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Respecto al personaje unitario Moreira:

“Los gauchos le habían puesto ese sobrenombre. Moreira, hombre severo hasta el exceso, y aún brutal, era una de esas
naturalezas como felizmente hay pocas: naturalezas que son pura sombra. […] no veía en su oficio más que un arma
de destrucción o un elemento de poder absoluto en tiempo de paz. […] no sabiendo leer ni escribir, el Duro, hace
constantemente ostentación de sus defectos […] pretendiendo que para un brazo habituado a la lanza, la pluma es
demasiado liviana. […] el Duro abriga en su corazón un odio infernal contra todos los que tenían intimidades con el
partido federal.” (Mansilla, 2007: 287)

Respecto al personaje gaucho malo:

“-Es necesario que el hombre aprienda a mirar en torno suyo y a comprender. Dios nos habla siempre hijo mío, todo
consiste en escuchar. […]La soledad, sobre todo, hijo mío, es la gran escuela. Dios no habla nunca sino con el hombre
solo. Desde que el hombre se mezcla con los demás, ya no se oye más voz que la de su deseo y la de su voluntad y,
entonces, es frecuentemente muy desgraciado.” (2007: 252-253)

Respecto al pasaje en que el personaje principal es interceptado por la autoridad:

“Con acento nervioso, registra agitadamente los bolsillos de su tirador. No es un arma de muerte lo que busca, su
cuchillo permanece tranquilamente en la vaina […] no tiene la intención de hacer resistencia, y por otra parte, sería
inútil teniendo que habérselas con seis hombres. Además, para un gaucho, la autoridad es cosa que él no entiende,
pero ante la cual cede siempre momentáneamente. […] y, sin embargo, por más que digan, el gaucho nada tiene de
feroz en su naturaleza: no es más que indolente y salvaje. […]” (2007: 103)

Respecto a la ideología de Pablo:

“-Me hablan de la Patria, añadió con amargura. ¿Qué tengo yo que hacer con su patria y su libertad?... yo también
amo la libertad… mi libertad… ¿por qué me privan de ella?... ¿por qué me arrancan de los pagos de mi madre, de los
que amo? […] ya no creo en sus falsas promesas. Unitarios y federales, todos son iguales. Yo los aborrezco a todos,
como ellos nos aborrecen a nosotros, pobre gauchos.” (2007: 165)

Respecto a la desventaja social que priva de recursos y derechos la vida de las mujeres. Extraído del cuento Sombras:

“El frac le sienta a las mil maravillas y su enamorada […] exclama: No vayas, mi cielito, por favor, no vayas! ¡Ay! El
esposito, que no le permite acercarse a arrugarle la camisa, responde riendo: Andá, tonta, que pareces tener cinco
años; […] Presuroso corre el esposito tras el rápido tramway, y con un: ¡Pobre Malvina! Pronunciando mentalmente,
tranquiliza su conciencia y endereza el lazo de su corbata. […] Oye Juana un quejido y despierta solícita. Llégase al
lecho. La respiración anhelosa de su señora alarma a la buena muchacha, que exclama en voz baja: y el otro en el
baile… ¡Ay, Juana, no te cases! […].” (Mansilla de García, 2015: 250-252)

En torno a la contraposición Julián-Malvina. Extraído del cuento Sombras:

“No sabes, queridita mía! dice Julián […] cuánto deploro no poder llevarte al Museo; […]” Y más adelante: “¡Ah,
Julián! Hay una carta para ti, lo había olvidado. Julián rompe el sobre y resulta ser una invitación para el baile de la
Beneficiencia. […] ¿Qué haré para matar el tiempo? piensa con cierto mal humor Malvina. Si no fuera día de fiesta,
bordaría aunque fuera de noche; pero, mientras otros se divierten, también fuera sonsera… ‘Otros’ es Julián y todo
Colón; no cabe duda.” (Mansilla de García, 2015: 237-240-242)
Respecto a la reivindicación del rol de la mujer. Extraído del cuento Kate:

“[…] Sólo al acercarse el momento de contraer el matrimonio, se estrelló el Metodista contra la decisión reservada,
pero firme, que la risueña Irlandesa expresó en estos términos: ‘No hago ya poco en casarme con un hombre que está
en pecado; no exijas que me condene.’ Tales fueron las expresivas razones con que acogió Kate la proposición de su
novio de hacerse Metodista como él.” (Mansilla de García, 2015: 211)

Respecto a la transgresión y vindicación de la imagen y rol de la mujer. Extraído del cuento Kate:

“[…] Kate arrojó un grito de espanto, y creyendo herido a su hijo, se abalanzó en su defensa, con un movimiento de
pantera. La madre había visto sangre y creía que aquella sangre era de Dicky. ¡Bárbaro! exclamó con voz ahogada,
¡No lo mates!.” (Mansilla de García, 2015: 224)

Análisis de Dos cuerpos para un alma (1883)

 Desde los nombres:

Masculino Ladislaff Zoutzo (nombre ruso que designa poder, de alta alcurnia)

Femeninos Baronesa d’Herville (título nobiliario europeo con que el monarca muestra
gratitud a la esposa de algún Barón)

Iltsa Petrowna (apellido perteneciente al Imperio ruso)

 Desde dos motivos:

*Seducción (por parte de la Baronesa)

*Adulterio (por parte de Ladislaff)

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