza este punto:

«Jorge, vicepresidente de ventas de una compañía con un gran capital,


con doscientos cincuenta vendedores a sus órdenes, estaba en una
seria dificultad organizacional. Había constantes quejas de los
vendedores, tales como: “¿Para quién trabajo?”, “Nadie sabe si estoy
trabajando bien o mal”, “No tenemos ningún sistema para hacer
seguimiento del servicio a nuestros clientes”. Los ejecutivos, a las
órdenes de Jorge, trataban de hacer dos o tres veces más de lo que
antes habían hecho, sin lograr nada; la situación era realmente un caos.

Jorge, como persona, era bien visto y respetado. Democrático, atento


con los otros, de habla suave, no le gustaba “ordenar”, siempre “sugería”,
inseguro de sí mismo como administrador. En general, era un hombre
que se vio a sí mismo como un estimulador y coordinador de hombres,
un excelente vendedor, pero no un supervisor. De alguna forma, había
perdido completamente el sentido de que había hombres esperando
que él los dirigiera. Él pensaba que todo vendedor debía saber qué
El efecto de la teoterapia en la autoestima 41

hacer. Su propia percepción de sí mismo y la percepción que de él


tenían sus hombres como vicepresidente de ventas eran diferentes.

La situación fue superada cuando un hombre ajeno a la compañía, en


el cual Jorge confiaba plenamente, le dijo sin rodeos: “Jorge, su gente
está esperando que usted clarifique la atmósfera. Ellos seguirán cualquier
plan organizacional que quiera. Es un paso que sólo usted puede dar.
Ellos le respetan y quieren su liderazgo. Le valoran, no les pregunte;
dígales, por el amor de Dios, cómo usted va a organizar sus actividades.

Jorge trató de integrar esta nueva dimensión en su autoconcepto, como


vicepresidente de ventas. Al principio se fue al extremo y se volvió muy
estricto. Hizo grandes demandas, amenazó, le dijo a cada uno: “Yo sé
lo que quiero y cuándo lo quiero, y esto es ahora mismo.” Pero pronto
abandonó su pretensión y absorbió en su autoconcepto el nuevo aspecto
de sus funciones. Preparó un plan organizacional, señaló políticas y
procedimientos que solucionaron problemas de ventas y servicios.
Discutió plenamente dicho plan con quienes estaban involucrados, y
dijo finalmente: “esto es, vamos”. Al fin, Jorge pudo ver, como
vicepresidente de ventas, las necesidades de sus hombres. Este punto
ciego le costó un prolongado caos, y aun le hubiera podido costar la
pérdida de su trabajo, si hubiera seguido sin solución».

Finalmente, es claramente manifiesto que el cambio de autoconcepto


trae crecimiento personal y tiene su recompensa. Necesitamos crecer
en nuestro autoconcepto, de tal manera que se desarrolle todo nuestro
potencial. En la actualidad, las compañías al seleccionar a sus futuros
ejecutivos, buscan al hombre, no su conocimiento o sus cualidades
especiales. Para usar un viejo adagio, no es lo que usted sabe lo que
finalmente vale, sino lo que usted es.
42 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

RESISTENCIA NATURAL
Pero todavía hay una gran pregunta por responder. Si los cambios en
el autoconcepto son deseables, ¿qué es lo que nos motiva a cambiar?
Con seguridad,¿ son posibles los cambios en el autoconcepto?
Naturalmente, los cambios son posibles, pero hay una dificultad para
crecer.

Aunque muchas personas quieren cambiar su autoconcepto, tienen la


velada sospecha de que tal esfuerzo es fútil. Imperceptibles murmullos
de descontento tienden a anularse con la idea de que “un perro viejo
no puede aprender nuevos trucos”. Y la básica conformidad del “status
quo” parece sobrepasar el deseo de una nueva manera de comportarse.

Una razón de tales sentimientos de resistencia es que, psicológicamente,


la persona madura se resiste a los cambios. Por definición, el
autoconcepto es la organización de actitudes, hábitos, conocimientos,
ímpetus y gustos. Y también, por definición, el hecho de la organización
significa un cimentar juntos todos estos complejos componentes. Por
ejemplo, el hombre que por muchos años ha sido alta y agresivamente
competidor, no puede, excepto con dificultad, ya sea rápida o
gradualmente, volverse íntimamente cooperador; tenderá a verse a sí
mismo con la necesidad de sobrepasar a su compañero. El individuo
retiene su conducta, su consistencia, sus características básicas y, en
este sentido, resiste el cambio. De cierto modo, esto es bueno, pues,
de lo contrario, todavía viviríamos la angustia de “encontrarnos a
nosotros mismos”, tal como lo hacíamos cuando éramos adolescentes.

Cuando la persona madura y cambia, lo hace en contra de una


resistencia natural; pero cuando su resistencia es una cubierta que le
hace inalcanzable, la cuestión se torna difícil. La resistencia, bien puede
ser o una piedra en el camino o una forma de impulsarnos.

Los cambios en el autoconcepto deben ser en profundidad y no


El efecto de la teoterapia en la autoestima 43

periféricos. Deben iniciarse en el área espiritual. Incluyen cambios en


la percepción o en la actitud y compresión de quiénes somos en Cristo
Jesús; no se trata de cambios en conocimientos, experiencias o
habilidades. Nuestra exploración de cómo los cambios ocurren deben
incluir esos factores que parecen obrar más profundamente en el
individuo y que polarizan nuevas direcciones y conductas. Los cambios
profundos se dan cuando la naturaleza del hombre es cambiada y
continúa en un proceso de constante renovación; sólo entonces se dan
cambios que van más allá de la simulación o pretensión. Son cambios
en lo profundo de la persona, no simples cambios en la apariencia.

PAS OS P
ASOS ARA LA MADUREZ
PARA
La experiencia cristiana es un proceso en el cual nos libramos del
concepto inadecuado de nosotros mismos, obteniendo así más y más
libertad para activar todo el potencial de nuestra vida en Cristo.

¿Hemos deseado que Dios nos madure instantáneamente. La madurez


inmediata ha parecido preferible a todo el dolor y el sufrimiento que,
con tanta frecuencia, forman parte de nuestro crecimiento personal.
Sin embargo, Dios nos hace pasar por ciertas experiencias que se
requieren para el proceso de maduración. Este crecimiento algunas
veces se da en forma inexplicable; otras veces, con lentitud agonizante.
Hay ocasiones en que el verdadero aprendizaje es tan profundamente
inconsciente, que no se manifiesta en forma clara por un largo tiempo.

Todos estamos en este proceso de crecimiento, en el cual, mediante


nuestra relación con Dios, llegamos a vernos como Él nos ve. El
conocimiento de esta realidad se convierte en base estable sobre la
cual puede descansar y desarrollarse sanamente nuestro autoconcepto.

Para mejor comprensión, podemos postular una secuencia de pasos:


44 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Examinarnos a la luz de Dios


Es necesario que busquemos la luz de Dios para conocernos a nosotros
mismos y discernir en qué nivel de madurez estamos y a dónde nos
quiere llevar el Señor.

El Salmo 36:9 dice:

“Porque contigo está el manatial de la vida;


en tu luz, veremos la luz” y David sabía cómo
orar cuando se trataba de conocerse a si
mismo: “Examíname, oh Dios, y conoce mi
corazón; pruébame y conoce mis
pensamientos; y ve si hay en mí camino de
perversidad, y guíame en el camino eterno”.
(Salmo 139:23 y 24).
Sólo Dios, quien conoce más de lo que nosotros conocemos, nos puede
dar un diagnóstico de nuestro crecimiento.

Examinarnos a la luz de Dios es preparar el terreno para conocernos


realmente, sin lo cual el crecimiento no puede ocurrir. Cuando nos
conocemos realmente a la luz de Dios y no seguimos los juicios de
nuestro engañoso corazón, estamos dando el paso para
comprendernos, lo que llevará a un cambio de conducta.

Tengamos una clara expectación de lo que queremos ser

La expectación hace referencia al conocimiento de la dirección en la


cual queremos crecer. Son esas nuevas demandas que nosotros mismos
nos colocamos, proyectándonos hacia lo que queremos ser como
consecuencia del proceso de maduración.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 45

Cuando nos conocemos a nosotros mismos a la luz de Dios, también


conocemos la dirección en la cual debemos crecer. Esta dirección la
encontramos en Efesios 4:13:

“Hasta que todos lleguemos a la unidad de la


fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un
varón perfecto, a la medida de la estatura de
la plenitud de Cristo”.
El aspecto clave para tener una adecuada imagen de nosotros mismos,
es tener una visión clara de quién es Cristo, e identificarnos con Él,
renovando nuestra mente con los pensamientos de Dios. La madurez
en la vida cristiana consiste en una plena identificación con Cristo, como
resultado de una vida intercambiada: esto significa que Él toma nuestra
vida para actuar a través de ella y nosotros tomamos su naturaleza
divina, para disfrutar así de una experiencia de gracia divina.

“Con Cristo estoy juntamente crucificado,


y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y
lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en
la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se
entregó a sí mismo por mí”
(Gálatas 2:20)
Así como toda persona debe tener la convicción del pecado, para
recibir a Jesucristo como Señor y Salvador Personal, así es necesario
que aceptemos cuán lejos estamos de la meta, en lo referente al
crecimiento y la madurez para ser lo que Dios quiere que seamos.

Aquí tenemos un caso que ilustra la importancia de conocernos para


avanzar en el proceso de madurez:

«Juan era un quejoso crónico. Nada de lo que sucedía era a causa de


sus errores. Frecuentemente, compadeciéndose de sí mismo,
46 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

predisponía a sus subordinados, a sus compañeros y a sus


competidores, en contra de su jefe. Era un trabajador capaz, con
conocimientos, tenaz y crítico.

Los esfuerzos hechos, tanto por su jefe, como por sus amigos, para
desarrollar la compresión de Juan acerca de este asunto, parecían
desperdiciados. Las explicaciones lógicas, hechas pacientemente, eran
naturalmente fútiles. Enojarse con él solamente servía a Juan para
comprobar que tenía la razón. La tolerancia gentil solamente le daba
una mejor oportunidad para explayarse tal como era.

Un día, en una reunión de trabajo, en la cual se buscaba encontrar la


respuesta a una situación particular que había sacudido a todos (una
sorpresiva rebaja de precios por uno de los grandes competidores), él
sostuvo, por un tiempo, la inutilidad de la investigación de mercado
respecto de la situación del competidor. Alegaba que su departamento
(ventas) no podía ser culpado por no anticiparse a los caprichos de las
normas de precio de la competencia, etc. Finalmente calló y, como si
hubiera sido arreglado de antemano, el grupo, posiblemente disgustado
por su inmadurez e irreverencia, quedó en completo silencio. Al poco
tiempo, el silencio se hizo tan opresivo que a Juan le surgió la idea de
que él era simplemente un quejoso inmaduro. Recordó lo que le decían
sus colegas sobre su poco nivel de conciencia, respecto de su quejumbre
permanente. Él se vio a sí mismo en este punto. Ahora podía fácilmente
encontrar muchas oportunidades para apagar los sentimientos de
autocompasión y encarar la realidad en una forma más varonil, porque
ahora él esperaba una actitud más madura de sí mismo».

Vernos como nos ve Dios


En la Teoterapia (tratamiento de Dios para el hombre), el crecimiento
se da cuando nos apropiamos de la posición que ahora tenemos en
Cristo Jesús, e interiorizamos el concepto que Dios Padre tiene de
nosotros.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 47

La verdad de la Biblia referente a usted y a mí, es el punto de partida


para formar un concepto saludable y positivo de nosotros mismos.
Para vernos como Dios nos ve - como somos realmente- debemos
comprender nuestra posición en Cristo, la «VERDAD POSICIONAL».
Esta visión adecuada de nuestra persona en Él, es clave.

Espíritu
Vacío
Dirección del
Espiritual
Espíritu Santo
Transformación
desde el Espíritu

Alma
Conducta
Integrada
Cuerpo
Mente renovada Adecuada
Madurez y visión visión de
definida, fruto de sí mismo
la comunión
con Dios
Yo

AUTOCONCEPTO SANO

La siguiente lista contiene algunas de nuestras necesidades esenciales y


la manera como Cristo suple cada una de ellas.

Si Cristo es Dios por fe, sabemos que en Él somos:

Amados
Con demasiada frecuencia olvidamos la verdad básica de que Dios
nos ama, con amor incondicional. Se trata de un amor inmerecido e
inmotivado, el cual fue demostrado por Dios al mandar a su hijo a
48 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

morir por nosotros. Quizá hemos aceptado de un modo intelectual


este amor ¿pero lo estamos experimentando?. No es nuestra fe lo que
genera el amor de Dios. La fe simplemente se apropia del amor que
Dios nos tiene.

“En esto consiste el amor: no en que nosotros


hayamos amado a Dios, sino en que él nos
amó a nosotros, y envió a su Hijo en
propiciación por nuestros pecados”
(1 Juan 4:10)

Aceptados
Dios no sólo nos ama incondicionalmente, sino que también nos acepta
tal como somos. No hay ninguna evidencia, en las Escrituras, de que
debamos «actuar» para ser aceptados por Dios. La aceptación de
parte de Dios no está basada en nuestros logros o actitudes, o en lo
que hagamos por éll. El hecho de que Dios nos acepta como somos
debería ser suficiente motivación para aceptarnos nosotros mismos.

Si no somos capaces de aceptarnos como somos, con nuestra


limitaciones y ventajas, debilidades, puntos fuertes, defectos y actitudes,
entonces no podemos confiar en que ninguna otra persona lo haga. Al
no darse lo anterior, siempre estaremos aparentando, mostrando una
fachada a nuestro alrededor; no permitimos que la gente sepa cómo
somos realmente en lo profundo de nuestro ser. Cuando creemos que
Dios nos acepta, podemos también aceptarnos incondicionalmente;
confiar en la aceptación de otras personas y, a la vez, aceptar a otros
como son.

“Porque por gracia sois salvos por medio de


la fe; y esto no de vosotros, pues es don de
Dios; no por obras, para que nadie se gloríe”.
(Efesios 2:8 y 9)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 49

Seguros
Si Dios nos ama y nos acepta, él está obrando en todo sentido para
nuestro bien y para su gloria. Dios conoce y controla los asuntos
alrededor de nuestra vida: está llevando a cabo su plan perfecto para
cada uno de nosotros.

Valiosos
Martín Lutero dijo: «Dios no nos ama porque seamos valiosos; somos
valiosos porque Dios nos ama». Dios nos ha manifestado su amor al
habernos creado a su imagen y semejanza, y luego rescatarnos
nuevamente en Cristo. Somos valiosos no sólo por la forma en que
fuimos creados, sino porque, debido a la cruz, poseemos un valor mayor.
Somos valiosos a causa de nuestra creación y la redención obtenida
por Cristo Jesús.

“Mirad las aves del cielo, que no siembran,


ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro
Padre celestial las alimenta. ¿No valéis
vosotros mucho más que ellas?.
(Mateo 6:26)

Perdonados
Aunque sabemos que Cristo murió por nuestros pecados y nos hizo
dignos, a veces nos cuesta perdonarnos a nosotros mismos y proyectar
ese perdón a los que nos ofenden. Muchas veces exigimos más de
nosotros y nos imponemos más condiciones para nuestro perdón, que
nuestro Padre Celestial. Lo más hermoso en cuanto a desarrollar un
concepto saludable, es no sólo ser capaz de perdonarse a uno mismo,
sino ser canal o instrumento para perdonar a otros.
50 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Antes sed benignos unos con otros,


misericordiosos, perdonándoos unos a
otros, como Dios también os perdonó a
vosotros en Cristo”.
(Efesios 4:32)

Competentes
Cuando al tratar de vivir la vida cristiana con nuestras propias fuerzas
fracasamos, se debilita de manera irremediable nuestro sentido de
competencia. Las pautas de la vida cristiana son demasiado elevadas
para alcanzarlas por nosotros mismos. Esta vida fue concebida para
que se viviera únicamente en el poder del Espíritu Santo. Basado en el
sentido de aptitud que le daba su experiencia con el Espíritu Santo,
Pablo pudo decir: «Todo lo puedo en Cristo que me fortalece»
(Filipenses 4:13). Pablo reconocía que su eficiencia no era de él sino
de Dios, a quien ahora conocía y era parte integral de su vida. Dios
toma nuestras debilidades y las transforma en puntos fuertes. Dios nunca
nos llama a hacer algo para lo cual no nos haya equipado con
habilidades naturales y dones espirituales. El Espíritu Santo es el agente
personal que nos capacita para llevar a cabo la obra de Dios.

“No que seamos competentes por nosotros


mismos para pensar algo como de nosotros
mismos, sino que nuestra competencia
proviene de Dios”.
( 2 Corintios 3:5)
A la luz de lo anterior, es necesario que cada cristiano reciba ayuda
pastoral para que aprenda a verse a sí mismo a la luz de Cristo. Aquí
tenemos un ejemplo:

«Pablo era un agudo autocrítico, a menudo hasta el punto de que su


El efecto de la teoterapia en la autoestima 51

miedo a fracasar lo inmovilizaba. Demoraba la toma de decisiones, se


perdía en detalles y, generalmente, buscaba ser perfecto. A través de la
pastoral teoterápica que comenzó a recibir con su líder espiritual, quien
le aceptó genuinamente sin críticas, ni hostilidad, él pudo ver cómo sus
actitudes autocríticas realmente venían de su orgullo. Pablo creía que
debía ser perfecto, porque se sentía “seguro” de estar exento de la
crítica y el fracaso. El conocimiento de que él era humano, después de
todo, le liberó para cambiar su autoconcepto».

AMPLIAR NUESTRA PERCEPCIÓN DEL


MUNDO
El concepto que una persona tiene de sí misma está estrechamente
relacionado con el que la persona tiene de su entorno; por lo tanto, si
ve un mundo muy pequeño (como un niño lo hace) su concepto de sí
mismo será necesariamente estrecho; si se ve a sí mismo como
ciudadano del mundo (como un viajero lo haría), su autoconcepto
envuelve el mundo. Esta es la diferencia entre el real provinciano, y el
verdadero sofisticado.

Una de las quejas más comunes de los jefes es que su subordinado es


muy estrecho en sus miras. Por ejemplo, el gerente de ventas promovido
a vicepresidente irrita a los del área de producción o investigación,
pues tiene únicamente el punto de vista de un vendedor. El exjefe de
producción, ahora vicepresidente, es odiado por los de ventas, debido
a su actitud de “lo hacemos a bajo costo, y está en usted venderlo; no
me molesten con pedidos especiales, clientes o cambios de modelos;
¡vendan!”. Ambos hombres sufren por limitar su autoconcepto:
perciben sus trabajos (y a sí mismos) muy estrechamente.

AMPLIAR LA VISIÓN DE NOSOTROS


MISMOS
No basta vernos a nosotros mismos como somos ahora. Esa
52 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

comprensión es un punto necesario para la partida, pero también


debemos ver lo que nosotros mismos podríamos ser, y crecer hacia
esa visión.

Los hombres sobresalientes de la historia han tenido una característica


en común: Ellos parecen haber sido simplemente ellos mismos como
personas: Miguel Angel, peleando contra la adversidad para poder
esculpir; Beethoven, continuando su composición luego de haberse
vuelto sordo ; Milton, en quien la ceguera no fue obstáculo para sus
escritos.

Tales hombres han dado sentido a la frase, “cumpliendo su destino”.


Estamos llamados a desplegar todo nuestro potencial, siendo nosotros
mismos. En este sentido nuestro autoconcepto está en un desarrollo
continuo a lo largo de nuestra vida.

Una persona que siempre está creciendo, siempre tendrá capacidades


por desarrollar. La diferencia entre un hombre fuerte y uno débil, tal
vez no sea una diferencia de habilidad, pues hay muchos hombres con
inteligencia brillante, y ambiciosos, que no consiguen nada. De alguna
forma, el hombre fuerte “hace” su oportunidad. La diferencia se basa
en el autoconcepto. ¿Cuánto valoro mi vida?, ¿Qué es lo que quiero
hacer con ella?, ¿Qué debo hacer para ser yo mismo?

Los hombres fuertes han aparecido con respuestas definidas a estas


preguntas; los hombres débiles se han equivocado, han sido
condescendientes con ellos mismos, no se han exigido lo suficiente, y
nunca se han atrevido a buscar respuesta a los conflictos que enfrentan.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 53

Capítulo 3

Cómo Aceptarse a Sí
Mismo Como Hijo de
Dios

“Porque somos hechura suya, creados en


Cristo Jesús para buenas obras, las
cuales Dios preparó de antemano para
que anduviésemos en ellas.”
(Efesios 2:10)
54 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 55

E n la vida de todo hijo de Dios, ha sido colocada una huella, una


marca de bendición. Esta huella nos ha dado características
propias y singulares, que han sido diseñadas para que nuestras
vidas transcurran en los caminos más altos. Hay, además, un palpitante
sello de libertad que hace que nos rebelemos contra toda forma de
esclavitud, pues, fuimos diseñados para la libertad.

“Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará


libres”
(Juan 8:32)
Cuando recibimos a Cristo, su Espíritu viene a morar en nuestra vida y,
al entrar en ella, empieza un proceso de gran restauración. Esto es
necesario, pues, los años vividos en la ceguera espiritual han dejado en
el alma heridas que sangran. Estas profundas y dolorosas huellas del
pecado, son las que han desfigurado la imagen de Dios, en cada uno
de nosotros.
56 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

APRENDIENDO A ACEPTAR LOS RASGOS


INMODIFICABLES
Muchos no estamos en capacidad de aceptarnos a nosotros mismos.
Hay cuatro rasgos que fundamentalmente no se pueden cambiar en
nuestra vida, sobre las cuales la mayoría de la gente expresa un rechazo:
nuestro aspecto o apariencia externa; nuestras capacidades, habilidades
o talentos naturales; nuestro linaje, herencia o ancestro; y nuestra
herencia social, ubicación social o medio ambiente.

Ampliaré un poco más estas cuatro áreas inmodificables del ser.


Hablemos de la primera: la apariencia externa: Prácticamente todo
el mundo está inconforme con su aspecto. El problema está en que nos
comparamos muchas veces con artistas que son muy hermosos, bien
atractivos y con mucho talento. Al compararnos con ellos, nos damos
cuenta de que no somos tan atractivos y, naturalmente, es muy fácil
sentirse inferior a ellos.

Hay un pasaje en la Biblia que nos ayudará a entender esto de la


apariencia externa: en él se nos dice que Dios nos ha hecho
talentosamente.

«No fue encubierto de ti mi cuerpo, bien que


en oculto fui formado, y entretejido en lo más
profundo de la tierra. Mi embrión vieron tus
ojos, y en tu libro estaban escritas todas
aquellas cosas que fueron luego formadas, sin
faltar una de ellas».
(Salmo 139:15 y 16)
Este hermoso pasaje nos muestra cómo Dios Papá, como perfecto
Diseñador, estuvo presente en el momento de nuestra concepción y
atendió cada aspecto de nuestro cuerpo.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 57

¡Ay del que pleites con su Hacedor! ¡el


tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el
barro al que labra: ¿Qué haces?; o tu
obra: No tiene manos? ¡Ay del que dice al
padre: ¿Por qué engendrastesY a la mujer:
¿Por qué diste a luz?!
(Isaías 45:9 y 10)
Dios está representado como un «alfarero”: “¿¡Ay del que pleitea
con su Hacedor! ¡el tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el
barro al que lo labra:¿Qué haces?; o tu obra: No tiene manos?
¡Ay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste? y a la mujer:
¿Por qué diste a luz?!”. Este pasaje nos dice que Dios tiene el derecho
a conformarnos como Él quiere, como vasos de barro en sus diestras
manos. Podemos concluir, entonces, que somos la creación perfecta
que Dios quiso que fuéramos.

El segundo aspecto inmodificable de nuestra vida son las habilidades


y talentos. En nuestra sociedad estamos rodeados de personas que
siempre han sobresalido; por lo tanto, es fácil llegar a sentirse inferior.
Esta evaluación que hacemos de nosotros mismos, al compararnos
con ellos, es muy injusta, pues miramos lo mejor de los otros y lo
comparamos con lo peor nuestro: la resultante es un complejo de
inferioridad. Hay muchas personas que no son excelentes jugadores
de fútbol, pero hacen de excelentes maestros, padres, y esposos.

El tercer rasgo hace referencia al linaje, o herencia ancestral. Los


que se avergüenzan de sus padres, tendrán un serio problema de
autoaprobación. Nada destruye tanto como la amargura, particularmente
cuando va dirigida contra los padres; por lo tanto, debemos confesar
estas actitudes erradas.

El cuarto rasgo es nuestra herencia social. La corriente del


58 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Determinismo enseña que el ambiente determina quiénes somos. Si


decidimos aceptar esta filosofía, nos llevará a pensar que si venimos de
un nivel inferior, nunca podremos salir de allí, o que si nuestros padres
hicieron mal, nosotros también tenemos que ser como ellos fueron.
Parcialmente, esto es cierto:

“No te inclinarás a ellas, ni las honrarás;


porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso,
que visito la maldad de los padres sobre los
hijos hasta la tercera y cuarta generación de
los que me aborrecen”.
(Éxodo 20:5)
Dice que el pecado de nuestros padres puede llegar a repercutir hasta
la tercera y cuarta generación, pero esto no lo podemos usar como
una excusa, pues la Biblia también dice que un hijo puede ser correcto,
aunque sus padres sean corruptos, y que cada persona lleva la
responsabilidad de su propio pecado:

“Y si dijereis: ¿Por qué el hijo no llevará


el pecado de su padre? Porque el hijo hizo
según el derecho y la justicia, guardó todos
mis estatutos y los cumplió, de cierto vivirá.
El alma que pecare, esa morirá; el hijo no
llevará el pecado del padre, ni el padre
llevará el pecado del hijo; la justicia del
justo será sobre él, y la impiedad del impío
será sobre él ”
(Ezequiel 18:19- 20).
Un ejemplo es Moisés, quien se levantó en un ambiente no temeroso
de Dios; sin embargo, Dios usó esa circunstancia de acuerdo con sus
propósitos. Moisés prefirió sufrir con el pueblo de Dios, que gozar de
El efecto de la teoterapia en la autoestima 59

los placeres de Egipto.

“Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó


llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo
antes ser maltratado con el pueblo de Dios,
que gozar de los deleites temporales del
pecado”
(Hebreos 11:24 y 25)

MANIFESTACIONES DE LA FFAL
MANIFESTACIONES AL
ALTTA DE
AUTOACEPTACIÓN
Por lo general, una mala imagen de nosotros mismos nos lleva al pecado
de la autocompasión, que es un túnel que desemboca en la depresión.
Veamos algunos problemas que son el resultado de tener una mala
imagen de uno mismo:

X
Falta de aceptación Preocupación excesiva
por la apariencia física

Una primera evidencia de la falta de aceptación es una preocupación


obsesiva por la apariencia externa. Mucha gente gasta tiempo
tratando de ponerse el vestido adecuado, pues piensan que de todas
maneras se van a ver un poco mal. Es muy común, sobre todo en las
damas, verlas con frecuencia frente al espejo, desperdiciando un tiempo
que podría ser empleado en otras actividades. A otras personas les
cuesta valorarse en la justa medida o amarse a sí mismas;
60 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

desarrollan incredulidad con respecto al elogio que puedan recibir de


otros. Son incapaces de enfrentar responsabilidades o desafíos en la
vida.

Otra manifestación de la falta de autoaceptación es la insensibilidad


frente a las necesidades de otros, en el ámbito matrimonial, familiar y
social. Si no amamos a otros, estamos limitando nuestra efectividad
como cristianos. Están también los que son perfeccionistas. Muchas
veces las personas que no se aceptan a sí mismas se enfocan en
perfeccionarse en áreas de su vida que no valen mucho para Dios.
Como no se aceptan a sí mismas tratan de hacer las cosas perfectas, a
fin de que los demás los puedan aceptar. La falta de autoaceptación
también puede afectar nuestra confianza en Dios. Si no entendemos
el propósito de Dios, creemos que él se ha equivocado con nosotros
en un determinado rasgo. Entonces, ¿cómo podré confiar en Él para
otros aspectos?

Otro error en el que caen muchos es en el de compararse con los


demás. Si decimos, “yo quisiera ser como fulanito de tal”, no nos
estamos aceptando desde el punto de vista de Dios, ni desde la
perspectiva que Dios tiene para nosotros.

Finalmente, cuando una persona no acepta la autoridad de las demás


personas, tampoco puede aceptar la autoridad de Dios. La meditación
del corazón sería algo así: “Dios, quien es la máxima autoridad, me
privó de ‘mis derechos’. Esto no es justo. Me resiento contra Él porque
me debe mucho; otras autoridades también me restringen de la misma
forma y, por eso, no me gusta aceptar la autoridad de los demás”.

SOMOS MUY ESPECIALES


Dios tenía una idea de cómo íbamos a ser, aún antes de haber nacido.
Dios sabía lo que estaba haciendo cuando nos hizo, y lo hizo bien.
Pero, Dios todavía no nos ha formado totalmente. Él no ha concluido
El efecto de la teoterapia en la autoestima 61

su obra en nosotros; continúa todavía con su proceso de


perfeccionamiento. Es injusto juzgar a un artista cuando todavía va en
la mitad de la obra; Dios todavía continúa realizando el plan que Él
tiene para nuestra vida en particular.

“Estando persuadido de esto, que el que


comenzó en vosotros la buena obra, la
perfeccionará hasta el día de Jesucristo”.
(Filipenses 1:6)
En este punto, es válido aclarar que el plan que Dios tiene para la vida
de una persona no es el mismo que tiene para otra; por lo tanto, no
debemos compararnos con otras personas. Recordemos que Dios ha
equipado a otros en aspectos en los cuales no me ha equipado a mí,
pues son dos planes diferentes.

En este proceso, Dios puede sacrificar la belleza externa, para


desarrollar cualidades internas, porque son más importantes para Él.
También, Dios puede permitir ciertas debilidades, con el propósito de
manifestar su poder a través de ellas. Un ejemplo es el caso de personas
que siendo ignorantes, fueron muy usados por Dios, y suplieron sus
faltantes en Dios.

«Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque


mi poder se perfecciona en la debilidad.
Por tanto, de buena gana me gloriaré más
bien en mis debilidades, para que repose
sobre mí el poder de Cristo. Por lo cual,
por amor a Cristo me gozo en las
debilidades, en afrentas, en necesidades,
en persecuciones, en angustias; porque
cuando soy débil, entonces soy fuerte.»
(2 Corintios 12:9-10)
62 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Finalmente, entendamos que Dios quiere usarnos; por eso, debemos


aceptar que Él no va a colocar premeditadamente cosas en nuestras
vidas, que entorpezcan su plan con cada uno de nosotros.

CON LA PERSPECTIVA ADECUADA


Para aprender a aceptarnos a nosotros , necesitamos vernos y valorarnos
desde el punto de vista de Dios y de lo que Él mismo nos ha declarado
en su Palabra, con respecto a lo que somos para Él en Cristo.

Autoaceptación

Espíritu
Vacío
Espiritual
Revelación
Alma
Fruto del
Espíritu Santo
Cuerpo
Comprensión y
aceptación del Aceptación
propósito de Dios de su apariencia
personal

Yo

“Y vosotros estáis completos en él, que es la


cabeza de todo principado y potestad”
(Colosenses 2:10)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 63

En la medida que le demos más crédito a los pensamientos de Dios


(Su Revelación) que a los nuestros, respecto de nosotros mismos y de
todo aquello que nos rodea, podremos superar cualquier distorsión de
nuestra autoimagen, ocasionada, tanto por nuestra naturaleza
pecaminosa, como por el trauma de no haber construído una actitud
apropiada frente a situaciones que nos sucedieron.

«Digo, pues, por la gracia que me es dada,


a cada cual que está entre vosotros, que
no tenga más alto concepto de sí que el
que debe tener, sino que piense de sí con
cordura, conforme a la medida de fe que
Dios repartió a cada uno»
(Romanos 12:3)
Como dije anteriormente, Dios no tiene un mismo modelo para cada
uno de nosotros en el aspecto físico, pero sí tiene el mismo para nuestro
aspecto interior: El carácter de Cristo. Dios quiere conformarnos a la
imagen de Cristo y quiere desarrollar en nosotros el Fruto del Espíritu
Santo. Nuestro problema es que siempre miramos la parte externa,
pero Dios mira el corazón.

« Y Jehová respondió a Samuel: No mires


a su parecer, ni a lo grande de su estatura,
porque yo lo desecho; porque Jehová no
mira lo que mira el hombre; pues el
hombre mira lo que está delante de sus ojos,
pero Jehová mira el corazón»
(1 Samuel 16:7)
No son las habilidades naturales las que dan la felicidad, sino la forma
como la imagen de Cristo llegue a desarrollarse en nosotros. De acuerdo
con esto, nuestra felicidad depende de nuestras actitudes y cualidades
64 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

interiores. Viviremos inseguros si dependemos de lo externo, pues de


un momento a otro puede suceder algo grave, como un accidente, y
perder nuestro atractivo externo, y ese sería el final de nuestra felicidad.

Necesitamos confesar a Dios la amargura, al no aceptarnos, y orar


como el apóstol Pablo. Si Dios no quita el aguijón, es porque éste
juega un papel muy importante en el plan de Él para nuestra vida. Puede
ser que no podamos comprender por qué Dios puso ciertos rasgos
débiles en nuestra vida. Puede que sea por algo que va a ocurrir mucho
más allá del horizonte de lo que alcanzamos a visualizar en este momento.
Lo importante es entender que la base de nuestra autoaceptación es
no sólo la comprensión y aceptación de los valores de Dios, sino
también su propósito en nuestra vida.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 65

Capítulo 4

La Autoestima y La
Autoconfianza

“Porque a mis ojos fuiste de gran


estima, fuiste honorable, y yo te amé;
daré, pues, hombres por ti, y naciones
por tu vida.”
(Isaías 43:4)
66 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 67

S
obre la base de un sano concepto de nosotros mismos a la
luz de Dios, aprenderemos a amarnos y, sobre esta base,
crecerá la autoconfianza en todo cuanto hacemos. Un nivel
bajo de autoestima, nos hace sentir incapaces e inadecuados,
y nos hace actuar de manera insegura, dependientes de la opinión y
aprobación de los demás. Por esto, autoestima y autoconfianza están
estrechamente relacionados.

DEFINIENDO LA AUTOESTIMA
La autoestima es la opinión que uno tiene sobre sí mismo, e implica:
quererse, admirarse y respetarse. Es una actitud que genera satisfacción
con lo que uno hace, piensa o siente.

Cuando una persona goza de autoestima, está dispuesta a arriesgar la


desaprobación de otros porque, por lo general, cree en sus propias
habilidades. Se acepta a sí misma y no siente que tiene que ser
conformista para ser aceptada por quienes le rodean. Además, es realista
y desea desarrollar criterios y valores que no dependen completamente
de la aprobación de otros; evita la neurosis perfeccionista; descubre
que la dignidad es una cualidad que el ser humano tiene, independiente
de las capacidades y el nivel de habilidades que posee. Cultiva una
68 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

regla de oro: No es infeliz por eventos del pasado.

Cuando existe autoestima, hay una sensación de valor personal; es


decir, la persona se siente interiormente completa, está contenta consigo
misma, hace bien las cosas a sus ojos y a los ojos de otros. Piensa:
«Me agrada mi persona, me respeto, no me avergüenzo de cómo me
trato a mí mismo». Es una sensación de “me siento limpio, porque
valgo la pena; soy digno de la aceptación de otros y merezco ser
amado”.

Las siguientes ocho preguntas nos guían a reflexionar qué nivel de


autoestima tenemos:

¿Es usted argumentador?


¿Es criticón?
¿Es poco tolerante con los demás o con sus ideas?
¿Es una persona que se enoja fácilmente?
¿Le cuesta perdonar a los que le ofenden?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 69

¿Es excesivamente celoso(a)?


¿Le cuesta escuchar a otros?
¿Es un mal perdedor?
¿A cuántas de estas preguntas respondió afirmativamente? Cada
respuesta afirmativa está indicando una baja autoestima.

Características de la persona que goza de


autoestima

Sana opinión de sí mismo Sensación de


valor personal

* Cree firmemente en valores y principios.


* Actúa de acuerdo con su propio juicio.
* Emplea muy poco tiempo para pensar sobre lo ocurrido en el
pasado y lo que ocurrirá en el futuro.
* No tiene más alto concepto de sí mismo; piensa de sí con cordura.
* Se vuelve persona valiosa para otros; y difícilmente se deja
manipular por los demás.
* Disfruta de todas las actividades que están a su alcance.
* Es feliz llevando felicidad a los demás.
70 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

* Se autoevalúa; no depende de la opinión de los demás. Se


concentra en cómo se siente en relación con su propia conducta.
Cómo recuperar la autoestima, si la ha
perdido
* Recuerde que usted es una obra perfecta de Dios; que él le amó y
nunca le dejará de amar. Permita que el amor de Dios lo sature;
viva según su identidad en Cristo Jesús.

* Pídale perdón a Dios por el pecado de odiarse y rechazarse a sí


mismo, negando el principio bíblico expresado en Lucas 10:27
“...Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu
alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu
prójimo COMO A TI MISMO.”

* Enfatice en sus fortalezas. Parta del principio de que lo que usted


puede hacer ayuda a otras personas dentro de las inevitables
limitaciones humanas.

* Aborde nuevas experiencias, como oportunidades para aprender;


esto aumenta su sentido de autoestima y le ayuda en el crecimiento
personal.

LA AUTOCONFIANZA
La actitud confiada de la persona que tiene una opinión saludable de su
propia persona, cuando se enfrenta a una nueva tarea es : “Puedo
hacerlo”. Esta perspectiva optimista les infunde esperanza y valor; no
se enfrenta a cada nuevo día con miedo, sino con gozo por las
oportunidades que le esperan.

El sentido de competencia o adecuación es el sentimiento de “poder


tener la habilidad o capacidad para hacerlo”. Y es el resultado de los
logros y de los actos presentes y pasados.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 71

Los padres juegan un papel muy importante en cuanto a hacer que sus
hijos aprendan a sentirse competentes, cuando los estimulan a desafíos
y tareas nuevas. Cuando no se les estimula, los hijos crecen con un
sentido de habilidad subdesarrollado; después, cuando adultos, les
costará trabajo desempeñarse con éxito en sus labores.

SOBREPONIÉNDONOS A LOS
DEMOLEDORES DE LA CONFIANZA
El buscar a alguien como modelo de confianza es tan simple como leer
las palabras de Jesús, desde los doce años, cuando en forma respetuosa
les hizo frente a sus padres. ÉL sabía quién era; por eso, a través de los
tres años conocidos de su ministerio, se describió a sí mismo diciéndole
a la gente: “Yo soy el pan de vida ; Yo soy el Mesías; Yo soy el Eterno;
Yo soy la luz del mundo; Yo soy el Hijo de Dios; Yo soy el Alfa y la
Omega; Yo soy el primero y el último; Yo soy el camino, la verdad y la
vida”. No nos podemos equivocar: Jesús sabía muy bien quién era él
y lo que significaba para la humanidad.
72 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Existen algunos factores que podemos considerar como demoledores


de la confianza. Entre ellos, tenemos:

El miedo
El miedo es el demoledor número uno de la confianza. Gobiernos
enteros han sido construidos sobre el miedo. Aunque el miedo es un
poderoso motivador, los comunistas aprendieron que eso dura sólo
mientras se pueda mantener a la gente asustada.

La falta de objetivos
Desde su temprana edad, Jesús sabía cuál era su misión: los negocios
de su Padre. Jesús no vino a la tierra por el sólo hecho de vivir, y usted
y yo tampoco; hay una razón y un propósito en el estar aquí. Cada uno
de nosotros necesita, en Jesucristo, descubrir ese propósito especial.

La necesidad de estarse justificando


constantemente
Toda persona puede estar en tres condiciones:

* Usted es un líder que fuerza a la gente bajo su mando a protegerse


continuamente, debido a sus pobres habilidades administrativas.
Esto hace referencia a ese tipo de liderazgo fuerte y estricto, que
no valora a las personas; por lo tanto, sus subalternos recurren a
mecanismos como el engaño, la mentira, la enfermedad, etc.

* Usted es un subordinado que se está protegiendo constantemente


por miedo a que se le llame la atención. Por ello, cae en engaños y
mentiras para justificar o esconder los errores.

* Usted no está en ninguna de esas dos categorías, en cuyo caso


está bien.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 73

Sea cual sea su cargo: portero, secretaria, trabajador, gerente, o el


gran jefe, todos deben hacer el esfuerzo por acabar con ese problema
tan destructivo. Si usted es jefe o líder, encuentre la manera de elevar
el nivel de integridad de su empresa. Comience por disculparse con
todo el personal y haga las enmiendas necesarias. Si es un subalterno,
le quedan dos alternativas, si es que quiere aumentar la confianza en sí
mismo:

1. Renuncie

2. En lugar de justificarse, póngase erguido y con mucha educación.


Pregúntele si lo está llamando mentiroso. Los líderes que se respetan
no lo desafiarán sobre este punto, sobre todo si usted tiene la razón.

CLAVES DE LA CONFIANZA
El dar es el comienzo de la confianza; me refiero al darse a sí mismo.
Nadie puede obtener nada de una persona egoísta. Mire su propia
vida y verá la acumulación de todo lo que ha logrado al cabo de los
años.

Podemos ilustrar lo anterior con el siguiente ejemplo:

“Carlos vino al mundo en la peor parte de la ciudad. Cuando niño,


vendía periódicos para ayudar a pagar las deudas de la familia. Luego,
pasó a lustrar calzado y, cuando adolescente, sirvió a otros en la cabina
de un buque de carga. Se cansó de vivir en una ciudad costera, y se
cansó de servir a los demás. Hizo lo que todo muchacho sueña despierto
a esa edad: se metió en un tren de carga y viajó entre los vagabundos
de los trenes sin destino. Carlos conoció el país y vivía de hurtos y
raterías. Sus viajes en ferrocarril lo mantuvieron feliz algunos años de
su vida, hasta que la gran ciudad lo sedujo. Se emborrachó; peleó:
unas veces ganaba, pero la mayor parte de las veces perdía; descubrió
el juego, lo que lo hizo ganar y perder en grande. Finalmente, las
74 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

autoridades lo apresaron y fue juzgado por tráfico de drogas. Furioso


y amargado, Carlos reclamó que las autoridades habían inventado todo,
hasta el momento en que atravesó la reja de entrada de la prisión.

A la edad de treinta y cuatro años, Carlos se encontraba al final de su


cuerda emocional. Había vivido para él dieciséis años; no había dado
nada a nadie, pero había robado a todos. Sin embargo, su vida cambió
cuando leyó el único material de lectura que por entonces estaba
disponible para los prisioneros: La Biblia. Leyó y releyó. Su vida fue
transformada por algo que nunca soñó que fuera posible. Se propuso
en su mente perdonar a todos los que le habían hecho daño y decidió
convertirse en el prisionero modelo de la cárcel.

Al poco tiempo, Carlos se convirtió en el superintendente de la planta


eléctrica de la prisión, con ciento cincuenta hombres bajo su mando.
Se hizo amigo de todos, incluyendo al recién llegado prisionero
Abelardo, quien entró a la prisión por evasión de impuestos. Debido a
que Carlos puso todo de su parte para ayudar a Abelardo a adaptarse
a su nueva situación, su nuevo amigo, en retribución, le dijo que cuando
saliera libre viajara a su ciudad de origen. Abelardo cumplió su condena
y Carlos también, unos meses después.

Cuando Carlos tocó la puerta de Abelardo, recibió un fuerte apretón


de manos y una oferta de trabajo como obrero. Aunque un poco
desencantado, Carlos superó la situación, dando de nuevo de sí mismo.
Su recompensa vino rápido, pues, al cabo de un año, Abelardo lo
promovió al cargo de supervisor. Desde allí, Carlos alcanzó el rango
de gerente y luego de vicepresidente. Su triunfo vino cuando Abelardo
hizo que Carlos pasara, de un exvagabundo y exconvicto, a un
presidente de las industrias de su familia. Carlos permaneció en la
presidencia y llevó a esa empresa a obtener ganancias que pasaron de
cinco a veinticinco millones, hasta su muerte, que ocurrió a la edad de
setenta y tres años. Carlos aprendió un principio en la cárcel, el que
leyó y releyó una y otra vez:
El efecto de la teoterapia en la autoestima 75

“Dad, y se os dará; medida buena, apretada,


remecida y rebosando darán en vuestro
regazo...”
(Lucas 6:38).
La preparación pone bases para la confianza. Todos poseemos talentos
y dones diferentes; por esta razón, debemos conocer nuestras
limitaciones. Debido a que tenemos toda la seguridad del mundo en
que no podemos hacer ciertas cosas, debemos disponer de más tiempo
para hacer las que sí podemos. Recordemos: la objetividad edifica la
confianza; la libertad y la autoridadhacen que la confianza vuele muy
alto.

Veamos algunos consejos prácticos:


* Descubra cuál es su miedo y enfréntelo.
* Dé más de sí mismo cada día.
* Estudie, prepárese y entrénese para hacer lo que siempre quiso
hacer.
* Busque el consejo de personas sabias.
* Dé autoridad a las personas a su alrededor, incluyéndose a usted
mismo .
DOCE HOMBRES CONTRA EL MUNDO
Personalmente, cada vez que estudio la vida de los doce apóstoles me
conmueve ver lo que Dios puede hacer “en” y “a través” de hombres
comunes y corrientes. Los evangelios nos los muestran como hombres
con debilidades, miedosos, inseguros, pero, eso sí, dispuestos a ponerse
en las manos del Gran Alfafero. ¿El resultado? Hombres trasnformados,
con autoconfianza, formados como agentes de cambio que impactaron
y transformaron el entorno social de aquel tiempo.
76 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

En la vida de los doce apóstoles se ve el impacto de la muerte y la


resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Ahora bien, en realidad no
sólo en la vida de los doce apóstoles, sino en la vida de millares y
millares desde aquel tiempo. Durante la mañana del domingo de
resurrección, en casi todas las ciudades del mundo se congregan millones
de fieles en los templos erigidos al Carpintero de Nazareth; y millones
de voces alaban su victoria sobre el pecado y la muerte. Los hombres
de ciencia nos enseñan que todo efecto es necesariamente resultado
de una causa suficiente. Ahora bien, ¿habrá algo más sobrenatural que
la historia de la cruz y del sepulcro vacío, para explicarnos los
estupendos efectos que ha causado?.

Es un hecho indiscutible que, hace cerca de 2000 , llegó Jesús a


Palestina. Sus amigos le amaron; era para ellos un profeta, acaso un
futuro rey. Sus enemigos lo tacharon de fanático y de perturbador. Su
vida fue la expresión perfecta del amor que se manifiesta en obras
amorosamente encaminadas a servir por igual a pobres y a ricos. Su
ternura cautivó el corazón de los niños y de los humildes; su filosofía de
la vida llamó la atención de los sabios y de los mejores. Pero su valeroso
radicalismo encolerizó a los celosos partidarios de lo existente...y ésos
acabaron crucificándolo.

Hubiera podido evitar tan espantosa muerte. Pudo haber huído de


Jerusalén. Aún estando allí, el gran número de amigos que tenía en la
ciudad le hubiese permitido escapar de sus enemigos. Pudo transigir;
pero con firme resolución marchó a Jerusalén, aunque le advirtieron lo
que allí le esperaba. Una vez llegó, soportó con serena constancia el
odio, la envidia y el deseo de herirle en lo más vivo. Ni un solo reproche
asomó a sus labios ante el beso del traidor, ni ante el abandono en que
lo dejaron hasta sus discípulos más amados.

La hiriente burla de los sacerdotes, la insolencia de Herodes, la cobardía


criminal de Pilatos, la grosería del populacho, la brutalidad de los
soldados, todo lo sobrellevó sin el más leve movimiento de rencor.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 77

“Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque


no saben lo que hacen. Y repartieron entre
sí sus vestidos, echando suertes”
(Lucas 23:34).
Con esta súplica, respondía a las torturas de los que se ensañaban en
su cuerpo y en su espíritu. A la tempestad de odio y malicia, opuso la
triunfante serenidad de ánimo. Con lo supremo de su sacrificio, hizo
patente la realidad del infinito amor.

Lo sepultaron y dijeron: “todo ha concluido”. Sus enemigos lo decían


gozosos; sus amigos lo decían afligidos y desesperados. Habían soñado
con un reino en el cual sería Jesucristo el rey, y ellos, sus auxiliares y
ministros. Ahora se lamentaban diciendo: “nosotros esperábamos que
él fuera quien había de redimir a Israel” pero todo había terminado. Y
huyeron a ocultarse a lugares apartados de la ciudad hasta que cesara
la tormenta.

Nos han llegado relatos de testigos oculares de lo ocurrido en aquella


hora infausta, la más negra de la derrota y de la desesperanza. Los
relatos de los que se encontraban en lugares cercanos al de los
acontecimientos, son emocionales e incoherentes. Pero lo cierto es
que en las horas de la puesta del sol de aquel sábado, y al amanecer
del otro día, aconteció algo grande. No seré yo quien se atreva a
describirlo; menos aún a explicarlo.

Muchos son los descubrimientos e inventos del hombre en esta época.


Cosas que hace unos años nadie se hubiera atrevido a creer. En la
actualidad acogeríamos con una sonrisa compasiva cualquier expresión
de asombro ante lo que hoy es común y corriente, como la comunicación
satelital, la telefonía celular, el internet, etc. Sin embargo, no faltan hoy
quienes, al referirse a lo que nos dicen que aconteció en Jerusalén,
exclaman: “absurdo”, “imposible”.
78 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Según podrá entenderse, no estoy hablando de milagros en cuanto


estos signifiquen una desviación o suspensión del orden natural que
conocemos. Estoy pensando en un orden más alto, en un orden en
que actúan fuerzas vitales cuya existencia reconocen los científicos,
aún cuando no hayan podido medirlas, ni someterlas al dominio del
hombre. Pienso, primero y principalmente, en la virtud invencible del
amor que, compadecido de la mortal angustia que ofuscaba a aquellos
hombres y del dolor que traspasaba el corazón de aquellas mujeres, se
resiste a alejarse de ellos sin haberlos consolado y fortalecido con su
presencia. Y al pensar en esto, no dejo de maravillarme.

Aquella mañana de domingo de pascua, fueron grandes la conmoción


y el tumulto. Corre la gente de aquí para allá; se forman grupos y se
dispersan. Los comentarios, las risas, los gritos y los sollozos llenan el
aire. La gente dice que se han visto apariciones; afirman que del cielo
han bajado ángeles. Crece la agitación de los ánimos a pesar de todo
lo que hacen sacerdotes y autoridades para calmarlos. La inquietud va
creciendo día por día.

Entonces, sobreviene el hecho asombroso. Los acobardados, los


desilusionados discípulos se han convertido de pronto en héroes a
quienes nada amedrenta, ni obstáculo alguno los hace retroceder. El
miedo los hizo abandonar a Jesucristo cuando él vivía; ahora, no temen
enfrentarse a la muchedumbre. Van a ella con la increíble afirmación de
que Jesucristo vive; de que ha vuelto de entre los muertos. Algo alienta
ahora a esos hombres.

El valor con que hablan y la impresión que causan en la multitud que los
escucha, se explican únicamente por lo profundo del convencimiento
que los anima. Están fiando la vida, la suerte, el honor, a la veracidad
del hecho increíble que relatan. Los persiguen y los encarcelan. Ven
ante sí la decapitación, o la crucifixión, o la hoguera en que arderán
vivos. Pero nada hace flaquear la fe con que sostienen la verdad de lo
El efecto de la teoterapia en la autoestima 79

acontecido, en la mañana de aquel domingo de pascua y en los días


siguientes.

En el transcurso de 60 años, estremecen de linde a linde al Imperio


Romano. Son grandes las repercusiones que causa en el paganismo la
nueva creencia, cuyo fundamento es la fe en la historia de la resurrección.
Doce hombres contra el mundo, doce hombres sin bienes de fortuna,
sin estudios, sin apoyo oficial; sin embargo, lo atestiguado por ellos da
principio a lo que un erudito contemporáneo considera “el máximo
brote de energía moral y espiritual que ha visto el mundo”.

Cada día, cuando me despierto, me gozo en la resurrección del Señor


Jesucristo. Así como el conocimiento de la resurrección y el tener una
relación con el Cristo Viviente, se convirtió para los apóstoles en fuente
de confianza y seguridad, de igual manera para cualquier hombre débil
y falto de confianza, una estrecha relación con el Cristo resucitado y
victorioso le volverá un gigante en la fe, al estilo de Pablo:

“Con Cristo estoy juntamente crucificado, y


ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que
ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del
Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a
sí mismo por mí.”
(Gálatas 2:20).
Conocer esto me cautiva; por eso, cada día renuevo una vez más mi
entrega, para vivir como resucitado y traer a otros al conocimiento de
una vida de poder y unción. ¿Verdad que es sencilla y humilde mi fe?
Es la fe lo que dulcifica lo amargo de la vida; lo que pone un destello de
amor y valentía en la diaria faena; y lo que presta sus alas al alma.
80 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

DURANTE LAS PRÓXIMAS DOCE HORAS,


¿ DE QUIÉN EXPERIMENTO
AUTOCONFIANZA?
Desde hace mucho tiempo, conozco un folleto titulado “POR LO
MENOS HOY”. Meditando en él, veo que responde a algunos
principios bíblicos que fomentan en nosotros la autoconfianza. He aquí
el contenido, al cual le he añadido algunos versículos:

“* Por lo menos hoy, me propongo tratar de vivir no más que este día
y para este día, y no me empeñaré en resolver el problema de mi vida
entera. En doce horas, puedo hacer algo que me aterraría, si supiera
que debía continuar haciéndolo toda la vida.

“Así que, no os afanéis por el día de mañana,


porque el día de mañana traerá su afán. Basta
a cada día su propio mal.”
(Mateo 6:34)
* Por lo menos, me propongo ejercitar mi sentido moral, de tres
maneras:

1. Haré bien a alguien sin que nadie lo sepa

2. Haré por lo menos dos cosas que no me gusta hacer, a fin de


fortalecer mi fuerza de voluntad.

3. Si alguien me ofende, no me daré por enterado.

“No paguéis a nadie mal por mal; procurad


lo bueno delante de todos los hombres”
(Romanos 12:17)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 81

* Por lo menos hoy me propongo ser feliz. Recordemos que Abrahan


Lincon tenía razón cuando dijo: “La mayor parte de los hombres somos
tan felices, como resolvemos serlo”

“…Yo he venido para que tengan vida, y para


que la tengan en abundancia.”
(Juan 10:10b)
* Por lo menos, hoy me propongo tratar de fortalecer mis facultades
mentales. Aprenderé algo útil y leeré algo que exija esfuerzo, que me
haga pensar y concentrarme.

“No os conforméis a este siglo, sino


transformaos por medio de la renovación de
vuestro entendimiento, para que comprobéis
cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable
y perfecta.”
(Romanos 12:2)
* Por lo menos hoy, me propongo adaptarme a las cosas, y no
empeñarme en seguir pretendiendo que las cosas sean las que se
adapten a mis deseos.

“Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón,


como para el Señor y no para los hombres”
(Colosenses 3:23)
* Por lo menos hoy, me propongo presentar el mejor aspecto que
pueda; vestiré adecuadamente; hablaré en tono moderado; me portaré
cortésmente; no criticaré ni maltrataré a nadie.
82 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Por tanto, nosotros todos, mirando a cara


descubierta como en un espejo la gloria del
Señor, somos transformados de gloria en
gloria en la misma imagen, como por el
Espíritu del Señor.”
(2 Corintios 3:18)
* Por lo menos hoy, me propongo tener un programa para el día.
Quizá no lo siga exactamente, pero lo tendré. Evitaré dos males
comunes: la precipitación, por una parte, y la vacilación, por la otra.

“Pero hágase todo decentemente y con


orden.”
(1 Corintios 14:40)
* Por lo menos hoy, me propongo pasar media hora solo. Durante
esta media hora, trataré de lograr una perspectiva mejor de mi vida.

“Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;


seré exaltado entre las naciones; enaltecido
seré en la tierra. ”
(Salmo 46:10)
* Por lo menos hoy, me propongo no tener miedo. En particular, no
temeré gozar de lo que es bello, ni temeré creer que tanto como yo le
dé al mundo, me dará él a mí.

“Porque no nos ha dado Dios espíritu de


cobardía, sino de poder, de amor y de
dominio propio.”
(2 Timoteo1:7)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 83

LA AUTOCONFIANZA Y LOS TALENTOS


Uno de estos días, hojeando una revista de Selecciones, encontré un
cuento titulado “Empuja la vaquita”. Me llamó la atención, porque
ilustra cómo nos acomodamos a las situaciones por medio de una falsa
confianza, por el temor a correr riesgos y aceptar desafíos que nos
permitirían descubrir talentos que están sin desarrollar.

A continuación transcribo el cuento, literalmente:

“Un maestro de la sabiduría pasaba por un bosque con su fiel discípulo,


cuando vio a lo lejos un sitio de apariencia pobre y decidió hacer una
breve visita al lugar. Durante la caminata, le comentó al aprendiz sobre
la importancia de las visitas; también de conocer personas y las
oportunidades de aprendizaje que nos brindan estas experiencias.

Llegando al lugar, constató la pobreza del sitio: la casa de madera y los


habitantes: una pareja y tres hijos, vestidos con ropas sucias, rasgadas,
y sin calzado.

Entonces, se aproximó al señor, aparentemente el padre de familia, y


le preguntó: “En este lugar no existen posibilidades de trabajo ni puntos
de comercio tampoco. ¿Cómo hacen usted y su familia para sobrevivir
aquí? El señor calmadamente respondió: “Amigo mío, nosotros tenemos
una vaquita que nos da varios litros de leche todos los días. Una parte
del producto lo vendemos o lo cambiamos por otro género alimentario
en la ciudad vecina, y con la otra parte producimos queso, cuajada,
etc., para nuestro consumo y así es como vamos sobreviviendo.

El sabio agradeció la información, contempló el lugar por un momento,


luego se despidió y se fue.

A mitad de camino volteó hacia su fiel discípulo y le ordenó: “¡Busca la


vaquita, llévala al precipicio de enfrente y empújala al barranco!”. El
84 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

joven espantado vio al maestro y le cuestionó sobre el hecho de que la


vaquita era el medio de subsistencia de aquella familia. Mas como
percibió el silencio absoluto del maestro, fue a cumplir la orden. Así
que, empujó la vaquita por el precipicio, y la vio morir. Aquella escena
quedó grabada en la memoria de aquel joven durante algunos años.

Un bello día, el joven resolvió abandonar todo lo que había aprendido,


y regresar al lugar y contarle todo a la familia, pedir perdón y ayudarlos.
Así lo hizo, y a medida que se aproximaba al lugar veía todo muy
bonito, con árboles floridos, todo habitado.

El joven se sintió triste y desesperado imaginando que aquella humilde


familia hubiese tenido qué vender particularmente su terreno para poder
sobrevivir. Aceleró el paso y al llegar allá fue recibido por un señor
muy simpático; el joven preguntó por la familia que en ese lugar vivían
hace unos cuatro años; el señor respondió que allí seguían viviendo.
Espantado el joven entró corriendo a la casa y confirmó que realmente
era la misma familia que visitó hace algunos años con el maestro. Elogió
el lugar y le preguntó al señor (el dueño de la vaquita): ¿Cómo hizo
para mejorar ese lugar y cambiar de vida? El señor entusiasmado le
respondió: “Nosotros teníamos una vaquita que se cayó por el precipicio
y murió. De ahí en adelante nos vimos en la necesidad de hacer otras
cosas y desarrollar otras habilidades que no sabíamos que teníamos;
así alcanzamos el éxito que sus ojos vislumbran ahora.

TODOS TENEMOS UNA VAQUITA QUE NOS PROPORCIONA


ALGUNA COSA BÁSICA PARA NUESTRA SUPERVIVENCIA,
LA CUAL ES UNA CONVIVENCIA CON LA RUTINA; NOS
HACE DEPENDIENTES; CASI QUE EL MUNDO SE REDUCE
A LO QUE LA VAQUITA NOS PRODUCE.

Descubra cuál es su vaquita y aproveche el final del milenio y el inicio


de uno nuevo, para empujarla por el precipicio.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 85

Capítulo 5

El Liderazgo Eficaz:
Característica de los
que Gozan de
Autoestima y
Autoconfianza

“No que seamos competentes por nosotros


mismos para pensar algo como de nosotros
mismos, sino que nuestra competencia
proviene de Dios”.
(2 Corintios 3:5)
86 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 87

V ivimos en una sociedad orientada hacia la actividad y el


trabajo, y nuestra tendencia es formar una imagen mental de
nosotros, basada en nuestros éxitos y fracasos a los ojos de
superiores y compañeros.

Si la imagen que tenemos de nuestra competencia o habilidad para


hacer las cosas es débil, nos sentiremos amenazados cuando alguien
cercano a nosotros triunfe; o tal vez nazca dentro de nosotros un
sentimiento de orgullo, al oír de las debilidades o fracasos de los demás.

El adicto al trabajo es un ejemplo de alguien que trata de elevar su


concepto de sí mismo mediante la actividad y los resultados. Necesita
estar ocupado todo el tiempo para sentirse bien consigo mismo, y
mantener su autoaceptación. ¿Podemos estar quietos por un tiempo
sin realizar ningún trabajo, y estar libres de ansiedad?

La persona con autoestima cree en sus capacidades; tiene una sensación


general de que controla su destino; piensa, con razón, que es capaz
de hacer lo que planea. Tiene expectativas realistas, y cuando descubre
que algunas no lo son, mantiene una actitud positiva y se acepta como
es. Puedo decir, sin temor a equivocarme, que la persona que se acepta,
88 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

se estima y tiene confianza en sí misma; donde quiera que esté y


cualquiera que sea su función, se volverá un gran LÍDER: le buscarán,
le imitarán, le consultarán. Sobresaldrá entre muchos, pues posee esas
características que atraen de todo líder.

En el liderazgo es más importante lo que usted es, que lo que usted


hace. Podemos decir que un hombre o una mujer pueden fracasar en
su ministerio o trabajo, pudiendo tener éxito, simplememte porque no
están dispuestos a aceptarse a sí mismos, como Dios lo ha hecho.

CARACTERÍSTICAS DE UN LÍDER EFICAZ

OPOSICIÓN

Empuje Interior Resistencia a la oposición

A continuación, quiero citar esas características típicas de las personas


que se aman y se valoran a la luz de Dios:

Tiene empuje interno

La persona que posee una sana autoestima sabe hacia dónde se dirige;
tiene una visión clara, unos objetivos definidos y es capaz de hacer que
otros tomen acción efectiva. Es sensible como persona, pero a la vez
El efecto de la teoterapia en la autoestima 89

“hueso duro de roer”, es decir, desarrolla capacidad de resistencia a la


oposición. Siempre encontraremos dificultades y tropiezos, ante los
cuales muchos desertan y se desaniman, pero el verdadero líder seguro
de sí mismo sigue adelante, olvidando lo que queda atrás, y
prosiguiendo al blanco.

“Prosigo a la meta, al premio del supremo


llamamiento de Dios en Cristo Jesús”.
(Filipenses 3:14)
Las personas que se autovaloran desarrollan tenacidad. Es posible
que en el camino pierdan una o más batallas, pero no dejan que se
pierda la guerra. No todas las veces podemos ser ganadores en las
diversas situaciones, pero sí podemos perseverar. El verdadero carácter
se muestra en circunstancias difíciles y bajo presión. La marca de un
líder maduro es que nunca renuncia, nunca se da por vencido y adquiere
garra, agallas y resistencia para seguir adelante.

El empuje interno se mide en los momentos quietos, en las


responsabilidades pequeñas e inclusive humillantes, en los lugares
comunes y corrientes, en los trabajos minuciosos y tediosos, los cuales
realiza con agrado, porque no considera que esté en juego su valía
como persona; cuando trabaja sin que lo estén supervisando, cuando
está en el anonimato, realizando sus tareas. ¿Cómo responde usted a
la rutina diaria, y a los trabajos poco importantes?

Cultiva una vida privada dinámica


Un hombre con un sano concepto de sí mismo es un hombre dinámico,
tanto en lo público como en lo privado, principalmente en la vida
familiar. La pregunta clave es: ¿Realmente usted disfruta de su vida
familiar? ¿En su vida familiar hay verdadero respeto y admiración o
hay un callado resentimiento y desaprobación?
90 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Un hombre nunca podrá ayudar bien a otros cuando se encuentra


rodeado permanentemente de gente. Si quiere ayudar a otros, es
necesario tener tiempo a solas, especialmente para estar con Dios. De
tanto darse a la gente, llega un momento en que queda “exprimido”,
consumido, tensionado y deprimido. Se necesita tiempo a solas, para
recuperar energías emocionales, y espirituales. “El hombre dinámico
conoce el tiempo de descanso”.

Es necesario dedicar tiempo a la esposa(o) y a los hijos, olvidándose


del trabajo y haciéndolos sentir que son importantes. Los recursos
para enfrentar los problemas día a día, Dios los da a través del refrigerio
con la familia.

Tiene templanza y autocontrol


El líder eficaz debe tener una voluntad enérgica y dinámica, de tal
manera que cuando se le presente cualquier situación difícil pueda
afrontarla. Esta característica es sumamente importante para nuestra
vida en general, y en nuestro desempeño laboral o ministerial. Implica
estar atento para detectar el momento en que tengamos que tomar
decisiones dramáticas, a pesar del temor de perder imagen.

En un momento crucial, un líder debe tomar decisiones, porque ni los


sentimientos, ni la lógica, ni la rudeza, ni el legalismo son los objetivos
que determinan el ejercicio de su voluntad como líder. En la toma de
decisiones, la Biblia es la brújula del cristiano, es el Manual de vida del
líder.

Es un ejemplo consistente
Aprendemos con base en el ejemplo de otros. Estamos llamados a
moldear vidas y a moldear con nuestra vida; a ser ejemplo de
aquellos que viven y colaboran con nosotros en todo. Moldear es
lograr que los que nos siguen se vuelvan idóneos y hasta mejores que
El efecto de la teoterapia en la autoestima 91

nosotros. Detrás de las grandes figuras hay alguien que ha sido ejemplo
para ellos, alguien quizá insignificante; no la figura más espectacular,
sino la figura que ha sabido imprimir una visión y moldear una vida.

El apóstol Pablo pide que se le imite, porque él a su vez imita a Cristo.

“Hermanos, sed imitadores de mí, y mirad a


los que así se conducen según el ejemplo que
tenéis en nosotros.”
(Filipenses 3:17)
La gente nos va a seguir, pero ¿estamos nosotros siguiendo a Cristo, o
tomándole como ejemplo?

Jesucristo tuvo un gran impacto como Maestro en la vida de sus


discípulos, porque sus enseñanzas eran fuertemente respaldadas por
todo lo que él hacía. ¿Cuántos discípulos tenemos que hablan de la
manera que hablamos, que hacen las cosas iguales o mejores que
nosotros?, ¿ A cuántos hombres hemos logrado moldear mediante
nuestro ejemplo consistente? Esa será la evidencia de una persona
que aprendió a aceptarse y valorarse y, como consecuencia, está
impactando a otras vidas.

Desarrolla gran capacidad y resistencia


Se refiere a aprender a desarrollar la creatividad y, sobre todo, una
capacidad y resistencia contra las dificultades y la oposición. Se puede
identificar cuál es el verdadero líder cuando se le critica o cuando está
enfrentando fuerte oposición, porque en lugar de visualizar derrota,
visualiza oportunidades, y se siente estimulado a seguir adelante.

Si poseemos autoconfianza, no podemos andar disculpándonos, ni


tratando de explicar a todo el mundo, lo que Dios nos ha llamado a
hacer, porque de todas maneras no lo entenderían.
92 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Pues ¿qué gloria es, si pecando sois


abofeteados, y lo soportáis? Mas si haciendo
lo bueno sufrís, y lo soportáis, esto
ciertamente es aprobado delante de Dios.”
(1 Pedro 2:20)
Así mismo, un líder debe afrontar la presión que a veces proviene de
los compañeros, de los propios discípulos y hasta de los familiares. La
oposición, la presión y la crítica pueden ser elementos que nos ayuden
a desarrollarnos; no hay que tenerles miedo. A Cristo le persiguieron,
a nosotros también nos perseguirán y nos resistirán. Si son con nosotros
indiferentes, es porque no estamos haciendo lo que nos corresponde,
o no lo estamos haciendo bien.

Tiene una constante actitud de servicio


En este sentido, Jesús es el máximo ejemplo. No vino para ser servido,
sino para servir.

“Pero él les dijo: Los reyes de las naciones


se enseñorean de ellas, y los que sobre ellas
tienen autoridad son llamados bienhechores;
mas no así vosotros, sino sea el mayor entre
vosotros como el más joven, y el que dirige,
como el que sirve. Porque, ¿cuál es mayor,
el que se sienta a la mesa, o el que sirve?
¿No es el que se sienta a la mesa? Mas yo
estoy entre vosotros como el que sirve.”
(Luc 22: 25-27)
Como hijos de Dios, estamos llamados a dar, servir, ministrar,
renunciando voluntariamente a todos los derechos y cumpliendo nuestras
responsabilidades.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 93

La verdadera motivación de un líder debe ser la de servir y ayudar a


otras personas, a desarrollarse y ser más productivos. Nuestra sumisión
a Cristo debe ser primordial, total y constante. El sometimiento de
unos a otros equivale a dedicar mi vida al cuidado de otros, al cuidado
del que me sirve, del que me ayuda, del que me coopera.

Antes de hacerse obedecer, hay que aprender a obedecer; antes de


ser servido, hay que servir; antes de ser maestro, hay que ser discípulo.
Lo importante no es tanto dar dirección con convicción, sino estar
convencido de que ya recibió la dirección de su respectivo líder. Cuando
una persona empieza a criticar, a murmurar y a mostrarse insatisfecha,
está mostrando que tiene dificultad en obedecer órdenes, y sólo puede
ser líder cuando ha aprendido el significado de la obediencia.

Posee alto cociente de confiabilidad


La confiabilidad del cristiano en sus realizaciones y lo que puede hacer,
reside en Cristo, quien es su confianza. Esto lo expresa claramente el
apóstol Pablo, en la segunda carta a los Corintios, capítulo 3, verso 5:
“No que seamos competentes por nosotros mismos para pensar
algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia
proviene de Dios”.

Dios nos proveerá todos los recursos necesarios para hacer lo que él
nos ha llamado que hagamos. Este tipo de confianza se va desarrollando
en la medida en que aprendamos a caminar en el Espíritu Santo, y
cultivemos nuestra comunión con él.

Este concepto de la confiabilidad tiene que ver también con áreas de la


vida íntima. Es necesario cuidar lo que se lee, los hábitos que se
practican, las actitudes, las conversaciones, pues, a veces, resulta fácil
sucumbir bajo el bombardeo constante que hay en el mundo exterior.

Todos nosotros, como hijos de Dios, estamos llamados a ser


94 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

colaboradores suyos en la empresa de la Gran Comisión. En la medida


en que como fruto de la comunión con Dios, se desarrolle un sano
concepto de nosotros mismos y una adecuada autoestima, en esa
medida estaremos capacitados para ser instrumentos útiles en sus
manos. Mucha gente querrá seguirnos. Muchas vidas vamos a impactar
cuando permitamos que el Señor realmente esté en el centro de nuestro
ser y nos dirija.

CARACTERÍSTICAS DE UN GRAN
MOTIVADOR
Un líder eficaz es un individuo que cuenta con un grupo o equipo que
se está modelando y construyendo día a día. Su primera tarea es crear
elementos en los cuales él pueda obrar su motivación y llevar a su
grupo a ser personas productivas y de éxito. El líder, quien es un buen
motivador, no es el que hace muchas cosas, sino más bien, el que logra
El efecto de la teoterapia en la autoestima 95

que las cosas se hagan a través de otros.

Las siguientes son las características que se deben cultivar sobre la


base de una adecuada auoestima, para llegar a ser un gran motivador:

Es altamente Contagioso
Un motivador es un individuo con la capacidad de encender, dinamizar
y agitar la vida de otros. Tiene la capacidad de contagiar a otros.
Podríamos decir que es portador de un “virus” altamente contagioso,
llamado ENTUSIASMO.

Un líder no puede ser una persona aislada. Tiene que cultivar unas altas
relaciones interpersonales, aun temiendo equivocarse. Los lazos
personales, con aquellos que están bajo nuestra dirección, deben ser
estrechos y fuertes. Mientras más cerca esté usted de la gente, habrá
mayores posibilidades de contagiarlos.

Para evaluar nuestro nivel de entusiasmo, preguntémonos: ¿Cómo


queda una persona después de haber hablado con usted? ¿Mejor? o
¿peor? Tenemos que dejar a las personas en mejores condiciones de
lo que las encontramos. El evangelio de San Juan, en el capítulo 4, nos
narra cómo Jesús sólo necesitó de cinco minutos para influir en la mujer
samaritana, cuya vida fue transformada.

Ahora bien, el secreto para encender a otros es: “enciéndete primero


tú mismo”.

Recuerdo una anécdota que alguien me contó, respecto del entusiasmo.


Se cuenta que en un auditorio, alguien se levantó y le preguntó al orador:
¿Lo que está usted diciéndonos es verdad? Este respondió
afirmativamente. La misma pregunta se la hicieron varias veces; luego,
alguien optó por decirle: si es verdad lo que nos está diciendo, ¿por
qué no lo comunica con más convicción y entusiasmo?
96 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

En realidad, muchos hablan, pero no todos comunican; muchos


comunican, pero pocos llegan. Muchos llegan, pero no todos mueven
voluntades. Muchas veces las apariencias engañan. Hay personas que
aparentemente motivan, pero cuando ya se les conoce de cerca, son
frías y vacías en sus propósitos.

Un auténtico líder está llamado a motivar con lo que dice, con lo que
hace, con lo que tiene y con su propia vida. Por eso, debe evitar
motivarse con cosas indebidas. A la luz de la Biblia, nuestra principal
motivación debe ser amar y servir a la gente, tal como lo hizo nuestro
Señor Jesucristo.

Percibe a las personas a la luz del potencial que representan y no del


que actualmente poseen.

Como lo dije en el segundo capítulo de este libro, existe la tendencia a


limitar el concepto de las personas por lo que actualmente son, y no
por lo que pueden llegar a ser. Esto exige del líder un alto discernimiento
espiritual, que es diferente de la simple intuición o de la malicia. Este
discernimiento nos permitirá exigirle a cada persona, según su capacidad,
evitando que se vuelva conformista y mediocre.

La gente lo único que está esperando es que alguien crea en ellos,


espere de ellos lo mejor, y les dé una oportunidad. En realidad, nadie
llegó a la vida cristiana con sus capacidades desarrolladas; por el
contrario, fruto de la restauración integral que Dios opera en cada uno
de sus hijos, se desempolvan los talentos que habían estado dormidos.

No podemos caer en el error de que, por nuestra inseguridad, estemos


buscando personalidades brillantes y hombres extraordinarios, cuando
sabemos que las apariencias engañan. El ejemplo de David es bien
elocuente: ni siquiera su padre Isaí creía en él, pero para Dios él era el
escogido.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 97

Domina el arte de desarrollar hombres


Desarrollar hombres no es manipular a las personas, ni es usar artimañas
para manejar a otros. Es ayudar a las personas a realizarse,
desarrollando al máximo su potencial. Por eso, debemos reclutar
personas para una misión y no para un trabajo.

Vale la pena preguntarnos: ¿estoy usando a la gente para mis objetivos?,


o me estoy dando a ellos para que se desarrollen. No es tanto lo que
pueda hacer el individuo para usted o su organización, sino lo que
puede hacer usted y su organización para desarrollar a ese individuo.
Podemos decir, con certeza, que por lo general una persona sabe cuando
alguien está auténticamente interesado en su bienestar y desarrollo
personal.

Hay tres principios claves para desarrollar a las personas:

1. Tenerlas en una condición adecuada


2. Enseñarles lo básico y fundamental
3. Enseñarles a trabajar en equipo.

Es autodinámico y autoiniciador
El más grande ejemplo es Nuestro Señor Jesucristo. Su fuerza y
motivación eran totalmente internas. Él sabía quién era y a qué había
venido.

“Yo soy el buen pastor; y conozco mis


ovejas, y las mías me conocen, así como
el Padre me conoce, y yo conozco al Padre;
y pongo mi vida por las ovejas.”
(Juan 10:14 y 15)
98 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

La iniciativa y la creatividad van de la mano con el autodinamismo, y


éste se obtiene a través de profundas convicciones personales y
mediante la toma de decisiones radicales. Esto implica no depender
de las circunstancias para mantener el ánimo. Lo más probable es que
las actitudes y respuestas de otras personas echen por tierra nuestra
iniciativa. Pero contamos con el más grande Automotivador, el Espíritu
Santo; por esto, a mayor comunión, mayor iniciativa y creatividad.

El líder es quien siempre va delante, es quien “atrae y arrastra”. Esto


implica que tendrá que enfrentarse a los que le resisten, a los pesimistas,
y a los negativos. Siempre se debe evaluar qué efectos puede causar
la actuación del líder en la vida de las personas.

Ministra al hombre integral


Los seres humanos somos complejos, llenos de necesidades, con
intereses y aspiraciones propias. El ministerio de Jesús fue dirigido
precisamente a ese hombre integral, de tal manera que las necesidades
del hombre fueran suplidas en su totalidad. Él se dio cuenta de las
necesidades y problemas de la gente, porque caminó y compartió con
ellos. Un líder no puede vivir ajeno a las necesidades de sus discípulos.

El mensaje teoterápico de Jesucristo es respuesta total; no hay base


para pensar de forma diferente. Jesús predicó, sanó, alimentó, consoló
y, siguiendo su ejemplo, necesitamos dar respuesta total a las
necesidades del hombre de hoy. Esto lo lograremos justamente a través
de los tres lenguajes: doctrinal, teoterápico y social.

Irradia simpatía, entusiasmo personal y


afecto
Hay líderes que son excelentes trabajadores, pero tienen dificultad en
llevarse bien con la gente. El amor es esencial en el liderazgo; de ahí
que será buen líder aquél , fruto de haberse saturado del amor de Dios,
El efecto de la teoterapia en la autoestima 99

aprendió a amarse a sí mismo y le queda fácil amar a otros.

Hay una frase reiterativa para mí: “Un líder no necesariamente será un
hombre cariñoso, pero un hombre cariñoso será siempre un líder”. Se
espera que un líder comunique carisma, don de gente, una personalidad
atractiva; todo esto, como resultado de la gracia de Dios en su vida,
que le permite hallar gracia y buena opinión ante los hombres.

Una vez más, nuestro modelo por excelencia es el Señor Jesucristo:


aun en los momentos de conflicto y tensión, manifestó su amor. Esto lo
podemos ver en el relato que hace San Lucas, en el capítulo 23. El día
del arresto de Jesús en Getsemaní, cuando uno de sus discípulos cortó
la oreja derecha a un siervo del sumo sacerdote, él tocó la oreja y le
trajo sanidad. Su mensaje era fuerte, pero su personalidad era amable
y amorosa.

Invita a la gente a comprometerse en forma


específica
Debemos invitar a la gente a un triple compromiso: con Dios, con su
comunidad y con la Gran Comisión. Este compromiso debe ser
específico, pues las personas deben saber desde el principio en qué se
están involucrando.

En muchas ocasiones, el Señor Jesús tuvo que desafiar y definir a sus


discípulos para ver si realmente estaban dispuestos a dedicarse a la
causa. En una ocasión, cuando fueron confrontados sobre si querían
irse del lado de Jesús, Simón Pedro respondió: “Señor, ¿a quién iremos?
Tú tienes palabras de vida eterna” (Juan 6:68), dando a entender
con esto su compromiso.

Los seres humanos siempre tenemos la opción de hacer o no hacer;


ante esto, la Biblia nos dice:
100 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

“Mejor es que no prometas, y no que


prometas y no cumplas.”
(Eclesiatés 5:5).

CARACTERÍSTICAS DEL QUE SABE


DIRIGIR
“Palabra fiel: Si alguno anhela obispado,
buena obra desea.”
(1 Timoteo 3:1)
¿Quién pronunció esta frase? Nadie menos que Saulo de Tarso, el
eminente judío que reunía en sí, características y atributos que llenarían
de orgullo a cualquier hombre: su conocimiento de la naturaleza del
hombre, su habilidad natural para la estrategia, sus dotes en táctica
militar y su reconocido talento para influir ideológicamente en otros, le
permitieron convertirse, sin lugar a dudas, en el hombre más importante
del primer siglo, más conocido en el mundo occidental como Pablo.

Me llama la atención que el hombre que dice esta frase, y que gozaba
de grandes talentos, no se fio de sí mismo cuando tuvo que desarrollar
su ministerio, especialmente a los gentiles. Por el contrario, su
autoconcepto y su confianza la basó en la identificación con Cristo
Jesús. Este es el mismo Pablo que dijo:

“Digo, pues, por la gracia que me es dada,


a cada cual que está entre vosotros, que
no tenga más alto concepto de sí que el
que debe tener sino que piense de sí con
cordura, conforme a la medida de fe que
Dios repartió a cada uno.”
(Romanos 12:3)
El efecto de la teoterapia en la autoestima 101

“Y me ha dicho: bástate mi gracia; porque


mi poder se perfecciona en la debilidad.
Por tanto, de buena gana me gloriaré más
bien en mis debilidades, para que repose
sobre mí el poder de Cristo.”
(2 Corintios 12:9)
Y hay otros pasajes como estos, que nos indican cómo su autoconcepto
y su confianza como líder, los desarrolló sobre la base del concepto
que Dios tenía de él, en Cristo Jesús.

Las siguientes son algunas características del hombre o mujer que


desarrolla liderazgo sobre la base de un sano autoconcepto,
acrecentado en su identificación en Cristo Jesús.

Desarrolla profundas convicciones


personales
Estas profundas convicciones se desarrollan al dedicar tiempo a solas
con Dios, aprendiendo a estar en silencio para escuchar la voz del
Señor; desde luego, con un Estudio bíblico consistente y regular. Nos
volvemos seguros cuando, como modo de vida, buscamos la dirección
continua del Señor.

Mantiene una agenda rigurosa


Esto implica vivir por prioridades y no por presiones; dejar las cosas
buenas para dedicarse a las óptimas, y alejarse de todo aquello que
nos aparta del objetivo. La agenda es totalmente personal, y se debe
ajustar a nuestros planes, incluyendo sólo lo que nos ayude a lograr los
objetivos.
102 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Subordina todos los aspectos de su vida a


la meta
Como líderes con autoconfianza, no podemos hacerlo todo, pues
estaríamos rechazando a los colaboradores que Dios nos ha dado,
para coronar nuestras metas. Por otro lado, un buen líder sabe decir
“no”, pues no tiene conflicto entre las responsabilidades y las metas, ya
que sabe atender ambas cosas.

Está dispuesto a tomar decisiones radicales


Es tal vez la tarea más difícil de un líder. Debe tener una voluntad
enérgica, robusta y dinámica, para afrontar cualquier situación por
dramática que sea. Y son las metas y los objetivos los que determinan
la validez y el momento crucial en que el líder toma una decisión; no
son los sentimientos, ni la lógica.

La Palabra de Dios es una fuente de este tipo de dirección e instrucción,


que muestra la voluntad fime: “Andad en el Espíritu”; “Haced discípulos
en todas las naciones”. Por esto, alguien dijo que la Biblia es “el cayado
del peregrino”, el “manual de vida del dirigente”.

Abraza un sentido de misión y destino


Debemos visualizar la misión y el destino, marchando hacia delante,
sabiendo que los problemas y las dificultades no son sino oportunidades
para llevar a feliz término lo que tenemos en las manos.

En lugar de escapar, de desmoronarnos, cuando se presentan las


dificultades y la batalla es cruenta; en lugar de ver gigantes y vernos
como enanos, debemos visualizar la misión y el destino; debemos volar
como águilas y marchar hacia delante, impulsados por nuestro
compromiso con Dios y con la comunidad.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 103

Nadie va a seguir a una persona que se siente insignificante y que, ni


siquiera sabe a dónde va. Si estamos convecidos de nuestra misión,
lograremos que otros nos acompañen.

Aprenda a vivir con la tensión


Donde están los más grandes problemas, también están las más grandes
oportunidades. Por eso, debemos aprender a vivir con los problemas.
La presión y la tensión siempre estarán presentes a medida que
caminemos hacia la meta.

Pablo, en la carta a los Filipenses, capítulo 3, versículo 13, dice:

“Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo


ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando
ciertamente lo que queda atrás, y
extendiéndome a lo que está delante”.
En este versículo, enfatiza tres verbos: Olvidando, extendiéndome y,
por último, lo más importante: prosigo. Vemos el perfil de un hombre
que aprendió a vivir con la tensión. Necesitamos meditar en las
enseñanzas que nos deja el pasado, pero ya no vivir en él, ni de los
triunfos, ni de las derrotas.

Trabaja duro, disciplinada e


inteligentemente
Hay diferentes clases de líderes: El que trabaja como “loco”, del
amanecer al anochecer, sin ver los frutos. El que trabaja con reflexión:
no se ve agotado, tenso, neurótico, pero produce, rinde, porque trabaja
estratégicamente. Debemos elegir la alternativa de hacer las cosas, de
tal manera que rindan los mejores resultados .
104 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?
El efecto de la teoterapia en la autoestima 105

EPÍLOGO

M uchas veces crecemos en circunstancias difíciles que no nos


permiten desarrollar confianza en nosotros mismos. De la
misma manera, si hemos enfrentado fracaso tras fracaso, o
quizá un golpe devastador, como un fracaso familiar, estudiantil o laboral,
es muy probable que se dañe o destruya nuestro sentido de
competencia.

El sentido de competencia se puede reconstruir y transformar, a medida


que lleguemos a comprender y a experimentar una íntima comunión
con el Espíritu Santo. Él nos guía y nos proporciona talentos, aptitudes
y dones espirituales que necesitamos para vivir una vida de realización
en Cristo Jesús.

Necesitamos descubrir que somos regalos de Dios al mundo, que


nuestro Padre Celestial nos creó con un propósito, y que él mismo está
dispuesto a llevarlo a cabo, en la medida en que nosotros nos
dispongamos.

Preguntas como ¿quién soy?, ¿de dónde vengo?, ¿de quién soy?, etc.,
tienen respuesta en Dios como Padre y en su eterno amor, trayendo
seguridad y confianza en todo lo que somos y hacemos.
106 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

La opinión que Dios tiene de nosotros debe prevalecer sobre cualquier


otra opinión. En realidad, nadie nos puede hacer sentir inferiores, sin
nuestro permiso. Retomando las palabras de un discípulo, recordemos:
DIOS NO HACE BASURA. Sobre la base del amor de Dios nos
podemos conocer y aceptar. Dejémonos reprogramar para una vida
de éxito y victoria. Somos valiosos, porque Dios ha invertido en nosotros
tiempo y paciencia, nos ha conquistado y él se hace responsable de lo
que conquista.

El secreto para cultivar un adecuado concepto de nosotros mismos, y


desarrollar autoestima y autoconfianza, está en Hebreos 12: 2: “Puestos
los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el
gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio,
y se sentó a la diestra del trono de Dios”. No ceda a la tentación de
verse a la luz de fracasos pasados. Mírese como creciendo y
madurando, en la medida en que usted y Dios lo desean. Aprenda a
verse como él lo ve. Visualícese a medida que Dios lo moldea y, así, se
despertará ese gigante que hay en usted. De esta manera, las marcas
del auténtico liderazgo brillarán, y su huella de agente de cambio se
dejará sentir en donde quiera que usted esté.

En la actual crisis de liderazgo que azota a Colombia y al mundo, se


necesitan esos hombres y mujeres que, fruto de descubrirse a sí mismos,
a la imagen y semejanza de Dios, se enciendan en coraje y, de este
modo, persuadan a otros a unir sus vidas, para traer el reino de Dios
a esta tierra.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 107

Las cuatro
llaves de la
vida espiritual

Dios le ama y desea darle una vida


con propósito

EL AMOR DE DIOS

1
“Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha
dado a su Hijo unigénito para que todo aquél que
en Él cree, no se pierda, mas tenga vida
eterna”.(Juan 3:16)

LA PROMESA DE DIOS
Cristo afirma: “Yo he venido para que tengan vida y para
que la tengan en abundancia (San Juan 10:10b).
¿Por qué el hombre no disfruta de esto?

Porque…
108 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

El pecado separa al hombre de


Dios

2
LA REALIDAD DEL PECADO
“Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de
la gloria de Dios” (Romanos 3:23).

LA CONSECUENCIA DEL PECADO


“Porque la paga del pecado es la muerte” (Separación) (Ro-
manos 6:23).
El pecado es la rebelión activa o pasiva del hombre contra
Dios, que resulta en la desobediencia a su voluntad.
La condición del hombre en relación con Dios puede ilus-
trarse así:

El hombre busca desesperadamente encontrar a Dios y la


vida con propósito por su propio esfuerzo, pero…
Sólo hay una solución para este problema.
El efecto de la teoterapia en la autoestima 109

Jesucristo es la solución de Dios


para el pecador

ÉL MURIÓ EN NUESTRO LUGAR

3 “Mas Dios muestra su amor para con nosotros,


en que siendo aún pecadores Cristo murió por no-
sotros” (Romanos 5:8).

ÉL ES EL ÚNICO CAMINO
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie
viene al Padre, sino por mí” (San Juan 14:6).
“Jesuscristo es el puente que hace posible nuestra salva-
ción, la cual proviene de Dios, quien nos reconcilió consi-
go mismo por Cristo” (II Corintios 5:18a).
Dios llega al hombre a través de Jesucristo.

...Pero saber eso no basta


110 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Es necesario recibir
a Jesucristo como Señor y
Salvador personalmente
LA PROMESA

4
(Cristo invita) “He aquí, yo estoy a la puerta y lla-
mo: si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré
en él…” (Apocalipsis 3:20).

LA CONDICIÓN
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su
nombre, les dió potestad de ser hechos hijos de Dios” (San
Juan 1:12).
¿CÓMO RECIBIR A JESUCRISTO?
“…Si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad. Él nos
oye, y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pi-
damos, sabemos que tenemos las peticiones que le haya-
mos hecho” (San Juan 5:14-15).
De acuerdo con esta promesa, pídale al Señor que venga a
su vida. Orar es hablar con Dios. Dios conoce su corazón y
no tiene tanto interés en sus palabras, sino en la actitud de
su corazón.

102
El efecto de la teoterapia en la autoestima 111

La siguiente oración se sugiere como guía:

SEÑOR JESUCRISTO:

Yo te necesito.
Reconozco que tú moriste por mis pecados.
Te pido que entres en mi vida
como Señor y Salvador,
y hagas de mí la persona que tú
quieres que yo sea.
Amén
112 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

LIBROS DEL AUTOR

LA TEOTERAPIA LA TEOTERAPIA LA
DELAGUA UN SILBO SUAVE Y TEOTERAPIA
VIVA APACIBLE DEL AMOR

AGENTES DE RESTAURACIÓN
CAMBIO SIGLO INTEGRAL
XXI
El efecto de la teoterapia en la autoestima 113

VIVIENDO LA PARA TENER VUELO


RECONCILIACIÓN DE ÁGUILA
IMPERIAL

¿ES UN PECADO
AMARSE A SÍ
MISMO?

LIBERACIÓN DE
LA
PERSONALIDAD EL PACTO
114 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

LA TERAPIA DE ENTRE EL
DIOS PAPÁ CONFLICTO Y LA
SALUD

LA TEOTERAPIA Y
LA UNCIÓN DEL
ESPÍRITU SANTO

LAS FIESTAS
SOLEMNES DEL LA VIDA EN
SEÑOR CÉLULA
El efecto de la teoterapia en la autoestima 115
116 ¿ Es un pecado amarse a sí mismo?

Este libro se terminó de imprimir


en los talleres gráficos de
Litocencoa, en diciembre de
2000.

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