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Capirale 5 EL EMBATE COMUNITARISTA LAs PRINCIPALES CRITICAS DEL COMUNITARISMO FRENTE Al IBERALIS©O [GUALIZARIO les puede see de larga da 5 que contemporineamente se formula frente a rar desde un comienzo que es dificil reconocer vinculan unos con otros por avanzar una linea similar Pero después de advertir estas entte fa defensa de posiciones socialiseas y republicanst —como Michael Sandel.— y atin otros que asumen posturas més decididamente conterve- doras —como en el caso de Alasdaie Maclacyse, Dichas eri Jorma uslizada por Kane —un cencepre de raxéa que impedita dae con- renido slguno a nueseise obligeciones morales— como ela concepcién de la «auconomia» por él propuesta —una concepci6n que justamente rechs- aba lo que Hegel consideraba més imporsante: la eligen sino que dace, reoaccen mitnade aula et acis las precces propias dele geapose len que pesteneeen Sandel objet, adem, otro sapecto prop dee concepio rsx ‘a La ides segin la cual cl yo atecede tn fineay sealers Sone 1979, 1990), en exe | Tet, Mac doyen Kee (1850, 128 as eats de ej despads de Rawls miembros dela comunidad a la que percenezco),e} mismo nunce serévis- vo de mi persona. En este seat isi6n de incapar de explicar ciertas experienciss humeanas bési- died de que exisean clectos propésicos ‘viseos como formando tune parte incegeel de mi propio set. Dieha vsién parece excluir, también, In posibilidad de que atsibuyamos obligeciones 0 responsabilidades a una ddeterminads comunidad, en su condiciéo de eal “Llegades a este punto, conviene llamar la atencién sobre el siguien istas afleman que ne todos Jos planes te punt. Cun ls coma fe vn nace igaleencevaichon, Ge protecen te a comunidad que du maKce 7 chazo & ut ul ‘que mejore lac de ciertas préctices 0 1o modo, y coaforme @ algunos comuniceristas, el mencio- nado ecompromiso» estatal deberia excenderse de mado todavi mis di jones vinculadas a (lo que ica personal, Para Michael Sandel, por ejemplo, si al~ deal del «xatogobierno pon pense obese er jen asPo- Solved Tago, o parde some ua pone inference Inehce del spenonls oo opivdon. nefits 20 reba imaportncla de que lo individuorinervengen ac vaneateen I Wile plitice des commanidad etonce ven objeto 96), De soe ads ade ere que ect bina Ae consti ns defi, ies aoe oe tesa M3. Blembarecomuoitaica 129 pero también de c Al Estado no le debe icos: usa ciudedante poco sando o baciendo imposible aiin, el Estado deberia ayader a qu jereas forrnas de vida comunes —ya que terminan enfrentindose entre arece ser, sin lugar « dudas, el mal propio de las socied parades unes de oF alos libérales, babicualmence, a etablecer un: fara eprivadas y la «pdbl To «personals y Jo epolitico», Es esta civo escetal: nada peor, pare los liberales, que el Estado hage uso de la faer- za que posee en rombre y a favor de una determinada concepci6a det lca est actitud propis del liberalismo es que dicha pos- 120 que ademas valora y definde aquella indepen \aoe y los zeclamnas proveaientes de sa comunidad, como un modo de asegurar la posibilidad de que cada sujeto pueda emente sus propies fies, su propia concepcién del bien. La de- fers liberal de ciezeos derechos inviolubles puede entenderse de ese modo: amos comunitarisees (por més que jos por la enorme mayoria dela comunidad) cereses fundamencales que deben asegucarse iversalmence & todos los individuos. En este sentido, y lad deberd cespecar el derecho sidere como prioricaries. 5. Woe al erect, ge seas evs sb el pea 0, 9: Sn eate ea, pecans, ve Kyla (2990 10. Defended ata tas er, por eel, vse Raw (199%) 130 Lareeore da justia esp de Rawls Lo dicho bs de une posicis XV, que adopran una. individuoe orientados por obj under uaa poscura individuos duos, en verdad, y del contacto con los dems le nuertrs comunidad, por lo que no podernos existencia desconociendo que scnarraci6a»."? Pata Chases Taylor, el punto de ps scdenata falea de visi6n, un engafo de fa auto ‘yer que el individuo libre, que decenta ios derechos ta identidad graciss a su eelacién con uns civiizacién liberal ‘que es un absurdo sieuae «este individuo en el cl cual aunca podefa alcanzar Ia identidad y por tanto nunca podria crear por contrato tna sociedad que lo rexpece. Mis biea, l iodividua libre que se sfirma como tal ya tiene una obligacién de completa, de testaurat ‘ode mantener la sociedad dentro de In cual es posible sleaazee tidads." Asf, no hay que preocupacse exclasivamence por nes individusles de las personas, sino que ademfs es nece , del amarco» dentro del cuel esas elecciones se llevan. Bl embatecamittica texto social el hombre no pucde afm sx «aszononiia moral», no puede las «convicciones morales» en las que pone sa atencién el liberals sechazo de los roles que se nos asigaan eocisliente resuta~ adode tal rechar for no comprendiéramos «el cl el sigai 20 pare nosotros y para quienes nos rodean: somos sees 5 hningdn «yo» que pueda ubiczrse complecamente aparte ‘Conviene advert se los decechos, sugesida par el ones sobre les derechos deben dle Ia sociedad. Reconacer que el hombre reconocer la necesidad de asegucar las condiciones que ettollarciertas capatidaces humans relevant culvural determinada, sostenida en: sgarancias de independencie: 32 Las mows dele jtila después de Rawls ‘ceo ence ciertos reclame: supaesta por el liberi el «agente moral aurSnomo» que aparece defendide en ag Frente @ imagenes como Esta, s 1e que los individuos s6lo pueden florecer dentro de ciertas pric s de las cuales los individuos desstrollan y perfeccionan sus v des. El punco de pactida del undlisis de Maclucyze aparece eafocado tn el carkererarbizraro del debace moral concernporineo. Dicho debate aparece- tingnido por su improata , y gue ecicaniza» sebze los demés bienes: existe es. ‘ ecitanfar cusndo no se sesperan los principios ineeznoe a cada efers dis- tributiva, del modo en que lo asegura, por ejemplo, la propuesta de la cigualdad compleja», clones resultan © pueden resultar enormemente relevances pars sus miembros ‘ i: Por otta parte, x cones lo que puede querer sugerix parce, 7 : “3 a programas pol 0 resulta importance dado que, o=- ble, en caste propuesta UN BALANCE DEL DERATE COMUNITARISMO-UIBERALIIEO Como resulrado de este «embare> comunitatsta, muchos liberales se Uae de que el Estado juegue un papel siguificaivo ea econ obligations revs sus positons iia esiguninessotles. A espectacabedexacat que, el como Ya emos pia rim gui — crvenién de siseaareconecer magaitu ce dcheInftencs Sin embargo, ve parse aavancer del comnitarsn fe segue ce une sie de conecarepieslibecles que también veaionatet un seo sanpacte ends de noa decade eral, fas as ce de la justia ei tleucional —en su totalidad— seazaces de la naturalezan en la vide de cada persona. Vimnos tami usa de las notas dis smo igual ence a ibe 7 podéfan violarse derechos tanto postura se han tocnsdo, gue, Voy a ocuparme de encre el comunitarismo y ‘Ea primer lugen, dleseacarse,que ouchas a tcavds de aecio de las crfticas més hab sme no met ba defeader ne s6lo (como ual bitual denteo de jero a 1a idea ccontexto» social/culeut La inflvencia ‘ua deco més rea de respuesta podsfamos decir que Ja imagen de ls sociedad —imagen que frecuenteme dica— como uns sociedad compuesta de éeomos dista entre sf. Para el liberalismo debe los individuos se ageupan formal importancia del formulacién de elecciones imporcancia del econtexto», debiera deci raduccién de su teorta ida a reflexionar sobs particular sociedad iniversales —validos en Bl auero tipo de preocupecionsaporaes pore cnn do implica, samba, que lo iberles coments so fusion que awe ane ton i ersenea de una mulipliidad de opciones pies ‘a. Brose destch, de un modo peviwens Reabrees ge re eeriga se vinela cone po de opens ee or gusta desacllda ea linea de pensamient uy apudanetog ooo $e (nel ord on car ben my ese en esa Aesigualdades pre- © la mayor relevancia moral que hoy se Je asigna al andlisis de los sgteposy de indviduos, «ls hora de defini cme dsb derechos 7 ios han reafindo va rechas es amparedas pro comm. ds En exe tent el bers igus al un enads jst econ En cokterencia con los principiosrecién suge de a maneener is defense del principic sentacién defendida por Raw debe tomuarse a las personas como independientes y separadas a y no como formando parce de un Pareles 2 ln defense de este pria- ', paca condenar aquellas polfcicus capaces de nombre del zesto, 0 en nombre de un ida de las personas» ¢s te6ticemente al menos, no resulte incompatible con politicas que el 310 juzga inacepts- que violan derechos individuales—. En esta prioridad aut lor communica -epraciGn de los individuos en su comunidad (sa wisimers extei= ca de liberales como Amy Gutman, quien seiala que «asi como los viejos mundo, ipo 35. De at que wo cue pe, por elem, gu slene des epee pamoen oop sotee ce atl pesmiase eo socked. Vee Dot Capitalo 2 ‘LAS POLITICAS DEL MUETICULTURALISMO. ws dforences ele, tlgo qu e mens ve devmia wo Iiculturalismy. No obstants el térming «multiculearalismor abar- fotinas:mmuy difezentes € -pluralismo cbleatal, cade una-de las cuales late sus-propiosetos, Existen diversas formas -meclianve les'Cuales las se incorposina lis comunidades politicas, desde fx conquiseay le ‘nla forma de incomporacin afectan-a fa naturalera'de los grupos sinori- de elie pe fto evas co a soca a a gue fee pretan sus auténtices morivaciones. Enel presente capi m centraré on os madelosacaplis de dives sidad culenéil> Bn el primer easo; a diversi cubuiral surge de la incor- ‘poracién de tulruras, que prévisinente disfrutebar’ de anrogobieinoy. tcrrizorialmente coucentradas dinin Estado-mayor:'Unade les caracte cas distinivas de las culeuras:incorporadas, a las que denomino «mi ein laguna cau, le diversidad-cleual nue de a nigra tx dividual y familiar. Bstos emigrantes acosearabmava uniise en ssociaciones poco sigidas y evaveicentes, que voy a denominar «grupos Eenicos». A 26 Clodadsnsa anatecuirat grindes magos, dichos grupos descan incegearse en la sociedad de la que formen parte y que se les acepte como miembros de pleno deeecho de le i bien'a meando ptetenden obtener un miayor reconocimiento de su identidad ‘0 es convertitse en unk hacia separada y de la que que forman parte, sino mo- iones y las leyes de diche sociedad para que sea mas per. ciasculeurales. Se trata, nararalmeate, de modelos generales, no de leyes de la naacale- 28, por lo que cada eaegorfa general requeril mayor tefinamicnco y precisién medida que vayamnos avanzanco en el andlisis y aggumentacién. Sin eat. Daigo, no podemos empezat a entender y-a eval culeutalismo a menos que comprendamos cme. Selos grupos inoricatios coafigura sus fast sidades y sus sspitaciones. Por consiguieste; ey srleza de estas ds caregortes ampli (spattado 1) y, a continuac dest las exigencias especificas implicitas en cada tina de elas (apartedo 2), 1, -Bstabos MOLTNACIONaLES ¥ Fstabos Pommstbos: ‘Una fuente de diversidad eutea sino wn Estado multinacioaal, donde I ras més pequetias conforman {as saninosias.nacionales». La incorporacién de diferentes asciones en un solo Estado puede ser involuncatia; ejemplos de ello roa le invesién y com quista de una comunidad cuicusal por otra o'la cesi6a d ‘caso en quel suelo pastio: dich comunidad. No obstante, laformacién deun Estado multinadionsl. tambiga puede darse voluntariamente, como sucede cuando cultasss diferentes eonvienen en format wna féderacién para oa beneficio muruo. Muchas democracias occidentales son rmultinacionales, Por ejemplo,en sles Estados Unidos existen diversat minorfss.qaci as poltcas del mukestrulisme 27 cron adquitiendo un'estarus politico er sida que iban siendo incoxporados. A. les tribus indas st ié como-«naciones interaas dependicatesn, con sus propis gobier~ -nos,txibunales.y derechos establecidos mediante tratados usa:soninonwealiby Guam un.«protectorado». Cada uno de cestd foderado con la organizacién politica estadounidense y gt encias de autogobierno. MW as politica del meleicalealism> 29 negado 0 inftavalorado in mera existencia de les minotias nacionales y de sus derechos de aurogobierno. existencia de minorias nacionsles resulta més paten- ‘de Canadé ba implicado ia feders cedido tn estatus especial a Quebec, como «latinica so- ayoria lingtfstica y cultural francesa en Cenedé y Norte landia y Noeva Zelands), 0 porque'se ‘més o menos voluntaria, de dos o: \lgica 7 Suiza). De hecho, muchos paises del mind sca mo sucede con las ei ‘aacionales en los Estados Unidos—no ha sido abendonat la federacién, *gociat los cécminos de ésea pare alcanzar un mayor nivel de auto- tio ocupido por cultures précxistentes queamenudo.dis- mov Bste'es.l caso de la mayoria de patses del antixuo ‘Mundo enero en pros itentos de ene inglese, fencesesy aber uns serie de documentos pt tratados y las reivindicacione acuerdo de confederacién et Noreeamérica briténica de 1867. aripos seconsidern ef mismoe una aac es eyideacea pits dels sass ascaciores, or esta ran, es prefexible con- fiegos deleaind bn res categonias de abocigenes Gi dicho Bstado como pattotismo-comy Seca lege crs la.Gal se ences I comin. \6n legal mundial se produce en reba que log inmigrantes a estos paises abendo- iva y se asimilasen totalmente a las paucas culeue porlos borigenesy los ‘und, 1995; Loug, 1992; Jenson, 1993, We * 80 -Cludadante multicalmaat ‘que se conoce como modelo inmigrstotio de vaaglocon= a algunos grupos se les negebs Blancos» en. Australia) La asimil i hilidad politica, slgo que ce racionalizaba poster ignacién emocéattice de las otras cultars. Este compromiso compartido con la angloconformidad queda copare- cide por el popular —pero equivaco— contsuste entre el nelting-por eats, doanidense y.el «mosaico éenicon canadiense, caba-esencial para la esea- “ormente mediance la de- ia que francs namiente'go se extendi6 a ios extranjeros que se © fueron considerados inasimilabless,? -mbarg: zante y pluralista que pecmice y, de es manterigan diversos aspectos de su he- scepta (aunque no de una-manera uni igrantes deberien tenes Libervad ps stumbres respecto de ia aliment sig. 154; wéase Reitz y Brecon, 1994; Felines, 1976, 3 paceoen ms cohesionados'en Cen as pobticas del mitticuturtisno 31. eistinguir este tipo dé Giversidad culéural del propio de es. Los grupos inmigt son eiaciones» ai ocu~ ci ta fandarnenralmente ca su algo gue no tesulea-dontet- 6 roptb) cpio de que tetlos los hembres ha ypromiso de asegrrar que todos los in cdo angl6fbacs; algo'que se-considers esenc pibblicas de ts sociedad angléfona (0 nada). Al-rechazat la asimilaci6a, dickos grapos no pre- luna sociedad paralets, como sucede de forma carsctesistica nacjonales.-A‘consecueatia de ello, canto Estados Unidos ‘cuenta con divetsos' «grupos étnicoss 2 modo de cilturas te agregadas dentro de la sociedad engléfona prepondera sn lo que denomineré «poliéenicidad». De igual manera, en ns subcultures éenicts tento en la sociedad angl6fona corio en Es posible, en teorfa, que ‘condicién de que se est inmigrantes devengan minorias nacions- de ancogobierno. Estos justam ‘adores angl6fonos x lo largo del ioaperi hhispancs en Puerto Rico y con los Colonizadores franceses-en Quebec. Los M33 32 + Cindadangs mulsicuiesint ~ as politics del muliiculuatising 33, ._ colonizadores‘no se nutoconsidersban wiomigrant zo renfan expectativa alge [Désielos alos sesennal censo estadousiidense ba erat alos. comoith griapo u orjget éenico.constin, No obstance, la mayor paiior-consideras. siden i pecffica™~—cotho los porto rmaltecos—; ua tisgo que cefleja lis his t Ia percepcién gencralizada de que este’ model Le alos intnigeaaces hispanos ‘Se afirma que estos inmigrantes no tienen, «Tia inmigtacién noes s6l0 un fendmeno del“ Nuevo Mundo». Muchos otkds pafses.eceptin también inmigzantes, eunque no-en Iz misma escala Jnagoitud que los Bscadeé- Unidos, Canalld y Auscratia, Desde la segs igrantes procedentes fagiados cubsnosy los trabsjadotes sacs teenel pais . 1Los.refugiados cubanos que vivesi en Miami se autoconsidéeran dos y no inmigrantes. Cuando supe que su regeo a Cabs ial manera, os iamigriates mexicans que itabajac ilegalménce en los Estados Unidos siempre estdn-a un paso de tbandonar el pais. Pucs- 1o tienen posibilidad de pedir la ciudadante, tampoco han tenido el lo de integeasse. Por otro lado, no tienen e! accesoa le que se oftece los Ds Pasa incento de consrui esc tipo do placafaca wnficade, wae . {GNNjets a todes Jos grupos hiseanoe (cos a porible excep de lo pertorsigueic) « el modelo de incepracién de les iamigrenten, 134° 34 Cindadaafe mahiculoural hijos (y abora ya sus nieros). En todos estos paises, le «polietaicidade es cada ver més patente? Obviamente, an sultado dela coloni ppafs pude’ses a ld vex, mulsin In conquists ola is, ba pe ‘De ei que Cenadé sea maltinacional antes como auciones, l ionalmente com lesa. Dé hecho, ningano de los temar ida cuenta de que el Telus x a francesa ya tifa ss poli fe, 228; Mulgan, 1989, pigs: €-5), as polftins del mulsicabanlisons 35 ligtnicor para aludinalas dos formas principales de plure- Algonss personas emplcan el téemino «multculmoite de nox maneza sin més ampli, paraenglobar una extensa gima de grupos sociales ao ét2 nicos quej por diversas razones, han sido exclnidos 0 marginados del nicled ‘Todo-ellé pone de ‘Muchos de estos grap Dbabiruales del érmino; ellas comparten una da, en contraste con’ seas dos acepciones io Etnicas de.culeuruapatecen en'el Oxford Bins istionary, que define cultura como lasixcostambes» ovla aciviliza cidns de an geapo o-wn pueblo. Si culture alude a le «costunmbrese tape, resulta obwio que Los divessos grupos-coa estilos de vide propios, {osimovimientos sdeisles das asociacioses.woluntacias Gue podemat en moderna i ; como Sui pais como Austtulia, no son excesivamente, «nmulticuleuraless, st ives scopes ide cleusn quadha rfejudas ex os diferentes significa in dipalicalearalismon ID 36 Civdacianfa muleicutenea Las politica del elticoltwsalsmo! 37 cn la medida en que los diversos grupos nacionales y énicos paticipan de smujetes los discspacitadosconsticuyén cules separudas dentro de la so 1s miseea forma de vida social modema e industeializada, ciedad global. No.obscane, el sentido de le expzesién to coincide con ef Por mi parte, empleo los trminos salves (7 , aunque estoy convencido rrespoade con ef uso comiin de este tériaos. No facuyo aqat el tipo de estilos de vida geupal, movimientoe a ssociaciones voluscacias que orzoe-eagloban' dentro del émbito de! muiticulealismo. ¥ uo posque pense que'las cuestiones que plantean ests grupos no sesh imporean antes al conti, dey por supuesco que la. ceracia mis tolerate © La marginacin de ls zaujetes, los gays las lesbianasy los discapecitac dos atreviesa las fronteras étnicas y nacionales: sc da en las ‘ritarias y en los Esvados-nacién, asf como dentro de as mi evel presente fibro me conitaté en Jas dos primérasy aunque intent ; Maray, 1979) Sin eee, cen, segue I defoass de lo-dertchascullacles de iba j I wantebtieidad, yen nga. el is cae «que se encuentran en sicuncién de desventaj tat luego, creo que mi ceocia cumple dich -gomentaré' des Justicia. que plancean tales movimiencos sociales y les exigencias de los ‘grupos étnicos, habida cuenta que unos y ocros han sida exchnidas y mare siaudos en virtud de su ediferencia» Dadas estas analogies, algunas personas se slentén tentadas a decir que estos grupos sociales constituyen distineas eculmaras» 0 «subcultures», pot Jo que la Lucha contra su opresiéa es una lucha en favor del emulticultica- ismor.!° Indudablemente, eo cietwo sentido los gayé'y las lesbianas, las Rag aan a scabe tendo invia os ee a 488 « las alton del makicakontine 39 Gencemente, los especalsts en coaia politica suelea abyiae mundo también ha-hebido inmigracién, (Existe también la especial situa Wale ee ny comes Ssnrdelavaounescam que como camera ndedtant recon dad Etnica del enwevon y 2 2 aioguoa de las dos categorits.) Siniplemente no es certo que en el Nuevo - jo prindon, Segdn ‘Mundo no existan «comunidades intactas y szraigadas.que ee establecie- ‘Walzes, el plaraliseo culcural en el viejo mando _ intactes ¥ araigedass de naci e establecie han ocupado) dunce mchot 2, pag. 9). Cuando se intenca privar a estas comunidades naci ua y su cults, susgen lla- smamientot en fv dela «liberacién nacionalss fn Be Mundo, sin embacgo, el pluralisrao se otiging en la mic jual y.farsiliac», implicando a personss «proc! orque estaban desasrsigadss, sino pocque se hablan isenas. Sean las que fueen las pees, de «comunidades $ que ocuparon durante muchosisighoe> (Walzer), que no exis- 50 unas tierras que Sonepae y conscieares de'sf que manteagaa sus cultursen rechos nacionales por haberse establecido en te- 10s anted de que éstos formasen parte de los tal-cosa supone ignore la existencia de lor in- Jes portortiquetios, de los nativos bawaisnos 0 de hamortos de Guam, entre o¢ros. Como-expuso Stephen ‘Thecnstiom, ste un considerable:atimero;de pueblos eayos ancestos no vinieron 2 tados Unidos velustarit o involantariamente. Mis bien, los Estados él curso:de sa inexocable expansiéa por todo el y ol Pacificon (Themnstrom, 1983, pég. 248). ‘Glazer 3on consclentes de i existencia de esas ei- FBstados Unidos yen otes'patses delNuero Mun- tan a establecer una generaliac generalizacién no es algo in desc de-los Estados Unidos en la Sociedad de nes Unidas —asi-como'losséspeesentantes de dives uneticanos, de Australia y Nueva Zelanda-~ han aducido {pusstos por’ grupos, integrados ‘inicamente er2 aplicable en, proclamaron que, por consi- en mayor medide que en Buropa. Pero Mundo podemos encontrat tninorlas a¢cionates, af es OT Mens, 1983, pips. 70-71, 142-143, ip 13° Hasta hace muy poco esta poseura he protegido a Mora del ese intenacional aces el ers indfgenas. Como cesultado de ello, ios dezech las. Américas, Nueva Zolanda y Australis ha ‘punidad, Brasil ha sido especialmente i inasias necfonales; lo ciereo €s que el tribus indias estf peligrosamente cetea de antificar dicha afismacion, De hecho, la historia de ignotar las miinorfas nacionales en el Nuevo ‘Mnodo dst incxtricablemente Ligada con las creencias europeas'acerca de Ja inférioridad de los pueblos indifgenas que hebirebaa el terrcorfo ances de la colonizacién europes. Hasta hace pocd, eran considerados como epupilos» paises del Nuevo ‘proceccién paceens nal exadicional né de los Escedos Unidos del nacionalismo «érnico> iliberal. Pers, como he seiialado antes, esto ¢s ecréneo. Los inmigrances « los Esta~ tuna comitnidad colrutal. Debo setalat que Ie coadepei6ea Gincts definta ie pefteneacia en erainos de ssc Tas politica del mukiculsunlisno 43 dos Unidos no's6la debien compriimneterse a acepear los principios demo- criticos, sino que también deben aprender la lengua y Is historia de su nueva eded. Lo que dittingue a las naciones scfvicas de.las naciones «éini- de todo componente cultural en laid i hecho de que cualquier persona pied: ca cual fete sn gard o su coloe.* orporaciga de minorfas nacionsles soa las dos iversidad cultural en:los Bstedos modeznos. Es- ‘so aplicabled « ottos pafscs, por le que la mayo- sa de jrapos'culvarales piseden-sicuasse en uno u otto de ambos campos. Pero, eacaralo todos los grupos etnoculeurales se adapta ‘lara y ama, la situatin de los aftoameticanos es justan’al modelo de tos inmigedsies valontarios, a América involuntariamente como eiclavoe, ¥ impidié incepratie + por sjernplo; amiento-de razis y fa ‘Tempoco se ajustaa al ie noris nacional, puesto ‘nén buns tierra natalicn Aihérica o una lengua hisebrice comén. ‘comin. Por el co ‘pertenecientes a la misms lotteninitics:-Adenits, 8 Ie rei Su propia cultira (por ejemy 0, Is nace contra fe que s aeababan de rebe- ce de nacional 439 « 44 Cindadanta muticuleadl as politias del molticsieulisme 45 gacals i fos'aftoamezicanos;-0‘wicoversa: Seria, poc el contrac, batznce sorpren= dante que'das ‘medidas fxeran apcopiadas-en. todos los contextos. paca: eatacé ecvel eapfrule 4,-un sorprendent rode unideases de posguerra hen ‘partide'de-este eu- puesto. ¥ rupos culcarales que, gories fas nacignalés o de inmig Jay efigindos gue, abigual qite los inmigrane ‘80 coa'tus fainilias, pero no de forma voluntasia,Bxister tambiéa grupos sti que as permit eter propa commanded ep ncn a Jadado a todos los Iugares del pals. Por tanto, «que los aftonmeticénos éonstieupan une may facia His imigrantes voluntatios y anos. que cada vez sea més contin eceprar que se ne- abundar en loe antecedentes cee de explorat eytos anguméatos, quie~ iiciccs: Mi exposicidn cuestighacd alg, ‘eas. csecncias, liberals’ profundamente: atraigadas sobre’ la libertad’ la igualdad y, por santo, es importante ve, en pi profuzido azraize: {Se Nancy Eraser De la redistribucion. al reconocimiento? Dilemas de la justicia en la era «postsocialista» {a ucha por el reconocimlentos se est conviniendo répidarmente en, Ja forma paradigmnisica del conflict politico a finales de siglo xc Las la diferencia esimnlan las lu- ‘Sonoeimiento cultural reenplaza [a redstsbucién sccioecon6mica ‘como remedio contra la injustice y objetivo de [a lucha poifeca” ‘Bvidentemente, ah no acaba la historia Las luchas por el reconoci- lpso del comunisree soviet? Desde mi punto de visa, ninguna de estas dos posictones es acera- a: Abas resulian excesivamnentetotalizadoras ycarentes de maces Para fomiular este proyecto doy por sentado que la jusica hoy ex lensionss:recistebuclon 9 recanccimiento, Y ‘a derespeto cul respeldindose mviwamente, Poxerionmeate, significa cari aademés, les demas pelticos que emergen cuando tratames d ‘char en conta de ambas injustiias sir tineamente Mi objetivo mas general consiste en vincular dos problemstics pol ticas gue en la actuslidad se hallan cisocadhs la una dela ora. lai ‘caments anicalanda el seconocimiento y Ia zedstdbucién podremos ‘consurit va marco crkico rebrice que se adecte a las denandas de nuestra era, Sin embargo, esto excede arnplamente lo que abordars acy 7a oe mien eh rape oe Sh eatuch asm dels nerd ASF aqui, Enlo que sigue, me dedicaré Snicamente a tn aspects del pro ajo qué circunstancias puede la politica del seconceimion, (o contibuir a ta politica ce le zedistabucion? muchas dad entra meior en sinergia con ‘cules tienden = interfetir sa variantes de Ia politica de la las luchas por [2 igualdad sta theme? Pera abordar estas cuestiones, me detendé en los ‘on simultineamente eal an inaceprables sun én el caso de que promuevan la igualdad social™ Finaimenve, unas palabras acerca del métod; en lo que sigue, pro- ‘ponciré un conjunno de distmciones snalites: es, aspiro 2 claiicae y 2 comenzat'a on0s de los cile:nas polices cenrales de nuestra era ‘targumnentacin se desarrotla en cuatro partes. En Ja primera sec ion, conceptualize la redstbucién 7 el reconocsniento como dos ‘paradjgmas analitioos di‘erentes de justici y formule “el dleina se, \listbuci6n-reconocimicntor, Ba la segunda seccién, disingo tres taodos idesles de comunidad social eon el fin de identifica aque. swatepia politica qu ‘exigencias de reen- ‘nociimiento.con las exigencias de reds terfecencia munsa, 1 El dilema redistribuci6n-reconocimiento Pesmitidae vida reivind\caciones se solapan en tempos de ‘de transformacion cultural xe entremezcan as de una transformacién econdni fen el seno de los movi ‘bstante, cada ver ta situation y las perspectivas ropengo clstingulr dos forms se de Ja presente propuetta no preclsa que adoptemcs especificar sproximaciones tebricas. Unicamente tenemos comprension general y 4 groso modo Ce lx In BB segunda tipo de injustices cultura] o simbélica. Bett arraigada pretaci6n y comunt- dofa 0 despreciadoa de manets rulgaria por medio de estereotipos fen las cepresentaciones cultuales publics y/o en les interacciones cotidian), _Algunos tedricos politicos recientemente han vatado de conceptsa- Iizarla naturaleza de estas injusticias culturales 0 simblicas. Chasles ‘Taylor, por ejemplo, se ha apoyado en las ideas hegelianas para ar- ‘De un modo sirufar, Alex Honneth ha setalado que \debomos nests inergrdad...laaprobacién y el reconocimieao que seobbbao de ces pessoras, (Conceptos nageivor tales come insu. doa que ped pee ‘i mismas, na somprension adguida por medins ser ‘Concepclones similares dan forma al wabajo de mvchos cies te6ri- ‘0s eritices que ne emplesa el trmine recenocimiento’. Auague, de nueva, tampoco en este cazo e¢ necesano restngise an pis loa concrete, Unicamente necestamos A pests de las cifere ‘mca como Ia cultural, se han generalizado en ls sociedades con- temporineas. Abas estén arcigacas en procesos y précicas que penudican a algunos grapes de personas frente @ ores. Por consi= {ulente, ambas han de scr solucionadas’. istnciGn enteeinjustcia econtasia e ijusticia ‘En la peéctiea, las Gos se antecruzan.Incluso las salstas cventan con una di A pestr de esar mutuameate entrelzeadse, continuaé ditingutendo analticamente [a injustciaeconémica dela cultural, Asf mismo, coc, sgitt dos clases diferentes de soluciones respecivarsent, La slucion 4 a Injusticia cconémica pase por alga ipo de reedcmoacién polit co-econéenica, Esa puede consist en la redistbucion dels rena, en Ja reorganizacion de la divisin cet waka, en el soinetmienta Gee Jnversiones a la toma democritiea de deeisiones, oan la tanscome, ‘i6n Ge otras estrucuras biscas dela economia. A passe de uc esas soluciones diversas diieren de manera sustancial unas ce ote ea sbeesivo me refer a la totalidad del grupo que conforman mediante él término genérico de sedisuibuclia?. a solscise 2 i injosuca co tural, en cambio, consist en una clase de cambio culeaal ositbelce to implicaia una reevaluaion dintmica dela identcades denies, dlasy de los procluctosculouraes de los propos dfamades Tambion ae plcaia seconocer y valorat de manera postiva ia civersided cura soliciones recioibutivas y solue as soluciones. subyacente de redisurbucién. Por ejemplo, algunos defensores cel ‘econocimiento multicultural sastentan sus feivindieactones eel ne perstivo de una disuibucin justa de los -bienes de primers nentat, ach de una estructura cultura intact, en este vendo, uate el res ‘gonccimiento cultural como una espece de redisribuctin” A penar de tales envrereimientos conceptuales, dejaré de lado. pi ‘como la Siguiente: cconstinayea la sedatibucion y el econ dos concepts sut generis ciferentes,ieductibles, de 1 contraro, puede cualquiera de las dos ser reducido al ou? Por €l contrario, asumié que independieatemente de chmo lo aborde- ‘mos meiatesricamente, scl Gl mat de primer orden erie, por un lado, le socioeconomicas y sve soluciones y, por 0, las in ientes pregunta: Cuil es la relacion existente er de econccimiento, que pretenden poner fin a a las exigencias de redistibucién, que pretenden JY qué clase de interferencias lucha por ambos tipas de rei lucie cuandk Vindteaciones simuisineamente? Enisten buenos motvos para preocuparse por diches inoesfecencias ‘mutuas. Las rcivincicaciones de reconceimiento # menudo s© con Vierten en apelaciones, cuandono en sealizacones practice, 2 fact specficided romaver It diferenciaciéa de grupo, la segunda tiende 2 socavacia, or consiguiente, as dos clases le exigencias estin en conilicto em ‘se sf pueden iaterterir,o inclu ie una en eontea de Ie ota. Nos encontmos, éntonces, ante un diel dilema. Lo denominaeé, or tanto el dilema zedisuibuciSn-reconociaiento, 1a gente que st. fre tanto la injusgta cultural como le injstcia econcmuiea precisa tanto de reconocimiento comin de redistibucién, Necesitanseivinde GE Y negar 90 especificidad al mismo tiempo, ;Cdma es cet posi Ble, 5 es que es posible en absoluto? Antes de abordar esta pregunta, examineaos quiéa se enfrenta es eciicamence allem reconocimsiento-redisebucléa, I Clases explotadas, sexualidades despreciadas ¥ comunidades bivalentes Iimaginemos un espectro conceptual formado por diferentes clases e comunidades sociales. Eo un exzemo se stan [as formas Je co nunidad que se ajustan al modelo de justia de tevictibacion. Ba 1 ot las formas de comunidad que se ajustan al morlela de #20. he dt cones pa pond de canton citos he opatinnd Ge e bemeranss tung cued che shinee ch pon gens easton No nocimalento. Zntre ambos, se stiza formas complejas, puesto que se sjustan simlkdneamence a ames modelos de fastiea, ‘Coasideseinos, en primer cesiemo de redlsibucion dees: podra poner fin a la injusticia seri la cedisiibuciéa econémlco-poll tea ¥ no el reconocimento exlnural ‘como cerca al tigo ideal: la cancepeién marx ,entendida de un modo tesrico y oncdoxo”. Fondrenos De acueide con la concepeiin que aqui asiino, la case ¢s una for sma de aiferenciacion social araigada en Ia estructure econémico ‘Bisoupijedeogie ca Eero wocmbsa ‘undedoe cotoma ah dave poten sme cr ree lo er see Sam ‘Crmarecomusiadsoulenc, que dea sccepee deca a coca politica de la sociedad, La.clase exist Unicamente en tanto comuni- ad en viru desu posicién en dha estrucaua y en su selacién con 7 ‘roletariado no mas beneficios, sino que consist en abolise se, Lo limo que necesita es el reconoeimiento d Por el contraio, el Unico modo de araber coe lain pproletariado como grupo de tl ego. CConsiceremos, a continiscién, e] oto extemo del expect concep- tal, Ea ese excremp poditames stuar un modo de comvaidad tp ‘camnente Heal que se juss al modelo de justia del recoocimiecto ‘oa comuaidad de este lipo esd arsigada absolutamente enn cule tra, y-n0 en ls economia politi, Cnicarcente existe en ano corns nidad en virud de los modelos sociales cominantes de inexpretacién ¥ evaluscion, yo en virud de la dvisin del wabajo, Ast pues, coal (qulerinjasicla ezotural que suffan sus meanbros ve remitiné en cl- timo sérmino ala exinicnurs de valoraci6n cultural. Hl onigen de a in- justia, asi como su ateleo, sexf el reconocimienta inadecuado, ‘mientras que cualquies producida, en ultimo t fant, lasclucién para acabar con la injustcla serdelreconocimiento sv ongen cultural Boel fondo, por cultural, ¥ 90 la redsiebucién econémico-paltics. decedo por sv aproximacién a exe po Ideal es la cancepcién de ‘ona sexvalidad despreciada, cntendida de un mod ested y too, De acuerdo con esa conoepeit, la sexvaliad es un modo de dis Fenclacion social capo origen no esti en la economis poles, dado que los homosexuiles se dstibayen por toda la estuctur de dave dela sociedad captalixa, no ocupan tna posicién eepecica en indi visién del wabsjo, y no consthuyen una clase explotaca. Per el con. taro, su forma de comunidad consiste en que consiyen una se. ‘unldad despreciada,asigada en ia esirscaia de valoracion cata] nommas que privdepian ia heterosexvalidad, Junto a els ea hemes Tobin: I Gesvaloractén de Is homosexalidad, Como consecvencia, so ‘semvalidad 3 denigraca, los homosexvalee son objeto de hvala. 1s, ecosos, dsciiminaciones y violent, al mismo tiempo que oe loo Figg eos deretos lesley una prec en pi eu 25 de nega fe econo oe ‘9 en exe seo ale ydiecamte ces sutace sll Meoacad e eset ip insta pazan pore econecimienty no por lr boos saber oni honobn yo hetecoesne hans fu wnatrmar acres cles Gl como as egress gals pce qe ls aconputn) gue pivicgaa bee a, lidad, nlegan el mismo sespeto a gays y vena ‘echazan el reco- nocinito de la bomosetialal co ana ramen epee oe Seu S en de rere a sea deprase Spee ‘Sonoinin posive especies sped ace ‘De modo que ias cosss estin bastante daras en ambos extuemos de Ruesito espectto conceptual, Cuando consideramos comunidades la clase obvera explomda nos en- to de una diswibuciéa socio seontntica desventajesa como de un reconocimiecto cultural sade

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