EL DERECHO EN THOMAS HOBBES.

Thomas Hobbes fue un filósofo inglés, este se caracteriza por su gran pesimismo
frente la imagen del ser humano en su estado natural, pues, sin un órgano
superior que lo regule este vivirá en una constante guerra civil; por tal motivo se
convirtió en imperativo crear un estado soberano por medio del cual se le pusiera
fin a este caos, esta solución le costó al hombre despojarse de un poco de su
libertad a través del pacto social para entregársela al gobernante.

Este órgano artificial reconocido como estado por los hombres, encargado de
preservar la paz es todopoderoso, posee facultades ilimitadas para mantener a
raya los instintos naturales violentos del ser humano, tanto así, que la única
religión valida y/o existente será la que el gobernante decida, toda creencia que
sea distinta a la impuesta será tenida como una simple superstición.

Hobbes no concibe estado alguno sin que haya una obediencia plena de los
súbditos a sus gobernantes, solo podría una persona oponerse a los mandatos del
estado cuando estos atentaren contra su propia vida, regresando nuevamente a
su estado natural; el estado constitucional no tiene ningún sentido en Hobbes el
estado constitucional, aunque podría ser este una forma perfecta de expresar el
estilo de gobierno que él consideraba justo; solo tendría que agregársele la
aceptación y respeto de los derechos individuales de las personas por parte del
ente artificial y todo poderoso,

El hombre es egoísta por naturaleza, siempre va a perseguir sus fines y cuando no

los consigue se vuelve violento y ahí en donde comienza la verdadera guerra, por
eso nace el estado que imparte la ley suprema, el cumplimiento de los poderes
políticos es obligatorio en la sociedad para que exista una verdadera y palpable
seguridad jurídica.

En el estado de naturaleza pura todos los hombres son enemigos, por

consiguiente, cada cual debe mantener una imagen inocente frente a los demás
para en cualquier momento realizar su maniobra de ataque. Por tal motivo Hobbes
decía: “homo homini lupus”, lo cual traducido al español es “el hombre es el lobo
del hombre”, esta frase expone la verdadera naturaleza según el aturo del ser
humano, lo muestra como un ser violento e incapaz de alcanzar la paz por sí solo.

El bien y el mal lo estipula el estado, solo el decidirá a través de sus leyes lo que
se catalogue como dañoso o de provecho para la sociedad.

El poder es el deseo más concurrente en la raza humana, pero este es por obvias
razones el detonante de la bestialidad en los seres humanos, por tal motivo es
necesario crear un ente artificial que lo administre y castigue a todo aquel que se
quiera exceder en la búsqueda del mismo.

En el pensamiento de Hobbes compilado en el documento objeto de estudio no se

expresa claramente lo que queda incorporado en la física de galileo, pero sin lugar
a dudas es la tesis de que el conocimiento verdadero se fundamenta en la
experiencia.

Dios será quien el gobernante determine, por lo tanto, la metafísica también se

encuentra subordinada por el estado, considerándose de esta manera como un
verdadero Leviatán sobre la tierra.