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Retos de México.

Seguridad y justicia.

En seguridad el país presenta retos fuertes, no solamente por lo relativo a la llamada Guerra al
Crimen Organizado, sino porque en la práctica existe una total falta de coordinación entre los tres
niveles de gobierno, cada uno trabaja acorde a los intereses que más convengan a sus intereses, la
mayor parte de las veces políticos, dejando de lado una efectiva integración de esfuerzos que
permitan el planteamiento de estrategias que permitan incrementar la seguridad del ciudadano.
Debemos departir que la prioridad del Contrato Social es que el Estado tiene el monopolio de la
fuerza para prestar seguridad al ciudadano, cuando el Estado es rebasado o no ejerce sus
funciones, debe ser replanteada la manera en que se opera.

Por otra parte el sistema judicial mexicano adolece de una manifiesta incapacidad de juzgar a
aquellos que son capturados, puesto que 9 de 10, salen libres por situaciones que van desde una
incorrecta integración de la averiguación previa, hasta expedientes que son sobreseídos por la
incapacidad de los órganos del estado mexicano, de poder presentar pruebas que lleven al juicio
de quienes han sido llevados ante la autoridad judicial.

Ambas instancias deberán ser reformadas, no cuento con elementos para argumentar a favor de
una propuesta, sin embargo es claro que los cuerpos policiacos tienen una incapacidad de operar
como garantes efectivos de la seguridad, por ello la llegada del ejercito a las calles, es un hecho
que deben de integrarse operativamente (coordinándose o bajo un mando) para que tengan una
manera de responder a las demandas que tiene la sociedad para con ellos.

Distribución de la Riqueza

Dependiendo del origen de la información, México está ubicado entre el lugar 10 a 15, en cuanto
al tamaño de su economía, sin embargo también se encuentra entre las que tienen un mayor
grado de desigualdad en la manera que la riqueza se distribuye entre la sociedad.

Iniciemos con decir que somos una de las economías que menos recauda en impuestos en el
continente, si quitamos los ingresos estatales por derechos del petróleo, la recaudación es menor
del 20% del PIB, cómo generar por medio de políticas de estado condiciones que permitan abatir
los rezagos históricos en lugares tales como Guerrero, Oaxaca y Chiapas, que tienen niveles de
desarrollo humano similares a algunos países africanos. Los impuestos intentan ser un
instrumento en primer lugar para la operación del estado, pero también para llevar a cabo
políticas de redistribución de ingreso, ese es el punto en donde estamos fallando como país, no se
efectúa una redistribución de la riqueza, tiene que haber una gran reforma tributaria y del gasto
público que permita recabar al menos el 25% del PIB y reorientar los gastos a rubros como la
educación, infraestructura y seguridad social, que permitan crear condiciones de revertir la
concentración de la riqueza.
Desarrollo Sustentable.

El siglo XX, implico un avance de la economía nacional desde una que se encontraba orientada al
sector primario a una orientada a la industria y paulatinamente a los servicios, la reorientación
implico entre muchas afectaciones la depredación del medio ambiente y los recursos que de la
naturaleza tomamos pensando que era el “costo” que habría que pagar por el desarrollo,
paulatinamente se ha creado conciencia de que estamos de paso en esta “casa” que es nuestro
planeta y, obviamente en nuestro país, no se trata de dejar de utilizar los recursos para el
desarrollo de los habitantes del país, sino de usarlos de una manera que no implique un costo para
futuras generaciones, para ello deben ser revisadas pautas en la educación de los niños, reciclaje y
una cultura de consumo responsable, para ello habría que reforzar los contenidos de los
programas de estudio así como la educación de los adultos en este mismo sentido, reforzar el
reciclamiento de aquellos materiales que así lo amerite y el manejo adecuado de los deshechos
que sean peligrosos para el ser humano y/o el medio ambiente. Promover como política de
estado el tratamiento de aguas de uso doméstico e industrial, intensificar los métodos de riego
que aprovechen y minimicen el uso de agua en la agricultura.

No es ir en contra del aprovechamiento de lo que el país tiene, sino usarlo de manera consciente,
reutilizarlo para que otros mexicanos tengan la oportunidad de disfrutar los lugares, recursos y
desarrollo con lo que el país cuenta.

Federalismo y División de Poderes

En el papel somos una república federal pero prácticamente desde el segundo imperio, hemos
sido un gobierno fuertemente centralizado en donde las decisiones son tomadas por un grupo
pequeño de personas en la Cd. De México, para después de ello aplicar las decisiones al resto del
país. Es un hecho que la reforma realizada hace unos sexenios e al artículo 115, en referencia a la
autonomía del municipio es crucial, pero mientras no se les otorgue recursos que lleguen de una
manera libre, sistemática y sin condicionamientos políticos, los municipio solo serán libres y
autónomos en el papel, pues todas las decisiones serán tomadas por la autoridades estatales, los
cuales a su vez quedan sujetos a los caprichos de los poderes federales, esto es independiente del
partido político que gobierne. Los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal) deben ser
reformados y al mismo tiempo otorgárseles los recursos que permitan su adecuada operación y
funcionamiento, retomando la distribución de la riqueza, es importante que haya municipios que
cuenten con una distribución directa de recursos federales y estatales, así como los ingresos
propios, que los libere de la dependencia malsana que los condiciona poder trabajar a los
caprichos de las autoridades de otro nivel de gobierno. Obvio decir que la medida debe ser
acompañada de una rendición de cuentas, claras, transparentes y permanente, que el ciudadano,
origen y destino de la organización social, conozca el destino de los recursos de cada nivel de
gobierno.

Democracia.
Hay que dar paso a una reforma política que termine con la partidocracia en la que estamos
envueltos, en la que los políticos solamente guardan lealtad con sus dirigencias partidistas, pero
dan la espalda a la sociedad. La reforma debe de integrarse de al menos elementos tales como el
referendo (para aquellos proyectos de ley que afecten profundamente a la sociedad),
sustituyendo la aprobación de los congresos estatales a las reformas federales, la reelección de los
legisladores federales y locales, así como de los presidentes municipales (cuatro periodos a
diputados y presidentes municipales y solo una para senadores) más no de los gobernadores y
presidente de la república, desaparición de los diputados y senadores de representación
proporcional, reforma al fuero siendo solamente para la libre de las ideas y no para amparar
conductas fuera de la ley.

Todas las medidas tienen que ser tomadas de manera simultánea para permitir un desarrollo de
todas ellas. Que sean hechas con miras de hacer evolucionar al gobierno, fincando una
responsabilidad a cada quien, pero también para acercar el poder a la gente, al ciudadano el cual
es importante que retome su papel en la toma de decisiones, que juzgue el actuar de sus
representantes y del uso de los recursos con los que provee al gobierno para la operación del
Estado

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