Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Sistema
Escalae,
una
puerta
abierta
a
la
calidad
educativa
desde
el
aula.
Antoni
Zabala
i
Vidiella,
Federico
Malpica
Basurto,
Glòria
Santaeulària
i
Gómez
1 Presentación
Hoy
en
día,
prácticamente
en
todos
los
ámbitos
profesionales,
se
ha
generalizado
el
trabajo
en
equipo.
La
mayoría
de
profesiones
no
se
pueden
entender
sin
un
trabajo
colegiado,
altamente
supervisado,
que
permita
a
los
profesionales
ser
buenos
aplicadores
y
sentirse
seguros
para
comportarse
también
como
estrategas,
intentar
prácticas
nuevas
y
ser
reconocidos
por
ellas.
Uno
de
los
pocos
ámbitos
profesionales
que
aún
quedan
en
el
aislamiento
y
la
falta
de
supervisión
es
el
ámbito
educativo.
Razones
pueden
haber
muchas,
pero
básicamente
a
los
profesores
se
nos
ha
obviado
la
suficiente
atención
y
formación
como
profesionales,
y
por
otro
lado,
los
responsables
de
los
centros
educativos
no
se
han
sentido
con
la
autoridad
moral
para
exigir
una
metodología
de
la
institución,
se
han
conformado
con
exigir
sólo
la
impartición
de
los
contenidos.
Incluso
con
respecto
a
la
evaluación,
normalmente
sólo
se
ha
venido
exigiendo
el
qué
y
el
cuándo,
pero
no
el
cómo
ni
el
por
qué.
El
resultado
es
el
que
todos
podemos
observar:
ansiedad
en
el
ejercicio
de
nuestra
labor
dentro
de
las
aulas,
instituciones
arcaicas,
pobres
resultados
educativos
de
manera
general,
frustración
por
parte
de
docentes,
directivos,
estudiantes,
familias
y
sociedad.
Parece
que
esto
de
“cada
maestrillo
con
su
librillo”
nos
ha
hecho
mucho
más
daño
del
que
nos
podíamos
imaginar.
La
razón
es
muy
sencilla:
¿qué
profesor
puede
garantizar
por
si
mismo
los
resultados
totales
del
proceso
de
aprendizaje
de
un
estudiante
con
respecto
de
un
programa
formativo
donde
intervenga
más
de
un
docente?
O
lo
que
es
lo
mismo,
¿por
qué
los
docentes
cargamos
con
más
responsabilidad
de
la
que
nos
corresponde?
En
organizaciones
donde
cada
profesional
puede
seguir
la
metodología
que
quiera
(lo
cual
sería
inadmisible
en
prácticamente
cualquier
ámbito
laboral),
la
ansiedad,
los
“marrones”,
las
injusticias
laborales
se
suceden
un
día
sí
y
otro
también;
los
sistemas
de
calidad
se
han
quedado
en
la
superficie,
y
sólo
garantizan
que
la
gestión
y
lo
administrativo
se
registre,
se
evalúe
y
se
mejore
constantemente:
documentación
válida,
entradas,
salidas,
planes,
programas,
entregas
a
tiempo,
formatos
bien
rellenados,
incidencias
organizativas
detectadas
y
mejoradas,
...
Pero
se
ha
dejado
de
lado
el
proceso
clave
de
toda
institución
educativa:
el
proceso
de
enseñanza‐
aprendizaje.
Un
proceso
que
más
bien
son
dos
interrelacionados,
el
proceso
de
enseñanza
o
lo
que
hace
el
docente
en
el
aula
y
el
proceso
de
aprendizaje,
es
decir
lo
que
produce
el
estudiante
en
su
cabeza.
Ninguno
de
estos
procesos
cuenta
generalmente
con
protocolos
claros
que
todos
los
docentes
podamos
seguir
con
seguridad
en
nuestro
centro,
estudiarlos
y
mejorarlos
continuamente.
Este
artículo
pretende
describir
el
sistema
de
calidad
pedagógica
Escalae,
que
está
permitiendo
abrir
una
puerta
hacia
la
calidad
educativa,
con
el
objetivo
de
facilitar
y
mejorar
la
práctica
docente.
El
Sistema
Escalae
permite
elaborar,
en
forma
de
guía,
el
plan
estratégico
pedagógico
de
cada
centro
en
particular
y
ofrece
la
metodología
para
que,
con
base
en
dicho
plan,
se
puedan
implementar
las
mejoras
necesarias
en
el
aula,
de
forma
continua.
En
otras
palabras,
el
sistema
de
calidad
Escalae
responde
a
diferentes
preguntas
como
son:
• ¿Cuál
es
el
ideal
pedagógico
común
en
el
centro
para
lograr
esas
finalidades?
• ¿Cuál
es
la
realidad
de
la
práctica
educativa
del
profesorado?
• ¿Qué
aspectos
puede
mejorar
el
profesorado
del
centro
para
lograr
su
ideal
pedagógico?
• ¿Cómo
se
pueden
mejorar
esos
aspectos?
En
definitiva
ayuda
a
establecer
la
gestión
de
la
calidad
sobre
la
práctica
educativa
a
partir
de
la
mejora
continua
de
lo
que
sucede
en
las
aulas.
El
presente
artículo
tiene
por
objetivo
explicar
en
que
consiste
el
Sistema
de
Calidad
Pedagógica
Escalae,
sus
orígenes
y
alcances,
y
la
metodología
de
implementación
en
un
centro
educativo.
2 Introducción
El
profesorado
de
los
centros
educativos
se
encuentra
cada
día
con
dificultades
y
barreras
que
no
permiten
desarrollar
su
función
correctamente.
Es
fácil
decir
que
el
objetivo
de
todo
profesor
es
que
sus
alumnos
aprendan
de
una
manera
significativa,
pero
dentro
del
aula
hay
infinidad
de
elementos
que
van
dificultando
el
cumplimiento
de
ese
objetivo.
Se
encuentran
dificultades
con
respecto
a
la
atención
a
la
diversidad,
al
número
de
alumnos,
a
la
falta
de
motivación
del
alumnado,
a
la
presión
para
terminar
el
temario,
a
la
falta
de
tiempo,
de
recursos,
etc.
El
profesor
se
encuentra
solo
y
sin
guía
para
poder
afrontar
todas
estas
dificultades
que,
con
frecuencia
se
dan
al
mismo
tiempo
dentro
del
aula.
E
incluso,
a
veces,
resulta
complicado
identificar
cuáles
son
en
realidad
las
dificultades
que
no
permiten
alcanzar
el
objetivo
último
de
la
formación:
que
los
alumnos
aprendan.
¿Cuál
es
la
manera
de
resolver
o
eliminar
estas
dificultades?
¿Cómo
pueden
los
profesores
conseguir
su
objetivo?
¿Cómo
podemos
conocer
el
nivel
de
calidad
que
estamos
ofreciendo
en
nuestros
centros
educativos?
¿Cuál
es
el
sistema
para
mejorar
la
calidad
de
las
aulas
de
nuestras
escuelas,
institutos,
universidades,
etc.?
3 El Sistema de Calidad Escalae, paso a paso
Escalae
es
un
Sistema
o
conjunto
de
herramientas
y
procedimientos
que
permiten
diagnosticar,
reconocer
las
buenas
prácticas,
mejorar
de
manera
continua
y
certificar
la
calidad
pedagógica
de
los
procesos
de
enseñanza
y
de
aprendizaje
en
una
organización
educativa,
partiendo
de
los
referentes
y
finalidades
educativas
de
la
propia
institución,
en
combinación
con
una
serie
de
criterios
universales
fundamentados
en
el
conocimiento
científico
del
que
disponemos
sobre
los
ámbitos
de
la
psicología
del
aprendizaje,
la
pedagogía
y
la
organización
escolar.
El
objetivo
principal
de
Escalae
es
profundizar
en
el
desarrollo
de
las
tres
culturas
que
garantizan
la
calidad
en
el
aula.
Profundizar
en
una
cultura
de
la
fundamentación
pedagógica
sobre
las
decisiones
que
se
toman
en
los
centros
con
respecto
a
la
práctica
educativa
y
a
las
acciones
que
afectan
lo
que
sucede
en
las
aulas,
a
partir
de
criterios
de
calidad
contrastados
y
comunes
a
todos
los
docentes
de
un
mismo
centro
educativo.
Impulsar
una
cultura
de
trabajo
colaborativo
para
reforzar
y
mejorar
de
manera
coordinada/compartida
la
práctica
docente
y
los
resultados
de
aprendizaje
de
los
estudiantes.
Implantar
un
sistema
que
permita
el
desarrollo
de
una
cultura
de
la
calidad
y
mejora
continua
en
el
aula
y
llevarla
hasta
sus
últimas
consecuencias,
hasta
los
procesos
clave
de
enseñanza
y
aprendizaje,
utilizando
para
ello
la
misma
filosofía
de
la
mejora
continua
en
que
se
basan
otros
sistemas
y
modelos
de
calidad
complementarios
(ver
Figura
1).
Figura
1:
Dinámica
de
la
mejora
continua
en
ISO,
EFQM
y
Escalae.
3.3 El alcance de Escalae, Sistema de calidad en el aula que
complementa la calidad de la institución
El
Sistema
Escalae,
como
estándar
de
calidad
en
el
aula,
complementa
e
integra
el
proceso
de
calidad
a
nivel
organizativo,
con
herramientas
específicas
que
permiten
ampliar
y
profundizar
en
el
sistema
de
gestión,
en
la
mejora
continua
y
en
el
progreso
de
calidad
hacia
la
excelencia,
proporcionando
criterios
e
indicadores
específicos
para
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje
(ver
Figura
2).
Figura
2:
Comparación
ISO
‐
EFQM‐
Planificación
Estratégica
‐
Escalae.
A
pesar
de
que
el
Sistema
Escalae
de
calidad
en
los
procesos
de
aula
puede
ser
utilizado
de
forma
independiente,
tanto
en
su
implantación
como
en
su
certificación,
también
puede
integrarse
en
el
proceso
de
implantación
y
certificación
de
otros
sistemas
y
modelos
de
calidad.
En
concreto:
Se
integra
con
el
modelo
EFQM:
A
partir
del
desarrollo
profesional
docente
(en
el
Criterio
1
de
Liderazgo).
A
partir
del
diseño
y
gestión
sistemática
de
los
procesos
de
enseñanza‐aprendizaje,
de
la
introducción
de
mejoras
necesarias
en
los
procesos
a
partir
de
los
objetivos
educativos
y
las
finalidades
de
la
institución,
con
el
fin
de
satisfacer
al
alumnado
y
otros
grupos
de
interés,
aportando
valor
(en
el
Criterio
5
de
procesos).
En
los
procesos
y
resultados
de
aprendizaje
en
función
de
los
objetivos
educativos
(en
los
Criterios
6,
7,
8
y
9
de
Resultados).
Se
integra
con
la
Norma
ISO
9001:2000:
En
el
apartado
6
de
la
Norma
a
partir
del
desarrollo
profesional
(formación,
participación
y
competencias)
y
en
la
infraestructura
(equipamiento,
ambiente
de
trabajo
y
materiales).
En
el
apartado
7
a
partir
de
la
planificación
de
los
procesos
de
enseñanza‐aprendizaje
y
su
relación
con
el
desarrollo
profesional
docente
y
la
organización
escolar
que
apoye
dichos
procesos:
a)
procesos
relacionados
con
el
aprendizaje
(cliente),
desde
el
currículum
hasta
la
programación
de
aula
(diseño
y
desarrollo);
b)
impartición
con
metodología
y
evaluación
común
en
función
de
los
objetivos
educativos
y
la
naturaleza
de
los
contenidos
(con
la
producción
y
prestación
del
servicio);
c)
reflexión
compartida
sobre
la
práctica
educativa
(con
el
control
del
seguimiento
y
la
medición).
En
el
apartado
8
a
partir
del
seguimiento,
medición
y
mejora
de
los
procesos
de
enseñanza‐aprendizaje,
así
como
de
las
competencias
docentes
y
de
la
organización
en
función
de
dichos
procesos
(revisión
y
mejora
continua).
Se
integra
con
la
Planificación
estratégica:
Aportando
criterios
contrastados
(no
arbitrarios)
para
la
reflexión
sobre
las
fortalezas,
debilidades,
amenazas
y
oportunidades
de
desarrollo
y
mejora
de
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje,
así
como
de
su
relación
con
el
desarrollo
profesional
y
la
organización
del
centro.
Para
poder
valorar
la
práctica
educativa
Escalae
utiliza
fundamentalmente
dos
referentes:
Por
un
lado
las
finalidades
Educativas
del
centro,
es
decir
lo
que
pretende
la
institución
de
su
alumnado
cuando
éstos
acaben
la
formación.
Dicho
referente
es
diferente
para
cada
centro
y
ayuda
a
generar
criterios
adaptados
a
la
realidad
de
cada
institución
educativa.
Por
otro
lado,
Escalae
utiliza
un
referente
técnico
fundamentado
en
las
investigaciones
que
se
han
llevado
a
la
práctica
sobre
los
principios
psicopedagógicos
del
aprendizaje
y
que
están
relacionados
con
teorías
como
las
siguientes:
• Teoría
genética
del
desarrollo
intelectual
(Piaget
y
discípulos)
• Las
teorías
del
procesamiento
humano
de
la
información
(Rumelhart)
• Elaboraciones
teóricas
sobre
componentes
motivacionales,
emocionales
y
relacionales
del
aprendizaje
escolar
(Bandura)
• La
teoría
de
la
asimilación
(Ausubel)
• La
teoría
sociocultural
del
desarrollo
y
del
aprendizaje
(Vigotski)
Figura
3:
Referentes
de
Escalae
Tomando
como
referentes
las
finalidades
educativas
del
centro
(lo
que
pretende
de
sus
alumnos)
y
los
principios
psicopedagógicos
del
aprendizaje,
se
puede
determinar
la
práctica
educativa
más
adecuada
para
ese
centro
educativo,
así
como
criterios
de
calidad
en
diversos
ámbitos
que
afectan
a
los
procesos
de
enseñanza
y
de
aprendizaje.
Estos
criterios
específicos
de
la
práctica
educativa
tienen
una
lógica
derivativa,
es
decir,
que
cada
uno
de
ellos
responde
o
es
una
consecuencia
de
los
anteriores.
La
división
en
ámbitos
permite
hacer
un
análisis
de
los
componentes
que
afectan
la
práctica
educativa
y
que
están
relacionados
de
manera
sistémica,
de
forma
que
posteriormente
pueda
facilitar
la
identificación
de
las
diferentes
áreas
de
mejora
pero
también
su
integración
en
la
planificación
del
centro.
El
esquema
que
explica
la
dinámica
de
los
ámbitos
de
calidad
en
la
práctica
educativa
a
partir
de
los
diferentes
componentes
que
influyen
en
la
enseñanza‐aprendizaje
es
el
siguiente:
Figura
4:
Dinámica
de
los
ámbitos
de
calidad
• En
primer
lugar
se
parte
de
las
finalidades
de
la
institución,
es
decir,
lo
que
se
pretende
de
su
alumnado
cuando
acabe
la
formación
y
se
definen
los
objetivos
educativos
para
los
diferentes
cursos,
asignaturas,
unidades
temáticas,
etc.
(por
qué
enseñar).
• En
función
de
los
objetivos
definidos
se
determinan
los
contenidos
(qué
enseñar)
que
se
dividen
según
su
tipología:
factuales,
conceptuales,
procedimentales
y
actitudinales.
• A
partir
del
conocimiento
de
los
procesos
de
aprendizaje
y
las
capacidades
cognitivas
del
alumnado
se
determinan
la
ordenación
y
secuenciación
de
los
contenidos
(cuándo
enseñar).
• Asimismo,
a
partir
de
este
conocimiento
científico
del
proceso
de
aprendizaje
se
diseñan
las
secuencias
didácticas
pertinentes
a
los
contenidos
objeto
de
aprendizaje,
es
decir
la
metodología
(cómo
enseñar).
• Finalmente,
se
define
la
evaluación
(para
qué,
qué,
cuándo
y
cómo
evaluar),
teniendo
en
cuenta
que
se
debe
valorar
la
consecución
de
los
objetivos
educativos
definidos.
• La
intervención
educativa
bajo
este
modelo
requiere
forzosamente
un
nivel
de
desarrollo
profesional
de
los
docentes
que
permita
aplicarlo
en
todas
las
aulas
y
a
todos
los
estudiantes.
• El
modelo
de
intervención
educativa
requiere
del
apoyo
de
una
organización
escolar
específica
que
soporte
y
permita
la
aplicación
de
la
metodología
pedagógica
común.
Así
pues,
la
aportación
de
Escalae,
en
este
sentido,
es
que
integra
la
organización
del
centro
y
el
desarrollo
profesional
de
los
docentes
en
los
procesos
fundamentales
de
los
procesos
de
enseñanza
y
de
aprendizaje,
teniendo
como
base
y
fundamento
los
procesos
de
aula.
El
Sistema
de
Calidad
Pedagógica
Escalae
ofrece
metodologías
que
se
pueden
desarrollar
y
certificar
de
forma
independiente,
aunque
siguen
un
orden
lógico:
1. El
Plan
Estratégico
Pedagógico:
es
el
proceso
por
el
cual
se
determina
qué
mejoras
de
la
práctica
educativa
puede
aplicar
el
centro
a
corto,
medio
y
largo
plazos,
partiendo
del
perfil
pedagógico
ideal
del
centro
y
de
su
realidad.
2. Las
Comunidades
de
Mejora
entre
docentes:
es
el
proceso
por
el
cual
se
determinan
e
implementan
propuestas
de
mejora
de
la
práctica
educativa
en
el
centro
a
partir
del
método
de
trabajo
por
proyectos.
El Plan Estratégico Pedagógico
El
Plan
Estratégico
Pedagógico
(PEP)
consiste
en
la
elaboración,
por
el
propio
centro
y
con
ayuda
y
guía
de
Escalae,
de
un
documento
que
determina
la
situación
deseada
del
centro
(finalidades
educativas),
la
situación
real
del
centro
(realidad
educativa)
y
las
propuestas
de
mejora
necesarias
a
corto,
mediano
y
largo
plazos
para
llegar
a
la
situación
deseada
del
centro
educativo,
partir
de
un
autodiagnóstico
pedagógico.
En
definitiva
es
un
plan
que
resume
qué
quiere
el
centro,
dónde
está
y
lo
más
importante,
qué
tiene
que
hacer
para
llegar
a
conseguir
sus
finalidades
educativas.
Así
pues,
el
objetivo
principal
del
PEP
es
la
identificación
de
propuestas
de
mejora
pedagógicas
con
criterios
de
calidad.
Es
un
paso
previo
para
la
certificación
de
la
mejora
continua
en
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje.
Proceso
Para
llegar
a
obtener
el
PEP
se
siguen
los
siguientes
pasos:
• La
institución
educativa
proporciona
sus
finalidades
educativas
a
Escalae.
Es
decir,
lo
que
pretende
de
sus
alumnos
cuando
éstos
acaben
sus
estudios.
• Un
equipo
técnico
define,
en
función
de
dichas
finalidades,
cual
debe
ser
el
modelo
de
intervención
educativa
ideal
o
perfil
pedagógico
de
su
programa
formativo
(o
etapa)
con
características
generales
y
específicas
para
cada
uno
de
los
distintos
ámbitos
de
calidad
ya
comentados
(objetivos
didácticos,
contenidos
de
aprendizaje,
secuenciación
de
los
contenidos,
metodología
pedagógica,
evaluación
educativa)
así
como
su
relación
con
los
ámbitos
de
organización
del
centro
y
desarrollo
profesional
de
sus
docentes.
• Una
vez
obtenida
la
información
del
ideal
pedagógico
de
cada
programa
o
etapa
(según
el
caso),
se
compara
con
la
situación
real
de
la
institución
para
cada
ámbito
de
calidad
en
el
aula,
así
como
de
los
condicionantes
que
pueden
influir
para
aplicar
dicho
Perfil
Pedagógico
(cultura,
contexto,
competencias
y
recursos),
priorizando
aquellos
aspectos
donde
se
pueda
trabajar
con
mayor
efectividad
y
posibilidades
de
éxito
en
relación
con
los
procesos
de
enseñanza
y
de
aprendizaje.
Figura
5:
Procesos
para
la
Comunidad
de
Mejora
Resultado
• Una
vez
realizado
todo
el
proceso,
la
institución
obtiene
un
Plan
Estratégico
Pedagógico
(PEP)
en
el
que
se
identifican
actividades
para
mejorar
lo
que
sucede
en
el
aula,
y
su
relación
con
la
organización
del
centro
y
el
desarrollo
profesional
docente,
a
corto,
mediano
y
largo
plazos.
• A
diferencia
del
Proyecto
Educativo
de
Centro
(PEC)
o
del
Proyecto
Curricular
de
Centro
(PCC)
que
son
herramientas
estáticas
en
cuanto
a
que
determinan
lo
que
el
centro
quiere
conseguir
pero
no
cómo
conseguirlo,
el
PEP
es
una
herramienta
dinámica
que
permite
identificar
los
pasos
y
acciones
precisas
para
conseguir
los
objetivos
planteados
por
el
centro
con
un
enfoque
desde
el
aula,
además
de
forma
no
arbitraria,
es
decir,
con
pasos
y
acciones
fundamentados
en
criterios
de
calidad
contrastados
y
en
las
finalidades
educativas
del
centro.
• Además,
la
institución
obtiene
el
modelo
de
intervención
educativa
ideal
para
cada
programa
formativo
o
etapa
educativa
de
su
institución,
con
el
objetivo
de
conocer
la
meta
a
la
que
debe
llegar
para
conseguir
la
máxima
calidad
pedagógica,
según
sus
propias
finalidades
educativas.
• Esta
guía
ayuda
en
el
diseño
de
los
programas
formativos,
la
contratación
y
desarrollo
de
los
docentes,
el
diseño
de
organización
y
hasta
en
el
diseño/mejora
del
edificio
y
el
equipamiento,
para
lograr
la
máxima
congruencia
de
todos
los
elementos
que
influyen
en
los
procesos
y
resultados
de
la
enseñanza
y
del
aprendizaje.
En
el
proceso
de
elaboración
de
un
PEP
interviene
todo
el
centro
educativo.
Sin
embargo,
la
dedicación
y
recursos
que
se
han
de
disponer
son
diferentes
según
el
rol
y
la
posición
que
se
desempeña
en
el
centro.
Proceso
Según
la
temática
de
la
propuesta
que
se
vaya
a
desarrollar
en
una
comunidad
de
mejora
y
las
necesidades
del
centro
educativo,
se
puede
requerir
un
método
de
trabajo
u
otro.
Por
eso
en
Escalae
se
ofrecen
4
métodos
de
trabajo
por
proyectos
para
la
mejora
continua
que
el
centro
puede
escoger
según
el
nivel
competencial
de
los
participantes
en
relación
con
el
tema
y
objetivo
de
la
mejora
pedagógica
(bajo,
bajo‐
medio,
medio‐alto
y
alto):
Figura
6:
Métodos
de
trabajo
para
la
mejora
continua.
Resultado
• Desde
un
punto
de
vista
de
cultura
del
centro,
las
Comunidades
de
Mejora
logran
poco
a
poco
que
los
profesores
se
comporten
de
manera
reflexiva
sobre
su
práctica
educativa,
trabajen
conjuntamente
y
de
forma
sistemática
para
evaluar,
implementar
y
mejorar
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje.
• Se
pasa
del
voluntarismo
de
los
grupos
o
equipos
de
mejora,
al
despliegue
de
un
plan
común
de
centro,
que
permite
realizar
una
gestión
muy
eficiente
y
específica
de
los
problemas
reales
del
aula
y
del
centro.
• Se
consiguen
reducciones
drásticas
en
la
burocracia
y
del
tiempo
invertido
en
la
reflexión
compartida
de
los
docentes
y
en
la
implementación
de
las
mejoras
en
las
aulas.
• Se
mejora
la
comunicación/coordinación
entre
la
dirección
y
los
docentes,
enfocando
la
mejora
continua
de
toda
la
institución
para
apoyar
la
práctica
educativa
y
orientar
los
recursos
para
la
resolución
de
las
necesidades
de
los
docentes.
• Además
de
la
mejora
específica
de
los
procesos
de
aula,
esta
metodología
fortalece
las
tres
culturas
profesionales
a
través
de
la
práctica
constante
del
trabajo
colaborativo,
la
fundamentación
pedagógica
y
la
gestión
de
los
procesos
utilizando
criterios
de
calidad
y
mejora
continua.
• Tanto
el
diseño
de
las
propuestas
de
mejora
como
su
implementación
en
las
aulas,
permiten
desarrollar
competencias
docentes
desde
el
punto
de
vista
reflexivo
y
de
la
práctica
educativa.
• En
la
elaboración
de
las
propuestas
de
mejora
como
en
su
posterior
implementación
se
requiere
la
intervención
de
todo
el
centro
educativo.
Sin
embargo,
la
dedicación
y
recursos
que
se
han
de
disponer
son
diferentes
según
el
rol
que
se
desempeña
en
la
Comunidad
de
Mejora
y
la
posición
que
se
desempeña
en
el
centro.
1
En
España
la
entidad
de
certificación
TÜV
ofrece
ya
esta
posibilidad.
• Permitir
que
los
responsables
(equipo
directivo,
propietarios)
tengan
un
enfoque
claro
y
común
sobre
los
aspectos
a
mejorar
en
las
aulas.
A
diferencia
de
otras
certificaciones
que
se
llevan
a
cabo
en
las
instituciones
educativas,
las
cuales
parten
de
una
visión
más
organizativa
para
intentar
llegar
al
aula,
la
Certificación
Escalae
de
la
calidad
en
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje
permite
certificar
la
mejora
continua
y
la
calidad
de
los
procesos
de
aula
mediante
criterios
e
indicadores
específicos
de
rigor
científico
con
base
en
las
finalidades
educativas
de
cada
institución.
Pudiendo
integrarlas
a
la
organización
a
través
de
su
implicación
con
el
desarrollo
profesional
de
las
personas
y
de
su
organización.
4 Experiencia de aplicación del Sistema Escalae
A
continuación
se
explica
una
experiencia
de
aplicación
del
Sistema
Escalae
de
cada
uno
de
los
módulos,
en
dos
instituciones
educativas,
una
de
Formación
Profesional
y
otra
de
Bachillerato
de
Cataluña
y
México,
respectivamente.
Descripción
de
la
situación
inicial
del
centro:
El
IES
Escola
del
Treball
es
un
Instituto
de
Educación
Secundaria
y
Superior
de
Formación
Profesional
del
Departamento
de
Educación
de
la
Generalitat
de
Catalunya.
Este
centro
ofrece
enseñanzas
postobligatorias
de
bachillerato
y
de
formación
profesional
y
tiene
como
objetivo
ofrecer
una
formación
integral
para
formar
profesionales
cualificados
a
partir
del
aprendizaje
en
base
a
competencias,
la
inserción
laboral
y
la
promoción
de
los
estudios.
Forma
parte
de
la
red
de
calidad
y
Mejora
continúa
del
Departamento
de
Educación
de
la
Generalitat
de
Catalunya
y
participa
en
la
implementación
del
certificado
internacional
ISO
9001
.
Proceso
de
trabajo
y
desarrollo
de
la
metodología
seguida:
Los
pasos
a
seguir
fueron
los
siguientes:
1. El
centro
proporcionó
sus
finalidades
educativas
al
Equipo
Técnico
rellenando
el
informe
inicial
de
finalidades
educativas.
2. El
equipo
técnico
definió,
en
función
de
estas
finalidades,
cual
debería
ser
el
modelo
de
intervención
educativa
ideal
o
Perfil
Pedagógico
de
su
programa
formativo.
También
definió
cual
debería
ser
su
relación
con
los
ámbitos
de
la
organización
del
centro
y
desarrollo
profesional.
3. Una
vez
obtenida
la
información
del
Perfil
Pedagógico
se
comparó
con
la
situación
real
de
la
institución
a
partir
del
cuestionario
de
análisis
de
la
realidad.
4. A
continuación,
se
aplicó
el
instrumento
priorizando
los
aspectos
en
qué
se
podía
trabajar
con
más
efectividad
y
posibilidades
de
éxito
con
relación
al
proceso
de
enseñanza‐aprendizaje.
5. El
equipo
técnico
elaboró
el
Plan
Estratégico
Pedagógico
y
el
centro
lo
presento
al
claustro
del
centro
por
su
aprobación.
Resultados
logrados:
El
centro
obtuvo
su
Plan
Estratégico
Pedagógico
en
el
cual
se
identifican
actividades
para
mejorar
lo
que
sucede
en
el
aula,
y
su
relación
con
la
organización
del
centro
y
el
desarrollo
profesional
docente,
a
corto,
mediano
y
largo
plazos.
Además,
la
institución
obtuvo
el
modelo
de
intervención
educativa
ideal
(Perfil
Pedagógico)
para
Ciclos
Formativos,
con
el
objetivo
de
conocer
la
meta
a
la
cual
hace
falta
llegar
para
conseguir
la
máxima
calidad
pedagógica,
según
sus
propias
finalidades
educativas.
Descripción
de
la
situación
inicial
del
centro:
La
Universidad
Contemporánea
promueve
un
modelo
de
formación
basado
en
competencias
educativas
y
práctica
profesional,
el
cual
se
aleja
del
modelo
tradicional
academicista
y
premia
el
desarrollo
de
habilidades
y
competencias
para
la
vida
personal
y
profesional,
es
decir,
el
desarrollo
integral
de
las
personas.
Ésta
Institución
ha
emprendido,
desde
hace
varios
años
un
camino
hacia
la
excelencia
educativa,
adoptando
el
Modelo
Iberoamericano
de
Gestión
de
la
Excelencia
y
más
recientemente,
implantando
un
sistema
de
calidad
educativa
bajo
los
estándares
de
la
norma
ISO
9001:2000.
El
perfil
docente
que
predomina
en
la
organización
es
el
de
un
profesional
experto
en
un
área
temática
(normalmente
ejecutivos
o
empresarios),
pero
que
tienen
escasos
o
nulos
conocimientos
pedagógicos
y
en
la
práctica
docente
aplican
los
modelos
que
aprendieron
cuando
ellos
mismos
eran
estudiantes..
Proceso
de
trabajo
y
desarrollo
de
la
metodología
seguida:
A
continuación
se
describen
las
acciones
realizadas
para
alcanzar
el
objetivo
de
la
Comunidad
de
Mejora:
La
primera
acción
realizada
por
el
grupo
fue
la
de
definir
actuaciones,
actividades,
comportamientos,
etc.
que
se
consideraban
deshonestos
(en
diferentes
ámbitos,
lugares
o
momentos)
para
poder
extraer
conclusiones
sobre
la
concepción
que
los
participantes
tenían
sobre
la
honestidad.
De
esta
manera,
el
grupo
se
puso
de
acuerdo
en
la
definición
de
qué
se
consideraban
situaciones
deshonestas.
El
resultado
fue
la
definición
de
34
situaciones.
Partiendo
de
este
listado
de
situaciones
deshonestas,
se
pudo
realizar
una
definición
de
acciones
o
indicaciones
para
intentar
erradicarlas
o
mejorarlas.
A
partir
de
la
definición
de
acciones
de
mejora,
se
realizó
una
primera
aproximación
a
la
definición
de
las
normas
de
comportamientos
honestos
para
profesorado
y
alumnado.
A
continuación
se
realizó
una
agrupación
de
las
normas
que
hacían
referencia
a
los
comportamientos
deseables
por
parte
del
alumnado
teniendo
en
cuenta
aquellas
en
las
que
se
informa
de
comportamientos
parecidos,
por
categorías
de
valores,
situaciones
similares,
etc.
En
definitiva,
se
fusionaron
aquellas
normas
que
eran
parecidas
o
complementarias
lo
que
dio
como
resultado
una
agrupación
final
de
8.
A
partir
de
la
agrupación
de
normas,
se
definieron
los
derechos
y
deberes
que
competen
al
alumnado
para
dar
seguimiento
al
cumplimiento
de
cada
una
de
las
normas
de
comportamiento
deseadas.
Finalmente,
una
vez
determinados
los
derechos
y
deberes,
se
pudieron
definir
las
consecuencias
lógicas
del
no
cumplimiento
de
los
deberes
y
la
gradación
de
las
consecuencias
en
caso
de
reincidencia.
De
esta
manera
se
obtuvo
una
descripción
de
las
acciones
a
realizar
para
poder
detectar
actuaciones
deshonestas
y
actuar
sobre
ellas.
Resultados
logrados:
El
resultado
final
ha
sido
la
creación
del
documento
para
aplicar
en
las
aulas,
donde
se
describe
el
proceso
de
creación
de
las
normas
de
comportamiento
que
regulan
situaciones
deshonestas
y
también
una
descripción
de
la
metodología
idónea
para
la
enseñanza
y
aprendizaje
de
contenidos
actitudinales
como
en
este
caso
es
la
honestidad,
a
partir
de
la
Asamblea
de
Clase.
5 Resultados y conclusiones
Durante
el
periodo
de
2006‐2007,
se
realizó
de
manera
general
el
contraste
de
los
indicadores
de
calidad
en
el
aula,
así
como
la
metodología
desarrollada
a
partir
de
dos
redes
de
calidad
del
Departamento
de
Educación
de
la
Generalitat
de
Catalunya
con
coordinadores
pedagógicos
de
centros
que
participaron
en
dicho
contraste,
además
de
unas
primeras
implantaciones
en
centros
concertados
y
privados.
El
total
de
centros
participantes
fue
de
25.
Durante
el
2007‐2008
se
han
realizado
programas
piloto
tanto
del
autodiagnóstico
y
elaboración
del
Plan
Estratégico
Pedagógico,
como
del
acompañamiento
en
la
mejora
de
los
procesos
de
aula
a
partir
de
Comunidades
de
Mejora.
Los
programas
pilotos
se
han
aplicado
en
dos
redes
del
Departamento
de
Educación
de
la
Generalitat
de
Catalunya,
centros
concertados
y
privados
de
Cataluña
y
trece
facultades
pertenecientes
a
universidades
públicas
y
privadas
en
México.
A
partir
de
esos
programas
pilotos
se
ha
podido
reflexionar
sobre
aspectos
de
tutoría
y
formación
en
centros
de
trabajo,
a
partir
de
una
red
de
calidad
especial
para
dicho
propósito.
El
total
de
centros
participantes
a
nivel
internacional
ha
sido
de
47.
La
perspectiva
del
2008‐2009
es
aplicar
un
re‐diseño
de
la
metodología
y
los
indicadores
como
resultado
de
los
trabajos
del
curso
académico
anterior
en
unos
cien
centros
en
total.
Un
primer
resultado
global
ha
sido
la
conciencia
sobre
las
tres
culturas
profesionales
mencionadas
(cultura
de
la
calidad,
cultura
de
la
fundamentación
pedagógica
y
cultura
de
trabajo
colaborativo),
y
la
necesidad
de
vencer
enormes
resistencias
en
los
centros
que
no
han
desarrollado
mínimamente
dichas
culturas.
Por
tanto,
el
material
y
las
herramientas
ofrecidas
a
los
centros
deberán
estar
diseñadas
en
función
del
desarrollo
actual
de
cada
institución
y
proponer
objetivos
que
realmente
sean
asequibles
según
su
cultura
institucional.
Así
mismo,
se
ha
visto
imprescindible
que
se
lleve
a
cabo
una
“ceremonia”
de
compromiso
a
partir
de
la
firma
u
otra
forma
explícita,
en
la
cual
los
responsables
adquieren
el
compromiso
de
conseguir
los
objetivos
planteados
y
utilizar
la
metodología
propuesta.
En
este
sentido,
es
importante
que
los
centros,
al
iniciar
las
Comunidades
de
Mejora,
cuenten
ya
con
un
Plan
Estratégico
Pedagógico
elaborado
que
sirva
como
punto
de
partida,
guía
de
desarrollo
pedagógico
y
documento
institucional
que
otorgue
fuerza
al
compromiso
de
los
participantes
y
de
los
responsables
ante
el
claustro
y
la
comunidad
educativa.
También,
al
inicio
de
un
proyecto
en
Comunidades
de
Mejora,
se
ha
determinado
como
esencial
conocer
el
grado
de
conocimiento
sobre
el
tema
a
trabajar
que
tienen
los
miembros
de
la
comunidad,
para
adaptar
el
material
a
su
zona
de
desarrollo
próximo.
Así
mismo,
es
indispensable
conocer
su
nivel
de
desarrollo
en
cuanto
a
comportamientos
que
les
permitan
trabajar
de
manera
conjunta
en
la
reflexión
fundamentada
sobre
la
práctica
educativa
y
en
la
implementación
de
proyectos
en
las
aulas,
es
decir,
pautas
de
trabajo
colaborativo,
apertura
a
la
supervisión
del
trabajo
docente
en
las
aulas
y
en
la
documentación,
revisión
entre
iguales,
criterios
de
evaluación
sobre
el
proceso
de
enseñanza,
etc.
En
este
sentido
se
ha
observado
que
la
relación
entre
Facilitador
y
centro
educativo
evoluciona
conforme
avanza
la
Comunidad
de
Mejora,
conforme
los
miembros
de
ésta
y
en
especial
el
Responsable
Interno
conocen
mejor
cómo
dinamizar
las
sesiones.
El
Facilitador,
que
comienza
guiando
cada
una
de
las
sesiones
presenciales,
puede
dejar
poco
a
poco
mayor
protagonismo
a
los
integrantes
del
propio
centro,
de
tal
manera
que
su
rol
sea
más
de
proveedor
de
conocimiento
para
la
comunidad
y
menos
de
facilitador
de
sesiones.
Otros
resultados
tienen
que
ver
con
el
lenguaje
profesional
empleado
en
las
herramientas
utilizadas
con
los
centros.
Se
ha
podido
observar
que
hay
un
profundo
desconocimiento
del
lenguaje
profesional
en
el
ámbito
educativo,
lo
que
provoca
problemas
de
comprensión
e
interpretación
del
trabajo
a
realizar,
además
de
generar
cierto
rechazo
su
utilización.
Es
necesario
adaptar
el
lenguaje
para
que
sea
comprensible
pero
al
mismo
tiempo
riguroso.
Las
propuestas
de
mejora
se
deben
concretar
más
a
partir
de
un
plan
operativo
que
permita
llevarlas
a
buen
puerto,
y
preparar
material
que
permita
a
los
responsables
de
los
centros
y
a
los
docentes,
saber
a
qué
se
enfrentan
cuando
se
embarcan
en
ciertos
proyectos
de
mejora
del
aula.
Hemos
encontrado
que
la
elaboración
del
Plan
Estratégico
Pedagógico
puede
realizarse
a
diferentes
niveles
en
el
centro
educativo
(de
centro,
de
etapa
o
programa,
de
nivel,
de
área,
etc.)
pero
que
es
mejor
comenzar
por
uno
más
general,
que
normalmente
es
de
etapa
o
programa
e
ir
haciendo
aproximaciones
sucesivas.
Finalmente,
las
experiencias
positivas
en
la
utilización
de
las
herramientas
y
metodologías
del
Sistema
de
Calidad
Pedagógica
Escalae
se
han
ido
sucediendo
en
diversos
centros
y
ello
anima
a
continuar
en
esta
línea
de
investigación,
teniendo
como
máxima
preocupación
hacer
de
este
sistema
lo
más
sencillo
posible
para
el
profesorado,
al
tiempo
que
atienda
a
la
complejidad
de
los
procesos
de
enseñanza
y
aprendizaje.
Como
dijo
John
Mangus2:
“Hacer
lo
simple
complejo
es
común,
hacer
lo
complejo
simple,
eso
es
creatividad”.
2
Músico
y
autor
estadounidense.