K arina Mondaca

Fonoaudióloga

CONSENTIMIENTO INFORMADO

¿Qué es el tapón de cerumen?

El cerumen es un conjunto de productos de descamación, secreciones sebáceas y secreciones de las

glándulas ceruminosas que se encuentran en el tercio externo del conducto auditivo externo (CAE).
El cerumen actúa como vehículo para alejar desechos y contaminantes de la membrana timpánica,
lubrifica la epidermis y facilita el paso del sonido hacia el oído medio.
El oído tiene mecanismos de autolimpieza que producen una lenta migración de los restos de piel y
de la cera hacia el exterior, por lo tanto en circunstancias ideales no debería ser necesario limpiar los
oídos.
La presencia de cera en la parte más interna del conducto auditivo, se suele deber a maniobras o
manipulaciones realizadas por el propio individuo, como es el uso inadecuado de bastoncillos de
algodón u otros, que además de ser normalmente inútiles para la extracción del cerumen, hacen que
éste se introduzca aún más en el oído y en ocasiones produzca un impacto contra la membrana
timpánica provocando una lesión en ella.

Síntoma
La manifestación clínica más frecuente del tapón de cerumen es una sordera brusca o gradual,
generalmente después de un baño, no dolorosa, con autofonía (escucharse a sí mismo) y sensación
de obstrucción en el oído. El tapón va creciendo lentamente hasta que obstruye por completo el
conducto auditivo y se produce la disminución de la audición.
Pueden haber otros síntomas como tinnitus, otalgia, sensación de inestabilidad, vértigo o incluso tos,
sobre todo si el tapón es muy grande y contacta con el tímpano.

Indicación

Cuando se percibe una obstrucción de la audición, es necesario realizar una evaluación del conducto
auditivo externo a través de la otoscopía para cerciorar que tal obstrucción corresponde a un tapón
de cerumen. Además es importante realizar las preguntas indagatorias para reconocer si el usuario
es candidato o no a un lavado de oído.

Procedimiento
El usuario sostendrá el recipiente captador de agua, mientras la fonoaudióloga impulsa con energía
el agua tibia al conducto auditivo externo. El agua saldrá con gran impulso de modo que el tapón se
irá soltando hasta que éste se desprenda y caiga. El procedimiento se suspenderá en caso de dolor. Si
posterior a 3 emboladas el tapón no se desprende, convendrá suspender y realizar el trabajo dos días
después, durante este periodo el usuario deberá aplicarse 2 gotas de glicerina carbonatada tres
veces al día, de esta manera el tapón se remojará y soltará más fácilmente al momento de realizar el
procedimiento.
Contraindicaciones

El lavado de oído no se realizará si el usuario presenta diabetes, otitis en los últimos 3 meses o
antecedentes de otitis crónica, heridas en el CAE, perforación timpánica, otorrea en los últimos 3
meses, cirugía del oído, fisura palatina (intervenida o no), otalgia (dolor de oído), cuadros de resfrío
en el último mes, ingesta de antibióticos en los últimos 15 días, ingesta de alcohol 12 horas antes del
procedimiento, usuario confuso o agitado, miedo a la manipulación del oído; siendo recomendado
en estos casos la utilización de instrumentos especiales bajo visión microscópica.

Efectos secundarios
Durante o posterior al procedimiento podría presentar con cierta incidencia: mareos, náuseas o
dolor; mientras que con menor incidencia: vómitos o vértigo; y de manera excepcional: perforación
timpánica, infección, trastornos del equilibrio o sangrado.

Ventajas
La extracción mediante el método tradicional (chorro de agua) es un procedimiento corto y de bajo
costo, presentando un alivio rápido al molesto “oído tapado”.

Recomendaciones
Posterior al lavado, el oído sin cerumen queda expuesto drásticamente al ambiente, por ello se
recomienda dejar puesto en la parte más externa del oído un trocito de algodón por al menos 12
horas y proteger frente a cambios bruscos de temperatura.
La limpieza del oído es ideal realizarla posterior a la ducha. Se envolverá el dedo meñique en un
pañuelo desechable limpio, así se limpiará la oreja y el conducto sólo hasta donde haya alcance, es
decir, no más de medio centímetro.

DECLARACIÓN Y FIRMA

Con fecha: _____________________________

Yo ________________________________________________________ RUT: _____________-___

He leído completamente este consentimiento informado, he comprendido el
procedimiento, los riesgos y beneficios descritos anteriormente, así autorizo al profesional
Fonoaudiólogo/a___________________________, RUT: __________-__ a realizarme el
procedimiento de lavado de oído.
Además certifico que he leído y firmado este consentimiento en pleno uso de mis facultades y no
encontrándome bajo medicación alguna.

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Firma