Você está na página 1de 2

ACTIVIDADES

Completar las grillas del acróstico según el texto correspondiente a la


civilización antigua de ROMA, teniendo en cuenta las características de la
composición de la familia romana.
CIVILIZACIÓN ROMANA.
La familia era una institución que estaba compuesta por todos los que vivía bajo la
autoridad de padre, pater familias.
Pater familias significa padre de familia, era el hombre mayor del hogar. Tenía el
poder en el hogar, decidía sobre la vida y la muerte de su familia. Para que un esclavo
fuese un ciudadano libre tenía que ser liberado por el pater familias. Su palabra era
absoluta, tenía el poder para vender a sus hijos y sobre su matrimonio. La familia era
el centro de la sociedad.
La composición de la familia, integraban una familia no sólo las personas ligadas por
vínculos de sangre, como los cónyuges e hijos, sino también todos aquellos que
mantenían una relación de dependencia con el padre (esclavos, libertos y clientes).
Una familia romana, por tanto, era mucho más amplia y podía estar formada por
cientos de personas.
Un pater familias romano tenía un poder enorme, la llamada patria potestad, y en
uso de él podía incluso matar a cualquier miembro de su familia, esclavos, pero
también hijos e incluso esposa en algunos casos.
La mujer en la familia es la compañera del hombre romano, esta comparte con el la
autoridad de los hijos y criados. Pero esta libertad es limitada, pues no bebía vino,
no participaba en la vida pública, en la política, ni en la literatura, tocaban la lira,
cantaban y bailaban. Hacía los trabajos más delicados.
EL MATRIMONIO tenía como exigencia para casarse que el hombre y la mujer debían
ser de nacionalidad romana. Debían tener la madurez sexual suficiente, los hombres
podían casarse a los 14 años y las mujeres a los 12 años. El matrimonio era decidido
por los padres de los jóvenes.
LOS HIJOS podían ser aceptados o no dentro de la familia. Cuando un niño nacía era
depositado por la comadrona (señora encargada como niñera) a quien le pagaban
por el cuidado. Si el padre aceptaba al hijo, lo recogía u ordenaba que fuera
amamantado; en caso contrario era abandonado en un vertedero (basurero).
Las causas que llevaban a un padre a rechazar a un hijo eran muchas (defectos físicos,
dudas acerca de la paternidad, etc. Eso sí, era más fácil que fuera expuesta una niña
que un niño.

Você também pode gostar