Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Resumen:
Este artículo es una aproximación analítica a la naturaleza híbrida del tráiler
cinematográfico, un formato audiovisual sui generis imbricado en la industria cultural y la
sociedad de mercado, que actúa a la vez como dispositivo de promoción publicitaria y
como anticipo narrativo de una película. Incluido en la campaña de marketing previa al
estreno de un largometraje, el tráiler se ha transformado en un contenido persé (material
extra del DVD) que nos ayuda a entender los nuevos conceptos y usos aplicados a la
publicidad concebida, sobre todo, como una pieza sensorial y no tanto argumental. En el
caso que nos ocupa, la experiencia de consumo del tráiler y el filme difieren, provocando
efectos perjudiciales para los intereses comerciales de la película.
Palabras clave: cine, tráiler, spot, demo, industria cultural, experiencia de consumo e
imaginario.
Abstract
This article is an analytic approach to the hybrid nature of film trailers, which are unique
audiovisual formats linked to the cultural industry and the market society. At the same, the
trailer acts both as an advertising device and as narrative anticipation of a film. Integrated
in the marketing campaigns prior to the film release, the trailer has become a subject
1
Alusión al título en español de la película The Village de M. Night Shyamalan.
* visamapu@gmail.com. Doctorando del Departamento de Información y Documentación. Facultad de
Comunicación y Documentación. Universidad de Murcia (España).
Desde postulados marxistas puede entenderse que estas “mercancías”, con más
razón que en cualquier otro caso, son el resultado del fetichismo de los artículos
de consumo. Rifkin habla de “consumidores de símbolos más que de meros
productos”. Estos productos culturales se recubren de valores etéreos que los
hacen deseables, no por lo que son en realidad, sino por lo que hacemos que
sean. Vienen a satisfacer unas pretensiones que exceden nuestras necesidades
materiales. Concretamente las películas son un divertimento que nos entretiene,
pero también proyectamos sobre ellas nuestras frustraciones y anhelos vitales. Se
convierten en lo que MacCannell califica como “modelos de personalidad, moda y
conducta”. El proceso de interiorización implica que el modelo pasa a ser una
influencia, que transforma los significados y las evocaciones de las simulaciones
cinematográficas en vivencias individuales y colectivas.
Por otro lado, los autores de la escuela de Frankfurt plantean que la
industria cultural defrauda a sus consumidores respecto de aquello que promete:
“el huésped debe contentarse con la lectura de la carta de menús”, según
Horkheimer y Adorno. Del Rey Morato (2004) explica que “la promesa en la que
consiste el espectáculo puesto en pie y mantenido por la oferta inagotable de
productos de la industria de la cultura, deja entender que no se llega jamás a la
cosa misma”. En el caso de las producciones hollywoodienses podría apuntarse
que se produce un engaño, bajo estas premisas mencionadas, porque ofrecen un
mundo ficcionado, un paraíso de ensueño, que no deja de ser un reflejo, un
simulacro de la cotidianidad de la que el ciudadano quiere escapar. En palabras
de Del Rey Morato “la diversión consigue la resignación que se quisiera olvidar”. El
engaño no proviene de la distracción, sino de la vinculación que tiene con los
intereses comerciales que fijan unos clichés “de la cultura que se liquida a sí
misma”. A sensu contrario, Christian Metz (2001:23 y ss.) justifica que el objetivo
de la institución cinematográfica es evitar el desplacer fílmico, convirtiendo el
largometraje en un “buen objeto” para el espectador. “La gente va al cine porque
2
J. González Requena, El discurso televisivo: espectáculo de la posmodernidad. Cátedra, 1999. Pág. 132..
3
Datos del Anuario Fotogramas de 2001.
4
Datos de 2003. AIMC (Asociación para la Investigación de los Medios de Comunicación)
5
Datos del Resumen del EGM. (AIMC) octubre 2004-mayo 2005.
6
Etimología latina: “dispositio”. La usamos con el sentido de pre-disposición, mover a, incitar a ver una
película.
7
Calificativo acuñado por Ricciotto Canudo en 1911.
8
Ambrose Bierce. El diccionario del diablo. Círculo de Lectores, 2005. Pág. 207.
11
Concepto desarrollado por Metz y retomado por Darley o González Requena.
12
F. Casetti.. El film y su espectador. Cátedra, 1989 Pág. 18.
13
Primando el éxito en taquilla sobre la calidad del relato fílmico.
14
Prolepsis. Salto hacia el futuro desde un punto narrativo determinado.
15
Analepsis. Salto hacia el pasado desde un punto narrativo determinado.
16
C. Metz habla del doble papel del espectador como testigo y ayudante. Sin él no hay película. “Al mirar la
película la ayudo a nacer”. El significante imaginario. Paidós, 2001. Pág. 95.
17
González Requena. El discurso televisivo: espectáculo de la posmodernidad. Cátedra, 1999, Pág. 117.
20
La obra de Ch. Metz aplica la perspectiva freudiana al cine para analizarlo como un “significante”.
21
Reportaje sobre el estreno de El bosque. Revista Cinerama Septiembre 2004.Pág. 10.
22
Crítica publicada en el número 1.931 de la revista Fotogramas. Septiembre 2004. Pág. 13.
23
A lo largo de este trabajo se analizará con más detalle el concepto del cine como mercancía.
24
Testimonios recabados en el círculo de amistades del autor del presente proyecto y en Internet.
25
Opiniones del Foro de meteored.com
26
Cuentan los comentarios de espectadores desencantados con la película que hubo en Internet.
Referencias
Libros
DARLEY, ANDREW. Cultura visual digital. Espectáculo y nuevos géneros en los medios
de comunicación. Paidós Comunicación. Barcelona (2002).
Artículos y revistas
DEL REY MORATÓ, JAVIER. Adorno y la crítica de la cultura de masas. CIC (Cuadernos
de Información y Comunicación). Publicaciones UCM. Madrid. 9, 41-67. 2004.