Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
1 Reyes 18
INTRODUCCIÓN
Éxodo 20:24-25
”Háganme un altar de tierra y ofrézcanme sus sacrificios: sus ofrendas
quemadas y ofrendas de paz, sus ovejas y cabras y su ganado.
Constrúyanme un altar donde yo determine que recuerden mi nombre, y allí
me presentaré ante ustedes y los bendeciré. 25 Si usan piedras para
construir un altar, que sean piedras enteras y en su forma original. No den
forma a las piedras con ninguna herramienta, pues eso haría que el altar
fuera indigno de un uso santo”.
- Quizá tus hijos en este momento adoran a los dioses de este tiempo, la
lujuria, la fornicación, borracheras, etc., o quizá tu casa está en sequía, hay
hambre, no solo de necesidades físicas, sino emocionales, afectos, abrazos,
palabras de afirmación, calidad de tiempo, perdón, etc.
- Quizá como padre has hecho pacto con otras actividades dejando de lado tu
pacto con Dios, entregando a tus hijos a otros dioses, pues al menospreciar
a Dios y su palabra enseñas con tu ejemplo y tú permisibilidad a tus
hijos que Dios no es Dios, y que no es importante.
- Puedes tú estar en la iglesia pero estar lejos de Dios, puedes estar en su
templo pero no ser tú el templo, puedes saber palabra, pero su palabra no
gobierna tu vida. Prácticamente hemos olvidado a Dios.
- ¿Cómo está tu altar personal, tu altar familiar, el altar en la iglesia?
- Cuando nos referimos al altar, estamos refiriéndonos a la comunión
que tenemos con Dios.
DESARROLLO
1. Examínate
“El altar de Jehová estaba arruinado”
- Elías miro que el altar de la comunión estaba arruinado, olvidado, sin usar
durante muchos años.
- ¿Qué amas más que Dios? / ¿Qué cosas te hicieron olvidar a Dios? / ¿En qué
momento te alejaste de Dios?
Marcos 12:30
30
Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con
toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento.
2. Restaura
“Tomó doce piedras, una para representar a cada tribu de Israel 32 y
usó las piedras para reconstruir el altar en el nombre del SEÑOR”
3. Sacrifica
“Apiló la leña sobre el altar, cortó el toro en pedazos y puso los
pedazos sobre la madera”.
1 Samuel 16:7
“…No se trata de lo que el hombre ve; pues el hombre se fija en las
apariencias, pero yo me fijo en el corazón.»
Jeremías 17:9
9
Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo
conocerá?
Salmos 138:6
El SEÑOR ocupa el lugar más alto por encima de todos los demás, pero aun
así, él nunca abandona a los humildes. Él siempre sabe lo que hacen los
soberbios y se mantiene alejado de ellos.
Salmos 51:17
16
Tú no deseas sacrificios; de lo contrario, te ofrecería uno. Tampoco quieres
una ofrenda quemada.
17
El sacrificio que sí deseas es un espíritu quebrantado; tú no
rechazarás un corazón arrepentido y quebrantado, oh Dios.
Salmos 139:23-24
23
Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis
pensamientos;
24
Y ve si hay en mí camino de perversidad,
Y guíame en el camino eterno.
- Nuestra vida debe ser un constante sacrificio a Dios, debemos ser olor
fragante.
Lo que hacemos, lo que hablamos, pensamos, sentimos, etc.
Romanos 12:1-2
Por eso, hermanos míos, ya que Dios es tan bueno con ustedes, les ruego que
dediquen toda su vida a servirle y a hacer todo lo que a él le agrada . Así es
como se le debe adorar. 2 Y no vivan ya como vive todo el mundo. Al
contrario, cambien de manera de ser y de pensar. Así podrán saber qué es lo que
Dios quiere, es decir, todo lo que es bueno, agradable y perfecto.
Mateo 5:23-24
23
Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tú hermano
tiene algo contra ti,
deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu
24
Efesios 6:4
Padres, no hagan enojar a sus hijos con la forma en que los tratan. Más
bien, críenlos con la disciplina e instrucción que proviene del Señor.
CONCLUSIÓN
- Dios quiere manifestar su gloria a través de nuestras vidas, para que
muchos vean que Jehová es Dios.
Salmos 51:7-15
7
Purifícame de mis pecados, y quedaré limpio;
lávame, y quedaré más blanco que la nieve.
8
Devuélveme la alegría;
deja que me goce
ahora que me has quebrantado.
9
No sigas mirando mis pecados;
quita la mancha de mi culpa.
10
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio
y renueva un espíritu fiel dentro de mí.
11
No me expulses de tu presencia
y no me quites tu Espíritu Santo.
12
Restaura en mí la alegría de tu salvación
y haz que esté dispuesto a obedecerte.
13
Entonces enseñaré a los rebeldes tus caminos,
y ellos se volverán a ti.
14
Perdóname por derramar sangre, oh Dios que salva;
entonces con alegría cantaré de tu perdón.
15
Desata mis labios, oh Señor,
para que mi boca pueda alabarte.