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VIVIENDO COMO ES DIGNO DE CRISTO

Efesios 4
Pablo comienza esta sección de la carta que es la parte práctica y
dice: “Yo pues, preso en el Señor”, la versión Traducción del
Lenguaje Actual nos dice: “Yo, que estoy preso por servir al Señor
Jesús” esto añade una fuerza moral considerable a la exhortación,
“os ruego” que es una súplica, es una exhortación urgente profunda
y sentida ¿Qué es lo que ruega Pablo? Que andéis, Que caminéis,
como es digno de la vocación con que fuisteis llamados.
Andar como es digno es un término ético, como debe ser nuestra
manera de vivir como cristianos es caminar de acuerdo a la voluntad
de Dios (col1.10, 1 ts 2.12) este vivir debe ser digno, a la vocación
con que fuisteis llamados, esta vocación se refiere a hecho de que
Dios nos ha llamado a ser parte de su pueblo, su iglesia que es el
tema central de la carta.
TLA: “les ruego que vivan como deben vivir quienes, como ustedes,
han sido llamados a formar parte del pueblo de Dios”.
DHH: “les ruego que se porten como deben hacerlo los que han sido
llamados por Dios, como lo fueron ustedes.”
¿De qué manera debemos vivir o comportarnos?
Pablo nos dice como es esa manera de comportarnos como es digno
del llamado:

con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia
los unos a los otros en amor”
Aquí hay dos verbos que nos ayudaran a entender como es la manera
de comportarnos: soportándonos y solícitos.
¿Cómo debemos soportarnos?

- Humildad: es la actitud de la persona que no es pretensiosa en


su conducta y relación con otros, que no llama la atención a sí
misma, no insiste en sus derechos o supuesta superioridad, es
la persona que sabe que somos iguales por ser creado a la
imagen de Dios
- Es la ausencia de soberbia. Es una característica propia de los
sujetos modestos, que no se sienten importantes o mejores que
los demás independientemente de cuán lejos hayan llegado en
la vida. (Hch. 20.19, Flp. 2.3, col.3.12; 1p 5.5).
- Mansedumbre: denota una actitud amable y cortes hacia los
demás, en contraste con la dureza, rudeza, falta de sensibilidad
y respeto a los demás, la mansedumbre no guarda
resentimiento ni busca venganza. (historia de un cliente con
rabia) Es la consideración, cortesía, respeto y genuino aprecio
por los demás. Es la disposición a renunciar a los derechos
propios por el bien común. El término no sugiere debilidad o
falta de carácter al contrario es fuerza bajo control, es dominio
propio. (Gl 5.23; 6.1 col. 3..12; 2 tim. 2:25, Tit.3:2; stg 1.21;
3.13)
- PACIENCIA: Es la persona que persevera en su ánimo a pesar
de las frustraciones y adversidades que los demás o de las
circunstancias de la vida que trae (col 1.11, 3.12, 2 Tim 3.10)
Entonces con humildad, mansedumbre y paciencia debemos
soportarnos los unos a los otros en amor. (Col. 3,13; 2 Co 11.19).
Soportar es aceptar a los demás tal y como son, sin querer que sean
o comporten como a nosotros nos agrada.
Lo que esperamos de otros es lo que debemos ofrecer. Dicho de otra
manera, damos aquello que esperamos de los demás, Mt.7.12, hay
una frase que debe estar siempre presente en nuestros corazones es
en amor.
Estas 4 actitudes que vimos humildad, mansedumbre, paciencia y
amor. Dan porcentada las relaciones interpersonales dañadas por el
pecado.
Si vivimos dignamente como es nuestro llamado estamos
implícitamente reconociendo el valor y la dignidad de nuestros
hermanos y hermanas como portadores de la imagen de Dios y como
miembros de una misma familia.

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