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Una navidad peronista.

En una lejana visita que realizara a la ciudad de San Nicolás, recibí un extraño
panfleto que me causó cierto asombro. Administrado por una mujer que rezaba el
rosario, junto a un grupo de fervientes católicos, el rugoso papel contenía una serie de
misteriosos mensajes. La congregación de apasionados apóstoles, pertenecía a la Orden
de Laicos de María del Rosario de San Nicolás. Su líder, Segundo Rolón, había sido
diputado de la provincia de Buenos Aires.
En el pulcro papel, impreso con letras góticas, se observaba una especie de
presentación en donde se leía: “Somos una asociación privada de laicos, donde lo que
hacemos es enseñar una nueva forma de vida en base a las enseñanzas de Cristo, basada
en la oración personal y comunitaria, el trabajo manual y la vida en común”. El mensaje
parecía claro y sencillo. Pero lo que me llamó la atención es que detrás del papel había
una especie de predicción escrita en lápiz. La minuciosa caligrafía del texto, me hizo
suponer que había sido escrito por una persona de edad avanzada. No tenía tachaduras
ni correcciones y había sido redactado en forma apresurada. Al parecer, el extraño
mensaje había sido dictado por la virgen María y decía lo siguiente: “Ante el
desgobierno y la situación desastrosa que actualmente cualquiera puede ver, oír y
comprobar en este suelo, Jesucristo nos advierte a todos: La hora de cumplir las
promesas ha llegado. Estén muy atentos. No sea cosa que llegue la noche, y ustedes
estén afuera. Mi hijo y Yo somos la esperanza, somos la única esperanza. A Pedro lo
sostengo y los sostiene. Ustedes sosténganlo. Pronto todo el pueblo lo hará. Yo reino en
él y en este Cuerpo Místico que es mi Iglesia santa en la santa Argentina. Un gran
estruendo caerá sobre el mundo, una gran movilización popular se dirigirá en paz a la
Plaza de Mayo el veinticinco de diciembre, entonces caerán todas las instituciones:
todas, y no solo el gobierno, y surgirá uno nuevo gobierno a través de sus apóstoles de
los últimos tiempos. El veintiséis de diciembre nadie comprenderá o entenderá cómo
esto se produjo”.
Este singular anuncio, logró sobresaltarme. Con un cierto temor, pensé que un Dios
de amor y su madre, sólo deberían traernos paz y tranquilidad para esta navidad. Pero
recordé que ya hemos vivido momentos difíciles en vísperas de otras fiestas religiosas.
Aunque me parecía algo extraño que un grupo católico y peronista, quiera ver caer a sus
compañeros, que desde el poder dicen defender esas mismas banderas. No creo que a
nuestro Señor Jesucristo, le interese tomar el difícil lugar que está ocupando nuestra
presidenta. Por más que algunos digan que su segunda venida está por acontecer, todos
sabemos que su reino no es de este mundo.
Los cierto es que cuando Segundo Rolón, se dirigió a la Casa Rosada con un
aparente mensaje de la virgen para la presidenta, lo trataron de loco y lo expulsaron. El
enigmático profeta se exasperó ante la situación y con fuertes gritos predijo la futura
caída de nuestra actual líder democrática. Por ello, ante la negativa de la mandataria a
recibirlo, se decidió a hacer público ese misterioso anuncio por distintos medios. La
profecía era corta y contundente, limitándose al siguiente texto: “No seas necia ni
arrogante hija mía, tú sabes más que nadie, que todo se terminó, que todo tiene olor a
muerte. Pero todo está cambiando, ya nada volverá a ser como antes. La segunda venida
de Jesucristo y la caída de todas las instituciones está próxima. Los poderosos serán
derribados y los pobres recuperarán lo que les fue quitado. La caída del gobierno es
inminente y entonces sobrevendrá el gobierno de Cristo, Rey de reyes. Su plan de
gobierno es sencillo: es para los pobres; a ellos hay que llevarles lo que les han quitado.
Pronto verán a Cristo Rey en el balcón de la rosada asumir el gobierno nacional de la

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nueva y santa Argentina. Sus doce apóstoles tienen un plan de gobierno, que fue dado
por Dios”.
El terrible anuncio no conmovió en lo más mínimo a los supuestos perjudicados.
Sólo una par de ancianas que vieron a Rolón por la calle, le preguntaron acerca del
origen de su vaticinio. El místico de Perón respondió que su movimiento tiene entre sus
miembros algunos profetas; que pueden ver y oír lo que la virgen o el Espíritu Santo les
dictan. Hay muchos videntes de su rebaño que poseen el don de visión y profecía.
Los laicos de este misterioso movimiento creen en Dios pero no en los curas. Ellos
prefieren evitar la estructura jerárquica de la Iglesia y escuchar sólo a Cristo. Su ética
cristiana está asociada al seguimiento del evangelio y a la conformación de
comunidades, en donde intentan alcanzar una vida perfecta. Esperan llenar nuestra
nación de sus pequeñas sociedades, para salvar a la patria y al pueblo de aquellos que
quieren apoderarse de lo que no les pertenece. Pues la tierra no pertenece al ser humano,
sino sólo a Dios. No son muy devotos de asistir a misa o seguir los lineamientos de los
obispos. Su actividad no está en las parroquias o en las comunidades religiosas, sino en
la calle. Dicen ser peregrinos de este mundo, discípulos del Señor, que participan
activamente en el campo de la política y la cultura.
El origen de la vida política de Segundo Rolón se remonta al peronismo de la década
del 70. En esa época militó en la guardia de hierro, a la que se consideraba la
conservadora de la ortodoxia y la sana doctrina del general. Es decir, que mientras los
montoneros eran los soldados de Perón, la guardia de hierro contenía a los “sacerdotes”
del general. Estos guardianes surgieron para seguir con fidelidad las legítimas
enseñanzas de su líder. Pero con el tiempo, fueron haciendo de su movimiento una
especie de religión. Luego de un camino que los llevó a oponerse a la izquierda
guerrillera, a coquetear con la dictadura y a ocupar cargos en casi todos los gobiernos,
cambiaron a Perón por Jesús. En sus orígenes esperaban las cartas que el general
enviaba desde el exilio para aprender de su sana doctrina. Pero ahora se dedican a
recibir revelaciones místicas y esperan la segunda venida del Mesías. Pues en el futuro
próximo que se avecina, el gran conductor justicialista dejará su lugar el conductor de
conductores.
Por ello sus mensajes son apocalípticos y consideran que la lucha contra el demonio
es fatal. Saben que los estragos que el maligno está cometiendo en el mundo son
terribles. Pero creen que muy pronto será vencido por Cristo Rey y sus laicos
seguidores. Su victoria será fruto de un duro combate en el que sólo harán uso de la fe,
la oración y el amor. La derrota del egoísmo, la debilidad y la cobardía que el demonio
ha instalado es inminente. Los aliados del maligno ya no tienen recursos, están
acorralados y muy pronto serán vencidos.
Segundo Rolón, dice llamarse Pedro II, en referencia a la famosa profecía de san
Malaquías que menciona los distintos sucesores de san Pedro en el papado. Se hace
llamar el nuevo papa sobre esta tierra y dice que sus seguidores darán lugar a un
gobierno muy superior a todos los anteriores. Al igual que los justicialistas de antaño,
sueña con quitarle sus posesiones a todos los terratenientes y poderosos, para
distribuirlas entre los pobres de manera equitativa. Hay que devolverle a los humildes
sus posesiones, puesto que le pertenecen ya que Cristo tiene predilección por ellos. Una
nueva nación está por llegar, con el poder de sus nuevas instituciones y una distribución
más justa. La solución económica de este nuevo reino de Cristo, consiste en un sistema
integral de producción, distribución y consumo. Este sistema económico solidario, será
sostenido por las comunidades de la nación y los emprendedores económicos que se
enrolen en la Nueva Argentina. En esta nueva patria la “Orden de la Virgen del Rosario
de San Nicolás”, impulsará el enrolamiento y se constituirá en un nuevo espacio

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económico comunitario. Este sistema brindará mayores beneficios al pueblo y se
constituirá por aquellos que obtengan su “fe de enrolamiento”. Funcionará haciendo uso
de una moneda comunitaria denominada Peso Solidario. La emisión del mismo, estará a
cargo de la asociación y el emisor será la Escuela Central de la Vida. La distribución de
pesos solidarios según adonde se dirijan las compras de los enrolados depende de los
atractivos e incentivos. Para los enrolados que inviertan sus pesos, el bien común debe
ser su guía, antes que el beneficio personal. Pero por sobre todo deben tener en cuenta
en cada una de sus inversiones, la participación en la comunidad y la aceptación de la
conducción de Cristo Rey y su madre. De esta forma, la motivación para cambiar las
monedas habituales como pesos, dólares o euros por los nuevos pesos solidarios será el
amor a la obra de Jesús y María a través de los bienes que sus seguidores fabriquen o
comercialicen con su trabajo. El sistema económico popular es la solución económica
que llevará a nuestro país a un lugar de privilegio. Allí todos los emprendedores
económicos, las asociaciones libres e instituciones populares sólo se dejarán guiar por la
solidaridad y evitarán todo tipo de egoísmo. En nuestra patria, existen millones de
despojados y aquellos que viven con la angustia de perderlo todo en cualquier
momento. En este contexto, unos pocos lobos rapaces, son los únicos que acumulan los
beneficios.
El Rey del universo ya está aquí y ahora ha decidido delegar esa función. Él es
invisible para la mayoría de las personas porque quiere motivarlas en el crecimiento de
su fe. Pero se presenta en sus apóstoles y discípulos, para hacer más evidente la eficacia
de su gracia en la historia de los hombres. El Reino de Dios en la tierra es una realidad
en marcha en este suelo bendito. El Señor ha reunido en esta tierra a su colegio
apostólico completo encabezado por quien posee ahora el espíritu eterno de san Pedro,
su papa Pedro II.
Por suerte hoy he celebrado la navidad sin sobresaltos y con la paz que nos ha traído
el niño Jesús. Los nuevos seguidores del peronismo místico aún no han instaurado su
gobierno ni han hecho juicio final alguno. Los corruptos de nuestra tierra siguen
tranquilos y los gobiernos aún permanecen en paz. El nuevo papa peronista Pedro II con
sus seguidores, todavía no ha accedido al poder de nuestra nación. Los siervos de Cristo
Rey no se han animado a visitar la casa de gobierno y la segunda venida de Cristo ha
quedado para más adelante. No he visto a nadie gritar por las calles, pidiendo que se
vayan todos, ni he sentido el sonido de las cacerolas. Los capitalistas yankis están muy
preocupados por su crisis, los oligarcas sojeros apenas si pueden subsistir con los
precios de sus productos y los malditos destituyentes aún permanecen con la resaca que
les ha dejado la extensa noche buena. Por suerte, hasta ahora la única acción
revolucionaria que tuvo la Orden de laicos de María del Rosario de San Nicolás fue
repartir volantes y entregarme este extraño mensaje de la virgen. Muchos creen que
pronto verán a Cristo Rey, asumir el gobierno y saludar desde el balcón de la casa
rosada. Pero creo que trasformar el sistema democrático actual, exige algo más que un
Mesías que salga al balcón.
Supongo que por ahora, la mayor parte de la población no parece capaz de entender
semejantes mensajes espirituales y siguen interpretando la navidad como una fiesta de
desaforado consumo y comilonas. Tal vez nuestra presidenta ha entendido bien, que en
la actualidad la navidad consiste en consumir más que en recordar al Mesías que llega al
mundo. Por ello el plan heladera, el plan de autos en cuotas, el cambio de lavarropas o
la dádiva de unos pesos para las navidades pueden ser más eficientes que el deseo de
crecimiento espiritual. Aún el general Perón y sus estrategias distributivas siguen siendo
mucho más eficientes que la espera del Mesías en su segunda venida.

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El deseo navideño de confusión y revolución no se ha cumplido Tal vez, pueda ser
para fin de año. Coincido con este grupo de piadosos peronistas en que nuestra
democracia posee ciertos rasgos de barbarie. Es verdad, que tenemos el deber de
mejorar lo que aún queda sano en nuestras instituciones. Hay una serie de vicios en
nuestra cultura que deben ser corregidos. Pero sería injusto no mencionar ciertos rasgos
que la redimen. Aún podemos confiar en la división de poderes, el poder del ejecutivo
sigue teniendo algunas limitaciones y la justicia a veces cumple sus funciones. Creo que
es difícil que todas las instituciones caigan en esta semana. No creo que los laicos de
Rolón ingresen a la Casa Rosada, ni que caiga el gobierno de la actual presidenta.
Supongo que el juicio final para los miles de argentinos corruptos debe quedar para más
adelante. Aunque sospecho que sería bueno que nuestra presidenta preste atención a lo
que puede suceder; si no se decide a llevarnos por el camino de la recta moral.

Horacio Hernández.
http://www.horaciohernandez.blogspot.com/

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