Mateus 26:26-29

v. 26 - Enquanto comiam, tomou Jesus um pão, e, abençoando-o, o partiu, e o deu aos discípulos,
dizendo: Tomai, comei; isto é o meu corpo.
v. 27 - A seguir, tomou um cálice e, tendo dado graças, o deu aos discípulos, dizendo: Bebei dele
todos;
v. 28 - porque isto é o meu sangue, o sangue da [nova] aliança, derramado em favor de muitos, para
remissão de pecados.
v. 29 - E digo-vos que, desta hora em diante, não beberei deste fruto da videira, até aquele dia em que
o hei de beber, novo, convosco no reino de meu Pai.

A CEIA DO SENHOR
TEMA: O ALIMENTO DO REINO DE DEUS
O significado do Pão, do Cálice e de uma grande promessa de Jesus Cristo para nós.

I. EL LUGAR.
Mateus 26:17 – 20
v. 17 - No primeiro dia da Festa dos Pães Asmos, vieram os discípulos a Jesus e lhe perguntaram: Onde
queres que te façamos os preparativos para comeres a Páscoa?
v. 18 - E ele lhes respondeu: Ide à cidade ter com certo homem e dizei-lhe: O Mestre manda dizer: O meu
tempo está próximo; em tua casa celebrarei a Páscoa com os meus discípulos.
v. 19 - E eles fizeram como Jesus lhes ordenara e prepararam a Páscoa.
v. 20 - Chegada a tarde, pôs-se ele à mesa com os doze discípulos.

O local onde Jesus instituiu este sacramento é de suma relevância.

 A tradição diz que o ‘aposento alto’ era a casa de João Marcos.
 Se foi na casa de João Marcos ou não, não é de importância, porem o que é de destacado significado
é que foi dentro dos muros de Jerusalém.
 Muito perto onde se ergueu o Templo do Senhor.

Este monte tiene mucha importancia en la historia de la salvación.

 ¿Se acuerdan que Dios ordenó a Abrahám subir al monte Moriáh para sacrificar a Isaac?
 Esto sucedió en 2000 a.c. Este es el monte del Templo.

En 2 Sam. 24, El rey David, 1000 a.c. realizó un censo de los guerreros, los caballos, y los carros de guerra
con los que contaba; esto Dios lo prohibió en Deuteronomio.

Para castigar la confianza de David en su ejército en vez de poner su confianza en el Señor, Dios mandó una
plaga por la que murieron 70 mil guerreros.
Luego Dios tuvo misericordia de Israel y detuvo esa plaga.
Como gratitud al Señor David construyó un altar en el monte Moriah.
En 2 Crón 3:1 Se nos informa que en ese mismo lugar donde David erigió ese altar, Su hijo Salomón
construyó el Templo en el que miles y miles de holocaustos fueron ofrecidos al Dios Altísimo.
Este significativo lugar escogió Jesucristo para instituir el Sacramento de la Cena del Señor.

II. EL TIEMO.
Era el 14 de Nisán, la noche en que todo israelita comía la pascua.
Durante 1450 años el pueblo de Israel había celebrado la liberación de la esclavitud en Egipto.
Fueron liberados de la esclavitud por la sangre del cordero que aplicaron en el dintel de su casa, mientras
que comían su carne asada al fuego.
Si no hubiera sido por esa sangre en el dintel de su casa, Israel hubiera tenido la misma muerte que los
Egipcios. La diferencia fue la sangre del Cordero.
Esa noche escogió Jesucristo para instituir este Sacramento.
v. 26 “Mientras comían…Jesús dijo: tomad, comed esto es mi cuerpo”
Todavía tenían el sabor de la pascua, estaban masticando la carne del cordero pascual cuando les dijo:
“tomad, comed esto es mi cuerpo”

ESTUDIAREMOS:
I. La institución del pan. v. 26
II. La institución de la copa. vv.27 y 28
III. La promesa. v. 29

I. LA INSTITUCIÓN DEL PAN. V. 26 “Tomad, comed, esto es mi cuerpo”

Estos fueron los últimos momentos que Jesús compartió con sus discípulos juntos, luego fue crucificado.
Jesucristo quería que sus discípulos relacionaran la Cena del Señor, con la pascua y con su muerte
expiatoria.
Después de celebrar la primera pascua, el pueblo de Israel inició su éxodo. Un camino difícil, lleno de
pruebas, hacia la tierra que fluye leche y miel.
Igualmente, Jesucristo, después de celebrar su primera Cena del Señor, inició su éxodo, la agonía de
Getsemaní, prisionero, vituperado, juzgado, golpeado, flagelado, coronado de espinas, la muerte en la cruz.
Pero esa muerte en el Calvario, no fue un accidente, ni una victoria de los enemigos de Jesucristo, fue una
muerte voluntaria para cumplir el plan de Dios para nuestra salvación.

Amor en su máxima expresión. “esto es mi cuerpo que por vosotros es partido”

El pan que usó Jesús era sin levadura, era el pan que normalmente se usaba para celebrar la pascua.
En el ritual de la pascua judía, en el momento de partir el pan, el Rabí decía las palabras: “Este es el pan de
aflicción que nuestros padres comieron cuando salieron de Egipto”
Jesucristo hace algo totalmente diferente: partió el pan y dijo: “esto es mi cuerpo”

Is. 53:3 “Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto.
v.5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados, el castigo de nuestra paz fue
sobre él y por su llaga fuimos nosotros curados”

“partió el pan y dijo: tomad, comed, esto es mi cuerpo”

¿Les estaba diciendo que el pan se convirtió por arte de magia en su cuerpo? ¡No! Les estaba diciendo que el
pan representa el cuerpo del Señor “que por vosotros es entregado”, explica lo que sucederá en pocas horas.
Las palabras: “esto es mi cuerpo” no son literales, son acompanhados.

Cuando el rabí decía: “este es el pan de aflicción que vuestros padres comieron cuando salieron de Egipto”
Nadie entendía, ni el rabí queria dizer que de repente el pan se transformou no pan que usou Moisés 1450
años antes. Não! Sino que el pan atual representaba el pan de tiempos ancestrais.

Jesucristo enfatiza das coisas sobre a panela:

Resumo: El significado del pan, del vino y una gran promesa del Señor Jesucristo para nosotros.
Las palabras: “esto es mi cuerpo” no son literales, son acompanhados.

Cuando el rabí decía: “este es el pan de aflicción que vuestros padres comieron cuando salieron de Egipto”
Nadie entendía, ni el rabí queria dizer que de repente el pan se transformou no pan que usou Moisés 1450
años antes. Não! Sino que el pan atual representaba el pan de tiempos ancestrais.

Jesucristo enfatiza das coisas sobre a panela:

• Representa seu corpo
• La fe

La fe en su corpo partido que es una ofrenda a nuestra favor para pagar por nuestros pecados. “Tomad, veio”
Durante todo o tempo de seu ministério, Jesucristo usou essa maneira de falar.

Em Juan 6:54 “El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna”

Em Juan 6:47 “El que cree en mí, tiene vida eterna”

Um silogismo em dados matemáticos: a = c. b = c. entonces a = b

Comer la carne de Jesucristo = creer en él , porque o resultado é o mesmo.

El que no come muere de inanición; el que no cree em Jesus no tiene la vida, tiene morte espiritual por seus
pecados y delitos.
Quando Jesucristo diz: “Tomad, comed esto es mi cuerpo” o que significa “vengan, crean en mi sacrificio
expiatorio para que tengan vida”

Quando Jesucristo disse aos discípulos: “tomad, comed, esto es mi cuerpo” él estaba frente a eles, entonces
no ocurrió ninguna transformación sino una representación.

Jesucristo disse: “Esta copa es mi sangre” el nunca disse: “este vino es mi sangre” Si estas coisas devem ser
tomadas literalmente, entonces la que se transformou en la sangre del Señor es la copa no el vino.

Jesucristo acostumbrava frequentemente hablar en forma ouvido.

Juan 2:19 “Destruid este templo y yo lo levantaré en tres días”

Juan 6:51 “Yo soy el pan de vida que descendió del cielo”

Juan 10:9 “Yo soy la puerta, el que por mí entrare, será salvo”

Por tudo isso sabemos que Jesucristo nunca teve como propósito a transformação dos elementos em seu
corpo e sangue.

Las únicas representações de Jesucristo que temos permissão para fazer son los sacramentos; son las únicas
fotografías o imágenes que Dios nos permite usar para acordarnos de el.

Na segunda guerra mundial, um jovem foi enviado por dois anos para as Filipinas. Duas semanas antes de
partir, su novia y él decidieron casarse.

Nesse tempo não havia a facilidade de falar pelo telefone como agora, ou de falar pela internet.

Durante esos dois anos, sua comunicação era por cartas e ele enviou à sua esposa uma fotografia que a
deixou muito feliz.

Passados os dois anos, para finalmente se reunirem ¿aquién creen ustedes que la joven esposa abrazó
radiante de felicidad, a la fotografía oa su esposo en persona?

Assim mesmo a Cena del Señor é solamente uma fotografia muito útil para acordarnos de nuestro Señor y de
su obra a nuestro favor; mas não é na realidade a essência do Senhor.

El nos ha dejado esta fotografía para acordarnos de el hasta que el venga y entonces le ver cara a cara
pessoalmente.
II. LA INSTITUCIÓN DE LA COPA. Vv.27-28

“Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque este é o meu
sangue do novo pacto, que por muitos é derramado para a remissão dos pecados”
El Evangelio de Lucas y Pablo en 1 Cor 11 dicen: “Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre” Mateo dice:
“Esta es mi sangre del pacto”

Al decir esto, Jesucristo estaba citando

Ex. 24:8 “Entonces Moisés tomó la sangre y roció sobre el pueblo, y dijo: He aquí la sangre del pacto que
Jehová ha hecho con vosotros”
¿Cuál era ese pacto? Que Dios perdonaba los pecados de su pueblo que sería su redentor por la sangre.

Jesucristo estaba enseñando que la sangre que él derramaría en unas horas era la sangre del pacto.

En Hebreos se nos informa que la sangre de los toros y cabritos no perdonan, no perdonaron y nunca
perdonarán los pecados sino mi sangre del pacto.

Al citar Ex. 24:8, Jesucristo hizo un pequeño cambio que significa mucho. Él no dijo: “la sangre del pacto
que Jehová a hecho con vosotros” sino “mi sangre del pacto” .

Mat. 26:28 “Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los
pecados”

“por muchos”

Is. 53:11 “Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificrá mi
siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos”.

Él murió por muchos no por pocos, no solo por los judíos que son pocos, sino de todas las naciones, tribus,
lenguas, Judíos, y Griegos, esclavos y libres, hombres y mujeres, una multitud que nadie puede contar. “por
mi sangre del pacto”.

Jer. 31:33 “Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré
mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo”
v. 34 (al final) “porque perdonaré la maldad de ellos y no me acordaré más de su pecado”

Así que Jesucristo estaba enseñando que los discípulos estaban perdonados de sus pecados por la sangre del
pacto que en unas horas derramaría y les ordena:

“Beban todos de ella” = creer en la remisión de nuestros pecados por su sangre.

III. LA PROMESA. V.29

“Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquél día en que lo beba nuevo con
vosotros en el reino de mi Padre”

Esta es una promesa para fortalecer nuestra fe de que vamos a estar en el cielo con Jesucristo.
Jesucristo recordó esta promesa a los discípulos porque sabía que los siguientes tres días serían la más
grande tribulación para ellos.

Iban a perder toda esperanza por eso Cristo les dijo:

“La próxima vez que estemos sentados cara a cara, celebrando la comunión, será cuando ustedes hayan visto
que la redención que yo les compré en la cruz,es una realidad en la gloria”

En la segunda guerra mundial los japoneses derrotaron al ejército de Estados Unidos y los obligaron a
abandonar las islas Filipinas.

El último discurso del General Douglas MacArthur al pueblo Filipino fue “volveré pronto” y a los soldados
que regresaban derrotados: “volveré pronto”

Dos años después, con un poderoso ejército, su promesa se cumplió, “ya he regresado”

El Señor Jesucristo nos hace esta promesa:

“no me sentaré en esta mesa con ustedes hasta que lo hagamos en el reino de mi Padre. Celebraremos las
bodas del Cordero”
Esta promesa hecha para los apóstoles y para nosotros, es muy hermosa.

O Senhor sabia perfeitamente que todos os seus discípulos o abandonariam, otro o negariam, e retornariam
ao seu antigo modo de viver.

Por eso la promesa: “me sentaré con ustedes en esta mesa otra vez en el reino de mi Padre” é maravillosa.
Jesus nos conhece perfeitamente, o bom que hay en nosotros e o malo, especialmente o malo que hay en
nosotros.

Aún así nos promete: celebraremos juntos las bodas del Cordero”

Isso é possível pelo poder do sangue de Jesus, que nos limpa de todo pecado e de toda maldade e o pacto de
Deus é: “não me acordaré mas de seus pecados”.

Quando estamos celebrando a Cena del Señor en el cielo, Jesucristo va a levantar la copa del nuevo pacto,
nos va a ver a todos nosotros y va a decir: “misión cumplida”.

Oremos:

Señor mío y Dios mío. Nuestra salvación é tão grande que não podemos ver toda. Tus obras tão portentosas
que não podemos compreender. Demasiados buenas para creerlas. Assim é seu Evangelio. Pero Jesucristo
viene con nosotros en este sacramento y nos dice: Tomad, comed, esto es mi cuerpo, esta copa es el nuevo
pacto en mi sangre, bebed todos de ella. Danos la gracia de hacerlo. No nome de Jesus Amén.