1: EL DESCUBRIMIENTO DE NEPTUNO.
Las begonias del doctor Bloom
Este planeta se descubrió en el año 1848 cuando los astrónomos de
diversos observatorios trataron de explicar las anomalías en la órbita del
planeta Urano respecto a la órbita prevista por las leyes de Newton. Estas
diferencias eran tan grandes que se supuso que no eran debidas a errores de
cálculo o medición.
Los astrónomos comenzaron a pensar que o bien las leyes de Newton
estaban equivocadas o había otro planeta hasta ahora desconocido cuya
fuerza gravitacional modificaba la órbita esperada de Urano.
Alrededor de 1840 los astrónomos J.C. Adams y Le Verrier calcularon las
posiciones que debería ocupar este supuesto planeta basándose en la órbita
de Urano y suponiendo que este nuevo planeta cumplía las leyes de la
mecánica newtoniana.
Se calculó que el supuesto planeta podría a observarse desde con el
telescopio del observatorio XYZ el día 15 de noviembre a las 02.00 h a.m
cerca de la estrella de Sirio. Se encontró el planeta al que se le llamó
Neptuno.
2: EL SUPUESTO PLANETA X.
En el año 1972 se supuso la existencia de un planeta que sería el número
10 del sistema solar a causa de su distancia al Sol. Se supuso que este
planeta debía de existir para poder explicar las desviaciones de las órbitas
del cometa Halley y de los planetas Neptuno y Plutón. Se calculó que para
alterar las órbitas de la manera que parecía hacerlo su masa debía ser
aproximadamente tres veces la de Saturno y su órbita de 500 años.
Cálculos adicionales daban la posición donde debía encontrarse el planeta:
el día 18 de noviembre de 1972 a la 05.09 a.m en la constelación de
Casiopea. No obstante ningún telescopio de los que colaboraron en la
investigación consiguió demostrar su existencia.
3.
El eminente botánico doctor Bloom estaba muy extrañado por las grandes
diferencias de crecimiento que mostraban las begonias que tenía en su
jardín. Año tras año, e independientemente de las condiciones
meteorológicas, había observado que aquellas que había plantado junto a la
casa de su vecina (la señora Armonía) eran mucho más altas y exuberantes
que aquellas que habían crecido al otro lado del jardín. Curiosamente su
encantadora vecina era una gran amante de la música, continuamente hacía
sonar sus discos de música clásica junto al jardín del doctor Bloom. Esto
último le hizo pensar al doctor que era la música lo que determinaba el
mayor crecimiento de las begonias cercanas a la vecina. Para asegurarse
ideó lo siguiente:
En dos secciones bien separadas de su invernadero plantó 106 ejemplares
de begonias ( 53 en un lado y 53 en otro) en la primera sección sonaba
continuamente música clásica, mientras que en la segunda no hacia sonar
nada. Curiosamente después de 206 días las primeras begonias eran
mucho más altas y frondosas que las de la segunda sección.
4.LA TRANSFERENCIA DE LA MEMORIA.
Durante los años 50 se pensaba que la memoria actuaba por el cambio y
almacenamiento de ciertos compuestos químicos en el cerebro,.Para probar
la hipótesis se diseñó el siguiente experimento:
Se enseñó a un grupo de ratas en cautividad a obtener leche cuando
apretaban una palanca situada al final de un laberinto. La media de tiempo
que tardaron en aprender esta conducta fue de 25 horas. Cuando ya habían
aprendido esta conducta se les estrajo sustancia química de su cerebro que
fue inyectada en otras ratas que no habían sido sometidas al proceso de
aprendizaje. Además se escogieron otros dos grupos de ratas a las que
tampoco se les había enseñado nada y se repitío entre estos dos grupos la
misma operación. Las ratas a las que se les inyectó la sustancia química
procedente de las que habían aprendido la conducta tardaron sólo tres
horas en aprender la conducta mientras que las del nuevo grupo 25.
5. LA ÓRBITA DE MERCURIO: Semmelweis razonó que la enfermedad podría disminuir de forma
Durante mucho tiempo la órbita del planeta Mercurio ha sido un enigma espectacular si los médicos se limpiaban las manos con una solución
para los astrónomos pues ésta no se ajusta a las predicciones hechas con de cal clorada antes de examinar a las parturientas. Tras esta
las leyes de Newton. Einstein aventuró que esto era debido a la influencia disposición la tasa de mortalidad se igualó entre las dos divisiones.
de la masa solar pues defendía que el Sol , con su masa, curvaba el espacio
cercano. La comunidad científica rechazó esta idea pues le pareció poco 7. LOS ORNITORRINCOS
menos que una alucinación.
“ Siempre me han interesado los ornitorríncos, especie curiosa ( ¿no
Sin embargo, el astrónomo Eddington creyó que si esta idea era cierta
entonces , durante un eclipse solar sería posible ver las estrellas situadas
es extraño que aunque son mamíferos son también ovíparos?) Pero
detrás del Sol, pues estás recorrerían una trayectoria curva alrededor de sobre la que, hasta ahora, no se había hecho ningún estudio
este astro. científico. Fue por ello por lo que solicité una beca al C.S.I.C con la
De tal manera, en 1919, durante un eclipse solar, desde el observatorio de que pude ir a australia a estudiar esta especie. Durante dos años y
Kartum fue posible observar la constelación de las Híades, que disponiendo de material de gran precisión ( microscopios, primáticos
precisamente en aquella época se sabía que estaban detrás del Sol y por lo y receptores de hormonas beta ) estuve estudiando en diferentes
tanto no podían observarse antes del experimento. ¿Quedaron confirmadas localidades de ese país varias parejas de este curioso animal. Como
las ideas de Einstein? fruto de esta investigación, y en la medida en que todas las parejas se
comportaron igual, puedo concluir que esta especie sólo se
6: LA FIEBRE PUERPERAL reproduce en épocas de lluvia y con luna llena, el resto del año el
macho y la hembra no se acercan el uno al otro.
Entre los años 1844 y 1848 la tasa de mortalidad a causa de la fiebre
puerperal en la División primera de la maternidad del Hospital General de
Viena era del 10% mientras que en la División Segunda era
aproximadamente el 2%. En esta última división las mujeres eran atendidas
por comadronas en lugar de médicos.
Durante dos años el doctor Ignaz Semmelweis intentó adivinar las causa de
estas diferencias. Un día uno de sus colegas se hizo un corte en un dedo
mientras con un bisturí al realizar una autopsia. Este colega murió poco
después presentando los mismos síntomas de la fiebre puerperal.
Semmelweis se preguntó si la enfermedad no estaría causada per algo que
existía en la “materia cadavérica” y que se transmitía a las parturientas
mediante las manos de los médicos que habían pasado antes por las
salas de autopsias.