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METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION

EN COMUNICACIÓN SOCIAL

Trabajo final Promoción 2009

“La entrevista en Profundidad.


Tres enfoques sobre la interacción discursiva”

Docente: Susana Frutos


Alumna: Ludmila Bauk

1
Metodología de la Investigación en Comunicación Social

“La entrevista en Profundidad.


Tres enfoques sobre la interacción discursiva”

“Hacer conscientes ciertos mecanismos que


hacen dolorosa e incluso intolerable la vida, no
significa neutralizarlos; sacar a la luz las
contradicciones no significa resolverlas. Empero,
por escéptico que uno sea respecto de la eficacia
social del mensaje sociológico, no es posible
considerar nulo el efecto que puede ejercer al
permitir a quienes sufren descubrir la posibilidad
de atribuir ese sufrimiento a causas sociales y
sentirse así disculpados; y al hacer conocer con
amplitud el origen social, colectivamente
ocultado, de la desdicha en todas sus formas,
incluidas las más íntimas y secretas. “
Pierre Bourdieu1

Introducción
La Entrevista en Profundidad se encuentra en el marco de los estudios de tipo cualitativo.
La idea de un registro o lectura de la vida social misma por parte de las personas resulta de interés como
punto de partida para pensar a la entrevista como práctica de relevancia en la investigación social.
En este trabajo se exponen tres teorías que desde distintos enfoques analizan la interacción entre dos
sujetos. Cada una de ellas, concibe a la comunicación de un modo particular, y por ende el objeto de
estudio que construye cada una es distinto.
Las teorías con las que se trabajará serán:
• La microsociología de Erving Goffman. En especial su libro “La presentación de la persona en
la vida cotidiana”

1
Pierre Bourdieu, en “La Miseria del Mundo”

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• La filosofía del lenguaje. Los aportes realizados por Mijail Bajtín a la comunicación y al
lenguaje humano.
• Los aportes de las teorías de la Comunicación no Verbal, realizados por Mark Knapp
Luego de describir las categorías más pertinentes de cada una de las teorías, se realiza una articulación
con una entrevista en profundidad realizada por Michel Pialoux a un “Obrero especializado delegado de
la CGT”, que se encuentra en el libro “La miseria del mundo”, dirigido por Pierre Bourdieu.

Desarrollo
1
En primer término, el trabajo se propone indagar desde el encuadre micro-sociológico propuesto por
Ervin Goffman en “La presentación de la persona en la vida cotidiana” a la Entrevista en Profundidad,
tomando un caso concreto: una entrevista realizada por Michel Pialoux que figura en el libro: La
Miseria del Mundo, dirigido por Pierre Bourdieu. En primer lugar, se realizará un recorrido por las
categorías que propone el autor que pueden servir de utilidad al objeto de este trabajo.
En el libro: “La presentación de la persona en la vida cotidiana”, Erving Goffman emplea la perspectiva
de la actuación o representación teatral, y por ende los principios de índole dramática para estudiar la
vida social. En particular, la manera en que el individuo se presenta y presenta su actividad ante otros,
en qué forma guía y controla la impresión que los otros se forman de él, y qué cosas puede y no puede
hacer mientras actúa ante ellos.
Esto es de una gran utilidad a la hora de poder conceptualizar las impresiones que se formula tanto el
entrevistado como el entrevistador de su interlocutor.
Aclarando que la metáfora teatral no se corresponde totalmente con la realidad, con la vida, pone de
manifiesto que en el teatro, los actores representan sus papeles ante un público: “En el escenario, el
actor se presenta, bajo la máscara de un personaje, ante los personajes proyectados por otros actores; el
público constituye un tercer partícipe de la interacción, un partícipe fundamental, que sin embargo no
estaría allí si la representación escénica fuese real. En la vida real estos tres participantes, se condensan
en dos: el papel que desempeña un individuo se ajusta a los papeles representados por los otros
individuos presentes, y sin embargo éstos también constituyen el público”2.
Continuando con la analogía teatral, crea una distinción entre dos regiones: la anterior o escenario y la
posterior o trasfondo escénico. Por región entiende todo lugar limitado hasta cierto punto, por barreras
impuestas a la percepción, las mismas varían según el grado de limitación y de acuerdo con los medios
de comunicación en los cuales aparecen dichas barreras. En el escenario, la actuación de un individuo
puede percibirse como un esfuerzo por aparentar que su actividad en la región mantiene y encarna
determinadas normas, a fin de no resultar irrespetuoso, irreverente o desacreditar la imagen que tienen
los otros de él. Por otro lado, en la región posterior, la impresión fomentada por la actuación es
2
goffman

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contradicha a sabiendas como algo natural. Es el lugar de reparación de los vestuarios, de la
escenografía y de la preparación de las futuras presentaciones. En esta región el actuante puede confiar
en que ningún miembro del auditorio se entrometa y por ende puede abandonar sus personajes.
Goffman parte de la base de que cuando una persona se muestra ante otros, intenta trasmitir una
determinada impresión de sí mismo. Esto lo realiza con el fin de poder influir en la definición de la
situación y de esta manera, lograr que los otros actúen voluntariamente de acuerdo con su plan.
“Cuando un individuo llega a la presencia de otros, estos tratan por lo común de adquirir información
acerca de él o de poner en juego la que ya poseen. Les interesará su status socioeconómico general, su
concepto de sí mismo, la actitud que tiene hacia ellos, su competencia, su integridad, etc. Aunque parte
de esta información parece ser buscada casi como un fin en sí, hay por lo general razones muy prácticas
para adquirirla. La información acerca del individuo ayuda a definir la situación, permitiendo a los otros
saber de antemano lo que él espera de ellos y lo que ellos pueden esperar de él. Así informados, los
otros sabrán como actuar a fin de obtener de él una respuesta determinada”3, afirma Goffman.
A continuación se presentan breves definiciones de las categorías que utiliza el autor a fin de poder
analizar la entrevista realizada por Michel Pialoux desde la perspectiva propuesta por el Erving
Goffman y poder dimensionar los aportes de la misma al análisis de la Entrevista en Profundidad.

I
La presentación de los Personajes y la definición de la Acción
Independientemente del objetivo que persigue el individuo y del motivo que le dicta su objetivo, será
parte de sus intereses controlar la conducta de otros, en especial el trato con el que le corresponden.
Este control se logra en gran parte influyendo en la definición de la situación que los otros vienen a
formular; y él puede influir en esta definición expresándose de modo de darles la clase de impresión
que habrá de llevarlos a actuar voluntariamente de acuerdo con su propio plan. De esta manera, cuando
un individuo se presenta ante otros, por lo general habrá una razón para que desenvuelva su actividad de
modo tal que transmita a los otros una impresión que a él le interesa transmitir.
Al enfatizar en que la definición inicial de la situación proyectada por un individuo tiende a
proporcionar un plan para la actividad cooperativa subsiguiente, no se debe pasar por alto que:
“(…) Cualquier definición proyectada de la situación tienen también un carácter moral particular (…).
La sociedad está organizada sobre el principio de que todo individuo que posee ciertas características
sociales tiene un derecho moral a esperar que otros lo valoren y lo traten de manera apropiada. En
conexión con este principio, hay un segundo, a saber: que un individuo que implícita o explícitamente
pretende tener ciertas características sociales deberá ser lo que en la realidad alega ser. (…) Los otros
descubren, pues, que el individuo les ha informado acerca de ello que “es”, y de lo que ellos deberían
ver en ese “es””4, describe Goffman. Se considera el componente expresivo de la vida social como una

3
Goffman
4
Goffman

4
fuente de impresiones dadas a otros, o recibidas por otros. La impresión, a su vez, es considerada como
una fuente de información acerca de hechos no manifiestos y como un medio a través del cual el
auditorio puede orientar sus respuestas al actuante sin tener que esperar que se hagan sentir todas las
consecuencias de las acciones de este último. Por lo tanto, la expresión es concebida en función del
papel comunicativo que desempeña en la interacción social, y no, por ejemplo, en función del papel de
consumación o de liberación de tensiones que podría tener para el sujeto que la pone de manifiesto.
En este sentido, la capacidad del individuo de producir impresiones juega un rol decisivo. “La
expresividad del individuo (y por lo tanto su capacidad para producir impresiones), parece involucrar
dos tipos radicalmente distintos de actividad significante: la expresión que da y la expresión que emana
de él. El primero incluye símbolos verbales (o sustitutos de estos) que confiesa usar y usa con el único
propósito de transmitir la información que él y los otros atribuyen a estos símbolos. Esta es la
comunicación en el sentido tradicional y limitado del término. El segundo comprende un amplio rango
de acciones. Que los otros pueden tratar como sintomáticas del actor, considerando probable que hayan
sido realizadas por razones ajenas a la información transmitida en esta forma. (…) Si se toma la
comunicación en ambos sentidos, el limitado y el general, se descubre, que cuando un individuo está en
presencia de otros, su actividad tendrá un carácter promisorio. Los otros descubrirán probablemente que
deben aceptar al individuo de buena fe, ofreciéndole, mientras se encuentre ante ellos, una justa
retribución a cambio de algo cuyo verdadero valor no será establecido hasta que él haya abandonado su
presencia. La seguridad que ellos justificadamente sienten al hacer inferencias sobre el individuo
variarán, como es natural, de acuerdo con factores tales como la cantidad de información que ya poseen
acerca de él; pero no hay cantidad alguna de pruebas pasadas que pueda obviar por completo la
necesidad de actuar sobre la base de inferencias”.
Para los presentes, muchas fuentes de información se vuelven accesibles y aparecen muchos portadores
(o vehículos de signos) para transmitir esta información. Si no están familiarizados con el individuo, los
observadores pueden recoger indicios de su conducta y aspecto que les permitirán aplicar su experiencia
previa con individuos aproximadamente similares al que tienen delante o, lo que es más importante,
aplicarle estereotipos que aún no han sido probados. Pueden confiar en lo que el individuo dice sobre sí
mismo o en las pruebas documentales que él proporciona acerca de quién es. Si conocen al individuo o
saben de él en virtud de experiencias previas a la interacción, pueden confiar en suposiciones sobre la
persistencia y generalidad de rasgos psicológicos como medio para predecir su conducta presente y
futura.

II
Actuaciones
Cuando un individuo desempeña un papel, solicita implícitamente a sus observadores que tomen en
serio la impresión promovida ante ellos. Se les pide que crean que el sujeto que ven posee en realidad
los atributos que aparenta poseer, que la tarea que realiza tendrá las consecuencias que en forma

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implícita pretende y que, en general, las cosas son como aparentan ser. Sería conveniente iniciar un
examen de las actuaciones invirtiendo el problema y observando la propia confianza del individuo en la
impresión de realidad que intenta engendrar en aquellos entre quienes se encuentra. Así encontramos
dos niveles de confianza:
1- SINCERO: El actuante puede creer por completo en sus propios actos, puede estar sinceramente
convencido de que la impresión de realidad que pone en escena es la verdadera realidad.
2- CINICO: El actuante puede no engañarse con su propia rutina. Al mismo tiempo el actuante puede
querer guiar la convicción de su público sólo como un medio para otros fines. El individuo no deposita
confianza en sus propios actos ni le interesan mayormente las creencias que de su público.
Estos dos tipos se presentan muchas veces mezclados.

Fachada
Parte de la actuación del individuo que funciona regularmente de un modo general y prefijado a fin de
definir la situación con respecto a aquellos que observan dicha actuación. La fachada es la dotación
expresiva de tipo corriente empleada intencional o inconcientemente por el individuo durante su
actuación.
Está compuesta por el Medio y por la Fachada Personal.
El medio o “setting” incluye el mobiliario, los decorados, los equipos, el escenario y la utilería para el
flujo de la acción humana.
La fachada personal comprende aquello que se debe identificar con el actuante mismo. Como parte de
la fachada personal se puede identificar las fachadas del cargo o rango, el vestido, el sexo, la edad, las
características raciales, el tamaño, el aspecto, el porte, las pautas del lenguaje, las expresiones faciales,
los gestos corporales y otras características semejantes. Es conveniente dividir los estímulos que
componen la fachada personal en apariencia y modales, de acuerdo con la función que desempeña la
información transmitida por estos estímulos.
Los estímulos que se incluyen en la “apariencia” funcionan en el momento de informarnos acerca del
status social del actuante y acerca del estado ritual temporario del mismo, es decir, si se está ocupando
de una actividad social formal, o informal, etcétera.
Los “modales” son aquellos estímulos que funcionan en el momento de advertirnos acerca del rol de
interacción que el actuante esperará desempeñar en la situación que se avecina.
A menudo esperamos una correspondencia entre la apariencia y los modales. Y también una
correspondencia entre medio, apariencia y modales.
Uno de los rasgos significativos de la información transmitida por la fachada es su carácter abstracto y
general. La fachada se convierte en una representación colectiva y en una realidad empírica por derecho
propio.
Pone un gran acento en todo como un signo que le intenta transmitir al otro una determinada situación,
todo está pensado para la interacción.

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Realización dramática
Mientras se encuentra en presencia de otros, por lo general, el individuo dota a su actividad de signos
que destacan y pintan hechos confirmativos que de otra manera podrían permanecer inadvertidos y
oscuros. Porque si la actividad del individuo ha de llegar a ser significante para otros, debe movilizarla
de manera que exprese durante la interacción lo que él desea transmitir.

Idealización
Una actuación presenta un enfoque idealizado de la situación.
Cuando el individuo se presenta ante otros, su actuación tenderá a incorporar y ejemplificar los valores
oficialmente acreditados de la sociedad, tanto más, en realidad, de lo que lo hace su conducta general.
Si un individuo ha de expresar estándares ideales durante su actuación, tendrá entonces que abstenerse
de la acción que no es compatible con ellos o encubrirla.
El actuante ocultará:
1- El lugar de trabajo y la actividad oficial llegan a ser una especie de cubierta que oculta la vida
emocional del actuante
2- Los errores y las equivocaciones se corrigen, con frecuencia, antes de que tenga lugar la actuación y
los signos delatores de que se han cometido y corregido son, a su vez, encubiertos. De este modo se
mantiene una impresión de infalibilidad, tan importante en muchas presentaciones.
En este punto es importante enfatizar en que el entrevistador debe tener cuidadosamente planeados
todos los detalles que comprenderán su actuación. Debe estar a tono con el entrevistado, conocer acerca
de él, así como también tener un plan ordenado y claro para llevar a cabo la entrevista. Planificar y
evitar todos los inconvenientes que puedan presentarse en la situación.
Los actuantes tienden a fomentar la impresión de que la actuación corriente de su rutina y su relación
con su auditorio habitual tienen algo de especial y único. Se oculta el carácter rutinario de la situación y
se acentúan los caracteres espontáneos de la misma.
En este punto es bueno aclarar que el entrevistador debe hacer un esfuerzo por mantener la atención en
la situación y no mostrarse desinteresado, ya que esto figuraría la representación de la situación que
ambos están proyectando.

El mantenimiento del control expresivo


El actuante debe hacer un esfuerzo en realizar un control sobre todas las expresiones que emite. El
punto clave no es que la efímera definición de la situación causada por un gesto impensado sea en sí
misma tan censurable, sino más bien que es diferente de la definición proyectada en forma oficial.
Se debe estar preparado para ver que la impresión de realidad fomentada por una actuación es algo
delicado, frágil, que puede ser destruido por accidentes muy pequeños.

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Tergiversación
Ya sea que un actuante honesto desee transmitir la verdad, o bien que un actuante deshonesto desee
transmitir una falsedad, ambos deben tener cuidado de colorear sus actuaciones con expresiones
apropiadas, excluir de ellas expresiones susceptibles de desacreditar la impresión fomentada y cuidar de
que el otro no le atribuya significaciones no pretendidas por el sujeto.

Mistificación
En la actuación de un individuo se acentúan algunos rasgos y se ocultan otros. Si consideramos a la
percepción como una forma de contacto y comunión, el control sobre lo que se percibe, es control sobre
el contacto que se hace, y la limitación y regulación de lo que se muestra es una limitación y regulación
del contacto.

Realidad y artificio
En nuestra cultura, hay dos distinciones del sentido común: lo verdadero de lo falso. “Si una actuación
ha de tener efecto, será bueno que los testigos, puedan creer que en todo sentido que los actuantes son
sinceros”, afirma Erving Goffman
Al aprender a desempeñar los roles en la vida cotidiana, se logra mantener, de forma no demasiado
conciente, una familiaridad incipiente con la rutina de aquellos a quienes se ha de dirigir.
Ser un tipo dado de persona no significa simplemente poseer los atributos requeridos, sino también
mantener las normas de conducta y apariencia que atribuye el grupo social al que se pertenece.
Un status, una posición, un lugar social no es algo material para ser poseído y luego exhibido; es una
pauta de conducta adecuada, coherente, embellecida y bien articulada. Es algo que debe ser
representado y retratado, algo que debe ser llevado a efecto.

Equipos
Sucede con frecuencia que la actuación sirve sobre todo para expresar las características de la tarea que
se realiza, y no las características del actuante.
Es más, sucede por lo general que la definición proyectada por un determinado participante integra una
proyección fomentada y sustentada por la cooperación íntima de más de un participante. Aquí ingresa la
categoría de “equipo” como: cualquier conjunto de individuos que cooperan a los fines de representar
una rutina determinada.
Si se tiene especial interés en el estudio del manejo de las impresiones, de las contingencias que surgen
al fomentar una impresión, y de las técnicas para hacer frente a esas contingencias, el equipo y la
actuación del equipo serían las unidades más adecuadas para tomarse en cuenta como punto de
referencia fundamental. Dado este punto de referencia, es posible asimilar las situaciones tales como la
interacción bipersonal dentro del marco, describiendo estas situaciones como una interacción de dos
equipos, en la cual cada equipo está compuesto por un solo miembro.

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Cuando el actuante guía su actividad privada de acuerdo con normas éticas incorporadas, puede asociar
estas normas con algún tipo de grupo de referencia, creando de ese modo un auditorio no presente para
su actividad. Esto nos permite que un equipo pueda actuar para un auditorio que no está presente en
carne y hueso para observar la representación.
El objetivo del actuante es sustentar una definición particular de la situación, definición que representa,
por así decirlo, lo que el actuante reivindica como realidad.
PAPELES: Dar a cada miembro la información sobre la posición que este deberá realizar, el papel que
deberá asumir para que pueda ser capaz de presentar un “si mismo” ante el auditorio.
INTERACCION DRAMATICA: No es acción dramática, sino interacción, considerada como una
suerte de diálogo y acción recíproca entre dos equipos. Importancia del medio y quien controla el medio
para realizar la actuación.
Existen dos tipos de predominios, el dramático (desempeña en ella el papel dramático más prominente)
y el directivo (establece el ritmo y la dirección que seguirán ambos equipos en su diálogo
interaccional). En la entrevista quien tiene el predominio directivo en cierta forma es el entrevistador,
mas el predominio dramático corresponde al entrevistado.

Las regiones y la Conducta


Una región puede ser definida como todo lugar limitado hasta cierto punto, por barreras antepuestas a la
percepción. Las regiones varían, naturalmente, según el grado de limitación y de acuerdo con los
medios de comunicación en los cuales aparecen dichas barreras.
Como se enunciaba anteriormente, existen dos regiones: anterior (donde se desarrolla la actuación) y
posterior. Es importante destacar que los secretos vitales del espectáculo son visibles desde el trasfondo
escénico y que mientras permanecen allí los actuantes abandonan sus personajes
Para cada rutina se corresponde un auditorio que es conveniente que se mantenga separado del resto,
Por ejemplo, el obrero prefiere que la entrevista sea en su casa, que es un lugar íntimo en donde puede
hablar con total franqueza y no en el campo de fútbol delante de todos sus compañeros. En su casa, él
conoce al auditorio y puede expresarse con comodidad y soltura, no así en el campo.
Esto se relaciona con la idea de roles discrepantes, que se expone a continuación.

III
Comunicación Impropia
Cuando dos equipos se presentan el uno ante el otro con fines de interacción, los miembros de cada uno
tienden a mantener una línea de conducta que demuestre que son lo que pretenden ser; tienden en una
palabra, a permanecer dentro de su personaje.
En la interacción, cada participante se esfuerza comúnmente por conocer y conservar su lugar,
manteniendo todo el equilibrio de formalidad e informalidad que haya sido establecido para la
interacción. A la vez cada equipo tiende a ocultar su punto de vista sincero acerca de sí mismo y del

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otro equipo, proyectando una imagen sí mismo y del otro relativamente aceptable para este último.
Y para asegurarse de que la comunicación seguirá canales limitados y preestablecidos, cada equipo
estará dispuesto a ayudar al otro, tácitamente y con tacto, a fin de que mantenga la impresión que trata
de producir.
Goffman establece cuatro tipos de comunicación que transmiten información incompatible con la
impresión mantenida oficialmente durante la interacción:
-El tratamiento de los ausentes
-Las conversaciones sobre la puesta en escena
-La connivencia del equipo
-El realineamiento de las acciones
Cada uno de estos tipos de comunicación dirige su atención al mismo punto: la actuación ofrecida por
el equipo no es una respuesta inmediata y espontánea a la situación.
El tratamiento de los ausentes:
Cuando los actuantes pasan al trasfondo escénico y detractan a los integrantes del auditorio. Dentro de
este tipo de calumnias se pueden distinguir: la representación de su rol en torno de burla y el uso de
términos de referencia ofensivos o poco halagüeños.
Por ejemplo: en el lugar de la cita el entrevistador está hablando por celular con un colega sobre la
entrevista que realizará en breve e imita en tono burlón alguna expresión del entrevistado, o
simplemente lo llama ofensivamente como por ejemplo: “ese gordito retacón”. Si el entrevistado
escucha eso, la imagen que el tiene de la situación y del entrevistador posiblemente mute
drásticamente.
Conversaciones sobre la puesta en escena:
Cuando los miembros del auditorio no están presentes la conversación gira en torno a los problemas de
la puesta en escena. Se plantean cuestiones acerca del carácter de la dotación de signos; los miembros
reunidos sacan a la luz y esclarecen las actitudes, líneas de conducta y posiciones; analizan los méritos e
inconvenientes de las regiones anteriores disponibles, etcétera.
Por ejemplo: el entrevistador acude a un colega amigo, o si es un estudiante realizando su tesina,
acude con su director de tesis, o en el caso de un investigador acude con su tutor. Realizan un análisis
de cómo fue la interacción con el entrevistado, los puntos fuertes y los débiles del encuentro, los
momentos bien aprovechados, aquellos que no lo estuvieron tanto y se analizan nuevas formas
mejoradas de abordar la situación. El obrero charla con sus colegas acerca de lo que piensan del
investigador, y de qué se supone que tiene que hacer en la entrevista, etc.
Connivencia del equipo:
Cuando un participante transmite algo durante la interacción, esperamos que se comunique sólo a través
de las palabras del personaje que ha elegido proyectar, dirigiendo abiertamente todas sus observaciones
para la interacción total, de suerte que todos los presentes tendrán el mismo status como receptores de la
comunicación.

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Si se llega a reconocer que se oculta a los demás miembros del auditorio secretos pertinentes, se cae la
apariencia de sinceridad y se pone de manifiesto el carácter representativo de la actuación.
El realineamiento de las acciones:
Dos equipos establecen un consenso oficial de trabajo como garantía para una interacción social segura,
pero no obstante se puede detectar una línea extraoficial de comunicación que cada equipo dirige hacia
el otro.
La tendencia más común de comunicación oculta es tal vez aquella en que cada equipo se coloca
sutilmente en una posición favorable y coloca con sutileza al otro equipo en una posición desfavorable,
a menudo bajo la apariencia de cortesías y cumplidos verbales que apuntan en dirección contraria. Los
equipos suelen, pues, resentir el control que se ejerce sobre ellos en el consenso de trabajo. Es
interesante observar que son estas fuerzas encubiertas de auto-evaluación y denigración de los otros las
que introducen a menudo una lamentable rigidez compulsiva en las interacciones sociales.
Es importante que el entrevistador no motive este tipo de comunicaciones ocultas y en caso de que el
entrevistado lo intente hacer encontrar la manera de salir de este juego de subestimación y sobre-
valoración falsa. En una entrevista no debe existir competencia entre los actores que intervienen. Si la
situación está bien planteada sólo hay un protagonista dramático (el entrevistado) y un protagonista que
dirige (el entrevistador). El entrevistador no debe prejuzgar (o debe fingir que no tiene prejuicios) al
discurso, y a la persona mientras están en la situación de entrevista. Si el entrevistado busca denigrar la
profesión del entrevistador o su persona ya sea por su edad, su color de piel, o por cualquier motivo, el
mismo debe buscar una estrategia para esquivar estos comentarios y reforzar la situación que está
intentando proyectar.

IV
El arte de manejar las impresiones
Existen ciertos tipos de disrupciones a las que las técnicas de manejo de las impresiones tienden a
controlar. Para poder llevar adelante un manejo satisfactorio de las impresiones, el actuante debe tener
ciertos atributos que le permiten realizar en forma satisfactoria la puesta en escena de su personaje.
El actuante deberá manejarse con: responsabilidad expresiva, puesto que existen los “gestos
impensados” (actos menores, accidentales e inadvertidos), que suelen ser vehículos destinados a
transmitir impresiones inadecuadas para ese momento. El individuo que ha sido responsable de un gesto
impensado puede desacreditar con ello su propia actuación, la actuación del equipo, o la que es
escenificada por el auditorio. Estas disrupciones podrían ser evitadas si el individuo responsable de
introducirlas en la interacción conociera de antemano las consecuencias de su actividad.
Cuando se produce un incidente, éste amenaza la realidad propuesta por los actuantes. Es probable que
los presentes reaccionen sintiéndose confundidos, incómodos, molestos, nerviosos, desconcertados.
Cuando el auditorio percibe estos síntomas de confusión e incomodidad, la realidad sustentada por la
actuación corre el peligro de debilitarse y comprometerse aún más, porque en la mayoría de los casos

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esos signos de nerviosismo son un aspecto del individuo que representa un personaje, y no un aspecto
del personaje proyectado por él, imponiendo así al auditorio una imagen del hombre detrás de la
máscara.
A continuación citamos algunos de las disrupciones más comunes:
• Intrusiones inoportunas
• Gestos impensados: cuando el actuante introduce afirmaciones verbales intencionales o actos
no verbales cuya plena significación no es apreciada por él mismo y destruye la imagen que de
él mismo proyecta el otro equipo.
• Pasos en falso: cuando un actuante hace un aporte que sin pensarlo destruye la imagen de su
propio equipo.
• Escenas: situaciones en las que un individuo actúa de modo de destruir o amenazar seriamente
la cortés apariencia de consenso, y si bien es posible que no actúe simplemente con el fin de
crear esa situación disonante, lo hace sabiendo que es probable que surja dicha disonancia.
A fin de impedir la ocurrencia de incidentes y la consiguiente perturbación, será necesario que todos los
que participan en la interacción, así como los que no participan, posean ciertos atributos y los expresen
en prácticas empleadas para salvar la representación.
A continuación, se presentan estos atributos y prácticas: las “medidas defensivas” utilizadas por los
actuantes para salvar su propia representación; las “medidas protectoras” empleadas por el auditorio y
los extraños para ayudar a los actuantes a salvar su propia representación y por último, las “medidas
que deben tomar los actuantes” a fin de hacer posible que el auditorio y los extraños empleen medidas
protectoras en defensa o interés de los primeros.

Prácticas y atributos defensivos


Lealtad dramática
Si un equipo quiere sustentar la línea de conducta que ha adoptado, sus miembros deberán actuar como
si hubieran aceptado ciertas obligaciones morales. Por otro lado, los miembros del equipo deben estar
convencidos de su actuación, deben creer en ella en el grado necesario para que no suene a falsa y vacía
ante el auditorio.
Disciplina dramática
El actuante disciplinado es aquel que recuerda su parte y no hace gestos impensados ni da pasos en
falso durante la actuación. Es un hombre prudente, que no traiciona a la representación revelando de
manera involuntaria sus secretos. Es un hombre que posee “presencia de ánimo”, capaz de encubrir en
forma instantánea la conducta inadecuada de sus compañeros de equipo, mientras que en todo momento
sigue dando la impresión de que no hace nada más que desempeñar su papel. Y, si no es posible evitar u
ocultar una disrupción de la actuación, el actuante disciplinado estará listo para ofrecer una razón
plausible que permita subestimar el hecho disruptivo, un comentario jocoso para restarle toda
importancia o una humilde disculpa unida al auto-reconocimiento de la falta para rehabilitar a los

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verdaderos responsables de la disrupción. El actuante disciplinado es un hombre con “autocontrol”,
capaz de reprimir su respuesta emocional ante sus problemas personales, ante sus compañeros de
equipo cuando estos cometen errores, y ante los miembros del auditorio cuando suscitan en él
hostilidad o sentimientos adversos. Y es capaz de abstenerse de reír acerca de asuntos que se consideran
serios, y abstenerse de tomar en serio asuntos que se consideran humorísticos. Es capaz de reprimir sus
sentimientos espontáneos a fin de dar la impresión de que se atiene a los lineamientos afectivos, al statu
quo expresivo, establecido por la actuación de su equipo, ya que la exhibición de sentimientos
proscriptos puede no sólo conducir a agravios y revelaciones impropias para el consenso de trabajo sino
que puede otorgar implícitamente al auditorio el status de miembro del equipo. Quizás el foco de la
disciplina dramática se encuentre en el manejo del rostro y de la voz. Esta es la prueba crucial de la
capacidad el individuo como actuante. Resulta indispensable que oculte la respuesta afectiva verdadera
y exhiba la respuesta afectiva apropiada.
Circunspección dramática
Es necesario que los actuantes al escenificar la representación actúen con prudencia y circunspección,
preparándose de antemano para todas las contingencias posibles y explorando las posibilidades que se
presentan.
Además de tener en cuenta lo que puede ser visto por los espectadores, el actuante también tendrá que
considerar la información que el auditorio ya posee acerca de su propia persona. Cuanto mayor sea la
información que el auditorio posee sobre el actuante, menor será la probabilidad de dejarse influir por
algo que llegue a saber durante la interacción. Por otro lado, el actuante circunspecto tendrá que tomar
en cuenta el acceso que tiene el auditorio a las fuentes de información exteriores a la propia interacción.
Si las fuentes de información externas a la interacción, construyen una contingencia que el actuante
circunspecto debe tomar en cuenta, las fuentes de información internas respecto de la interacción,
constituyen otra contingencia. El actuante circunspecto tendrá entonces que ajustar su presentación de
acuerdo con el carácter de la utilería y de las tareas sobre las cuales debe basar su actuación.
El actuante tendrá que prestar mucha atención a su conducta en situaciones en que esta puede tener
consecuencias importantes.
Es necesario tratar que la impresión dada coincida con la impresión adecuada.

Prácticas Protectoras
Tres son los atributos que debe poseer un actuante para que la actuación se desarrolle con toda
seguridad: lealtad, disciplina y circunspección. Cada una de estas cualidades está expresada en muchas
técnicas defensivas corrientes a través de la cuales el actuante puede proteger su propia representación.
La mayoría de las técnicas defensivas de manejo de las impresiones tienen una contraparte en la
tendencia cauta del auditorio y los extraños a actuar en forma protectora para ayudar a los actuantes en
salvaguardia de su propia representación. Suele subestimarse el hecho de que los actuantes dependen
del “tacto” del auditorio y de los extraños.

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Goffman presenta algunas técnicas de protección, a continuación citadas:
• Tacto del auditorio: Los extraños cuando se percatan de que están por ingresar a una región a la
que no han sido invitados, hacen saber su presencia a través de alguna señal, esta técnica
también es llamada discreción.
• Reglas de protocolo relativas a la indiferencia, unidas al tacto como forma de comportarse ante
los demás y el aislamiento eficaz que este comportamiento proporciona.
• Etiqueta elaborada mediante la cual los individuos guían su propia conducta en calidad de
miembros del auditorio. Esto incluye lo siguiente: mostrar un grado adecuado de atención e
interés; estar dispuestos a controlar sus propias actuaciones a fin de no introducir demasiadas
contradicciones, interrupciones o exigencias de atención; impedir todos los actos y expresiones
que puedan conducir a pasos en falso; y por sobre todas las cosas, el deseo de evitar una escena.
Cuando el actuante comete algún desliz, poniendo de manifiesto una clara discrepancia entre la
impresión suscitada y la realidad revelada, el actuante, con todo tacto podrá “no ver” el desliz,
o aceptar de buena gana la excusa ofrecida para explicarlo. Y, en momentos de crisis para el
actuante, el auditorio puede entrar en connivencia tácita con él para ayudarlos a pasar ese mal
momento.
• Siempre que el actuante obre con tacto surgirá la posibilidad de que el auditorio se de cuenta de
que es protegido discretamente. Cuando esto ocurre, surge la posibilidad de que el actuante
advierta que el auditorio advierta que está siendo protegido discretamente. Y entonces resulta
posible a su vez, que el auditorio advierta que el actuante está enterado de que el auditorio sabe
que está protegido. Ahora bien, cuando existen tales niveles de información, puede llegar un
momento, durante la interacción, en que el estado de separación de los equipos se desmorone y
sea reemplazado momentáneamente por una comunión de miradas a través de las cuales, cada
equipo advierte admite abiertamente al otro su nivel de información. En estos momentos queda
al desnudo en forma vívida y repentina, toda la estructura dramática de la interacción social, y
la línea que separa a los equipos desaparece temporalmente. Sea que esta visión íntima del
panorama escénico provoque risa o vergüenza, los equipos suelen reintegrarse rápidamente a
los personajes que les fueron asignados.

El tacto con relación al tacto


Cuando el actuante obra con tacto, está utilizando técnicas protectoras en defensa del auditorio,
contribuye en medida significativa al mantenimiento de la representación. Es evidente que si el actuante
obra con tacto en bien del auditorio, éste debe actuar de modo de posibilitar la prestación de esa ayuda.
Esto exigirá disciplina y circunspección pero de un orden especial.
Dos estrategias generales del tacto con relación al tacto:

14
1- El actuante debe ser sensible a las insinuaciones y estar pronto para captarlas, porque a través
de ellas el auditorio puede advertirle que su representación es inaceptable y que será mejor que
la modifique rápidamente si quiere salvaguardar la situación.
2- Si el actuante se propone tergiversar los hechos de alguna manera, debe hacerlo de acuerdo con
las reglas y ceremonias que rigen la tergiversación; no debe quedar en una posición de la cual
no pueda zafarse ni siquiera con la disculpa más débil.

V
El marco de referencia
Un establecimiento social es todo lugar rodeado de barreras establecidas para la percepción, en el cual
se desarrolla de modo regular un tipo determinado de actividad.
Dentro de los muros de un establecimiento encontramos a un equipo de actuantes que cooperan para
presentar al auditorio una definición dada de la situación. Esta incluirá la concepción del propio equipo
y del auditorio, y los supuestos concernientes a los rasgos distintivos que han de mantenerse mediante
reglas de cortesía y decoro. Observamos a menudo dos regiones: la región posterior, donde se prepara la
actuación de una rutina y la región anterior, donde se ofrece la actuación. El acceso a estas regiones se
haya controlado a fin de impedir que el auditorio pueda divisar el trasfondo escénico y que los extraños
puedan asistir a una representación que no les está destinada.
Vemos que entre los miembros del equipo prevalecerá una relación de familiaridad, suele desarrollarse
un espíritu de solidaridad y los secretos que podrían desbaratar la representación son compartidos y
guardados. Entre los actuantes y el auditorio se establece un convenio tácito para actuar como si
existiese entre ambos equipos un grado determinado de oposición y de acuerdo. En general, pero no
siempre, se acentúa el acuerdo y se minimiza la oposición. El consenso de trabajo resultante suele a ser
contradicho por la actitud que asumen los actuantes hacia el auditorio cuando el auditorio no está
presente, y por la comunicación impropia cuidadosamente controlada que los actuantes transmiten
mientras el auditorio está presente. Advertimos que se ponen de manifiesto roles discrepantes: algunos
de los individuos que son aparentemente miembros del equipo de actuantes o del auditorio –o extraños-
obtienen información acerca de la actuación, y aún de las relaciones del equipo que no se manifiestan y
que complican el problema de la puesta en escena de la representación.
A veces se producen disrupciones a través de gestos impensados, pasos en falso y escenas, con lo cual
se desacredita o contradice la definición de la situación que se quiere mantener. Los actuantes, el
auditorio y los extraños aplican técnicas para salvaguardar la representación, ya sea tratando de evitar
ciertas disrupciones, subsanando las inevitables o posibilitando que otros lo hagan. Para asegurar el
empleo de estas técnicas, el equipo tenderá a elegir miembros leales, disciplinados y circunspectos, y un
auditorio que se comporte con tacto.
Estos rasgos y elementos constituyen el marco de referencia característico de gran parte de las
interacciones que se desarrollan en los medios naturales de la sociedad.

15
Aplicación:
A modo ejemplificador, se utilizarán algunas de las categorías propuesta por Goffman para analizar la
entrevista realizada por Michel Pialoux a un Obrero especializado delegado de la CGT.
Comenzaremos distinguiendo los escenarios en donde se producen las interacciones que se presentan en
esta entrevista: el campo de juego en un día festivo; la casa de Hamid; la fábrica Peugeot; las marchas
de los obreros, la huelga de 1989.
Los dos escenarios en donde se desarrolla la interacción son: el campo de juego y la casa privada de
Hamid.
Cada escenario impone un marco y ciertos límites a la interacción que allí se produce, una manera de
comportarse, y las cosas que pueden y no pueden hacerse y los motivos de la interacción que se da allí.
En el campo de juego, están presentes muchos compañeros de Hamid de la fábrica, es un lugar en
donde la situación predominante es aquella que se relaciona con las actividades recreativas, el juego y
la diversión. Por otro lado, son todos obreros afiliados al sindicato por lo que cada uno tiene una imagen
familiar de los compañeros que están allí presentes. En este contexto un compañero de Hamid y
conocido de Michel los presenta y sienta las primeras bases de lo que va a ser la entrevista, es decir, la
actuación que ejecutarán ambos. En este contexto tienen una charla amena, pasajera en donde el
investigador le cuenta brevemente el objetivo de la entrevista.
El próximo encuentro será en la casa para realizar la entrevista.
Pero antes vamos a analizar el proceso de construcción de la imagen del entrevistador que se le presenta
a Hamid. No le es una persona desconocida, puesto que hace más de dos años que está yendo a la
fábrica y ha estado cerca de los conflictos obreros que allí se desatan, es decir que lo ha visto en la
fábrica y también en las huelgas y en las marchas. Por otra parte sus colegas, le brindan información
sobre él. El hecho de que tenga acceso a la fiesta de los obreros ya pone de manifiesto cierta
familiaridad y cercanía, además sus compañeros lo presentan como alguien de confianza.
Por ende, el encuentro en la casa es la prolongación casi inevitable de una serie de encuentros, no son
desconocidos por más que sea la primera vez que vayan a hablar.
Respecto a la imagen que tiene Michel de Hamid, se puede reconstruir los momentos en los que: lo
observaba en las marchas y en las huelgas de los obreros, la información que obtuvo de él de registros
audiovisuales caseros, de documentales y de programas de televisión (el investigador aclara que
siempre es buscado para hablar porque “no tiene pelos en la lengua”), por otro lado, las personas a las
que les preguntaba por los conflictos de los obreros inmigrantes en las fábricas, siempre le sugerían que
hablara con Hamid. Ha averiguado que Hamid tiene peso en el sindicato y que es uno de los pocos
delegados que puede decirse que son portavoces. También sabe que trabaja en Montbaliard desde hace
20 años y en la planta se Sochaux hace 15.

16
Vemos que en ambos casos, el hecho de que el investigador haya estado involucrado desde hace tiempo
con la problemática y, por otro lado, el medio social que los relaciona juega un papel importante a la
hora de la construcción de las impresiones del otro.
La preparación de la actuación:
Para hacer un primer contacto con Hamid, el investigador lo llama tres días antes para arreglar una cita
en el campo de juego. Una vez en el campo, espera que los presenten otras personas que los conozcan a
los dos de modo de poder establecer una relación más familiar y no comportarse bruscamente.
Los equipos:
Podemos diferenciar dos equipos compuestos por una sola persona: el equipo del obrero y el equipo del
investigador. Ambos están arraigados a grupos mayores que le imponen pautas de acción, pautas
morales, etcétera. El obrero, esta integrado a su grupo de trabajo y a su sindicato así como el
investigador pertenece a la comunidad de cientistas sociales de Francia.

2
2
¿Qué implicaciones tiene pensar a la Entrevista en Profundidad como género discursivo?
¿Por qué pensarla como género discursivo y no como una realización de la lengua?
A partir de estas dos preguntas, se puede comenzar a indagar en este enfoque sobre la entrevista en
profundidad.
En primer lugar, pensar la entrevista como una realización de la lengua, como una manifestación del
habla, remite a la teoría de la lengua Saussure. Este enfoque no permite realizar un estudio
verdaderamente significativo de la capacidad humana de comunicación ni de las características de esa
comunicación ya que: la noción de lengua como sistema normativo, sólo permite el estudio de las reglas
y códigos de un sistema abstracto artificialmente construido, los principios de arbitrariedad y
convencionalidad sólo permite analizar la lógica interna de los signos entre sí, pero no las motivaciones
externas que hacen que ese signo posea una significación determinada en un momento determinado,
reduciendo el lenguaje a un código o un sistema de signos artificial como el matemático.
En este sentido, la Filosofía del Lenguaje realiza un gran aporte a la conceptualización de la
comunicación humana y del lenguaje, superando la diferenciación entre habla y lengua propuesta por
Saussure. “La esencia del lenguaje es ser social y su función es comunicar sentidos”, afirmará esta
corriente.
Desde esta perspectiva, se abordará a la Entrevista en Profundidad. Para esto, se tomarán algunos
conceptos claves de estas teorías.

La entrevista como género discursivo:


La definición de la entrevista como género discursivo, abordará en primer lugar la situación
comunicativa, regida por el intercambio dialógico, sus participantes, su vecindad con la conversación

17
cotidiana, los usos del lenguaje, sus infracciones, lo que de previsible y de imprevisible tiene ese juego
intersubjetivo de la verdad.
Pensar la entrevista como género discursivo es atender a la situación comunicativa, sus interlocutores,
el “pacto de cooperación” que se establece entre ellos, sus reglas y sus infracciones. Pero también es
considerar los sentidos de esa interacción, los sistemas de valoración del mundo que se ponen en juego,
las relaciones con otras formas discursivas, el modo en que se articula con el contexto sociocultural.
La noción de género discursivo, da cuenta de las prácticas sociales que se juegan en cada esfera de la
comunicación, sin pretensión normativa o clasificatoria. La atención es desplazada de las reglas
formales a la multiplicidad de los usos de la lengua, los contextos y los usuarios o enunciadores.
Mijail Bajtín afirma: “Una función determinada (científica, técnica, periodística, oficial, cotidiana,
etcétera) y unas condiciones determinadas, específicas para cada esfera de la comunicación discursiva,
generan determinados géneros, es decir, unos tipos temáticos, composicionales y estilísticos de
enunciados determinados y relativamente estables.”5

El funcionamiento del lenguaje en la entrevista nos remite a formas de las cuales tenemos una
experiencia cotidiana: el diálogo, la conversación. Sin embargo, no se puede pensar a la Entrevista en
Profundidad como un género discursivo primario.
“Los géneros discursivos secundarios (complejos)- a saber novelas, dramas, investigaciones científicas
de toda clase, grandes géneros periodísticos, etc.- surgen en condiciones de la comunicación cultural
más compleja, relativamente más desarrollada y organizada, principalmente escrita: comunicación
artística, sociopolítica, científica, etc. En el proceso de su formación estos géneros absorben y
reelaboran diversos géneros primarios constituidos en la comunicación discursiva inmediata. Los
géneros primarios que forman parte de los géneros complejos se transforman dentro de estos últimos y
adquieren un carácter especial”6
La Entrevista en Profundidad es un género discursivo secundario, no se puede pensar como un género
discursivo primario ya que no es un diálogo espontáneo, está pautado con anterioridad, con un tema
definido, en donde existe la regla, implícita o no tanto, de que “uno pregunta y el otro responde”.
Volver a la entrevista desde la noción de género discursivo brinda la ventaja de poder integrar más
armónicamente en una forma los rasgos como: el funcionamiento, los tipos de enunciadores y de
enunciados, las temáticas, situaciones, regularidades y valoraciones.
La unidad lingüística que estudia es la palabra o discurso: con este concepto se refiere la totalidad del
acto comunicativo no por fuera de la forma lingüística sino como elementos integradores. El discurso
incluye la lengua, (unidades lingüísticas, reglas de composición), los individuos organizados
socialmente que se comunican entre sí, los contextos sociales que enmarcan la comunicación, las
situaciones sociales particulares e inmediatas en que se producen los actos comunicativos y los intereses

5
Mijail Bajtín 1982 Pág. 252
6
Mijail Bajtín estética de la creación verbal

18
y motivos colectivos y particulares que impulsan los hechos de la comunicación social. Tampoco queda
fuera del fenómeno discursivo la problemática general de la significación (los temas, las esferas de la
actividad e interés, los valores e ideologías que promueven la necesidad de comunicación dentro de una
sociedad), ni los cambios permanentes de significación al producirse la comunicación entre grupos
diferentes. Hay lenguajes y discursos porque hay individuos y clases diferentes, los seres humanos
realizan distintas actividades, existen distintos sistemas de valores y hay cambios de posicionamiento
permanentemente respecto de ellos.
Por otra parte, la unidad comunicativa es el enunciado. Bajtín define como enunciado:
“El enunciado no es una unidad convencional sino real, delimitada con precisión por el cambio de los
sujetos discursivos. Es la unidad real de la comunicación discursiva. El discurso siempre está vertido
en la forma del enunciado que pertenece a un sujeto discursivo determinado y no puede existir fuera de
esta forma. Tienen fronteras muy definidas. Las fronteras de cada enunciado como unidad de la
comunicación discursiva se determinan por el cambio de los sujetos discursivos, es decir por la
alternación de los hablantes”7
Si se piensa cómo es el funcionamiento de la entrevista, desde el punto de vista de la situación
comunicativa y sus participantes, la perspectiva de Mijail Bajtín, resulta sumamente útil. Los trabajos
de este teórico ruso, han tenido una influencia perdurable en la lingüística, la crítica literaria y otras
disciplinas, ha desarrollado una profunda reflexión en torno a la enunciación y su naturaleza interactiva,
que se denominó “dialogismo”
Para Bajtín toda enunciación es dialógica. Es decir, supone siempre un interlocutor, y por lo tanto, el
atributo principal de todo enunciado es su carácter de destinado, modulado por la presencia del otro (el
destinatario), en la medida en que argumenta para persuadirlo, le responde por anticipado, se adelanta a
sus objeciones, a partir de una hipótesis sobre su capacidad de comprensión. El destinatario es entonces
una figura imaginaria, una idea que se tiene de cómo podrá ser el “oyente modelo”, sin embargo está
inscripto en la conversación, en su lenguaje, en sus giros, sus recorridos.
La idea de que el destinatario esté presente en el enunciado aún antes de que pueda emitir cualquier
respuesta, e inclusive independientemente de ella, sugiere un protagonismo conjunto de los partícipes
de la comunicación. Siguiendo esta línea, la recepción puede ser vista como un proceso activo y
simultáneo donde si bien la secuencia lógica es que “uno habla y el otro escucha”, para luego invertir
los términos, en realidad ocurre que todos hablan todo el tiempo (ese continuo asociativo en que uno
imagina, recuerda, piensa, evalúa mientras alguien dice)
Al respecto Bajtín afirma:
“Toda comprensión real y total tiene un carácter de respuesta activa y no es sino la fase inicial y
preparativa de la respuesta (cualquiera que sea su forma). También el hablante mismo cuenta con esta
activa comprensión preñada de respuestas: no espera una comprensión pasiva, que tan sólo reproduzca
su idea en la cabeza ajena, sino que quiere una contestación, consentimiento, participación, objeción,
7
Ídem

19
cumplimiento, etc. (los diversos géneros discursivos presuponen diferentes orientaciones etiológicas,
varios objetivos discursivos en los que hablan o escriben). El deseo de hacer comprensible su discurso
es tan sólo un momento abstracto del concreto y total proyecto discursivo del hablante. Todo hablante
de por sí es un contestatario en mayor o menor medida: él no es el primer hablante, quien haya
interrumpido por primera vez el eterno silencio del universo, y él no únicamente presupone la existencia
de la lengua que utiliza, sino que cuenta con la presencia de ciertos enunciados anteriores suyos y
ajenos, con los cuales su enunciado determinado establece toda suerte de relaciones (se apoya en ellos,
problematiza con ellos, o simplemente los supone como conocidos por su oyente). Todo enunciado es
un eslabón en la cadena, muy complejamente organizada, de otros enunciados.”8
Aquí se recupera la noción de Intertextualidad. Todo enunciado está en relación con otros enunciados
anteriores y posteriores, pertenecientes a un mismo campo o a campos distintos. Se pueden dar distintos
modos de relación entre los mismos (copia, imitación, cita, parodia, refutación, comentario, etc.) El
modo en que dialogan entre sí los discursos, las diferentes huellas de unos en otros, las afiliaciones, las
deudas y préstamos.
Otro concepto útil para analizar es el concepto de Polifonía. La polifonía implica que varias voces
hablan simultáneamente y donde ninguna de ellas es preponderante por sobre las demás. Es la
exacerbación de las tendencias discursivas, la yuxtaposición de discursos separados por el tiempo y el
espacio, la puesta en lenguaje de las orientaciones ideológicas que se manifiestan mediante otros
materiales. En una palabra, la polifonía es la realización o actualización de las potencialidades
discursivas de una época. Este concepto desdibuja la ilusión del sujeto como fuente de su palabra y del
sentido: “hablamos desde una trama sociocultural, somos hablados en tanto el lenguaje nos precede y
nos impone sus marcas”, afirma Leonor Arfuch9.
Por otro lado, todo enunciado es percibido como palabra propia o palabra ajena. En la interacción
discursiva, la tendencia puede ser la de preservar la autoría del discurso propio y explicitar la diferencia
con el ajeno, o, borrar los límites entre los enunciados propios y los ajenos. Estas orientaciones
permiten la toma de posición ante la pluridiscursividad social: todo individuo elige su discurso, elige
apropiarse de él o sólo convertirse en un repetidor, lo integra en él o lo separa de otros discursos,
produce acentos nuevos, que portan nuevas significaciones o se aferra dogmáticamente a las ya
existentes.
La relación entre enunciados o discursos, importa sólo desde la percepción de los individuos que
pueden diferenciar entre su discurso y el ajeno. Esta percepción es tanto comprensiva (todo Enunciado
tiene un tema y un significado) como valorativa (todo Enunciado posee un acento valorativo)
El tema de un enunciado es único e irrepetible, es aquello que le da totalidad al enunciado, que lo hace
reconocible por el receptor y que lo relaciona con la situación comunicativa, y con la motivación de ese

8
Mijail Bajtín
9
Leonor Arfuch

20
acto discursivo. El significado, en cambio, es la descomposición del enunciado en todos los elementos
lingüísticos que lo componen (semántica tradicional)
El acento valorativo influye sobre todo el enunciado y sobre la situación comunicativa misma, incluso
sobre el significado puntual de las palabras. Es imposible estudiar la comprensión humana sin tener en
cuenta la construcción de valoración social que se produce en el lenguaje y los cambios permanentes en
el acto de valorizar.
Algunos rasgos sobresalientes del género discursivo correspondiente a la entrevista:
• Cierta flexibilización del lenguaje, donde están permitidas expresiones coloquiales hasta
domésticas.
• Aptitud básica para el diálogo
• Principio básico de cooperación: en el cual uno de los dos participantes accede ocupar el lugar
de informante y contestar a las preguntas solicitadas por el investigador, tratando de cumplir
con lo que el investigador le solicita y aceptando sus objetivos y su encuadre. Este objetivo o
dirección puede ser definido en un acuerdo previo, someterse a discusión o aparecer durante el
intercambio, pero en cada situación, los participantes tienen la capacidad de hacer el ajuste que
se consideren apropiado.
• Hay una serie de reglas agrupadas en cuatro categorías: Cantidad (Que tu contribución
contenga tanta información como sea requerida), Calidad (Que tu contribución sea verídica, No
afirmes lo que creas falso), la de Relación (Sé relevante) y Modalidad (Habla con claridad,
evita ser ambiguo)
• La noción de implicatura da cuenta del carácter cuasicontractual de los intercambios: ciertos
sobreentendidos que comparten los interlocutores, y que permiten descifrar en una
conversación tanto la adecuación como la infracción.
• La entrevista está regulada por turnos. Verdaderos sistemas conversacionales, los turnos
regulan los cambios de locutor, la duración de la emisión, la distribución de los participantes, la
continuidad/discontinuidad en el uso de la palabra y por supuesto las transgresiones.
• Otra noción pertinente para pensar nuestro género discursivo, es la de parejas de “enunciados”,
cada uno de ellos formulado por un enunciador diferente pero que se corresponden en una
relación complementaria: pregunta-respuesta, aceptación-rechazo, etc.
• Relación siempre conflictiva entre fenómenos sociales y lingüísticos, al considerar que es en
las prácticas conversacionales donde los individuos manifiestan y construyen el orden, los
lazos y los sentidos de la sociedad en la que viven, y , por supuesto, sus propias diferencias,
grupales, étnicas religiosas, etc.
• Género de la entrevista como actividad discursiva compleja, que teje redes de
intersubjetividad, crea obligaciones, ejerce la persuasión, el control o la violencia. Aunque esté
ligado a las prácticas de la conversación cotidiana, se aleja de ellas por su grado de

21
institucionalización, por su intencionalidad, por su articulación con el espacio académico y por
el tipo de competencias exigidas al entrevistador.
La entrevista en profundidad se diferencia de la entrevista periodística, ya que busca llevar adelante una
comunicación no violenta en donde la asimetría de poder se trate de neutralizar por todos los medios y
no exista la cosificación del informante, para poder lograr la comprensión del otro, de su experiencia de
vida, y no de obtener una noticia.
• Habilidades pragmáticas que debe tener el entrevistador: plantear con claridad las preguntas,
repreguntar, volver sobre un tema o cuestión que quedó pendiente, resumir, glosar o
desarrollar lo sustancial de las afirmaciones del otro, hacer avanzar el diálogo, anular el
silencio, aprovechar elementos inesperados pero relevantes, dar un giro radical si es necesario,
abrir una polémica. En este género discursivo, uno de los dos participantes es el encargado de
“llevar” la conversación, a través de las preguntas, los comentarios, los pedidos de aclaración,
etcétera.
• Desarrollando estos postulados la lingüista francesa Jacqueline Authier distingue en la
polifonía dos aspectos: una “heterogeneidad constitutiva” del discurso, que es la que no está
marcada, y por lo tanto, es asumida como propia, frente a una “heterogeneidad mostrada”, que
está dada por todos los mecanismos donde se hace explícita la referencia a otros discursos: la
citación, el entrecomillado, el uso de expresiones idiomáticas, la jerga, el discurso referido
(directo o indirecto)
• En su estructura dialógica, y aún cuando consista en un breve intercambio, la entrevista
permite sin embargo la expansión narrativa que tiene que ver con las transformaciones de una
historia. En este sentido se aproxima a la conversación cotidiana donde el sujeto, a partir de
relatos personales, construye un lugar de reflexión, de autoafirmación (de un ser, un hacer, de
un saber), de objetivación de la propia experiencia. Es una búsqueda explicativa, singular, o
del grupo social, pero también es una operación sobre la memoria, la proximidad, una
avanzada de lo vivencial, de restitución del sujeto frente a la exclusión de las generalizaciones.
Hay allí distintas temporalidades, donde no solamente se tejen testimonios sino identidades, y donde la
apertura de la privacidad, aun al precio de un uso ejemplar, es una forma de mutuo reconocimiento.
Además de contar la vida o dar cuenta de un presente, hay otros trabajos reservados a la memoria en la
entrevista, que no solamente ejemplifica sino restituye, devuelve eslabones perdidos, da sentido. Más
allá o paralelamente a las historias personales se dibuja el ancho mundo, un campo de acontecimientos
ya pasados, persistencias, recurrencias ideológicas, zonas del pensamiento, biografías intelectuales e
institucionales. Este apoyo invalorable de testimonios, de recuerdos, declaraciones e interpretaciones,
no sólo permite llegar a ese nivel de la experiencia, de la subjetividad de quienes la presenciaron y la
vivieron sino que habilita a menudo los propios recorridos de la investigación, el manejo de datos, y
documentos de otro orden.

22
“El lugar de la memoria en su solicitación en el diálogo es muy particular. Los saltos, los
encadenamientos, el devenir del recuerdo frente a otro que espera tienen una especie de sacralidad. Las
historias, los acontecimientos, los climas de época, pueden reconstruirse a partir de huellas materiales,
de documentos, de otras textualidades, pero hay sin duda, un plus en la voz, un ambiente intangible que
cobra actualidad en las imágenes “guardadas”, aún vacilantes, en los sentidos inesperados que siempre
trae aparejada su evocación”10, afirma Leonor Arfuch

Análisis de la entrevista de Michel Pialoux desde el enfoque de la filosofía del lenguaje:


Respecto del enfoque a tomar para comenzar a realizar el análisis surge la siguiente pregunta: ¿Cuál es
el enfoque a tomar?
El material que se va analizar es la trascripción de una entrevista en profundidad, realizada por el
investigador Michel Pialoux. Por ende, se pueden llevar a cabo dos tipos de análisis: uno considerando
toda la narración del entrevistador del encuentro y de la situación de comunicación, la entrevista y el
breve análisis del final como un enunciado, ya que es no hay cambio de narrador. Considerando, de este
modo, la entrevista que se encuentra adentro como una inclusión de la palabra ajena en el discurso, o
bien se puede hacer un esfuerzo de ponerse en situación y hacer como que se es un observador de la
situación en la que se está realizando la entrevista en profundidad y analizar todos los elementos
anteriormente descriptos, recreados en esa situación comunicativa que se da entre el investigador y el
obrero, en la cocina de la casa de Hamid.
A fines de poder explicitar más los aportes de la teoría de los géneros y discursivos, de la polifonía, y el
dialogismo, considero que el segundo encuadre será el más exhaustivo.

La entrevista como género discursivo.


La situación comunicativa: se da en el marco de una entrevista en una investigación social. Ambos
participantes se conocen de vista desde hace tiempo. La situación fue arreglada con anterioridad. El
contexto: la casa de Hamid, el obrero, al mediodía antes de ir a trabajar a la fábrica.
Los Interlocutores: Hamid (obrero inmigrante y delegado sindical de la CGT en la fábrica de Peugeot) y
Michel Pialoux (investigador de ciencias sociales de origen Francés). Cada uno tiene esquemas
interpretativos y valorativos distintos al otro, de acuerdo con la experiencia de vida que tiene cada uno.
El pacto de cooperación: Es establecido con anterioridad al encuentro y reafirmado en el encuentro:
“…lo mejor es que me cuente lo que tiene ganas y yo después le hago preguntas…”11, dice el
investigador. Escucha atenta y disposición a colaborar en la construcción de conocimiento social son
partes constitutivas de este pacto
Las reglas: Uno pregunta, el otro contesta. La información que otorgue debe ser de la cantidad que el
investigador le solicita, Calidad, que la exposición trate de ser lo más fiel posible a la vivencia que el

10
Leonor Arfuch
11
Michel Pialoux

23
obrero realiza de su experiencia en la fábrica, tratando de no contestar aquellas cosas que no cree, la de
Relación que la información sea relevante y Modalidad que trate de hablar con claridad, y que evite ser
ambiguo. Esta última característica va para ambos.
Los sentidos: este punto abarca muchas cuestiones. Los sentidos que se producen en el intercambio
mismo, es decir, la construcción que realizan en conjunto de la experiencia de vida del obrero. Ese
discurso que tal vez nunca fue enunciado pero que estaba esperando ser rescatado para emerger del
mundo interior del entrevistado y poder en cierta medida “hacerse público”, “salir del anonimato” como
una forma de tomar una posición individual y poder reivindicar su punto de vista sobre el conflicto.
Como afirma Valentín Voloshinov: “El producto lingüístico realizado exteriormente es una isla que
surge del mar sin límites del lenguaje interno: las dimensiones y formas de esta isla están determinadas
por la particular situación del enunciado y sus oyentes. La situación y los oyentes hacen que el lenguaje
interno se realice en algún tipo de expresión específica exterior que está directamente incluida en un
contexto no verbalizado de conducta.”
Por otro lado, múltiples discursos intervienen en los enunciados del obrero: los discursos de sus
compañeros, de los patrones, los discursos que tienen valoraciones históricas. Como ser la fuerte
valoración que realiza de sus compañeros huelguistas. Se observa que para Hamid llamar a una persona
“compañero huelguista”, es pensarlo como una persona integrante del mismo colectivo que él y remite a
un período histórico determinado y a un estado de la lucha de clases al interior de la fábrica. De esta
manera, la palabra huelguista adquiere una valoración con una gran carga histórica para el entrevistado.
Las relaciones con otras formas discursivas: Fuerte relación con la narración y con el dialogo
cotidiano.
La valoración del mundo: Se realiza desde esquemas muy distintos, desde habitus de clase distintos. El
investigador tiene cierta valoración del mundo distinta del obrero. No obstante, el investigador al
interesarse en el tema, cada vez puede comprender más los esquemas interpretativos y valorativos del
entrevistado. El objetivo de la entrevista en profundidad, es poder comprender al entrevistado y esto
implica poder llegar a entender y establecer todas las condiciones sociales y estructurales que lo
atraviesan, a fin de sentir que si estuviese en ese lugar, probablemente haría lo mismo que hace él.
El modo en que se articula con el contexto sociocultural: La información que se obtiene en la entrevista
en profundidad, es de carácter confidencial y las condiciones en que ese material se distribuirá, son
acordadas entre los dos participantes de la interacción. El entrevistador articulará la nueva información
obtenida con la investigación que estaba llevando adelante y finalmente, será transcripta a lenguaje
escrito y terminará publicada en un libro compilado por Pierre Bourdieu. A nivel más simbólico la
historia de Hamid es rescatada y es tomada como un caso representativo de un obrero que es delegado
en un cierto contexto social e histórico, pero que el mundo que se le presenta en la actualidad (de su
enunciado), ya no es el mismo, sus compañeros no tienen los mismos valores y su tarea de delegado
choca contra las nuevas estructuras de poder y los nuevos lazos sociales que se establecen en el nuevo
modo de producción peugeotista

24
Dialogismo:
Se pueden poner un par de ejemplos sencillos: en donde se pone de manifiesto esto HC1, lo dice sin
explicar (ya sabe que el otro lo conoce// en cambio cuando dice “sumi”, aclara qué quiere decir.)
La temática de los enunciados del obrero gira en torno a los conflictos en la fábrica, el nuevo tipo de
organización social que supone el nuevo modo de producción. En este sentido, en cierta forma ha
incorporado a su interlocutor. Cuando ambos fueron presentados formalmente en la cancha de fútbol
por uno de sus compañeros, uno de ellos enunció (refiriéndose al investigador): “Un compañero del que
a lo mejor oíste hablar, que hizo artículos sobre la fábrica y viene de Sochaux desde hace algunos años.
Le gustaría charlar contigo sobre el trabajo en HC1, hablar del ambiente del taller, de la tarea de
delegado”12. La narración continua y Pialoux describe: “Le conté en pocas palabras lo que sabía de
HC1, las visitas que había hecho al lugar, ciertos obreros a los que conocía. Un acuerdo inmediato
(…)”13
Ni bien el entrevistador arriba a la casa del obrero, éste último comienza a contarle acerca del último
conflicto laboral que hubo en la fábrica. En este sencillo acto, se puede observar la inclusión del
investigador en la formulación del enunciado. Si no hubiese sido que el entrevistador le propuso hablar
de esos temas, tal vez el obrero hablaba de otra cosa.
Luego de que el investigador encienda el grabador, comienza la entrevista, o mejor dicho la parte más
formal de la entrevista. El entrevistado le solicita saber qué es lo que espera de él: “No sé demasiado
bien lo que usted espera”, y luego el investigador contesta: “Le digo que quiero hablar de “todo eso”,
que hay que volver a todas esas “historias” a las que habitualmente no se presta bastante atención, que a
mí también “todo eso” me parece importante y que nunca se escucha “verdaderamente” a los militantes
que están en primera línea.”14
A lo largo de toda la entrevista se observa que el destinatario está implícito en el enunciado. Por
ejemplo: “(…) Varios vinieron del “sumi”, los almacenes de suministros… ”
En este sencillo ejemplo, se puede observar que el obrero, tal vez, pensó que la expresión “sumi”, era
una expresión para los internos de la empresa, muy específica y que tal vez su interlocutor, no la
entendiese, así es como luego la aclara, sin necesidad de que el investigador le repregunte.
En oposición a este ejemplo, cuando el obrero habla de HC1; de cuadrillas, de 405, 206, etcétera, no le
aclara de qué está hablando porque supone que su interlocutor ya está al tanto de esas informaciones.
En el lugar de entrevistador, se tiene permanentemente en cuenta al interlocutor a fin de poder encontrar
los puntos de articulación de esa historia individual con la investigación que está realizando en un
marco más complejo.
Es importante destacar que el enunciador tiene en cuenta al interlocutor a la hora de construir el
enunciado y para esto se apela a todos los discursos que sociales que pueden aportar información para
12
Michel Pialoux
13
Michel Pialoux
14
Ídem

25
esa situación y para ese tipo de persona. Por ejemplo, cuando el investigador pregunta: “Y la botella,
¿es de agua?”15, en cierta medida es porque sabe que en la fábrica ha habido problemas con gente que se
llevaba alcohol, y que su interlocutor probablemente este al tanto de ello y le pueda contestar.

Pluridiscursividad social:
En el discurso del obrero se ve claramente la apelación a los distintos discursos que lo atraviesan.
Fragmentos de discursos de otros que se intercalan con las palabras que el obrero asume como propios.
Toma la palabra de sus compañeros, de sus patrones a manera de cita textual, cambiando el tono de la
voz, poniendo remanifiesto que ese discurso no es el suyo, y resaltando su respuesta, su enunciado. En
la entrevista, el obrero produce nuevos acentos valorativos, nuevas significaciones respecto al trabajo
en la fábrica y las relaciones de solidaridad que se dan entre los compañeros. La relación entre
enunciados o discursos, importa sólo desde la percepción de los individuos que pueden diferenciar entre
su discurso y el ajeno. Esta percepción es tanto comprensiva (todo Enunciado tiene un tema y un
significado) como valorativa (todo Enunciado posee un acento valorativo)

3
Mark L. Knapp, en su libro: “La comunicación no verbal. El cuerpo y su entorno”, describe los
principios básicos de la comunicación no verbal:
1- No existe la comunicación verbal por un lado, y la comunicación no verbal por otro, esta
separación es artificial, en la interacción cotidiana real los sistemas verbal y no verbal son
interdependientes.
2- Comprender el lenguaje corporal equivale a comprender los matices en las conductas humanas.
3- No existe un significado único en el lenguaje no verbal, lo mismo que en el lenguaje verbal,
una sonrisa puede querer decir: -estoy feliz-, o puede ser irónica y manifestar: -soy desdichado-,
es decir, depende del contexto.
Existen siete áreas distintas de la comunicación no verbal:
1- Movimiento corporal o cinética (emblemas, ilustradores, expresiones de afecto, reguladores y
adaptadores)
2- Características físicas
3- Comportamientos táctiles
4- Paralenguaje (cualidades vocales y vocalización)
5- Proxémica
6- Artefactos
7- Entorno o medio
Algunos de los hallazgos más importantes en el campo de la interacción social gira en torno a las
maneras en que la interacción necesita el apoyo de las comunicaciones no verbales.
15
Michel Pialoux.

26
Se han identificado los usos primarios del comportamiento no verbal en la comunicación humana como:
expresar emociones; transmitir actitudes interpersonales; presentar a otros la propia personalidad;
acompañar el habla con el fin de administrar las intervenciones, la retroalimentación, la atención.
Ninguna de las funciones de la conducta no verbal, se limita a la mera conducta no verbal, es decir, las
emociones y las actitudes pueden ser expresadas verbalmente y la interacción también. Lo mismo que
las palabras y las frases, las señales no verbales pueden tener múltiples usos y múltiples significados.
Por otra parte, la comunicación no verbal es importante debido al papel que desempeña en el sistema
total de la comunicación, la tremenda cantidad de señales informativas que proporciona en toda
situación particular, y a que se la utiliza en áreas fundamentales de la vida cotidiana. La comunicación
no verbal no es una unidad aislada, sino una parte inseparable del proceso global de comunicación.
Puede servir para: repetir, contradecir, sustituir, complementar, acentuar o regular la comunicación
verbal.
Vamos a detenernos en la función reguladora de la comunicación no verbal, ya que es de utilidad en la
situación de entrevista, en donde la regulación de los turnos es crucial.
El modo en que una persona deja de hablar y la otra comienza a hacerlo con toda fluidez de forma
sincronizada puede ser tan importante para una interacción satisfactoria como el mismo contenido
verbal que se intercambia. Cuando una persona interrumpe muy a menudo o es desatenta, se puede
percibir como una falta de respeto. Hay reglas para regular pero, en general se trata de reglas implícitas.
Es decir, no hay ningún tratado acerca de cómo e debe actuar, pero se actúa como si supiera que dos
personas no pueden hablar al mismo tiempo, que cada una de ellas ha de dar las mismas oportunidades
de hablar a la otra, siempre que la otra lo desee, que una pregunta debe ser respondida. En tanto
oyentes, es evidente que se presta atención y se evalúa una multitud de efímeras, sutiles y habituales
características de la conducta conversacional del otro.
Existen muchas señales para indicar distintos comportamientos conversacionales, por ejemplo, cuando
se quiere indicar que se ha terminado de hablar y que la otra persona puede comenzar, se puede
incrementar el contacto visual con el interlocutor. A menudo se acompaña esto con señales vocales que
se asocian con la finalización de juicios declarativos o interrogativos. Mark Knapp afirma que si la otra
persona no se ha enterado aún “de que va” la conversación, podemos prolongar el silencio o interponer
una apelación, por ejemplo: “sabe usted…”o “de modo que…”. Evitar que el otro entre en la
conversación obliga a evitar las pausas prolongadas, disminuir el contacto visual y quizá levantar la voz
si la otra persona trata de meterse. Cuando no se quiere emplear el propio turno en la conversación, se
pueden dar a la otra persona algunas cabezadas de refuerzo, y mantener atento el contacto visual y por
supuesto, evitar hablar cuando la otra persona empieza a decaer. Cuando se quiere hablar se puede
levantar el índice o efectuar una audible inspiración mientras se adopta una postura erguida como si se
estuviera listo para comenzar. Rápidas cabezadas pueden servir para señalar al interlocutor que ha de
darse prisa y terminar, pero si se tienen dificultades para intervenir, puede ser que se deba hablar al

27
mismo tiempo o emprender un “comienzo tartamudeante” que, con suerte, será la señal más fácilmente
advertida de que se desea hablar.
Los inicios y los finales de las conversaciones actúan también como puntos de regulación. Cuando se
saluda a alguien, el contacto visual señala que los canales de conversación están abiertos, también se
pueden realizar gestos con las manos y la cara que manifiesten lo mismo, tales como agitar y dar la
mano.
El despedirse implica también conductas no verbales, pero la más común es la de romper el contacto
visual durante períodos cada vez más largos mientras se dispone el cuerpo hacia la salida, o hacer
rápidos movimientos con la cabeza.
Los sistemas no verbales de comunicación no deberían considerarse como procesos aislados
independientes de la conducta verbal. Para evitar este peligro, es necesario insistir en la relación
integral existente entre sistemas verbales y sistemas no verbales. No sólo ambos sistemas se comportan
de manera dinámica, sino que en el seno del sistema no verbal tampoco se puede ignorar el dinamismo.
Luego de esta breve exposición acerca de los elementos que constituyen la comunicación no verbal y su
relación con la comunicación verbal se sistematizarán algunas de las características de la percepción
humana que se deben tener en cuenta a la para analizar la situación discursiva de la entrevista en
profundidad.
En los procesos de percepción, se debe tener en cuenta ciertos criterios:
• El observador: Los dos participantes (el entrevistado y el entrevistador) son observadores.
Ahora bien, para el entrevistador que quiere ser eficaz en su tarea, Knapp recomienda encontrar una
actitud que se encuentre en el punto medio entre una actitud ignorante “propia de un niño” y una
actitud de experto que conoce acerca de comunicación no verbal De modo de poder percibir todas
las variaciones que suceden y por otro lado, no sentirse en un caos incomprensible.
• La falibilidad de la percepción humana: “El punto de partida debe ser el reconocimiento de
que es nuestro propio condicionamiento cultural, educación y experiencias personales lo que
organiza la percepción. (…) Esta interacción entre nuestros propios deseos, necesidades e inclusive
estados emocionales, pasajeros, por un lado y por el otro, lo que vemos en los demás nos lleva a
veces a ver sólo lo que queremos ver o a pasar por alto lo que podría ser evidente para otros. Nos
referimos al proceso que se conoce como percepción selectiva. (…) Así no es raro que a menudo,
las observaciones que contradicen nuestras creencia sean manipuladas para darles una forma que
“tenga sentido” para nosotros”16.
• La familiaridad: tanto puede ayudar a la observación como puede crear un “ruido”
observacional, pero siempre afecta las percepciones.
• El lenguaje: que se utiliza para expresar las percepciones puede ser una variable importante en
el juicio acerca de la corrección de aquellas percepciones

16
Knapp

28
• Los efectos del orden: Los observadores también deben ser sensibles a su posible influencia. A
veces, se observa algún rasgo de la conducta ajena que ejerce una influencia en las
percepciones de lo que viene después, corrientemente es el último acto de una persona lo que
mueve a volver a analizar e interpretar toda la conducta que le precediera.
• Las inferencias: Es importante no confundir la descripción pura con las inferencias o
interpretaciones acerca de la conducta. Se debe estar permanentemente en guardia contra estas
simples explicaciones de causa y efecto de la conducta observada. Únicamente después de
estudiar la totalidad del contexto se puede comenzar a hacer inferencias acerca de por qué tal o
cual conducta ha tenido lugar, y aún entonces se debe avanzar sólo en términos de grados
variables de probabilidad, jamás con una seguridad absoluta.
• El registro observacional: ¿Qué es lo que tenemos que observar? ¿Qué categorías de conducta
se deben decodificar? Las conductas elegidas para su estudio, variarán según el interés del
observador, por ejemplo, el engaño, el tomar turno en la conversación, o abandonarlo, etc. La
precisión en las descripciones de estas categorías iniciales es una tarea difícil, pero muy
importante. Por ejemplo, si suponemos que se quiere codificar la conducta táctil, veremos que
existirá una gran diferencia entre tocar al interactuante ligeramente en los hombros con la
palma de la mano o asestarle un puñetazo en la mandíbula. La importancia de la especificidad
de la categoría depende en gran parte de los fines e hipótesis del observador, pero los
observadores no verbales deben estar atentos a las diferencias que pueden ser significativas
antes de comenzar a codificar.
• Trabajo con registros audiovisuales: puede ser muy útil pero, tiene problemas: el encuadre no
es nunca neutral, impone una cierta manera de observar a alguien y a su vez el entrevistado
puede sentirse inhibido y condicionarse ante la presencia de una cámara videograbadora.
• Un análisis global de la comunicación humana: Puede incrementar significativamente la
sensibilidad verbal y no verbal ante la interacción social. Este análisis, otorga una cierta
consistencia para orientar las observaciones iniciales y es probable que sirva como estímulo de
ideas adicionales para aplicar en y adaptar a cualquier encuentro.

Análisis Global: Etapa inicial


Registro de las primeras impresiones.
Marco de referencia general que permita contemplar los intercambios interpersonales, así como para dar
una idea general de los juicios que se necesitan para observar un acto de comunicación humana.
- El Medio: ¿existen estímulos ambientales susceptibles de afectar esta interacción? ¿Qué pasa con las
personas que rodean a los dos interactuantes? ¿Cómo influirán los demás en lo que los dos
interactuantes puedan hacer, aún cuando no digan nada? ¿Tendrá el medio una apariencia familiar para
ambas partes? ¿Qué conducta cabe esperar en este medio?

29
En este caso:
Se desarrolla en la cocina de la casa del obrero, un ambiente íntimo. En principio no hay personas que
estén presentes luego aparece su mujer y la interacción se interrumpe y se da por terminada.
La conducta que debe esperarse en un medio así es una conducta cálida, amable.
El obrero está cocinando mientras realiza la entrevista, por lo que el entrevistador, se siente en la
obligación de colaborar con esta tarea: “Al cabo de un momento yo mismo me pondré a lavar algunas
verduras, tanto para hacer algo como porque en cierto modo, ese gesto es “exigido” por el marco”.
Es el medio familiar del obrero por lo que él se siente tranquilo de poder hablar y expresarse como
quiere sin temor a que otras personas lo estén escuchando (como si hubiese sucedido si la entrevista se
realizaba en la fiesta de los obreros).
Al ser una cocina y ser el mediodía, se espera que los participantes estén atentos a la comida, que beban
alguna sustancia como café y cerveza y que puedan conversar con tranquilidad.
- Los Participantes: ¿Afectará el sexo de los participantes la interacción? ¿Cómo? ¿Puede influir la
edad? ¿Qué sucede con las relaciones de estatus o de autoridad involucradas? ¿Cuál es el aspecto de los
participantes? ¿Constituye el atractivo físico un factor? ¿Qué papel juega la forma de ir vestido en esta
interacción? ¿Satisface la vestimenta de los participantes las expectativas del medio y los roles y
expectativas mutuas? ¿Las diferencias en materia de educación, profesión o estatus socioeconómico
afectarán a la conducta de comunicación? ¿Cómo? ¿Desempeñan alguna función la raza o el trasfondo
cultural en esta interacción? ¿Experiencias recíprocas anteriores pueden ser susceptibles de ejercer
alguna influencia en este contexto? ¿Se introducen los participantes en este intercambio con objetivos o
finalidades compatibles?
Como observador, se ha de reconocer que algunas de estas observaciones e hipótesis iniciales pueden
variar a medida que avanza la interacción. Los observadores han de estar preparados para percibir tales
cambios.
En este caso:
-Son dos hombres, el sexo no parece influir en la interacción, generando lazos de seducción o de
asimetría de género.
Cabe aclarar, que el análisis que se realiza es en base a las percepciones que tiene el entrevistador de la
situación y de su entrevistado, por ende las respuestas tendrán que ver con la interpretación de estas
percepciones.
-Respecto de la vestimenta, parece que la vestimenta del obrero se adecua a la tarea que está realizando
y a la situación cotidiana (jeans y delantal de cocina). La vestimenta del entrevistador no parece
desentonar con la situación porque en ningún momento existe algún comentario de parte del
entrevistado con respecto a este tema, y por otro lado, se muestra abierto a contarle sus conflictos sin
ningún tipo de obstáculo. Mark Knapp afirma que una de las condiciones bajo las cuales la ropa puede
no constituir un factor de gran importancia en la percepción interpersonal de los otros, es cuando el

30
observador y la persona observada tienen una cierta familiaridad, la relación que se establece entre
ambos parece cumplir con este requisito.
-Ambos participantes tienen vidas y profesiones distintas. Se trata de que ninguno de los dos se
considere en una posición inferior al otro. El entrevistado confiesa no saber cómo se hacen este tipo de
entrevistas, y se deja guiar por el entrevistador, se muestra accesible y con mucha predisposición a
contestar. El entrevistador confiesa: Parece que todo sucediera como si nos conociéramos desde hace
mucho tiempo y reanudáramos una conversación interrumpida.
-Las diferencias en cuanto nivel de educación, influyen en el establecimiento de la relación que se
produce entre los dos. Por un lado, el investigador cuyo conocimiento está ligado a la actividad de la
ciencia, pero que necesita aquello que el obrero posee, su experiencia de vida, y por otro lado, el obrero
cuyo campo de conocimiento es otro, su “capital cultural”, como diría Bourdieu es distinto, pero que
tiene la información que el investigador necesita.
-El trasfondo racial tiene relevancia. Por un lado, es uno de los objetivos de la investigación del Michel
Pialoux: él estaba interesado en estudiar los “problemas” de los inmigrantes en las fábricas, Hamid, el
entrevistado es un inmigrante y la entrevista se desarrolla en su casa que se encuentra en “una gran
“barra”, en que son numerosas las familias de obreros inmigrantes”. Por otro lado, la comida que
preparan durante la interacción es una comida típica de su país adaptada a las condiciones francesas.
Esta diferencia racial, no funciona como motor de discordia, más bien, en el acto simbólico de cocinar
juntos (no es adrede que el Michel Pialoux lo pone de manifiesto en la introducción de la entrevista) se
puede observar el hecho de la actitud colaborativa por sobre las diferencias, que ambos participantes
elijen adoptar.
-El trasfondo cultural desempeña una función en este intercambio, por ejemplo, a la hora de elegir el
sitio en donde realizar la entrevista, no hubiese sido posible realizarla en la fábrica, ya que es el
trasfondo cultural que suscita la interacción.
-El haberse conocido en otros contextos, influye en el flujo de la comunicación.
-Por la descripción del investigador, los objetivos parecen ser compatibles. El obrero se encuentra con
la necesidad de poder expresar su punto de vista, de manifestar su indignación ante el tipo de prácticas
que se están realizando a nivel humano en las fábricas y el investigador está realizando una
investigación acerca de los conflictos de los obreros en las fábricas y los nuevos modos de producción.

Análisis Global: Etapa de interacción


Registro de reacciones verbales-no verbales en curso
Respecto de este punto no se puede realizar un análisis ya que no es accesible el material gestual de
ninguno de los dos participantes. Simplemente a través de inferencias textuales se puede responder a
algunas de estas cuestiones. No obstante se presentaran algunas observaciones a tener en cuenta en las
interacciones que se producen en la Entrevista en Profundidad.

31
-Conducta del tacto: ¿Hay alguna clase de contacto físico? ¿Se produce en forma accidental o
deliberada? ¿Da la impresión de que esta acción está motivada por algún fin específico? Si no hay
contacto ¿Por qué? ¿La situación reclamaba contacto o ausencia de contacto? ¿Tiene lugar el contacto
sólo en momentos especiales de la interacción? ¿Con qué frecuencia ocurre el contacto? ¿Cuánto
tiempo dura? ¿Quién inicia el contacto? ¿Cuál es el efecto visible en la persona tocada?
En este caso:
No hay ninguna clase de contacto físico registrada en la entrevista. En el encuadre de la situación
fundamentalmente discursiva, el contacto físico está excluido.
-Expresiones faciales: ¿Tiene alguno de los participantes o incluso ambos, una expresión facial
relativamente estable en esta situación? ¿Comunican en general, una actitud o emoción mediante sus
expresiones faciales? ¿Se produjeron cambios en determinados puntos de la conversación en las
expresiones faciales? ¿Cuál pudo ser la causa de esos cambios, se tratará de una conducta verbal o no
verbal? ¿Hubo momentos en que la expresión facial de una persona provocara una expresión similar en
la otra? ¿Se apreció alguna expresión micro-momentánea o fugaz que sugiriera actitudes contrarias a las
que se expresan verbalmente? ¿En qué momento se notaron expresiones que pudieran describirse en
general como de entrecejo fruncido, o de tristeza, de sonrisa o felicidad, de cólera o de nerviosismo, de
impaciencia, aburrimiento, seriedad, embarazo o sorpresa? ¿Variaron de intensidad las expresiones
faciales a lo largo de la transacción? ¿Es auténtica la expresión facial? Si la respuesta es afirmativa ¿Por
qué?
En este caso:
En el texto figuran algunas aclaraciones respecto de esto, pero únicamente cuando hace falta para
completar el significado verbal. Por ejemplo: “Pero esas horas normalmente las pagan, y les pagaron a
todos los demás, pero a los que protestaron... (Gesto de que “No les pagaron”). De acuerdo, el
jefe(…)”17
-Conducta Visual: ¿Suele haber mucho contacto visual o poco? ¿Por qué? ¿Aparta más la mirada una
persona que la otra? ¿Por qué? ¿Algunos de los dos participantes extiende la mirada más de lo
“normal”? ¿Existe algún criterio aplicable a los lugares donde la persona mira cuando no dirige la vista
a la otra persona? Si lo hay ¿Por qué ese criterio? ¿En qué momentos la mirada se hace evidente que es
más intensa y en cuáles no? ¿Qué efecto parece tener en la otra persona la mirada fija o la ausencia de
esta mirada?
En este caso:
La mirada se utiliza en muchas funciones interpersonales: para regular la corriente de comunicación
abriendo los canales de comunicación y prestando colaboración en el proceso de la alternancia de la
conversación; para la retroalimentación controlada de las reacciones del interlocutor; para expresar
emociones; para comunicar la naturaleza de la relación interpersonal, tal como en las variaciones

17
Pierre Bourdieu la miseria del mundo pag 285

32
resultantes del estatus, el gusto o el disgusto. El estudio de Mark Knapp, afirma que la mirada suele ser
más intensa cuando: se está interesado en las reacciones del interlocutor, se es más oyente que hablante,
se trata de influir en él, entre otras cosas.
Para terminar, es importante citar a Pierre Bourdieu y su comentario respecto de la mirada en la
entrevista en profundidad: “La mirada prolongada y acogedora que se requiere para impregnarse de la
necesidad singular de cada testimonio“18.
-Postura-Posición: ¿Asumen los dos participantes la misma postura? ¿Por qué? ¿Están de pie o
sentados? Si uno de los participantes está de pie y el otro está sentado, ¿Cómo se relaciona esto con los
distintos papeles que adopta cada uno en la situación? La posición que adoptan ¿Parece cómoda o
tensa? ¿Cambia esta situación durante la interacción, por qué? ¿Se inclinan hacia delante o hacia atrás
los participantes? ¿Qué sugieren esas inclinaciones? ¿Están sentados frente a frente en ángulo agudo, en
ángulo obtuso uno al lado del otro? ¿Se han colocado de tal manera que impidan a cualquier otro entrar
en la conversación? ¿A qué distancia relativa se comunican, cercana, lejana o media? ¿Comunican los
brazos o las piernas impenetrabilidad o frialdad? ¿Sugiere inclusión la posición de las piernas? ¿Se
compensan los cambios de postura en una persona con cambios con la otra? ¿Durante cuánto tiempo
mantienen los participantes una postura dada? ¿Por qué cambian?
-Conducta Vocal: ¿Utilizan los dos participantes el volumen de voz apropiado a la situación? ¿Tiene
alguno de los interlocutores una voz insólitamente suave o fuerte? ¿Cómo? ¿En algún momento se
perciben incoherencias entre señales vocales y los enunciados verbales? ¿Qué efecto tiene en el otro
participante? ¿Posee alguno de los interlocutores o ambos una voz muy grave o una voz muy fina?
¿Afecta a la impresión total de uno o ambos interlocutores una cualidad vocal, como la ronquera? ¿Hay
silencios prolongados más allá de lo normal? ¿Por qué? ¿Desempeñan un papel importante señales
vocales tales como la risa o los quejidos? ¿Hay estremecimiento o temblor de la voz durante los
momentos de agitación nerviosa? ¿Hay excesiva falta de fluidez? ¿Qué efecto produce?
En este caso:
“(…) Pese a ser habitualmente calmo y moderado, se pone a hablar con locuacidad, como si una vez
más lo sobrecogiera la emoción que se había apoderado de él en la víspera. Me contará su sorpresa, su
desasosiego, su indignación, (…)”19
La voz funciona como una prolongación de un estado emocional. El investigador a través de la voz,
entre otras señales, induce que el obrero se encuentra indignado, que ha sido herido por acontecimientos
con sus compañeros o que el conflicto lo toca en lo personal. A lo largo de la conversación se pueden
inducir que ha habido cambios en las tonalidades, intensidades y velocidades de la voz del obrero sobre
todo.
Por otro lado, se utiliza la voz deformada transmitiendo que ese mensaje fue pronunciado por otra
persona: “Me dijeron (imita un tono impregnado de cortesía) “yo solamente se lo digo” (…)”20
18
Pierre Bourdieu. Comprender
19
Pierre Bourdieu
20
Entrevista Hamid

33
El silencio está presente en algunos momentos luego de preguntas del entrevistador. Sin embargo, no
son silencios que se extiendan más allá de lo “normal”, no aparentan ser silencios incómodos.
-Movimiento físico: ¿Cuáles fueron los movimientos significativos en el acto de comunicación?
¿Desempeñaron un papel importante los movimientos de cabeza? ¿Cómo? ¿Cuáles fueron los gestos de
las manos? ¿Parecía moverse alguno de los participantes hacia el otro mientras éste se desplazaba hacia
atrás? ¿Era ostensible este movimiento, o era casi imperceptible? ¿Por qué? ¿Desempeñaban algún
papel los movimientos de las manos o los dedos? ¿Cómo? ¿Se produjeron golpes con los pies? ¿Hubo
cambios importantes de postura? ¿Con qué frecuencia? ¿Se observaba alguna señal que sirviera para
terminar la conversación, así una mirada al reloj, movimientos como para levantarse del asiento o en
dirección a la puerta, una profunda inspiración, o miradas asiduas a través de la ventana, etcétera?
En este caso:
-Respecto a este punto, se puede observar que hay cambios de posturas y movimientos, que están
realizando una actividad (cocinar), también toman un café y una cerveza.
-Los movimientos comunican estados emocionales específicos, mientras que las posiciones corporales y
orientación de la cabeza comunican en general estados afectivos generales, pero no emociones
específicas.
Algo del orden de la percepción de los movimientos corporales, hace que el -investigador perciba
ciertos estos estados emocionales en el entrevistado, como: la indignación, el desasosiego, la
incertidumbre, el malestar. Por otro lado, algo en su forma de pararse, en su cadencia habitual, en la
forma en que Hamid recibe a Michel en su casa, en los recuerdos que tiene de él de los documentales, la
televisión, las marchas, del encuentro en la cancha de fútbol, hace que el investigador afirme que se
trata de un hombre “más bien calmo y moderado”21.
-“(…) La llegada de su esposa, con quien charlo un momento (acerca del país), interrumpirá nuestra
entrevista. No se puede demorar en ir a la fábrica” En esta última oración: “No se puede demorar en ir
a la fábrica”, probablemente haya habido una serie de movimientos rápidos, miradas al reloj que dieron
a entender al investigador que el encuentro estaba finalizando.
-Conducta Verbal: ¿Cuál pareció ser el efecto de ciertas respuestas verbales en la conducta no verbal
del iniciador y en las respuestas verbales y no verbales del receptor. Aquí se citan algunos tipos
comunes de respuesta: desacuerdo con el contenido, acuerdo con el contenido, consejo acerca de
sentimientos, consejos acerca de la acción, respuestas ambiguas, respuestas de interrupción, ataques
personales, respuestas defensivas, respuestas de evaluación, preguntas, opiniones, liberación de tensión
mediante chistes, respuestas tangenciales, respuestas irrelevantes, expresión de sentimientos, positivos
o negativos, respuestas interpretativas, ruego de aclaración de sentimientos, solicitud de clarificación de
contenido.
En este caso:

21
Pierre Bourdieu

34
Por como está narrada la situación, quien ha iniciado la comunicación verbal ha sido Hamid, el
entrevistado. Esto generó en Michel una sensación de tranquilidad en la entrevista ya que percibió que
su entrevistado estaba bien dispuesto a conversar con él. Durante la entrevista los tipos más comunes de
respuesta, son los relativos a: acuerdo con el contenido, expresión de sentimientos, positivos o
negativos, respuestas interpretativas
Los turnos en la entrevista:
Se puede considerar a esta entrevista como un buen ejemplo respecto a los turnos. Se observan breves y
acotadas intervenciones del investigador y largas declaraciones del entrevistado. La entrevista en
profundidad tiene como objetivo rescatar el discurso del informante y ponerlo en primer plano. De esta
forma, podemos concluir que la comunicación verbal y no verbal han sido bien manejadas dando lugar
a una conversación fluida en donde se vislumbra la lógica y la experiencia del informante.
La conducta conversacional de los participantes está bien definida por el rol que cada uno adopta en
esta situación de entrevista. El investigador es quien pregunta, piensa con el informante y arroja ideas
que éste repiensa y reformula. Ambos son respetuosos de la palabra ajena y se observa que prestan
atención al interlocutor en todo momento.
Retomando un concepto expuesto al principio, estar “sincronizado” con el interlocutor, parece que en
esta entrevista se ha podido lograr.
La entrevista pone en evidencia un fenómeno cotidiano: al hablar, son las marcas emocionales, la
gestualidad, la entonación, lo que realmente hace el sentido de lo que se dice. Pero esas marcas son
también sociales, convencionales y se espera en cada caso que sean las adecuadas a la ocasión.

Conclusiones:
Las tres perspectivas que describen situaciones de interacción social, de las cuales se pueden obtener
categorías útiles para el análisis de la situación discursiva que se presenta en la entrevista en
profundidad.
Erving Goffman, realiza un aporte desde la idea de la comunicación como interacción social y esa
interacción como una actuación en la cual ambos participantes deben manejarse de cierta manera a fin
de no destruir la impresión de realidad fomentada por ellos. Las categorías de Impresión, actuación,
proyección de la situación y de la realidad y la conducta pertinente a cada marco, son de gran utilidad a
la hora de planificar la interacción social que se da entre el investigador y el informante. La idea de la
situación discursiva de entrevista como una representación, que se debe cuidar a fin de que se mantenga
y pueda realizarse el objetivo de la investigación.
Por otro lado, la filosofía del lenguaje y en especial Mijail Bajtín aportan importantes conceptos para
pensar a la situación dialógica. La idea de discurso, en detrimento de la idea de la lengua, el concepto
de dialogismo y la idea de que todo enunciado es una respuesta a otro enunciado, el concepto de
polifonía de los discursos realizan grandes aportes a la conceptualización del lenguaje en la entrevista

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(lenguaje como lo entiende esta corriente) Finalmente, permite pensar a la palabra dentro de un orden
histórico, la palabra como un fenómeno ideológico por excelencia: si los fenómenos ideológicos se
caracterizan por imprimir significación o sentido a los hechos materiales, las palabras serán la vía regia
de tal significación.
En comparación, Erving Goffman profundiza acerca de todas las variables que intervienen en la
construcción de la imagen del otro que se presenta. ¿Cómo es que se construye esa imagen? Y en este
sentido nos interesa porque permite al entrevistador futuro tener un panorama que describa esto.
Por el contrario, Bajtin lo toma como un dato existente. Ese otro se presenta, me produce una impresión
y lo tengo en cuenta a lo hora de emitir mis enunciados. Esa impresión ya está incluida a la hora de
emitir mis enunciados, pero no se cuestiona cómo es que se produjo tal impresión.
Finalmente, la teoría de Mark Knapp, remite a un esquema tradicional de la comunicación (emisor-
canal-receptor-mensaje), pero aporta como innovador al fenómeno de la comunicación la observación
de otras señales que acompañan la comunicación verbal, como los movimientos del cuerpo, la postura,
la intensidad de la voz, el espacio personal, la conducta táctil, etcétera. La comprensión de estas señales
permite una mayor apertura a los estímulos sensibles en la comunicación intersubjetiva “cara a cara”.
Una buena percepción, puede colaborar a la hora de establecer un diálogo fructífero en la entrevista en
profundidad.
Respecto a las similitudes de los tres autores, todos ponen de manifiesto el importante rol del contexto
en los procesos de comunicación, cada uno de acuerdo a su paradigma.
Tres miradas al encuentro intersubjetivo en la entrevista en profundidad.

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