Estudiantes: Morales Valdiviezo Xiomara Bacilio Diestra David
Nuevo Chimbote, Mayo 2018
INTRODUCCIÓN
El durazno o melocotón (Prunnus
pérsica) es el nombre que recibe tanto el árbol como la fruta que produce. Pertenece a la familia Rosaceae; es una drupa muy apetecida por su agradable sabor y cualidades nutricionales, al igual que en la industria de alimentos. Es un fruto climatérico, altamente perecedero con altas tasas respiratorias y de producción de etileno. VALOR NUTRICIONAL El durazno no es de las frutas que más hidratos de carbono y energía contienen. Destaca su riqueza en fibra. De sus minerales sobresale el potasio, que necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal y en cantidades discretas, el magnesio y el yodo. Además contiene mucho potasio, sodio y fósforo. Su efecto antioxidante combate la acción de los radicales libres y es muy beneficioso para la buena conservación de la piel. También es indicado en el tratamiento de diferentes afecciones, tales como enfermedades pulmonares, estomacales y hepáticas, úlceras, herpes, dolores reumáticos, hipertensión arterial , anemia, diabetes, además de contribuir a regularizar el sistema nervioso. MADURACIÓN DEL DURAZNO
La madurez en la cosecha es el factor determinante de la vida
comercial y de la calidad final de la fruta. Durante la maduración presenta pérdida del color verde de la epidermis y adquiere tonalidades rojizas/amarillas, por degradación de clorofilas y biosíntesis de antocianinas y carotenoides, pérdida de textura (degradación de protopectinas); también presenta aumento en el contenido de azúcares solubles, emisión de compuestos volátiles y actividad antioxidante, disminución en el contenido de ácidos orgánicos, firmeza y almidón. La firmeza de la pulpa es el mejor indicador para determinar que los duraznos han alcanzado el grado de maduración ideal para ser consumidos. DETERIORO DEL DURAZNO El durazno es muy sensible a daños mecánicos y enfermedades, por ende tiene una vida reducida. Su manejo adecuado depende del conocimiento de las características que hacen del durazno un caso especial. PODREDUMBRE MORENA Es provocada por varias especies del hongo Monilinia, siendo la principal, Monilia fructicola. Este patógeno inverna principalmente en frutos momificados que quedan en la planta o que caen al piso. Se inicia con una mancha circular de color castaño extendiéndose rápidamente en círculos simétricos y hacia el interior. Sobre la zona afectada aparece una abundante eflorescencia color gris. Se debe eliminar los frutos momificados que queden en planta y suelo. Aplicar fungicidas específicos desde la floración. Enfriar de inmediato la fruta tras la cosecha. Podredumbre mohosa Es una de las enfermedades de poscosecha de mayor importancia para los frutos de carozo. Ocurre solo en poscosecha, y penetra siempre por heridas. El primer síntoma es una mancha húmeda que avanza rápidamente y toma color pardo-oscuro. Sobre la zona afectada se observa la fructificación del hongo color blanco en un principio y negro después. El hongo forma nidos en cajones con frutos afectados, observándose abundante micelio blanco. Deben evitarse los daños en los frutos en todo momento. La conservación debe hacerse a temperaturas -0.5 /0°C. Decaimiento interno o daño por frío Los daños por frío que sufre el durazno se presentan cuando es almacenado a una temperatura entre 2°C y 7°C. Este problema fisiológico se caracteriza por presentar los siguientes síntomas: pardeamiento interno de la pulpa, tintes rojos en la pulpa, falta de jugo y pérdida de sabor. Estos síntomas se desarrollan solos o combinados, durante la maduración, tras un período de almacenamiento en frío, por lo que usualmente son detectados una vez que llegan al consumidor. El rango de Temperaturas Óptimas para la conservación de Duraznos es de a 0 +/- 0.5°C, siendo la Humedad Relativa Óptima 90-95% H. R y el punto de congelamiento es de -1ºC. Daños mecánicos El durazno puede sufrir daños principalmente en los procesos de poscosecha, por ejemplo en los sectores de enfriamiento rápido por agua, en el sector de limpieza y en el encerado. Algo muy común es el daño por roce producido los diferentes equipos o instrumentos, en estos proceso, con este tipo de daño pueden romperse las membranas celulares de la epidermis y se libera el contenido vacuolar hacia los espacios extracelulares, si existe contaminación por hierro, cobre o aluminio, éste se une a la antocianina y forman un complejo que cambia el color y produce las típicas manchas negras. Otros daños comunes en el durazno El daño por rameado se produce durante el cultivo por efecto del rozamiento de los frutos en formación con las ramas y es más pronunciado en regiones ventosas. El daño por manipulación, es común observarlos en frutos que superan la capacidad del cajón, o por manejo sin conocimiento por parte de comerciantes