Você está na página 1de 15

PRIMERA Y SEGUNDA VENIDA

Para entender lo que dice la Biblia acerca de “Su Manifestacioó n”


y de “Su Venida” tenemos que ver cuaó les son las palabras en el
original, y eso probablemente cambiaraó mucho nuestras teoríóas
y doctrinas del “evento al final del tiempo”.

Leemos la palabra “aparicioó n” o “venida” en muchos versíóculos, y


asumimos que es una sola palabra: “aparecer”. Pensamos
ademaó s que eó sta significa “venir, mostrarse; como si EÉ l no
estuviera y de pronto apareciera”.

El problema es que tanto en Griego como en Hebreo, es otra


palabra por completo diferente y con otro significado.
Hay siete palabras principales en el original Griego que son
traducidas como “aparecer”, “manifestacioó n” o “venida”; estas
son:
APOKALUPSIS
1 Pedro 1:7“Para que sometida a prueba vuestra fe, mucho maó s
preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con
fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea
manifestado Jesucristo…
La palabra “manifestado” aquíó es APOKALUPSIS (#602) y
significa revelacioó n, develacioó n, destapar; exponer a la vista lo
que habíóa estado escondido.
Un descubrimiento, la eliminacioó n de una cubierta. Fuente:
Thayers Leó xico Griego-Ingleó s del Nuevo Testamento, 1889
Edicioó n

Apocalipsis (dos palabras griegas, apokalupsis y apokalupto


significa aproximadamente la misma cosa) Literalmente,
significa la eliminacioó n de una cubierta o un velo. Dios a menudo
ofrece la interpretacioó n de la Escritura en la Escritura. Hay una
Escritura que nos da la clave de la palabra, velo. Hebreos 10: 19-
20 dice: Asíó que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el
Lugar Santíósimo por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo
y vivo que eó l nos abrioó a traveó s del velo, esto es, de su carne ; El
apocalipsis es la eliminacioó n del velo de nuestra carne. En la
Escritura, que es a la vez progresivo y el fin de los tiempos
acontecimiento repentino.
Hay una revelacioó n de la sustancia. No se trata soó lo de verlo a EÉ l
en lo natural, sino de tener una revelacioó n por medio de Dios de
la Verdad de Quieó n es EÉ l.
“De tal manera que nada os falta en ninguó n don, esperando la manifestacioó n de
nuestro Senñ or Jesucristo”. (1 Corintios 1:7)

La palabra “manifestacioó n” aquíó es APOKALUPSIS Es traducida


como “manifestacioó n” o “venida”, pero significa ser revelado.
No estamos esperaó ndolo aquíó para que se presente, sino para
que sea revelado.
¡Una cosa no puede ser revelada si no estaó ; debe estar ahíó para
poder ser destapada!
Romano 2:5
Gaó latas 1:12
Efecios 1:17
PAROUSIA
“Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Senñ or. Mirad coó mo el
labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que
reciba la lluvia temprana y la tardíóa. Tened tambieó n vosotros paciencia, y afirmad
vuestros corazones; porque la venida del Senñ or se acerca”. (Santiago 5:7,8)

La palabra “venida” aquíó es PAROUSIA (#3952) y significa


presencia, hacerse presente, estar a mano.
 Mateo 24:3, 27, 37
3 Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron
aparte,
diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin
del siglo?
27 Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente,
así será también la venida del Hijo del Hombre.
37 Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre.
 1 Corintios 15:23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias;
luego los que son de Cristo, en su venida.
 1 Tesalonicenses 2:19; Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o
corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo,
en su venida?
 3:13; para que sean afirmados vuestros corazones, irreprensibles en santidad
delante de Dios nuestro Padre, en la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos
sus santos.
 4:15Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos,
que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que
durmieron.
 2 Tesalonicenses 2:1, 1 Pero con respecto a la venida de nuestro Señor
Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos
 8, Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu
de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida;
9 inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y
prodigios mentirosos,

PHANEROO: Declararse manifiestamente en la verdadera


naturaleza (Strong’s #5319) Esta Palabra griega se traduce como: poner en
evidencia, presentarse, aparecer, comparecer, conocer, demostrar, descubrir, manifestar, mostrar
Colosenses 3:4 Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros
también seréis manifestados con él en gloria.

1 Pedro 5:4 Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la


corona incorruptible de gloria.

1 Juan 2:28; Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando se manifieste,
tengamos confianza, para que en su venida no nos alejemos de él avergonzados.

3:2 Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de
ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos
tal como él es.

EPIPHANEIA
“Te encarezco delante de Dios y del Senñ or Jesucristo, que juzgaraó a los vivos y a los
muertos en su manifestacioó n y en su reino…” (2 Timoteo 4:1)

La palabra “manifestacioó n” aquíó es EPIPHANEIA (#2015)


mostrarse; resplandor, brillo hacerse visible, dar luz (Strong’s
#2015)
1 Timoteo 6:14 que guardes el mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta
la aparición de nuestro Señor Jesucristo,
2 Timoteo 1:10; pero que ahora ha sido manifestada por la aparición de
nuestro Salvador Jesucristo, el cual quitó la muerte y sacó a luz la vida y la
inmortalidad por el evangelio,
8 Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor,
juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su
venida.
Tito 2:13 aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa
de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,

.
EMPHANIZO: Exhibirse en persona (Strong’s #1718)
Hebreos 9:24Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del
verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;

OPTOMAI: Ver, ser visto aparecer (Strong’s #3700)


Hebreos 9:28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de
muchos; y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvar a los que le
esperan.

PHAINO: Brillar (Strong’s #5316) Mateo 24:30


Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas
las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con
poder y gran gloria.

Conclusioó n:

¿Podraó esto ayudarnos a entender que Cristo debe ser


REVELADO EN NOSOTROS? ¡EÉ l no estaó viniendo A nosotros, la
“venida del Senñ or” es EN NOSOTROS! ¡EÉ l es revelado donde estaó
y tal como es!

Maó s adelante analizaremos la diferencia en los significados de


estas palabras, por ahora vamos a continuar con el siguiente
aspecto
Debemos entender que Dios ha establecido una primera y una
segunda venida, nunca una tercera. Hay dos diferentes reinos y
la Cruz los divide.
Para ayudarnos con esto vamos a considerar las siguientes
escrituras:
“Mas lo espiritual no es primero, sino la animal; luego lo
espiritual. El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo
hombre, que es el Senñ or, es del cielo”. (1 Corintios 15:46,47)
Este es el orden que Dios ha establecido y estaó en todas las
cosas. Primero lo natural, no lo espiritual; luego lo segundo, lo
espiritual, el Senñ or.
“No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se
ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se
ven son eternas”. (2 Corintios 4:18)
Todo lo primero es de la tierra, es solo por un tiempo y llegaraó a
su fin. Todo lo segundo es espiritual, no se ve con los ojos
naturales, es eterno en los cielos y no tendraó fin.

“Y diciendo luego: He aquíó que vengo, oh Dios, para hacer tu


voluntad; quita lo primero, para establecer esto uó ltimo”.
(Hebreos 10:9) Con respecto a Su venida o a Su manifestacioó n, EÉ l
vino en lo primero como lo primero: 
“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envioó a su
Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley…” (Gaó latas 4:4)  “Sino
que se despojoó a síó mismo, tomando forma de siervo, hecho
semejante a los hombres…” (Filipenses 2:7) 
“Asíó que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, eó l
tambieó n participoó de lo mismo, para destruir por medio de la
muerte al que teníóa el imperio de la muerte, esto es, al diablo…
Porque ciertamente no socorrioó a los aó ngeles, sino que socorrioó
a la descendencia de Abraham”. (Hebreos 2:14,16) EÉ l, por medio
de la Cruz llevoó todo lo primero a su fin y lo quitoó . Ahora Su
venida o manifestacioó n es en lo segundo, es en el Espíóritu y por
medio del Espíóritu, y tiene la intencioó n de establecer lo segundo,
lo cual es el Senñ or del cielo. Esta es una venida eterna, es una
continua manifestacioó n en ese aó mbito, en ese mundo y en esa
creacioó n que EÉ l ha levantado en Su Resurreccioó n. ¡Lo segundo
NO TIENE FIN!
“A eó l sea la gloria en la iglesia en Cristo Jesuó s por todas las
edades, por los siglos de los siglos. Ameó n”. (Efesios 3:21) Muchos
cristianos estaó n esperando hoy el “fin del mundo”, pero ya
sucedioó . En la Cruz Jesuó s llevoó a su fin el PRIMER mundo, la
primera era, el primer Pacto y al primer hombre. El planeta no se
destruyoó , pero toda la estructura del Antiguo Pacto y la manera
de Dios de tratar con el hombre llegaron a su FIN. Luego Cristo
sacoó lo SEGUNDO: un nuevo mundo, un nuevo cielo, una nueva
tierra y un nuevo Pacto. Este “mundo” NO TENDRAÉ FIN, es
eterno y es el lugar de Su “segunda” venida, de Su “segunda”
manifestacioó n. 6
III. DEBEMOS ENTENDER LA MANIFESTACIOÉ N DEL SENÑ OR EN
TERMINOS DE LA CRUZ La Cruz es central y esencial en el Plan
eterno de Dios. El Senñ or no se “manifestoó ”, ni se “manifestaraó ” o
“vendraó ”, separado de la Cruz. Su “manifestacioó n” es en la
muerte, sepultura y resurreccioó n. Pablo dice que la Cruz de
Cristo es “...el misterio que habíóa estado oculto desde los siglos y
edades, pero que AHORA ha sido manifestado a sus santos”
(Colosenses 1:26). La gloria de este misterio es “...Cristo en
vosotros, la esperanza (expectativa: lo que Israel esperaba y que
ya hemos recibido) de gloria... la cual actuó a poderosamente en
míó” (Colosenses 1:27,29). La Cruz estaba en el corazoó n de Dios
desde antes de la fundacioó n del mundo, y estaba escondida en el
Testimonio, en los tipos y sombras de la Ley y en las profecíóas de
los profetas. Todo esto seríóa perfeccionado, cumplido y
manifestado por el Senñ or en SU VENIDA. ¡Y asíó fue, en la Cruz
todo fue consumado! Esta Obra Consumada, este Plan de Dios
continuó a hoy siendo obrado en el pueblo por medio del Senñ or en
SU VENIDA. Aquíó es donde necesitamos diferenciar las palabras
“manifestacioó n, aparecer, presentarse…” Para eso veamos
Hebreos 9:24, 26, 28:  “Porque no entroó Cristo en el santuario
hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para
presentarse ahora por nosotros ante Dios…” Hebreos 9:24  “De
otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces
desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumacioó n de
los siglos, se presentoó una vez para siempre por el sacrificio de síó
mismo para quitar de en medio el pecado…” Hebreos 9:26  “Asíó
tambieó n Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados
de muchos; y apareceraó por segunda vez, sin relacioó n con el
pecado, para salvar a los que le esperan…” Hebreos 9:28 Cada
una de estas palabras es diferente en el original. 7 La palabra
“presentarse” en el versíóculo 24 es EMPHANIZO (Strong’s
#1718) y significa mostrarse en persona. (JW Luman en
“Exeó gesis versíóculo por versíóculo de Hebreos”, lo explica de la
siguiente manera: “Porque no entroó Cristo en el santuario hecho
de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para…”
mostrarse ahora en Su Cuerpo, en la Iglesia que es una con EÉ l,
colocaó ndose ante Dios redimida por la sangre del Cordero). EÉ l,
ademaó s de estar “ahíó”, se muestra tal como es ahora: como
Cabeza del Cuerpo, como Cabeza de la Iglesia, como Cabeza de
aquellos que estaó n unidos a EÉ l. Nosotros pensamos que es Jesuó s
Y nosotros, pero no es asíó como EÉ l y nosotros nos mostramos
ante Dios. EÉ l se muestra en Persona: Cabeza y Cuerpo. La palabra
“presentoó ” en el versíóculo 26 es PHANEROO (Strong’s #5319) y
significa declararse manifiestamente, hacerse visible. (JW
Luman en “Exeó gesis versíóculo por versíóculo de Hebreos”, lo
explica de la siguiente manera: “… pero ahora en la
consumacioó n…” por medio de la ofrenda de Síó mismo HECHA
una vez por todo, manifiestamente se declaroó como el fin de la
era del Antiguo Pacto, mostraó ndose a Síó mismo como el
verdadero sacrificio requerido por Dios para quitar el pecado).
Esta venida fue hecha visible cuando EÉ l, como el Cordero, murioó
en la Cruz y quitoó el pecado. La palabra “apareceraó ” en el
versíóculo 28 es OPTOMAI (Strong’s #700) y significa contemplar,
ver, mostrarse. (JW Luman en “Exeó gesis versíóculo por versíóculo
de Hebreos”, lo explica asíó: “Asíó tambieó n Cristo fue ofrecido una
sola vez…”como el primer hombre, y ha venido de nuevo como el
segundo hombre en la resurreccioó n, y se muestra a Síó mismo
como la plena Salvacioó n de todos aquellos que dirigen sus
corazones en conocerlo a EÉ l). Esta manifestacioó n es para
aquellos que lo buscan a EÉ l; a ellos EÉ l se mostraraó . “…y apareceraó
por segunda vez, sin relacioó n con el pecado, para salvar a los que
le esperan”. En el original la palabra “vez” no estaó . Aquíó no se
habla de “otra vez”; que lo segundo es como lo primero.
Recordemos que lo primero es terrenal y temporal, y que lo
segundo es espiritual, es eterno y es el Senñ or del cielo. Asíó es
como EÉ l se manifiesta ahora: “sin relacioó n con el pecado”; ya no
se manifiesta en un cuerpo de carne para tratar el pecado, sino
en el Cuerpo de Su Resurreccioó n, en la Vida y PLENA Salvacioó n.
EÉ l se manifiesta en Su Iglesia, en Su Cuerpo, y se manifiesta con
la intencioó n de que aquellos que lo buscan puedan verlo tal
como es, esto es, en la Verdad de la Cruz. 8 Ahora que
entendemos adecuadamente los significados de estas tres
palabras traducidas como “presentarse o aparecer” en Hebreos
9, tenemos una idea de “La Venida del Senñ or”, y clarificamos lo
que son la primera y segunda venida. Para efectos de este
estudio vamos a ver el versíóculo 26, luego el 28 y por uó ltimo el
24, pues la “manifestacioó n” de Jesuó s en el versíóculo 24 es
subsecuente a Su “manifestacioó n” en el versíóculo 26; eó sta es la
consecuencia de Su primera manifestacioó n, de Su venida a la
tierra a MORIR. HEBREOS 9:26 Ya sabemos que la Cruz siempre
fue el Plan de Dios, siendo determinada desde antes de la
fundacioó n del mundo. El Padre, el Hijo y el Espíóritu Santo
estaban de acuerdo en este Plan. La Palabra estaba con Dios.
Para que este Plan fuera conocido, el Hijo tuvo que salir de Dios,
del cielo: “Y aquella Palabra fue hecha carne y habitoó entre
nosotros” (Juan 1:14). EÉ l se manifestoó en lo primero y conforme
a lo primero. A esta manifestacioó n se refiere Hebreos 9:26 donde
dice: “…pero ahora, en la consumacioó n de los siglos, se presentoó
una vez para siempre por el sacrificio de síó mismo para quitar de
en medio el pecado”. EÉ l salioó de Dios y se manifestoó con un
PROPOÉ SITO, abiertamente declaroó ser el Cordero que quitaríóa el
pecado que la sangre de los toros y machos cabríóos no pudieron
quitar. Cuando EÉ l se manifiesta como el Cordero en la Cruz, se
posesiona del pecado que era del hombre, y por medio de Su
muerte y llevando el juicio de ese pecado, quita el pecado. La
Cruz fue una vez y para siempre. (Hebreos 10:10 – 12) DIOS -
PALABRA 9 Notemos que este versíóculo dice “en la consumacioó n
de los siglos”. Este es el fin de esa era, la era del Antiguo Pacto, la
era de lo primero. No significa el fin fíósico del planeta, sino el fin
de la era entera, con sus habitantes y caracteríósticas de antes de
la Cruz. EÉ l, por medio de Su manifestacioó n como el sacrificio lo
quitoó todo, y por medio de la Cruz cumplioó lo que el Padre le
habíóa enviado a hacer. Por eso dijo: “…Consumado es. Y habiendo
inclinado la cabeza, entregoó el espíóritu” en Juan 19:30. Ahora, EÉ l
no hizo todo esto soó lo por EÉ l, sino por todos nosotros, pues “…si
uno murioó por todos, luego todos murieron” (2 Corintios 5:14).
Es por medio de Su primera manifestacioó n que el asunto del
pecado fue tratado y el juicio de Dios sobre el hombre ejecutado.
Entonces, es por medio de Su manifestacioó n en la Cruz que
entendemos que “Con Cristo estoy juntamente crucificado…”
(Gaó latas 2:20). HEBREOS 9:28 “Asíó tambieó n Cristo fue ofrecido
una sola vez para llevar los pecados de muchos…” Debemos
entender que Cristo en Su “primera” venida, vino como carne
para hacer lo que la Ley no pudo hacer. “Porque lo que era
imposible para la ley, por cuanto era deó bil por la carne, Dios,
enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa
del pecado, condenoó al pecado en la carne” (Romanos 8:3). Por
medio de esta manifestacioó n EÉ l cumplioó lo que Dios le habíóa
enviado a hacer, y dado que esa Obra estaó Consumada, no tiene
que “manifestarse” otra vez de la misma manera. DIOS CUANDO
EÉ L SE MANIFIESTA PARA QUITAR EL PECADO (Hebreos 9:26)
TODO MUERE 10 Su “manifestacioó n” en el versíóculo 28 es para
otro propoó sito. “…y apareceraó por segunda (vez), sin relacioó n con
el pecado, para salvar a los que le esperan”. En esta segunda
manifestacioó n EÉ l no trata el pecado. ¡Ya lo hizo! En esta segunda
venida EÉ l se muestra a la Nueva Creacioó n que fue levantada en
Su Resurreccioó n, como lo nuevo, lo segundo y en el Espíóritu; y es
para aquellos que por medio de la Cruz han muerto con EÉ l al
pecado. A ellos EÉ l se muestra en Vida y como la Vida, y les
permite verlo como la Salvacioó n completa. ¿Adoó nde llevoó EÉ l a
aquellos que levantoó ? “Aun estando nosotros muertos en
pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois
salvos), y juntamente con eó l nos resucitoó , y asimismo nos hizo
sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesuó s” (Efesios 2:5 –
6). Estamos sentados como Uno, como Un Hijo en los lugares
celestiales en Cristo. EÉ l “nos” ha llevado al lugar donde EÉ l estaba
eternamente con el Padre, a Su “hogar”. “Nadie subioó al cielo,
sino el que descendioó del cielo; el Hijo del Hombre, que estaó en el
cielo” (Juan 3:13). Un Hijo descendioó del cielo y Un Hijo regresa
al cielo, la diferencia ahora es que EÉ l nos ha llevado con EÉ l como
Uno; nos ha llevado a la gloria. HEBREOS 9:24 “…para
presentarse ahora por nosotros ante Dios”. Ahora se presenta;
muestra ante la presencia de Dios Su propia Persona, el Cuerpo
de Su Persona, el que ha sido levantado con EÉ l y quien es ahora
Uno con EÉ l. Todo esto es hecho por la Obra de la Cruz. “Asíó seraó
mi palabra que sale de mi boca; no volveraó vacíóa, sino que haraó lo
que yo quiero, y seraó prosperada en Y APARECERAÉ LA SEGUNDA,
SIN RELACIOÉ N CON EL PECADO, PARA SALVAR A LOS QUE LE
ESPERAN (Hebreos 9:28) LEVANTADOS COMO UNO 11 aquello
para que la envieó ” (Isaíóas 55:11). La Palabra de Dios regresa a EÉ l
habiendo cumplido el Plan de Dios. Ahíó es donde la Palabra estaó
y estaraó eternamente. Ahíó es donde NOSOTROS ESTAMOS
AHORA y estaremos eternamente. Aquíó vemos el cumplimiento
de la oracioó n de Jesuó s en Juan 17. “Padre, la hora ha llegado;
glorifica a tu Hijo, para que tambieó n tu Hijo te glorifique a ti…
para que todos sean uno; como tuó , oh Padre, en míó, y yo en ti, que
tambieó n ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que
tuó me enviaste. La gloria que me diste, yo les he dado, para que
sean uno, asíó como nosotros somos uno. Yo en ellos, y tuó en míó,
para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca
que tuó me enviaste, y que los has amado a ellos como tambieó n a
míó me has amado. Padre, aquellos que me has dado, quiero que
donde yo estoy, tambieó n ellos esteó n conmigo, para que vean mi
gloria que me has dado; porque me has amado desde antes de la
fundacioó n del mundo” (Juan 17:1, 21 – 24). Por un lado, esta es
la Verdad y Realidad de nuestra Salvacioó n, lo que Dios ha hecho
por medio de la Obra Consumada en la Cruz. Por el otro,
nosotros Su Iglesia, estamos aquíó en la tierra para ser la
manifestacioó n de eso, a fin de que el mundo crea en EÉ l. El Cristo
Resucitado estaó manifestaó ndose a Su Iglesia como el
cumplimiento de todo lo que Dios planeoó para Su pueblo. EÉ l se
estaó manifestando y mostrando constantemente, como el “todas
las cosas” de la Vida y de la Salvacioó n. EÉ L SE PRESENTA POR
NOSOTROS ANTE DIOS Hebreos 9:24 UN HIJO LEVANTADO 12
Esta manifestacioó n nunca termina, y somos cambiados conforme
lo contemplamos y vemos a EÉ l en Su Verdad. “Por tanto, nosotros
todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria
del Senñ or, somos transformados de gloria en gloria en la misma
imagen, como por el Espíóritu del Senñ or” (2 Corintios 3:18).
CONCLUSIOÉ N Jesuó s no tiene que regresar en lo primero para
tratar lo primero. EÉ l ya lo hizo y el Padre aceptoó esa Obra. Efesios
1:20 dice que Dios resucitoó a Cristo de los muertos y lo sentoó a
Su diestra en los lugares celestiales. ¡La Obra estaó Terminada! EÉ l
ha levantado Su Cuerpo con EÉ l y estaó sentado en los lugares
celestiales EN EÉ L. Nos corresponde a nosotros buscarlo a EÉ l
ahora, para que se MANIFIESTE en nosotros como nuestra Vida.
Esta es Su “venida” o Su “manifestacioó n” en la Iglesia hoy.
“Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros
tambieó n sereó is manifestados con eó l en gloria” (Colosenses 3:4).
Cuando EÉ l se deó a conocer a nosotros como nuestra Vida, nos
veremos vivos soó lo en EÉ l y Uno con EÉ l. ¡Quiera Dios volver
nuestros corazones para verlo a EÉ l de esta manera! ¡POR TANTO,
VEN SENÑ OR JESUS
! 13 ANEXO OTRAS ESCRITURAS CON LA PALABRA
“MANIFESTAR, APARECER…”
APARECER
Mateo 24:30: entonces apareceraó la senñ al del hijo del hombre en el cielo; y
entonces lamentaraó n todas las tribus de la tierra, y veraó n al hijo del
hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria.
Hebreos 9:28: asíó tambieó n cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los
pecados de muchos; y apareceraó por segunda vez, sin relacioó n con el
pecado, para salvar a los que le esperan.
Venida
19. Mateo 24:27: Porque como el relaó mpago que sale del oriente y se
muestra hasta el occidente, asíó seraó tambieó n la VENIDA del Hijo del
Hombre.

20. Mateo 24:37: Mas como en los díóas de Noeó , asíó seraó la VENIDA del Hijo
del Hombre.

21. Mateo 24:39: y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevoó a
todos, asíó seraó tambieó n la VENIDA del Hijo del Hombre.
32. 1 Tesalonicenses 2:19: Porque ¿cuaó l es nuestra esperanza, o gozo, o
corona de que me gloríóe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Senñ or
Jesucristo, en su VENIDA?

33. 1 Tesalonicenses 3:13: para que sean afirmados vuestros corazones,


irreprensibles en santidad delante de Dios nuestro Padre, en la VENIDA
de nuestro Senñ or Jesucristo con todos sus santos.

34. 1 Tesalonicenses 4:15: Por lo cual os decimos esto en palabra del


Senñ or: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la VENIDA
del Senñ or, no precederemos a los que durmieron.

35. 1 Tesalonicenses 5:23: Y el mismo Dios de paz os santifique por


completo; y todo vuestro ser, espíóritu, alma y cuerpo, sea guardado
irreprensible para la VENIDA de nuestro Senñ or Jesucristo.

36. 2 Tesalonicenses 2:1: Pero con respecto a la VENIDA de nuestro Senñ or


Jesucristo, y nuestra reunioó n con eó l, os rogamos, hermanos,

37. 2 Tesalonicenses 2:8: Y entonces se manifestaraó aquel inicuo, a quien


el Senñ or mataraó con el espíóritu de su boca, y destruiraó con el resplandor
de su VENIDA;

38. 2 Timoteo 4:8: Por lo demaó s, me estaó guardada la corona de justicia, la


cual me daraó el Senñ or, juez justo, en aquel díóa; y no soó lo a míó, sino tambieó n
a todos los que aman su VENIDA.
39. Santiago 5:7: Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la VENIDA
del Senñ or. Mirad coó mo el labrador espera el precioso fruto de la tierra,
aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardíóa.

40. Santiago 5:8: Tened tambieó n vosotros paciencia, y afirmad vuestros


corazones; porque la VENIDA del Senñ or se acerca.

41. 2 Pedro 1:16: Porque no os hemos dado a conocer el poder y la


VENIDA de nuestro Senñ or Jesucristo siguiendo faó bulas artificiosas, sino
como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad.

42. 2 Pedro 3:12: esperando y apresuraó ndoos para la VENIDA del díóa de
Dios, en el cual los cielos, encendieó ndose, seraó n deshechos, y los
elementos, siendo quemados, se fundiraó n!

43. 1 Juan 2:28: Y ahora, hijitos, permaneced en eó l, para que cuando se


manifieste, tengamos confianza, para que en su VENIDA no nos alejemos
de eó l avergonzados.

Você também pode gostar