Reseña: Capítulo 8 ​La revelación de la lógica del cambio: la organización como cambio y

transformación​ ​Presentado por: Juan Esteban Ramírez Páez - Sara Fernanda Zabala Cubides.

Este capítulo puede compararse con el Capítulo 4 en el cual Morgan reconoce a las organizaciones
como cerebros en sí mismas. Equiparando el cerebro y la organización en cuanto a la capacidad de
ambas para adaptarse a entornos cambiantes. De acuerdo a ello, este planteamiento puede
complementarse con los enunciados de la metáfora de la lógica del cambio en cuanto a la autopoiesis,
según la cual las organizaciones se auto producen y generan cambios en su interior, esto tiene que ver
con la metáfora de los cerebros, pues las organizaciones aprenden y se auto organizan para
mantenerse en funcionamiento, esto debido a que como cerebros redirigen esfuerzos para cumplir
ciertos objetivos ante una variabilidad en el entorno, esta variabilidad puede explicarse y entenderse
por medio de los planteamientos presentados en la metáfora presentada en este capítulo como la lógica
del cambio.

En este capítulo el autor tiene como objetivo mostrar cómo la realidad organizacional se forma y
transforma a través de procesos fundamentales de cambio y transformación a partir de tres diferentes
lógicas existentes en la vida organizacional. Es así como a lo largo de este capítulo expone cada una
de estas ideas partiendo de la consideración de que todo en el mundo sufre transformaciones
constantemente​, incluso las organizaciones en su forma de gestión y relación con su entorno.

Una primera idea explora la posibilidad de que sea el ambiente quien modifica al entorno y no al
contrario como suele exponer la teoría general de sistemas. Es así como el autor expone la teoría de
Maturana y Varela quienes afirman que los sistemas cuentan con características como autonomía,
circularidad y autorreferencia. De este modo, se puede ver a las organizaciones como sistemas
independientes que vinculadas con otros organismos independientes pueden generar cambios que se
verán reflejados en su entorno. Desde el punto de vista de la “autopoiesis” que significa que las
organizaciones se auto-producen, también se puede afirmar que son las mismas organizaciones
quienes producen cambios al interior de sí mismas.

Una segunda idea esboza ideas cibernéticas que sugieren que la lógica del cambio se pliega por
fuerzas y tensiones encerradas en una relación cíclica o circular. Básicamente esta idea sitúa a la
retroalimentación como la herramienta que proporciona a las organizaciones una posibilidad de
caminar hacia el cambio. Sin embargo, el rumbo hacia dónde se dirija dicho cambio depende de la
interpretación que sea capaz de hacer la organización. Por retroacción negativa que hace referencia
que el cambio en una variable origina un cambio en la dirección opuesta, con esto se consigue la
estabilidad del sistema, por otro lado, las retroacciones positivas donde lo más conduce a lo más y lo
menos a lo menos, son muy importantes en los cambios del sistema.

La tercera idea sugiere que el cambio es el producto de las relaciones dialécticas entre fuerzas
opuestas. Morgan se vale de esta idea de Marx para presentar tres principios que actúan sobre la
generación de cambios en las organizaciones. Un primer principio apunta a que los fenómenos
cambian por ellos mismos como resultado de la tensión entre dos opuestos. Un segundo principio
respalda que los cambios provienen como rechazo a una forma previa de una situación reteniendo aún
algo en ese cambio. El tercer principio muestra que de manera más profunda los cambios pueden
provenir del paso de un estilo de organización social a otro, mediante una revolución, a lo cual los
marxistas denominan “desplazamiento total”.

Para concluir el autor presenta tanto las ventajas como las limitaciones de la aplicación de lo que él
llama la metáfora del cambio. En cuanto a las ventajas, señala que esta intenta penetrar en la
naturaleza y el origen mismos del cambio, es decir, esta tiene significado en cuanto al entendimiento y
dirección de las organizaciones. Lo anterior ayuda a manejar el cambio y usarlo en las acciones a
llevar cabo de una mejor manera.

Además las tres imágenes del cambio que enuncia el autor proporcionan métodos alternativos para
pensar los procesos y la lógica del cambio, mostrando los diferentes aspectos de la conformación del
cambio, como ejemplo de ello se encuentra en el texto el punto de vista autopoiético el cual
contribuye a ser más conscientes de los procesos de autorreferencia, presentes en la organización y
producción del entorno en el cual se encuentran las personas, esto para que tengan la capacidad de
renovar la naturaleza del cambio reemplazando las imágenes egocéntricas por otras mediante las
cuales se pueda manifestar la interdependencia con los demás.

Otra ventaja de esta metáfora se encuentra que esta proporciona un medio para examinar la estructura
en profundidad del día a día en la vida, invitando a sus lectores a comprender el mundo como una
manifestación de procesos más profundos o bien como el orden explícito o revelado de una más
básica e implicada realidad. Como principal contribución se destaca el precepto de sugerir que esos
procesos ocultos los cuales conforman la realidad están sumergidos en la lógica del cambio, siendo
esta la creadora de la misma existencia humana.

Ahora bien en cuanto a las limitaciones manifiestas de esta metáfora, se encuentran que esta
formulación puede tornarse como un pensamiento demasiado ideal, este determinismo en realidad no
es un medio efectivo, pues esto conlleva a callejones sin salida, donde los patrones de cambio hacen
que ya no sean reconocibles las anteriores formas de vida.

Adicionalmente, esta lógica del cambio requiere para su completa comprensión tener una percepción
retrospectiva, pero esto sigue siendo determinista; esta lógica funciona para explicar el pasado, pero la
predicción del futuro es un error, es más indicado hablar de posibilidades en cuanto a influir y
conformar el futuro.

Finalmente, este capítulo tiene grandes implicaciones para la profesión de los Administradores de
Empresas, dado que presenta un enfoque diferencial de análisis, el cual puede complementar la
dirección efectiva de las organizaciones, teniendo presentes diferentes factores, los cuales permiten un
análisis de carácter integral del entorno en el cual se encuentra la organización y cómo aprovecharlo
para lograr tratar con los problemas que se presenten a lo largo del funcionamiento diario, pero para
ello es necesario reestructurar la lógica, pues estos problemas son consecuencia de la lógica presente
en el sistema.

Referencias

Morgan, G. (1986) ​La revelación de la lógica del cambio: la organización como cambio y
transformación.​ (Capítulo 8). En: ​Imágenes de la Organización.​ Alfaomega.( Pág. 178-204).