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Resumen
Se presenta un estudio preliminar de adaptación y validación de la Escala de Clima Motivacional de Clase (Alonso & García,
Vol. 6, núm. 2
1987; Irureta Núñez, 1995) en una muestra de adolescentes escolarizados residentes en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Los resultados del análisis psicométrico se discuten a la luz de las implicaciones prácticas en el ámbito de aplicación del
instrumento y en relación a la posible influencia de factores culturales.
Palabras clave: Clima motivacional de clase - adolescentes - educación
Abstract
•
Preliminary results from a validation and adaptation study of the Motivational Class Climate Scale (Alonso & García, 1987;
Irureta Núñez, 1995) are presented. The research was conducted on a sample of Argentinian adolescent students from Buenos
* Universidad de Buenos Aires-Conicet, Argentina. Doctora en Psicología, profesora adjunta en la Universidad de Buenos
Aires, investigadora adjunta del Conicet (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas). E-mail:
mliporac@psi.uba.ar
** Universidad de Buenos Aires, Argentina. Licenciado en Psicología, auxiliar docente en la Universidad de Buenos Aires..
*** Universidad de Buenos Aires-Conicet, Argentina. Doctora en Psicología, profesora titular en la Universidad de Buenos
Aires, investigadora independiente del Conicet.
variadas, que pueden ser referidas al factor g y entre otros (Alonso & Sola, 1987; Alonso Tapia,
que cambian continuamente, llegando a diversi- 1991; Anderson, 1973; Johnson & Johnson, 1985;
ficarse y pudiendo clasificarse y subclasificarse de Owens & Straton, 1980; Silbergeld, Koening, &
muchas maneras. Afirmaba que a pesar de las altas Manderscheid, 1977, 1979).
correlaciones entre vocabulario u otras medidas También se ha documentado la importancia de
de habilidad verbal y los logros escolares, estos las autopercepciones que, desde el vamos, inci-
últimos involucran cualidades de personalidad e den en la motivación de logro y, por ende, tam-
intereses, desarrollando en cada rama de la cien- bién en el desempeño académico (Ames 1992;
cia o de la matemática su propia habilidad, par- Dweck & Bempechat, 1983; Weiner & Kukla,
cialmente separada del resto. 1970). Examinando estas percepciones a partir de
Por otra parte, Raven (1999), examinando las autoinformes de los propios estudiantes, se ha
relaciones de las habilidades cognitivas con la co- destacado el influjo del método y del contexto en
nación y la motivación, recordaba un clásico tra- la interpretación que estos hacen acerca de sus
bajo de Maistiriaux (1959), que postulaba una logros y de su inteligencia (Bempechat, Jimenez &
notable asociación entre la inteligencia y la clase Boulay, 1998; Lawrence-Lightfoot & Hoffman-
de actividad que las personas identifican como Davis, 1997).
disfrutable: los sujetos que obtenían las puntuacio- Variables tales como el background educativo
Mercedes Fernández, Paula Ongarato y María Martina
nes más elevadas en el Test de Matrices Progresivas social y familiar, la inteligencia y la personalidad
(Raven, 1936, 1956; Raven, Court & Raven, 1992, de niños y adolescentes parecen influir en el estatus
1993), hallaban más satisfacción desempeñando social, el desempeño educativo y las competen-
tareas clasificadas vulgarmente como intelectua- cias sociales adultas, trasladados al comportamien-
les, mientras que los que exhibían puntuaciones to observable por medio de la motivación de logro
más bajas se sentían atraídos por tareas prácticas. (Cassidy & Lynn, 1991).
Raven afirma que se trata de diferentes perspec- La forma en que los docentes son capaces de
tivas de la misma variable psicológica: motivación aplicar los conocimientos provenientes de la psi-
e inteligencia. Según su criterio, algunas investi- cología educacional y la pedagogía en el aula, con
gaciones (Flynn, 1984, 1987, 1998, 1999; Mc un énfasis especial en su habilidad para la toma
Clelland, 1961) mostraban que las diferencias en de decisiones prácticas, surgen como aspectos a
el desempeño real cotidiano de grupos étnicos y ser tenidos en cuenta en la creación de un ade-
religiosos, eran mucho mayores que las diferen- cuado clima motivacional de clase. Así, se han
cias en su inteligencia medida, no pudiendo, por identificado seis variables de importancia en el pro-
ende, explicarse por medio de ellas. Así, las dis- ceso de enseñanza-aprendizaje: los objetivos trans-
paridades en motivos, valores y cuestiones tales mitidos en forma de instrucciones, las diferencias
como el apoyo social, parecen mejores predicto- individuales, el comportamiento del docente, los
res del desempeño intelectual en la vida real que principios básicos del aprendizaje, el método de
la inteligencia captada por medio de tests. En esta instrucción y la evaluación del comportamiento
misma línea, Zeidner (2001) destacaba la relación de los educandos (Dembo, 1991).
entre la inteligencia general y la conación. En la década de los noventa, y ya en los prime-
14 Trasladando estas afirmaciones al ámbito edu- ros años del decenio actual, el interés en el tema
cativo, el logro de un adecuado clima de trabajo aparece acrecentado. Farkasova (2000) y Simpson
en el aula que resulte en un aumento de la mo- (1999) investigaron la relación entre habilidades
tivación, la perseverancia y la autorregulación, pa- intelectuales, motivación y preferencias de estu-
rece ser una vía bastante segura para intentar elevar dio en sujetos talentosos. Kakavoulis (1998) estu-
el desempeño de los estudiantes, al menos en las dió el estímulo para el aprendizaje escolar durante
actividades vulgarmente llamadas intelectuales que la transición de la educación primaria a la escuela
son comunes en la vida cotidiana y escolar de las media. Al analizar un sistema educativo organiza-
personas. De esta manera, diversos autores resal- do mediante tutorías, Derry & Potts (1998), halla-
tan la influencia de factores tales como el ritmo ron que los tutores clasificaban a los estudiantes
de la clase, el orden y la claridad de los objetivos con base en dos vectores: su inteligencia y su mo-
de trabajo, los mensajes implícitos y explícitos del tivación. En otra línea de abordaje, Kreitler & Zigler
docente al grupo de alumnos, así como la aten- (1990) intentaron explicar las relaciones entre la
ción a las diferencias individuales de los distintos motivación y el desempeño en diversas tareas de
estudiantes y grupos, y las interacciones que el aprendizaje en el contexto de la psicología expe-
profesor es capaz de generar en sus discípulos, rimental. Por su lado, Christie (2001) examinó cua-
litativamente las percepciones de estudiantes del cialmente, la profundización del análisis de la in-
nivel medio correspondientes a su inteligencia, su fluencia del clima motivacional de clase en los
éxito y fracaso académico y aspectos vinculados aprendizajes específicos y los desempeños inte-
a las instrucciones brindadas a los alumnos en la lectuales, se vuelve un tema de importancia para
clase. comprender e intervenir en los resortes capaces
La estimulación cognitiva parental hacia los ni- de efectuar modificaciones positivas, en este sen-
ños parecería afectar los recursos motivacionales tido, en el ámbito del aula. Es así que la medición
de estos últimos, de manera que la involucración válida y confiable del clima motivacional de clase
de la madre estaría jugando un papel significativo se constituye en una tarea a abordar en aras de
en el nivel de motivación y de logro en la escuela lograr arribar a diagnósticos de situación tendien-
media en el caso de las niñas; en tanto que en el tes a planificar intervenciones concretas en el
caso de los varones, las intervenciones influyentes ámbito de aplicación. Por otra parte, también
serían las paternas (Trama, 2002). Sin embargo, resultan fundamentales el diseño y la adaptación
no toda la evidencia recogida converge en una de técnicas de evaluación, destinadas a aportar evi-
misma dirección: un estudio en el que se analiza- dencia empírica en investigaciones futuras que
ba la contribución única de la motivación para el continúen el camino ya trazado por los autores
logro académico, manteniendo controladas las ha- dedicados al área. En este sentido, en cuanto a los
bilidades cognitivas, el CI y la motivación, re- desarrollos producidos en países iberoamericanos,
sultaron no correlacionados, en tanto que las resalta el trabajo iniciado en España por Alonso &
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capacidades cognitivas eran, por mucho, el mejor García (1987), que fue continuado por Irureta
predictor del logro escolar. Estos hallazgos cues- Núñez (1995) en Venezuela, y que consistió en el
tionan la creencia de muchos educadores acerca diseño y adaptación de la Escala de Clima Moti-
del papel decisivo de la motivación como deter- vacional de Clase. El precursor del instrumento
minante del desempeño académico (Gagne & St nombrado —el CMC1 (Alonso & García, 1987)—
Pere, 2002). ha sido creado con la intención de evaluar este
•
Una reciente investigación mostró cómo el feed- constructo en alumnos de 11 a 15 años, cursantes
back de los docentes hace que los estudiantes de la Educación General Básica. Cuenta con 70
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Se trabajó sobre una muestra de 751 adolescentes nas correcciones en la jerga empleada, en el sis-
de ambos sexos (40% de varones, 50% de muje- tema de respuesta inicialmente propuesto y en la
res), cuyas edades variaban entre los 12 y los 19 consigna general. La redacción de los indicadores
años ( edad= 14.26; dt= 1.49). Todos eran alum- parecía ajustarse a las dimensiones que basaron la
nos del ciclo medio de enseñanza –en la ciudad escala, a juicio de los expertos que colaboraron
de Buenos Aires se mantiene el sistema anterior a en este trabajo.
•
la ley federal de educación, que prevé siete gra- Una vez terminada la fase inicial antes descrip-
dos en la educación general básica y cinco años ta, se procedió a realizar la administración piloto
Ítem Formulación F1 F2 F3
1 Los profesores explican con claridad cómo hay que hacer los trabajos .621
3 Los profesores explican los temas de tal forma que la mayoría (incluído .684
yo) los comprendemos sin dificultad
4 Es fácil entender a los profesores o estudiar, porque casi ningún .618
compañero interrumpe o molesta
26 A nuestros profesores les gusta detenerse en cada tema el tiempo .636
necesario para que lo entendamos
33 Los alumnos nos sentimos presionados porque nos manadan a hacer .667
muchas cosas y nos dan poco tiempo para terminarlas
34 Los profesores nos felicitan individualmente cuando sacamos una nota .569
mejor que la que habíamos obtenido antes
35 Los profesores nos enseñan de tal manera, que las asignaturas .66
se nos hacen fáciles
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38 Gracias al empeño de los profesores, las clases empiezan con puntualidad .782
45 Da gusto estudiar las materias: sabemos lo que hay que hacer, .579
nadie molesta y no se pierde tiempo
50 En mi clase cada uno se ocupa de lo suyo y nadie te ayuda .755
aunque lo necesites
58 Los profesores nos mandan trabajos, pero no nos explican cómo hacerlos .741
•
66 Los profesores valoran a los alumnos sobre todo por las notas que sacan, .535
número de ítemes que se conservan, luego de eli- permitido saturaciones dobles, quedándose con las
minar aquellos que exhiben inadecuadas discri- más altas (Irureta Núñez, 1995), en tanto que en 19
minaciones o cargas fuera de los límites este caso se han eliminado los indicadores con doble
consensuados. Por otro lado, la solución factorial implicación en más de un factor. Estas distinciones,
obtenida guarda cierta coherencia con las dimen- seguramente, estarán siendo responsables de las
siones postuladas como basamento de la versiones diferencias en las estructuras factoriales obtenidas.
precedentes —original, española, y venezolana—. Sin embargo, los tres factores extraídos en el aná-
Si se compara la estructura aquí obtenida con la lisis argentino, guardan alguna semejanza con los
venezolana, se observa que en el caso presente se venezolanos.
ha conservado una cantidad de elementos mucho El Factor 1 contiene los ítemes referidos a la
menor que en aquélla. Esto se debe, seguramente, claridad en las explicaciones de los temas, obje-
a que en el análisis previo no se han efectuado tivos y procedimientos de trabajo, con el fin de
cálculos de la capacidad disciminatoria y se han que los tópicos se comprendan y resulten más
tolerado, por ejemplo, cargas factoriales menores simples y las actividades se realicen de manera
(>.30), en tanto que aquí se ha establecido el corte ordenada y sencilla, todo esto sostenido por la ac-
en .40; por otra parte, el trabajo venezolano ha titud de los alumnos: nadie interrumpe, molesta,
alborota o pierde tiempo. De manera que esta Entonces, desde el punto de vista del ámbito
dimensión podría nominarse como Claridad, or- de aplicación de la escala, es importante destacar
den y organización de docentes y alumnos. El que, a juicio de los alumnos, parecen existir tres
Factor 2 agrupa ítemes que aluden a situaciones grandes grupos de elementos a tener en cuenta
en que los profesores indican muchas tareas, sin en la evaluación del clima motivacional de las
dar el tiempo suficiente para terminarlas; o sin ex- clases en general: Claridad, orden y organización
plicar cómo hacerlas; circunstancias en las que no de docentes y alumnos. Actitud, o comportamiento
existe la ayuda mutua entre pares y donde los docente positivos sobre el uso del tiempo y el
maestros valoran a los alumnos por las calificacio- refuerzo positivo, por una parte; y Actitudes o
nes y no por cuánto aprenden. Esta dimensión comportamientos negativos para el aprendizaje y
parece corresponder a Actitudes, o comportamien- clima de trabajo en docentes y alumnos, por la
tos negativos para el aprendizaje y clima de tra- otra. Así, tomando en cuenta los elementos que,
bajo en docentes y alumnos en general. Por último, a consideración de los alumnos, son importantes
el Factor 3 contiene los reactivos que se refieren para elevar la motivación para el trabajo escolar,
al uso del tiempo que hacen los profesores —pun- los docentes podrían transferir estos vectores a sus
tualidad, tiempo necesario dedicado a cada ex- clases, en situaciones reales y concretas, con el fin
plicación y a la resolución de ejercicios en clase—, de intervenir de manera eficaz en el mejoramien-
Mercedes Fernández, Paula Ongarato y María Martina
así como al refuerzo positivo que brindan a quien to de la enseñanza. El diagnóstico de situaciones
logra una mejora en sus calificaciones, es decir concretas en cuanto al clima motivacional impe-
que podría, por caso, nombrarse como Actitud, o rante en el aula conduciría, en primer lugar, a la
comportamiento docente positivos sobre el uso toma de conciencia por parte de los docentes
del tiempo y el refuerzo positivo. Nótese que los acerca de los comportamientos reales y los men-
factores 1 y 2 se centran en conductas exhibidas sajes implícitos y explícitos que dirigen a sus dis-
por docentes y alumnos, en tanto que el tercero cípulos; estos mensajes y conductas estarían
se focaliza sólo en los profesores. Las dimensio- influyendo, directa o indirectamente, en las ex-
nes 1 y 3 son positivas, en tanto que la 2 es ne- pectativas de logro de los estudiantes, en sus
gativa para el aprendizaje y el clima de trabajo. motivos orientadores del aprendizaje, del trabajo
Estas son otras diferencias respecto del análisis ve- intelectual y del rendimiento académico en gene-
nezolano, en el que aparecían factores donde se ral. Esta toma de conciencia permitiría el diseño
agrupaban comportamientos o actitudes opues- de estrategias de acción más adecuadas a cada
tos, proponiéndose una situación de competen- grupo de alumnos y a cada clase de contenidos
cia entre polaridades —comportamiento “x” versus en general, así como a cada estudiante y su bac-
comportamiento opuesto “no-x”—, en tanto que kground en particular.
en este caso no se establecen polos dentro de una Desde el otro ángulo, la vertiente teórica, apa-
misma dimensión, sino que dos de ellas agrupan rece un avance preliminar en el estudio del clima
aspectos positivos y la otra, aspectos negativos. La motivacional de clase, con miras a identificar los
misma oposición que se daba en los factores aspectos que los estudiantes resaltan en tales si-
obtenidos en el trabajo de Venezuela aparecía en tuaciones de aprendizaje formal, con el objeto de
20 las dimensiones teóricamente postuladas para la profundizar y continuar investigaciones en este
redacción de los ítemes en la versión original es- sentido. Para ello, debería completarse este pri-
pañola, mientras que en la muestra argentina, los mer intento con trabajos en los que se analice la
factores se agrupan de manera tal, que la oposi- validez concurrente y predictiva del instrumento
ción se da entre dimensiones positivas y negativas aquí presentado, dado que en esta investigación
y no dentro de ellas. Es posible que estas discre- no se ha dispuesto de criterios externos adecua-
pancias se deban a la influencia de variables de dos para tales estimaciones. Así, acrecentar el
naturaleza cultural, que estarían influyendo en las volumen de evidencia empírica, destinada a la
determinaciones de las respuestas de los exami- comprensión de este concepto, redundará en
nados. A la vez, ninguno de estos tres aspectos beneficios para su investigación en general, y de
parece jugar un papel más decisivo que los otros los instrumentos destinados a medirlo, en particu-
dos, en cuanto a la valoración que los sujetos hacen lar, dentro de una mejora de las intervenciones,
del clima de clases, dados los porcentajes de va- factibles a ser diseñadas, para introducir varia-
rianza equilibrados que cada factor explica. Sin ciones en las situaciones educativas cotidianas.
duda esto merece una profundización en investi- Sin duda, la influencia de factores culturales es
gaciones ulteriores acerca del constructo. un tema a considerar en la comparación de los
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