Reseña del texto Revisión Histórica de la Terapia Familiar.

Roberto
Pereira Tercero

El Paradigma Sistémico sienta sus bases con el desarrollo de la Ecología, la

Cibernética, las Teorías de la Comunicación y las Ciencias de los Sistemas.
La Terapia familiar comienza a desarrollarse en Estados Unidos en la denominada
“Década Fundacional” en los años 50, tras la Segunda Guerra Mundial, cuando
comienzan a dar hincapié al abordaje de los problemas desde una visión holística.
Los pioneros de la Terapia Familiar parten desde dos grupos, por un lado, el grupo
Psicoanalítico constituido por profesionales que trabajaban con la esquizofrenia y
que a su vez vieron necesario el trabajo con las familias como un nuevo abordaje.
Por el otro, el grupo Sistémico, proveniente de la Antropología con el estudio de la
comunicación en animales y en humanos. Posee una base sistémica derivada de
la Cibernética y la Teoría General de los Sistemas. Este grupo coincidió con el
grupo psicoanalítico en la argumentación de que el mayor trastorno de la
comunicación es el de la esquizofrenia.
Desde el Psicoanálisis, Wynne en 1954 emprende en el NIMH (National Mental
Health Institute) un programa de investigación a largo plazo sobre las familias de
pacientes esquizofrénicos, Bowen se une al equipo y comienzan a realizar
estudios a familias de esquizofrénicos, éstas eran observadas por diferentes
terapeutas individuales, cada terapeuta estaba asignado a cada miembro
individual de la familia. Progresivamente el modelo deriva hacia una terapia
familiar conjunta.
Como resultado de tales estudios, Hill, postula que la esquizofrenia es un proceso
que requiere de tres o más generaciones para desarrollarse, definiendo que la
psicosis se trata de un problema familiar.
Desde los “puristas sistémicos”, se encuentra la Escuela Estratégica fundada por
Jay Haley; el Grupo de Palo Alto, cuyo mayor exponente fue Gregory Bateson,
quien tomo por relevancia la comunicación humana y el M.R.I (Mental Research
Institute) de Palo Alto fundado en 1959 por Jackson. Tanto el Grupo de Palo Alto y
el M.R.I proponen un nuevo paradigma explicativo de los trastornos de la conducta
nutriéndose de la Teoría de la Comunicación, la Cibernética y la Teoría General de
los Sistemas.
La Década Fundacional termina cuando los pioneros se agrupan, las nuevas
teorías se difunden y las escuelas de formación comienzan a funcionar.
La Década de la Expansión comienza en los años 60 y 70, en la cual, continúa
una divergencia entre los sistémicos puros y los psicoanalíticos con la diferencia
de tener como base la teoría sistémica del funcionamiento del grupo familiar.
Aparecen escuelas de Terapia Familiar con distintas orientaciones. Dentro de las
escuelas con orientaciones Sistémicas Puras se encuentran la Escuela de Palo
Alto heredera del Grupo de Palo Alto, que tiene una actividad continua en los
niveles clínicos, de formación y de investigación; la Escuela Estratégica fundada y
representada por Haley y su esposa Madanes y la Escuela de Milán que comienza
en el año 1967 por la psicoanalista Selvini Palazzoli, quien termina con la
psicoterapia individual y funda el Centro para el Estudio de la Familia.
Estas tres escuelas tienen en común el objeto de estudio y la intervención en la
unidad familiar. El individuo queda relegado a la condición de miembro del sistema
familiar. Se hace a un lado lo intrapsíquico, tomando de la cibernética el concepto
de “caja negra” en la dinámica comunicacional, haciendo énfasis en las
comunicaciones con el entorno.
Los principales fundamentos teóricos provienen de la Teoría General de los
Sistemas, la Cibernética, la Teoría de los juegos y la Comunicación. La familia es
considerada como un sistema abierto con reglas, éstas son metáforas utilizadas
por el observador para denominar secuencias redundantes de comportamiento
que caracterizan el funcionamiento de cada sistema familiar. Las familias cumplen
con los principios de la retroalimentación positiva y negativa.
Los síntomas son una forma de comunicación surgidos por la tendencia rígida a
repetir compulsivamente las soluciones memorizadas anteriormente. La
observación de las redundancias lleva a la formulación de hipótesis del
funcionamiento familiar y al diseño de una estrategia con el fin de modificar las
reglas que no son útiles para un adecuado funcionamiento familiar. La terapia está
centrada en la solución del problema presentado en el aquí y ahora. La pregunta
que debe realizarse el terapeuta no es por qué sucede, sino para qué. El
paradigma causal, de causalidad lineal, es reemplazado por la causalidad circular
que no tiene principio ni fin.
Los terapeutas actúan como observadores del sistema familiar promoviendo el
cambio desde el exterior. La terapia consiste en el salto cualitativo de un sistema
de reglas a otro, por ello es necesaria la intervención de un agente externo. Las
técnicas más utilizadas son la connotación positiva, la prescripción de rituales y la
prescripción paradójica.
A su vez, dentro de la Terapia Familiar, se encuentran las escuelas de
Orientaciones Mixtas llamadas Escuela Estructural, de Roma y de Suiza. La teoría
estructural desarrollada por Minuchin se basa en las teorías sistémicas y
comunicacionales. Destaca la relación y la existencia innata de estructuras en las
relaciones humanas. La diferencia con los sistémicos puros es que contempla al
individuo desde una visión ecológica como un subsistema, con su propia
estructura psicológica, en interrelación con los otros subsistemas y con el medio
externo. No cataloga al individuo únicamente como miembro del sistema familiar.
La estructuración de la familia se basa en tres dimensiones básicas: Límites,
Alianzas y Jerarquía. La funcionalidad de la familia va a depender de la adecuada
organización de la estructura familiar a las circunstancias, a las necesidades
individuales de sus miembros y a la adaptación al medio externo. Los objetivos de
la terapia refieren resolver el problema presentado y modificar la estructura familiar
disfuncional para enfrentarse a problemas futuros con mejores defensas. El
terapeuta se une a la familia, deja de ser observador externo para implicarse en el
proceso familiar, actuando como agente de cambio y con la función de
reestructurar el funcionamiento familiar. Las técnicas utilizadas son las de unión a
la familia (Joining), de Reestructuración de los subsistemas (adición o sustracción
de subsistemas), del síntoma (focalización, recalificación) o en la estructura
(provocando conflictos, reorganizando).
Como hipótesis diagnostica del funcionamiento familiar y guía a lo largo del
tratamiento se utiliza el mapa familiar. A su vez se utilizan prescripciones pero no
de tipo paradójico.
La Escuela de Roma mantiene una posición similar y refuerza la idea defendida
por Minuchin del terapeuta como agente de cambio pero continuando con la idea
de que la familia es artífice y protagonista de su propio cambio. La familia es un
sistema abierto en constante transformación, activo, con capacidad de
autogobernarse y abierto a la interacción con otros sistemas. La patología surge
cuando la rigidez familiar impide la adaptación a la evolución intra y extrafamiliar.
La terapia se basa en la búsqueda de un nuevo equilibrio, dinámica entre la
morfostasis y la morfogénesis.
La Escuela Suiza, es el corolario del desarrollo posterior de la Terapia Familiar.
Toma los aspectos positivos de las diferentes orientaciones y conforma un cuerpo
teórico llamado eclecticismo. Sus representantes principales son L. Kaufmann y O.
Masson. Ambos provienen del Psicoanálisis y tratan de unir ambas teorizaciones,
por lo tanto, esta escuela está centrada en la unión de técnicas de escuelas
diferentes, mostrando sus aspectos positivos y no excluyentes.
Por último, dentro de la Terapia Familiar se encuentran las escuelas con
Orientaciones Psicoanalíticas, que enfatizan a la familia pero consideran al
individuo en un primer plano. La familia está compuesta por individuos, cada
miembro tiene una identidad y su propia historia. Estudian a cada individuo y a las
interrelaciones entre ellos dentro de la familia. Se encuentra dentro de este grupo
el Ackerman Institute, Whitaker y sus seguidores, el Grupo de Filadelfia, Bowen y
su grupo, y la orientación Grupoanalítica.
El Ackerman Institute fundado por Ackerman en 1960, utilizaba un lenguaje
psicoanalítico para desarrollar sus teorías atendiendo principalmente al individuo.
Ackerman desde un comienzo comenzó a plantearse un abordaje familiar,
considerando a la familia como una unidad bio-socio-emocional. Este instituto
presentaba un modelo terapéutico en el cual el terapeuta se mostraba activo y
provocador. Tras la muerte de Ackerman, su instituto, se alejó del extremo
psicoanalítico.
Terapia Familiar Contextual es el nombre dado a la Terapia Familiar del Grupo de
Filadelfia, liderado por Boszormenyi-Nagy. Esta terapia trata de integrar las teorías
sistémicas y psicoanalíticas. Está caracterizada por una óptica transgeneracional,
cuya principal técnica son los Genogramas. En las familias, la estructuración de
relaciones, están sujetas a leyes. La patología está determinada por la naturaleza
de las leyes que rigen las relaciones multipersonales, las características
psicológicas y la estructura psíquica de los miembros. Las familias tienen su
propio sistema de lealtades que regula la pertenencia al grupo. En el sistema de
lealtades hay compromisos horizontales de lealtad entablados con la pareja,
hermanos o pares y compromisos verticales de lealtad que incluyen generaciones
anteriores o posteriores. Estos dos tipos de compromisos entran en conflicto
creando áreas conflictivas. Las familias tienen un Libro Mayor donde se
encuentran las deudas y los méritos de sus miembros, es transmitido de
generación en generación y los descendientes al tener compromisos verticales de
lealtad deben pagar las deudas contraídas por sus antecesores.
El abordaje familiar de Carl Whitaker, es el denominado Terapia Familiar
Simbólico Experiencial. Junto con Boszormenyi-Nagy, dieron énfasis a la
Coterapia, la presencia conjunta de dos terapeutas delante de la familia.
Whitaker se define a sí mismo en la terapia como una "madre simbólica”. Utilizaba
técnicas particulares como las de confusión, relatos de sueños (dormirse unos
minutos durante la terapia y luego contar el sueño que casualmente estaba
relacionado con la familia en algún aspecto difícil de comunicar) y de provocación.
Bowen funda la escuela de Terapia Familiar basada en una terapia personal
experiencial al tratar de explicar sus teorías a su propia familia. Su terapia está
centrada en la investigación familiar y el rol del paciente en la propia familia.
Implica el aprendizaje del funcionamiento familiar a través de la observación de la
propia familia y la búsqueda de medios para modificar las propias reacciones
emocionales en el sistema familiar. Este modelo es utilizado en el trabajo
terapéutico con los pacientes. “Terapia de los sistemas familiares” es el nombre
del modelo, su base teórica refiere a seis conceptos básicos interrelacionados: la
escala de diferenciación del self, el sistema emocional de fusión del self en la
familia nuclear, los procesos de proyección familiar, los procesos de transmisión
transgeneracionales, el perfil fraternal, y el funcionamiento en triángulos. La escala
de diferenciación del self trata de medir el Yo de base de cada persona, la parte
del Yo que no se encuentra en fusión emocional en un yo común con los otros.
Esta escala no tiene una significación patológica directa, pero cuanto más bajo se
está en la escala, los individuos son más vulnerables a las tensiones y la
resolución de los síntomas resulta más difícil. En la familia nuclear puede existir de
forma más potente un Yo colectivo familiar indiferenciado, que absorbe en mayor o
menor cantidad el self de los individuos que la conforman. Cuanto menos self
propio tiene el individuo, más difícil resultará su funcionamiento autónomo. Esto
está determinado por la proyección familiar, en la cual los padres proyectan una
parte de su inmadurez sobre uno o varios de sus hijos. Esta proyección puede
repetirse a través de varias generaciones.
El principal representante de la Orientación Grupoanalítica es Skinner, fundador
del Instituto de Terapia Familiar de Londres. Trata de enlazar las teorías sistémicas
con las psicoanalíticas y tiene influencias de las escuelas familiares
psicoanalíticas, estructurales, estratégicas y comunicacionales. A su vez introduce
el modelo de desarrollo ecléctico que se va a generalizar a partir de la segunda
mitad de los años 70.
Con la evolución del pensamiento sistémico deviene un proyecto unificador, se
tiene en cuenta que el Sistema tiene cuatro dimensiones complementarias entre
sí: Génesis, Función, Proceso y Estructura. En la conducta sintomática estas
dimensiones pueden observarse en la Génesis del síntoma, en el Proceso
requerido para que la conducta sintomática aparezca, en la Función que cumple el
síntoma, o en la Estructura que la sustenta de manera repetitiva. Esto se vincula
con las distintas escuelas Psicoanalíticas (Génesis); Comunicacional (Proceso);
Estratégica (Función) y la Estructural (Estructura).
La evolución de la Cibernética, da lugar a un replanteamiento teórico general. Las
aportaciones de Maruyama, Prigogine y Von Foerster, llevan al surgimiento de la
Segunda Cibernética. En la Primera Cibernética, el observador externo estudiaba
al sistema intentando deducir las reglas disfuncionales e impulsando desde fuera o
dentro un cambio de las reglas o de la estructura familiar. De esta manera se
dejaba de lado la influencia del observador sobre el sistema. La influencia
inevitable del observador modifica el funcionamiento familiar y la objetividad es
imposible de alcanzar. Aquellos estudios que no tengan en cuenta la influencia del
observador sobre el contexto, carecen de validez. Este principio, conocido por el
Principio de Incertidumbre de Heisenberg, implica que no es posible observar algo
sin afectarlo. No existe el observador independiente, al margen, observando como
la naturaleza sigue su curso sin afectar al objeto observado.
Este replanteamiento teórico da lugar a la Teoría Familiar del Constructivismo,
cuya afirmación básica es que la realidad no es única y objetiva, sino una realidad
construida por cada uno en un contexto social donde el observador configura su
propia interpretación de la realidad y su personal manera de entender al mundo.
El marco general del Constructivismo proviene de las ideas desarrolladas de la
segunda Cibernética, las teorías de los sistemas observantes y de los sistemas
autónomos. Un sistema observante incluye al observador como parte del sistema,
éste participa en la definición del observado, por lo tanto no hay posibilidad de que
las observaciones sean objetivas. El terapeuta construye una realidad junto con la
familia y la unidad de tratamiento es el sistema terapéutico.
Los significados y no la conducta son el eje del trabajo terapéutico y los mitos
familiares son el eje en el cual se organizan los síntomas y el trabajo terapéutico.
También hay teorías y técnicas del funcionamiento familiar basadas en Narrativas
que se desarrollaron en los años 80. Las narraciones construyen la realidad,
incluso pueden llegar a ser la realidad misma. La familia acontece en una historia
contada por los miembros de la familia en la que se integra todo lo ocurrido, lo que
hubiera podido ocurrir, todas las personas, contextos y situaciones pasadas,
presentes y futuras significativas para el grupo familiar. Cada miembro tiene su
propia historia entrelazada con las historias del resto de los miembros y
construyen entre todos la vida familiar. Los conflictos surgen cuando se producen
discordancias entre las diversas historias.
El modelo Psicoeducativo dentro del campo de la Terapia Familiar posee una base
teórica centrada en la etiología multifactorial de la Esquizofrenia por ser genética,
biológica y ambiental. Su conjugación explica la aparición de la psicopatología
esquizofrénica, sus recaídas y remisiones. Este modelo comenzó en Gran Bretaña
con estudios de corte sociológicos y económicos con la finalidad de encontrar el
modo de disminuir el gasto hospitalario del ingreso continuo de esquizofrénicos,
debido a que se descompensaban a pesar de seguir un tratamiento ambulatorio.
Se descubrió que tras el alta los pacientes que registraban un mayor número de
recaídas no eran aquellos que vivían solos, sino los que volvían a convivir con sus
familias. Definieron a estas familias como Alta Expresión Emocional, creando una
entrevista semiestructurada con el fin de medir la Expresión Emocional de las
familias y ser predictor de las recaídas.
La manifestación de síntomas psicóticos en un individuo vulnerable, puede
aparecer al aumentar la vulnerabilidad biológica, cuando las defensas desbordan
tras acontecimientos vitales o cuando los soportes sociales disminuyen. La
reagudización de los síntomas en el curso de la esquizofrenia se relaciona con el
estrés ambiental, con un contexto estresante referido al medio familiar y
acontecimientos vitales estresantes.