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Agenda
Título de la obra:
– “Mi vida con Dios”
Elenco … Actores principales:
– El acompañado … que trata de acercarse al Señor
– El Señor … que espera permanentemente al
acompañado
Malo invitado
– El Mal Espíritu … que trata de que no se unan
acompañado con el Señor
Público presente
– Familia, amigos del acompañado que contemplan lo que
ocurre en la vida del acompañado … y a veces se meten
¿Y el acompañante …?
Un hijo, … un
caminante
Algunas condiciones
Ejercicios Espirituales de
San Ignacio de Loyola
Acompañamiento y
Discernimiento
Del egoísmo.
– El ME me propone o hace imaginar placeres, goces,
descanso... Son placeres o alegrías aparentes, pero que me
“anclan” en este camino o situación
– El BE Me “punzará” la conciencia, me inquietará, me hará ver
-mediante la razón- lo equivocado de mi actuar; me hará ver la
falsedad de las alegrías aparentes. Me hace ver las
incoherencias en las que vivo
De Jesús
– El ME Interesado en que cambie de camino, me inquieta con
falsas y aparentes razones para que no siga adelante. Me
desanimará e inquietará; me hará ver falsas dificultades o
agrandadas e insuperables. Intentará hacerme creer que soy
“poca cosa”, o incoherente, o débil, o que no lograré nada.
– El BE infundirá en mi ánimo fuerza, consolación, estímulo,
inspiración... facilitando la solución de cualquier dificultad para
que no se me ocurra volver atrás o estancarme en el bien
comenzado.
Definiciones
CONSOLACION.: La consolación no es simplemente
una emoción o alegría sicológica. Aunque incluye todo
eso, lo supera. Es una moción interior, profunda, con la
cual la persona se siente dispuesta a amar y servir,
porque experimenta con profundidad el amor a su
Creador y Señor. Hay una alegría interna y un aumento
de fe, esperanza y amor. Hay una paz y un equilibrio
difíciles de adquirir, porque son un regalo de Dios.
DESOLACIÓN: La desolación será lo contrario. Será la
oscuridad, la tentación, la confusión, la inquietud y la
agitación, la desconfianza... Uno se vuelve perezoso,
triste, tibio y se experimenta como separado y alejado
de su Creador y Señor. Son señales claras que yo
puedo percibir y experimentar.
Lo que me hace amar más …
Detenerse
Mirar, observar
Atender a lo que estas experiencias pueden
significar
– ¿Estoy en consolación? (Lo que me hace amar más)
agradezco a Dios su gracia, su regalo
– ¿Estoy en desolación? (Lo que me hace amar menos)
me pongo en manos del Padre y trato de rechazar los
pensamientos y sentimientos que me provoca esa desolación,
buscando siempre ser fiel a los valores evangélicos y al camino en
el cual creo. Trato también de indagar la causa u origen de esa
desolación
Termino el examen con una breve oración con mis
palabras, dando gracias por lo que he descubierto y
pidiendo la compañía del Señor para adelante
¿Estoy en consolación?
centrado en mí mismo.
Dios no forma parte de mis decisiones o actividades.
la experiencia me empuja a lo sensual y material.
me siento lejos y separado de Dios, y a la vez, con
añoranza de su cercanía.
me siento triste.
me siento sin fuerzas, toda meta me parece
inalcanzable, difícil, pesada.
me siento super feliz, pero hay allí una falta de
delicadeza y serenidad; hay un cierto “fanatismo” por
el cual mis tendencias desordenadas afectan mi
acción. Es una fachada para cubrir que solamente me
busco a mí mismo.
la experiencia me aleja de Dios y de su amor.
no puedo ver las cosas en su justa perspectiva
La toma de decisiones