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Infecciones del sistema nervioso central en urgencias

Infections of the central nervous system in emergency department

I. Gastón, J. Muruzábal, P. Quesada, E. Maraví

RESUMEN
Las infecciones del sistema nervioso central son
enfermedades frecuentes en la atención urgente, ABSTRACT
pudiendo ser de origen bacteriano, parasitario o vírico. Infections of the central nervous system are
Los síntomas iniciales pueden ser inespecíficos, lo que frequent diseases in emergency care. They can have a
puede dificultar y retrasar su diagnóstico, por lo que es bacterial, parasitic or viral origin. Initial symptoms can
de suma importancia toda la información que pueda be non-specific, which can complicate and delay
obtenerse a través de la anamnesis y exploración física diagnosis, hence the extreme importance of all the
y con frecuencia exploraciones complementarias. En information that can be obtained through anamnesis
los últimos cien años, con la introducción de fármacos and physical exploration, with frequent complementary
antibióticos ha disminuido de forma importante la explorations. In the last hundred years, with the
mortalidad secundaria a meningoencefalitis, pero a introduction of antibiotic drugs, there has been a
pesar de ello siguen provocando alta morbi-mortali- significant fall in mortality secondary to
dad. Otros fenómenos, como las campañas de vacuna- meningoencephalitis, but in spite of that they continue
ción, movimientos migratorios, infección por el virus to provoke high morbidity and mortality. Other
de la inmunodeficiencia humana y otros estados de phenomena, such as vaccination campaigns, migratory
inmunosupresión, han dado lugar a importantes cam- movements, infection by HIV and other states of
bios epidemiológicos como son la práctica desapari- immunosuppression, have given rise to important
ción de algunas infecciones o la aparición de otras pre- epidemiological changes such as the virtual
viamente casi inexistentes. La lista de infecciones disappearance of some infections or the appearance of
potenciales de sistema nervioso central es extensa por others that rarely existed previously. The list of
lo que en este artículo de revisión expondremos desde potential infections of the central nervous system is
el punto de vista clínico, diagnóstico y terapéutico las extensive, which is why in this review we set out, from
más frecuentes en nuestro medio y algunas que, aun- the clinical, diagnostic and therapeutic point of view,
que poco frecuentes, pueden requerir atención urgente those that are most frequent in our environment and
por su gravedad. some that, although very infrequent, might require
Palabras clave. Meningoencefalitis. Abscesos emergency attention due to their severity.
cerebrales. VIH. Sistema nervioso. Infecciones oportu- Key words. Meningoencephalitis. Brain abscesses.
nistas. HIV. Nervous system. Opportunist infections.

An. Sist. Sanit. Navar. 2008; 31 (Supl. 1): 99-113.

Servicio de Neurología.Hospital. Virgen del Correspondencia:


Camino. Pamplona. Itziar Gastón Zubimendi
Servicio de Neurología
Hospital Virgen del Camino
C/ Irunlarrea, 3
31011 Pamplona
Tfno. 848 422433
E-mail: igastonz@cfnavarra.es

An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1 99


I. Gastón y otros

INFECCIONES DEL SISTEMA Clínica


NERVIOSO CENTRAL La clínica clásica de presentación con-
Las infecciones del sistema nervioso siste en fiebre, rigidez de nuca y cambio del
central (SNC) son frecuentes y figuran en estado mental, pero esta triada en algunas
el diagnóstico diferencial de diversos sín- series sólo ocurre en el 44% de los casos. Si
dromes neurológicos. Todas ellas necesi- añadimos la cefalea, hasta un 95% de
tan una asistencia urgente, especialmente pacientes presenta al menos 2 de los 4 sín-
las meningitis bacterianas, algunas encefa- tomas-signos5. Otros síntomas acompañan-
litis víricas, los empiemas subdurales o los tes son: raquialgias por irritación radicular,
abscesos epidurales, constituyendo en disminución del nivel de conciencia, crisis
algunos casos verdaderas emergencias epilépticas, clínica neurológica focal por
médicas o quirúrgicas1. afectación encefálica (alteraciones del len-
guaje, debilidad de extremidades, diplo-
Las infecciones del SNC pueden clasifi- pia…) o de pares craneales. Pueden apare-
carse según diferentes criterios: según la cer signos de hipertensión intracraneal
forma de presentación y curso clínico, como afectación bilateral de VI par craneal,
según la región del SNC afecto o según el pero no suele objetivarse edema papilar.
tipo de agente causante. Este último es el
criterio utilizado principalmente en este La ausencia de algunos de los síntomas
capítulo para desarrollar las infecciones o signos clásicos no descarta la posibili-
del SNC más frecuentes en la asistencia clí- dad de una infección del SNC, especial-
nica urgente. mente en algunos grupos de población. Así
por ejemplo, en neonatos la cefalea no
– Bacterianas. Meningoencefalitis puede valorarse, puede no existir rigidez
agudas, meningoencefalitis subagu- de nuca y pueden predominar síntomas y
das, abscesos, empiema subdural, signos inespecíficos de enfermedad gene-
mielitis-absceso epidural. ral: irritabilidad, somnolencia, fiebre y
– Víricas vómitos6. Los ancianos o pacientes inmu-
– Micóticas nosuprimidos pueden no presentar fiebre.
– Parasitarias Todos los datos que puedan obtenerse
mediante la anamnesis y exploración física
– Infecciones por toxinas bacterianas
son importantes en la orientación diagnós-
tica, etiológica (Tabla 1) y terapéutica y
MENINGOENCEFALITIS pueden tener también implicaciones pro-
BACTERIANAS AGUDAS nósticas.
Las meningoencefalitis bacterianas
agudas precisan atención urgente por su Diagnóstico
alta morbi-mortalidad a pesar del descen- Tras haber establecido la sospecha de
so de ésta en los últimos años. La mortali- meningitis el paciente precisa con urgen-
dad de meningitis por Neisseria meningiti- cia las siguientes exploraciones comple-
dis y Haemophillus influenzae era del 75- mentarias:
100% antes de la introducción de trata-
mientos antibióticos a principios del siglo a) Analítica sanguínea con hemoculti-
XX. Las campañas de vacunación de los vos.
últimos 10 años han provocado un descen- b) Estudio de líquido cefalorraquídeo
so en la incidencia de enfermedad por H. (LCR) obtenido por punción lumbar
influenzae y Streptococcus pneumoniae del (PL). Esta debe hacerse con la máxi-
98 y 66% respectivamente. Esto ha dado ma celeridad, salvo riesgo de her-
lugar a un cambio en la epidemiología: niación cerebral por hipertensión
anteriormente la infección por H. influen- intracraneal, en cuyo caso se reco-
zae era la más frecuente y actualmente lo mienda realizar una tomografía
son las debidas a S. pneumoniae (47%), computarizada (TC) craneal previa;
seguida de N. meningitidis (25%) y Listeria ésta puede mostrar lesiones cere-
monocytogenes (8%)2-4. brales, pero su normalidad no des-

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INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL EN URGENCIAS

Tabla 1. Datos clínicos y correlación etiológica en las meningoencefalitis.


Datos clínicos Orientación diagnóstica
Rápida evolución, fallo circulatorio-shock N. meningitidis
Lesiones cutáneas N. meningitidis
Meningitis víricas (enterovirus)
Infección pulmonar/otitis previas S. pneumoniae
H. influenzae en niños
Alcoholismo S. pneumoniae
Esplenectomía
Signos focales (paresia, disfasia)/crisis epilépticas S. pneumoniae
Encefalitis vírica

Tabla 2. Características del líquido cefalorraquídeo.


Presión Aspecto Células (leucoc/mm3) Proteínas Glucosa LDH
Normal 8-20 Transparente < 5/mm3 15-45 mg% 65-80% de glup
Bacteriana Alta (*) Turbio 1.000-10.000 (PMN) (**) ↑ 100-500 < 40% glup ↑ elevada
Vírica Normal/alta Claro < 1000 (MN) 40-100 Normal/leve↓ Normal
Tuberculosa Alta Xantocrómico 50-300 (MN) 60-700 Baja
Fúngica Alta Xantocrómico 50-500 (MN) 100-700 Baja
Carcinomatosis Normal/alta Normal/ 20-300 50-200 Baja
xantocrómico
glup:glucemia en plasma PMN: polimorfonucleares MN: mononucleares
(*) si P>400 mmHg edema cerebral, riesgo de herniación (**): si >50.000cél/mm3 posible absceso roto a ventrículos

carta al 100% el riesgo de hernia- den y suelen ser positivos en las primeras
ción. Los datos clínicos mejores horas tras el tratamiento6.
predictores de riesgo de hernia- Las características del LCR son funda-
ción, aún en ausencia de lesiones en mentales para una primera orientación
la TC, son puntuación en escala de diagnóstica urgente (Tabla 2). Si la PL
Glasgow ≤11, signos de afectación resulta traumática se deben aplicar los
de tronco de encéfalo (alteraciones siguientes factores de corrección: se resta-
pupilares u oculomotoras, respira- rá un leucocito por cada 700 hematíes y 1
ción irregular), crisis epiléptica mg de proteínas por cada 1.000 hematíes.
reciente y signos focales5,7.
Además, ante la sospecha de meningi-
tis debe realizarse siempre urgentemente
En ningún caso la dilación en la realiza- tinción Gram (positiva en el 60%), de gran
ción de la PL debe suponer un retraso en el utilidad en la visualización de diplococo
inicio del tratamiento empírico, debiendo Gram – (N. meningitidis) y diplococos
comenzar éste inmediatamente después Gram + (S. pneumoniae) y tinción de tinta
de la extracción de hemocultivos. La anti- china ante sospecha de Criptococo neofor-
bioterapia administrada 1-2 horas antes de mans. Posteriormente, puede practicarse
la obtención de LCR no disminuye la sensi- estudio serológico, antígenos capsulares,
bilidad diagnóstica del cultivo de LCR si PCR y cultivo, que es positivo en aproxi-
éste se realiza junto con hemocultivos, ni madamente el 75% de los casos.
tampoco disminuye la sensibilidad diag- c) Pruebas de imagen. La TC craneal
nóstica de la aglutinación de partículas de urgente sólo está indicada si se sos-
látex y contrainmunoelectroforesis para pecha hipertensión intracraneal y
antígenos bacterianos. Además, puesto debe practicarse con anterioridad a
que el antibiótico tarda más de 12 horas en la PL. En algunos casos, a lo largo
esterilizar el LCR, los cultivos de éste pue- de la evolución y según ésta o la

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etiología se practicará resonancia Antimicrobianos


magnética (RM).
El tratamiento antibiótico en las salas
de urgencias debe iniciarse siempre de
Tratamiento forma urgente, empírica, incluso sin espe-
La antibioterapia se elige en función de rar a los primeros resultados del LCR y se
una combinación de factores: sintomatolo- modificará en función de los resultados de
gía, edad, alergias del paciente y antece- las exploraciones complementarias. En la
dentes, resistencias a antibióticos en la tabla 3 se recogen las recomendaciones
zona y resultados de LCR si los hay. En la terapéuticas tanto empíricas como en rela-
figura 1 se expone el algoritmo a seguir ción con el agente etiológico. La antibiote-
para el diagnóstico y tratamiento ante la rapia debe prolongarse durante 10-14 días
sospecha de meningitis bacteriana aguda. y/o hasta 7 días después de la desapari-

Síndrome meníngeo

No Fiebre Sí

Brusco Sospecha de meningitis

HSA
Hemocultivos
Dexametasona + Cefotaxima /
Ceftriaxona + Vancomicina +
Ampicilina (en neonatos, ancianos,
embarazadas, inmunosupresión)

Sin signos de Otitis


HIC Inmunosupresión
Signos de HIC

Punción lumbar
Bolus Normal TC craneal
manitol

Anormal
Tratamiento
específico
Mantener
tratamiento
empírico

Figura 1. Algoritmo de manejo de síndrome meníngeo (modificado de Zarranz J, 2007) HSA: hemorra-
gia subaracnoidea. HIC: hipertensión intracraneal.

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Tabla 3. Tratamiento en meningitis bacteriana aguda.

Presentación
Etiología probable Tratamiento empírico Agente etiológico Tratamiento etiológico
clínica
< 3 meses Streptococcus grupo B Cefotaxima 50mg/kg/6h o Ceftriaxona Streptococcus tipo B Ampicilina 100mg/kg/8h o Cefota-
E. coli 50–100 mg/kg/12h + Ampicilina xima 50mg/kg/6h
L. monocytogenes 100mg/kg/8h + Dexametasona
0,15mg/kg/6h L. monocytogenes Ampicilina 2g/4h + Gentamicina

3meses-18 años N. meningitidis 3m-5años: Cefotaxima 50mg/kg/6h o


S. pneumoniae Ceftriaxona 50–100 mg/kg/12h + Van- Neisseria meningitidis 5mg/kg/día o Meropenem 6g/día
H. influenzae comicina 15mg/kg/6h Penicilina G 4MU/4h (cepa sensi-
5-18 años: Cefotaxima 2g/4-6h ó Ceftri- ble) o Ceftriaxona 2g/12h o Clo-
axona 2g/12h+ Vancomicina 1g/12h ramfenicol 25mg/kg/6h (en caso
(+/- ampiclina) + Dexametasona de alergia)

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18-50 años S. pneumoniae Cefotaxima 2g/4-6h iv o Ceftriaxona Streptococcus pneumoniae Vancomicina 500mg/4-6h +
N. meningitidis 2g/12h iv + Ceftriaxona 2g/12h
Vancomicina 1g/12h iv +Dexametaso-
na 8-10mg/6h

>50 años, etilismo S. pneumoniae Cefotaxima 2g/4-6h iv o Ceftriaxona Haemophilus influenzae Ceftriaxoma 75mg/kg/24h
L. monocytogenes 2g/12h iv + Vancomicina1g/12h iv + Enterobacterias Cefotaxima 2g/4-6h+Gentamicina
Ampicilina 2g/4h iv + Dexa 5mg/kg/24h

Fractura cráneo S. aureus, S epidermidis Cefotaxima 2g/4-6h iv o Ceftriaxona Pseudomona aeruginosa Meropenem 2g/8h o Cefepime
Bacilos Gram negativos 2g/12h iv + Vancomicina 1g/12h iv + 2g/8h
S. pneumoniae Desametasona 8-10mg/6h Staphylcoccus aureus Nafcilina 9-12g/24 (cepa sensible)
o Vancomicina 500mg/4-6h (metic
resist)
Neurocirugía, S. aureus, S epidermidis Cefepime 2g/8h iv o Meropenem
fístula de LCR Bacilos Gram negativos 2g/8h iv + Vancomicina 1g/12 iv Staphylcoccus epidermidis Vancomicina 500mg/4-6h (metic
S. pneumoniae resist)

Inmunosupresión L. monocytogenes Bacilo G- Cefepime 2g/8h iv o Meropenem


S. pneumoniae H influenzae 2g/8h iv + Vancomicina 1g/12 iv +
Ampicilina 2g/4h iv
INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL EN URGENCIAS

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ción de la fiebre. En casos menos frecuen- – H. influenzae: rifampicina en convi-


tes (bacilos gram negativos, L. monocyto- vientes <6 años no vacunados
genes y estafilococos) se mantendrá (dosis iguales a la profilaxis en
durante 3-4 semanas. meningococo).
– S. pneumoniae: no precisa profila-
Corticoides xis.
A pesar del tratamiento antibiótico El aislamiento sólo es necesario en
apropiado, la morbilidad de las meningitis meningitis por N. meningitidis o H. influen-
bacterianas en pacientes adultos es alta. La zae durante las primeras 24 de tratamien-
demostración de que algunos componen- to antibiótico; en casos de origen no acla-
tes bacterianos en el LCR podían provocar rado puede mantenerse durante 24 horas
la liberación de citoquinas inflamatorias, tras tratamiento empírico de amplio
dio lugar a ensayos clínicos asociando cor- espectro.
ticoesteroides de forma temprana. Tanto
en meningitis por H. influenzae como en MENINGOENCEFALITIS
meningitis en adultos la evolución clínica
fue mejor con esteroides. Por ello la pobla-
BACTERIANAS SUBAGUDAS-
ción adulta debe asociarse dexametasona MENINGITIS TUBERCULOSA
(10 mg/6 horas) durante 4 días al comienzo La meningitis bacteriana subaguda por
o antes de iniciar el tratamiento antibióti- excelencia es la provocada por micobacte-
co8. Únicamente debe evitarse en pacientes rias. Debe considerarse dentro de la aten-
inmunocomprometidos y en meningitis en ción neurológica urgente, pues el retraso
pacientes neuroquirúrgicos. tanto en su sospecha como en el inicio de
su tratamiento conlleva elevada morbi-
Otros mortalidad.
En caso de síntomas o signos de hiper- La tuberculosis (TB) es la infección
tensión intracraneal o presión de salida de más importante a nivel mundial y suele
LCR >400 mmHg habrá que añadir otras presentarse por brotes epidémicos, si bien
medidas: elevación de la cabecera a 30º, la última ola epidémica dura ya más de 300
manitol al 20% (dosis inicial de 1-1,5mg/kg años, con casos crecientes desde la epide-
intravenoso en 30-40 minutos, posterior- mia del virus de inmunodeficiencia huma-
mente 0,25-0,5 mg/kg/4-6 horas durante 48- na (VIH) y mayor riesgo en este último
72 horas). caso de infección extrapulmonar. Aproxi-
madamente en el 1% de los casos se com-
Tratamiento profiláctico plica con manifestaciones neurológicas
tales como la meningitis tuberculosa,
El tratamiento profiláctico debe reali- tuberculomas y la afectación raquídea con
zarse a la mayor brevedad, si es posible en afectación mielorradicular (mal o enferme-
las primeras 24 horas y en grupos de con- dad de Pott). Habitualmente está provoca-
tacto habitual (familiares, guarderías y da por Mycobacterium tuberculosis y excep-
colegios, incluso en pacientes vacunados, cionalmente por Mycobacterium bovis. La
compañeros de juego). En el personal sani- presentación clínica en forma de meningi-
tario, únicamente si ha habido exposición tis es la de mayor mortalidad de las dife-
o contacto con secreciones nasofaríngeas6: rentes presentaciones de tuberculosis. En
– N. meningitidis: rifampicina 600 países con baja incidencia de TB afecta
mg/12 horas vía oral durante 2 días con más frecuencia a adultos, generalmen-
en adultos; 10 mg/kg/12 horas vía te como reactivación secundaria en situa-
oral en niños >1mes-12 años; 5 ciones de inmunosupresión y menos fre-
mg/kg/12 horas vía oral en niños <1 cuentemente sigue a la primoinfección; en
mes). Alternativas: ciprofloxacino: países con alta incidencia de TB la menin-
500 mg vía oral en dosis única, o gitis tuberculosa es típicamente un proce-
ceftriaxona 250 mg intramuscular so de niños y adolescentes, que se mani-
(i.m.) en dosis única (embarazadas fiesta tres - seis meses después de la pri-
o lactancia). moinfección6,9,10.

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La meningitis tuberculosa se desarrolla normal, pleocitosis de predominio mono-


en dos fases. En la primera, por disemina- nuclear, hiperproteinorraquia y glucosa
ción hematógena, los bacilos llegan a nivel disminuida. En un 10-20% de casos la cifra
subcortical-parenquimatoso y en la segun- de glucosa y/o proteínas puede ser nor-
da se liberan bacilos y material granulo- mal. Si el LCR se obtiene muy temprana-
matoso al espacio subaracnoideo o ventri- mente, puede observarse predominio poli-
cular formando densos exudados. Éstos morfonuclear o eosinofílico.
tienen mayor tropismo por algunas zonas La identificación del bacilo a microsco-
del SNC como la cisterna interpeduncular, pio ocurre únicamente en un 10-30% de
región supraselar, cisterna prepontina, casos. El cultivo de LCR puede alcanzar
médula espinal, envolviendo pares cranea- positividad en el 45-70% de los casos, pero
les y arterias con el consiguiente desarro- el crecimiento del bacilo puede retrasarse
llo de vasculitis a nivel del polígono de hasta 6-8 semanas. La PCR tiene una sensi-
Willis, sistema vertebrobasilar y arterias bilidad del 70-75%.
perforantes de la arteria cerebral media.
Todos estos fenómenos patogénicos y de
Tuberculina
distribución anatómica preferente van a
condicionar la sintomatología. La tuberculina positiva puede apoyar el
diagnóstico, pero su negatividad no lo des-
carta.
Clínica
La clínica de la meningitis tuberculosa Exploraciones radiológicas
es típicamente subaguda, inicialmente
fluctuante, con fiebre de pocos grados, La radiografía de tórax puede mostrar
cansancio, pérdida de peso, cefalea y hallazgos compatibles con TB en el 50-80%
vómitos. Progresivamente la cefalea y los de los casos. En la TC y en la RM cerebral
vómitos se hacen más intensos, se asocia pueden observarse exudados meníngeos
rigidez de nuca, cambios de comporta- basales y en la cisura lateral, que se real-
miento y del estado mental y afectación de zan con gadolinio, pero también pueden
pares craneales (más frecuentemente III, y ser normales, especialmente en fases tem-
también II, VII y VIII). Si el proceso avanza pranas.
pueden aparecer alteraciones del nivel de
conciencia, déficits focales, convulsiones e Otras exploraciones
hipertensión intracraneal. Raramente En aquellos casos con afectación del
puede presentarse con déficits aislados SNC en forma de tuberculomas, puede ser
(neuropatías aisladas de pares craneales o necesaria la realización de biopsia estereo-
accidentes cerebrovasculares) o como una táctica o abierta si no se demuestra infec-
meningitis aguda por liberación masiva de ción por TB extracerebral.
material al espacio subaracnoideo con
El diagnóstico diferencial se plantea
LCR también similar a una meningitis bac-
con otras meningitis granulomatosas (bru-
teriana aguda.
celosis, micosis), otros procesos que pue-
den provocar reacción granulomatosa
Diagnóstico subaguda o crónica (sarcoidosis, enferme-
Además de la clínica ya relatada pre- dad de Behcet, lupus) o meningitis carci-
viamente, en lugares de baja incidencia nomatosa.
debe sospecharse en determinados gru-
pos de riesgo: inmigrantes procedentes de Tratamiento
lugares con alta incidencia de infección
Independientemente de los resultados
por TB, consumo de alcohol o drogas y
de las pruebas o test, si la sospecha de
estados de inmunosupresión.
meningitis por TB es alta es recomenda-
ble iniciar el tratamiento a la mayor bre-
Análisis de LCR vedad. Los cambios en el LCR persisten
Generalmente se obtiene una presión hasta 10-14 días después del inicio tera-
de salida aumentada aunque puede ser péutico o incluso pueden empeorar los

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I. Gastón y otros

parámetros a pesar del tratamiento. Esto Otros


puede ser útil además en el diagnóstico En caso de hidrocefalia secundaria
diferencial con otras meningitis bacteria- comunicante puede tratarse con acetazola-
nas en las que el LCR mejora rápidamente mida o furosemida; si no hay respuesta o en
con la antibioterapia. casos de hidrocefalia no comunicante pue-
den ser necesaria la colocación de una vál-
Farmacológico vula de derivación ventrículo-peritoneal.
El tratamiento farmacológico es combi-
nado; en la tabla 4 se exponen los fárma- ABSCESOS
cos habituales con las dosis y los efectos Los abscesos cerebrales son poco fre-
secundarios más graves. No hay un con- cuentes (1 de cada 10.000 pacientes hospi-
senso sobre la duración del tratamiento. talizados). Habitualmente son secundarios
En general se acepta la utilización de 4 fár- a diseminación de gérmenes por contigüi-
macos (isoniazida + rifampicina + pirazina- dad y con menos frecuencia por disemina-
mida + etambutol o estreptomicina) duran- ción hematógena. En personas inmunocom-
te los 2 primeros meses y si la evolución es petentes, en el 30-60% de los casos la flora
satisfactoria a partir del 3º mes únicamen- responsable es polimicrobiana (Tabla 5)1,12.
te 2 fármacos (isoniazida y rifampicina)
con duración variable: la World Health
Clínica
Organization sugiere 4 meses más, la Ame-
rican Thoracic Society 6-8 meses más y Los abscesos cerebrales cursan como
algunos protocolos sugieren mantener tra- cualquier otra lesión ocupante de espacio
tamiento por un total de 12 meses9. En con cefalea, déficits focales y crisis epilép-
casos de evolución tórpida o según el ticas. Aproximadamente el 50% asocian fie-
lugar de procedencia, puede ser necesario bre. El empeoramiento agudo de la cefalea
hasta 18-24 meses y en infección por tuber- y fiebre junto con nucalgia o rigidez de
culomas hasta 2 años. Debe añadirse piri- nuca sugieren la rotura del absceso a espa-
doxina (10-50 mg/día por v.o.) al uso de cio subaracnoideo. La apertura a sistema
pirazinamida. Debe practicarse análisis ventricular está asociada a una mortalidad
periódico de LCR para verificar la eficacia del 80%.
del tratamiento.
El tratamiento adyuvante con dexame- Diagnóstico
tasona (al menos 8 semanas) de forma tem- La anamnesis, exploración física y ana-
prana mejora la supervivencia de pacien- lítica general pueden no mostrar datos de
tes mayores de 14 años, pero no parece infección. La PL está contraindicada ante
prevenir la severidad de las secuelas11. la sospecha de absceso cerebral o demos-

Tabla 4. Fármacos tuberculostáticos para meningitis tuberculosa.


Fármaco Dosis Efectos secundarios Medidas de control
Isoniacida 5-10mg/kg/día vo Hepatitis, neuropatía, Analítica, piridoxina
crisis convulsivas adyuvante
Rifampicina 10mg/kg/día vo Hepatitis, Analítica
15mg/kg/día (niños) hipersensibilidad
Pirazinamida 25mg/kg/día vo Artralgias, hepatitis, Analítica
hiperuricemia, rash
Estreptomicina 15mg/kg/día im Hipoacusia, disfunción Control función VIII par
30mg/kg/día (niños) vestibular craneal
Etambutol 15-25mg/kg/día vo Neuritis óptica, Control de agudeza visual
neuropatía, rash
Modificado de Bradley, 2004

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Tabla 5. Origen, etiología y localización de abscesos cerebrales.


Origen Germen Localización en SNC
Oídos y mastoides Flora mixta (enterobacterias, Lóbulo temporal/occipital
estreptococo, Bacterioides fragilis,
Pseudomonas)
Senos paranasales Sheptococcus spiralis y milleri, Bacterioides Lóbulo frontal
fragilis
Dientes Flora mixta (estreptococo, Lóbulo frontal
Bacterioides, Fusobacterium)
Pulmón Flora mixta (Fusobacterium, anaerobios, Unión córtico-subcortical
estreptococo, actinomicetos) Múltiples
Cardiopatía congénita Sheptococcus viridans, Sheptococcus Unión córtico-subcortical
microaerofílico, anaerobios Múltiples
Trauma, herida craneal Estafilococo, estreptococo, Clostridium Contiguos a la lesión
Inmunosupresión Hongos, Nocardia, parásitos, enterobacterias Unión córtico-
subcortical/lobares
Múltiples/único
Infección por VIH Polimicrobianos/combinaciones inusuales Unión córtico-
subcortical/lobares
Múltiples/único

tración de éste en neuroimagen. En casos radiológica. El uso de corticoides única-


de sospecha de meningitis aguda, el hallaz- mente se recomienda en casos de grave
go en LCR de pleocitosis > 50.000 célu- hipertensión intracraneal junto con mani-
las/ml debe alertar sobre un absceso roto tol; éste también debe administrarse antes
a espacio subaracnoideo. La TC y/o RM de la cirugía.
cerebral muestran la existencia de una o
El tratamiento quirúrgico puede ser
más masas con edema perilesional y cap-
necesario, bien mediante punción-evacua-
tación de contraste en anillo. En una fase
ción estereotáxica, bien mediante resec-
precoz de cerebritis, en la que aún no ha
ción por craniectomía abierta. Está indica-
ocurrido el encapsulamiento, puede verse
do en pacientes en los que empeora el
únicamente hipodensidad/hipointensidad.
nivel de conciencia, en los abscesos de
fosa posterior o junto a la pared ventricu-
Tratamiento lar y en aquellos en los que la evolución
Actualmente se utiliza al inicio trata- clínica o radiológica no es satisfactoria
miento conservador con antibioterapia en con tratamiento antibiótico.
fase de cerebritis, si los abscesos son múl-
tiples y/o profundos, en pacientes en los EMPIEMA SUBDURAL
que la afectación neurológica y el nivel de
Comparte características con los abs-
conciencia permiten esperar la respuesta a
cesos cerebrales, tanto en factores predis-
antibióticos y en pacientes de avanzada
ponentes, formas de entrada y microorga-
edad o en los que la cirugía esté contrain-
nismos causales como en aspectos tera-
dicada. En adultos se utiliza ceftriaxona
péuticos.
4g/día i.v. (o cefotaxima 2g/4h i.v.) asocia-
do a metronidazol 500-750 mg/6h i.v. Si se Es poco frecuente y se manifiesta con
sospecha origen estafilococócico se añadi- intensa cefalea, fiebre, rigidez de nuca, cri-
rá vancomicina 500mg/6h i.v. o nafcilina sis convulsivas, déficits focales y deterioro
2g/4h i.v. El tratamiento debe mantenerse clínico rápido. Debe sospecharse ante un
6-8 semanas según la evolución clínica y síndrome meníngeo con signos de afecta-

An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1 107


I. Gastón y otros

ción hemisférica unilateral y extensa y en casos); el tipo 1 afecta en el 90% de los


niños menores de 5 años no vacunados casos a adultos y el tipo 2 es más frecuen-
tras meningitis por H. influenzae. La TC o te en neonatos.
RM ayudan al diagnóstico pero con fre- La encefalitis por VHS-1 ocurre habi-
cuencia infraestiman la extensión del tualmente como reactivación y disemina-
empiema. El tratamiento debe iniciarse ción del virus latente y sólo en un tercio de
con urgencia: abordaje quirúrgico por cra- los casos en la primoinfección.
niectomía, cultivo del material purulento
drenado (en el 25% de los casos no se aísla Las manifestaciones clínicas son fiebre
ningún germen) y antibioterapia durante al y cefalea, generalmente con crisis convulsi-
menos 3 semanas1,12. vas, alteración del nivel de conciencia y del
comportamiento, cuadro confusional o sig-
ABSCESO EPIDURAL MEDULAR nos focales. Debe sospecharse en cualquier
paciente con fiebre y alteración de concien-
Los gérmenes más frecuentes son S. cia con o sin otros signos focales14-15. Ambas
aureus, estreptococos, enterobacilos y con cepas pueden producir mielitis.
menos frecuencia M. tuberculosis, Brucella ,
hongos o parásitos (cisticercosis, equino- En el análisis del LCR aparece un
cocosis). Estos llegan al espacio epidural aumento de la presión, pleocitosis linfocí-
por contigüidad o vía hematógena (desde tica (10-1.000 linfocitos/ml), proteínas
la piel y vía intravenosa en consumo de moderadamente elevadas (hasta 200
drogas); ocasionalmente puede ocurrir mg/dl) y glucosa normal; puede haber
tras PL, cirugía local o anestesia epidural. hematíes o xantocromía. En neonatos y
pacientes inmunodeprimidos puede no
Se manifiesta con dolor en espalda, haber pleocitosis. En la mayor parte de los
dolor radicular y rápida progresión a una casos se detecta DNA vírico por PCR, pero
afectación mielo-radicular. Debe practicar- existen falsos negativos si el líquido se
se una RM a la mayor brevedad y la PL está analiza en las primeras 24 horas. Por esta
contraindicada por el riesgo de herniación razón se aconseja no interrumpir el trata-
y diseminación de los gérmenes al espacio miento antiviral específico si existe una
subaracnoideo. El tratamiento de carácter PCR negativa efectuada en un LCR obteni-
urgente comprende descomprensión qui- do en las 72 primeras horas de enferme-
rúrgica y antimicrobianos durante 3-4 dad, salvo confirmación de otro diagnósti-
semanas (6-8 semanas si se asocia con co distinto a la encefalitis herpética16.
osteomielitis)1.
La prueba de neuroimagen más sensi-
ble es la RM cerebral y muestra hiperseñal
MENINGOENCEFALITIS VÍRICAS en T2 en los lóbulos temporal y/o frontal
La lista de virus con capacidad de (de cada 10 casos con TC cerebral normal,
infectar el SNC es amplia (Tabla 6). Produ- 4 tienen alteraciones en RM cerebral). El
cen típicamente meningitis aséptica o electroencefalograma puede estar alterado
encefalitis, siendo el límite entre ambos precozmente con lentificación difusa y
procesos muy sutil por lo que hablamos de descargas punta-onda a 3 Hz en lóbulo
meningoencefalitis. El 50% de las formas temporal.
agudas es secundaria a enterovirus, segui- El diagnóstico diferencial hay que reali-
das de herpes virus (Herpes simple tipo 1, zarlo con otras encefalitis víricas o postin-
virus Varicella zóster y citomegalovirus), fecciosas, abscesos encefálicos por cripto-
mixovirus (parotiditis), retrovirus (VIH) y cocos, toxoplamosis, embolia séptica,
arbovirus como agentes causantes más fre- meningoencefalitis amebiásica, trombosis
cuentes13,14. venosas o encefalopatía mitocondrial17.
El tratamiento debe iniciarse precoz y
ENCEFALITIS POR VIRUS HERPES empíricamente con aciclovir 10 mg/kg
SIMPLE (VHS) (máximo de 800 mg) cada 8 horas en adul-
Es la forma más frecuente de encefalitis tos y 20/ mg/kg en neonatos y niños,
esporádica en Estados Unidos (10% de los durante 14-21 días, ajustando la dosis

108 An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1


INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL EN URGENCIAS

Tabla 6. Infecciones del SNS por virus.


Agentes causales de encefalitis viral
Virus DNA Herpes VHS I y II, VZV, CMV, VEB.
HVH 6, 7 y 8, VH-B
Adenovirus Encefalitis postvacunales (poxvirus)
Virus RNA Mixovirus Gripe, Parainfluenza, Parotiditis, Sarampión
Arbovirus Transmitidos por mosquitos: E. de California, E. De Saint Louis, E.
Equina del Oeste, E. Equina del Este, E. Japonesa, E. Equina
Venezolana
Transmitidos por garrapatas E. De Europa Central, E. Rusa
No transmitidos por artrópodos: Rubeola
Picornavirus Enterovirus, Coxsackievirus
Poliovirus, Echovirus Rinovirus
Arenavirus Virus de la coriomeningitis linfocitaria, Fiebre Hemorrágica.
Rabdovirus Rabia
Retrovirus VIH, HTLV 1 y 2
Papovirus JC

según la función renal. El tratamiento ha matoma correspondiente; posteriormente


reducido la mortalidad de un 70% a un 20% puede aparecer meningoencefalitis que se
y más de un tercio de los pacientes quedan manifiesta típicamente 7-10 días después
sin secuelas o con secuelas leves. Existen de la erupción cutánea con clínica similar
recidivas tras tratamiento (más frecuente a otras meningitis víricas pero con fre-
en neonatos y niños); si es por reinfección cuencia acompañada de crisis convulsi-
(PCR positiva) se tratará de nuevo con aci- vas. Pueden aparecer síntomas focales tar-
clovir o con foscarnet (si la cepa es resis- díos por vasculitis (arteria carótida y sus
tente a aciclovir). grandes ramas en el herpes oftálmico y
arterias medulares en herpes dorsal)14,16.
El VHS tipo 2 provoca en neonatos una
meningoencefalitis grave, con frecuencia El LCR es similar al del VHS. El virus
recidivante que requiere tratamiento pre- puede cultivarse o identificarse por PCR
coz, incluso antes de la aparición de sínto- de LCR.
mas neurológicos. En adultos aparece un El tratamiento en la forma cutánea se
síndrome meníngeo, generalmente en rela- realiza con aciclovir oral y en las meningo-
ción con la primoinfeccion, una semana encefalitis igual que en encefalitis por VHS.
después de las lesiones genitales. El 20% Puede administrarse corticoides en caso
presentará episodios recidivantes de de mielitis o de vasculopatía e inmunoglo-
meningitis. Puede cultivarse el virus desde bulinas del VHZ como profilaxis de pacien-
el LCR. Otra complicaciones más infrecuen- tes inmunodeficientes seronegativos y
tes son la mielitis y la retención de orina. embarazadas expuestos al VHZ (125 unida-
des/10 kg de peso vía i.m. en las primeras
VIRUS HESPES ZOSTER (VHZ) 96 horas, preferiblemente en las primeras
48 horas del contacto).
Tras producirse la infección primaria,
el Virus Herpes Zoster (VHZ), permanece
latente en las células de los ganglios de la OTROS HESPES VIRUS)
raíz dorsal. Al reactivarse se manifiesta Otros virus del grupo herpes virus como
con dolor y lesiones vesiculosas en el der- el citomegalovirus (CMV) pueden provocar

An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1 109


I. Gastón y otros

encefalitis severas en fetos y en pacientes más elevada en homosexuales y consumi-


inmunodeprimidos. Se trata con ganciclovir dores de drogas intravenosas. La mayoría
o ciclofovir, pero en pacientes con síndrome de los seropositivos son asintomáticos y
de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) la menos del 1% desarrollan la clínica típica
respuesta terapéutica no es buena. También consistente en paraparesia espástica. El
el VHS tipo 6 está involucrado en meningo- virus tiene un periodo de incubación de 20
encefalitis en pacientes inmunodeprimidos años por lo que la clínica suele aparecer a
y responde a ganciclovir. los 50 años de edad, como una paraparesia
espástica o mieloneuropatía progresiva
ENTEROVIRUS (en raros casos se presenta como mielitis
transversa aguda). También puede darse
La familia de los enterovirus general- ataxia cerebelosa, miositis, nistagmus, vér-
mente provoca enfermedades subclínicas tigo, sordera, neuritis del nervio óptico,
o ligeramente febriles, pero también pue- leucemia de linfocitos T del adulto, uveítis,
den producir meningitis aséptica, encefali- síndrome de Sjögren, artropatía y alveolitis
tis, poliomielitis anterior aguda, ataxia linfocitaria. El VLTH-II se asocia con la leu-
anterior aguda, neuropatía óptica y perifé- cemia de células peludas atípica, micosis
rica, polineuritis de pares craneales y mial- fungoide, otros cánceres hematológicos y
gia epidémica. una mielopatía similar al VLTH tipo I.
La meningitis por enterovirus es la El LCR tiene un aumento de linfocitos y
meningitis más frecuente, secundaria proteínas, bandas oligoclonales y aumento
mayoritariamente a coxsakie virus y ecovi- de la fracción de la gammaglobulina con
rus que se transmiten por vía orofecal y síntesis intratecal14.
raramente por la respiración. Generalmen-
te se asocia a cuadros febriles, faríngeos y El tratamiento se dirige contra el com-
digestivos a finales del verano y el otoño. ponente inflamatorio de la enfermedad
Otros hallazgos sugestivos de infección con metilprednisolona y si no hay respues-
por enterovirus son el exantema caracte- ta con inmunoglobulinas
rístico de la herpangina o el de la boca,
manos y pies. El LCR tiene entre 250 y 1000 Virus de la inmunodeficiencia
leucocitos/ml con un 10-15% de polimorfo- humana
nucleares. El diagnóstico se realiza por
PCR con una sensibilidad del 95% y una El VIH está asociado a un amplio núme-
especificidad del 100%. La meningitis es ro de enfermedades neurológicas bien
autolimitada y únicamente precisa trata- como enfermedad primaria, bien como
miento sintomático. Rara vez es grave o infecciones oportunistas. En la primoinfec-
deja secuelas salvo algunas formas de ción puede producirse una meningoencefa-
infección como la provocada por el Entero- litis aséptica. Las complicaciones posterio-
virus 70, que cursa con conjuntivitis hemo- res por infección directa del VIH son dete-
rrágica y dos semanas después parálisis rioro cognitivo incluso demencia, mielopa-
flácida de miembros inferiores16. tía vacuolar, encefalitis, neuropatía y enfer-
medad de segunda motoneurona simulando
una esclerosis lateral amiotrófica17,18.
RETROVIRUS
Los virus patógenos para el hombre
INFECCIONES MICÓTICAS
son el virus linfotrópico T humano (VLTH)
tipo I y tipo II y el VIH. Las infecciones por hongos del SNC
son poco frecuentes. Suelen ser difíciles de
Retrovirus de la inmunodeficiencia diagnosticar y pueden pasar desapercibi-
das o diagnosticarse erróneamente. Habi-
no humana. Virus Linfotrópico T tualmente ocurren en sujetos inmunode-
humano (VLTH) tipo I y tipo II primidos, pero algunos como Cryptococcus
Este virus es endémico en Japón, Tai- neoformans, Hystoplasma capsulatum, Coc-
wán y Caribe. En Europa y Estados Unidos cidioides inmitis y Blastomyces dermatitis
la incidencia de infecciones por VLTH es pueden afectar a sujetos sanos. Las mico-

110 An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1


INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL EN URGENCIAS

sis más frecuentes de SNC de forma global es alta. El tratamiento con anfotericina B
son secundarias a C. neoformans y Cándida es de dudosa eficacia, siendo más eficaz la
albicans, seguidas de Coccidioides, Aspergi- forma de anfotericina B lipososómica
llus y Cigomicetos (Mucor). (AmBisome).
Clínicamente la micosis del SNC puede En la mucormicosis los factores de pre-
tener diferentes presentaciones, dependien- disposición más importantes son la diabe-
do de las características de crecimiento de tes y la acidosis; con menos frecuencia el
los hongos durante la infección sistémica. cáncer (sobre todo leucemias y linfomas),
C. neoformans generalmente da lugar a drogadicción, utilización de quelantes del
una meningitis de carácter subagudo-cró- hierro en hemocromatosis y transplante
nico. Los hallazgos clínicos, de LCR y renal. Generalmente asienta en la cavidad
radiológicos plantean el diagnóstico dife- nasal y senos paranasales y la supuración
rencial con la meningitis tuberculosa. El nasal de color negro es muy sugestiva de
diagnóstico definitivo viene de la demos- mucormicosis. A nivel del SNC produce
tración del hongo mediante tinción con una reacción tisular necrotizante y trom-
tinta china, antígeno o cultivo. El trata- bosis de vasos cercanos a la infección
miento consiste en la combinación de (seno cavernoso y carótida interna). El
anfotericina B liposoluble y 5-fluocitosina; pronóstico es habitualmente fatal, con
en pacientes inmunodeprimidos debe rea- algunos casos de supervivencia en diabéti-
lizarse prevención secundaria con flucona- cos si se corrigen rápidamente la hiperglu-
zol de por vida. cemia y la acidosis y se inicia precozmente
tratamiento con anfotericina B12,19.
C. albicans es, de todas las candidas, la
que con más frecuencia afecta al SNC.
Suele cursar como encefalitis por múlti- INFECCIÓN DE SNC POR PARÁSITOS
ples microabscesos intraparenquimatosos
secundarios a vasculitis. Debe sospechar- Toxoplasmosis
se siempre que simultáneamente exista En pacientes adultos, la infección por
candidiasis cutánea y oftálmica. Se trata Toxoplasma gondii es generalmente asinto-
igual que C. neoformans. mática (en un 5% de los casos aparece un
H. capsulatum, debido a su tendencia a síndrome mononucleósico) y su reactiva-
invadir vasos sanguíneos, puede provocar ción es muy poco frecuente en personas
síntomas de tipo vascular, pero puede sin alteraciones de la inmunidad. La toxo-
manifestarse como meningitis basal, cere- plasmosis cerebral es la infección oportu-
britis o abscesos. Sólo ocurre en zonas nista más frecuente del SNC en pacientes
endémicas, pero puede tardar en manifes- con SIDA aunque parece que su incidencia
tarse clínicamente por lo que es importan- va disminuyendo desde la utilización del
te interrogar sobre la existencia de viajes a tratamiento HAART (terapia antirretroviral
zonas de mayor incidencia. altamente activa).
La infección por Aspergillus ocurre en Clínicamente suele presentarse con cri-
personas inmunodeprimidas o con enfer- sis epilépticas, cefalea, fiebre y clínica de
medades debilitantes, siendo los más pro- hipertensión intracraneal. En la TC o RM
pensos los pacientes sometidos a cirugía se suelen observar lesiones nodulares que
cardiaca o trasplante. La afectación del captan contraste en anillo, con edema en
SNC puede tener lugar por invasión direc- la fase aguda. En caso de poder realizarse
ta (infecciones de senos paranasales) o la PL suele mostrar pleocitosis mononu-
por diseminación hematógena por lo que clear con hiperproteinorraquia. Existen
puede provocar abscesos cerebrales o técnicas de PCR para toxoplasma en LCR.
bien síndromes deficitarios de perfil vas- Sólo con la sospecha clínica debe iniciarse
cular (vasculitis, aneurismas micóticos, tratamiento farmacológico: pirimetamina
hemorragias cerebrales). La infección pul- (primera dosis de 200 mg y después 50-75
monar puede alcanzar por contigüidad las mg/día), sulfadiazina (4-6 g/día) y ácido
vértebras torácicas y desde ahí extenderse fólico (10 mg/día) durante 4-6 semanas; en
al espacio epidural. La tasa de mortalidad pacientes inmunodeprimidos debe mante-

An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1 111


I. Gastón y otros

nerse profilaxis de por vida. La biopsia horas más. Si existe hipertensión intracra-
queda relegada a casos con evolución des- neal por hidrocefalia no comunicante
favorable con tratamiento antiparasitario. puede ser necesaria cirugía mediante deri-
En el diagnóstico diferencial deben incluir- vación ventrículo-peritoneal12,20.
se tuberculomas, linfomas, otros abscesos
infecciosos y metástasis12,20.
INFECCIONES POR TOXINAS
Cisticercosis El SNC puede verse afectado por la
invasión de toxinas liberadas por bacilos
La cisticercosis es consecuencia de la anaerobios grampositivos como el Clostri-
infección por Taenia solium. La neurocisti- dium botulinum y Clostridium tetani.
cercosis es endémica en Iberoamérica,
India, China y muchos de los países de
Asia y África. En nuestro medio es poco Botulismo
frecuente, sin embargo está aumentando la Generalmente tiene lugar por consumo
incidencia debido a la llegada de población de alimentos que contienen la toxina, con
inmigrante procedente de zonas endémi- menos frecuencia por heridas o por inyec-
cas. Puesto que la clínica puede empezar ción subcutánea en drogadictos; en niños
entre 1 y 35 años después del contacto con pude ser de origen intestinal y se ha rela-
el parásito y varios años después de la cionado con la ingesta de miel. En las for-
infección del SNC, podemos observar mas más frecuentes en adultos, inicialmen-
casos de neurocisticercosis muchos años te aparecen síntomas gastrointestinales
después de haber abandonado el país de inespecíficos (dolor abdominal, náuseas,
origen. vómitos, diarreas) para dar paso después
Existen principalmente dos formas de a síntomas por déficit colinérgico: debili-
afectación de SNC por T. solium: forma dad generalizada, diplopia, midriasis hipo-
parenquimatosa y forma racemosa (quis- rreactiva, disfagia, estreñimiento, seque-
tes de cisticerco a nivel intraventricular o dad de boca. El inicio de los síntomas tiene
subaracnoideo). Cualquiera de ellas puede lugar entre 2 y 48 horas después de la
precisar atención urgente y puede mani- ingesta. Plantea diagnóstico diferencial
festarse con crisis epilépticas focales o con la miastenia gravis, el síndrome de
generalizadas, meningitis linfocitaria en las Eaton-Lambert, la polirradiculoneuritis
formas subaracnoideas e intraventricula- inflamatoria o la poliomielitis. El diagnósti-
res o por rotura de quistes, hipertensión co se confirma con la detección de la toxi-
intracraneal y en alguna ocasión hemorra- na en suero o en alimento contaminado
gia subaracnoidea por vasculitis. (mediante bioanálisis en ratón), con culti-
La clínica, junto con la procedencia del vo para C. botulinum.
paciente, puede sugerir el diagnóstico. En Los pacientes deben permanecer en UCI
la TC craneal pueden verse diferentes por riesgo de compromiso respiratorio
lesiones: quistes, calcificaciones por quis- agudo. En adultos se administra antitoxina
tes antiguos o datos indirectos como para bloquear la toxina circulante aunque en
hidrocefalia. La RM muestra generalmente infección por vía subcutánea no es efectiva.
lesiones hipointensas con contenido intra-
quístico que se corresponde con el escólex
del parásito. En las radiografías de partes Tétanos
blandas pueden objetivarse calcificacio- Es una enfermedad secundaria a la
nes musculares. tetanospasmina o tetanolisina liberada por
El tratamiento actual recomendado es el Clostridium tetani. Las esporas pueden
albendazol (15 mk/kg/día) + prednisona sobrevivir durante años hasta encontrar
(50 mg/día) durante 8 días, o bien prazi- las condiciones idóneas de anaerobiosis
quantel en tres dosis de 25 mg/kg con (en úlceras, heridas…) y convertirse en la
intervalo interdosis de 2 horas junto con forma que libera la toxina. El período de
dexametasona 10 mg, 5 horas después y incubación es habitualmente de dos sema-
dexametasona 10 mg/día durante 48-72 nas (varía desde horas a más de un mes).

112 An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1


INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL EN URGENCIAS

Lo verdaderamente importante del 7. JOFFE AR. Lumbar puncture and brain


tétanos es que se trata de un proceso herniation in acute bacterial meningitis: a
grave, con alta mortalidad y que es preve- review. J Intensive Care Med 2007; 22: 194-
nible con campañas de inmunización. 207.
8. DE GANS J, VAN DE BEEK D, for the European
La clínica se caracteriza por una con- Dexamethasone in Adulthood Bacterial
tracción muscular excesiva. Existen algu- Meningitis Study Investigators. N Engl J
nas formas focales (en una extremidad) o Med 2002; 347:1549-1556.
el tétanos cefálico (por heridas de cabeza 9. CECHINI D, AMBROSINI J, BREZZO C, CORTI M,
y cuello) pero es más frecuente que sea RYBKO A, PÉREZ M et al. Tuberculous
generalizado con disfagia, trismo facial, meningitis in HIV-infected patients: drug
rigidez de la musculatura axial con postu- susceptibility and clinical outcome. AIDS
ra en opistótonos y también cambios vege- 2007; 21: 373-374.
tativos como aumento de secreciones y 10. PETER R DONALD, JOHAN F SHOEMAN.
diarreas. Inicialmente los espasmos son Tuberculous meningitis. N Engl J Med 2004;
espontáneos, pero progresivamente se van 351: 1719-1720.
provocando por estímulos externos por lo 11. THWAITES GE, NGUYEN DB, NGUYEN HD, HOANG
que la exploración física es dificultosa. TQ, DO TT, NGUYEN TC. Dexamethasone for
El tratamiento incluye la administra- the treatment of tuberculous meningitis in
adolescents and adults. N Engl J Med 2004;
ción de metronidazol, limpieza y desbrida-
351: 1741-1751.
miento de la herida, inmunoglobulina
humana antitetánica (útil sólo para neutra- 12. VELASCO F, ZARRANZ JJ. Enfermedades
lizar la toxina circulante pero no la toxina infecciosas del sistema nervioso central.
En: J.J. Zarranz ed. Neurología. España:
en SNC), ingreso en UCI para intubación Elsevier 2008: 281-335.
orotraqueal y relajación-sedación. Habi-
tualmente los síntomas remiten en unas 8 13. KUPILA L, VUORINEN T, VAINIONPAA R, HUKKANEN
V, MARTTILA RJ, KOTILAINEN P. Etiology of
semanas.
aseptic meningitis and encephalitis in an
adult population. Neurology 2006; 66: 75-80.
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An. Sist. Sanit. Navar. 2008 Vol. 31, Suplemento 1 113

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