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YUDERKYS ESPINOSA MiNOSO DE POR QUE ES NECESARIO UN FEMINISMO DESCOLONIAL Tearia % sje bie genre y oxida J1404 Lacan Majo y Gant y sia Fe a ens nyc tah : saxlios culturales sobee género y sexualidad, Se inicis en 2000 a an rny Nene mooie, Suc A Ree en once, Sai ea Une de Gat AD nn Cope en Cod en ae fe (nr Fac Vines anc De, My 1 ws orn Calon inte Mil (iver de Ms J iekt kapad Sorbonne (© Yate Hapaosa Miso, 2022 Imagen cde cabiert ili Darr Black Madonna by Yeline Rdiguet © Deesaaicisn Fes lori Vas de Da Barclo srvwiceoilcom ier ein: bil de 2002 ISBN: 978.88-18826-5656 x Depp 874462022 Feracomposin Matin Sanches Lepese por Ue Prine in Spin Inpro en saa, roi la preci tal parcial {NDICE db... UNIDAD 181 No.tecdin 414 ee Agroecienrn 7htees ELL 2072 No dotapedebos, Notaintroductoria 9 PROLOGO POR QUE ES NECESARIO LEER A YUDERKYS ESPINOSA. Mayra Santes-Febres U1 PREFACIO DE POR QUE ES NECESARIO UN FEMINISMO DESCOLONTAL Diferenciacisn, dominacién coconstivtiva, dela modernidad occidencaly el finde la politica deidentidad 21 PRIMERA PARTE, HACIA UNA CRITICA DE LA RAZON FEMINISTA EN AMERICA LATINA 1. Emocentrismo y colonialidad en los feminismos latinoamericanos: complicidades y consolidacién de las hegemontas feministas en el espacio ‘ransnacional 55 IL Los desafios del feminismo ltinoameticano ene contexto actual 77 IL, Haca la conseruccin dela historia de un (des)encuento: La rand fersinisa y la agencia antrracista yy descolonial en Abya Yala 95 IV. Hacer genealogia dela experiencia: el méeodo hacia una ertia a la colonislidad de la razén feminista desde la experiencia histérica en América Latina 1 BIBLIOTECA JADALAJARA SEGUNDA PARTE CRITICA ALA ACADEMIA YALA EPISTEMOLOGIA FEMINISTA Vl sentido de la cori y la academia feminist: tuna mirada desde la subaltemidad 139 VL. El feminismo descolonial como epistemologia contrahegeménica 151 Vil Y luna no se muse sin la oxras descolonialidad, antirracismo y ferninismo 165 TERCERA PARTE DESCOLONIZAR LA SEXUALIDAD VIIL, No ser mujer la disyuntivafesbiana 191 IX. Historizar ls dispuas, indaga las fuentes: hipéresis para pensar el movimiento de lesbianas en América Taina 197 X. La politica sexual radical auténoma, sus debates internos y su critica aI ideologia de la diversicad sexual 211 XU. El futuro ya ues tna critica a a idea del progreso cen las nartativas de iberacin sexo-genéricasy queer identtaras en Abya Yala 229 EP{LOGO {UNA POETICA DE LA RESISTENCIA, AFROCARIBENAs: ENTREVISTA DE KATIA SEPULVEDA A YUDERKYS ESPINOSA MINOSO 255 Referencias bibliogeéficas 301 Yr AGRADECIMIENTOS Ala memoria de Maria Lugones (EPD), Macsta, amiga cdmplice. Honro y day gracias por eu generosidad, tt com- promisoy tus suefios. Espero estar la altura ‘Acada una de las compafeas del Grupo Latinoamericano de Estudios, Formacin y Accién Feminista (GLEEAS) por la complicidad y la posbilidad de caminar y recer juntas. ‘Ai hija Lia, por el amor y por haber editado varios de los trabajos que ag presento, A cada una de las heemanas y hermanos anclados a te- rtorios ancestrales ya las formas comunales de vid 0 le vida, por su comprensién de! mundo en relacidn y por su generosidad en compattr sus conocimientos y sus modos de vida. Las posi- kone pln ys eflexiones que animan gan pre dls textos reunidos aqui tienen que ver con lo que he aprendido con ustedes, Seles ‘A Katia, por el amor, por el proceso, por lo que somos juntas (1, NO SER MUJER O LA DISYUNTIVA, IANA! face aproximadamente unas eres décadas que Mon Ang sencencié ols lesbianas no somos mujeres» (1978; p ,preduciendo un movimiento cuyasresonancias nos lesan jpota hoy dla, Si bien el destino de la frase recorsé diferentes Teinstosy fecepciones a favor 0 en contra, lo cierto es que la fnisma, al tiempo que definia una identidad por oposicién, Jpaugurd un debate imposible de ser clausurado, Porquesilas lesbianas no son mujeres una podria preguntarse a seguidas, quéson, Pregunta para la que podran existe no pocas espues- fs, sencills, al menos si se asume y se sigue a radicin deconstructiva asumida por Wit ste trabajo se centra, en un primer momento, ea frase de Wittig para intenear erica su inencionalidad pole, su aust, y sus repercasiones mas ai del sujeto lesbiano mis- ‘mo; asf, intenta aportar a un andlisis rico que indague y dé cuenta de sus limitaciones, Hay aqut algunas preguntas claves a las que incentaré dar respuesta: De qué forma y por qué en la afirmacién de Wittig se mantienen entrecruzadas una historia del género y una del deseo? Asumiendo el legado witigiano, _podemos seguir afirmando que una lesbianaes una mujer que 7. Posencia presentada en lar Vi Jormadas de Historia de as Mu: jes, tt Congreso Iberoarericino de Exudio de Género, Mesa Gener, Semulidadesy rotsme, Vila Gardino, Cérdoba, octubre de 2007, 19t ama a otra mujer cuando en ese amar explota el sujegy io la misma suerte que el concepto, hermano, de hete acid? £0 tendemos que admit una genealogies a jidad obligatora, desterrado dentro del pragmacismo hace posible negacgn de seralgoSisinase veen lana etvidades trans, Este desencuentro que para algunas se ha Tema fundamental ava por el desrexigo que desde scores ingereados se a lana sobre acorn, ha ido un init para que nuevas eneraiones de fini adil que estén desarrollando politicas auténomas, se rec dentro desta tradicion. — Misa el lero jug por las comin ei nists ininonals bras en a prolifera expan cde una idea negativa sobre la zuronomafeministay lesbiana 25 ferinisa através dela produccién del mito del auton, iolentay transfSbica, lo cierto esque las censiones dem At los horizontes de la autonomia feminista dads las die tmaners de entender I opresin sexual dent dl in heterosexual mantenen gracsaa negate coeiseney de visiones que sstenen la diferencia sexual y ots que ne tafan fervientemente desde posturtsposestrctualnas {ipa send enor aos oven haca spooning postrasantesencialiss y pstesruccralisis noha alae el feminismo auténomo en sucaricer de hereder directa dy Jasideas feminists radicals de los setenta yochenta,desans ladas por ls corrienes cultualisay dela diferencia seush En este sentido, aunque todas las autonomasFersinivas y lesbianasfeminisas han sepuido y se han identificado con las voces minoritavas subaleemas que desde mediados de Jossetenta desatrollaron la erica contundentel saeco mujer ‘universal entonado y caracterizado por la hegemonias Manco: hetero-burguesas de as prcticas yl eora feminist, no existe uanimidad respecto de los marcos de inerpretacion de era erica y, menos atin, en sus repercusiones y traduccion le politics feminist, ‘Aunque a partir de los noventa, con la aparicién dell ‘mado movimiento queer, el devenir de estos debates redunds cn la conseruccién de un espacio de cuesionamiento 4 ls categoria ras de a identidad asentadasen la idea de un sexo bioldgicoy et reconocimiento de identidades expulsadas del ségimen deintcligibilidad, otossectores activists y académi- os fuertemence anclados ala tadicién de la diferencia sexval, ‘muchos de ellos reconociéndose como parte dela radicalided auuténoma feminista, han sido reacis a acepearficilmente lo uchan considerado la presién a renunciar ala categoria «mt jeres» como el centro dea politica feminists. Esta renuenci, interpretada en términos de fobiay cerazin, pea hoy sobre 4os hombros del llamado feminismo auténomo, nto como la 26 anc depérida de anconoml ydependenciaidolgica ria dade ss fencsal eto dl ferns. Quids ambas sn dberin ser escchadasporaquels alas que compete para vermicar, quiero ter aqui cl Sui lento del aneadaen el 2009, ya jet feminista anor l ied ern eoacee cle cue expucsto En nuestros cuerpos habitan miltiplesidentidades — trabajadoras, indigenas, aftodescendientes, mestzas. lesbianas, pobres, pobladoras, inmigrantes...— Todas nos, contienen,rodas aos oprimen. Lo que nos aglutina no es tuna identidad, sino un euerpo politico, una memoria de agravios, La subordinacién comin ha sido marcada en ruestros cuerpos, esa marca imborrable nos constrifie a tun lugar espectico de la vida social. No somos mujeres por eleccién, mujeres el nombre de un cuerpo ultrajado, forjado bajo el fuego. Mujer es el lugar espectico al que nos ha condenadoel pariarcado y todos los otros sistemas fe opresién. Nuestra politica feminista no es, entonces, sine, nde reoncimine Taboo ianamente para enfrentar las cadenas internas y externas stan mann en as ups pce ‘nosotas por el entramado de poder. Estamos en el proceso de sanamos de todo el patriareado y las razoncs binarias, csencialistas y hegeménicas que levamos dentro, Partimos de auestros cuerpos que son nuestros territorios politicos para implicarnos en procesos de descolonizacida y ad- Yertimos que la colonizacién no solo tiene que ver con la presencia del invasor en las tirras dl Abya Yala, sino con Ia internalizacién del amo y sus ldgicas de comprensién del mundo, (Feministas Auténomas, 2010, p. 205) a7 yl. BL FUTURO YA FUE Yonica ala ida del progreso en las narraivas de tac exorgsndceas y quer ideniarias en Abya Yala! {in programa politico por (des)armar ‘ado tao valve a appar Pero om alin agar poible tensa come un ince, sensi gue consima el espacio ‘donde debetaterminar Roberto Joator, Poste serial: Vi, (1975) En este iltimo tiempo, mi crftca intenta profundizar en un punto de vista, no eurocentrado, de la politica y la teo- tia feminista del género y la sexualidad que he conocido y cexperimentado. En un diagnéstico inicial,sostengo que los movimientos feministas y de la sexualidad, aun desde una pretendida especificdad latinoamericana, han sido proyectos findados, y por tanco correlativos, al tiempo histérico y la «pisteme producida por la modernidad como proyecto de futuro, que se presenta asf mismo como de maxima evolucién y desarrollo de lo humano y, por lo mismo, como proyecto ‘generalizable con pretensiones universlistas e imperialists. 1, Publicado originalmente en Rail Moarquech Feters-Balanguet (ed), Andar edie deolonil, De Signo, «El dsprenimientor, Buenos Aes, 2015, pp. 21-39 29 Sabemos que desde hace l menos tint ast prey forma atciordeincerpretacion del cuerpo y la sexuaida, de univetsaldad tolizadora ha sido detuncinda ya por # cs de la inscripcién de este relato en pork i yendonos conscient faci soils propa cn fog css proyccospllicos, roponge proganarnn: equ poses (pmidene psn abectaga tia MM Nos pets see dea epunin ea Ia ciudadania y el sujet (enero y sexual) de los wn racista imperial? De qué manera nuestra raz6n ha sido ropia moderna yu els upcoslohabtin some ian y destruccidn de formas oft de pensar, comprendet, embargo dco giro no pretend ni stealing isa y vivir el mundo, la sexualidad y las relaciones er6tico- cst tac de pensamiet, nando y octane Mecva? (Cunt de lo que hemos sealado como formas Ines compromio con pci dls addon de comprensinlimitadss y opresivas del ejercicio pleno de 4lsjeto colonia equ desde los albores dese lgo momen, ta sexuaidad y la identidad se lo debemos ala manera en que hinrco ha sido defido como inion asad, hiebamy cane toridente ha producido, a partir de su propia experiencia ‘humane, en una tap anterior de desanolo. necesito, lin bistérica, una verdad sobre la sexuaidad y el género? lnempres savaconsta de oecdente sus mevimienos polio Sin caer en una idealizacién del «pasadox o de toda epi emancipadores As, pues, en esta nueva tape revisionist, mie temologla otra, deberiamos volver a mirar allf donde hemos {que deshacer el género —coms el programa proponta—, hemes dkjadodehacelo para constuir una genealogl des prictcas ‘isto una eafiemacin y profundizacin de losvalores de misina y de los sentidos del presente, que permita evidenciar: a) la Tiber e ndividuacin del syjeo. forma en que se conjuga una historia de impugnacin y dest En abirta confrontacién con ese rato, veo la necesidad de tucidn de sentidos de verdad y justcia presente en toda comu- roducir una erica dentro del programa feminiseay de liberaisn nidad;b) la violencia epstémica y material ala que han sido sexual que cuesione la idea de un recotterhistxico en eau ae sometidos una varied de pueblos yculeuras porlaexpansién ‘zndents en donde odo quehacer, castumbre,epsteme abyecta al ycoaccién colonial (Belausteguigoitia, 2001; Castro-Gémez, proyecto moderno aparece como relativaa una ctapa anteriora ser 2000); c) las formas de asimilacién, reinterpretacién y ade- superada en el devenir hurano, Mitrabaj parr de un interés por ‘cuacién de las significaciones culturales sobre los orfgenes y econocet recoger y aportara una critica del progransa feminists tradiciones comunitatias/sociales y la reconfiguracién de a or- 1 ls politica de liberacién sexual en su conjunco —con toda sa sganizacién social dentro de un sistema moderno-colonial de ‘Ya para esta misma época —entre finales de los noventi ¢ ini de nuevo siglo comenzaton a aparece alguner exes tos pioneosy conveacones ente academics, ntlecaly activistas feministas en Argentina, que avanzaban desde. estas perspectivas posfeministas un andlisis sobre la realidad local, Tales son los trabajos de Josefina Fernandez, Flavio Rapisardi, Diana Maft, entre ot, ast como los posionamients gu intercambiameos a avs de conten elettnico y otros espace rmovimienisas, activi feminists, bias, avers ean, queer del movimiento sociosexul argentino, como Murs ‘Cabral, Lohana Berkins, Alejandra Sardé, Ménica D’Uva, en- tre otros. El debate que iniciamos fue prolifero y fue subiendo de ono dada la defensa a ultranza de las nuevas manetas de 999 4 Revihpblcds dee! 1995 por east lertinio de Ess de Gener Silda fs) dl Tela de Hl y Les de Unive de Buco Aes Pann inrmai, wae “hpilgeneainsio lo bn asad» 5. ueuna revises inden aaa en Agena jo In cooing de neous La Fetches io angen Diana Madre pedo 19882007, Dara me forma, vase 9, Pablcadaporel Centro de Filosofia y Ciencias Hurmanasy Cento de Comsnicain y Eepresn dela Universidad Federal de Santa Cain, Bl desl eo 1992, Para ma informacigo, vase cup! bolic pptacrptssseril8pide0 104-026XlngaesSemsis> 237 ohana Berkins, reconocila travesti feminist agen impor de pinpo dls een deb pimeer arava y pried rn apy conganizaivas de este colecivo, cinta emo fueron ls pring encuentos con algunas Feminists y lbianas feminist ma solidarizaron con su lucha (Berks, 2003). Dada cst expen politica, yeste acceso temprano ala teoizacién posfemining quer, asi como los debates que clas generar localmente, feminismo yl poltica sociosexval argentina se convetirin ery ‘anguarda politica de estos posicionamientos en a regi cont trbuyendo e influyendo en su propagacin al resto de los pases de America Latina desde finales dela década de os overt, axin toda la primera década dl presence sgl. Al poco tiempo se le sumarfan a exe liderago pequetas comunidiesleraday, cercana inser en ls centosinstntos de estos degéner y sexualidad en Brasil Chil? y Metco.” @ Tari Plcio nos infra qu era gurl a Bra co mie dees silo, marae mt delacba de fs uh Bales yc ireremens dec og pas nls sas Ui Toreido quer enraron al Bra pr lap de wierd yg comocypein plapoveiente bel movimento sls 2014p. 1). 9. Tis Hemindes ond ina omnis chien coma or mal een qe pra cco de Chile medias de ls nvena use omen alec universes chen lune textes anion de itera ques Remenura cnn canine esabancn Ep logan cer ponte cone Univer de Chie epctcanete Cent de Eaton de Geer y Clare ano Scat pn trea Pal Brin pi principio del 2004 Mi peptone Temas, pr mpc, fie en i so taboo ms ante stmenoret ncitopolicon de died aa eae r- Cito sneer la confomacn drape dec dessteon {eens moment ncn an pero fem screen a orlnacdemi ose. yas noc so opp adi ender Convencinpesonal or e-mal 10 desde 204), 10.Enelato 997 concise inane evita Deb Fominia poblrielnimero Rarer, hacendo analogues 238 Hay varias cuestione on las que me gustaria deenerme, ree an pen st pe ropa dele sponta y queer en Améfia Latin. (et Pero sefilat que ha babido una historia de serena que poco a poco ha ido ceiendo al vance y ex Son mpl cents como mua man de vera a vera sobre sexo yl sexalidad. Esa historia paneer aed rel diemaleonficte auton: i pmituconaida, que consuci el debate la polarin- el fmiinmo linoamesiano durante toda a dca de cena, La raptua temprana que se dieraen Argentina, ve ano dos mil, entre quienes apoyaban la ampliacién de ‘Geo dl Feminsmo de manera que incuyea al cuerpo ab- set del género bina y quienes vrlan en esto un peligro rp ntento de romper os expels propios de mujeres fue Thema cl anuncio de los coalctos que se muliplcaian 2 area mayor en todo et continents. A principio del nuevo So el debate eencilismo-anisencialsmo, espresido eo “Zimios de a partcipacidn ono de as trans femeninas en os ‘Spaces Femina, se constitu en un nuevo cede dispura pur plicit xinoamericana tl como lo he do- vimentado en aaj anteriores (Espinosa Miso, 20123). “Asmismo, cabe mencionar algunas cuestionesrelativas al problema dela aogida dea rota queer en Amésca Latin, Emini investigacign me percato de que la preocupacin y a Sire de in que ced cobando ua inp sgl 0 Tet Soren el enadn den ded en os sxeliads sno en ences ceprosions care emino ger {feunpalba dedi snducstnal pt alemdsdese presse SEAM Eno pene en ana clu dete dela nos some ecm dlamecment Bor Eeheveren ct que noses comm tsaheratin pare nimeo evan ene nestle que sonacrgu de mares ined lid queen inglés oe ep IT eda del mimev (Debt Pin, 197. 239 pregunta por lo adecuado de suscribir a la teoria regido, en tanto teorla importada, no deja de ser en los feentes momentos. Autores com Felipe Marin (2011, Larisa Pelco (2014), Juan Pablo Su (2014), Valeria Fores (2008) y Dio Faleont Teves insisten en la pregunta por lo (in)adecuado del uso del nt blo queer en nuestros contextos,en donde el mismo poet «l sentido original de resignifiar la palabra queer comma cen palabra qucer como sings sin de vial on aa de visi, ph interpelacién normativa, A propésito, Rivas San Mento Sef: eis frecuente ala hora de evalarpeligros 0 prone ‘pats ts gteed cee ea ae seexraoen osiperpongan mers problema de ‘raduceinlceral de una palabra 2 confictos en la produce desaberes Nont/Sue ose delniaetndeplcton pony locales» 2011, pp. 61-62). a Lo interesante i ; 6 que, a pesar dela insistence preocupa- cis aor cad acer so jo eam lc las posibilidades que la readecuacién del signifcante permit, al aglutinar bajo su paraguas una serie de pricicas sexo-erticasafectivas no normativas que ocurren, en con textos y tiempos muy diferenciados, dencro de la historia de lo latinoamericano. As, Flores expresa: «En un proceso de ‘eapropiacin situada, es posible una conversion de conceptos en tiles politicos, es decir, no utilizar el témino lteralmente porsu nul rsoniciacn nr dmbito dehablceana sino activar sus operaciones politcas» (2008, p. 3). Alrespeco hay ras custones que me ean evan ts Una primera ct iene que ver con el edusonismo que subsume la preocupacién por la llegada de lo queer a tacién fonética» (Rivas San Martin, 2011, p. 63), como si el problema no implicara cuestiones mas sustantivas, como el peligro de universalizacidn de una experiencia histérica Acer en la Form 240 sfea que se intenca cranspolar para interpreta experien- EP contexts ystuaiones de muy distinto orden. A ext éxito Sabsay nos es til cuando seal: «Para analiza Pe rmplicancias de la universliacion, quads sea iil, en Hct diferencias nee problema de emo se matrialzan jail yglobalmence las politica sexuals,y el problema de fondo y mis complejo que se da.a nivel epistemoldgico con fepecto a Las categorias sexuaes en jucgor (2014, p51). fabsay observa que la aporia de Ia aceptacién globalizada Je conceptos como el de «ciudadantas sexual, wlibertad Joab, sidentidad de géneros politica queer... consisteen {que se univerliza la sexualidad —y con ello el sujeto tanto Feterosexual como disidente sexual— como una categoria anioldgica desde la cual ha de medirse y analizarse todo sujet Siadmitimos a ascripcién moderna del dispositivo texual —eE sujeto sexual de derechos se correspond con tl individuo abstracto del iberalismo», nos recuerda Sabsay {p. 50)— nos encontramos una vex més contribuyendo a Ia expansién del eurocentrismo y su programa humanista, por mis que nos esforcemos por desmentito ‘La segunda cuestién tiene que ver con la genealogia pro- pia dela aparicin de la teorla queer en los Estados Unidos, y-cémo es que esta llega a Amética Latina: en qué momen- fo, y qué es lo que llega al espacio de slo Latinoamericano». Como he intentado demostea, profundizaré en el préximo subapartado, el pensamiento y la politica queer llegan a Amé- rica Latina a través dl discuss producido por éites blancas y blanco-mestizas canto académieas como actvisas. Esto no es ‘un dato menor, pues habla del ugar interesado desde donde se producen determinas miradas e interpretaciones. Habla de-una marerialidad que produce la cisica divisién entre sujeto cognoscente y objeto de conocimiento, de quienes siguen quedando en el ugar del sujeto productor de verdad yy aquel que, ignorance, necesita ser instruido. En este sentido, lo tercero refer a admit lass Como he intentado argumentar, esta acepracién in- ondicional ala univeralizacidn de marcos conceptuaes y paltcos, producidos dentro de la experiencia histérica de faropa 10s Esados Unidos, resulta problemecca en tanto pate conn inpniendoconespliaions egorias propias de experiencias paticulares, eimpidiendo eral de heamienasy expliciones mis deca ra nuestros contextos (Espinosa Mitioso, 20102). Por otro lado, sostengo que el eminismo académico y las ales intelecruales propias no solo se acogieron a la denun- Gia de los estindares normativos de género a los que segula siadalateorizacin, el andissy la politica feminist tal cual fe planteada por autoras norteamericanas y europeas como Butler, Kosofiky Sedgwick, Seott, Preciado, sino que promo- secon ylidearon la expansion de esta nueva verdad, en la que se insribitla la nueva preocupacién central del movimiento feministay de la sexualidad en América Latina, desde finales delos noventa y durante todo este principio de siglo Si bien, yycomo hemos descrcoen otras oportunidades, no deberiamos lidar que el exallido y desesabilizacién del sujeto mujer tniversal del feminismo provino del cuestionamiento de lesbianas negras, latinas y de color, provenientes de familias trabajadoras en los Estados Unidos, lo cierto es que el deveni de este debate, y a politica que del mismo surgié, abandons prontamence los desaflos mas urgentes, lanzados pot este mans en que la teorizacién posfeministay queer ha

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