ECreated Enrique Aurelios Jorge

Created onCreado: 4/18/2011 0:11:00 O4/p4

Concluido: martes 19 de abril de 2011

(Ap) 13’16-18

«Y hacía que a todos, pequeños o grandes, Ricos y Pobres, Libres y Esclavos, Se les pusiese una
marca en la mano derecha, o en la frente;

Y que ninguno pudiese comprar ni vender,

Sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia,
o el número de su nombre.

Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es
número de su nombre.
Y su número es Seiscientos Sesenta y seis»

Este, es quizás; el pasaje bíblico de mayor propagación en la sociedad contemporánea. No seria

una exageración afirmar que sin importar la congregación por la cual los creyente se inclinen ni
el nivel de devoción que profesen, en algún momento y en un grado determinado, la totalidad
de la comunidad cristiana se ha visto seducida por esta profecía.
Pero este comentario puede ampliarse aun más y podemos decir sin temor a equivocarnos que
esta profecía ha roto las fronteras del dogma religioso; no seria impropio decir que esta
profecía ha extendido su propagación hacia un marco cultural. Entonces; en lugar de hablar de
un fenómeno religioso más bien deberíamos hablar de un fenómeno cultural.
Esta profecía ha trascendido los canales tradicionales de divulgación de información religiosa y
ya no se habla del número de la bestia en la Biblia y en las iglesias, sino que existe una gran
cantidad de literatura apócrifa, música, artes plásticas, cine, etc. Que encuentran su
inspiración, versan o hacen referencia a este tema.
Algunos dirán que no se trata solo de este pasaje en específico, sino que la apocalíptica
completa ha encontrado un nicho en los medios de comunicación modernos. Y realmente así
es, pero según mi opinión este el pasaje que mayor arrastre tiene y creo que su propiedades son
el mejor eje para amarrar la disertación que me propongo hacer que, como no; también
incluirá otros pasajes de la apocalíptica.

Para poner solo un ejemplo de las muchas aproximaciones que se han realizado para descifrar
el MSJ presentado en el pasaje de (Ap) 13’16-18, veamos los comentarios que realiza al respecto
La Biblia de Nuestro Pueblo (SchÖkel VII Edición)

«El número 666 es la suma de los valores de las letras del nombre “Nerón Cesar”. Para lo Romanos, cada letra del
alfabeto tenía un valor numérico. El Número 6 “unos menos de siete”, es número de imperfección; la triple repetición
es la forma del superlativo hebreo: “Santo, Santo, Santo”, tres veces, equivale a “Santísimo”; la bestia es totalmente
imperfecta, destinada al fracaso. El lector es invitado a pensar y adivinar este mensaje consolador del autor»

Esta interpretación del pasaje es una interpretación dual, es decir interpreta el MSJ con dos
llaves o perspectivas diferentes.
La 1ra se adhiere a las instrucciones, que el mismo pasaje nos suministra, la cual consiste en la
sustitución de las letras de un nombre por su equivalente numérico. Era muy común en la
antigüedad, que las letras de un alfabeto además de tener un valor gramatical también
poseyeran un valor numérico. Así que, con este conocimiento “común”, con la posesión de esta
tabla preestablecida de sustitución de valores, solo era cuestión de encontrar el nombre cuyos
valores numéricos sumaran 666.
Ahora, es necesario tener en claro que para que la interpretación sea correcta, se necesita tener
la misma tabla de sustitución de valores con que el MSJ fue cifrado en un principio.
Digo esto por que en la actualidad mucha gente se empeñan en asignarle un nombre a este
número y nos presentan una gran variedad de candidatos para la bestia. Pero, estas
interpretaciones utilizan una gran variedad de tablas e inclusos herramientas informáticas que
a todas luces eran desconocidas, para el codificador del MSJ.
Hacen esto, a pesar de saber, que es muy poco probable que el autor de este libro siquiera
tuviera la más remota idea de lo que hoy se conoce como calculo. Es más, la misma cultura
dentro de la cual este individuo se encontraba inmerso desconocía este tipo de conocimiento
matemático y su sistema numeral lo atestigua.
Por lo tanto, cualquier uso de operaciones matemáticas complejas o el uso de otra tabla de
sustitución de valores que no sea las que sabemos que el autor tenía a su disposición deben de
ser consideradas interpretaciones arbitrarias, sino es que maliciosas.

Por otro lado, la obra del autor da fe, de que este era un individuo con conocimientos
lingüísticos avanzados, con un conocimiento notable de las escrituras hebreas y con una fuerte
voluntad enfocada en promover y divulgar el evangelio.
Esto nos indica que el individuo tenia que tener una desahogada posición económica, que su
origen lo más probable fuera hebreo y/o pertenecía a una casta sacerdotal.
Ahora bien, lo que no nos indica, es que tuviera habilidades matemáticas, ni que conociera una
cultura como la de la india.

Sin embargo, el argumento de más peso en contra de estas tentativas actuales de utilizar
métodos modernos para descifrar el MSJ, es que el mismo autor es quien nos refiere el método
que se debe de utilizar.
Lamentablemente en su indicación, el autor, se limita a indicar el método pero no la tabla de
especifica de sustitución que se debe de utilizar y ni siquiera cual es el idioma. Lo que es
curioso ya que; la interpretación que expusimos anteriormente utiliza el latín y su respectiva
tabla de sustitución para interpretar el MSJ. Se hace esto; no obstante, que lo eruditos actuales
refieren el griego como la lengua en que el texto fue escrito originalmente.
Sus Razones tendrán los exegetas para dar como valida la sustitución de los valores utilizando
el Latín a pesar de que el original del texto es el griego. No diré los motivos pero, consideraré
dicha interpretación como muy probable.

Quiero comentar aquí, que si alguna persona quiere utilizar el argumento de que la inspiración
del texto es de «origen divino» para justificar la implementación de cualquier método para
descodificar el MSJ; Amen con ellos. Pero para mí, en este caso, el argumento carece de valides
y tengo una muy buena razón para sostener esto, la cual es una de las razones por la cual
considero que este pasaje se le presenta a la sociedad contemporánea como tan actual y
relevante y por ende es algo que prefiero argumentar más adelante.
Por otro lado, es pertinente señalar aquí, que esta interpretación que acabamos de analizar,
forma parte de una tradición interpretativa, que los eruditos llaman Apocalíptica «Se trata
de un conjunto de obras literarias entre las cuales encontramos obras Judías y Cristianas,
tanto canónicas como apócrifas; a pesar de sus diferencias dogmáticas, todas estas obras,
poseen varios elementos en común que hicieron que los eruditos crearan un genero literario
para agruparlas a todas. Algunos de sus elementos comunes son»
♦ Todas fueron creadas entre el siglo II a.C. y el siglo II d.C.
♦ Todas tiene un carácter profético
♦ Versan sobre el fin del mundo
♦ Y todas poseen un lenguaje simbólico común

Entonces la apocalíptica es:

♦ Un Corpus Literario: que como ya dijimos esta compuesto por obras Judías y Cristiana, distribuidas a
los largo de 4 siglos.
♦ Un genero Literario

Pero más que un Corpus Literario, la Apocalíptica, también se refiere a dos conceptos más:

♦ Un movimiento teológico-espiritual que se desboca en los Apocalipsis o se

inspira en ellos.
♦ La ciencia que estudia la apocalíptica1. (Atlas Histórico del A.T, José Ochoa.
PG. 333)

Una de la características de este genero literario es la «Presentación del Pasado y del

Futuro en clave Teológica y Espiritual.
En otras palabras, La Apocalíptica emplea SIMBOLOS para describir situaciones históricas
recientes y lejanos recuerdos del autor, presentándolos no como hechos históricos o
actuales sino; como hechos que ocurrirán en el futuro»

Como puede verse en la introducción al libro del Apocalipsis que encontramos en La Biblia de
Nuestro Pueblo (SchÖkel VII Edición) es a este género que corresponde la interpretación
clerical que propusimos anteriormente. Allí se explica que el texto no fue escrito en tiempos de
Nerón «54-68» sino, de Dominicano «81-96»
Ahora bien, las conductas de Nerón son bien conocida por todos, se sabe que exigió culto hacia
su persona, persiguió a los cristianos y que los inculpo por el incendio de roma.
Pero, por su parte, Dominicano también exigió culto hacia su persona, realizo su propia
persecución contra los cristianos, de la cual es probable que el autor de este libro fuera una de
las victimas. Y según el comentario inicial de «B. N. P» estas similitudes hicieron que a
Dominicano se le mirara «como a un Nerón redivivo».

A pesar de que este hilo nos llevaría a lugares interesantes, es hora de dejarlo a un lado y pasar
a la 2da interpretación del pasaje que nos ofrece La Biblia de Nuestro Pueblo (SchÖkel VII
Edición)

1
Atlas Histórico del A.T, José Ochoa. PG. 333
Esta interpretación no sigue las instrucciones del autor, en lugar de ello le asigna un significado
al pasaje valiéndose del valor místico que los antiguos hebreos asignaban a los números. Valga
la redundancia de que primero tenemos letras convertidas en números y ahora tenemos
números convertidos en una explicación trascendental de la realidad. Y en una interpretación
integral del pasaje tendríamos amabas cosas. Esto le puede dar una idea al lector de lo difícil
que puede ser la interpretación de los textos antiguos en especial si contienen símbolos y de la
gran cantidad de conclusiones a que se puede llegar con ellos.
Esta interpretación no persigue obtener un nombre, tal y como esta sugerido en la escritura
sino; un mensaje de sentido completo, que ya vimos arriba. Pero, por si acaso, aclaremos un
poco. El idioma hebreo no posee superlativos, es decir, palabras como “grandísimo,
hermosísimo, feísimo…” y para indicar esta magnitud lo que hace es repetir tres veces una
palabra: «grande, grande, grande=Grandísimo» y siendo el 6 el número que representa la
imperfección su triple repetición es el superlativo de imperfecto.
Para cualquier hebreo medianamente instruido esta interpretación sería evidente, no tanto
para el hombre común moderno, que muy bien puede ser un contable muy eficiente pero que
conoce muy poco de teología, gramática e historia judía.

Todo el mundo laicos y sacerdotes, eruditos e incultos; todos han tratado de descifrar el
acertijo que el pasaje propone o al menos han mostrado cierto interés en conocer su
significado.
Esto es entendible. Lo que para mi resulta inexplicable es que con tanta gente interesada de
una manera u otra en el pasaje, todos se concentren en descifrar el código, sin que nadie se
pregunte lo siguiente.

¿Por que este pasaje, a lo largo de aproximadamente dos milenios, ha logrado

cautivar las mentes de sociedades enteras de manera tan eficaz?
¿Por que es tan importante para nosotros acceder a la información cifrada en el?
¿Por que esta información cifrada resulta ser tan importante para tanta gente?
¿Por qué este afán se ha manifestado con tanta fuerza entre los hombres
contemporáneos?

Para mi responder estas preguntas es tan importante como tratar de encontrar o asignarle un
nombre al número de la bestia y me resulta muy chocante que sean tan pocos, si es que los hay,
los que se han planteado e intentado responder estas cosas.

Una parte de la respuesta a todas estas preguntas la encontramos en el hecho de que el pasaje
esta explícitamente presentado como un acertijo. Toda la apocalíptica esta escrita en clave
futura. Es decir, nos habla de eventos que están supuestos a tomar lugar en el futuro.
Todos los seres vivos, vivimos inmersos en el presente, y desde ese presente oteamos
constantemente el futuro. Pero nuestra visión de ese futuro, nuestra capacidad de anticipar el
porvenir esta físicamente limitada a unos cuantos segundos, los necesarios para saber cual será
el siguiente movimiento de una presa antes de que esta lo realice, anticipar en que lugar caerá
un objeto en caída libre.
Para toda facultad humana existe un deseo paralelo que busca un objeto, una emoción o un
comportamiento a través del cual esa facultad se realice. Así tenemos que, para que nuestra
facultad de ingerir alimentos se manifieste sentimos hambre, para nuestras capacidades
motrices tenemos un impulso a la actividad y así sucesivamente.
Lo que quiero decir con esto es que, para que esta facultad predictiva de la mente se concretice,
existe en nosotros un impulso a saber los que hay en el porvenir un deseo, una necesidad de
conocer el futuro. Lo que no parece tan lógico, aunque si se piensa bien si lo es, es que, nuestra
capacidad de ver el futuro inmediato no sea suficiente para satisfacer nuestro impulso de
conocer el nuestro porvenir. Nuestra mente aspira a conocer las cosas que están mucho más
allá de ese futuro inmediato que somos capases de predecir casi sin ningún esfuerzo.

La necesidad de conocer lo que está más allá del futuro inmediato es el impulso que ha hecho
de la apocalíptica un género tan exitoso. La apocalíptica responde y satisface un impulso
natural de los hombres, la necesidad de conocer el futuro. Y la razón por la cual (Ap) 13’16-18
nos seduce aún más que la apocalíptica en general, es porque, según creo; es el único lugar de
toda ella donde el autor deliberadamente manifiesta que hay entre las palabras un mensaje
oculto que trasciende el discurso, reforzando así nuestra tendencia natural a querer conocer el
porvenir. El autor magnifica, refuerza, fortalece lo que ya es una tendencia humana natural.
Nuestro deseo de conocer el futuro.

Para explicar exactamente como ocurre esto veamos el pasaje

El autor “afirma” astuta y categóricamente «Aquí hay sabiduría», «El que tiene
entendimiento, cuente el número de la bestia » aún más seductora se oye la traducción de
B.N.P2 «Aquí se pondrá a prueba el talento. El que tenga inteligencia que calcule el numero de
la fiera »
Estas pocas palabras tienen muchas implicaciones psicológicas ya que desatan una corte
bastante amplia de deseos y emociones en nuestro interior.
Compactaremos bastante dichas implicaciones, pero espero que la explicación sea los
suficientemente clara para que casi todo el mundo la entienda:
«El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia» «Aquí se pondrá a prueba el
talento. El que tenga inteligencia que calcule el numero de la fiera»

Evidentemente hay aquí un reto intelectivo. Nuestra capacidad de tener ideas y pensamientos
elevados es cuestionada. Cuando alguien cuestiona estas capacidades inmediatamente nos
ponemos alertas enfocamos nuestra atención y nos disponemos a reponer el orgullo herido, o
más específicamente nuestra dignidad, mediante la consecución de una victoria. Y ya el autor
nos sugiere que si contamos, calculamos el número obtendremos esa victoria.

Pero esto no es todo. Esa victoria, además de reponer nuestra autoestima también promete
satisfacer nuestra necesidad de estimación. Es decir, promete recompensarnos con el
reconocimiento social, en otras palabras es una promesa de fama.

Esto responde casi en su totalidad las preguntas que plantemos más arriba. Creo que explica
bastante bien las poderosas razones por la cuales este pasaje ha seducido a tanto los hombres y
mujeres a través de los milenios. Pero de todos modos recapitulemos.

¿Por que este pasaje, a lo largo de aproximadamente dos milenios, ha logrado

cautivar las mentes de sociedades enteras de manera tan eficaz?
2
La Biblia de Nuestro Pueblo (SchÖkel VII Edición)
Este pasaje logra cautivar las mentes de sociedades y épocas diferentes porque responde o más
bien simula responder y satisfacer una necesidad humana universal que es nuestra tendencia a
conocer nuestro el porvenir.

¿Por que esta información cifrada resulta ser tan importante para tanta gente?
Además de la relevancia natural con que esta información se presenta en la mente; este pasaje
se refuerza a si mismo hiriendo el orgullo de los lectores, mientras al mismo tiempo les ofrecen
una oportunidad de obtener una victoria para reponer el orgullo herido y además también
promete una recompensa en la forma de reconocimiento social.

¿Por que es tan importante para nosotros acceder a la información cifrada en

el? La información que supuestamente nos trasmite este pasaje es la repuesta de algo que
deseamos y por lo tanto podemos decir que es una información relevante. Si tenemos hambre,
la información más relevante en ese momento será encontrar una fuente de alimento. En otras
palabras es importante descodificar la información porque la mente entiende que el mensaje
cifrado es algo que necesita.
Es por esto que considero que no es valido utilizar cualquier tabla de sustitución para
interpretar el texto, me explico.
Es mi opinión que si bien el autor tuvo la intención de que sus contemporáneos encontraran
una respuesta concreta al descifrar el mensaje. No tuvo la misma intención para con la
posteridad o mejor dicho sabía que la mejor manera de que el mensaje siguiera suscitando
interés, mucho después de haber sido escrito, era conservando cierta vaguedad. En otras
palabras, el mensaje no fue codificado para que la posteridad pudiera descodificarlo.

¿Por qué este afán se ha manifestado con tanta fuerza entre los hombres
contemporáneos?
Muchos pensaran que el hombre contemporáneo de debería poder liberarse de esta sucesión
interminable de de interrogantes y conjeturas.
Pero, quien; sino el hombre moderno con todas su luces podría tomarse tan apecho esta
charada, es probable que para algunos hombres estas palabras representen una afrenta para su
raciocinio. Que un hombre de aprox. 2000 años de antigüedad codifique una información y
que este código se presente en la actualidad como indescifrable es para muchos algo
simplemente absurdo. Es algo contra natura que no puede ocurrir. Me imagino a muchos
diciendo o el hombre moderno descodifica el MSJ o tal mensaje no existe.
Quien más Sabio, más Intelectivo, Inteligente y Talentoso que el hombre
moderno y su “Magna Ciencia” para aceptar el reto.

Con afirmaciones tan tajantes como «Aquí se pondrá a prueba el talento. El que tenga
inteligencia que calcule» quizás el autor se haya pasado de la raya. Con ellas el acertijo sube de
nivel y se convierte en Duelo, el autor deja de profetizar, se quita su túnica y se viste con
armadura para salir a retar a sus contemporáneos y a toda la posteridad. Y evidentemente este
es un duelo que el hombre moderno no puede rechazar.

Cualquiera diría que, efectivamente, el autor vio en sus visiones a un Newton, un Einstein, un
Copérnico descraneandoce para desencofrar los fundamentos y leyes del universo. Cualquiera
diría que este hombre visualizo la soberbia intelectiva del hombre moderno y supo que la mejor
forma de llamar la atención de las personas del futuro sería diciéndoles aquí hay “Un
Conocimiento” escondido, a que no lo pueden encontrar.
Cualquiera diría que vio al hombre moderno en su afán de sobre salir y supo que el mejor
sebo para él sería ofrecerle un galardón que premiara su intelecto. Podría decirse que este
hombre vio a los hombres modernos peleándose los unos con los otros por obtener la
atención de los demás y supo que ante ellos su combativa propuesta brillaría como un sol el
cual todos tendrían que voltearse a ver. También, los ha de haber visto desovándose por ser
meritorios de cualquier cosa, a cualquier costo y les dijo he aquí una gran recompensa.

Pero lo más importante que tuvo que haber visto es como en la actualidad un gran número de
personas tiene acceso a una gran cantidad de información que en sus tiempos quedaban
vedadas. Tuvo que ver como hoy en día el número de personas capaces de leer su MSJ y con
capacidad de descifrar el enigma o al menos de creerse capaces de hacerlo creció de forma
exponencial.

Ahora bien, son correctas las interpretaciones que vimos más arriba.
Pues sí. Sí lo son. Son validas porque se amoldan al contexto cultural del autor y por lo tanto es
más que probable que el autor tuviera la intención de describir al emperador romano como un
canalla soberbio.
No podemos perder la perspectiva de que esto es un acto de comunicación. Todos los actos de
comunicación están sujetos a un marco de referencia que concretiza el mensaje, es decir le da
un significado específico. Sin este marco la palabras solo serian sonidos y las letras garabatos
estilizados pero garabatos. Todo emisor de un mensaje quiere que su mensaje sea entendido y
sabe que para lograr esto debe de emitir su mensaje dentro de un marco de referencia.
Entonces, una vez más. Sí, es muy probable que las interpretaciones anteriores sean correctas.

Pero, el género de la apocalíptica es rico en símbolos. Y además, tiende a describir eventos

concretos de la forma más general posible.
A través de los símbolos la apocalíptica se suscribe en un marco de referencia que trasciende el
tiempo y las culturas ya que apela a experiencias humanas básicas y universales y a imágenes
que trasmiten conceptos no palabras. Por ejemplo en el mito de Arturo, donde muchos
hombres intentan infructuosamente sacar una espada de una piedra, hasta que Arturo lo logra.
Cualquier cultura que, tenga armas de hierro, y en especial si esta relacionada con la minería;
entenderá rápidamente que el reto no se trata de un simple acto de fuerza que no requiere de
ninguna habilidad especial sino; que se refiere al complicado proceso de la minería incluyendo
la forja y es por ello que no cualquier hombre logra sacar la espada de la piedra. El mensaje es
claro no importa si se esta en Inglaterra, Roma o China «La espada esta en la piedra para
vencer se necesita hallar, extraer y procesar metales»

Con su simbolismo y sus descripciones generales la apocalíptica logra trascender el tiempo y

las culturas, pero esto tiene la desventaja que casi toda interpretación que se le de al genero
puede ser considerada como correcta o más bien valida. El talento de los autores que utilizan
metáforas, alegorías y símbolos esta en crear mensajes que puedan ser interpretados en uno,
dos, tres y hasta más marcos de referencia.
Si ya sabemos que una explicación es valida, es decir, si ya encontramos un marco de referencia
al que el mensaje se amolde; que más podemos preguntarnos.

Yo me preguntaría si la interpretación es lo suficientemente concreta o no. Es más, este es el

verdadero talento de los interprete es ahí donde esta el talento. Las explicaciones validas que
son tan vagas como las profecías mismas, generan más preguntas que respuestas y
precisamente la promesa de un información concreta es parte de la presentación de este pasaje
y es una de la razones de por que se muestra tan atractivo, en especial para una sociedad como
la nuestra hambrienta de información empírica.
La manera más efectiva para eliminar la ambigüedad de las profecías es lograr su
interpretación integra, es decir, interpretarla en todos los marcos de referencia con que el autor
la codifico.

Conclusión

Pero, ¿que paso en verdad con este hombre?

Tubo visiones, intentaba evadir la persecución o vio el germen de la soberbia incrustado en la
sociedad donde vivió.

Aunque, la apocalíptica, estimula a la perfección nuestra necesidad de conocer el futuro. Su

ambigüedad no nos permite satisfacer esta necesidad. Muchas veces su interpretación nos
conduce a más preguntas que respuestas induciéndonos un estado de expectativa constante.
Una historia diferente es el de las ciencias. Que aunque, no nos dicen mucho sobre las futuras
conductas de la humanidad y sus consecuencias, si nos dicen con precisión cual será el devenir
de los objetos. Satisfaciendo a la perfección nuestro deseo de conocer el porvenir.

Respecto a lo que lo movió a codificar el mensaje; lo más probable es que el autor plateara el
acertijo con la finalidad de evadir el régimen represivo, pero no podemos descartar que al
mismo tiempo quisiera reforzar nuestro deseo de conocer el porvenir. Como ya dije, el talento
de los autores que utilizan metáforas, alegorías y símbolos esta en crear mensajes que puedan
ser interpretados en uno, dos, tres y hasta más marcos de referencia. Y que el código tuviera la
cualidad práctica de ayudarlo a conservar la vida es un marco de referencia más.

Pero los creyentes podemos ver aquí la voluntad de Dios, su infinita sapiencia y su forma
misteriosa de actuar en el mundo. Esto para mí también es valido y lo acepto aunque no
siempre lo comparto.

Sinceramente, creo que, lo más saludable seria dejar de intentar de asignarle un nombre al
número de la bestia. Si bien, en su origen, este en realidad codifico un nombre, ese propósito
tan concreto ya caducó.
En la actualidad muchos nombres encajan en el código. Y lo más probable, es que, en el futuro
aparezcan muchos otros más. Pero esto definitivamente son casualidades y cuidado.
La faena de descodificar el número me parece sobre todo azarosa y puede ser hasta maliciosa.
Como explique anteriormente se pueden encajar allí muchos nombres dependiendo del la tabla
que se use para descodificarlo.
Algo diferente podemos obtener si tomamos el nombre de Nerón y en lugar de ver en ello a una
persona particular vemos al emperador como institución y al imperio como forma de gobierno.
El emperador una institución cruel y corrompida, llena de soberbia, amante del despilfarro y
las banalidades y al imperio como un sistema de gobierno represivo y explotador, sin
posibilidades de ascenso social.

Lo mejor del código, sin importar si el autor no tuvo o no la intención de lograrlo, cosa que
dudo, es que; hace que enfoquemos nuestras atención en las escrituras y quien quiera puede
ver en ello la voluntad de Dios que omnisciente supo que los hombres del futuro se sentirían
muy atraídos por esto logrando así la divulgación de su palabra.
La verdad empírica es que nuestra capacidad de ver el futuro inmediato no se deriva de
visiones, ni sueños. Sino, La predicción de la presa es una predicción biológica llegamos a ella
por observación de las conductas. La caída libre es física que los organismos vivos repiten
incesantemente y llegamos a ella a partir de inferencias inmediatas. La realidad es que nuestra
facultad predictiva se basa principalmente en la observación de hechos reales, que están
regidos por leyes físicas; leyes que, aunque no en visiones
Conozcamos; hacen que los fenómenos análogos se desarrollen de forma similar, similitudes
que nos permiten elaborar y memorizar patrones para luego forjarnos expectativas.
Con lo anterior no descarto la posibilidad de que el autor tuviera visiones, la capacidad de la
mente para trabajar en la solución de problemas que nos agobian mientras dormimos es bien
conocida. Pero me parece más probable que la apocalíptica se derive de un proceso similar al
que nos ayuda a obtener nuestras expectativas del futuro inmediato. Esto es, la observación e
identificación de patrones en las conductas de los seres y las cosas.

Definitivamente la historia humana se repite y la razón por lo que lo hace es porque las
emociones y las conductas humanas así como las cosas que nos afectan son un conjunto
limitado facultades y cosas. Por Ejemplo la frase: El poder corrompe y el poder absoluto
corrompe totalmente. Es una verdad universal, el poder es un objeto, una idea que ha afectado
a reyes, emperadores y gobernantes egipcios, persas, griegos, romanos, chinos,
latinoamericanos, en fin a todos.
Otra cosas que se repiten son las políticas, las formas de gobiernos y como se las implementan.
Por ejemplo a igual que el comunismo imponía el ateismo, el imperio babilónico impuso el
culto a Marduk. Un caso diferente es el de los medos persas y los E.U, que permiten la libertad
de culto, es más, se puede decir que los medos persas hasta promovían la diversidad de culto.
También se repiten los conflictos. Por ejemplo: los conflictos por las rutas comerciales. Troya
en Asia menor, Medio Oriente, El mediterráneo, todos ellos han vivido conflictos que tienen un
mismo origen el control de las rutas comerciales.
En fin podemos afirmar que la evolución de los pueblos, (familia, clanes, tribus, reyes,
republicas, emperadores, etc.…) es un proceso que se repite una y otra vez.
Entonces, es posible observar patrones en ello y codificarlo en forma de símbolos para que la
posteridad tenga una idea aproximada de cual será el devenir de las cosas.