Você está na página 1de 10

Rendimiento Bajo Presión

Manual del curso

escueladelamemoria.com
Semana 1.1
MITOS SOBRE LA SUGESTIÓN

Lo que no es un proceso sugestivo


El concepto de sugestión y el concepto de hipnosis (asociado a este), están particularmente plagados de
mitos y conceptualizaciones místicas y pseudocientíficas. Son conceptos que todos conocemos de oídas,
pero que muy pocos sabemos qué son exactamente. Antes de aprender algún procedimiento sugestivo,
debemos desaprender todos los mitos que mantenemos sobre los términos relacionados.

Desde los medios de comunicación, así como a través del cine, la literatura, los espectáculos teatrales…. Se
han fomentado muchas creencias erróneas sobre qué es la sugestión o la hipnosis, cómo funcionan y para
qué sirven.

A continuación exponemos los 7 mitos más extendidos sobre los procedimientos sugestivos y sus
aplicaciones:

Mito 1:
Los procedimientos sugestivos no pertenece al campo de la psicología científica. Quienes la practican
suelen ser charlatanes, curanderos o gente del espectáculo. Las personas que mejoran con ella, son cré-
dulos, ignorantes y "dependientes".

Realidad:
La realidad acerca de la cientificidad de Los procedimientos sugestivos es bien diferente. Wundt (1882),
William James (1902), Paulov (1923), Hull (1933) y Eysenck (1960), entre otros importante autores de inne-
gable seriedad y prestigio dentro de la Psicología Científica, investigaron experimentalmente sobre la su-
gestión, y la utilizaron en sus intervenciones psicológicas.

Ya en sus comienzos, la auto-sugestión fue tanto un tema de estudio empírico, como una herramienta te-
rapéutica en Psicología y Medicina, aunque por supuesto el conocimiento que tenemos hoy en día sobre
esta herramienta y sus propiedades es mucho mayor. Desde los años cincuenta en USA, investigadores
como T.X. Barber (1969), Sarbin (1963) y E. Hilgard (1969), estudiaron la sugestión desde una vertiente
teórica y experimental dura. Sus seguidores han publicado y siguen publicando un sinfín de trabajos y estu-
dios científicos, tanto en revistas especializadas en el tema, como en revistas de temáticas más generales y
de elevado prestigio dentro de la comunidad científica psicológica y médica.

Por otra parte, por ejemplo sociedades de hipnosis en Estados Unidos, se forman en torno a colectivos de
importancia y prestigio internacional como la American Psychological Association (división 30), la cual, jun-

ESCUELADELAMEMORIA.COM
to con The Society for Clinical and Experimental Hypnosis y The American Society of Clinical Hypnosis, su-
man una gran cantidad de afiliados.

Además, por supuesto Los procedimientos sugestivos se enseñan en las universidades de los principales
países de Occidente (EEUU, Canadá, Australia, Alemania, Holanda, Gran Bretaña, España...), tanto en facul-
tades de Psicología como de Medicina y Odontología.

Así pues, la sugestión se estudia en base a los criterios del método científico y experimental, y existen revis-
tas científicas especializadas en el tema, de reconocido prestigio (como por ejemplo, The International
Journal of Clinical and Experimental Hypnosis o Contemporary Hypnosis).

Por supuesto esto no evita que charlatanes y desconocedores de esta realidad, hablen y practiquen sobre
Los procedimientos sugestivos desde una perspectiva no científica, y normalmente con un objetivo más
lucrativo que terapéutico... Por este motivo debemos siempre saber cuál es la formación o preparación de
los supuestos profesionales que afirman que utilizan procedimientos sugestivos.

Refiriéndonos a la segunda afirmación del mito, las personas que son susceptibles a la autosugestión, por
supuesto no son personas ignorantes, crédulas o dependientes mentalmente. Más bien, por el contrario las
personas que practican autosugestión son personas que tienen una buena capacidad para concentrarse y
visualizar imágenes con detalle.

Mito 2:
La sugestión puede dejar a una persona "enganchada" en un trance, de forma que al no poder salir del
“estado hipnótico", quedaría mermada su voluntad o se convertiría en un demente.

Realidad:
Por supuesto esto no es cierto en absoluto, la evidencia clínica y los resultados experimentales indican que
las personas no se quedan "enganchadas" en un “estado alterado de conciencia”, entre otras razones por-
que el concepto de “trance” o “estado alterado o diferente de conciencia”, ha sido abandonado desde hace
ya tiempo, por la falta de evidencias científicas sobre su existencia, y por las evidencias experimentales que
apuntan a que estos conceptos no se sostienen, ya que existen datos que señalan que estos conceptos no
tienen una base empírica.

De hecho en un estudio experimental, incluso las personas que supuestamente creían que alcanzaban un
muy "profundo trance”, en cuanto decidían que ya no era oportuno seguir en este "estado de hipnosis”,
simplemente volvían a su rol habitual de persona no sugestionada. Por lo tanto, por mucho que un hipnoti-
zador (o guía) pretenda dejar a una persona "enganchada" de por vida, o por periodos muy largos…, de-
penderá únicamente de la persona decidir cuándo desea abandonar la situación sugestiva, y volver a mos-
trar un comportamiento habitual.

Todo lo escrito y defendido en dirección a fomentar las creencias erróneas sobre los “estados alterados de
conciencia” y demás, son en realidad el producto de imaginaciones acientíficas, pseudocientíficas, o sim-

ESCUELADELAMEMORIA.COM
plemente consecuencia del desconocimiento, y en muchos casos, existe un interés por mostrar una hipno-
sis todopoderosa, casi milagrosa, y realmente muy alejada de la realidad experimental y clínica.

Mito 3:
La sugestión puede explicitar o agravar psicopatologías "latentes" de la persona. Incluso puede desarro-
llar alteraciones psíquicas en los individuos sanos. Los individuos con problemas psicopatológicos, puede
empeorar con Los procedimientos sugestivos.

Realidad:
En realidad, no existe ninguna evidencia científica de que la sugestión pueda generar algún tipo de psicopa-
tía o de alteración psicológica permanente. Sí que es cierto que la autosugestión, al igual que toda forma
de intervención psicoterapéutica, puede producir efectos no deseados, pero dichos efectos no son superio-
res a los encontrados en otras formas de intervención. La autosugestión es una técnica inocua, y los efec-
tos no deseados no son debidos a la sugestión en sí, sino debidos más bien a las creencias erróneas que las
personas que las practican tienen sobre ella.

Por otro lado, la idea de que los procedimientos sugestivos pueden generar una psicopatología proviene
esencialmente de la escuela de la Salpêtrière, en la que tanto Charcot como Janet, enfatizaron el carácter
psicopatológico de la hipnosis o la sugestión. Según este punto de vista, sólo las personas con debilidad
mental y neuronal eran susceptibles de ser sugestionados o hipnotizados. Por supuesto la comunidad cien-
tífica actual muestra su total oposición a tales ideas antiguas, defendiendo por el contrario que sólo las
personas mentalmente sanas, o al menos con sus facultades mentales relacionadas con la concentración y
atención intactas, pueden ser sugestionadas, ya que sólo estas pueden seguir las instrucciones y tienen la
suficiente capacidad necesaria para atender a las sugestiones que se les proponen. Por lo tanto, la hipnosis
no parece por sí misma provocar ningún efecto colateral negativo.

Finalmente, los procedimientos sugestivos están siendo utilizados con mucho éxito para el tratamiento de
ciertas alteraciones o trastornos psicológicos, que podrían parecer a priori absolutamente incompatibles
con ella, como pueden ser: trastornos de personalidades múltiples, depresión, fobias, pacientes limítrofes y
psicóticos. Además se continua utilizando y aplicando en campos que podemos considerar ya tradicionales
como: los problemas relacionados con el estrés, reducción del dolor y medicina comportamental.

Lo que puede generar alguna complicación al utilizar procedimientos sugestivos son como decíamos,
las creencias falsas que se mantienen sobre esta herramienta terapéutica, y las expectativas sobre lo que el
“hipnotizador”, o guía, puede hacer con ella sobre la otra persona. Por eso es tan importante desaprender
lo relacionado con estas creencias y mitos.

Mito 4:

ESCUELADELAMEMORIA.COM
La sugestión provoca un "estado" similar al del sueño, en el que la persona muestra unas características
especiales. Si no se alcanzan tales características, la persona no está sugestionada. Sólo se puede estar
en esa situación especial, si se ha recibido un método de inducción sugestiva o hipnótica.

Realidad:
Sueño y sugestión no tienen absolutamente nada que ver, ya que ni siquiera la sugestión implica necesa-
riamente que la persona que la practique, esté en un estado de relajación profundo. Sólo, en algunas oca-
siones, las personas que están siendo sugestionadas a través de algún método sugestivo por relajación,
pueden quedar dormidas, pero por supuesto esto es consecuencia de un error del practicante o del guía, y
esto ocurre en otras intervenciones o técnicas que utilizan la relajación. De hecho muchas personas cuando
comienzan a trabajar estrategias para relajarse o calmarse, como por ejemplo el Mindfulness, o la relaja-
ción progresiva de Jakobson…, a veces se quedan dormidas, porque se dejan llevar demasiado por sus sen-
saciones de relax, y pierden la concentración en el ejercicio.

En realidad la relación entre sueño e hipnosis es puramente artificial. El hecho de que las sugestiones que
se utilizan normalmente vayan dirigidas a generar unas sensaciones de somnolencia, pasividad y obnubila-
ción…, no significa que no podamos trabajar con sugestiones que provoquen las reacciones contrarias, acti-
vación, concentración, inquietud física y psicológica….

Todo esto nos lleva a la segunda parte del mito: la persona debe alcanzar algunas características especiales
para estar "realmente hipnotizado”. La investigación psiconeurobiofisiológica, realizada sobre los correlatos
biológicos del supuesto "estado hipnótico", es unánime en una conclusión general: no existe ningún corre-
lato biológico específico de la suestión. Dicho de otro modo, sólo se provocan los fenómenos que se sugie-
ren, y tales fenómenos se comparten con otras formas de intervención (relajación, imaginación, activa-
ción…). Así pues, una caída brusca de la tasa cardíaca, no es síntoma de "entrada” en hipnosis, como tam-
poco lo es un aumento de las ondas cerebrales "alfa", o una disminución del tono muscular, o un aumento
diferencial de los hemisferios cerebrales… El que aparezcan estos fenómenos, depende de lo que se haya
sugerido, o en todo caso del método de inducción que se esté utilizando.

Esto a su vez, nos lleva a la tercera parte de este mito: el método de inducción como responsable de los
fenómenos sugestivos y como prerrequisito indispensable para estar sugestionado.

La evidencia acumulada a través de investigación científica muy rigurosa, indica que no existe ningún crite-
rio comportamental o subjetivo de “trance”, o “estado hipnótico". En otras palabras, no existe ningún "sín-
toma patognomónico" o “signo discriminativo” de la sugestión, y todo lo que se ha provocado “bajo hipno-
sis”, se ha provocado también, sin necesidad de utilizar método sugestivo alguno. Por lo tanto, no cabe
esperar nada "especial" de la sugestión, ni debe asumirse que los métodos sugestivos tienen ciertos “pode-
res” para determinar reacciones espectaculares o esotéricas en las personas.

En definitiva, la experiencia sugestiva no es similar a la del sueño, y varía de persona a persona, en función
de lo que la persona espere de la sugestión, y en función de lo que se sugiera en el transcurso de su aplica-
ción. No hay ningún criterio objetivo e independiente del “estado sugestivo”, por lo que es inadecuado
relacionar la hipnosis o la sugestión, con un estado similar al sueño. Más bien tiene cierta relación con las

ESCUELADELAMEMORIA.COM
técnicas de relajación u otras formas de meditación. Ello dependerá, en realidad, de las instrucciones que
se den durante la práctica, y de las propias expectativas y creencias del sujeto a sugestionar.

Mito 5:
La sugestión o “hipnosis”, elimina y anula el control voluntario de la persona. Ésta deviene en un autóma-
ta en manos del guía o hipnotizador, por lo que puede cometer actos delictivos, antisociales, inmorales o
que le llevan al ridículo social.

Realidad:
Seguramente este es el mito que más ha perjudicado al uso y aplicación de procesos sugestivos en el cam-
po de las psicoterapias. Tanto la literatura, como el cine, el ilusionismo, el teatro…, así como ciertos aboga-
dos criminalistas, han presentado ejemplos falsos o erróneos del supuesto poder que alcanza el hipnotiza-
dor sobre la persona a la que ha hipnotizado. Esto ha calado en la opinión pública, reforzando por muchos
programas de televisión en los que individuos “hipnotizados” muestran comportamientos ridículos, absur-
dos, o muy espectaculares, que además luego son catalogados por los propios sujetos como involuntarios,
incontrolables y fuera de su fuerza de voluntad.

Sin embargo, En los espectáculos sobre hipnosis, no se le pide nada al sujeto que pueda ser considerado
como antisocial, delictivo o inmoral. Más aun, no se le pide nada a los sujetos que antes ellos no sepan que
puede ocurrir…, y que esperen que, efectivamente, ocurra… ¿Por qué sino, una persona se prestaría a ser
voluntario del espectáculo hipnótico?

Por lo tanto, en este caso, el asunto es ¿cómo? y ¿por qué? la persona percibe tales respuestas como invo-
luntarias, y ¿por qué? afirma que no puede controlarlas aunque desee hacerlo. Una de las respuestas se
halla en el concepto de «automatismo». Las personas tienden a equiparar automático con involuntario, sin
embargo son cosas diferentes. Bajo sugestión, se dan muchos comportamientos de forma automática, pero
no involuntaria, ya que las personas los pueden interferir siempre que lo deseen… Para que lo entendamos
mejor, una respuesta puede ser automática y voluntaria, voluntaria y no automática, y automática e invo-
luntaria.

Bajo sugestión normalmente se actúa de forma automática, pero no de forma "descontrolada" o involunta-
ria. La persona no pierde su capacidad de control en ningún momento. Aunque sienta que ciertas conduc-
tas, pensamientos o sensaciones se produzcan de forma automática, siempre mantiene el control de la
situación, y no hará nada que no desee hacer. De hecho paradójicamente, en todo caso su capacidad de
control sobre sí misma aumenta.

Esto nos lleva al aspecto central del mito: la comisión de actos delictivos, inmorales o auto-dañinos por
parte de la persona sugestionada, en contra de su voluntad…

La investigación científica en este campo, indica que las personas actúan de forma inmoral o delictiva,
cuando el acto que se les propone, en todo caso es irrelevante para su propia ética. Y que un acto sea irre-
levante en condiciones experimentales o de espectáculo, es bastante sencillo, ya que las personas "saben"

ESCUELADELAMEMORIA.COM
que en un experimento o espectáculo no puede ocurrir nada especialmente dañino o perjudicial para al-
guien, pues el peso de la ley caería sobre el director del estudio, programa etc. En otras palabras, si la per-
sona sabe que no tendrá responsabilidad sobre lo que ocurra, actuará conforme se le pide. En el caso con-
trario, la persona no responderá, y abandonará la relación sugestiva.

Mito 6:
Los procesos sugestivos provocan reacciones inusuales, excepcionales y cuasi mágicas en las personas.

Realidad:
Habitualmente se habla de tres tipos diferentes de reacciones "hipnóticas": motoras, sensorio-fisiológicas y
cognitivo-perceptivas. Ninguna de estas respuestas es exclusiva de la sugestión, y a pesar de que la expe-
riencia de la persona sugestionada, no es del todo como la experiencia habitual… no es en ningún caso ex-
cepcional, mágica o esotérica.

Generalmente, el aspecto central que diferencia las experiencias sugestivas, es el del automatismo. Las
personas que practican la autosugestión, sienten que sus respuestas y los procesos que se desencadenan a
través de las sugestiones son de algún modo automáticos o involuntarios, pero por supuesto, el pensa-
miento de la persona se encuentra siempre detrás del control de estas respuestas.

Por otro lado hay muchas personas muy sugestionables y que pueden llegar a conseguir cosas espectacula-
res a través de la sugestión en muy poco tiempo. Esto les puede llevar a creer falsamente que experiencias
ficticias que han sido imaginadas durante la hipnosis, son totalmente reales a pesar de su naturaleza “mági-
ca” e inexplicable, como pueden ser: regresar a vidas pasadas, o poder salir del cuerpo…

Mito 7:
La autosugestión o (las técnicas de imaginación) son una terapia, sumamente útil, rápida y eficaz, que no
exige ningún esfuerzo por parte del cliente para cambiar su comportamiento. Sin embargo sólo las per-
sonas muy susceptibles pueden beneficiarse de ella.

Realidad:
La autosugestión, en modo alguno, es una terapia psicológica. Los procedimientos sugestivos se utilizan
siempre como un adjunto a otras formas de psicoterapia, o al menos así debe hacerse… Dicho de otro mo-
do, es una herramienta complementaria a otras técnicas de intervención psicológica.

La sugestión facilita el progreso terapéutico, y aceleraría la terapia y disminuiría el esfuerzo necesario para
obtener una mejoría. Más aún, los procedimientos sugestivos no sólo se aplican en la Psicología Terapéuti-
ca, sino que también se usan en odontología, cirugía, obstetricia, oncología, en el tratamiento del dolor
crónico, en el deporte….

ESCUELADELAMEMORIA.COM
Un procedimiento sugestivo, por lo tanto, es simplemente un conjunto de procedimientos que ayudan a
alcanzar ciertos objetivos, de manera más rápida y confortable, siempre que se apliquen las técnicas o re-
cursos adecuados.

A pesar de ciertas creencias sobre la utilidad cuasi milagrosa de la hipnosis, lo habitual y frecuente es que
las personas que se sirven de ella para aumentar la eficiencia de una terapia psicológica, debe esforzarse,
implicarse e involucrarse activamente en el tratamiento.

En general, con un nivel de susceptibilidad moderada se puede mejorar considerablemente la eficacia de la


intervención. Lo curioso, es que las personas poco susceptibles se pueden beneficiar de los procedimientos
que usa la hipnosis, especialmente cuando se obvia la propia palabra «Hipnosis». O dicho de otro modo, si
rotulamos la hipnosis, como «Técnicas de imaginación», o como «Técnicas de sugestión», incluso como
«Placebo»…, las personas con un nivel bajo de susceptibilidad mejoran tanto o incluso más que las perso-
nas altamente susceptibles, a las que se les aplican los mismos métodos pero bajo el rótulo «Hipnosis».

Así pues, los procedimientos sugestivos suponen un volumen tan heterogéneo de formas de proceder, que
en sí mismos no son una forma de terapia. Sus resultados son beneficiosos como adjunto al tratamiento,
pero no son milagrosos, ni implica que la persona adopte un rol pasivo en su cambio de comportamiento.
La susceptibilidad a la sugestión es un requisito necesario pero no suficiente para garantizar el éxito, y no se
exigen niveles altos para poder obtener resultados apropiados. De hecho una misma persona puede mejo-
rar su capacidad para utilizar las técnicas sugestivas con la práctica. Por lo que el entrenamiento mejora
nuestro rendimiento y susceptibilidad a la sugestión.

RESUMEN

-El uso de la sugestión es totalmente inocuo, no se pueden agravar patologías, o hacer aflorar problemas
psicológicos “latentes”.

-La autosugestión es una técnica que nos mantiene de forma pasajera en un estado de sugestionabilidad,
en el que por supuesto no podemos quedar “enganchados”.

-Los procedimientos sugestivos pertenecen al campo de la psicología científica, y son utilizados con fre-
cuencia por psicólogos y médicos como un complemento durante una intervención psicológica. Además de
utilizase también en ámbitos como la odontología y la cirugía… como herramienta para el control del dolor.

-Una persona puede estar sugestionada y comportarse de un modo normal. No es necesario que se en-
cuentre excesivamente relajada, y por supuesto la persona sugestionada no está en una especie de sueño
con cualidades especiales.

-Las personas se mantienen totalmente conscientes y no pierden el control durante los procedimientos
sugestivos. Una persona sugestionada no hará nada que no haría en cualquier otra situación o contexto.

-La sugestión no provoca reacciones inusuales, excepcionales o cuasi mágicas en las personas. La mayor
parte de las experiencias que se viven a través de la autosugestión son totalmente habituales, la diferencia
radica en la percepción de automatismo de las respuestas que los sujetos dan cuando se les sugestiona.

ESCUELADELAMEMORIA.COM
-Los procedimientos sugestivos no son una terapia en sí misma, se utilizan como una herramienta com-
plementaria a otras estrategias de intervención.

-La autosugestión exige un esfuerzo y en muchos casos un entrenamiento por parte del que la practica,
para poder utilizarla de forma eficaz.

-La mayoría de personas pueden beneficiarse de su práctica, no es necesario que tengan un nivel de su-
gestionabilidad demasiado alto.

La falta de eficacia de los procesos auto-sugestivos tiene mucho que ver con las interferencias o blo-
queos de las personas, que en la mayoría de los casos son consecuencia de las creencias falsas y de los
mitos aquí expuestos.

ESCUELADELAMEMORIA.COM
escueladelamemoria.com

Você também pode gostar