MAESTRÍA EN TEOLOGÍA

SISTEMÁTICA
CURSO: CIENCIA DE LA RELIGIÓN
RESUMEN DE LECTURA
“Sistema de poder y sistema de creencias”
del libro
De la Gran Nicoya precolombina a la provincia de Nicaragua, s. XV y XVI
Prof: Edward Salazar C.

Maestrante: Miguel España.

Fecha: Jueves 15 febrero, 2018
 SISTEMA DE PODER Y SISTEMA DE CREENCIAS:
EL CULTO
Nicarao/Chorotegas
Templo o tescuit/teboa: anchos con nichos donde guardaban
penates y armas en tiempos de paz.
Las mujeres no podían entrar en los templos principales.
Montículos, con piedra de mármol al centro: Sacrificios
humanos
Los placeres: centro religioso regional.
Asociado a centros funerarios: Ciudad Sandino, Las brisas (sapoá-
800-1350), Las Torres y Rodeo (Ometpe-1350-1550)
Estatuaria: Grandes y pequeñas esculturas (Isla Zapatera) y petroglifos .
Ubicado a finales del periodo Policromo medio y tardía, contiene
elementos estilísticos e iconográficos locales (gobernantes, chamanes)
y de Mesoamérica, por.ej: deidades como Tlaloc (Dios aguas celestes),
Ehecatl (dios-viento), Mictlantecuhtli (dios-inframundo). Zoomorfas y
antropomorfas.
Otras esculturas de pequeño formato: hombres con mascaras (alterego-
espíritu), aligátor, jaguar, metate.
Ritos y Ceremonias: relacionado a los ciclos de fertilidad y el
calendario. Las fiestas coincidían con el inicio y finalización de las
tareas agrícolas. Vestimentas especiales, ornamentación y pintura,
se consumían abundante chicha, terminaban bien borrachos y
fumaban tabaco y diferentes bailes y música.
CONTINUACIÓN….
Sacrificios humanos en el volcán Masaya para aplacar el
volcán y en tiempos de sequía (niños).
Creencias animistas.
Juegos ceremoniales: Volador y Comelagatoaste.
Ofrendas y sacrificios: 1. funerarias (cerámica, cuentas color
verde, dientes de niños..) frutos, animales. 2. Dioses: sangre y
corazones de hombres.
Los sacrificios aseguraban buena cosecha, buen clima y victoria
en las guerras. La antropofagia era reservada a sacerdote y
caciques.
A Quiateot se le inmolaban los niños para propiciar la lluvia. Los
sacrificios fortalecía la vida de la divinidad.
Los inmolados comprados no se comían sino que sus entrañas se
enterraban con las manos y pies metidos en calabazas; queman
el corazón y lo demás excepto la cabeza que era colocada entre
los arboles, mas si los sacrificados eran enemigos de guerra:
signo de supremacía política-militar y además de recibir el
ejecutor todo el poder que residía en el cerebro.