Estudiantes reconocen a los primeros filósofos y su arjé.
Recordemos que…
El origen de la filosofía se describe como el paso «del mito al
logos», es decir, la sustitución de las explicaciones mitológicas por explicaciones racionales para entender los interrogantes que planteaba la naturaleza. Los primeros filósofos occidentales son los denominados filósofos presocráticos. Fueron ellos quienes dieron ese importante paso de sustituir el modelo de explicación mítico por el modelo de explicación racional (aunque en el mito ya está presente el logos y a la inversa) a la hora de encontrar las respuestas a los grandes interrogantes que se plantea la humanidad. Se los ubica cronológicamente en los siglos VII y VI antes de Cristo. La característica principal común a casi todos los filósofos presocráticos es la preocupación por cuestiones cosmológicas referentes al origen y composición del universo. Más concretamente, los presocráticos intentaron encontrar el elemento o sustancia del que proceden y están hechas todas las cosas que componen el universo, y al cual vuelven después de descomponerse. A ese elemento o sustancia lo denominaron arché o physis. Para estos pensadores, detrás de la aparente multiplicidad de la naturaleza, de la cual nos informan los sentidos, debía existir un principio único y, por tanto, buscaban la unidad en la multiplicidad. Algunos conceptos a considerar… Arkhé: Término griego (también transcrito como "arjé" y como "arché") que viene a significar etimológicamente principio, fundamento, comienzo, y que fue utilizado por los primeros filósofos para referirse al elemento primordial del que está compuesta y/o del que deriva toda la realidad material. Physis: Término griego que significa naturaleza. Los primeros filósofos de Mileto tomaron la physis o naturaleza como objeto principal de sus investigaciones a la que concibieron como el principio u origen de la realidad, origen que atribuyeron a distintos elementos materiales, como el agua, el aire o lo indeterminado, a los que consideraron el principio o "arjé" del que procede la realidad que conocemos. Por ese motivo fueron conocidos también como "los físicos", los que estudian la naturaleza. Tales de Mileto Los relatos antiguos le atribuyen múltiples actividades: ingeniero, astrónomo, financiero, político. Por eso es considerado como uno de los siete sabios de la antigüedad griega. Para tales, el arjé era el agua, pues es la que se encuentra en mayor cantidad, rodea la Tierra, impregna la atmósfera en forma de vapor, corre a través de los continentes y la vida no es posible sin ella. La Tierra, para él, era un disco plano cubierto por las semiesfera celeste flotando en un océano infinito. Esta tesis sobre la existencia de un elemento del cual estaban formadas todas las sustancias cobró gran aceptación entre filósofos posteriores, a pesar de que no todos ellos aceptaron que el agua fuera tal elemento. Lo importante de su tesis es la consideración de que todo ser proviene de un principio originario, sea el agua, sea cualquier otro. El hecho de buscarlo de una forma científica es lo que le hace ser considerado como el "padre de la filosofía“. Anaximandro de Mileto El principio o arjé de todas las cosas era el ápeiron (lo indeterminado, lo ilimitado), que concebía que una materia primigenia, eterna, inmutable e ilimitada que generó todas las cosas existentes y a las que todas retornan cuando se desintegran o desaparecen. Lo indefinido, es algo no material; en esto se diferenció de Tales para la cual el origen de todo algo material, es el agua. Anaximandro pensaba que la materia prima que da origen a todas las cosas debía ser algo diferente a las cosas mismas. Este ápeiron es inmortal e indestructible, inengendrado e imperecedero, pero que de él se engendran todas las cosas. Todo sale y todo vuelve al ápeiron según un ciclo necesario. De él se separan las sustancias opuestas entre sí en el mundo y, cuando prevalece la una sobre la otra, se produce una reacción que restablece el equilibrio. Anaxímenes
Se opone a Anaximandro y a Tales en cuanto a la determinación del
primer principio o "arjé" que Anaxímenes considera ser el aire. Probablemente haya tomado esta elección a partir de la experiencia, influyendo la observación de los seres vivos y la importancia del fenómeno de la respiración; en cuanto toma como "arjé" un elemento particular, su pensamiento supone un retroceso con respecto a Anaximandro; pero Anaxímenes nos ofrece un mecanismo de explicación de la generación de las cosas a partir de otro elemento distinto de ellas: ese mecanismo de generación se apoya en las nociones de "condensación“ y "rarefacción". Por condensación del aire, dice Anaxímenes, se forman las nubes; si las nubes se condensan se forma el agua; la condensación del agua da lugar a la constitución del hielo, de la tierra; y la condensación de la tierra da lugar a la constitución de las piedras y los minerales; el proceso inverso lo representa la rarefacción: piedra, tierra, agua, nubes, aire y, por último la rarefacción del aire produciría el fuego Pitágoras Filósofo y matemático griego, cuyas doctrinas influyeron mucho en Platón. La filosofía de Pitágoras entiende la realidad de una forma matemática geométrica. De esta forma, podría decirse que su arjé son los números, tanto en la naturaleza como en lo material. Los cuerpos físicos son una unión de puntos geométricos, la extensión de éstos forma líneas, la prolongación de éstas, superficies, y así sucesivamente. Para Pitágoras construir la realidad racionalmente significa dividirla en unidades, que se puedan medir, operar y abstraer de forma matemática, entendiendo finalmente todo como infinito. La teoría pitagórica introduce la creencia de que la razón es más fiable que los sentidos y es el primer paso hacia la racionalización de la multiplicidad de todo aquello que existe. Además, los pitagírocos fueron los primeros en hablar de la tierra como una esfera observando la sombra que proyectaban los astros en los eclipses. Heráclito de Éfeso
Heráclito (536 – 470 a.C.) Explica el logos como un cambio
constante y porvenir. Propone como arjé el fuego, pero, su concepción de éste es como elemento que provoca el cambio que según él es aquello que rige la naturaleza, y no como sustrato y origen material de todo. Heráclito se basa en los sentidos para explicarnos que nada es inmutable y todo es porvenir. El motor de este cambio, lo encuentra en la lucha entre contrarios, concluyendo que la realidad se muestra como un porvenir dialéctico, es decir, avanza y se transforma, pasando de una cosa a la contraria.