Unidad 3: Aprender a pensar no es lo mismo que aprender a aprender. Aprender a pensar-aprender a aprender. Habilidades de pensamiento y aprendizaje autorregulado. El aprender a aprender se encuentra estrechamente ligado al desarrollo de diversas estrategias y capacidades que le permitan a un individuo adquirir aprendizajes por si solo a lo largo de toda su vida, permitiéndole desenvolverse eficientemente en cualquier ámbito laboral, así como adquirir nuevos conocimientos por el simple deseo de superación personal y autorrealización, la cuestión es ¿Cómo desarrollamos este deseo de superación personal en los alumnos y que conlleve al aprendizaje autorregulado en las aulas? Como una de las problemáticas fundamentales que aborda el autor, se encuentra el que, desde hace muchos años, la escuela mantiene un sistema educativo con tintes tradicionalistas (aprendizajes memorísticos) ya sea por comodidad o conformidad, las autoridades educativas así como los planes educativos buscan que los alumnos adquieran una gran cantidad de conocimientos aun si eso conlleva a que no lleguen a comprenderlos, lo que implica un problema aun mas serio, que no cuenten con la capacidad de aplicar dichos conocimientos a los problemas con los que se enfrentan en su vida cotidiana. Por esta razón es que se propone un cambio en la estructura y forma de enseñanza, buscando que, a través de una metodología en la cual se promueven el aprendizaje estratégico, el conocimiento metacognitivo y la motivación, se desarrolle en los aprendientes voluntad y emoción por aprender, que eventualmente se espera que evolucione en iniciativa y autonomía de tal manera que, se promuevan procesos de formación permanente, donde los estudiantes sean capaces y tengan el interés por sí solos de seguir aprendiendo durante toda su vida, con el placer de lograr una superación personal al adquirir más y mejores conocimientos y no solo por cumplir con un requisito académico. Basándose en lo anterior, el texto se fundamenta en la idea de que el docente debe de modificar su forma de enseñanza de tal manera que logre potenciar el interés de los estudiantes por aprender y comprender. Esto puede ser logrado mediante el establecimiento de metas alcanzables por los educandos, así como la adecuación de los contenidos curriculares al contexto como a los intereses y necesidades de los aprendientes, de tal manera que se vean motivados e interesados por adquirir estos nuevos conocimientos. Desde mi punto de vista, este trabajo engloba diferentes tipos de enseñanza bastante eficaces, eficientes y efectivas, como lo son la enseñanza estratégica, emocional y centrada en el alumno. Considero que cada una de ellas presenta de manera individual grandes ventajas sobre una enseñanza tradicional y es verdad que en conjunto pueden considerarse herramientas muy útiles con las que todo docente debería de contar, pero considero que es prudente analizar el contexto de aplicación, el articulo está destinado a España, que en esencia dista mucho de nuestro México, pero específicamente hablando de educación y cultura, desde casa vemos que los niños viven una educación conductista, donde se elogia una buena calificación y por el contrario se castiga una mala, los niños en educación básica llegan a las aulas con la intención de complacer a padres, madres y maestros, que exigen buenas calificaciones, mas no aprendizajes significativos. Yo considero que para poder aplicar este tipo de métodos de enseñanza a nuestro contexto sería necesario cambiar la visión colectiva que existe sobre la escuela y específicamente sobre lo que implica aprender, ya que de esta manera podríamos generar las motivaciones necesarias para que el alumno adquiera ese interés por aprender a aprender. Por otro lado, si, el aprendizaje memorístico pertenece a enseñanzas que a simple vista están descontinuadas, pero, con un simple vistazo a la educación superior e incluso algunos de los contextos laborales, podemos darnos cuenta que al igual que la motivación, la metacognición y el dominio de estrategias, la memorización de ciertos contenidos es necesaria, por lo cual no puede solo desecharse, ya que al igual que todas las demás estrategias que se mencionaron anteriormente, esta es una herramienta más de todas aquellas con las que debe de contar un docente para poder desempeñarse satisfactoriamente, al satisfacer todas las necesidades educativas de los estudiantes. Dentro del texto, el autor menciona a la creatividad como aquella libertad que se le proporciona al alumno para expresarse en diversos campos y dependiendo la profundidad de sus producciones es que se podrá fomentar un tipo de pensamiento en el alumno. Desde la visión de la psicología cognitiva, la creatividad es una capacidad que compartimos todos los seres humanos y que desde la instrucción se puede estimular y desarrollar, esto considerando que, las personas que cuentan con esa capacidad creativa desarrollan una actitud que les da apertura a nuevas experiencias que conllevan a la experimentación, en ellos se genera aquella motivación que resalta el autor en el texto, ya que la creatividad es impulsada por la curiosidad, el interés, la expresión y la intención de generar soluciones a ciertas problemáticas. Aunado a esto, la creatividad se encuentra dentro de aquel pensamiento divergente que debemos de fomentar dentro de nuestras aulas, ya que, este hace referencia a aquella capacidad de los individuos por buscar soluciones a problemáticas y que le permite realizar ciertas tareas que podrían tener diversas soluciones que dentro de una mente creativa se pueden generar con cierta facilidad. Por esta razón, considero que para conseguir un aprendizaje autorregulado la creatividad debería ser considerada la base para desarrollar y potenciar todos aquellos elementos básicos que considera el autor. A manera de conclusión, considero que si bien todos los elementos que menciona el autor para conseguir un aprendizaje autorregulado (metacognición, dominio de estrategias de aprendizaje, combinación de conocimientos, motivación, voluntad y emoción) deben de ser desarrollados dentro de la escuela, se debe de incluir dentro de la labor docente una instrucción formal en el desarrollo y estimulación de la creatividad, de tal manera que se facilite para los alumnos desarrollar todos los elementos antes mencionados y con ello impulsar el deseo de autorrealización, que satisfaga aquella necesidad de desarrollo personal que despertamos al generar metas y objetivos a alcanzar a través de la educación y el aprendizaje. Bibliografía Arancibia, V., Herrera, P., & Strasser, K. (2008). Manual de psicologia educacional (sexta ed.). Santiago, Chile: Ediciones Universidad Catolica de Chile. Cristina, M. S. (2008). Aprender a pensar-aprender a aprender. Habilidades de pensamiento y aprendizaje autorregulado. Bordon: Revista de Pedagogía., 60(02), 123-138.