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Estimado hermano Marshall:

Le devuelvo mis saludos y gracias por su cortesía al darme la bienvenida al


foro.

Sé que nuestras posiciones son muy encontradas y que como ud. dice están en
rotundo desacuerdo, pero en algo que sí estamos de acuerdo es en la libertad
de palabra y en el pluralismo que debe haber entre las sociedades. Es cierto y
verídico como ud. afirma que muchos ajenos al cristianismo de la Edad Media
no pudieron expresar sus creencias, pero recuerde que muchos de aquellos que
fueron en contra estas creencias fueron autoridades civiles y militares y que la
inquisición o algo parecido no sólo fue practicada por la Santa Iglesia Católica
Romana sino también por otros como por ejemplo: luteranos, calvinistas,
anglicanos y aún musulmanes. Recuerde que la religión de un territorio debía
ser la del rey o el emperador, por consiguiente aquel que iba contra la religión
de algún gobernante era tomado como un atentado contra la soberanía del
reino o imperio y contra el gobernante mismo y por tal era tomado como un
insurgente tal cual querían hacer ver los fariseos, levitas y otras corrientes del
judaísmo de aquella época a Yeshúa.

Incluso la decisiones tomadas por la Iglesia muchas veces eran tergiversadas,


pasadas por alto o en otros casos conspiraciones en su contra de parte de
poderes feudales como nos muestra la película, aunque no católica, Juana de
Arco con la protagonista Milla Jojovich. Definitivamente fue una época donde
hubo mucho abuso de poder, que me atrevería a comentar fue la época del
desierto de la Iglesia (Ap. 12) La verdadera Iglesia en estos tiempos fue
ermitaña, monástica y de santos como san Ignacio de Loyola y san Francisco
Javier. No obstante justifico las reacciones de personajes como Lutero que dio
la gran voz de alerta contra la venta de indulgencias y otras excesos de la
época, de hecho ya hace algún tiempo hice acto de presencia en la iglesia
luterana de mi localidad para homenajear de alguna manera la historia de este
personaje. Pero pudo haber hecho reformas como san Juan de la Cruz y santa
Teresa de Ávila en el Carmelo y no desgarrar la historia de la Iglesia en mil
pedazos y dar pie a masacres como lo fueron las guerras campesinas, la de los
treinta años y actualmente Irlanda o dar rienda suelta a las interpretaciones
particulares de las Escrituras para que hubiesen miles de sectas cada año.

No quiero con estas palabras hacer justificación en los comportamientos de


algunos sectores de la Iglesia, porque si bien lo dijo el Apóstol que el
anticristo saldría de entre nosotros, así cual Judas Iscariote.
En realidad no quisiera ser grosero con ud. ni despreciativo con ud. que tan
ecuménicamente me ha recibido, pero he pensado ¿de qué provecho me sería
leer el libro que recomienda si es de un apostata? Sería como leer las tesis
Lutero o las cartas de Nestorio que son algo que ni a ud. ni a mi nos dan
edificación ni afianzamiento para nuestra búsqueda doctrinal.

La podría leer sólo para cumplir con la recomendación del Shalikha de revisar
todo y quedarnos con lo bueno (1 Tes. 5,21).

No obstante sepa que del catolicismo hay mucha fábula por parte de sus
opositores, comentarios e historias como:

Mira, Mira! ¡Un católico adorando al sol!


¡Mira, Mira! ¡Un sacerdote que violó a un niño!
¡Mira, Mira! ¡El papa dijo que sólo los católicos se salvarían!
¡Mira, Mira! ¡Una mujer papa, y embarazada!
¡Mira, Mira! ¡3 papas al mismo tiempo!
Claro, también están los testimonios de la gente que pagó grandes sumas de dinero a
mentirosos profesionales - como la promiscua joven llamada Maria Monk que vio
"horrores" en un convento (supuestamente vio que las monjas se embarazaban y mataban a
los niños después de bautizarlos, y los enterraban bajo el convento). Resulta, que NUNCA
estuvo en ningún convento... ¡ni siquiera era católica! Fue expulsada de un asilo porque se
embarazó... y finalmente fue encarcelada por carterista. Todavía muchos creen su historia.
En caso de dudas, hay una biografía imparcial de ella, en la Enciclopedia Británica
(http://www-lj.eb.com:182/women/articles/Monk_Maria.html).

Esto lo he extraído de una página de un sacerdote que tengo en archivo. Y


sigue:

Otra buena mentira es la de Alberto Rivera. Dice haber sido un jesuita que
descubrió "muchas cosas en el vaticano", y ni siquiera fue un sacerdote.
¿Cómo puede ser posible que un mentiroso como él haya sido tan popular?

Y esto no es nuevo para mí, ya he escuchado que salen muchos jesuitas


‘’hablando verdades’’ del Vaticano, incluso una vez llegué a pensar que la
Compañía de Jesús era una orden problemática e insurrecta dentro de la
Iglesia, pero sólo es una congregación con disciplina militar y por eso es que
son tan fuertes a veces en sus prédicas y enseñanzas.
Bueno, estas son cosas que hay que revisar y estar concientes de que todo lo
que hay en la Santa Madre Iglesia Católica Apostólica Romana son sólo seres
humanos con errores y defectos, con virtudes y cualidades y que será en el Día
del Juicio donde se sepan todas las verdades. Pero no nos andemos
apresurando, sólo preparémonos como dice el Mashíakh y esperemos que el
Padre Celestial haga Su Voluntad.

Me despido con la introducción de la página Web que ya he mencionado. Los


entre paréntesis los he escrito yo.

Antes de empezar, no estoy escribiendo esta página para condenar a los protestantes
(ni judíos mesiánicos), sé que la mayoría aman a Jesús.

Sin embargo, tengo que escribir esto, para denunciar las injurias y métodos que
algunos fanáticos disfrazados de "cristianos" (o mesiánicos) usan en sus libros.

Lo peor es que dichas mentiras ya han sido aceptadas por casi todas las comunidades
protestantes (y judío mesiánicas).

Ha’Emet veHa’Or Adoneynu Yeshú’a HaMashíakh hayah aleykhem!

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