Você está na página 1de 106
a HECHICEROS, fF Klein, Rainer W. Brujas, magos y hechiceros. - 1*. ed.- Buenos Aires: Grupo Imaginador de Ediciones, 2004. 128 p.; 25x17 cm ISBN: 950-768-472-7 1. Literatura Folkidrica. |. Titulo CDD 398.2 llustracién de cubiorta: Ei circulo magico de John Wiliam Waterhouse. El aulor desea expresar su agradecimiento a la Licenciada Elsa Felder, sin cuya colaboracién no hubiera sido posible Ja realizacion de este texto. Primera edicién: 2.000 ejemplares, julio de 2004 Utima reimpresién: 2.000 ejemplares, agosto de 2004 ISBN: 950-768.472.7 Se ha hecho el deposito que establece la Ley 11.723 Copyright by GIDESA Bartolomé Mitre 3749 — Ciudad Auténoma de Buenos Aires Repibiica Argentina IMPRESO EN ARGENTINA - PRINTED IN ARGENTINA Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin la autor zacion escrita de los ttdares del Copyright, bajo las canciones ostablacidac on las leyes, la reproduccién parcial tolal de esta obra por cualquier medio 0 pro- Ccedimiento, incluides la repragratia y el tratamiento invormatico. INTRODUCCION El mundo magico E| mundo magico ha cobrado existencia desde que, en los albores de la humanidad, el hombre se enfrenté con las misteriosas y terribles fuerzas de la naturaleza y con el misterio de su propia existencia. Junto con la formacién de mundos extrahumanos, divinos, es decir, de las diversas religiones, el hombre fue creando un contorno mas cerca- no, mas propio, que fue el de los poderes especiales de algunos seres pa- ra realizar prodigios. Asi nacieron brujas, magos y hechiceros. El mundo magico segun Eliphas Levi Ese mundo magico, segun Eliphas Levi, seu- doénimo bajo el cual el pensador Alfonso Luis Constant ha hecho un vasto y profundo aporte alas llamadas Ciencias ocultas o ciencias hermé- ticas, no es un mundo unitario ni en concepcio- nes ni en valores. Asi clasifica Eliphas Levi ese mundo de la magia al que define como “la ciencia tradicional de los secretos de la naturaleza”: ‘Alfonso Luis Constant, conocido como Eliphas Lev = Adivino Era, en la antigiiedad, “quien se esforzaba por establecer una rela- cién entre el pensamiento de la divinidad y los destinos humanos, a partir de la observacién de signos reveladores, tanto si lo eran como si idos por tales”. Signos que el adivino posterior, “que se jacta de descubrir el porvenir gracias a su portentosa ciencia”, reemplazé por la observacién de supuestas imagenes en la bola de cristal. eran te! = Magico Es “el que dispone a su antojo de poderes misteriosos, capaces de contrariar las leyes de la naturaleza, por la sola virtud de recetas o de formulas”. Brujas, magos y hechiceros BE = Mago Era un sacerdote “cuya funcién consistia no sdlo en observar los as- tros, sino ademas en estudiar la medicina y en general las ciencias na- turales” y su casta reunia sabiduria y poder. = Brujo Es un sacerdote de los pueblos no civilizados, y no resulta mas que un supuesto “magico malo y vengativo”. Y concluye asegurando que “el hechicero es al mago lo que el su- persticioso y el fanatico son al hombre profundamente religioso”. Y coloca a los brujos mucho mas abajo que a los hechiceros, en la escala de las malas artes. La magia blanca y la magia negra Antes de internarnos en el mundo particular de brujas, magos y he- chiceros, hemos de sefalar que todos éstos han el mundo de la magia, unidos en muchas ocasiones con los alquimis- tas y los astrélogos, precursores de los hombres de ciencia. Por eso es necesario, antes de su tratamiento especial, circunscribir lo involucrados en las fronteras del mundo del que son reales habitantes, es decir: el de la magia blanca, el de la magia negra, el de la pre-ciencia y el de la ima- ginacién fantastica o sugestién. iQué es la magia? La magia ha sido definida como la ciencia o el arte que ensefia a ha- cer cosas extraordinarias en contra de las leyes naturales. Por eso se juzgaron como creaciones magicas los descubrimientos de los alqui- mistas y aun la aparicion de los primeros textos salidos de la impren- ta, por su similitud, inconcebible en los manuscritos. Y por ello, tam- bién, al pasar de lo juzgado sobrenatural a la natural comprobacién cientifica, el estudio de los astros pasé de astrologia a astronomia, y el de los elementos, de alquimia a quimica. Es la magia, como arte de lo sobrenatural, la que se dividira en ma- gia blanca y magia negra, de acuerdo con sus fines, que son diametral- mente opuestos. [EB Brujas, magos y hechiceros La magia blanca esta destinada a lo- gros beneficiosos para los humanos, ya sea bajo la forma del otorgamiento de dones preciados, como curacién de en- fermedades, union amorosa de parejas, 0 aun, trabar los malos efectos sobre un ser, de brujos y hechiceros. El mago es, Pues, un benefactor, un personaje vene- rable, tal como ocurre con los Magos de Oriente que, segun el relato biblico, acu- dieron a adorar al nino Jesus, y que de- bieron ser sacerdotes astrdlogos y no re- yes, pues llegaron siguiendo el curso de una estrella. La magia negra, en cambio, engen- draria unas corrientes mas oscuras y ma- ChRecmas GR 1500) lignas que dieron paso a la brujeria y ala Los es eyes. hechicerfa. El brujo y el hechicero recu- Joseph C Leyendecker rren a sus poderes magicos para hacer el mal, para causar dafio, para maldecir, para provocar enfermedades y hasta la muerte; es decir, se trata de seres perversos. La pre-ciencia y la imaginacién fantastica En la pre-ciencia ubicariamos a los al- quimistas, que en la busqueda de la pie- dra filosofal que convertiria todos los metales en oro y el elixir de la eterna ju- ventud, sentaron las bases de la experi- mentacién cientifica. Ya los astrélogos, videntes 0 adivina- dores del porvenir, que atin hoy pululan, entre los que, apartandonos de las cartas natales, exploraron el universo estelar. Y en el de la imaginacién fantastica 0 sugestién, estarian insertos los ilusioni: tas y los echadores de cartas o tarotistas, cuya magia, artificial o sugestiva, no es dafina, salvo que se utilice para el enga- EL alquimista, fio de ingenuos. Sir Wiliam Fetes Douglas Brujas, mages y hechiceros BEA Evolucion de las artes magicas Desde tiempos remotos, la magia, bajo todas sus formas, ocupé un lugar destacado en la sociedad humana, y aun sigue vigente bajo ver- siones actualizadas, pero que tienen sus raices en las antiquisimas practicas. En la Antigiiedad A los magos se hace referencia ya en las primitivas religiones del Oriente. Recordemos, en el Antiguo Testamento, el duelo de magia en- tre Moisés, inspirado por Dios, y un sacerdote mago egipcio. Y en el Nuevo Testamento, la llegada de los tres Magos de Oriente para adorar al recién nacido Mesias. Aquellos magos a quienes hacia el siglo II se los crefa reyes, y que recibieron hacia el siglo VI los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar, fueron sin duda, sacerdotes de la religién del persa Zaratustra, conoci- do luego en Occidente como Zoroastro, un profeta de alrededor del 1200 a.C. y cuyos seguidores, los parsis, emigraron a la India. En la Edad Media Los magos propiamente dichos, junto con los brujos y hechiceros, van a entre- mezclarse, diriamos que maléficamente, con la expresi6n religiosa del cristianis- mo durante el periodo mas oscuro de la Edad Media. El mago pasaa ser el compa- fiero ineludible del caballero andante, ya sea en su version benéfica o maléfica y, convertido en brujo o hechicero, el apo- sentador del mismo Diablo. En esa época, el mago aparece unas veces como adivi- no, otras como nigromante, muchas co- mo astrélogo o alquimista, y algunas co- mo maléfico 0 como simple curandero. Un mago, Merlin, es el mentor y con- sejero del mitico rey Arturo. HE Srujas, magos y hechiceros La ALQuIMIA, DESDE ARABIA A EUROPA jado los conocimientos de la alquimia a Europa, donde se la consideré ciencia medieval; pero en realidad, ya se conocia en la antigua Grecia, hacia el siglo Ill, y tuvo su florecimiento en Alejandria, don- de se supone que Maria la judia inventé el alambique y la coccién al vapor Hamada “bafio de Maria”. Esos conocimientos Ilegaron a interesar a sabios como Roger Bacon o Raimundo Llull, y al monje, luego santificado, Tomas de Aquino; pero los alquimistas iniciales los consideraban magicos y decora- ban sus secretos laboratorios con simbolos esotéricos 0 herméticos, pues creian que, para la realizacion de su obra, necesitaban el auxilio de fuerzas sobrenaturales. Entre los “adivinadores” que han pasado a la his- toria, citaremos al monje irlandés San Malaquias, cuyo libro Profecias, aparecido en el siglo XII, rese- fia las ciento doce divisas de los Papas que ocupa- rian el solio pontificio desde 1124 hasta el fin del mundo, que debiera ocurrir, segiin su obra, en este milenio, En la misma linea profética encontramos a Michel de Notre Dame o Nostradamus, con su libro Las Centurias, que contiene predicciones tales co- mo la de la Primera y la Segunda Guerra Mundial, la ascension del nazismo al poder, la bomba atomica ‘Rita LALIT Wied Bone 0 el asesinato del presidente Kennedy. iY que aun (Nostradamus). profetiz6 que *...en el afio 2001, dos pajaros de fue- go llegados del cielo, destruiran a dos gemelos”! En nuestros dias La astrologia y la prediccion del porvenir por me- dio de las cartas del Tarot, o de otras barajas, ha lle- gado hasta nuestros dias, lo mismo que la astrolo- gia, que nos es comin ver aparecer en forma de pronésticos en periddicos y revistas y en los medios masivos de comunicacién como radio y television y, mas recientemente, a través de redes informaticas mundiales. El ilusionismo, que no es magia sino trucos y sugestién, ha pasado de las funciones populares de rtculopublicadoen una revista los juglares y luego de los “comicos de lalegua’ y —_n##esa sobre la vida de Howcin Brujas, magos y hechiceros [EM artistas circenses, a las grandes salas teatrales con profesionales que han adquirido gran fama como el mitico Houdini y el actual y asombro- so David Copperfield. HD Brujac, magos y hechiceros PRIMERA ‘PARTE El mundo de las brujas y los brujos Desde los albores de la humanidad, al enfrentarse el ser humano con las fuerzas aterradoras de la naturaleza y con sus misterios y, mas tarde, ya “hombre pensante”, con el enigma de la vida y de la muerte, comenzo la humanidad a poblar el mundo con seres que hicieran acce- sible a su comprensin los poderes sobrenaturales. Surgieron, asi, los dioses y los demonios. Pero aquellos dioses primitivos eran amos terribles, muchos de los cuales exigian holocaustos sangrientos y de ellos nacié la multitud de espiritus maléficos que fueron poblando la tierra para hostigar a los hombres. Antiguos dioses como Moloch o Arishman, fueron luego a formar una especie de sintesis con el Diablo cristiano, unas veces como figu- raciones suyas y otras, como demonios auxiliares de su malevolencia. La mujer, denigrada como pérfida ya desde el Génesis pues como Eva, aliada con la serpiente diabdlica, trajo al mundo el pecado original-, y como Lilith, la primera gran rebelde, nada menos que contra el mismo Creador, va a ser la semilla de donde surja toda una casta de féminas demo- niacas, con las lilis o hijas de Lilith. De alli que, en el medioevo, aunque la bruje- ria, la magia y la hechiceria es obra tanto de hombres como de mujeres, entre lo mas maléfi- co y horrendo de la especie se situaba a las bru- jas y las hechiceras perversas, dejando para los hombres el papel de magos o creadores de ma- ravillas y de hechiceros, generalmente alquimis- tas ocupados mas con sus filtros y retortas que con la siembra maligna de dafios, tanto fisicos como espirituales. Lilith. John Collier Brujas, magos y hechiceros MIEN Por eso, nos ocuparemos en primer término del ambito de la bruje- ria y, sobre todo, del de las brujas, hijas dilectas de Satanas. La brujeria Mientras la Biblia trata a los magos con un cierto respeto, descarga to- das sus invectivas contra los brujos y los hechiceros. Recordemos, como ya citamos anteriormente, que en el Antiguo Testamento, a Moisés se lo presenta como mago y en el Nuevo son tres Magos de Oriente los que lle- gan a traer sus presentes de oro, incienso y mirra al nifio Jesus. Fernando Nicolay, en su Historia de las Creencias, denomina ciencias ocultas a aquellas por medio de las cuales se pretende operar maravi- llas por medios secretos, fuera de la ciencia humana y de la accion di- vina. La principal de ellas seria la magia, que “constituye algtin tipo de relacion con espiritus y fuerzas calificadas de rivales de Dios, para producir efectos sobrenatu- rales” y las condena sin hacer distincio- nes; pero precisa que cuando las operacio- nes magicas tienen por finalidad aterrori- zara alguien o producirle algun dafio han de denominarse brujerias. Y ésa es la cla- Jul una bj se de magia mas execrable: la de los bru- Tonohies Hi Mawes jos y las brujas. Y la Biblia condena expresamente no sélo a brujos y hechiceros si- no también a los astrdlogos. Leemos en el Deuteronomio: (...) que no haya adivinos, ni nadie que consulte a los astros, ni hechiceros, que no se halle a nadie que practique encantamientos 0 consulte los espiritus; que no se halle ningun adivino o quien pregunte @ los muertos. Porque Yahvé aborrece a los que hacen estas cosas... Deuteronomio 18, 10-12 Y hasta parece que el mismo Diablo abomina de la brujeria aunque se sirva de quienes la ejercen, ya que reza el proverbio popular: “El Dia- blo, tarde o temprano, acaba por retorcer el cuello a los brujos”. Las brujas y los brujos eran considerados verdaderos agentes de la desgracia y causantes de todo tipo de calamidades, por lo que eran te- midos, y violentamente rechazados y reprimidos. La caza de brujos, y, HIER trujas, magos y hechiceros sobre todo, de brujas, fue multitudinaria en la Edad Media, tanto entre catélicos co- mo entre protestantes, y llego hasta los tiempos modernos, como en el famoso ca- so de las brujas de Salem, en los EE.UU. El temor exacerbado a Satanas tomo dos vias: la de una religién que imponia la mas severa austeridad y castidad, por horror al condenatorio pecado y a sus consecuencias, y la de la brujeria, es de- cir, de la sumision al Diablo que producia La noche visitando a las brujas Lapland. un arquetipo del mal absoluto, encarnado He he sobre todo en la bruja. Imagen de la bruja Las brujas, representadas profusamente en pinturas y grabados, fueron concebidas casi ex: clusivamente como horrendas viejas, de grefiu- da y larga cabellera blanca, vestidas con trapa- jos negros y, en ocasiones, con los cénicos go- rros caracteristicos del mago, pero con el adita- mento de un ala circular. Otras veces se las re- presentaba con la desnudez que expresaba el pecado original, y untadas con una negra capa de hollin, quiza para imitar la negrura atribuida asu amo, el Diablo. Y se las solia mostrar volan- do a horcajadas sobre primitivas escobas, a mo- do de cabalgadura magica. Eran, en realidad, la imagen mas denigrante posible de la mujer. Y sostiene Eliphas Levi que ‘vengaban en la juven- tud y en la belleza su vejez maldita y su imperdonable fealdad”. Para él, brujos y brujas “eran casi siempre una especie de sapos humanos, hinchados de inveterados rencores; eran pobres, rechaza- dos por todos y, en consecuencia, odiaban. El temor que inspiraban era su consuelo y su venganza; envenenados ellos mismos por una sociedad de la que no habian conocido mas que los desperdicios y los vicios, envenenaban a su vez a aquellos que eran bastante débiles pa- ra tenerlos...” Srujas, magos y hechiceros MEW aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Nace el aquelarre El término aquelarre, palabra que pro- viene del vascuence y que paso a signifi- car “reunion de brujas", sdlo designaba, en un principio, a las reuniones nocturnas de los fieles de un culto secreto organiza- do, en las que se leia algun libro herético 0 prohibido. Por eso, en los documentos, se lo llamaba sinagoga. También se le dio luego el nombre de sabbat, de acuerdo con el término hebreo que sefialaba el sa- bado, puesto que se suponia que las gran- des reuniones se efectuaban en tal dia. Sabir Francisco de Goya Et cutto at Diasto Un tratado anénimo, de alrededor de 1430, definia a los acusados de esa alianza diablica como miembros de una secta que se reunia para dar culto al Diablo... Y afiadia que “...este aparecia bajo la forma de un gran gato ne- gro al que ellos besaban el trasero”. Ademas se los acusaba de comer cada- veres de nifios asesinados o exhumados por los sectarios, quienes, durante las reuniones, se desnudaban impidica y pecaminosamente, y copulaban en- tre ellos al azar, por orden de su amo, el Diablo. Luego los aquelarres degenerarian en mi- sas negras, es decir, remedos blasfemos de la liturgia sagrada de la Santa Misa. Tres elementos fundamentales eran las manifestaciones precisas de la pertenenciaa esa secta diabdlica secreta: el pacto con Sa- tanas, la participacion en el aquelarre y la practica de maleficios. atts Es a partir del siglo XY, al irse definiendo Sabha lenta pero claramente una ciencia del demo- Seat tinerceetess nio o demonologia, que va tomando forma e imagen la reunion del Dia- blo con las brujas y brujos, que se conoceria como aquelarre. La institucion de la Inquisicion fue a reforzar el terror a ese gran Ene- migo del género humano que, segtin la apreciaciOn de los inquisidores, se infiltraba en los seres para inducirlos a los mas horrendos pecados. Brujas, magos y hechiceros IEW aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. de provocar enfermedades o pestes, y de volar, por obra de los untos magicos que preparaban, montadas en risticas escobas? Sin duda, sélo se puede creer en ello como en una conseja infantil. Fue obra del terror medieval y del fanatismo religioso, que tan encarnizada persecucién pu- diera abarcar a tan grande ambito de infelices se- res marcados por alguna deformidad, por altera- clones mentales 0 por alucinaciones creadas por el hambre y la miseria. La hechicera Las BRUJAS DE SOMERSET Sir Edward Burne-Jones Sin duda, muchas de ellas se creerian realmente portadoras de alguna magia especial, de indole diabolica, y hasta confesasen realmente haber volado en escobas, tal como lo hicieron las Ilamadas “brujas de Somerset”, ya en ple- na Edad Moderna, las que al ser procesadas declararon que lo hacian auxilia- das por un ungiento “volador”, con el que se untaban, y que estaba hecho con el sebo obtenido de un nifio sin bautizar, al que cocian en sus calderos. En cuanto al canibalismo, se dice que fue probado en un juicio rea- lizado en Navarra, en la poblacion de Zumalacarregui. Se informa que en el lugar de realizacién de un aquelarre que reunia a muchas brujas se hallaron cadaveres de nifios asesinados y parcialmente devorados, y que todas las concurrentes fueron ejecutadas. Gran parte en las alucinaciones histéricas de las brujas provenia de fantasias morbosas de Ca (wis simalvxDiton yt racter sexual, ya que muchas confesaban relacio- vv ITCH. nes bestiales 0 diabdlicas, obscenidades y torpe- zas cometidas en el aquelarre o sabbat, a veces con su mismo Sefior Infernal, del que describian hasta la forma y tamafio del pene. Algunas expresaban que el miembro viril de Satanas era tan enorme que las hacia sufrir mu- cho durante e! coito, pero que aun asi, les produ- cia placer. Otras se quejaban del horrible frio de ese miembro pero aseguraban la necesidad de la copulacion para compenetrarse verdaderamente eytads de ww live danas de la esencia satanica. ‘por Jol Eamon en 164%, sr hektneces tri Brujas, magos y hechiceros MEW aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. El proceso mismo, que consistia en extenuantes interrogatorios en los que enredaban a los acusados, generalmente de muy escaso inte- lecto y ninguna instrucci6n, estaria actualmente viciado de nulidad por las torturas a las que aquellos eran sometidos. Por eso, en nuestros dias, la propia Iglesia, por la voz del mismo Pa- pa, ha confesado su arrepentimiento y ha pedido disculpas al mundo todo por estas actitudes de la llamada Santa Inquisicion. Las confesiones de brujeria En los procesos por brujeria se lograba arrancar, por medio de atro- ces torturas, las mas insdlitas confesiones a las supuestas brujas, sefa- ladas ademas de, por la acusaci6n, casi siempre anénima, por alguna marca que prolijamente se buscaba en sus cuerpos desnudos, tal como un lu- nar, mancha de la piel o verruga, sobre todo en sus partes pudendas. El menos horrendo de los procedimientos de tortura consistia en atar las manos a la espalda del condenado, pasar la cuerda que las ligaba por una polea, y tirar de ella hasta izar a la victima dejandola colgada y, en algunos casos, empeo- rando el atroz sufrimiento con el afiadido de pe- sas atadas a los pies. Cuando se dejaba caer al sufriente al suelo de repente, sus brazos y sus piernas se descoyuntaban. La famosa mesa de torturas llamada “potro” podia descoyuntar totalmente al torturado cuyos miembros, atados a fuertes cuerdas, eran estira- dos mediante un torniquete. Otro salvaje invento inquisitorial para arran- car confesiones era el conocido como “bota espa- fiola", hecha en madera o metal, en la que se en- cajaba una pierna de la victima, y en la que se in- sertaban, a martillazos, cufias que oprimian casi hasta destruirlos su pie y su pierna. Y aun llega- ba el sadismo de la operacion a verter dentro aceite hirviendo o plomo derretido. También se cita la “silla de hierro” cuyo asien- to se calentaba hasta asar todo el bajo vientre del que ataban a ella Brujas, mags y hechiceros Grabado que describe la labor de ‘Matthew Hopking, cazador de brajas, 1a bra Lucien Lévy-Dhurmer aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Se presenta alli a Satanas sentado sobre un sitial, con las patas ca- prinas cruzadas, el torso humano lampifio y bien erguido, con sus bra- Zos también humanos sefialando el derecho, hacia el cielo, y el izquier- do, hacia la tierra, con grandes alas en la espalda y con una cabeza de macho cabrio con ojos humanos y coronada por enormes cuernos y la antorcha de la iniciacién y el conocimiento. Sus partes pudendas estan disimuladas en parte por la manta que cubre sus rodillas y por un cir- culo magico en medio del cual se yergue una vara falica terminada en una esfera y rodeada por dos serpientes entrelazadas. Lo nimban, a la derecha, la luna, y a la izquierda, las tinieblas tempestuosas. Las brujas y sus filtros magicos Durante la Edad Media hicieron su aparicién una serie de libros, su- puestamente escritos por afamados brujos y brujas y, aunque condena- dos por la Iglesia, fueron copiados por monjes para su venta y difusion, en algunos de los cuales se describen las mas disparatadas y aberrantes recetas de pdcimas y untos, ademas de toda clase de practicas brujeriles. Citaremos algunos de ellos: «= La Clave de Salomén; = El Hermes Trimegisto; «= El Libro de la Muerte; = El Libro de las cosas secretas; = El Gran Grimorio; = El Verdadero Grimorio; = La Espada de Moisé: = El Libre Espiritu. Y podemos afiadir: = Los Libros de Filosofia Oculta, de Agrippa. Algunos de los filtros magicos que en tales obras se registran podian ser administrados sin causar dafio, pues sus componentes, aunque ra- ros, eran simplemente inofensivos; pero otros eran capaces de acarrear graves dafios fisicos o ain mas, resultaban poderosos y mortales venenos. Elf de amor John Wiliam Waterhouse Brujas, magos y hechiceros [EEA aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. En la época contempordnea, las acusadas de brujas dieron argumento a la obra del es- tadounidense Arthur Miller, Las brujas de Sa- lem, cuya accién se basa en el juicio de bru- jeria que ya hemos resefiado al referirnos al proceso llevado a cabo por los puritanos en Nueva Inglaterra. Brus de Macbeth Albert Welt Las brujas en la literatura infantil Es muy comin, en la literatura infantil, la aparicion del personaje de la bruja, siempre perversa, pues el papel de buena hacedora de prodi- gios se reserva a las hadas. Pero debemos acotar que s6lo en la época contemporanea existio una literatura dedicada especificamente a los nifios, ya que en la an- tigdedad, y aun hasta el siglo XVIII, la literatura que se daba a la ni- fiez era solo una seleccién de la de los adultos. Aun los célebres cuen- tos de Perrault, que éste tomé de la tradicién oral, fueron escritos no para nifios sino para adolescentes y jdvenes de la corte, y de alli sus aleccionadoras moralejas, como la de Caperucita Roja, que expresa algo asi: Cuidense las doncellas de ciertos lobos de dos patas que las engafaran para conseguir sus pecadores fines. Los cuentos tradicionales que hoy se dan, casi siempre reformados, a los nifos, son los que llegaron hasta nuestros dias por tradicién oral, y que eran los que escuchaban nuestros mayores, relatados por un na- rrador, generalmente en torno de la lumbre o en un atento corro. Los nifios sélo recibian las migajas, lo que se les permitia oir o lo que es- cuchaban a escondidas. La Diosa DE LA DiscorDIA Ya entre los relatos de la mitologia grecolatina, que suelen ser de lectura in- fantil, surgen figuras que se han considerado como precursoras de las bru- jas. Tal la de la Diosa de la Discordia, la cual parece prefigurar al hada mala que hard pinchar con el huso a la princesita quinceafiera que dormiré duran- te cien afios, pues, como aquella, acta movida por la venganza: sido invitada al banquete de los dioses, por medio de una manzana de oro no haber Srujas, magos y hechiceros EH aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Las herramientas del mago Segiin las leyes tradicionales de la magia, el mago debe estar pro- visto de algunas herramientas esenciales y hasta de un ropaje especial para asumir una presencia impactante y fortalecer sus poderes. La varita magica La principal de las herramientas del mago es su “varita magica”, que es su verdadero cetro real, pero no solo simbolo de su poder sino tam- bién centro de su magia. EL LEJANO ORIGEN DE LA VARITA Podemos suponer que la primera varita magica es la que forjé Pluton para Zeus 0 Vulcano para Jupiter, y que fue nada menos que un rayo. A su vez, Her- mes o Mercurio portaba una especie de vara, el caduceo, abrazada por dos serpientes, con poderes para curar o hipnotizar. Quiza de tan divinos origenes deriva la varita que empuiia el mago y, que al provenir de una fuente de luz, en la buena magia, es decir en la magia blan- a, ilumina la oscuridad y, simb6licamente, ahuyenta el mal. Cuando un mago renuncia a sus po- deres, destruye su varita, tal como lo hace el mago de la obra de William Sha- kespeare, La tempestad, llamado Pros- pero, el cual ha rozado muchas veces con su arte la maléfica magia negra. Y asi nos dira: A mi mando se han abierto las tinieblas han despertado a sus durmientes, y los han dejado partir, gracias a mi arte potentisimo. Pero aqui abjuro de esta ruda magia... Romperé mi varita de mago, Ia sepultaré muchas brazas bajo tierra... La fragua de Vulcano. Giorgio Vasari EGE brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. davia hoy se la supone poseedora de un po- der bienhechor al estar rodeada por campos energéticos que pueden transmitir vitalidad al ser humano. Pero la bola de cristal se hizo popular en- tre los adivinadores, y sobre todo entre los gi- tanos 0 “egipcianos”, hacia el siglo XV, pues se cimento entonces la creencia de que en su in- terior aparecian imagenes de espiritus, angé- licos 0 demoniacos, que indicaban al que la sabia consultar los sucesos futuros sobre los que se la interrogaba. Elcristal mégice Fron Dickee En el siglo XVI, el mago John Dee afirmaba poseer una bola de cristal que le fuera obse- quiada por el angel Uriel y con la cual invocaba a los angeles. El espejo magico Desde tiempos inmemoriales la placa pulida o el espejo magico se ha empleado como elemento de consulta y de adivinacién. Algunos magos se miraban fijamente en su superficie hasta lograr hipnotizarse a si mismos y entrar asi en un trance que les permitia ver visiones supuestamente premonitorias. EL ESPEJO DE LA MADRASTRA MALVADA En el cuento Blancanieves y los siete enanitos la malvada madrastra, que po- see a la vez las caracteristicas de bruja, maga y hechicera, posee un espejo magico en el que aparece una especie de genio quien contesta a todas las pre guntas que ella le formula. En la Edad Media, el reputado mago Alberto Magno proporciona pre- cisas instrucciones para tornar magico a un espejo. Helas aqui: Compra un espejo y escribe en él: °S. Solam. S. Tattler. S. Echogodner. Gematur”. Entiérralo en un cruce de caminos a una hora impar. Al tercer dia, ve al lugar a la misma hora y desentierra el espejo, pero no seas el primero en mirarte en él, KEEN brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Odin, el dios ndordico de la guerra era, a la vez, un mago sumamente poderoso, conocido por sus metamorfosis, es decir, por su habilidad para cam- biar de forma y por su don de invisibilidad. En la Biblia, hallamos una verdadera justa entre Moisés y un mago egipcio, antes de que el prime- ro dirigiera el éxodo del pueblo hebreo. Y los po- deres magicos de Moisés, eso si no diabolicos sino concedidos por el mismo Yahvé, lo llevan hasta po- der separar las aguas del Mar Rojo para que su gente pueda atravesarlo a pie o hacer brotar agua de una pefia en pleno desierto. Entre los celtas, los sacerdotes druidas eran a la vez grandes ma- gos, como Fraechan, que, hacia el afio 561, ayuda su rey a ganar una batalla. Seguin tradicién legendaria, el alquimista del siglo XIV, Nicolas Fla- mel, obtuvo uno de los textos magicos egipcios, y por medio de él lo- gré la obtencién de la piedra filosofal y con la que logré convertir el mercurio en oro. Confiesa Flamel que: ..siguiendo las instrucciones de mi libro, palabra a palabra, hice proyeccién de la piedra roja sobre cantidad similar de mercuri que transmuté totalmente en algo muy parecido al oro puro, sin duda ‘mejor que el oro comtin, mas suave y mas flexible. Y, segiin consta en su leyenda, tanto él como su mujer ain siguen vivos, por lo que se supone que consiguié también el elixir de la eter- na juventud. Y asi se lo recuerda en la novela actual Harry Potter y la piedra filosofal. Entre la historia y el mito: el mago Merlin El mago que ha obtenido mas celebridad, y cuya fama, muy grande durante el medioevo, se ha ido incrementando hasta nuestros dias -en que sigue siendo personaje de relatos fantasticos, historietas y pelicu- las- es Merlin, guia de su juventud y consejero real del también afama- do rey Arturo. Brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. so se va desarroliando la lucha del mago, sin duda proveniente del Egipto, y el muchachito de la China. El mago anhela reforzar sus poderes mediante la posesién de la lampara magica, ya que al frotarla hace aparecer a un genio que, pues- toa las érdenes del amo que lo libera del encierro, cumplira con todos sus deseos. Pero, para desdicha del mago, la lampara queda en poder del muchacho, que por medio de ella se hace rico y poderoso y hasta se casa con la hija del soberano de su pais. Una hermosa moraleja de este cuento es la que propone Arturo Cap- devila en su edificante relato La lémpara de Aladino en algunos de cu- Yos parrafos se expresa asi: Cuando Aladino, el héroe casquivano de “Las mil y una noches" se sintid préximo a morir, noté que, por la primera ver, le brotaba del alma una amarga filosofia. ...Cerca de si, abandonada como objeto intitil para que nadie ardiera en la codicia de poseerla, estaba la lampara de las maravillas, que lo hizo duefo de las bellezas del mundo. Y adentrandose en las reflexiones de Aladino expresa: Qué hechos verdaderamente grandes habia cumplido? 2Cudl podia Namarse su obra? ...;Qué dio de si mismo para alcanzar gloria y fortuna? Y tal vez se juzgaria asi ..Un azar puso en sus manos la lampara de prodigio; otro azar trajole @ su presencia al genio tutelar... Mas valia, por cierto, el pobre alfarero de su vecindad que sdlo hizo un Gnfora, pero por sus propias manos, que é!, el vanidoso Aladino, que todo cuanto hizo fue por mafia de manos ajenas. Decide, entonces, hacer desaparecer la lampara ya que... Desenganado de si mismo, habiase desengafiado también de los otros. Todos harian como él: servir para si el banquete, dar las migajas a los demas. Entonces tomé la lampara, la froté e hizo asi comparecer al genio servicial, para que se llevara para siempre ese objeto prodigioso, di- ciéndole: rujas. magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. La actualidad, con Harry Potter Actualmente, nifios y jévenes, y aun mu- chos adultos, han ingresado al mundo de la magia a través de los exitosos libros de Joanne Kathleen Rowling, que relatan las aventuras del aprendiz de mago Harry Potter y del mago director de la Escuela de Magia y Hechiceria, el profesor Dumbledore, un Merlin moderno. No faltan en el texto las escobas voladoras modernizadas, los dragones ni distintos tipos de seres magicos, ademas del aprendizaje de conjuros y hechizos o la preparacién de filtros magicos, todo adaptado a nuestra época con- ‘Afche publictario de la pelicula “Harry Potter y la cémara secreta”. temporanea. Los magos en la historieta La historieta, a la que el dibujo le da multiples recursos que recién en Ios Ultimos tiempos se han podido incorporar al cine con los efec- tos especiales, ha adoptado, desde sus comienzos, al mundo de la ma- gia y a su ejecutor, el mago. Foster y “El Principe Valiente en los dias del rey Arturo” Uno de los primeros autores de esa forma hibrida, muchas veces seudoliteraria y de dibujos poco convencionales, fue un dibujante ex- traordinario, quiza el mejor que la historieta haya mostrado en su exi- tosa historia, quien fue, ademas, el autor de un texto digno e interesan- te que se aunaba al dibujo, sin hallarse dentro de él, como es lo comin: nos referimos a Harold Rudolph Foster, autor de El Principe Valiente en los dias del rey Arturo. Su obra aparecié en forma de folletos que atin hoy los coleccionistas de historietas, comics 0 tebeos conservan como verdaderos tesoros. Al tratarse de la época del rey Arturo, hallamos en la serie, como personaje de suma importancia, al famoso mago Merlin, tutor y guia de Arturo. Y, en el papel de figura femenina relevante, ala hechicera Aleta, ducha en las artes magicas, a la que se conoce como Reina de las Islas de la Bruma. FEB Brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Las diosas madres En las religiones de los imperios asirio-babilénico y grecorromano, surgieron las diosas madres, con extensos poderes no solo sobre la fe- cundidad y el nacimiento, sino también sobre la misma muerte y la re- surreccion. El cristianismo, no pudiendo en sus comien- zos destruir totalmente el culto de tales diosas, las fue convirtiendo en hechiceras 0 genios del mal, caso de Isis, Istar 0 Cibeles, o en destruc- toras de hombres por medio del sexo, como Afrodita o Venus. Recuérdese que las religiones de estas dio- sas protegian la prostitucién sagrada y que los Prejuicios contra el sexo surgirian en el judais- mo con los mandamientos que Yahvé entregé a Moisés. Y con el dictado de hechiceras que se apli- c6 a las diosas madres, se referirian en la mo- dernidad los hombres a las mujeres, simple- mente humanas, que seducian con su belleza U otros encantos naturales 0 forjados por ellas mismas. Y algunas con su faceta maléfica o diabdlica, como la protagonista del conocido cuento de Cortazar, Circe, que toma su nom- bre de la antigua diosa hechicera de la mitolo- CGrce. Antonio Maria Vassallo gia griega. Hechiceros y hechiceras Aunque tanto podian ser creadores y echadores de hechizos los hombres como las mujeres, es decir que tanto habia hechiceros como hechiceras, la mayor parte de los que han dejado fama por sus fecho- tias pertenecen al sexo femenino. Nos referiremos, por tanto, a las grandes hechiceras. Y no confundamos a las hechiceras con las brujas, ya que éstas se hallaban en connivencia directa con el Diablo, su amo, y Ilegaron a ser s6lo viejas arpias de horrorosas practicas y hasta criminales y ca- nibales. HELE erujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. iba ungiéndolos uno por uno con un filtro creado por ella: entonces de sus miembros caye- ron las cerdas brotadas por obra del funesto ve- neno que ella, Circe la augusta, les diera y asi se convirtieron otra vez en hombres, pero mas jé- venes, mas lozanos, de mds arrogante apostura, y de mayor talla que la que antes tenian. Circe fue confirmada por la tradicién como Tila Durie como Che la mas malvada de las hechiceras, realizadora Fe Vn Stick del mal, s6lo por apego al mal mismo. El hada Morgana Un personaje magico que, segun la tradicion de las Islas Britanicas, oscila entre la imagen de la joven y bella hechicera y la de la horrible y vieja bruja, es el de Morgana o Morrigu, mas conocida como Fata Mor- gana 0 Hada Morgana. La metamorfosis era su mas poderosa arma de hechiceria: podia transformarse a voluntad de joven de rostro seductor en arrugada vie- ja de gesto feroz, de mujer en hombre y aun, de ser humano en animal. Como la horrenda bruja Morrigan o Morrigu, parece haber procedi- do de una antigua diosa irlandesa de la guerra, la cual practicaba la he- chiceria invocando la lluvia a través de sapos magicos. Convertida en cuervo sobrevolaba sobre los campos de muerte tras una batalla, para devorar los cadaveres. Pero, en cualquiera de sus manifestaciones co- mo Morrigu, su presencia aterrorizaba. Asi la describe un antiguo poe- ma épico irlandés: tina bruja malvada salta répidamente sobre las puntas de las armas y el borde de los escudos: es Morrigu, la de los cabellos grises. En cambio, bajo la apariencia de Morgana o Hada Morgana, su poder de seduccién era tal que ningdin hombre mortal podia resistirse a su fa- tal encanto, y la malvada hechicera que en realidad era, aprovechaba esa debilidad para conducir a sus victimas al desastre o a la misma muerte. IE srujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Y cantan las tres brujas a coro: iRedoblen, redoblen fatiga y molestia! jFuego, quema y caldero, hierve! Y contindan su tarea de hechiceria, entre el ronco canto individual de cada una en el que se va intercalando el coro de las tres, enumeran- do los asquerosos elementos de su pocion maléfica. Asi canta la segun- da hechicera: Lomo de culebra pantanosa, cuécete y hierve en el caldero. Ojos de lagartija, y dedo de rana, bozo de murciélago y lengua de perro, lengua bifida de vibora y cuerno de escarabajo, pata de lagarto y ala de lechuza, coced revueltos como un filtro infernal para hacer un potente hechizo de enajenacion. Y la tercera bruja completa la enumeracién de esos elementos es- pantosos, impo: su sano juicio: les de conseguir por algun ser humano comin y en Escamas de dragon, dientes de lobo, humor de momia, garguero y estémago de voraz tiburén de mar salada, raiz de cicuta arrancada en las tinieblas nocturnas, higado de judio blasfemo, hiel de cabra y ramas de tejo cortadas en noche de eclipse lunar, nariz de turco y labios de tdrtaro, dedos de nifo estrangulado al nacer por su madre y lanzado por ella a un foso. Con esto haced la masa espesa y viscosa y anadid al caldero como iltimo ingrediente, entranas de tigre. Y entonces se presenta Hécate, chiceri iosa infernal, gran patrona de la he- . quien aplaude la tarea pero afiade: Ahora cantad alrededor de la caldera, como silfos y hadas, para hechizar lo que habéis echado dentro. Si éstos no eran los reales elementos de un ri- tual de hechiceria, eran, sin duda, los que se ha- bian ido forjando en la imaginativa tradicién me- dieval referente a las brujas y hechiceras. También la magia se hace presente en la obra teatral shakespeariana, en el personaje protago- nico de su Ultima obra, La Tempestad, en el du- ‘Macbeth y las brujas. Henry Fuseli que Préspero, quien enfrascado en el estudio de KEE erujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. mago de la corte al rey y a sus Caballeros de la Mesa Redonda. Y el cual, a su vez, engafado por la bella discipula a quien ensefé las artes magicas, alin espera su liberacién dentro del roble o dei espino en el que aquella lo encerrd. Brujas, mages yhechiceros AN aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Partiendo de la religién, a magia es la via que nos conduce hasta la ciencia, a través de practicas como la astrologia que desembocara en la astronomia o la alquimia, que dara origen a la quimica o la creencia en los nuimeros magicos, de la que surgiran las ciencias matematicas. La magia antigua, cuna de la ciencia moderna, aun sigue ocupando lugar de importancia en las preferencias de la humanidad. Mientras la mitad del mundo busca ansiosamente, a través de la ciencia, la luz de la verdad, otra mitad sigue creyendo en la magia y practicandola. Y a la magia asiatica, europea y de los pueblos indigenas de América se ha unido la del Africa negra, principalmente, a través del vudu. La astrologia La astrologia es la disciplina que observa, analiza y estudia las po- siciones y movimientos de los astros, los planetas y las estrellas, rela- clionandolos con los acontecimientos que se producen en nuestro pla- neta y en sus habitantes humanos, en quienes, seguin se cree, se refle- jan el caracter y el destino de acuerdo con la posicién de los astros en el momento de su nacimiento individual. La astrologia ha sido practicada desde la mas remota antigiiedad y una de las practicas mas antiguas que se conoce es la de los caldeos de la antigua Babilonia, que se remonta al 3000 a. C. Y se remontaria al 2000 a. C., en la Mesopotamia, la conformacién del zodiaco, cintu- rén imaginario que cefiiria la esfera celeste e incluye las orbitas del Sol y de la Luna y de los cinco planetas conocidos por los pueblos de la an- tigiiedad: Mercurio, Venus, Marte, Jupiter y Saturno. El zodiaco se divide en doce secciones, cada una regida por un signo. Estos provinieron de la astrologia babilénica y llegaron hasta nuestros dias, adoptados por los griegos, y son los conocidos del horéscopo: Aries o el Carnero; Taurus 0 el Toro; Géminis 0 los Gemelos; Cancer o el Cangrejo; Leo o el Len; Virgo o Ia Virgen; Libra o la Balan- za; Escorpio o el Escorpién; Sagitario o el Flechero; Capricornio o el Macho Cabrio; Acuario 0 el Aguador; y Piscis o los Peces. Zodiaco medieval Brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. = Ovomancia: practica adivinatoria que se realiza echando en agua una yema de huevo, en especial en la magica noche de San Juan, e interpretando, a la mafiana siguiente, las figuras que se forman en la superficie del agua. = Piromancia: adivinacion por medio del fuego, que se hace interpre- tando la disposicion y color de las llamas, su forma y su crepitar. = Quiromancia: prediccion del futuro e interpretacion de la persona- lidad a través de la lectura de los montes de la mano, o sea, de las lineas que surcan la palma y de las falanges de los dedos. = Rabdomancia: adivinacion por medio de una varilla en forma de Y, cuyos extremos bifurcados se toman uno con cada mano y Cuyo extre- mo inferior sefiala con sus vibraciones el secreto que estd bajo tierra. = Xilomancia: adivinacién por medio de la madera que generalmen- te se practica interpretando la posicién de los trozos de madera ha- llados en el camino. El Tarot we eo @ a Durante mucho tiempo se consideré como desconocido el origen del Tarot, Yay 1 que se solia llamar Libro de Toth, como asignandolo al dios egipcio de la magia y 2H) la adivinacién. Actualmente se ha estable- cido que el primer mazo de cartas del Ta- rot hizo su aparicién en Europa en el siglo IV d. C., aunque hay atin quien sostiene que debe fijarse ese acontecimiento en el afio 1200. Pero lo cierto es que, después de la destrucci6n de la biblioteca de Alejandria, un grupo de “iniciados”, provenientés de diferentes tierras y culturas, determinaron reunirse periddicamente para preservar el Arbol bgt, valor magico y misterioso de los métodos Mlustracién airibuida a Raimundo Lull. de adivinacion y para ello, resolvieron de- [EEE srujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. HI pobre Aladino exclamé temblando y con las lagrimas en los ojos: ~{Qué os he hecho yo para que me castiguéis con tanta crueldad? Tengo mis razones para obrar asi -replico el africano-. Ademas, ocupo el lugar de w padre y me debes obedecer, pero, no tengas cuidado, sobrino mio -aNadié dul- ificando su vor-, ya ves lo que he ejecutado con la virtud y el poder de mi perfume, Pues bien, debajo de esa piedra existe un tesoro inmenso que te hara mas rico y po- deroso que todos los reyes de Ia tierra, y nadie hay en el mundo mas que ta a quien sea permitido levantar la losa y entrar dentro del agujero. Si yo fo hiciese nada po- dria conseguir, y por lo tanto es preciso que ejecutes fielmente lo que yo te mande. La esperanza del tesoro consol6 a Aladino, el cual prometio hacer cuanto le indi- case el supuesto tio. -Ven -le dijo éste-, acércate, pasa la mano por la argolla y alza la piedra. -Pero, querido tio, no tengo fuerzas para ello y sera menester que me ayudéis. -No, entonces nada lograriamos si yo intervengo. Pronuncia el nombre de tu p dre y de tu abuelo, tira de repente, y veras cémo levantas la losa, Aladino hizo lo que se le ordenaba, y, en efecto, alz6 la piedra, bajo la cual se de- j6 ver una cueva de tres a cuatro pies de profundidad, una puerta muy pequenia, y algunos escalones para ir Vio. Hijo mio -dijo el africano-, oye bien y obedece con exactitud todo lo que voy ad Girte. Baja, y cuando Hegues al ultimo escalon encontraras una puerta abierta que te conducir a un gran salon abovedado y dividido en tres departamentos, a derecha ¢ inquierda veras cuatro jarrones de bronce Henos de oro y plata que te guardaras muy bien de tocar siquiera, Antes de entrar en la primera sala, cuida de recoger y cefiir el traje a tu cuerpo para no rozar con él nia los objetos que encuentres nia las paredes, pues de lo contrario moriray instantaneamente, Atraviesa sin detenerte las tres salas, y al final de la diltima hallaras una puerta y luego un hermoso jardin con Arboles car gados de frutos, Cruza este jardin por un camino que te conducira a una escalera de cincuenta escalones, por los cuales se sube a una azotea. Asi que legues a ella veras un nicho, y en el nicho, una lampara ardiendo, Apodérate de ella, apagala, y cuando ha- yas tirado la mecha y el liquido, guardala en tu seno y triemela en seguida. A la vuel- ta, puedes tomar de los Arboles del jardin los frutos que mas te agraden. Y el mago, al concluir sus instrucciones, puso una sortija en uno de los dedos de Aladino para preservarlo, segin dijo, de cualquier mal que pudiese sobrevenirle. El muchacho bajo a la cueva ¢ hizo cuanto el mago le previno con rigurosa exactitud, y duefo ya de la limpara, se detuvo en el jardin leno de admiracion y de asombro, Cada arbol ostentaba frutos de diferentes colores. Los habia blancos, que eran pet las; teansparentes, que eran brillantes; los verdes, eran esmeraldas; los encarnados, rubies; los azules, turquesas: los morados, amatistas, y los amarillos, topacios, y to- dos de un tamaio y de una perfeccién admirables. Mejor hubiera querido Aladino que aquellos frutos fuesen higos, uvas y naran- porque desconocia el valor de las piedras preciosas, y creyé que eran cristales de colores; pero el brillo y la diversidad de matices lo entusiasmé tanto, que tomo una gran cantidad de aquellos frutos, con los cuales Hlen6 todas sus faitriqueras, y en tal situacion, y ocupadas Jas manos con tantas riquezas, se presenté a la entrada de fa cueva, donde lo aguardaba el mago con impaciencia, Dadme la mano para ayudarme,a subir dijo Aladino. as al Brujas, magos y hechiceros aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. aa You have either reached a page that is unavailable for viewing or reached your viewing limit for this book. Indice INTRODUCCION EL MUNDO MAGICO El mundo magico segun Eliphas Levi La magia blanca y la magia negra Evolucién de las artes magicas PRIMERA PARTE EL MUNDO DE LAS BRUJAS Y LOS BRUJOS La brujeria Imagen de la bruja Nace el aquelarre Los aquelarres y las misas negras Las brujas, dfantasia o realidad? La caza de brujas La Santa Inquisicién y las brujas El puritanismo y las brujas: el caso de Salem El macho cabrio y las brujas en las artes plasticas Las brujas y sus filtros magicos Maleficios: los conjuros y las figuras de cera Las brujas en la literatura para adultos Las brujas en la literatura infantil iW 12 13 1s 16 18 20 21 24 25 27 28 30 31 RUS HECHICEROS PCR CRU eR AUS Rae ee ee art eee Met) sobrecogida la humanidad desde los mas lejanos tiempos, y que ain sobreviven CURR cure me ee Oe CMe LS las lineas de la mano, en el curandero de campana y a veces ciudadano, PRR R Tye iletic mae CCl el [om vels (Lalo oe Pero su preponderancia, que ha tenido Pele Ure eeU ley. Co MSM Ra X-1alol* (0) Te Re CMU ecole) CT CcoM (aC MEM Ue eR LCC MTree MOOR CUCL re MUC SMA alle itery o de los demoniacos, como brujas y brujos. aMule (oNs MU LRUTLLTe) tiempo real y fantastico, podran penetrar Peet Cn eee cor cues |

Você também pode gostar