aplicaba en sus investigaciones la disciplina que aprendió cuando fue competidor de natación, representando al Perú. Fue ganado para la nueva historia económica y elaboró una brillante monografía de bachiller en 1980 titulada ‘La consolidación de la deuda interna peruana, 1850–1858,’ que analizaba el pago por parte del Estado peruano de la deuda interna que se arrastraba desde el periodo colonial bajo el supuesto que serviría para formar una clase empresarial que invirtiese sus capitales en el país. Su interés era examinar si era verdad que durante el boom exportador del guano los gastos estatales habían sido un derroche por parte de las elites como la historiografía sugería. Su conclusión fue que funcionarios estatales corruptos habían impedido que se formara un mercado de capitales. CAPITULO 1: EL FRACASO DE LAS REFORMAS COLONIALES (1750-1820) Desvelando abusos, Plata y contrabando, Los círculos de patronazgo virreinales, Decreciente celo reformista, Ciclos de corrupción colonial. El primero de los ciclos estudiados por Quiroz abarca el periodo colonial tardío, marcado por los malos manejos de los funcionarios reales a favor de sus propios intereses, especialmente los relacionados con la administración de las rentas reales provenientes de la actividad minera. El estudio de Quiroz es implacable con los libertadores y caudillos independentistas. Documenta sus malas prácticas para financiarse y financiar al ejército, y nos informa sobre la manera como se imponen sobre los liberales de la época. CAPITULO 2: CIMIENTOS SOCAVADOS DE LA TEMPRANA REPUBLICA (1821-1859) Saqueo patriota, turbios préstamos externos, círculos de patronazgo caudillesco, el azote del régimen guanero. En este ciclo, se constata que después de la independencia de la república recién fundada, esta heredó las prácticas propias del sistema colonial, caracterizadas por el patrimonialismo, en el cual los militares cumplieron un papel preponderante. Nuestros héroes libertadores se apropian de manera abusiva y prepotente de fortunas a costa de expropiaciones, de recompensas jugosas que se hacen otorgar y de tributos en nombre de la independencia y de su sacrificio. Son los responsables del grave endeudamiento fiscal llevado a situaciones penosas de miseria. La herencia de Gamarra sienta las bases de la República y de los problemas burocráticos y financieros del Estado. CAPITULO 3: EL SINUOSO CAMINO DEL DESASTRE (1860-1883) Negocios guaneros monopólicos, El infame Contrato Dreyfus, Avalancha de obras públicas, Pérdidas exacerbadas. Un nuevo ciclo de corrupción sería iniciado por la explosión del auge guanero, que se materializaba en una engañosa prosperidad urbana, en donde los costos de la corrupción llegaron a 108 millones de soles en 1870, como producto del manejo malintencionado de la deuda pública, los contratos de obras y de la concesión guanera. Apenas unos cuantos años antes de la guerra con Chile, «se desató un frenesí en la contratación de obras públicas para la construcción de ferrocarriles, edificios públicos y mejoras urbanas sin un cálculo sólido de su rentabilidad y factibilidad». CAPITULO 4: LA MODERNIZACION Y SUS SECUACES Se alquilan militares, el legado del Califa Leguía y los civilistas, Escándalos del Oncenio de Leguía, Sanciones ineptas. Entre 1884 y 1930 se presentaría un nuevo ciclo de corrupción, iniciado con la recuperación de la posguerra del Pacífico, marcada por la implementación de medidas para el freno de la corrupción, las cuales serían totalmente abandonadas y malogradas por las prácticas corruptas fortalecidas durante el oncenio de Augusto B. Leguía. CAPITULO 5: DICTADORES VANALES Y PACTOS SECRETOS (1931-1962) Un coronel populista frente al APRA, Restauración con Benavides, Política de guerra sin principios, Transición en la cuerda floja, La recompensa del general Odría, perdonar y olvidar. La reconstrucción del orden institucional, después del oncenio de Leguía, llevaría a constantes choques políticos que sirvieron de cortina de distracción para los tratos ilegales en las compras de armas y en el manejo de la deuda externa. CAPITULO 6: ASALTOS A LA DEMOCRACIA Las promesas rotas de Belaunde, el escándalo del contrabando, revolución militar, negligencia benigna, Los medios de Alan García. Entre 1963 y 1989 la corrupción de nuevo reinó. Un ejemplo de ellos se encuentra en los militares y su clásico modelo de gobierno, a través de decretos ejecutivos en donde la ineficiencia y la corrupción llevaron a constantes déficits, de nuevo financiados con sospechosos contratos de deuda externa, costumbres que no fueron ajenas al gobierno populista de Alan García, que dejaría al país sumido en una fuerte crisis económica. CAPITULO 7: CONSPIRACIONES CORRUPTAS (1990-2000) Remozando la corrupción, Dictadura cívico – militar, Redes de corrupción, participación del Sector Privado, Corruptelas militares, colusión con el narcotráfico, caída cinemática. El último ciclo analizado por Quiroz no podía ser otro que el registrado entre 1990 y 2000, comandado por el binomio Fujimori-Montesinos, quienes, a través de la cooptación de todas las ramas del poder público, tras el autogolpe de 1992, gozaron de plenas libertades para hacerse con los fondos públicos en beneficio propio. Esta es una breve lista que sintetiza las coincidencias en el ejercicio del poder de varios presidentes de la república en la historia del país en los últimos dos siglos según Quiroz:
-Alianzas políticas en el Congreso para perpetuarse en el
poder. -Acopamiento de instituciones públicas. -Manipulación de las reglas electorales. -Espionaje y represión. -Psicosociales y concientización por un «gobierno fuerte». -Políticas de amnistías -Malversación de fondos de defensa y otros ministerios -Fiscalización nula de las administraciones anteriores. -Favores de empresas extranjeras que financian campañas políticas. -Licitaciones fraudulentas. -Relaciones con narcotraficantes y contrabandistas de armas CONCLUSIONES No se puede construir un verdadero Estado de derecho sin un sistema normativo congruente con las necesidades del Estado, sin instituciones que velen por el cumplimiento de la ley, sin un sistema de control que opere de manera eficaz, sin una élite dirigente que mire por encima de sus propios intereses y sin partidos políticos que representen los intereses de la población. En el Perú de hoy hay cambios importantes, pero hay también continuidades dramáticas. La corrupción es parte del funcionamiento político nacional. Lo que se fue construyendo en la historia se nota en el presente. En lugar de irse construyendo un Estado republicano con leyes y marcos normativos adecuados, con funcionarios que hacen cumplir la ley y con ciudadanos que van aprendiendo a sentirse parte de una sociedad incluyente que los considera; se va perfilando y consolidando un Estado sin derecho, en el que las leyes están dadas para no ser cumplidas, y donde las formas patrimoniales del poder se van remodelando y recreando en cada periodo de la historia. La corrupción atenta persistentemente contra el desarrollo nacional y se pierden importantes oportunidades para lograrlo.