Tema 5. La Cooperación Internacional al Desarrollo. Solidaridad o mercantilismo.

La CID es el instrumento a través del cual desde hace 60 años se ejecutan las políticas de
desarrollo internacional. El discurso de esta práctica está atravesado por ideas muy
aceptables (solidaridad, ayuda,...), existiendo incluso argumentos éticos (referencias a la
deuda histórica interiorizadas por la población civil,...), todo esto hace que socialmente se
trate de prácticas muy aceptadas.

Pero los datos empíricos demuestran que tras ese discurso la CID es la política concreta que
los países donantes (ricos) instalan para canalizar los recursos técnicos, financieros,... con
los que contribuir al Desarrollo. Desde un análisis crítico se entiende que la CID es una
estrategia política y económica fundamental para los países del centro, una estrategia
mercantilista y comercial.
Ej. España. Aeci.: el 60 % del presupuesto de la Aeci se destina a fondos de ayuda al
desarrollo, que son préstamos vinculados a destinar ese dinero a la compra de productos
españoles.

Existen dos tipos de CID:

a) CID Institucional. Llevada a cabo por las Agencias Oficiales al Desarrollo.

Relaciones de Estado a Estado.
Ej. AECI.
Se trata de una estrategia geopólítica y mercantil, que da lugara a una dependencia
económica, tecnológica y consigue la penetración en los mercados externos.

b) CID de la sociedad civil.

Llevada a cabo por las ONG
Relaciones pueblo a pueblo.

Se trata de un esquema excesivamente maniqueo, ya que ambos modelos están

interrelacionados, la opción a) es más mercantilista, pero ambas dependen de los Estados y
enmascaran y continúan el modelo de intercambio desigual.
Desde las ONG de CID se apuesta por una redefinición de los términos del intercambio
-exigencia de comercio justo- para permitir que la producción agrícola del 3º mundo se
incorporen en términos de competencia legal. Los Estados del centro del sistema se oponen
a esta propuesta.

6.11.06.

En definitiva, la CID como cualquier otra cuestión sociocultural solo puede entenderse
desde un análisis concreto de la realidad concreta ( marx), en ese proceso hacia lo concreto
tienen sentido todas las matizaciones hechas, el análisis contextual nos enseña que en ambas
modalidades se encuentran intereses, practicas y discursos positivos y negativos.
Ej. El mundo de las ong es un mundo diverso ya que se consideran sociedad civil, pero en
muchas ocasiones son intermediarios de administraciones, entidades religiosas,...

El contraste entre las estructuras políticas diferenciadas entre ambas formas de cooperación
se expresa en los discursos, pero el análisis contextual es solo uno de los requisitos del
conocimiento antropológico sobre Desarrollo, siendo necesario también el análisis de las
prácticas. Solo desde la relación dialéctica entre discursos y prácticas concretos se puede
saber ante que tipo de Desarrollo nos encontramos.

El complejo desarrollista

Cada aspecto de la CID en sus discursos y prácticas configura lo que se ha definido con
connotaciones críticas, como complejo desarrollista (Olivier de Sardan), entendido como la
estructura oranizacional de las prácticas de Desarrollo que comprende a los agentes -los
profesionales- , el conjunto de recursos (humanos, tecnológicos,...- que se transfieren desde
el centro a la periferia a través de la CID, que se caracteriza por su naturaleza etnocéntrica
-la presunta superioridad técnica del conocimiento científico frente al conocimiento local-.

Para reflexionar desde la Antropología sobre la CID es fundamental interesarse por este
etnocentrismo presente en el seno del complejo desarrollista, más allá de los discursos de los
profesionales (solidaridad,...)
Ver: En nombre de África, yo acuso.

El desarrollo del capital social.

Ej. Proderpine_Banco mundial_ecuador.

El discurso del desarrollo del capital social es un ejemplo de utilización de un discurso

antidesarrollista para encubrir prácticas desarrollistas. El capital social está constituido por
los Recursos extraeconómicos con enorme fuerza económica (Bordieu).
Este discurso del desarrollo del capital social envuelve también prácticas etnocentristas y
tecnocráticas de desarrollo. Se trata de una apropiación de la terminología emancipadora
para utilizarla en prácticas que tienden a reproducir el sistema.

No es posible entender la CID simplemente con un análisis de los discursos, es necesario

analizar las prácticas concretas para saber de que Desarrollo se trata.

(Bonfil Batalla)