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SOFONÍAS

Introducción a Sofonías
PATERNIDAD Y FECHA DE SOFONÍAS
Sofonías fue suscitado por Dios para ayudar al piadoso rey Josísa en su intento de hacer volver a Judá
a Dios. Por ello, era de la línea real y pariente del rey reinante, Josías.
Data su profecía durante los días del rey Josías, lo Que. situaría su tiempo de misniterio alrededor del
635 a. C.

Propósito de Sofonías
Sofonías fue sucitado por Dios para ayudar al piadoso rey Josías en su intento de ahcer volver a Judá
a Dios. El mensaje de Sofocías reveló, sin embargo, Que. era ya demssiado tarde para la naación de
Judá . Se avecinaba el juicio, aunque algunos individuos podrían aún ser salvos.

Bosquejo Básico de Sofonías

I. El juicio sobre la nación de Judá (1:1-2:3)


II. El juicio avecinándose sobre las naciones cirvunvecinas (2:4-15)
III. El juicio avecinándose sobre la nación de Judá (3:1-8)
IV. Las bendiones venideras sobre todas las naciones (3:9-20)
Datos importantes acerca de Sofonías
1. Palabra clave: el día de Jehová.
2. Capítulo clave: 1, Juicio de Judá
3. Versículos clave: 1:7-9;2:3
4. Personajes clave: el pueblo de Judá
5. Significado de “Sfonías”: el nombre del autor, dado como título de la profecía
6. Geografía de Sofonías:Judá.

Consideración especiales acerca de Sofonías

Para poder comprender el ministerio de Sofonías y de sus dos contemporáneos, habacub,


Jeremías, es escencial comprender la reciente historia de Judá. Sofocías ejercitó du ministerio
en tiempos de un rey piadoso. Hubo un avivamiento durante el reinado de Josías. Pero mucho
más importante fue el reinado de un anterior rey de Judá , Manasés. Manasés reinó m´s tiempo
Que. ningún otro rey de Israel (cincuenta y cinco años), y fue el más malvado de todos los
reyes en toda la historia de Israel (2R 21:1-18). Debido a la increíble maldad de Manasés , Dios
pronunció un juicio irreversible , Que. iba a caer sobre Judá . Debido a Manasés había hecho
(2R 21:10-12; 23:26-27; 24:3). Los tres profetas Que. hablaron de parte de Dios después del
reinado de Manasés no podían cambiar la suerte de la nación , pero podían rescatar
individualmente a personas de lso acontecimientos Que. se avecinaban.
L rey Josías comenzó a reinar en el año 640 a.C, y su avivamiento comenzó diez años
después, en este vivamiento . Se debería observar Que. ese avivamiento simplemente retrasó
la caída de Judá hacia el juicio.
Resumen de sofonías
El tema de Sofonías es “el día de Jehová”. Esta frase aparece site veces ene ste libro ( un total
de trece si incluimos “ el día “. Se dicen varias cosas acerca del día de Jehová : es inminente
invación babilónica y el período de la tribulación en un futuro distante).

La priemera divición de la profecía de Sofocías trata del juicio venidero dobre el reino deL SUR ,
Judá (1:1-2:3). Antes de considerar el juicio de Dios, Este juicio universal es mencionado en
Sofocías varias veces, y mira al cumplimiento final del gran futuro día de Jehová (1:2,3, 14-18).
La razón de la disciplina de Dios sobre Judá es la idolcatría (1:4-6). Los príncipes , los
sacerdotes y el pueblo de Dios voluntariamente . Aunque la nación misma estaba tan
involucrada en el pecado Que. no se volvería al Señor, las personas individualmente dentro de
la nación podrían hacerlo, y se les invitaba a Que. así lo hiciesen (2:1-3).
La segunda sección del mensaje de Sofonías se centra en el juicio venidero sobre ciertas
naciones extranjeras (2:4-15). Filistea, Moab, Amón, Etiopía y Asiria son blancos del profeta
debido al tratamiento Que. le dieron al puebld e Dios . Sin embargo, hasta algunos de estos
extranjeros se voleverán a Dios.
Lsa tercera parte de esta profecía es una vez un anuncio del juicio venidero (3:1-8), Jerusalén
ha sido obstinada y rebelde . Sus líderes son considerados como codiciosos , impíos, tridores,
malvados. Y puesto Que. no ha respondido a los juicios de Duios sobre los demás naciones
aprendiendo de ellas , Judá también será castigada.

La cuarta y última sección de esta profecía mira hacia un tiempo futuro de salvación y
bendición (3:9-20). Esta sección hallará su cumplimiento cuando el Mesías establezca su
reinado sobre la tierra . El temor y el fracaso serán sustituidos por el gozo y la victoria cuando el
rey gobierne (3:15). Dios hará grandes cosas por su pueblo. Como en el cas de los anteriores
profetas, Sofonías hizo sonar un anota de esperanza en medio de su mensaje de disciplina.
Resultó ser Que. el crecano juicio profetizado por Ssofonías vino muy pronto . El piadoso rey
Josías murió en el año 609 a.C. , y al cabo de solo cuatro años los babilonios invadieron y
tomaron Judá . Por no haber escuchado Judá las advertencias de Sofocías y de otros profetas
iba ahora a experimentar la disciplina de Dios.

Estructura Del Libro


Sofonías contiene solo tres breves capítulos, pero estos están repletos de las imágenes más vívidas del
castigo de Dios que podemos hallar en la Biblia. Tras una breve presentación de sí mismo como vocero de
Dios, el profeta se lanza inmediatamente a describir el castigo de Dios que se aproxima. Describe ese «día
grande de Jehová» como «días de angustia y de aprieto... de trompeta y de algazara» (1.14, 15).
La profecía de Sofonías deja bien claro que Judá y sus países circunvecinos sentirán el ardor de la ira
de Dios. La capital de Judá, Jerusalén, será castigada por su perversiad, rebelión e injusticia. El profeta aun
presenta a Dios que con una linterna escudriña a Judá para poner al descubierto la corrupción de la ciudad
y señalar el castigo (1.12).
A pesar de la temática de juicio y castigo, Sofonías termina con una nota positiva. Después del castigo,
anuncia el profeta, Dios levantará un remanente de fieles que continuarán sirviéndole como pueblo suyo. El
libro termina con la gloriosa promesa de que «Dios se regocijará sobre ti con cánticos» (3.17).

SOFONÍAS:
I. El juicios en el Día del Señor 1.1—3.8
A. El juicio sobre toda la tierra 1.1–3

Un bosquejo para el estudio y la enseñanza


B. El juicio sobre la nación de Judá 1.4—2.3

1. Causas del juicio 1.4–13

2. Descripción del juicio 1.14–18

3. Llamado al arrepentimiento 2.1–3


C. El juicio sobre las naciones circundantes a Judá 2.4–15

1. Juicio contra Gaza (oeste) 2.4–7

2. Juicio contra Moab y Amón (este) 2.8–11

3. Juicio contra Etiopía (sur) 2.12

4. Juicio contra Asiria (norte) 2.13–15

D. El juicio de Jerusalén 3.1–7

1. Maldad de Jerusalén 3.1–4

2. La justicia del Señor 3.5–7

E. El juicio sobre toda la tierra 3.8

II. La salvación en el Día del Señor 3.9–20

A. La promesa de la conversión 3.9–13

B. La promesa de la restauración 3.14–20

Autor Y Fecha
Los eruditos están de acuerdo en que el profeta Sofonías escribió este libro. Todo lo que se sabe de
este Sofonías se halla en su profecía. Era bisnieto de un Ezequías (Sof 1.1), tal vez del que fue rey de Judá
(2 R 18–20; 2 Cr 29–32). Profetizó en Judá durante el tiempo del rey  JOSÍAS (2 R 22–23; 2 Cr 34–35) ca.
630 a.C., cuando ya había caído el reino del norte (2 R 18.11, 12). Era contemporáneo de Jeremías, quien
también profetizó durante el reinado de Josías (Jer 1.2; 3.6, etc.). La mayoría de los eruditos creen que el
libro se escribió ca. 627 a.C.

Marco Histórico
El marco histórico se encuentra en 2 R 21–23. La nación había sufrido un gran decaimiento espiritual
después del reinado de Ezequías y del ministerio del profeta Isaías. El rey  MANASÉS volvió a levantar los
altares de Baal (2 R 21.3), derramó mucha sangre inocente (21.16) y Amón dio el mismo ejemplo y
orientación al pueblo (21.21–23). Este período duró cincuenta y dos años. Entonces comenzó el reinado de
Josías, cuando este tenía apenas ocho años de edad. Dieciocho años más tarde se encontró el libro de la
Ley y comenzó la gran reforma. Pero ni siquiera aquel breve período de avivamiento pudo detener la ola de
paganismo y adoración falsa que condujo a Judá a la destrucción. El castigo llegó en 586 a.C. cuando los
ejércitos de Babilonia destruyeron a Jerusalén y se llevaron cautivos a sus principales ciudadanos.

Aporte a La Teología
El castigo divino que describe Sofonías surge de la santidad de Dios. Como Dios demanda santidad y
justicia de su pueblo, castiga a los que permanecen en el pecado y la rebeldía (1.17). Pero el Señor
también es misericordioso y fiel a su promesa. Para el remanente fiel habría protección y consuelo cuando
llegaran los días negros que se aproximaban (2.1–3). Y a los justo ratifica las promesas del pacto que hizo
con Abraham cientos de años atrás. Gente de todas las naciones se reunirán para adorar al Señor (2.11;
3.9). Su propio pueblo se renovará en su fidelidad (3.11–13), y el Rey de reyes reinará en medio de ellos.

Otros Puntos Importantes


El profeta Sofonías demuestra que conoce bien la ciudad de Jerusalén (1.10, 11). Como era
descendiente de reyes, probablemente vivía en Jerusalén. Tiene que haberle sido en extremo doloroso
anunciar el castigo de Dios contra su amada ciudad.

Uno de los pasajes más bellos del libro es la descripción del gozo del Señor (3.8–20). Su cántico de gozo
se unirá al canto de su pueblo. El día negro de castigo no será largo. Habrá un día feliz para los que, como
Sofonías, han de ser «guardados en el día del enojo de Jehová» (2.3).1

Sofonías

Este hombre no era ningún predicador ordinario. Era el tataranieto del rey Ezequías, uno de los más
famosos gobernantes de Judá. Tenía sangre real en sus venas, pero más importante aún, tenía el mensaje
de Dios en sus labios. Extraño como parece, Sofonías predicó durante el reinado del buen rey Josías y era
un tiempo de «avivamiento» religioso (véase 2 R 22–23). Josías subió al trono a los ocho años y a los
dieciséis se consagró al Señor. Cuando tenía veinte años empezó una gran reforma en la tierra, derribó los

1Nelson, Wilton M., Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia, (Nashville, TN: Editorial Caribe) 2000, c1998.
ídolos y juzgó a los falsos sacerdotes y profetas. Luego empezó a reedificar el templo y dirigió a la nación a
celebrar la Pascua. Por todas las apariencias, era un tiempo de interés religioso y consagración.
Pero Sofonías veía más adentro; vio los corazones de las personas y sabía que el celo religioso no era
sincero. Las reformas eran sólo superficiales; la gente se deshizo de sus ídolos en sus casas, pero no de
los ídolos de sus corazones. Los gobernantes de la tierra aún eran avaros y desobedientes, y la ciudad de
Jerusalén era la fuente de toda clase de iniquidad en la tierra. Incluso hoy muchos creyentes carecen de
discernimiento y piensan que todo «movimiento religioso» es una obra genuina del Señor. Algunas veces la
reforma simplemente externa sólo prepara el camino para la obra del diablo (Mt 12.43–45).
Podemos dividir el mensaje de Sofonías en tres partes; dos que tratan del juicio y una de la
misericordia.

I. Dios juzgará a Judá (1.1–2.3)


¡Qué declaración!: «Destruiré por completo todas las cosas de sobre la faz de la tierra». El juicio viene y
nada escapará. Incluirá las aves, las bestias y los peces; especialmente afectará a los ídolos
(«tropezaderos») de los impíos; y exterminará a la población de la tierra. En el versículo 4 Dios menciona
los puntos críticos: Judá y Jerusalén. ¿Qué? ¿El pueblo de Dios atravesará juicio? ¡Sí! ¿Cómo puede Dios
destruir su pueblo santo y su ciudad santa? Lo hace por sus pecados y en particular los pecados de
idolatría (vv. 4–6). El profeta describe tres clases de pecadores en estos versículos: los que se olvidan de
Jehová y adoran sólo ídolos, vv. 4–5a; los que adoran tanto a Jehová como a los ídolos, v. 5b; y los que se
olvidan abiertamente del Señor y no quieren tener nada que ver con Él, v. 6. Estas mismas actitudes están
con nosotros hoy.
El juicio que viene se describe en los versículos 7–18. Lo llama «el Día de Jehová», una frase que usan
muchos escritores del AT, Joel en especial. «El Día de Jehová» tiene un doble significado: (1) localmente,
los juicios de Dios sobre Israel y Judá en el pasado; (2) proféticamente, ese tiempo futuro de juicio cuando
Dios derrame su ira (Ap 6–19). En este caso, «el Día de Jehová» sería la invasión babilónica del 606 a.C.,
y la destrucción de la ciudad y del templo en el 586 a.C. Sofonías ve esta invasión como un gran
«sacrificio»; véase también Apocalipsis 19.17–18. El ruido de la invasión empezará en la puerta del
Pescado, la puerta más distante de la ciudad, y luego avanzará hasta la misma cima del monte Sion. Pero
no serán los soldados extranjeros los que harán el trabajo; será Dios el que buscará en la ciudad, como con
una lámpara, desenmascarando el pecado y castigando la iniquidad. Los versículos 14–16 usan once
palabras diferentes para describir el Día de Jehová que vendrá. Ricos y pobres sufrirán por igual; ni plata ni
oro les salvará.
En 2.1–3 el profeta se vuelve a Jerusalén y a Judá y suplica al pueblo que se vuelva a Jehová y se
arrepientan de sus pecados. «Antes de que tenga efecto el decreto de Dios, mientras que aún hay tiempo,
volveos a Dios y pedid misericordia». Es triste, pero la nación se contentaba con ser «religiosa»; no se
volverían de sus pecados.

II. Dios juzgará a las naciones (2.4–3.7)


El profeta menciona a varias naciones gentiles alrededor de Judá y anuncia que Dios las juzgará
también por sus pecados. Empieza con Filistea (vv. 4–7) y predice que sus populosas costas serán
potreros para el ganado. Luego menciona a Moab y a Amón (vv. 8–11), descendientes del rebelde Lot (Gn
19.33–38). Maltrataron al pueblo de Dios y con arrogancia «se engrandecieron»; por lo tanto, Dios los
humillará. Sus tierras quedarán en ruinas. Se demostrará que sus ídolos son impotentes.
Egipto es el siguiente en la lista (v. 12) y le promete guerra que matará a sus jóvenes. Asiria y su capital
Nínive serán destruidas de tal manera que su tierra será un desierto (vv. 13–15). Las aves salvajes
morarán allí con los animales. Sus hermosos edificios quedarán sepultados bajo la arena. Nahum también
profetizó la caída de Nínive y su completa destrucción.
De nuevo Sofonías termina su mensaje con una apelación a su pueblo (3.1–7). Si Dios juzga los
pecados de los paganos, ¿cuánto más juzgará los pecados de Judá, la «nación santa de Dios»? Llama a
Jerusalén rebelde y contaminada; a pesar de que Josías quitó todos los ídolos. Dios podía ver sus
corazones y en ellos vio rebelión. No tenían fe verdadera en el Señor. Los príncipes y jueces eran como
animales al acecho, buscando a quien devorar. Los profetas eran «livianos»; les faltaba seriedad de
pensamiento y de interés. También eran «traicioneros», porque hacían descarriar al pueblo. Los sacerdotes
contaminaban todo lo que tocaban, aun el santuario sagrado. Podían ver el juicio de Dios día tras días,
pero no le daban cabida en su corazón. Veían que Dios castigaba a otras naciones, pero decían: «Esto
nunca ocurrirá aquí».
Pues bien, allí ocurrió. En el 606 a.C. los babilonios vinieron y destruyeron a la nación, la ciudad y el
templo. «El pecado es oprobio de cualquier pueblo», especialmente del pueblo de Dios.

III. Dios restaurará a su pueblo (3.8–20)


Sofonías concluye su mensaje con una gran promesa: Dios un día volverá a reunir a su pueblo,
castigará a las naciones gentiles y restaurará a Israel y a Judá a su tierra. El versículo 8 es sin duda una
predicción de la batalla del Armagedón, cuando todas las naciones se congregarán contra Jerusalén en los
últimos días (Ap 19.11–21). Pero Cristo volverá y juzgará a estas naciones, y entonces establecerá su
Reino. Volverá a reunir a los judíos esparcidos, los limpiará de sus pecados y establecerá su Reino justo,
sentándose sobre el trono de David en Jerusalén. Véase Zacarías 12–13.
¿Ha notado el énfasis de Sofonías en «el remanente»? (2.7, 9; 3.13). En su día había un remanente
creyente, un pequeño grupo de personas fieles a Dios, así como hay un remanente creyente hoy. No todos
los judíos seguirán al Señor en los últimos días, pero el remanente sí lo hará.
¿Qué debían hacer los judíos creyentes debido al mensaje de Sofonías? Por un lado, debían esperar
(3.8) y dejar que Dios realice sus propósitos. Entonces debían cantar (3.14ss) y regocijarse por la bondad
del Señor. La nación tendría que atravesar un tiempo de aflicción y prueba, pero Dios estaría en medio de
ella (3.17) y no debía temer aun en el tiempo del juicio. Dios los amaría y los cuidaría. Luego, cuando su ira
haya terminado, restaurará a la nación y se regocijará por ella. Afligirá a los que afligieron a los judíos
(3.19) y traerá a los judíos de regreso a su tierra. Esto ocurrió después de cumplidos los setenta años del
cautiverio.
Pero hay una futura reunión y restauración para Israel cuando, de acuerdo al versículo 20, serán
alabanza para toda la tierra. Eso no ha sucedido. Hoy son una fuente de contención internacional. Pero
cuando Jesús vuelva, serán una fuente de gozo y gloria en la tierra, y el mundo tendrá paz.

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