EL BIEN HUMANO El bien se describe como aquello que es conveniente a un ser determinado.
Aristóteles: el bien es lo que perfecciona
una naturaleza. El bien humano es lo que perfecciona al hombre.
ST: El bien es aquello que todos
apetecen. Naturaleza 1. Griegos (physis): significa proceso desde el nacimiento hasta la plenitud.
Implica dinamismo, paso de la potencia al
acto. El acto está en la forma. Cada forma tiene su proceso, su plenitud.
Todo lo que contribuye a ese proceso es el
bien. Cada naturaleza tiene su propio bien. Lo propio y característico del hombre es su parte racional y espiritual.
El bien del hombre consistirá en todo lo que
contribuya a ese desarrollo, lo demás es un medio.
Para ST: la perfección del hombre es el
desarrollo armónico de sus posibilidades. Pero considerando todo lo constitutivo del ser humano (social, histórico y espiritual) El ser humano como ser relacional A) con respecto a Dios (Absoluto): relación de dependencia por su carácter de criatura. Por el hecho de ser criatura es un ser limitado, finito. No se puede aspirar a una plenitud sin limites. B) Relación con otros seres humanos: ser social. La perfección humana no se da de manera aislada, exige la vertiente social.
La igualdad funda la justicia.
C) Relación de superioridad entre las
cosas: las cosas son medios, no fines: la sociedad, la riqueza… Bueno es todo lo que contribuye a realizar la perfección de la naturaleza humana en toda su plenitud, y malo es aquello que la impide..
Escolásticos: “bonum honestum” aquello que
se busca por sí mismo, por su conveniencia con la naturaleza, contraponiéndolo al bien útil y la bien deleitable. FORMULAS SOBRE LA NORMA FUNDAMENTAL DE MORALIDAD
La naturaleza de las cosas consiste, ante
todo, en la forma que da la especie. Por consiguiente, cuanto contraríe el orden de la razón es directamente opuesto a la naturaleza del hombre en cuanto tal. En los seres que obran por voluntad, su regla próxima es la razón humana; la regla suprema, es la ley eterna. Entonces la norma de moralidad es la naturaleza humana en cuanto que es racional. La norma es todo el hombre en cuanto que la razón expresa las exigencias de esa naturaleza.
Algunos se fijan en el fin: El hombre obra por un
último fin que es la felicidad. Todo lo que conduce a ese fin es bueno. Pero la idea de perfección es anterior, el ser que se perfecciona alcanza su fin. Por tanto los actos que conducen la fin son buenos, y son buenos porque perfeccionan el ser. LA PERFECCIÓN DEL HOMBRE Y LA FELICIDAD Escolásticos: un ser es perfecto cuando consigue si fin. Pero le fin no es ni el término del proceso, ni sólo la causa, sino la realización de un proyecto que venía haciéndose. Los griegos la llaman, “entelequia” (el ser ya logrado). La entelequia del hombre es la realización de todas sus posibilidades. En el principio del ser está la “arché”, que sería pura potencia, posibilidad, proyecto.
La entelequia es acto, realización.
Potencia y acto forman parte de los seres
creados. El ser mediante un proceso llega a su plenitud. La forma es el elemento que hace posible y dirige ese proceso. Por eso la perfección consiste en el desarrollo de la forma. La perfección del hombre se identifica con su felicidad (eudaimonía: buena fortuna).
La felicidad del hombre consiste en un
estado que sigue de la posesión de un bien.
El camino de la perfección es el camino de la
felicidad. La entelequia lleva consigo la eudaimonía. La tendencia a la felicidad es algo innato en el ser humano.
En los seres racionales, capaces de
conocer y poseer los objetos, la perfección y la felicidad se identifican.
Esta tendencia a la felicidad en el
hombre no es libre. Es algo necesario que brota de su misma naturaleza racional. La libertad consiste en la elección de los objetos concretos dentro del campo del bien. En todos sus actos, el hombre obra por un fin. A) actos elícitos: producidos por la voluntad y se refieren al bien (fin), que es el objeto de esta facultad. (el acto de la voluntad es amar, el acto elícito del entendimientos es entender) B) actos imperados: producidos por otra potencia, pero bajo el dominio de la voluntad, la voluntad también los dirige a un fin.
En todos los actos deliberados el hombre
obra por un fin último en su vida o por el bien perfecto.
El fin es como el motor de la voluntad, y los
fines intermedios obran en virtud de un fin último. Los bienes parciales se buscan en cuanto participan de la bondad y perfección de un bien total, y son ya un anticipo de él.
El hombre aspira a la plenitud.
Y la plenitud, el fin o la perfección del hombre, es la felicidad.
La felicidad es la posesión consciente del bien
perfecto y pleno, y sacia totalmente el apetito y las tendencias de la naturaleza intelectual EL FIN Y LOS FINES
El fin de la vida humana es la felicidad,
pero cada ser humana busca la felicidad en las cosas que tiene a la mano. ¿En qué ponen los hombres su felicidad? A. Los ideales humanos
Los bienes que el hombre busca para cumplir
su deseo de felicidad son los siguientes:
1. bienes externos: corporales (riqueza);
incorpóreos (honor, fama, poder) 2. bienes interiores: del cuerpo (salud) y del alma ( virtud, la ciencia). El bien que constituya la felicidad del hombre hade ser algo perfecto, que se busque por sí mismo y no para conseguir otro bien; ha de ser suficiente y completo, capaz de llenar todas las aspiraciones humanas debe ser algo estable y seguro. La felicidad no puede consistir en: A) Riquezas B) Tampoco en el honor ni en la fama C) Menos en el poder D) La felicidad es algo distinto del placer E) No está en los bienes del alma (ciencia, virtud, armonía interior) F) Ni en los bienes creados. La felicidad del ser humano coincide con el fin último del universo y consiste esencialmente en la realización de ese fin. LA CONSECUCIÓN DE LA FELICIDAD
FELICIDAD OBJETIVA: se refiere al objeto de
la felicidad. FELICIDAD SUBJETIVA: se refiere a la posesión del objeto En el ser humano se consigue la perfección por el conocimiento y el apetito. El hombre consigue su perfección mediante los actos. Y únicamente la inteligencia y la La voluntad son facultades espirituales, que pueden ponerse en contacto con el Sumo Bien. ¿Cuál es el acto primero por el que se consigue el objeto de la felicidad y del que se siguen todas las cualidades de ese estado? En otras palabras: ¿Cuál es la esencia metafísica o constitutivo último de la felicidad? Según Santo Tomás: ese acto primero es un acto del entendimiento; el acto de la voluntad es una consecuencia que sigue necesariamente a la contemplación. La felicidad no puede ser un acto de la voluntad ya que ese acto no da la posesión del objeto. La felicidad consiste en el acto del entendimiento, puesto que ésta es la facultad más propia y noble del hombre, atendiendo a su objeto, más universal y abstracto que el de cualquier otra facultad. En esta vida no se puede obtener la felicidad perfecta, ya que el conocimiento de Dios es imperfecto y abstractivo. No se conoce a Dios como es en sí, sino como causa de las cosas.