Você está na página 1de 3

6 formas de motivar sin dinero a tus

empleados
Incentivos no monetarios que nos llevan a querer implicarnos más en el
trabajo.
LinkedInFacebookTwitterWhatsAppCorreo

La habilidad de motivar a los empleados es una de las competencias más importantes que debe
poseer un buen líder y que debe tener en cuenta cualquier organización empresarial que desea
tener éxito.
El dinero es, indudablemente, una de las grandes fuentes de motivación por excelencia cuando
decidimos aceptar una oferta de trabajo. Sin embargo, existen otras fuentes motivadoras (tanto
extrínsecas como intrínsecas) que hacen que los trabajadores se sientan a gusto en su lugar
de trabajo y, por tanto, rindan a un gran nivel.
Además del dinero, hay más fuentes motivadoras...
Si bien nadie desea trabajar en un empleo mal remunerado, la gran mayoría de departamentos
de recursos humanos y salud laboral saben que el dinero no lo es todo a la hora de motivar a
su equipo de trabajo.
Esto es exactamente lo que piensa Daniel Pink, autor del libro “Drive: The Surprising Truth About
What Motivates Us", que en su texto nos explica los factores que nos motivan tanto en nuestra
vida personal como laboral y analiza mediante investigaciones y ejemplos que la remuneración
actúa como un factor motivante solamente cuando las tareas son simples y claras, pero cuando
las tareas son más complicadas y requieren de un pensamiento más conceptual y creativo “la
pasta (o la plata)” deja de ser una fuente motivacional. Además, argumenta sobre importancia
del desarrollo personal, la autorrealización y satisfacción personal a la hora de rendir de manera
eficiente en el trabajo.
Cómo motivar a los empleados sin dinero
Pero, ¿cómo podemos motivar a los empleados sin utilizar el dinero como incentivo? A
continuación, podrás encontrar 6 formas de motivar a tus empleados sin remuneración
económica.
1. Dales autonomía
Está bien que dirijas a tus empleados y emplees cierto control en algunos aspectos del trabajo,
pero, según varias investigaciones, el liderazgo democrático o participativo, aquel que fomenta
la participación de los trabajadores dejando que los empleados decidan más sobre sus
funciones y tengan las suficientes competencias para tomar decisiones, aumenta el rendimiento
y la motivación.
Con esta forma de liderazgo, pronto verás que los empleados trabajan de manera más animada
y emplean toda su energía en solucionar los problemas que puedan surgir, Por contra, el
liderazgo autoritario, un estilo de liderazgo en el que los superiores tienen el poder absoluto
sobre sus trabajadores, tiene el efecto contrario en la motivación de los empleados.
2. Haz tus ideas suyas
En los últimos años se ha hecho muy popular el concepto de liderazgo transformacional. Y…
¿qué hace diferentes a los líderes transformadores? Pues emplean altos niveles de
comunicación para conseguir transmitir los objetivos y aportar una visión de cambio que
consiguen hacer llegar a los empleados.
Así motivan y aumentan la productividad y la eficiencia del grupo, porque son capaces de
cambiar las expectativas, percepciones y motivaciones del equipo con el que trabajan. En
definitiva, hacen que sus subordinados sientan que las metas de la empresa son también sus
metas, y esto es altamente motivante.

3. Preocúpate por ellos y haz cosas en grupo


Además de hacer que tus empleados se sientan como líderes, hacer que sus ideas cuenten y
hacer que tus ideas lleguen a ellos, dedica tiempo para que se sientan a gusto en el lugar de
trabajo y con sus compañeros, porque esto aumenta el nivel de pertenencia a la empresa y a la
vez su motivación.
Llévalos a comer de vez en cuando, realiza dinámicas de grupo durante su horario laboral, haz
barbacoas los viernes o realiza concursos en los que puedan recibir premios y trofeos por su
buena labor profesional. Lo importante es que los empleados estén a gusto con la empresa y
con sus compañeros, porque el apoyo social y la buena relación con los compañeros de trabajo
es una variable clave para reducir el estrés y aumentar la motivación en el entorno laboral,
4. Involúcrales en los éxitos de la empresa y dales feedback
Muchos superiores tienen la mala costumbre de buscar a los empleados si las cosas van mal,
pero se olvidan de hacer a los empleados partícipes de los éxitos de la empresa o reconocerles
su buena labor profesional. Es bueno que realices entrevistas periódicas para conocer su
opinión sobre su trabajo y darles feedback sobre cómo realizan su labor profesional y cómo lo
pueden mejorar.
5. Haz que estén en el puesto de trabajo que encaje con sus competencias
Es importante que los empleados estén motivados con la tarea que realizan, porque el trabajo
se convierte en una gran parte de nuestra vida. Si los empleados no están a gusto con el puesto
de trabajo o la función que realizan en la empresa es imposible que estén motivados.
En realidad, esto es un proceso que debería empezar en el mismo proceso de selección, puesto
que la selección de candidatos idóneos para un puesto de trabajo es la mejor manera para
mantener a éstos motivados. Hay personas que desempeñan una gran labor en los trabajos
monótonos, mientras que otros disponen de una serie de competencias que son clave para un
trabajo más creativo. La idea es que los trabajadores encajen en el puesto de trabajo y la
organización no solo en cuanto a sus habilidades, sino también sus expectativas o motivaciones.
6. Déjales crecer y desarrollarse
La posibilidad de crecimiento de un trabajador dentro de la empresa es, sin lugar a dudas, un
ingrediente motivador. Y es que para cultivar la motivación hay que cuidar la forma en que los
empleados sienten la empresa y cómo estos se visualizan dentro de ella. Los empleados deben
sentirse valorados, competentes y con posibilidad de crecer dentro de la organización, porque
de lo contrario pueden estancarse.
La capacitación y la formación constante y la posibilidad de desarrollo y crecimiento profesional
y laboral dentro de la empresa es clave en el camino para conseguir trabajadores más
motivados.

Você também pode gostar