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ISSN 2177-2940

(Online)

ISSN 1415-9945
(Impresso)
http://dx.doi.org/10.4025.dialogos.v23i1

Exportando bosques, importando insustentabilidad. Comercio forestal y


transformaciones socio-ambientales en Centroamérica: una
aproximación desde la historia global, siglos XVIII al XX
http://dx.doi.org/10.4025.dialogos.v23i1.46149

Anthony Goebel-Mc Dermott


Universidad de Costa Rica, UCR, Costa Rica. E-mail: historikambiental@hotmail.com
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Exportando florestas, importando insustentabilidade. Comércio florestal e transformações


socioambientais na América Central: uma abordagem da história global dos séculos XVIII a XX
Palavras-chave:
Resumo: A pesquisa cujos resultados são aqui apresentados buscou analisar, em sua complexidade, as
Extração de madeira,
lógicas gerais de inserção direta dos ecossistemas florestais na economia mundial em primeiro lugar e no
Comércio de madeira,
mercado mundial articuladas posteriormente, com especial ênfase na comercialização de produtos
Ecologia, História
florestais centro-americanos na mercado global de recursos e analisar algumas das consequências
ambiental, América
ecológicas e socioambientais desse processo. No trabalho, a exploração florestal foi conceituada como
Central.
uma atividade dotada de sua própria dinâmica e não como um simples pré-requisito para a reorganização
do ambiente biofísico natural com o objetivo final de introduzir atividades de maior valor agregado.

Exporting forests, importing unsustainability. Forest trade and socio-environmental transformations


in Central America: an approach from Global History, 18th to 20th Century
Abstract: This article looks to address the treatment of historical memory through subjectivity,
Key words: Logging, concentrating on the example of the Nicaraguan director Mercedes Moncada. The specific case of
Wood trade, Ecology, Moncada is particularly interesting as she is one of the first young Central American filmmakers to
Environmental history, confront questions of war on the big screen – a result of the recent civil war in the 1980s – from a critical
Central America. and intimist perspective through the cinematographic category denominated by Guy Gautheir as the “film
essay” (2011). For this, we will center our analysis on the documentary Palabras Mágicas (2012) with
the objective of demonstrating the revelatory role that subjectivity can occupy in the film’s story and its
telling relevance in today’s context. At the same time, we will try to decipher how History, diegesis and
esthetics interweave in the process of reconstructing the historical narrative.

Exportando bosques, importando insustentabilidad. Comercio forestal y transformaciones socio-


ambientales en Centroamérica: una aproximación desde la historia global, siglos XVIII al XX
Palabras clave: Resumen: La investigación cuyos resultados aquí se presentan, buscó analizar, en su complejidad, las
Explotación forestal, lógicas generales de inserción directa de los ecosistemas forestales en la economía-mundo primero y en el
Comercio de madera, mercado mundial articulado después, haciendo especial énfasis en la comercialización de productos
Ecología, Historia forestales centroamericanos en el mercado global de recursos y analizando algunas de las consecuencias
ambiental, ecológicas y socio-ambientales de este proceso. En el trabajo se conceptualizó a la explotación forestal
Centroamérica. como una actividad dotada de una dinámica propia y no como un simple pre-requisito para la
reorganización del medio biofísico natural con el fin último de introducir actividades de mayor valor
añadido.

Artigo recebido em: 08/01/2019. Aprovado em: 28/01/2019.


A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 6

Introducción: hacia una historia ambiental- mucho el espacio de un artículo académico


global de los bosques centroamericanos
como el que aquí se presenta, sino que
también, desde nuestra perspectiva, implica
No cabe duda que los bosques han sido
lidiar con el siempre problemático balance
fundamentales en la historia de la humanidad,
entre la síntesis general –y el consecuente
dado que desde sus inicios, los bosques y sus
incremento de la escala de observación- y la
producciones (especialmente la madera y la
mínima profundidad analítica deseable en todo
leña) brindaron la energía, el abrigo y la
trabajo historiográfico. Lo anterior aunado a la
materia prima para la construcción de
complejidad inherente a la historia ambiental
herramientas, armas y utensilios con las que el
como campo de estudios o disciplina
evolucionado Homo Sapiens se colocaría en la
historiográfica, de dar cuenta de la mutua
cúspide de la jerarquía de los seres vivos,
determinación entre los sistemas sociales y los
pasando a ser, finalmente, el mayor
sistemas naturales.
transformador de todos los ecosistemas del
A partir de estos límites, los objetivos
planeta. Está claro, asimismo, que el ritmo e
trazados para el desarrollo del presente trabajo,
intensidad con que los bosques han sido
son notoriamente más modestos, y no por ello
explotados a lo largo de la historia, ha sido
menos retadores.
notoriamente disímil en las distintas regiones
De manera concreta, la investigación
del globo, dado que dicha explotación
cuyos resultados aquí se presentan, buscó
dependía, tanto de factores objetivos (las
analizar, en su complejidad, las lógicas
necesidades materiales, la acumulación
generales de inserción directa de los
mercantilista, el mercado y la cantidad de
ecosistemas forestales en la economía-mundo
población entre otros) como de elementos
primero y en el mercado mundial articulado
relacionados con las actitudes, valores y
después, haciendo especial énfasis en la
finalmente las representaciones que los
comercialización de productos forestales
distintos grupos humanos otorgaron en
centroamericanos en el mercado global de
diferentes contextos espacio-temporales a los
recursos y analizando algunas de las
ecosistemas forestales.
consecuencias ecológicas de esta vía de
A partir del reconocimiento de la
inserción directa de los bosques
complejidad intrínseca de todo proceso
centroamericanos en las redes internacionales
histórico, consideramos que un análisis de la
de comercio maderero. En otras palabras, se
evolución histórica de las múltiples
analizarán las formas en que los agentes
dimensiones y espacios de interacción entre
deforestadores reorganizaban la oferta
los ecosistemas forestales centroamericanos y
maderera de acuerdo con los requerimientos de
las sociedades humanas tanto a nivel regional
la corona -o las potencias mercantilistas-
como global, no solamente rebasaría por
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primero, y el mercado capitalista en pleno elementos relacionales específicos entre la


después, y las consecuencias que los cambios demanda global de productos forestales y las
en la lógica y dinámica de la comercialización respuestas de los agentes explotadores y
de maderas y otros productos forestales exportadores de los bosques centroamericanos,
tuvieron en los bosques centroamericanos. procurando evitar, eso sí, toda simplificación
Ahora, bien, en virtud de lo recién reduccionista y determinista.
expuesto, no resulta difícil inferir, a priori, que Se partirá de la premisa de que la
factores como los cambios en los patrones de exportación, el transporte y la comercialización
consumo en los principales importadores de de maderas y otros productos forestales, tuvo
maderas centroamericanas, incidieron en las un carácter transnacional, debido a que los
propias lógicas de explotación y agentes/actores económicos trascendieron los
comercialización internacional de las maderas límites del Estado nacional, así como trans-
de la región, por lo que la huella forestal de nacionalista (MC GERR, 1991, p. 1056-1067),
los distintos países y regiones importadoras en el sentido de que los flujos económicos
debió ser diferenciada. Lo anterior por cuanto, generados y las transformaciones socio-
como sabemos, el consumo no está ambientales a ellos asociadas, traspasaron los
relacionado únicamente con el precio y las límites de los estados nacionales, porque los
condiciones de mercado, sino que es, también, mercados para la exportación estaban ubicados
un constructo cultural e histórico con cierto en otros estados y regiones. Esto nos conduce
grado de autonomía. (ORLOVE y BAUER, hacia una visión de la economía que plantea la
1997, 1-29) Así, las necesidades materiales y necesaria vinculación del estudio de la
simbólicas de productos forestales, no eran economía nacional en el contexto de la
idénticas entre todos los países importadores economía global, para construir una historia
de maderas centroamericanas, y esto debió económica global1, pero centrada en el análisis
verse reflejado en la presión diferenciada que del posicionamiento de Centroamérica en ese
cada uno de ellos ejercía sobre las distintas contexto más amplio.
especies exportables. El análisis de estas Vale recordar que la madera ha sido una
especificidades de los patrones de consumo materia prima indispensable a lo largo de la
madereros, nos permitirá, de esta manera, mayor parte de la historia de la humanidad, al
acercarnos a dimensionar la forma en que ser la materia prima y la fuente energética para
determinados países, condicionaron la elaboración de bienes diversos.
históricamente la intensidad con las que los 1
Si bien Robert Allen (2011) hace una clara división del
bosques centroamericanos fueron explotados y trabajo entre los economistas, quienes buscan las causas
del desarrollo a partir de teorías atemporales, y los
sus productos insertados al mercado mundial. historiadores económicos, quienes ubican las causas en
un proceso dinámico de cambio histórico, nosotros
En suma, se buscará establecer defendemos la idea de que los historiadores económicos
se ubican en la confluencia de ambas perspectivas.
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(WILLIAMS, 2007, p. 104) Al tiempo, la centrado nuestra atención en la inserción


eliminación del bosque ha traído consigo una directa o primaria de los bosques
drástica transformación en la cobertura vegetal centroamericanos en un mercado global en
alrededor del globo, al ser el medio proceso de consolidación. Esto lo hacemos con
“necesario” para acceder al reordenamiento fines analíticos, pues la frontera que separa
del medio biofísico con fines productivos, ambas formas de inserción de la naturaleza en
algo considerado en las diversas sociedades general y los bosques en particular en las redes
humanas que se desarrollaron tras el mundiales de comercio de recursos, materias
surgimiento de la agricultura, como algo primas o bienes finales, es relativamente
indispensable, ya fuese para su borrosa. Sin embargo, planteamos aquí, que la
aprovisionamiento material, el ensanche de las inserción indirecta ha recibido mucha mayor
rentas señoriales, o cumplir las demandas del atención por parte de la historiografía
mercado, según el período histórico de que ambiental centroamericana y/o
2
estemos hablando y la formación centroamericanista, mientras que la
sociohistórica correspondiente. explotación comercial de las maderas y otros
De manera específica, la inserción de productos forestales con miras a su
los bosques centroamericanos en la economía- comercialización internacional y sus
mundo primero y en el mercado mundial consecuencias ecológicas y ambientales ha sido
articulado después, tuvo lugar desde nuestra escasamente analizada o ha recibido, en el
perspectiva, a partir de una doble lógica: por mejor de los casos, un abordaje tangencial.
un lado la inserción directa de los productos Este trabajo no pretende llenar el vació
forestales centroamericanos, especialmente la mencionado, sino brindar una primera
madera, a través de la comercialización del aproximación al tema; una invitación, si se
propio recurso destinado a la elaboración de quiere, al desarrollo de trabajos análogos en un
los más diversos bienes, y, por otro, la futuro con mayor grado de especificidad y/o
inserción indirecta de los ecosistemas profundidad.
forestales de la región mediante la eliminación Partimos de la conceptualización, en
del bosque como prerrequisito para el suma, de la explotación forestal como una
reordenamiento del medio biofísico natural
2
con fines productivos, especialmente Para algunos trabajos notables sobre las
transformaciones ambientales generadas por la
orientado al desarrollo de cultivos comerciales expansión de los cultivos de exportación en
Centroamérica en múltiples dimensiones, ver: (ROJAS,
de alta demanda principalmente en los países 2000; SOLURI, 2005 y 2001; MONTERO, 2014;
capitalistas avanzados. (MADDISON, 1991, VIALES y MONTERO, 2011; GALLINI, 2005 y 2008;
TUCKER, 2000; GRANADOS, 2004; BLANCO, 2016 ª
p. 11-12) y 2016 b ; CLARE, 2011; INFANTE-AMATE y
PICADO, 2016; LÓPEZ y PICADO, 2016)
En la presente investigación hemos
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actividad dotada de una dinámica propia y no los europeos. (PÉREZ BRIGNOLI, 2017, p. 5-
como un simple pre-requisito para la 13) Las altiplanicies, por lo tanto, se
reorganización del medio biofísico natural con constituyeron desde muy temprano en el
miras a introducir actividades de mayor valor asiento de la civilización y los centros
añadido. Para ello se analizará la exportación económicos de lo que hoy es Centroamérica.
de madera y otros productos forestales, desde (PÉREZ BRIGNOLI, 2017, p. 14-16)
Centroamérica, sus lógicas y dinámicas La consolidación -tardía, incompleta y
históricas y su relación con los patrones de diferenciada- de la visión moderna del mundo
consumo de los principales países y regiones tras el arribo de los europeos acentuada tras el
importadoras de bosque centroamericano, advenimiento de las oligarquías liberales en el
como vía inicial para dar cuenta de las último tercio del siglo XIX, transformó la
interconexiones globales del comercio visión de Centroamérica como puente cultural
mundial de recursos y sus consecuencias y biológico en una concepción que de forma
socio-ambientales. reduccionista y determinista buscó aprovechar
su condición ístmica mediante la comunicación
El espacio centroamericano: ambiente, interoceánica, relacionada con la articulación
economía y sociedad del mercado mundial. Así, Centroamérica se
vislumbró desde muchos futuros pasados como
Como bien lo ha analizado Héctor el lugar de paso por excelencia para la
Pérez Brignoli (2017), Centroamérica es, a no circulación de personas, mercancías y
dudarlo, una tierra de contrastes, caracterizada capitales. Desde esta visión construida en parte
por una notable diversidad ambiental y desde la ciencia moderna europea (PRATT,
cultural. (p. 3) Asimismo, es destacable el 1992) y su impronta positivista y progresista, la
hecho de que en este espacio geográfico las consideración de Centroamérica como
sociedades humanas se asentaron desde “puente” biológico y cultural se convertiría en
tiempos prehispánicos en el eje territorial un obstáculo, pues a esta diversidad natural,
Centro-Pacífico. Lo anterior se afianzó aún geomorfológica y humana no era posible
más con la representación -europea y asignarle un valor de mercado.
europeizante- de las zonas costeras como De esta manera, tal y como lo ha
inadecuadas para el desarrollo de la vida señalado Guillermo Castro (1996) para
humana y por lo tanto construidas Latinoamérica en su conjunto, en el proceso de
simbólicamente como “malsanas” (MUSSET, conquista y colonización europea, que no tuvo
1999), aunque, si se quiere de manera parangón en lo que respecta a las
paradójica, se consideraron simultáneamente transformaciones ambientales de la región y
estratégicas, especialmente desde el arribo de aún más, del continente, se generaron las
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premisas de la “economía de rapiña”, como


una forma depredatoria de relación con la
naturaleza orientada a transformarla en un
conjunto de recursos exportables, obviando las
complejas formas de trabajo con la naturaleza
construidas afanosamente antes de la llegada
de los europeos. (CASTRO, 1996, p. 113-114)
A partir de esta dinámica, Europa fue Fuente: DESCONOCIDO, Meyers
Konversationslexikon, 4th edition, vol. 16. En la web:
abastecida de muchos productos necesarios y http://commons.wikimedia.org/wiki/Image:Kanal_MK1
888.png
propios de la lógica económica esencialmente
extractiva del antiguo régimen, entre los que De esta manera, América Latina y sus
Castro destaca al oro, la plata, materias recursos naturales bióticos y abióticos fueron
primas, proteínas, alimentos, madera, incorporados de manera abrupta a la economía-
materiales para el procesamiento de los mundo europea, por la vía de las necesidades y
textiles y una fuerza de trabajo “más tratable”. demandas de la monarquía española y más
(CASTRO, 1996, p. 116) Lo anterior trajo adelante por medio de la inserción definitiva de
consigo la desarticulación y reorganización de la región al mercado mundial. (CASTRO,
las ecorregiones, provocando importantes 1996, p. 50-51)
desequilibrios ecológicos dada la pérdida de Y es que es a partir del último tercio del
biodiversidad y la consecuente vulnerabilidad siglo XIX cuando se consolida una dualidad
de los ecosistemas. Ya no se trataba de imitar que marcaría hasta el presente a la historia
a la naturaleza, sino de transformarla en algo ambiental de la región: América Latina se
radicalmente distinto, en un instrumento de constituye, por un lado, en la más “moderna”
producción. Las relaciones de los americanos - de las Nuevas Europas (CROSBY, 1999), al
y especialmente los latinoamericanos-, con el ser la economía de rapiña el factor que define
medio natural, comenzaron a determinarse las relaciones sociedad-naturaleza, y por otro,
“desde afuera”. (CASTRO, 1996, p. 164-165) en la región del planeta donde los conflictos
generados a partir de la oposición de diversos
Imagen 1- Trazado de las posibles rutas
interoceánicas en Nicaragua y Panamá de sectores sociales y grupos étnicos y
culturales a las exigencias de una economía, un
modelo social y una relación con la naturaleza,
que en buena medida les eran ajenos, van a ser
una constante hasta nuestros días.
A partir de estos rasgos centrales de las
transformaciones socio-ecológicas derivadas de
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la reorganización del mundo natural los bosques, particularmente la madera, cuyos


Latinoamericano que trajeron consigo los múltiples y crecientes usos la convirtieron en
procesos de conquista y colonización un bien estratégico que hasta hace poco gozaba
europeos, atizados más tarde por la impronta del lugar preponderante que hoy en día ocupa
de la modernización capitalista en la región, el petróleo WILLIAMS, 2007, p. 103) como
diremos que los ecosistemas forestales pilar energético del sistema capitalista.
centroamericanos, fueron parte integral de (ALVATER, 2005) Al mismo tiempo, y en
dicho proceso, al que dedicamos el presente sentido inverso, como lo señala con claridad
estudio. Michael Williams, valiéndose de la
Antes, empero, vale la pena acercarse a conceptualización de Wallerstein, en este
las principales interpretaciones que se han proceso que nosotros hemos dado en llamar
generado sobre el tema desde la historia “inserción definitiva” de la naturaleza en el
ambiental así como las premisas analíticas que mercado, conforme las fronteras de los bienes
guiarán el presente estudio. y sus transformaciones ambientales cambiaban,
de igual forma sucedía con las “zonas”, por lo
Las premisas interpretativas: los bosques y El que en el proceso, las áreas externas de un país
mercado mundial eventualmente se convertían en las periferias
de otro e inclusive algunos “centros” se
En el contexto general europeo, la convirtieron en semi-periferias o éstas en áreas
consolidación un mercado mundial articulado, periféricas, en un proceso visiblemente
se constituyó, sin duda, en uno de los pilares dinámico y cambiante. (WILLIAMS, 2007, p.
de un proceso más amplio de transición, de 106)
sociedades, economías y relaciones con el Este proceso de inserción global de los
mundo natural que podríamos denominar de bosques en el mercado mundial tuvo lugar a
Antiguo Régimen, -mercantilistas en términos partir de una concepción de la naturaleza que
económicos y esencialmente extractivas en privilegia el valor de cambio por encima del
términos ecológicos- a sociedades modernas valor de uso, y donde al tiempo tienen lugar
capitalistas guiadas por la circulación de formas de inserción activa, -central- o pasiva –
capital, trabajo y recursos en un mercado marginal- dentro del mercado, ya fuese
mundial articulado. Bajo la égida de este doméstico o internacional, formas que
proceso, que irradió sobre las colonias y áreas determinaban, en gran medida, el sitial
de influencia europeas, se intensificó de forma dominante que distintas economías y
sustantiva la presión global sobre ecosistemas sociedades ocupaban en el seno de relaciones
forestales. Esto a partir de la demanda de mayor amplitud –nacionales o globales-
creciente de bienes extraídos directamente de entre las sociedades humanas y el mundo
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natural, ya fuese como suministradores de frontera comercial hacia nuevas y distantes


capital natural o consumidores del mismo, o, regiones (Ver Imagen 2). (WILLIAMS, 2007,
lo que es lo mismo, como acreedores o p. 116)
deudores ecológicos respectivamente.
(MARTÍNEZ ALIER, 2004, p. 26-27 y 1998) Imagen 2- African mahogany logs in West Africa.
Fecha: 1920.
En el caso específico de la madera,
como producto forestal por excelencia, cabe
destacar que esta se constituía en la materia
prima de gran cantidad de actividades
económicas tales como la construcción de
barcos, la elaboración de artesanías y la
fabricación de todo tipo de bienes, y
especialmente como fuente energética del
desarrollo industrial de los centros capitalistas, Fuente: The Encyclopedia Americana, v. 27, 1920,
estaba dotada de un carácter eminentemente facing p. 91, lower of two photographs (labeled "2" in
lower right corner) Autor: Fotógrafo desconocido. URL
estratégico. de la página:
http://commons.wikimedia.org/wiki/File%3AAmericana
Su abastecimiento, empero, presentaba _1920_Tropical_Forest_Products_-
_African_mahogany_logs.jpg URL del archivo:
una notoria paradoja. Esta se basa en que, al http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/d/da/A
mericana_1920_Tropical_Forest_Products_-
ser la madera una mercancía voluminosa de
_African_mahogany_logs.jpg
bajo costo, no se insertaría en redes de
comercialización de larga distancia dada su Cabe destacar que esta ingente presión
escasa rentabilidad. Empero, su carácter que el mercado mundial en construcción
eminentemente estratégico en la reproducción ejerció sobre los ecosistemas forestales a partir
misma del sistema económico –mercantilista de la comercialización de los subproductos del
primero y capitalista después- dados sus bosque, no estuvo exenta de avances y
múltiples y crecientes usos, provocó que la retrocesos, al tiempo que, las transformaciones
empresa maderera se desarrollara ambientales generadas por diversas sociedades
trasgrediendo las reglas del mercado, al humanas antes de la expansión europea, y
consolidarse una serie de redes de especialmente las relacionadas con los bosques
comercialización de madera de larga distancia no pueden ser obviadas.
aún con la baja rentabilidad del producto. Esta El caso latinoamericano es
característica de la madera, como bien particularmente revelador en el sentido recién
indispensable, pero de bajo costo, impulsó, expuesto. Para autores como Shawn William
asimismo, una transformación dramática en la Miller (2007), por ejemplo, la naturaleza sin
cobertura vegetal de vastas áreas y expandió la transformar no es capaz por sí misma de
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mantener grandes contingentes humanos, por conforme crecía la población americana y


lo que las sociedades autóctonas americanas actividades ecológicamente más depredatorias
transformaron a profundidad los ecosistemas se desarrollaban sin control amparadas en la
en que se desenvolvían. (MILLER, 2007, p. imagen de abundancia e inagotabilidad de los
16-26) Para este autor, de hecho, no había en recursos americanos, construida, entonces, en
América al arribo de los europeos los siglos XVIII y XIX y no desde la conquista.
virtualmente ningún ecosistema que no tuviera Por otra parte, no cabe la menor duda
las huellas de la cultura, por lo que la gran de que la inserción de los bosques en el
“selva tropical” imaginada por los europeos mercado mundial, distó mucho de limitarse al
especialmente en los siglos XVIII y XIX era libre juego de la oferta y la demanda de
en buena medida un “artefacto humano”. productos forestales. No se pueden obviar en
(MILLER, 2007, p. 18) El “Nuevo Mundo”, este sentido las especificidades contextuales de
que encontraron los europeos al arribar a factores diversos que en cada país y región
tierras americanas era, según este autor, en tendieron a limitar o a promover, en distintos
realidad uno “Viejo”, profundamente momentos históricos, la inserción mercantil de
transformado por el alto contingente de seres los bosques bajo su dominio. De esta manera, y
humanos que en el residía. (MILLER, 2007, p. sólo para mencionar algunos elementos de
8-48) incidencia innegable en la definición de las
Desde esta perspectiva, entonces, el características y el ritmo —desde luego
colapso demográfico trajo consigo una cambiantes— de la explotación económica de
recuperación de los ecosistemas originarios, un recurso natural, en este caso los bosques,
que se encontraban en un frágil equilibrio tenemos los patrones de consumo internos y
ecológico tras las profundas transformaciones externos, la presión económica sobre los
que sobre ellos hicieron las sociedades recursos, la dinámica empresarial generada en
autóctonas, por lo que a partir de su drástica torno a la comercialización de bienes
reducción, los suelos, los bosques, las fuentes “naturales”, la creación de instituciones que
de agua y la vida silvestre se regeneraron, al restringen o promueven la transformación de la
punto que la cobertura forestal de América era cobertura boscosa según los criterios más
mayor en 1800 que en 1500. (MILLER, 2007, variados, y la acción individual o colectiva
p. 56-57) tendiente a defender y/o “construir” una serie
Así, los bosques, regenerados relaciones sociedad-naturaleza no
masivamente tras la drástica pérdida de necesariamente basadas en las valoraciones
población que supuso el arribo de los crematísticas (MARTÍNEZ ALIER, 2004, p.
europeos, fueron, una vez más –y no por vez 44-45) -centradas en el valor de cambio por
primera- depredados sistemáticamente encima del valor de uso- del mundo natural
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preconizadas por la cultura dominante de la de los bosques de las zonas templadas


naturaleza, donde esta carecía de valor antes alrededor del globo. Entre los principales
de su inserción mercantil, como ya se factores que explican este proceso, tenemos la
mencionó. población creciente, la mecanización de la
No parece caber duda, a partir de lo explotación forestal, tanto en la extracción y el
recién expuesto, que uno de los factores que transporte como en el procesamiento (máquina
mayor presión ejercieron sobre los de vapor), y la consolidación de verdaderos
ecosistemas forestales en Centroamérica, si se “Imperios de colonización”, que como fue el
toma en cuenta la inserción directa de los caso de América del Norte, Nueva Zelanda y
bosques en el mercado mundial de recursos, lo Australia, destruyeron vastas áreas boscosas
constituyó el incremento sostenido de la reorganizándolas como tierras de labranza.
demanda de productos forestales en diversos (WILLIAMS, 2006, p. 263)
países y regiones, que tuvo lugar a partir, no Incluso, antiguas tierras avocadas a la
solamente de un claro proceso de masificación agricultura en Europa y particularmente en
de las maderas y otros productos forestales, Rusia observaron procesos de deforestación sin
sino también por la propia deforestación precedentes, impulsados por el avance de la
llevada adelante especialmente por los países modernización capitalista de la agricultura.
y regiones industrializadas del planeta, que, Otros países y regiones no
tras dilapidar su capital natural, se vieron industrializados también experimentaban
obligados a importar diversas materias primas ingentes procesos de deforestación como es el
y bienes finales extraídos de los bosques que cado de China donde se gestaba una creciente
ya no podían suplir sus propios ecosistemas presión demográfica sobre los ecosistemas
forestales. Hagamos un repaso de algunos forestales ante la expansión de la población
casos señeros, en lo que respecta a los agraria. (WILLIAMS, 2006, p. 263)
procesos de deforestación y algunas de sus Vale recordar en este sentido, que
consecuencias ambientales, socio-económicas actividades económicas y procesos pre-
y hasta políticas. industriales e industriales como el refinamiento
y conversión de arcilla, la fundición de metales
El contexto global: explotación, y otros materiales y la producción de cerveza,
comercialización y consumo de recursos azúcar y pan, solo para citar algunos ejemplos,
forestales eran altamente intensivas en el uso de leña, por
lo que su expansión y generalización
Hacia finales del siglo XVIII y a lo implicaban una presión creciente sobre los
largo del siglo XIX tuvo lugar, según Michael bosques, así como una progresiva degradación
Williams, el período de mayor deforestación de los ecosistemas a ellos asociados.
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Asimismo, cabe destacar que la sustitución de huella forestal de las ciudades trajo consigo la
la energía extraída directamente de la biomasa deforestación masiva de las zonas montañosas,
(leña y carbón vegetal) por carbón mineral fue obligando a los campesinos a recurrir a otras
solo parcial y estuvo confinada a Gran fuentes energéticas, como las hojas de los
Bretaña, partes de Europa occidental y la costa árboles y el estiércol animal entre otras.
este de los Estados Unidos, con lo que la leña Esta ardua disputa por recursos
continuaba siendo la base energética en la forestales cada vez más exiguos explica, en
mayor parte del mundo aún bien entrado el buena medida, por qué los procesos de
siglo XX. (WILLIAMS, 2006, p. 265) reforestación estuvieron marcados por
Es así como la demanda para usos tensiones entre el Estado y los campesinos,
constructivos e industriales pronto rivalizó con entre tecnocracia y tradición, entre lo privado y
otros usos básicos (energía y calefacción), lo comunal. (WILLIAMS, 2006, p. 266-271)
presentándose importantes déficits de madera En otros países como Rusia la
en Europa occidental y la costa este de los deforestación masiva de sus bosques parece
Estados Unidos. Esto condujo a una haber sido el resultado de la acción combinada
importación masiva de maderas de los bosques de la expansión de la agricultura y el
de coníferas de Escandinavia, Rusia, Canadá y crecimiento poblacional. Así, el uso intensivo
los Estados Unidos, que dio lugar a un nuevo de leña ante las bajas temperaturas y la
sistema Atlántico y Báltico de producción y severidad de los inviernos rusos generó una
consumo de productos forestales. intensificación de la explotación forestal ante
(WILLIAMS, 2006, p. 265) el crecimiento de la población. Cabe destacar
En Europa, cabe destacar, las también que en el caso ruso, al igual que
experiencias de deforestación fueron sucedió en otras partes del mundo como
diferenciadas en ritmo, intensidad, origen y América Latina, la explotación forestal se
características. En el caso de Francia, la intensificó por la exportación creciente de
deforestación tuvo lugar especialmente a partir maderas hacia otros países y regiones
de la por expansión agrícola. En efecto, tras la deficitarios. (WILLIAMS, 2006, p. 271-276)
Revolución Francesa tuvieron lugar rebeliones Está de más mencionar que la
campesinas -que también pudieron haber sido deforestación masiva y temprana de Gran
generadas, entre otros factores por el impacto Bretaña está indefectiblemente relacionada con
del clima en la agricultura (GROVE, 2005, p. los primeros estadios del proceso de
151-167)- arremetieron contra la nobleza, la industrialización. De hecho hacia el siglo XIX,
aristocracia y la Iglesia, apropiándose de apenas sobrevivían en suelo británico escasos
bosques para pastoreo y cultivo. remanentes de bosques. (WILLIAMS, 2006, p.
Por otra parte, la expansión de la 276) Si bien se presentaron diversas iniciativas
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 16

tendientes a substituir la leña y el carbón cómo la deforestación se aceleró


vegetal por el carbón mineral, el coste era dramáticamente en el país del norte entre 1850
elevado al menos a gran escala. Lo anterior y 1869, siendo las principales áreas
implicó que el “taller del mundo” fuera deforestadas los estados del norte y el medio
tempranamente dependiente de la importación oeste. (WILLIAMS, 2006, p. 286) Luego de
de madera, especialmente del Báltico, aunque 1880, tuvo lugar un proceso de mecanización
también de otras regiones como América inicial e intensificación de la tala, que
Latina, hasta la generalización de la energía contribuyó a que la deforestación se expandiera
fósil. En este sentido, coyunturas como las de manera creciente especialmente hacia los
guerras napoleónicas comprometieron estados del sur y el oeste.
seriamente el suministro británico de energía, De esta manera, la ampliación,
que se sostuvo a costa de la deforestación de cercamiento, parcelación y especialización
amplias regiones en Canadá, Nueva Zelanda, productiva acorde con la demanda mercantil
Belice y otras colonias. provocaban una incesante intensificación y
De esta manera, Gran Bretaña se ampliación territorial de la tala. En los Estados
convirtió en el mayor importador de maderas Unidos, vale recordar, la leña se constituyó en
hasta, al menos, la Primera Guerra Mundial, la base energética tanto a nivel doméstico
cuando fue cediendo terreno ante los Estados como industrial hasta cerca de 1885. De hecho
Unidos. (WILLIAMS, 2006, p. 276-284) hacia el epílogo decimonónico, el uso
En el “Nuevo Mundo”, como ya se ha doméstico concentraba el 95% de la demanda
mencionado, la explotación forestal fue de leña, que, gracias a la elevada dotación de
concebida desde el arribo de los europeos recursos forestales, era suplida sin problema
como pre-requisito para el necesario por la “producción” forestal estadounidense.
reordenamiento productivo del medio (WILLIAMS, 2006, p. 286-308)
biofísico y a la vez como una industria El desarrollo industrial y el agotamiento
generadora de elevados ingresos si había una de la frontera agrícola cambiaron
amplia disponibilidad de bosques para ostensiblemente este panorama.
explotar. Las estadísticas estadounidenses del
En el caso de los Estados Unidos, la comercio internacional de maderas, evidencian
deforestación estuvo asociada tanto con el cómo el país del norte pasó de ser un
proceso de expansión de la frontera agrícola exportador neto de maderas a otras regiones
como con el proceso de industrialización deficitarias del planeta (como el reseñado caso
creciente que tuvo lugar al menos de manera británico) a un importador neto que expandía
inicial en la costa este de ese país. su huella forestal globalmente. Las
En este sentido, Williams da cuenta de consecuencias de este proceso en la
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 17

explotación de los ecosistemas forestales algunas hipótesis generales sobre el ritmo e


centroamericanos no van a ser exiguas y sobre intensidad de la explotación forestal, la
ellas volveremos más adelante. dinámica de comercialización de los bosques y
No parece caber duda, a partir de lo sus producciones y el impacto socio-ecológico
expuesto en este apartado, que en la derivado de estos procesos históricos en el
explotación global de los ecosistemas contexto espacio-temporal que nos ocupa.
forestales confluyen tanto factores
relacionados con las características de la Los bosques centroamericanos en el mundo
demanda doméstica e industrial de los más borbónico y post-independentista: redes de
variados productos forestales, como con la comercio, explotación extractiva y consumo
disponibilidad de una masa forestal capaz de suntuario
suplir dicha demanda. Lo anterior, no está por
demás decir, es históricamente cambiante, y No parece caber duda de que las
está profundamente concatenado con las mayores transformaciones socio-ambientales
prácticas culturales, la dinámica económico- generadas en la región centroamericana más
productiva, las transformaciones socio- allá de las derivadas de los procesos de
políticas y los rasgos ecosistémicos de los conquista y colonización, tuvieron lugar en la
lugares donde se llevan adelante los procesos segunda mitad del siglo XVIII. Como bien lo
de apropiación y transformación de los señalan Díaz y Viales (2016), para inicios de la
ecosistemas forestales. década de 1750, el cambio institucional
Ahora bien, a partir de la lógica recién implantado por las reformas borbónicas estuvo
expuesta, vale preguntarse por la dinámica de aparejado con un profundo cambio
la explotación forestal con fines comerciales económico.(p. xi) La principal beneficiaria de
en Centroamérica, en los siglos XVIII, XIX y dichas transformaciones fue la élite colonial
XX, y específicamente por las lógicas y Guatemalteca, que incrementó su poder e
dinámicas de inserción de los productos influencia, gracias al control que ejerció sobre
forestales en el mercado mundial y su relación el financiamiento de las tres principales
con las demandas crecientes de maderas y actividades económicas del istmo hacia finales
otros sub-productos del bosque que del siglo XVIII: la plata, el añil (índigo) y la
observaron distintos países y regiones del ganadería. (DÍAZ y VIALES, 2016, p. xi)
planeta, algunas de las cuáles acabamos de Siguiendo a estos autores, tenemos que
reseñar. A pesar del carácter fragmentario de el producto que ejerció un mayor peso en la
los datos y el carácter desigual de la dinamización de la economía centroamericana
producción de historiografía ambiental en el ocaso colonial, fue el añil, cuyas
centroamericana, procederemos a plantear ganancias se reinvirtieron en actividades
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 18

altamente rentables en esa época como la una concentración de los beneficios


ganadería. El auge añilero se generó gracias a económicos en la élite comercial
su elevada demanda en el mercado de tintes Guatemalteca, que pronto derivó en tensiones
europeo en pleno auge industrial. El comercio con los productores de las provincias alentado
del tinte se incrementó de manera vertiginosa el separatismo que se experimentaría durante el
en las décadas siguientes y no fue sino hasta proceso de independencia. (DÍAZ y VIALES,
1799 que comenzó su descenso. (DÍAZ y 2016, p. xv-xvi)
VIALES, 2016, p. xii; FERNÁNDEZ, 2003; Para el caso que nos ocupa, diremos
MC CREERY, 2017, p. 76-107) que esta dinamización de la economía y el
El incremento en la producción de añil comercio centroamericanos incidieron
como producto motor de la economía del decididamente en la constitución de vastas e
Reino de Guatemala -que entonces inéditas redes de comercio global que
comprendía a las actuales repúblicas de anticipaban la inserción formal y “definitiva”
Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua de la región en el mercado mundial y en las
y Costa Rica, así como el Estado mexicano de que las maderas ocupaban, sin duda, un sitial
Chiapas- incentivó la especialización destacado.
productiva inter e intra regional. En efecto, a raíz del levantamiento, por
A grandes rasgos, diremos que, en el parte de los reyes borbónicos, de la prohibición
espacio económico centroamericano de ese del intercambio comercial entre los virreinatos
período, guiado por el predominio de la de Nueva España y Perú, que tuvo lugar en
producción salvadoreña de añil, las provincias 1774, el comercio de Centroamérica con
de Honduras, Nicaragua y Guatemala Panamá y América del Sur tendió a
suministraban el ganado del que se obtenía incrementarse ostensiblemente
carne para la alimentación de los trabajadores (SOLÓRZANO, 2001, p. 125), consolidándose
y cuero para la elaboración de los “zurrones” una serie de relaciones entre comerciantes de
para enfardar el polvo tintóreo. Algunas los puertos novohispánicos del Océano
regiones guatemaltecas se especializaron en Pacífico, como Acapulco, Sonsonate, el
ropa de tierra, maíz y trigo, la provincia de Realejo, Nicoya, Caldera y Puntarenas, y sus
Costa Rica observó un ciclo, corto pero contrapartes en el virreinato peruano, como lo
relativamente dinámico, de producción de fueron los puertos de Guayaquil, Paita y el
tabaco que se comercializó hacia Nicaragua y Callao. (SOLÓRZANO, 2001, p. 126) Hemos
Panamá, al tiempo que en Honduras tuvo lugar de destacar, asimismo, que la eliminación de
una intensa minería de plata. (DÍAZ y las prohibiciones comerciales mencionadas
VIALES, 2016, p. xiii-xiv) Esta dinámica incentivó la explotación de palo brasil – cuya
económica que no tuvo precedentes, generó madera era utilizada para la elaboración de
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 19

tintes- en la península de Nicoya, que era (PNUMA y CCAD, 2006, p. 17)


exportado hacia Perú a cambio de mercancías Por otra parte, de los bosques de pino
de diversa índole, mientras que Panamá fue el de la región montañosa central de Nicaragua se
destino de otras maderas extraídas del Pacífico obtenían la brea, utilizada con fines
Norte costarricense como el cedro, aunque el medicinales, y el alquitrán. Estos productos se
volumen de su exportación aparentemente fue exportaban desde el puerto nicaragüense de
mucho menor que el del palo brasil Realejo con destino a Perú. (PNUMA y
(SOLÓRZANO, 2001, p. 129-131), que fue, a CCAD, 2005, p. 17)
no dudarlo, “uno de los bienes que Si bien ya en el epílogo colonial los
protagonizó el intercambio comercial en los circuitos comerciales hispánicos entraron en
primeros años de vida independiente de las crisis, siendo substituidos en buena medida por
provincias centroamericanas y uno de los más los británicos (SOLÓRZANO, 2001, p. 136),
antiguos en toda su historia económica”. estos no parecen haber desaparecido del todo,
(HERRERA, 2001, p. 219) Lo importante en pues nuevas relaciones comerciales y redes
este sentido es notar cómo, a la dinámica de la sociales entre centro y Sudamérica parecen
explotación económica de la madera en haberse construido sobre las bases del “edificio
Centroamérica, se le puede atribuir un carácter borbónico”. (HERRERA, 2001, p. 213-264) En
estructural visto desde la larga duración efecto, como bien lo señala Miguel Ángel
braudeliana, tanto en lo que respecta a las Herrera, a partir del análisis detallado de la
regiones por excelencia dedicadas a la construcción de redes de marinos-comerciantes
explotación forestal, situadas en el Pacífico, de raigambre colonial, creadas a partir del
como en lo que respecta a los principales tráfico de esclavos, mercancías y maderas
mercados latinoamericanos de la madera: Perú durante los siglos XVI y XVII, y generadora de
y Panamá. una cultura de trabajo específica en las
De hecho, la dinámica comercial de poblaciones portuarias que se mantendría aún
maderas y otros productos forestales, hasta el siglo XIX (HERRERA, 2001, p. 225),
antecedió notablemente a la instauración del la actividad de los marinos-comerciantes
“comercio libre” borbónico. En el período sudamericanos prevaleció en el comercio de
colonial temprano, tuvieron lugar ciclos cabotaje entre los puertos del Pacífico
económicos relativamente cortos de productos centroamericano, dejando a los comerciantes
forestales como el bálsamo, que abundaba en europeos,-a los que además solían representar-
la costa de El Salvador y la raíz de la el control de las rutas transcontinentales.
zarzaparrilla, que era recolectada en el actual En este esquema de especialización en
territorio hondureño y transportada por barco el ejercicio del comercio, el autor destaca como
desde los puertos del norte de Honduras. los puertos de Puntarenas y el golfo de Fonseca
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 20

se constituyeron en depósitos de mercancías Estados Nacionales surgidos de su ruptura, no


extranjeras y “frutos de la región”, para ser parece haber desarticulado estas redes de
redistribuidos hacia los demás puertos del comercio maderero intra y extra regionales.
Pacífico centroamericano. (HERRERA, 2001, Estas, parecen haberse mantenido, aparejadas,
p. 249) eso sí, a una creciente consolidación de los
A partir de este análisis, la dinámica circuitos comerciales transcontinentales.
comercial de los puertos del Pacífico En este sentido, tras el decaimiento del
centroamericano -en el que con claridad se comercio añilero y la consecuente
insertaba el comercio maderero- en la primera desarticulación de los encadenamientos
mitad del siglo XIX parece estar más que productivos asociados a la ´producción y
clara. comercialización del tinte (WORTMAN,
La tradición de intercambio comercial 1975), las nacientes repúblicas
existente entre centro y Sudamérica desde centroamericanas buscaron incesantemente
tiempos borbónicos, no sólo se mantuvo, sino insertarse de manera estable y constante en el
que fue la base sobre la que se asentó el mercado mundial en pleno proceso de
comercio transcontinental, con el concurso de articulación mediante estrategias variadas.
las grandes potencias económicas europeas. Honduras y Nicaragua, si bien continuaron
Así, y para el caso que nos ocupa, podríamos enfocándose en los productos que habían
inferir que las maderas centroamericanas observado su auge en el epílogo colonial como
durante la primera mitad del siglo XIX eran lo eran la ganadería y la minería, ampliaron su
exportadas a Perú y otros países costeros oferta exportadora con zarzaparrilla y lo que
sudamericanos, tanto para su consumo interno más nos interesa: las siempre demandadas
–pues la actividad minera muy extendida en maderas preciosas (DÍAZ y VIALES, 2016, p.
países como Perú y Bolivia requería un 12) y otros productos forestales otrora carentes
suministro constante de madera- (HERRERA, de valor mercantil, como el hule. (PNUMA y
2001, p. 221) como para su reexportación CCAD, 2005, p. 20) Lo anterior supuso el
principalmente a Europa, por la extensa y aprovechamiento de las redes de
penosa vía del Estrecho de Magallanes. comercialización de maderas y otros productos
La crisis económica generada por el de las que acabamos de dar cuenta, pero
desplome del añil como producto motor de la también de las nuevas relaciones comerciales
economía centroamericana que traspasaría con que suponían la inserción formal y “definitiva”
mucho el umbral de la independencia política, de los países centroamericanos en el mercado
afectando profundamente el desempeño mundial como exportadores por excelencia de
económico de la Federación Centroamericana, materias primas y bienes finales de relativo
que existió entre 1824 y 1839, y los nacientes escaso valor añadido a cambio de bienes
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 21

industriales de alto valor, visto en términos _particularly_the_states_of_Honduras_and_San_Salvad


or_-
crematísticos,3 es decir sin tomar en cuenta, _their_geography%2C_topography%2C_climate%2C_p
opulation%2C_resources%2C_productions%2C_etc.%2
como aún hoy en día no se hace, los impactos C_etc.%2C_and_the_proposed_Honduras_%281458669
8670%29.jpg
ambientales presentes y futuros y su
distribución social.
De hecho, viajeros como E.G. Squier
(1855), hacia mediados de la década de 1850,
daban cuenta de las extensas reservas de caoba
en Honduras y así como del alto grado de
organización de la actividad maderera. De
manera específica, Squier señalaba que la
Imagen 3- Campamento de tala de caoba en el río Ulua,
Honduras, circa, 1850. En: Squier, E. G. (Ephraim caoba crecía en casi todas las partes de
George), Notes on Central America : particularly the
states of Honduras and San Salvador : their geography, Honduras, especialmente en los valles
topography, climate, population, resources, productions,
etc., etc., and the proposed Honduras inter-oceanic
aluviales. Sin embargo, destacaba que era más
railway, New York: Harper & Bros, 1855. Jay I. Kislak abundante en los terrenos bajos que bordean
Collection (Library of Congress)
https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/4/4e/ los ríos que desembocan en la Bahía de
Notes_on_Central_America_-
Honduras, donde también alcanzaban su mayor
3
La utilización de este término tiene su asidero en la tamaño y belleza. La actividad maderera era un
distinción hecha por los griegos, como lo es el caso de
Aristóteles en su Política, entre los conceptos negocio bien articulado, con una clara relación
oikonomia, entendida como “el arte del
aprovisionamiento material de la casa familiar”, y la entre el Estado, dueño de la mayor parte de las
crematística, que se constituye en “el estudio de la
formación de los precios de mercado, para ganar tierras explotables, y los madereros, que
dinero”. Como lo sintetiza con claridad Martínez Alier convenían por medio de licencias de
esta distinción, vital para la comprensión de lo que
podríamos denominar como sistemas de valoración explotación en lo referente al porcentaje que el
extraeconómicos aplicados a la naturaleza, y las
disputas que entre estos y las valoraciones estrictamente gobierno recibiría por cada árbol y las zonas
económicas donde la naturaleza requiere de la fijación
de un “precio” para su necesaria inserción en el destinadas a la explotación forestal. También el
mercado, se da “entre la verdadera riqueza y los valores
de uso por un lado y los valores de cambio por otro viajero daba cuenta de la organización de la
lado”. Esta distinción resulta fundamental en la “producción” de maderas, al señalar que con
conceptualización de la Economía Ecológica, que
analiza el fenómeno económico desde una óptica más excepción de los puestos establecidos en las
cercana a la oikonomia que a la crematística, lo que
implica la introducción de múltiples criterios no desembocaduras de los diversos ríos para
económicos y el reconocimiento de la existencia de
sistemas de valoración de la naturaleza irreductibles en recibir, marcar y transportar la madera cuando
términos monetarios, al tiempo que cuestiona el hecho
de que los impactos de la actividad humana sobre el fluye río abajo, los establecimientos de
ambiente, son considerados por la economía tradicional explotación de caoba eran necesariamente
como externalidades, quedando fuera del cálculo
económico. En suma, la amplitud intrínseca del temporales y se movilizaban a medida que la
concepto oikonomía permite abordar en su complejidad
distintas formas de valorar la naturaleza, así como los cantidad de árboles decrecía en una zona de
encuentros y desencuentros que han tenido y tienen
lugar entre la economía y el medio ambiente. explotación específica. Según el parecer del
(MARTÍNEZ ALIER, 2004, p. 44-45)
viajero, de todas las ocupaciones conocidas por
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 22

el ser humano, la de la tala de árboles era independencia, se caracterizó por ampliar su


quizás la más avanzada en su naturaleza, oferta exportadora, insertándose en las vastas
encontrándose, además, entre las más redes de comercio que se extendían por ambos
sistemáticas en sus arreglos organizativos. océanos hacia otros países latinoamericanos,
(SQUIER, 1855, p. 173) Europa y los Estados Unidos. (DÍAZ y
En Honduras, de hecho, la actividad VIALES, 2016, p. 12-23) En este contexto de
maderera fue particularmente dinámica desde diversificación económica y aun cuando el café
el período colonial, pero experimentó su auge y luego el banano eclipsaron la dinámica
en la primera mitad del siglo XIX. El propio comercial del país, la exportación de maderas
Squier observaba que, en 1856, la exportación ocupó un lugar nada despreciable.
de maderas preciosas, con predominio de la De esta manera, los cambios
caoba y la madera de rosa, ocupaba el segundo económicos suscitados en la región tras el
lugar de las exportaciones hondureñas. ocaso del comercio añilero, parecen haber
(PAYNE, 2007, p. 231-232) De hecho, Elizet incluido una intensificación en la explotación
Payne asegura que “el aumento en las forestal, dado que algunos países en los que
transacciones de tierras, entre las décadas de las maderas no habían formado parte integral
1840 y 1860, se dio alrededor de los intereses de su oferta exportable optaron por la
en la explotación maderera, tanto en terrenos explotación forestal con fines comerciales
privados como del Estado”. (PAYNE, 2007, p. como parte del esfuerzo de sus élites de
232) Esta autora da cuenta, asimismo, de las vincularse al mercado mundial de recursos,
alianzas y tensiones entre los inversionistas mientras que otros en los que la
extranjeros -especialmente españoles, ingleses comercialización de maderas era de larga data,
y estadounidenses- los comerciantes locales y dieron continuidad a la actividad. Lo anterior
el Estado hondureño en torno a las fue impulsado, especialmente, por los
concesiones para la explotación y requerimientos crecientes del mercado
comercialización de maderas preciosas en la mundial, especialmente por parte de algunos
Costa Norte de Honduras, con consecuencias países y regiones que presentaban un
geopolíticas tan severas como la toma del desabastecimiento notable de maderas tras
puerto de Truxillo en 1849 por parte de los haber experimentado procesos previos de
ingleses, por una supuesta deuda del gobierno deforestación masiva, y, consecuentemente, al
hondureño con ciudadanos británicos, ser sus remanentes de bosques notoriamente
posiblemente relacionada con los cortes de reducidos, como en el ya mencionado caso de
madera y otras inversiones inglesas en la zona. Gran Bretaña.
(PAYNE, 2007, p. 234-238) En efecto, el “taller del mundo” antes
Entre tanto, Costa Rica, tras la de su transición energética hacia la energía
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 23

fósil (WRIGLEY, 1993) era altamente terciada entre otros. (JIMÉNEZ, 1998, p. 137-
dependiente de la energía extraída de la 143 y 78-81) Esto nos brinda también una clara
biomasa, y especialmente de las maderas para idea de las actividades industriales y
alimentar el intensivo proceso industrializador manufactureras en los centros del capitalismo
que llevaba adelante, lo que ya comenzaba a mundial, generadores de la mayor y
reñir con otros usos del suelo como el agrícola temporalmente más extensa destrucción de los
y con el consumo doméstico de energía. En bosques del neoptrópico.
este sentido, si como ya se mencionó, este Hemos de señalar, que los usos de las
déficit forestal -y energético- fue suplido con maderas fueron diversificándose y creciendo a
las maderas provenientes del Báltico y de sus lo largo del tiempo y no todos estaban
colonias ultramarinas, cabe destacar que una relacionados con el consumo de las élites. De
de ellas era centroamericana: Belice. hecho, las maderas eran estratégicas en la
De esta manera, lo que planteamos propia reproducción de las redes de comercio a
aquí es que si bien las maderas “preciosas” larga distancia desde los propios inicios del
centroamericanas difícilmente se exportaban comercio transatlántico. En este sentido, no
con el fin de contribuir a solventar el cabe la menor duda de que la construcción de
mencionado déficit energético, eran altamente navíos, se constituyó en uno de los principales
demandadas, en parte, gracias al éxito usos de las maderas en el proceso de
industrializador. En efecto, consideramos que consolidación de la economía-mundo europea a
las maderas centroamericanas fueron partir del siglo XVI e incluso en la articulación
utilizadas, en parte, para la elaboración de del mercado mundial hacia finales del siglo
finas artesanías que engalanaron las viviendas XIX. Su importancia fue tal, que, de hecho, se
de los miembros de la nueva burguesía puede considerar que al contribuir
industrial, tanto en Gran Bretaña como en decisivamente en la creación de redes de
otros países europeos, fabricadas con caoba, comercio a larga distancia, la construcción de
genízaro, cedro y otras especies de maderas navíos de madera se constituyó en uno de los
finas. factores vitales para la expansión mercantil a lo
Este consumo suntuario de maderas largo del globo.
típicamente obtenidas de la explotación De hecho entre finales del siglo XIX y
extractiva de los bosques tropicales, como el principios del XX, las grandes piezas que
cedro, la caoba y el cocobolo incluía también conformaban la estructura de los barcos, como
la fabricación de muebles, artesanías, objetos la quilla, la roda y el codaste solían estar
deportivos (piezas de ajedréz), mangos de hechos de roble, teca o caoba, mientras las
herramientas, instrumentos musicales y piezas menores se construían de cedro, álamo y
científicos, cajas de piano, chapas, madera otras maderas ligeras. (ROLDÁN, 1864, p. 45)
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En este sentido cabe destacar que en (Agave) y la cabuya (Furcraea cabuya) para la
los propios puertos centroamericanos desde el cordelería”. (PNUMA y CCAD, 2006, p. 17)
período colonial, se construyeron Otro de los usos de los productos
embarcaciones que requerían de ingentes forestales centroamericanos de los que se tiene
cantidades de productos forestales. El noticia, es el tratamiento de toneles de vino en
alquitrán, por ejemplo, se utilizaba para cerrar los distritos vinícolas de la costa de Perú, para
las junturas de madera de las embarcaciones lo que se exportó brea de pino en cantidades
construidas en los astilleros de Realejo. considerables, al punto de que hacia finales del
Asimismo, en la construcción de barcos siglo XVII la oferta estaba ya agotada.
desarrollada en este puerto nicaragüense se (PNUMA y CCAD, 2005, p. 17)
utilizaron diversas especies de maderas duras, Dentro de los usos que podríamos
como el cedro, la caoba, el guácimo y el denominar tradicionales de las maderas,
madero negro. Los mástiles, por su parte, eran algunos que no se pueden obviar por su
hechos de pino explotado en las montañas relevancia, peso histórico e impacto socio-
adyacentes al puerto, consideradas como un ambiental, se encuentran directamente
reservorio inagotable de maderas por parte de relacionados con la actividad bélica.
los españoles. (PNUMA y CCAD, 2006, p. Autores como J.R. Mc Neil que han
17) profundizado en las transformaciones
El carácter estratégico de la madera ambientales que a escala planetaria ha
para la fabricación de navíos del que hemos generado históricamente la guerra, nos
procurado dar cuenta, se expresa con claridad recuerdan algunos usos bélicos de la madera,
en el caso cubano, donde la corona española muchos de ellos introducidos tras la
condicionó la explotación desmedida de los denominada revolución militar, situada entre
bosques ante el temor de un eventual los años 1450 y 1700, donde las fortificaciones
desabastecimiento de maderas y la en diversas partes del mundo, construidas
consecuente imposibilidad de construir barcos principalmente por las potencias imperiales
en la isla. (FUNES, 2008, p. 20-24 y 39-82) tanto en las metrópolis como en sus colonias,
La explotación forestal con miras a la comenzaron a requerir en cada vez mayor
construcción de navíos estaba asociada a otras cuantía de un suministro constante de madera
transformaciones ambientales y sociales en el para la elaboración de soportes para artillería,
istmo centroamericano. Lo anterior por cuanto cajas de municiones, barriles de pólvora,
esta actividad “impuso a los indígenas fuertes barracas, empalizadas y barcos, entre muchos
obligaciones, pues además de cortar y otros usos (MC NEILL, s.f.,) incrementando
trasladar la madera debían aportar algodón ostensiblemente la presión sobre los
para las velas y fibras como el maguey ecosistemas forestales, en ocasiones cercanos y
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en otros notoriamente distantes de dichos masificación industrial, las maderas tintóreas


emplazamientos. centroamericanas como el palo de brasil o el
El panorama de las maderas tintóreas, palo de tinte, desfilaban por las tintorerías
exportadas desde los inicios de la colonización europeas para teñir los textiles industriales
española es mucho más claro. La manufactura entre el siglo XVIII y mediados del siglo XIX.
tradicional de prendas de vestir primero, y la En este sentido, Myers y Tucker (1987)
fabricación industrial de textiles después, han señalado que, desde el siglo XVI, las
requirieron de ingentes cantidades de tintes maderas tintóreas se extrajeron en pequeñas
que eran extraídos de fuentes diversas. En este cantidades de la costa tropical de Belice. Si
sentido vale recordar que, como bien lo bien la dinámica comercial fue relativamente
analiza Carlos Marichal (2017), a partir del limitada, en unas pocas décadas la madera
siglo XIV los principales centros de textiles de proveniente de lugares de fácil acceso fue casi
Europa -en especial Florencia y Flandes- eliminada de la costa de Belice; por lo tanto, se
producían telas carmesí a partir de una gran constituyeron en las primeras especies
variedad de tintes rojos, que eran consumidos tropicales de Centroamérica en agotarse
por los sectores acomodados de la sociedad gravemente. A fines del siglo XVII, los
medieval debido a su elevado precio, madereros ingleses controlaban las
relacionado, mayoritariamente con los altos exportaciones de madera de Belice, y ese
costos que se generaban en el teñido de los comercio continuó siendo su principal producto
textiles, y en los que influían, tanto la escasez, de exportación durante tres siglos, mientras
como el elevado costo de producción y prevaleció la influencia británica en
comercialización de los tintes. (MARICHAL, Centroamérica. Cuando disminuyeron las
2017, p. 112-113) Entre los tintes naturales de exportaciones de maderas tintóreas, la cosecha
lujo, el de mayor demanda así como el más de caoba para la industria del mueble de la
costoso fue la grana cochinilla, exportada Europa del siglo XVIII comenzó a
desde América para teñir con el rojo más reemplazarlas. El comercio de caoba duró hasta
duradero y gustado las prendas de lana y seda el siglo XX con consecuencias mucho mayores
que engalanaban a la aristocracia y el clero para el agotamiento del bosque. (MYERS Y
europeos. (MARICHAL, 2017, p. 110-115) TUCKER, 1987, p. 59)
Una de esas fuentes de producción de tintes lo Similar panorama experimentó
fueron las maderas tintóreas. A pesar de su Honduras en el siglo XIX, donde la extracción
menor importancia cualitativa y peso de madera se insertó en el contexto de la
cuantitativo en el mercado mundial de tintes, disputa generada entre España e Inglaterra por
lo que nos interesa destacar aquí es que, en un la posesión de los territorios caribeños.
contexto de creciente tecnificación y (PAYNE, 2007, p. 231). De forma similar a lo
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 26

sucedido en el caso de Belice, fueron súbditos tintes sintéticos, y por otro, que Centroamérica
ingleses quienes desde el siglo XVII se pudo haber constituido en uno de los
explotaron los recursos forestales de la costa y principales suplidores globales de esta especie,
los ríos aledaños a la bahía de Honduras, lo que planteamos aquí a manera de hipótesis y
primero extrayendo el mencionado palo de que merece, sin duda explorarse a profundidad
Brasil y luego explotando los bosques de los en futuras investigaciones.
que se extraía caoba y otras maderas La explotación forestal con fines
preciosas, como se analizó con anterioridad. comerciales tuvo un impacto notorio sobre los
(PAYNE, 2007, p. 231) ecosistemas de la región en este período.
Un caso llamativo y poco estudiado Además del carácter extractivo y las
que guarda estrecha relación con lo que aquí consecuentes alteraciones de las tramas tróficas
analizamos es el del palo de mora y la pérdida de biodiversidad que acompaña
(Chlorophora tinctoria) del que se extraía el cualquier proceso de deforestación, cabe
amarillo old fustic, y se comercializaba desde destacar que buena parte del bosque explotado
Cuba, Jamaica, Puerto Rico y otras islas del entre el siglo XVIII y la primera mitad del XIX
Caribe, a partir del siglo XVI. (FERREIRA, ya no podría considerarse primario. En efecto,
HULME, MC NAB Y QUYE, 2004, p. 329- como bien lo han señalado Myers y Tucker, el
336) bosque secundario avanzó desde el período
Históricamente, uno de los usos más colonial temprano hasta finales del siglo XVII,
intensivos del palo de mora ha sido su uso ya que el colapso de la población llevó al
como tinte a nivel industrial. El mencionado abandono de las tierras cultivables. Pero el
tinte amarillo que se extrae de esta especie bosque volvió a patrones bióticos que no
actúa rápidamente sobre los textiles cuando se alcanzaron la cobertura original. Vale recordar
usa con mordientes, es decir con sustancias que las formas avanzadas de bosque secundario
que permiten la fijación de los colores en los difieren del tipo primario verdadero en
textiles, ya sean sales metálicas, ácidos o términos de su biomasa, productividad,
sustancias orgánicas. fisonomía, composición de especies y dinámica
Lo Central para el caso que nos ocupa comunitaria. Esas circunstancias se aplican a
es que esta madera se constituyó casi todos los bosques maduros de América
históricamente en la segunda en importancia Central en la actualidad (MYERS Y TUCKER,
de las exportaciones de maderas en Costa Rica 1987, p. 60), es decir ostentan un carácter que
entre finales del siglo XIX y la primera mitad podríamos denominar estructural.
del XX, lo cual implica, por un lado, que la
demanda de esta madera continuó mucho Dinámica de comercialización y regímenes
tiempo después de la generalización de los diferenciados de explotación forestal en
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 27

Centroamérica: entre el extractivismo sociales del estado liberal provinieron


liberal y el productivismo desarrollista específicamente de la producción y
comercialización del café (PÉREZ
Como parece quedar claro con lo hasta BRIGNOLI, 2017, p. 103),4 el comercio de
aquí expuesto, la dinámica de explotación maderas de origen extractivo continuaba siendo
forestal con fines comerciales era en esencia una actividad tanto dinámica como altamente
una actividad eminentemente extractiva, lucrativa.
guiada, como hemos planteado en el presente En el caso costarricense, por ejemplo,
análisis, no sólo por el imperativo mercantil de las maderas disputaron con el cacao el tercer
reorganizar el medio biofísico introduciendo lugar como rubro exportable del país hasta la
actividades económicas de mayor valor década de 1920 (GOEBEL, 2013, p. 163-223),
añadido como la ganadería o los cultivos (Ver Gráfico 1) algo que, debemos agregar, ha
comerciales más diversos como el cacao, el sido frecuentemente invisibilizado o
tabaco o el café, sino también por el carácter minimizado por buena parte de la historiografía
estratégico de la explotación comercial de los económica costarricense, que ha centrado su
bosques en la propia reproducción de las redes atención, casi de manera exclusiva, en el
de comercio maderero mediante la análisis de la agricultura comercial. Los datos
construcción de navíos, el consumo suntuario disponibles, empero, no parecen dejar dudas:
de los sectores acomodados europeos y otros Costa Rica era, en período liberal, un
tantos usos que, como hemos mostrado, dan exportador de café, bananos y madera al menos
cuenta de que la comercialización de hasta la década de 1920, cuando el cacao
productos forestales era, en sí misma una desplazó de manera irrevocable a las maderas
actividad atractiva para quienes la llevasen como tercer producto exportable.
adelante siempre que contaran con abundantes
tierras disponibles que deforestar. Hacia el
epílogo decimonónico el panorama no parece
haber cambiado demasiado.
En un contexto en el que la agricultura
de exportación eclipsaba plenamente la escena
económica centroamericana -con diferencias
marcadas entre los distintos países- aportando
4
Las marcadas diferencias en lo que respecta a las
al Producto Interno Bruto entre un 20 y un características productivas, sociales, laborales y
30% del valor agregado hacia 1925, según culturales del cultivo, se recogen perfectamente en la
profusa investigación histórica desarrollada en torno al
cálculos de Bulmer-Thomas (PÉREZ cultivo en el ámbito regional. Para algunos trabajos
destacables ver: (SAMPER, 1998 y 1990; PÉREZ
BRIGNOLI, 2017, p. 96), y donde las bases BRIGNOLI, 1994; LINDO-FUENTES, 1994; MC
CEERY, 1994; DORE, 1994 y BAUMEISTER, 1994).
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 28

el mercado internacional se mantuvo, la


inserción directa de las maderas y otros
Gráfico 1- Costa Rica: Valor total de las
exportaciones de cacao y maderas en US $ (1883- productos forestales en el mercado mundial
1920)
estuvo guiada por una combinación entre la
venta de maderas “baratas” otrora sin valor
mercantil y las extraídas de cultivos forestales
o “plantaciones” de árboles, una nueva y
lucrativa modalidad de explotación forestal que
da cuenta de la viabilidad económica de la que
ha gozado históricamente el negocio maderero.
Si bien lo que acabamos de plantear lo
Fuente: Dirección General de Estadística y Censos
(DGEC). Anuario Estadístico. Año 1934, Tomo 38, San hacemos mayoritariamente con los casos y
José: Imprenta Nacional, 1935, pp. 41-45. DGEC.
Resúmenes Estadísticos, años 1883 á 1910, pp. 5-10, momentos de los que disponemos más datos, y
DGEC. Anuarios Estadísticos, 1935-1955 y
QUESADA, Juan Rafael. “Comercialización y a pesar del carácter fragmentario y desigual de
Movimiento Coyuntural del cacao”, en Revista de
Historia, año III, N° 6, pp. 69-110, enero-julio, 1978. las fuentes, esto no nos inhibe de plantear para
la región en su conjunto, la existencia de dos
A pesar de la clara continuidad y el fases diferenciadas de explotación forestal
visible carácter estructural que se le puede como hipótesis que esperamos sea corroborada,
atribuir a la comercialización internacional de refutada o matizada en futuras investigaciones.
maderas en Centroamérica, para el epílogo Una primera fase que hemos
decimonónico y el amanecer del siglo XX, conceptualizado como “fase extractiva” la
algunos cambios habían tenido lugar. La situamos entre el epílogo decimonónico y los
tecnificación en el aserrado, así como algunos inicios de la década de 1940. A partir del ciclo
usos nuevos de las maderas y otros productos de las exportaciones de las diez especies
forestales -a pesar de que otros como la maderables de mayor demanda para el caso
fabricación de barcos o la elaboración de costarricense, diremos que esta fase estuvo
tintes perdían importancia- generaron nuevas dominada claramente por la exportación de
presiones sobre los bosques centroamericanos. unas pocas especies de maderas preciosas de
Hacia mediados del siglo XX, empero, la crecimiento lento, explotadas de forma
explotación comercial de maderas en la región extractiva, especialmente en el Pacífico
pareció adquirir un nuevo cariz y, al tiempo, centroamericano. Maderas finas como el Cedro
una dinámica territorial y mercantil y algunas de claro uso masivo e industrial
claramente distinta. De hecho, en este trabajo como el ya mencionado Palo de Mora, pagaron
planteamos que, si bien la explotación mayoritariamente el elevado precio ecológico
extractiva de maderas de elevada cotización en de esta fase.
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 29

Al despuntar la década de 1940, 2013, p. 78-118) En suma, la balsa se podría


situamos la consolidación de lo que hemos considerar en esta fase, como el prototipo de
conceptualizado como la “fase agroindustrial”. madera cultivada de exportación, a pesar de
Esta estuvo signada por el predominio de que fue perdiendo terreno a inicios de la
maderas “cultivadas” de crecimiento rápido, década de 1950, ante el peso de otras maderas
especialmente la balsa, y otras de explotación como el Cativo, que llegó a concentrar casi un
extractiva, pero de consumo masivo como el 50% de las exportaciones madereras en 1952.
cativo, -otrora carentes de valor mercantil-
explotadas en nuevas regiones de explotación Gráfico 2- Costa Rica: participación porcentual de
las principales maderas de exportación en el total de
forestal para la exportación, como es el caso las exportaciones costarricenses de madera (1883-
1955)
del Atlántico/Caribe costarricense, en el
contexto de una oferta diversificada y
crecientemente masificada.
De esta manera, tenemos que para el
caso costarricense, el Cedro como especie de
mayor exportación en la “fase extractiva”,
llegó a concentrar hasta un 93,21% del total de
las exportaciones de madera (1907), mientras
que, en los mismos términos, el Palo de Mora
llegó a representar hasta un 74,32% de la
oferta exportable en 1894 (Ver Gráfico 2). Fuente: Dirección General de Estadística y Censos
(DGEC). Anuarios Estadísticos, años 1883 a 1955 y
En la “fase agroindustrial”, por su Resúmenes Estadísticos, años 1883 a 1910.

parte, las exportaciones de balsa llegaron a


La factura ecológica de ambas fases fue
representar hasta un 86,26% de la oferta
sin duda elevada, aunque sus rasgos fueron
maderera costarricense. Este máximo histórico
claramente diferenciados de manera análoga al
se registró en 1944, lo que no parece dejar
tipo de explotación.
dudas de la elevada demanda de esta madera,
En el caso de la “fase extractiva” parece
especialmente por los Estados Unidos en el
claro que tanto la destrucción del bosque como
contexto de la Segunda Guerra Mundial, al
la ampliación de las actividades agro-ganaderas
tiempo que parece dar cuenta del éxito de las
asociadas a este cambio en el uso del suelo,
políticas estatales dirigidas a estimular el
incidieron de manera decisiva en la irreversible
desarrollo de “plantaciones” de balsa,
alteración de las tramas tróficas y el ciclo
reflejadas en los proyectos como el contrato
hidrológico –alterando el clima de las distintas
celebrado entre el gobierno costarricense y la
regiones de explotación forestal en los países
International Balsa Company S.A. (GOEBEL,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 30

centroamericanos- la intensificación de los especies de maderas preciosas es, como se vio,


procesos erosivos, especialmente visibles en la de larga data, y por la lenta o en ocasiones
estación lluviosa, y la fragmentación de los imposible reposición de los árboles talados,
bosques, que implica la reducción del área y la cabe resaltar que la mayor parte de las especies
conectividad entre los fragmentos cuya madera era ampliamente demandada por
(CAYUELA, 2006, p. 135-136), sólo para el mercado internacional en esta fase, por sus
citar algunas de las consecuencias de esta diversos usos y las especiales cualidades para
presión intensa del mercado internacional ser trabajada, se encuentran en la actualidad
sobre los bosques centroamericanos. amenazadas o en peligro de extinción. Algunos
Desde el punto de vista de la autores como Quírico Jiménez (1998),
Economía Ecológica, diremos que este consideran que el proceso de deforestación
proceso claramente depredatorio de incesante por el que ha atravesado y atraviesa
explotación extractiva, dilapidó buena parte el planeta, hará inevitable “la extinción de
del capital natural del Pacífico cientos de miles de plantas, resultado indudable
centroamericano, dada la virtual gratuidad en del aislamiento genético que producirá
el acceso y explotación de los bosques y la no endogamia y, posteriormente, la pérdida de su
internalización de las costos ambientales variabilidad genética”. (JIMÉNEZ, 1998, p.
presentes y futuros generados a partir de una 20)
destrucción llevada adelante bajo la estricta Las transformaciones ecológicas y
observancia de los inobjetables criterios de ambientales generadas en la “fase
rentabilidad propios de la economía agroindustrial” no fueron menores. En este
crematística. A lo largo de nuestro período y sentido cabe destacar que la deforestación del
allende este, se consolida, entonces, el bosque biodiverso para plantar bosques
intercambio ecológicamente desigual entre uniformes de una sola especie, siguiendo la
Centroamérica y los países importadores de norma de manejo decimonónica de la máxima
recursos naturales, -en el que los bosques producción sostenible de madera, genera la
parecen haber jugado un papel pérdida de muchas de las funciones ecológicas
desafortunadamente destacado- que a partir de de los bosques, así como sus producciones
la expansión constante de su huella ecológica, imprescindibles para la vida humana y su
expropiaban cada vez “más ambiente” de los sustento.(MARTÍNEZ ALIER, 2004, p. 150-
países suplidores de capital natural, 152) La lógica de crear “plantaciones de
generándose una deuda ecológica no árboles”, hunde sus raíces en la silvicultura
reconocida hasta nuestros días. (MARTÍNEZ científica desarrollada desde el siglo XVIII en
ALIER, 2004, p. 26-27 y 1998) Prusia y Sajonia, donde, a partir de una lógica
Dado que la explotación extractiva de simplificadora, se buscó convertir a un bosque
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 31

caótico, biodiverso e ininteligible, en uno la plantación comercial. (MARTÍNEZ ALIER,


uniforme, simplificado e inteligible, lo que 2004, p. 152) De hecho, como lo han mostrado
permitía a poderosas instituciones como el estudios recientes, el mantenimiento del
Estado y el mercado, delimitar productos bosque adyacente al bosque nuboso, es una
específicos y asignarles un valor. Así, en esta forma eficaz de mantener las funciones
“silvicultura fiscal” del Estado, el árbol real ecológicas. (CAYUELA, 2006, p. 61)
con su gran número de posibles usos fue En lo que respecta al consumo forestal,
sustituido por un árbol abstracto, que ya se analizaron los principales usos de las
simplemente representa un volumen de “maderas preciosas” extraídas del bosque
madera o leña. A partir de esta visión fiscalista caducifolio y semi-caducifolio,
y utilitaria, el bosque desaparece como hábitat centroamericano, relacionados con el consumo
y es concebido exclusivamente como recurso suntuario de los sectores pudientes de los
económico. De esta manera la silvicultura centros capitalistas, y lo que podríamos
promovió desde sus inicios las plantaciones de denominar un “consumo estratégico”,
árboles, a partir de la arrogancia relacionado con la construcción de barcos,
antropocéntrica de que la ciencia era capaz de fuertes y otros “artefactos geopolíticos”.
crear, a través de una cuidadosa siembra y Del lado de las “plantaciones” de
corte, un bosque más fácil de contar, árboles, es decir de las maderas de bajo costo y
manipular, medir y evaluar. Se trató -y se trata orientadas al consumo masivo para los fines
aún hoy en día- de intentos con resultados más diversos, una de las que destaca sin duda
variados de crear una suerte de ecología por la incursión temprana en el mercado
virtual, al tiempo que se negaba su principal internacional es la balsa.
condición de sostenimiento: la diversidad de Al cultivarse en la América tropical y
un bosque. (SCOTT, 1998, p. 11-24) Lo no cultivarse en Europa y los Estados Unidos,
anterior trajo consigo profundas consecuencias la balsa era ampliamente apetecida por la
ecológicas. La simplificación de los versatilidad y amplias posibilidades en la
ecosistemas, la degradación de la tierra, la construcción de pertrechos bélicos, así como en
pérdida de fertilidad y retención de agua -dado la elaboración de juguetes, maquetas y muchos
que las plantaciones de especies exóticas de otros usos en los que sus rasgos intrínsecos,
crecimiento rápido son generalmente como su bajo peso específico, resultaban en
consideradas más consumidoras que una ventaja innegable sobre otros materiales.
productoras de agua (CAYUELA, 2006, p. 61) Cabe destacar que los Estados Unidos
- y la pérdida de hierba para pasto, son sólo lideró los cambios en la explotación forestal
algunas de las funciones ecológicas perdidas por especie, en el tanto estuvo al frente de las
en la substitución del bosque “verdadero” por importaciones tanto de maderas preciosas
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 32

dirigidas al consumo conspicuo de los sectores cúbicos. Esto generaba un déficit de -467,0
dominantes, como de maderas “baratas” de millones de metros cúbicos, de los cuáles unos
consumo masivo, cuyo uso se generalizó, impresionantes -638,7 (por encima del déficit
entre otros motivos, por la creación y general del mundo desarrollado) correspondían
expansión de los suburbios característicos de a los Estados Unidos, que, como se observa,
la clase media de ese país a partir de la década expandía su huella forestal globalmente. Esto
de 1950, así como por el auge de la economía también se evidencia en el hecho de que, en
de guerra, en el primer lustro de la década del esta misma época, dicho país concentraba el
cuarenta del siglo XX. Este liderazgo está 15% de las importaciones mundiales de
estrechamente ligado con el incremento y maderas. (WILLIAMS, 2006, p. 370)
diversificación del consumo de productos Así, en un análisis concienzudo de las
forestales en los Estados Unidos, que lo importaciones estadounidenses a mediados de
habían llevado a ser un importador neto de la década de 1950, Don D. Humphrey (1955)
dichos productos tras haber sido destacaba con asombro el hecho de que los
históricamente un exportador neto, productos forestales en su conjunto
especialmente de maderas. En efecto, hacia representaban el 10% del total de las
mediados del siglo XVIII, por ejemplo, y importaciones estadounidenses, al tiempo que
como lo señala con claridad Michael las importaciones brutas de madera habían
Williams, todo puerto, desde Falmouth en aumentado de 4,4% de la producción nacional
Maine hasta Sunbury en Georgia, exportaba en 1924, a un máximo de 8,7% en 1950.
madera aserrada, principalmente al (HUMPHREY, 1955, p. 286) Así, para 1950
Caribe.(WILLIAMS, 2006, p. 215) Estados Unidos importó más de un billón de
Este panorama contrasta dólares en papel y madera, en una tendencia de
ostensiblemente con el que presentaba la crecimiento sostenido.
nación estadounidense en las primeras décadas De hecho, según este mismo autor, la
del siglo XX, cuando, según el meticuloso tasa de crecimiento de la producción local de
trabajo de Zon y la Sección de Investigación madera en los Estados Unidos en términos de
del Servicio Forestal de los estados Unidos, - pies cúbicos, era aproximadamente igual a la
primero en hacer un cálculo de los recursos tasa de agotamiento de las reservas forestales,
forestales en el planeta- la relación y sin embargo el agotamiento de los bosques
producción-consumo de productos forestales era mayor que el que mostraba la relación entre
mostraba un masivo déficit en el mundo las tasas de corte y de crecimiento, pues gran
desarrollado. Mientras que la “producción” era parte de la “fuga” de recursos forestales se
de 845,4 millones de metros cúbicos, el concentraba en la madera aserrada, sobre todo
consumo era de 1312,4 millones de metros coníferas, mientras que la mayor parte del
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 33

crecimiento se encontraba en los árboles de antes de este año, los Estados Unidos no
bajo grado y maderas duras inferiores. importaron ninguno de estos tipos de madera,
(HUMPHREY, 1955, p. 286) Era entonces la aunque, como veremos más adelante, los datos
incapacidad creciente de la oferta local de de las importaciones de madera vistos desde su
maderas para responder a una demanda cada uso muestran resultados un tanto distintos, lo
vez mayor de productos forestales, la causa que puede relacionarse con la unidad de
central de la tendencia observada en las medida utilizada.
importaciones estadounidenses, especialmente Por otra parte, los datos de las maderas
en el período inmediatamente posterior a la duras, es decir de las especies de crecimiento
segunda guerra mundial, lo que, a no dudarlo, lento que dominaron las exportaciones
generó una presión cada vez mayor sobre la centroamericanas hasta la década de 1930,
cobertura forestal de diversas áreas del muestran una tendencia al crecimiento
planeta. relativamente sostenida, aunque mucho menos
Ahora bien, los cambios en los pronunciada y con cantidades ostensiblemente
patrones de consumo maderero que se menores que las de las maderas blandas.
expresan en la ampliación del número de
maderas exportables y a la vez en la Gráfico 3- Estados Unidos: importaciones de madera
según tipo (maderas blandas y maderas duras) en
promoción de las “plantaciones” de árboles de billones de pies tablares (1889-1955)

crecimiento rápido, son también claramente


visibles en las estadísticas estadounidenses de
la época.
Demos un breve vistazo a algunos de
los datos e interpretaciones provenientes del
país del norte, convertido, en este período, en
el principal importador de maderas Fuente: Elaboración propia a partir de WRIGHT, Gavin.
centroamericanas y, presumiblemente, de “Lumber production, imports, and exports, by softwoods
and hardwoods: 1799-2000”. Tabla Db423-431 en
otros países. CARTER, Susan B., GARTNER, Scott Sigmund,
HAINES, Michael R., OLMSTEAD, Alan L., SUTCH,
El Gráfico 3 nos muestra con claridad Richard y WRIGHT, Gavin. Historical Statistics of the
United States, Earliest Times to the Present: Millennial
el crecimiento vertiginoso de las Edition. New York: Cambridge University Press. 2006.
http://dx.doi.org/10.1017/ISBN-9780511132971.Db379-
importaciones estadounidenses de madera 457
según su tipo, siendo espectacular el avance de * Los años 1920, 1921, 1922, 1930, 1931, 1932, 1933 y
1934 registraron montos inferiores a los 50 millones de
las maderas blandas, compuestas pies tablares por lo que no fueron consignados.

mayoritariamente por las especies de


Además, el inicio de las importaciones
crecimiento rápido -buena parte de ellas
de este tipo de maderas es más tardío, al menos
“cultivadas” - a partir de 1918. De hecho,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 34

en cantidades dignas de registrarse en la militares y de los requerimientos del


fuente consultada. Más que el comportamiento Departamento de Estado estadounidense que
cuantitativo y las tendencias generales de las estimularon el desarrollo de plantaciones de
importaciones estadounidenses de madera, lo balsa en países como Ecuador y Costa Rica.
que aquí nos interesa mostrar con claridad es (GOEBEL, 2013, p. 78-118) Sin embargo, de
que el cambio en los patrones de consumo nuevo el trabajo de Humphrey nos brinda
maderero en los principales países importantes indicios adicionales sobre cambios
importadores de maderas centroamericanas, de menos coyunturales en los patrones de
un consumo suntuario compuesto básicamente consumo de productos forestales en Estados
por una relativamente escasa variedad de Unidos, que nos permiten acercarnos, al menos
maderas “preciosas” de crecimiento lento y parcialmente y de manera provisional, a dar
reposición larga, a un consumo masivo de una respuesta a las interrogantes planteadas.
variedad cada vez mayor de especies de Según este autor, uno de los sectores de
crecimiento rápido y rápida reposición, cuenta la economía cuya demanda creciente había
con sustento empírico al menos en uno de los disparado la demanda agregada de productos
principales mercados madereros mundiales. forestales, era el mercado editorial, pero más
Ahora bien, ante una tendencia tan específicamente el relacionado con la prensa
evidente por parte del mercado escrita.
estadounidense, y presumiblemente de otros Esta industria, que requería de ingentes
mercados de maderas, de importar cantidades de pulpa de madera para la
masivamente las maderas que su producción fabricación de papel, se había convertido a
local era incapaz de suplir, y principios de la década de 1950 en el sector de
consecuentemente expandir su huella forestal la economía que más requería de la
apropiándose de una porción cada vez mayor importación de productos forestales que otrora
del capital forestal de otras regiones del obtenía, en buena medida, de la “producción”
planeta, como el caso centroamericano, vale local. Así, mientras en 1929 los Estados
preguntarse ¿qué industria o industrias Unidos habían importado un total de 4.845
ejercían mayor presión sobre los bosques a millones de libras de papel periódico, en 1949
nivel global? O en otras palabras, ¿será las importaciones ascendían a 6.634 millones
posible dimensionar este cambio cualitativo y de libras.(HUMPHREY, 1955, p. 286)
cuantitativo tanto en la oferta como en la A pesar de esto, la producción local de
demanda de productos forestales? este rubro iba en aumento, por lo que las
Ya algunas investigaciones han dado importaciones de pulpa de madera crecían, a
cuenta de la particular utilidad de la balsa en inicios de los cincuenta, a un ritmo menor que
la construcción de diversos pertrechos el de otros productos forestales (HUMPHREY,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 35

1955, p. 290), especialmente los relacionados


con la construcción. Lo cierto es que parte de
la diversificación de la oferta exportable
centroamericana que planteamos aquí como
hipótesis, se encuentra entonces relacionada
con visibles cambios en los patrones de
consumo madereros. Estos son observables
también, en la evolución de las importaciones
de maderas industriales según su uso.
Así, el Gráfico 4 nos muestra con Fuente: Elaboración propia a partir de WRIGHT, Gavin.
“Production, exports, and imports of timber products, by
claridad el crecimiento vertiginoso de las use: 1900-2000.” Tabla Db409-422 en CARTER, Susan
importaciones estadounidenses de madera de B., GARTNER, Scott Sigmund, HAINES, Michael R.,
OLMSTEAD, Alan L., SUTCH, Richard y WRIGHT,
uso industrial, es decir, de bajo costo relativo. Gavin. Historical Statistics of the United States, Earliest
Times to the Present: Millennial Edition. New York:
De hecho, entre 1900 y 1915 no se Cambridge University Press. 2006.
http://dx.doi.org/10.1017/ISBN-9780511132971.Db379-
registran importaciones considerables de estos 457
tipos de madera, mientras que hacia mediados Notas:
del siglo XX se importaba la nada desdeñable 1. Hasta 1949, importaciones netas, a partir de entonces,
importaciones totales.
cantidad de 1610 millones de pies cúbicos de * Los años 1927, 1938, 1939, 1948 y 1949 registraron
montos inferiores a los 2.5 millones de pies cúbicos por
madera en una tendencia secular siempre lo que no fueron consignados.

creciente y con relativamente escasas y no


Como se observa en el Gráfico 5, la
muy marcadas variaciones coyunturales.
única madera industrial importada por los
Ahora bien, los datos desagregados por
Estados Unidos en cantidades verdaderamente
usos industriales específicos nos dan cuenta de
relevantes a lo largo de todo el período 1900-
los cambios ostensibles en la demanda de
1955 es la madera para pulpa, destinada,
madera –y la consecuente diversificación de la
mayoritariamente a la fabricación de papel de
oferta- de los que hemos venido hablando.
diferentes tipos. Es este tipo de maderas el que

Gráfico 4- Estados Unidos: importaciones de


de hecho marca la tendencia secular de
madera para uso industrial (en millones de pies crecimiento sostenido de las importaciones
cúbicos) 1900-1955
madereras estadounidenses en su conjunto. La
diversificación es visible, sin embargo, hacia
mediados del siglo XX.
En efecto, a partir de la década de 1940,
Estados Unidos comienza a importar madera
en troza y aserrada de relativamente bajo costo,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 36

lo que se encuentra relacionado, entre otros 9780511132971.Db379-457

factores, con el auge de la construcción de Notas:


1. Hasta 1949, importaciones netas, a partir de entonces,
viviendas y los requerimientos de madera para importaciones totales.
* Los años 1927, 1938, 1939, 1948 y 1949 registraron
la construcción de pertrechos militares, así montos inferiores a los 2.5 millones de pies cúbicos por
como de madera contrachapada o plywood, lo que no fueron consignados

utilizada, tanto para uso industrial como


En suma, nuevos y crecientes usos de la
doméstico. Esta diversificación en términos
madera en los principales países importadores
cualitativos e incremento en términos
de productos forestales centroamericanos, que
cuantitativos de la demanda de maderas en el
a un tiempo consolidaban dicha posición,
país del norte coincide, tanto en sus
incidieron profundamente en la lógica de la
características, como en su ritmo e intensidad,
explotación forestal en diversas regiones del
con los cambios en la oferta exportable y el
planeta, que paulatinamente fueron transitando,
ritmo de las exportaciones de madera en
visto desde la perspectiva del Sistema-Mundo
diversos países y regiones del orbe, incluso en
de Inmanuel Wallerstein, y en su dimensión
aquellos dotados de bosques cuyas maderas,
específicamente forestal, de una arena exterior
antes de este proceso de “comoditización” del
o semi-periferia a una periferia clásica
recurso, carecían virtualmente de valor
(WALLERSTEIN, 1989, p. 425-485), donde
comercial. (TUCKER, 2000, p. 345-363 y
como ya se mencionó, se pasó de producir
388-414)
bienes costosos y exóticos cuyo consumo
estaba limitado a las sectores acomodados de
los centros capitalistas, a productos de bajo
costo y consumo masivo (WILLIAMS, 2007,
Gráfico 5- Estados Unidos: importaciones de
madera de uso industrial por uso (en millones de
p. 118), siendo este un factor decisivo en la
pies cúbicos) 1900-1955 aceleración de los procesos deforestadores
alrededor del globo con consecuencias
particularmente dramáticas en los países
tropicales. Consideramos, de esta manera, que
la tesis de Williams sobre la forma en que se
masificaron los productos o bienes derivados
de la explotación forestal y sus consecuencias
Fuente: Elaboración propia a partir de WRIGHT,
Gavin. “Production, exports, and imports of timber en la consolidación de la condición periférica o
products, by use: 1900-2000.” Tabla Db409-422 en
CARTER, Susan B., GARTNER, Scott Sigmund, marginal de la inserción “definitiva” de
HAINES, Michael R., OLMSTEAD, Alan L., SUTCH,
Richard y WRIGHT, Gavin. Historical Statistics of the Centroamérica en el mercado mundial
United States, Earliest Times to the Present: Millennial articulado, encuentra suficiente asidero
Edition. New York: Cambridge University Press. 2006.
http://dx.doi.org/10.1017/ISBN- empírico, al menos desde la economía forestal,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 37

sin que esto nos haga caer en la trampa del países que, hacia finales del siglo XIX, apenas
determinismo teleológico o finalista. comenzaban su tránsito –por demás
Ahora bien, el mercado incompleto- hacia la modernización capitalista
estadounidense, sin embargo, no era el único como lo fue el caso del Perú, que importaba
en liderar la explotación económica de ingentes cantidades de esta y otras maderas
determinadas especies de bosque provenientes de Centroamérica. (GOEBEL,
centroamericano, pues de hecho, como 2014, p. 339-377) Aunque en estos casos el
acabamos de ver su huella forestal se panorama no está del todo claro, lo cierto es
expandió especialmente al despuntar el siglo que algunos autores han dado cuenta de la
XX. existencia de vastas redes de comercialización
Países europeos como Alemania, de maderas a ambos lados del Océano Pacífico,
Francia y Gran Bretaña, entre otros, tenían una donde por ejemplo las maderas “baratas”
larga tradición de explotación forestal de explotadas masivamente en Oregón, llenaron
maderas preciosas provenientes de los las necesidades de construcción de ciudades y
trópicos, destinadas especialmente a la países que ya para finales del siglo XIX, no
fabricación de muebles finos, instrumentos eran autosuficientes en maderas para la
musicales y otros bienes suntuarios, como ya construcción, como es el caso de Victoria
se mencionó, aunque en un contexto de (Australia), especialmente después de los
escasez creciente de maderas que dominaba el excesos que siguieron a la fiebre del oro, y que
escenario de la comercialización de dicho bien fue abastecida con la resistente madera de
desde finales del siglo XIX y principios del secoya, utilizada en la elaboración de
XX, los bosques tropicales se comenzaban a durmientes para el ferrocarril. (WILLIAMS,
concebir simplemente como una fuente de 1997, p. 175) Dentro de estos países del
maderas, independientemente de su tipo Pacífico, deficitarios en la “producción”
(WILLIAMS, 2006, p. 373), lo que parece maderera, Williams destaca el hecho de que
confirmar el creciente proceso de masificación Ecuador, y precisamente Perú, mostraron ser
por el que atravesaron los productos forestales mercados lucrativos para los empresarios
en general, que terminó por ejercer una madereros asentados a lo largo de la costa del
presión ingente y de carácter global sobre la Océano Pacífico. Este carácter deficitario y por
cobertura forestal del planeta y ya no sólo consiguiente dependiente de maderas
sobre las regiones dotadas de bosques de extranjeras, por la deforestación acelerada que
donde se extrajeran maderas finas. supuso la introducción y generalización de
Esto se expresa también en la diversas actividades económicas como la
creciente importación de maderas de bajo minería, la ganadería y la agricultura de
precio como el Espavel incluso por parte de exportación, se presentó en los otros países de
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 38

la cuenca del Pacífico, con la notable Gráfico 6, en todos los países centroamericanos
excepción de Nueva Zelanda, país en el que se a excepción del El Salvador, el área ocupada
desarrolló una floreciente industria maderera. por bosques y montes era superior a la
(WILLIAMS, 1997, p. 175) No resulta dedicada a los cultivos en general, y de hecho
extraño, entonces, que maderas de bajo valor competía más con el espacio dedicado a los
pero resistentes y útiles, especialmente para el pastos para la ganadería que con los “productos
trabajo en construcción como el espavel, estrella” de la agroexportación
fuesen exportadas desde Centroamérica a centroamericana, como lo fueron el café, el
países que, como Perú, desde hacía mucho banano, y la caña de azúcar entre otros. De
tiempo requerían de ingentes cantidades de hecho en el estudio que reporta estos datos, se
este tipo de productos forestales. señalaba con preocupación que, si bien los
Se trata, en suma, de una huella cultivos permanentes eran los más importantes
forestal de carácter global y a la vez en lo que a su contribución económica a la
diferenciada, donde los países capitalistas economía regional se refiere, estos ocupaban
avanzados y otros que aceleraban sus procesos únicamente el 20.6% de las tierras en fincas, lo
internos de modernización capitalista, cual representaba apenas el 6,8% de la
requerían de ingentes cantidades de madera, superficie territorial de la región
especialmente para el consumo masivo centroamericana. (CEPAL, FAO, OIT, IICA,
crecientemente diversificado. SIECA, OCT y OEA, 1973, p. 32.)
Y es que los datos disponibles parecen
corroborar, que, hacia mediados del siglo XX
y a pesar de los procesos seculares de
expansión y consolidación de cultivos
comerciales como el café y el banano, el
desarrollo de actividades ganaderas, la
expansión urbana y el desarrollo industrial, y
otros tantos procesos productivos que Gráfico 6- Centroamérica: participación porcentual
de los distintos usos del suelo en la superficie total
supondrían una reducción notoria del espacio agropecuaria, circa, 1960*
forestal y consecuentemente de la oferta 150%
100%
maderera, la mayor parte de los países 50%
centroamericanos estaban dotados de un área 0%

forestal considerable. Lo anterior


independientemente de si se trataba de
SUPERFICIE EN CULTIVOS PASTOS
bosques “cultivados” o bosques biodiversos. MONTES Y BOSQUES
En efecto, como se observa en el Fuente: Elaboración propia a partir de: CEPAL, FAO,
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 39

OIT, IICA, SIECA, OCT, OEA. Tenencia de la Tierra


y Desarrollo Rural en Centroamérica, San José, C.R.:
EDUCA, 1973, pp. 30-31. * En el estudio se utilizaron
Censos agropecuarios de distintos años: Guatemala,
1950, El Salvador, 1961, Honduras, 1965, Nicaragua,
1963 y Costa Rica, 1963.

Los bosques, que para los autores


representaban un claro reflejo de la
subutilización del territorio, junto con el
desarrollo de otras actividades de escaso valor Fuente: la misma del Gráfico N° 6. Elaboración propia.
agregado y escasamente tecnificadas como la
ganadería (CEPAL, FAO, OIT, IICA, SIECA, Lo cierto es que, no parece caber la

OCT y OEA, 1973, p. 32.), dominaban, aún menor duda de que Centroamérica era un

hacia la década de 1960, el paisaje rural atractivo mercado para el negocio forestal

centroamericano. Los casos guatemalteco y masivo del que hemos procurado dar cuenta, al

costarricense son los más representativos del estar dotada, aún para la década de 1960, de

peso de los bosques en la estructura agraria, al una vasta área de bosques que insertar al

representar este uso del suelo un 42% y un mercado mundial, siguiendo un patrón que, si

39% respectivamente de la superficie total bien cambiante en su lógica y dinámica

agropecuaria. Les sigue Nicaragua con un internas, es de largo aliento, y, como hemos

notorio 28% y a la saga se encuentra El procurado mostrar en el presente trabajo, hunde

Salvador con un 15% de la superficie sus raíces, al menos, en el período colonial

agropecuaria ocupada por montes y bosques. taerdío. No se trataba, en suma, de que las

(Ver Imagen 4) tierras forestales eran inexplicablemente

El caso de Honduras, lo hemos extensas y las dedicadas a actividades más

reservado para el final pues presenta el claro rentables fuesen irracionalmente exiguas.

inconveniente de la carencia de datos sobre el Detrás de lo que mostraban los datos hacia el

espacio ocupado por pastos para la ganadería, momento del estudio referido, habían siglos de

con lo que el 78% consignado al especio explotación forestal con miras a la

forestal claramente debe de estar comercialización directa de maderas y otros

sobreestimado. productos forestales, en una actividad que,


dada la elevada rentabilidad que representaba
Imagen 4- Centroamérica: uso del suelo forestal
como porcentaje de la superficie total agropecuaria,
para los agentes económicos que la llevaban
circa, 1960 adelante, se resistía a morir. Inclusive, países
como Costa Rica, y presumiblemente otros en
la región impulsaron leyes, políticas y
estrategias desde mediados del siglo XIX, para
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 40

proteger el patrimonio forestal público ante el profundamente relacionados con el proceso de


“despilfarro” -económico- que representaba la modernización capitalista que experimentó la
destrucción de los bosques en zonas carentes región a lo largo del siglo XX. Entre ellos
de caminos adecuados para transportar y destacan el crecimiento demográfico y el
posteriormente comercializar las maderas. desarrollo urbano a él asociado, la colonización
(GOEBEL, 2013, p. 225-291) Los autores del agrícola, -especialmente del Caribe
trabajo al que acabamos de hacer referencia, Centroamericano- y el fomento de actividades
obviamente imbuidos de su contexto que, como la ganadería y la agricultura
económico-social y también del clima comercial (PNUMA y CCAD, 2005, p. 35 y
académico y cultural del momento, señalaban 52), trajeron consigo una profunda
que, “una gran proporción de las tierras de reorganización productiva del territorio. Si bien
Centroamérica (28 por ciento) es apta para no dudamos del peso combinado de estos
cultivos permanentes. Parte de ellas, dentro de factores en la deforestación acelerada que
las estructuras actuales, se dedica a experimentó la región en el siglo XX,
actividades poco rentables (ganadería consideramos que la propia dinámica comercial
extensiva) o que prácticamente no cumplen de las maderas y otros productos forestales de
ninguna función económica o social para la que hemos procurado dar cuenta, también
los países (los montes y los bosques)”. incidió, de manera notable, en la drástica
(CEPAL, FAO, OIT, IICA, SIECA, OCT y reducción del bosque en Centroamérica y que
OEA, 1973, p. 34. El destacado es nuestro.) sus consecuencias socio-ambientales, por lo
Al momento en que el referido estudio tanto, no han sido exiguas. Desde nuestra
veía la luz, empero, tenía lugar en la región el perspectiva, entonces, existe un sesgo
proceso de deforestación más intenso que productivista en los estudios históricos y
conocía su historia en los últimos quinientos recientes que abordan temáticas relacionadas
años. En efecto, estudios recientes han con el ambiente regional, lo que ha conducido
estimado que entre 1940 y 1990, a sobreestimar el peso del capitalismo agrario
desaparecieron dos terceras partes de estos en el cambio socioambiental y,
bosques centroamericanos, al punto que la simultáneamente, a subestimar el peso de otras
destrucción total de la cobertura forestal de la actividades extractivas que, como la
región ocurrida entre 1950 y 1990 fue mayor a explotación forestal con fines comerciales,
la de los quinientos años anteriores. (PNUMA ostentan una huella histórico-ecológica
y CCAD, 2006, p. 35-36) profunda, y que sólo es observable, con cierta
Los mayores motores de esta claridad en el largo aliento.
deforestación sin precedentes, a decir de los De esta manera, consideramos que el
estudios mencionados, se encuentran presente trabajo constituye una primera
A Goebel-Mc Dermott. Diálogos, v.23, n.1, (2019) 5-45 41

aproximación a la dinámica global de la BLANCO, Edgar. “Medio Ambiente y


Desarrollo: efectos y resultados de las
comercialización de maderas en
actividades productivas y la legislación
Centroamérica y las transformaciones socio- ambiental sobre la naturaleza y las condiciones
de vida de la población, en la Región
ambientales aparejadas a dicho proceso, al que
Chorotega de Costa Rica. 1990-2015”, en
se ha concebido como complejo, Diálogos, Revista Electrónica de Historia, Vol.
17, Núm. 2, p. 3-30, 2016b.
multidimensional y al tiempo estructural.
Quedamos en espera de investigaciones CASTRO, Guillermo. Naturaleza y Sociedad
en la Historia de América Latina. Panamá:
futuras que amplíen tanto la base empírica
Centro de Estudios Latinoamericanos (CELA).
como el aparato analítico de esta 1996.
investigación, pero estaremos ampliamente
CAYUELA, Luis. Dedorestación y
satisfechos si la consideración de los autores fragmentación de bosques tropicales montanos
en los altos de Chiapas. Efectos sobre la
del estudio citado sobre los “montes y los
diversidad de árboles. Memoria presentada
bosques” como actividad sin función para optar al grado de Doctor por la
Universidad de Alcalá. Alcalá de Henares,
económica y social para los países de la
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región, pueda al menos ser cuestionada por de Ecología, enero de 2006. En la biblioteca
digital de la Universidad de Alcalá:
quienes nos hayan honrado con la lectura de
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