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Introducción a la técnica

Esta es nuestra primera meditación programada, la primera de 10 meditaciones


que realizaremos aquí en el Mar Rojo y que cambiaran nuestra vida para
siempre. En 1er lugar quiero que entiendan que es una meditación programada,
este tipo de meditación, fue creada por mi en los años 90 y se basa en una historia
que esta creada para producir un cambio positivo en nosotros, que vaya
produciendo un cambio de cimientos desde la base de nuestro cerebro hacia
fuera marcando definitivamente un cambio en nuestro animo y en nuestra razón
de vivir un día a día ,mas lleno de dicha y abiertos al amor y el entendimiento
con los demás seres humanos.

En los años 90 fueron hechas estas meditaciones con un grupo de enfermos con
graves problemas de corazón , de cancer y de enfermedades neurologicas y
mentales, habiendo logrado hasta el día de hoy que todos los integrantes de este
grupo estén con vida, han pasado ya mas de 20 años y alguno de los integrantes
del grupo tiene mas de 80 años.

Quiero ahora con la posibilidad del Internet que hace que se pueda llegar a miles
de personas de distintas edades , sanos y enfermos, ayudar a muchas mas
personas en todo el mundo a probar las 10 meditaciones que son 10 cambios de
vida y hacer que cada uno de ustedes viva la experiencia única de estar en el Mar
Rojo junto conmigo.

EJERCICIO PRIMERO

Este primer ejercicio, ENTERRANDO NUESTRA CAJA NEGRA, es bueno


empezar a realizarlo queriendo finalizar con una etapa de nuestra vida y queriendo
cambiar muchas cosas en nuestra vida, por eso queremos enterrar las cosas negativas,
oscuras y malas que hasta el momento nos hallan sucedido, yo he decidido empezar
estas meditaciones abriendo junto con ustedes este nuevo año .

ENTERRANDO NUESTRA CAJA NEGRA

Estamos en el muelle de Eilat, en el Mar Rojo, prontos a subir a un barco grande


blanco, algunos empiezan a subir en este momento, otros estamos terminando de
preparar nuestra caja negra. Es de notar que la gente se desplaza por el barco o
subiendo al mismo , con la caja negra como si esta pesase mucho, y porqué no, si
dentro de ella están los recuerdos más amargos de nuestra vida.
Cuando el maestro nos habló ayer fue muy explícito, tómese todo el tiempo que
quieran pero por favor preparen muy bien la caja negra, tiene que contener todos los
recuerdos negros, las muertes que nos hayan perturbado, los sentimientos mas
negativos, nuestros odios, nuestras iras, nuestras envidias y todos aquellos que nos
hallan producido sentimientos tan oscuros e inferiores. Tampoco deben de olvidar
poner todas las enfermedades padecidas y actuales y los pensamientos negativos y
negros que siempre perturban el funcionamiento perfecto de nuestra vida y la dejan
siempre sumida en el caos. No se olviden tampoco, de las suplicas, los gritos, y los
sollozos, que quedaron en sus bocas sin ser oídos, martirizando sus mentes hasta el
día de hoy, hoy es el último día, el limite, entre la cloaca en que están y la vida
hermosa que merecen. Es por eso que deben sacar y enterrar todo dentro de sus cajas.

Sáquenlo todo afuera y tírenlo dentro de sus cajas negras y ciérrenlas con tres
candados.

Y allí estábamos todos esperando el tiempo de zarpar, y con las cajas bien cerradas al
lado nuestro, el maestro parecía absorto con el paisaje, miraba ese cielo azul perfecto,
las gaviotas que acariciaban el azul, al frente las montañas rojas de Oriente, por detrás
nuestro, la majestuosidad del desierto y mas allá, también montañas, con diferentes
tonalidades del marrón, son cordones de distintos tonos, ninguno igual al otro pero
unidos en la magia que da la energía de ese lugar, como habíamos aprendido del
maestro, ese lugar, el más mágico.
En este completo milagro de la naturaleza dentro de esa energía mágica, estábamos
nosotros 7 y nuestro maestro cumpliendo con nuestra misión de enterrar nuestra caja
negra. El maestro no había elegido cualquier lugar, había elegido el más energético
del planeta.

Nuestro maestro, con un movimiento de cabeza le indicaba al conductor del barco que
ponga en marcha el motor y así el barco empezó a moverse y emprendió el camino
que le había indicado mi maestro. El destino era la Isla de los Corales, en aguas y
tierras egipcias. Allí enterraríamos nuestras 7 cajas negras. Nuestro maestro seguía
absorto en la naturaleza. No era para menos, el Mar Rojo es un paraíso para no perder.

Las gaviotas nos seguían, tratando de comer pescados, o tratando de acariciarnos, el


agua por momentos nos salpicaba mostrando la temperatura baja de esas aguas
profundas, el maestro respiraba la energía y parecía estar seriamente perturbado y
embrujado dentro de su sonrisa que nos llenaba de tranquilidad. En ese preciso nos
indicó que estábamos llegando, nos dijo que no bajáramos del barco sin antes
comprobar que nuestras cajas estuviesen bien cerradas con los tres candados. Luego
lentamente comenzamos a descender y caminamos los 7 junto al maestro, unos metros
hacia el interior de la playa y deteniéndose allí nos señaló el lugar del entierro. Nos
pusimos en linea, separados un metro uno de otro, y comenzamos a hacer el pozo.
Unos minutos después, a la orden de nuestro maestro procedimos a enterrar en el pozo
nuestra caja negra de metal pesado y llena de nuestros recuerdos más oscuros. En el
momento que todos la metíamos dentro del pozo al unísono, una fuerza poderosa nos
lanzó a los 7 hacia atrás. Con la caja negra sobre nuestro abdomen, todos miramos al
maestro sin saber qué había pasado. Él, mirándonos a los ojos, respondió: no es
suficiente que el ser humano quiera algo para que se cumpla hay que extraer ese
querer de nuestro pensamiento y convertirlo en acción. Y la acción en realidad.
Entonces sí, nuestro querer se convertirá en realidad. ¿Entendieron? Muy bien,
entonces, pongan nuevamente la caja negra en el pozo, pero esta vez con toda la
fuerza necesaria para convertir nuestro querer en acción y la acción en realidad
pura. Ahora sí, entierren la caja negra con mucho arena arriba. Con el tiempo, el
mar se llevará nuestras cajas mar adentro y día a día, hora a hora, nuestros
recuerdos oscuros, nuestras pesadillas más grandes, nuestros mayores pecados,
nuestras enfermedades más terribles, nuestras lágrimas más mojadas, estarán cada
vez más lejos de nosotros. El mar se las llevó consigo y las enterró en el océano y el
océano las enterró en las extrañas misma de la Tierra. Allí, en el lugar más oscuro
y caliente de la Tierra, donde todo se desintegra en un abrir y cerrar de ojos.
Cuando él terminó de decir estas palabras, levantó la vista hacia el cielo y nos miró.
Los 7 estábamos llorando, él nos habló nuevamente: Lloren, no tengan miedo de
llorar. El llorar no es de cobardes, al contrario, el llorar es de valientes y nos ayuda
a descargar las cargas negativas que la gente nos va dejando a medida que
avanzamos por la vida, toda esa gente que nos quiere a imagen y semejanza de sí
misma y entonces no nos quiere bien ,porque no nos dejan ser como nosotros
somos verdaderamente. Y esos encontronazos de quereres , descargan en las
lágrimas. Si no las eliminamos por temor a ser cobardes o demasiados sensibles, se
acumulan en el el alma. Se va inundando una y otra vez. y le es cada vez más
difícil llorar. Desde fuera parecieran

personas secas, pero por dentro están cada vez con más presión, hasta que no
aguantan más y se ahogan. Y en ese momento en que el alma se ahoga la persona
percibe que sólo siente su cuerpo, personas que deambulan por el mundo como
seres secos, secos de sentimientos, secos de alegrías, secos de comprensión, secos de
compañía, secos de lágrimas. ¡Qué ironía! A esa gente un día se le ahogo el alma
en lágrimas. Vuelvo a decirles: lloren, nunca se avergüencen de llorar, es lo único
que nos diferencia de aquella gente que ya no puede sentir porque su alma se
ahogó y su corazón se secó y está cada vez más vacío.

Y ahora sí, después de haber secado nuestras lágrimas, y contemplando la energía del
sol y del día feliz que nos espera y la nueva vida que desde hoy se asoma, sin
querernos perder nada, nos encaminamos al barco, no sin antes habernos dado un
gran abrazo y llenos de sonrisas todos estamos dentro del mismo. Y encontramos
dentro de su color blanco, destellos dorados y plateados y, como nos había dicho el
maestro, nosotros también habíamos sufrido el primero de nuestros cambios al haber
vuelto al barco sin ninguna energía negativa, llenos de un conjunto de energías
positivas nuevas que nos permitían ver el hoy inmensamente felices y el mañana con
un despertar nuevo. Y nuestros rostros y nuestros cuerpos emanaban un brillo y un
aura con destellos dorados y plateados, dentro de su firme color blanco.

Volvíamos al golfo del mar rojo y amarramos el barco, en el muelle de donde


habíamos salido pero llegábamos muy distintos, como había dicho el maestro a
medida que pasen los días y completemos todos los ejercicios no nos vamos a
reconocer, estaba pensando que este primer día yo ya vislumbraba la predicción del
maestro y me sentía parte de un todo, en el lugar mismo en que que el respirar es
único y la suave energía llena lentamente nuestros poros y todo nuestro cuerpo y alma
.al unísono
,Los saluda
.Helen Maran

NO TE TOMES NADA PERSONALMENTE, CUANDO SEAS INMUNE A"


LAS OPINIONES,Y LOS ACTOS DE LOS DEMÁS,DEJARAS DE SER LA
".VÍCTIMA DE UN SUFRIMIENTO INNECESARIO

"Blog: "Meditaciones en el Mar Rojo

http://meditacionesenelmarrojo.blogspot.com

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