Você está na página 1de 18

Fibras plásticas como reforço de tubos de concreto.

Parte 2:
Otimização da armadura
Macro-synthetic fibre reinforced concrete pipes. Part 2: Methology for the optimum design

Albert de la Fuente(1);Antonio Domingues de Figueiredo(2);Antonio Aguado(3);Juliana C. Véras(4)

(1) Profesor Doctor, Departamento de Ingeniería de la Construcción, Universitat Politècnica de Catalunya


(2) Profesor Asociado, Departamento de Engenharia de Construção Civil, Universidade de São Paulo
(3) Catedrático, Departamento de Ingeniería de la Construcción, Universitat Politècnica de Catalunya
(4) Pesquisadora, Universidade de Pernambuco - UPE
Universitat Politècnica de Catalunya-BarcelonaTech C/ Jordi Girona 1-3, Edificio C1, 08034 Barcelona
albert.de.la.fuente@upc.edu

Resumen
É de conhecimento geral que o uso de fibras estruturais é uma alternativa interessante para o reforço do
concreto. Neste sentido, o uso do Concreto Reforçado com Fibras (CRF) em tubulações de esgoto pode ser
uma das aplicações mais relevantes deste material, uma vez que em muitos casos, a necessidade de
reforço é minima. Portanto, a resistência residual à flexão fornecida por uma quantidade moderada de
fibras, pode proporcionar a capacidade de carga necessária para o tubo e levar a uma substituição parcial
ou até mesmo total da armadura passiva tradicional. Entretanto, apesar de ser provado que o uso de fibras
é economicamente viável e uma solução técnica interessante, por várias razões, sua utilização, todavia não
está consolidada. Neste sentido, a falta de métodos ou tabelas com valores que indiquem a quantidade
mínima de fibras retarda o avanço da utilização do CRF. Se apresenta neste trabalho um novo método para
o projeto de tubos de concreto reforçado com fibras. O procedimento proposto é baseado na utilização de
um modelo numérico que simula a resposta mecânica dos tubos a ensaios de compressão. Igualmente,
campanhas experimentais foram realizadas com vistas a verificar a compatibilidade do uso de fibras com os
métodos tradicionais para a concretagem de tubos. Por outro lado, todos os tubos foram ensaiados na
prensa de modo a verificar a contribuição mecânica de diferentes quantidades e tipos de fibras
(polipropileno) na resposta global estrutural dos tubos. Finalmente, se apresenta uma tabela para
concepção dos tubos com CRF, onde se indica o intervalo de aplicabilidade do material em questão.
Palavras-chave: fibras, tubos de concreto, compressão diametral, simulação, otimização, reforço

Abstract
It is of widespread knowledge that the use of structural fibers is an attractive alternative as a reinforcement of
the concrete. In this sense, the use fiber reinforced concrete (FRC) in sewerage pipes could be one of the
most relevant applications of this material since in several cases, the need of reinforcement is low.
Therefore, the residual flexural strength supplied by a moderate amount of fibers can provide the required
load capacity of the pipe and lead to a partial or even total substitution of the traditional passive
reinforcement. However, despite of being proved that use of fibers is both an economic and a technical
interesting solution, for several reasons their use has not been consolidated yet. In this sense, the lack of
design methodologies or tables with a suggested values for the minimum amount of fibres for each internal
diameter, thickness and strength class slows down the step forward of the use of FRC in this field. In this
sense, a new comprehensive methodology for the design of fibre reinforced concrete pipes is presented in
this work. This design procedure is based on the use of a numerical model which simulates the mechanical
response of fibre reinforced concrete pipes subjected to crushing test. Likewise, experimental campaigns
have been performed aiming at verifying the compatibility of the use of fibers with the traditional methods for
casting pipes. On the other hand, all the pipes manufactured were tested in the crushing machine so as to
quantify the mechanical contribution of different amount and type of fibers (synthetic fibers) in the global
structural response of the pipes. Finally, a new table for the design of PFRC pipes is presented giving the
range of applicability of this material.
Keywords: fibers, concrete pipes, crushing test, simulation, optimization, reinforcement.
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 1
1 Introducción
La utilización de tubos de hormigón armado con barras de acero (TCA) en redes de
saneamiento de diámetro interior (Di) de hasta 3000 mm es una práctica extendida y
garantiza soluciones atractivas desde el punto de vista tanto técnico como económico (de
la FUENTE et al., 2011a). Si bien, en los últimos años un segmento de los Di
tradicionalmente dominado por los fabricantes de tubos de hormigón (TC) se ha
desplazado hacia el mercado de los tubos plásticos (TP), los cuales presentan algunas
ventajas de carácter constructivo y mejores evaluaciones desde la perspectiva de la
sostenibilidad (VIÑOLAS, 2011).
Frente a este escenario, los fabricantes de TC han reaccionado planteando alternativas a
los productos existentes. Entre éstas, la utilización de fibras con carácter estructural como
refuerzo del hormigón en substitución de las barras de acero es una opción que se está
abriendo camino en este sector. Afortunadamente, ya existen códigos que regulan el
empleo de hormigón reforzado con fibras para la fabricación tubos, siendo la EN
1916:2002 la base conceptual inicial y el resto adaptaciones nacionales de ésta (la UNE-
EN 1916:2008 en España y la ABNT-NBR 8890:2007 en Brasil). Sin embargo, a pesar de
haberse probado la viabilidad técnica (PEDERSEN, 1992; RAMOS, 2002; FIGUEIREDO,
et al, 2011; CAMPOS, 2011), su uso aún no se ha consolidado.
En este sentido, la barrera a la expansión del hormigón reforzado con fibras (CRF) en TC
más determinante es probablemente que dichas normativas no establecen ni tipo ni
valores orientativos de la cuantía de fibras (Cf). Asimismo, en éstas tampoco se proponen
criterios de cálculo o tablas que permitan deducir valores de Cf. Ambos factores obligan a
que los fabricantes deban recurrir al ensayo compresión diametral (ECD, ver Figura 1a)
para realizar un diseño indirecto de los tubos de hormigón con fibras (TCRF) mediante un
sistema de prueba – error. Esta estrategia no es eficiente ya que existen muchos tipos de
fibras en el mercado, varias clases resistentes (ver Tabla 1) y geometrías disponibles. En
definitiva, la falta de un método racional de diseño provoca que la implantación del CRF
en tubos de hormigón sea lenta y no acabe de asentarse.
Con el fin de dar respuesta a esta problemática, se realizaron diversas campañas
experimentales en las que se involucraba la fabricación y ensayo de tubos de hormigón
reforzado con fibras de acero (TCRFA) de Di comprendidos entre 600 mm (FIGUEIREDO,
et al., 2011) y 1000 mm (CAMPOS, 2011). Asimismo, se presentaron las bases del Model
for the Analysis of Pipes (MAP) y se contrastaron con los resultados experimentales
obtenidos en dichas campañas. Se concluyó que el model MAP permite simular el
comportamiento TCRFA de hasta 1000 mm de Di con errores inferiores al 10.0% y, por lo
tanto, que el modelo MAP es una excelente herramienta para obtener buenas
estimaciones de la Cf necesaria para alcanzar los requerimientos resistentes una vez
fijados el tipo de fibra, el Di del tubo y su espesor (h). Esta estrategia de diseño para
TCRFA permite emplear el ECD como método de control y no necesariamente como
método de diseño indirecto.
Frecuentemente, la agresividad del líquido transportado es elevada, siendo en esto casos
desaconsejable el empleo de fibras metálicas. Como alternativa, pueden utilizarse fibras
plásticas, que son prácticamente insensibles a los posibles ataques químicos y ambientes
específicos que se producen, garantizando así la durabilidad y la integridad estructural
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 2
durante la vida útil. Sin embargo, actualmente no existen en la literatura técnica ni
campañas experimentales asociadas a la producción y al ensayo de tubos de hormigón
reforzado con fibras plásticas (TCRFP) que permitan validar la idoneidad del uso de este
material en tubos. Asimismo, tampoco hay métodos de diseño para obtener valores de Cf.

(a)

Viga de reparto

Chave

Riñones G
Di Do
F S
(b)
Fu ≥ Fn
Contraclave

Fc

Apoyos
1 min 1 min t
Figura 1 - (a) Ensayo de aplastamiento y (b) patron de carga establecido en la EN 1916:2002.

Table 1 – Clases resistentes para tubos según la EN 1916:2002.


C60 C90 C135 C180
Fc (kN/m2) 40 60 90 120
Fn (kN/m2) 60 90 135 180

En consonancia con la línea de investigación planteada en los anteriores trabajos


asociados a los TCRFA (FIGUEIREDO, et al., 2011; CAMPOS, 2011), la Universidad de
São Paulo (USP) y la Universitat Politécnica de Catalunya (UPC) han liderado una
campaña experimental asociada al uso de hormigón reforzado con fibras plásticas
(TCRFP) para tubos de Di de hasta 1000 mm (CAMPOS, 2011). Los aspectos y
resultados más importantes de esta campaña experimental se presentan en la primera
parte de esta comunicación (FIGUEIREDO, et al., 2012).
El objetivo de esta segunda parte consiste en demostrar que el modelo MAP puede
emplearse para la simulación del ECD en TCRFP. Asimismo, en base a éste, se proponen
unas ecuaciones y tablas de diseño que permitirán a los fabricantes de TC analizar la
viabilidad del uso del fibras plásticas como alternativa al refuerzo tradicional.

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 3


2 El ensayo de compresión diametral

2.1 Procedimiento según la EN 1916:2002


El ensayo de aplastamiento (Figura 1a) fue inicialmente concebido para el diseño y el
control mecánico en planta de TC y TCA. Se trata de un ensayo que aporta información
valiosa referente a la respuesta estructural del tubo tanto en régimen de servicio como en
rotura. Dicha información puede emplearse para el diseño del refuerzo necesario que
permitirá afrontar las cargas en sus configuración final de trabajo (SILVA, et al., 2008).
La misma metodología de ensayo es la que se propone en la EN 1916:2002 para el
control mecánico de los TCRF. Si bien, para éstos se modifica el ensayo con el fin de
evaluar su respuesta en régimen post-rotura.
La metodología se ensayo se basa en la aplicación de una carga longitudinal
uniformemente distribuida sobre la generatriz superior del tubo, el cual está apoyado
sobre dos aristas inferiores (Figura 1a). El patrón de carga establecido para TCRF es el
que se presenta en la (Figura 1b). Nótese que se fijan dos valores representativos para
controlar la respuesta mecánica del tubo y que ambos dependen de la clase resistente
que se quiere alcanzar, siendo Fc la carga de prueba y Fn la carga mínima de rotura.
Así pues, en base al patrón de carga de la Figura 1b, se debe verificar que:
• El tubo resiste la carga Fc durante un minuto sin que se alcance la carga de fisuración
del tubo (Fcr). La primera fisura habitualmente se produce en la clave del tubo, por lo
que Fc = Fc,cr, siendo Fc,cr la carga de fisuración de la clave del tubo.
• La carga de rotura del tubo (Fu) es como mínimo Fn.
• Una vez se ha producido la rotura del tubo, éste es capaz de resistir en régimen
posrotura la carga Fc durante un minuto.
Es importante remarcar varios aspectos en relación con las exigencias fijadas para los
TCRF. Por una parte, el requerimiento de no fisuración en la primera fase del ensayo (Fc <
Fc,cr) es más restrictivo que el establecido para TCA, pues para estos últimos se permiten
anchos de fisura (w) de entre 0,2 mm hasta 0,3 mm (dependiendo de la normativa) para la
misma carga Fc. A nivel de respuesta estructural en servicio, implica que un TCRF debe
diseñarse para que trabaje en régimen elástico durante su vida útil, mientras que un TCA
puede presentar fisuras de ancho controlado y, por lo tanto, trabajar en régimen fisurado
en servicio. Esta filosofía responde a una época en la que aún había un cierto
desconocimiento en relación con algunos aspectos relacionados con el comportamiento
del CRF fisurado y sometido a cargas de larga duración. Sin embargo, el escenario actual
es distinto y un planteamiento tan conservador frena la consolidación del uso de CRF
como material para la fabricación de tubos. En esta línea, es sabido que el empleo del tipo
y Cf de fibras adecuados conduce a una mejora de la respuesta de la estructura frente a la
fisuración (di PRISCO, 2009; de la FUENTE, 2011). Por otra parte, la verificación de la
aptitud del tubo para soportar una carga mínima posrotura responde a la necesidad de
garantizar ductilidad y capacidad portante en caso de producirse el fallo local o global del
elemento. Para ello, a diferencia de los TCA, a los TCRF se los somete a un proceso de
descarga – recarga una vez se ha alcanzado Fu en el que, de forma indirecta, se evalúa la

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 4


idoneidad del anclaje fibra–hormigón y de la resistencia residual a flexotracción del CRF
(fR,i).
Este proceso de descarga – recarga es complicado de controlar si no se lleva
adecuadamente un control de los desplazamientos mediante algún sistema de medida.
Este hecho provoca que en ocasiones se rechace el empleo del FRC como alternativa al
armado tradicional. Afortunadamente, en una de las campañas experimentales (de la
FUENTE, 2011) se demostró que los resultados de la evaluación de la respuesta
posrotura del tubo eran prácticamente independientes de si el ensayo se llevaba a cabo
de forma cíclica o de forma continua, siendo este un importante avance en la tecnología
de FRCPs.

2.2 Modelo MAP para la simulación numérica del ECD


Las hipótesis implementadas en el Model for the Analysis of Pipes (MAP) fueron
presentadas en (de la FUENTE, 2011; de la FUENTE, et al., 2011b; de la FUENTE, et al.,
2012a) y se corroboró que se trata de una herramienta adecuada para simular el ECD en
TC y en TCRFA. Asimismo, se puso de manifiesto que el modelo puede emplearse para
plantear el diseño óptimo de este tipo de tubos.
Concretamente, el modelo MAP simula la repuesta del tubo sometido a las condiciones de
contorno impuestas en el ECD considerando que la sección de clave (R) y de riñones (S)
es donde se concentran los fenómenos no lineales (Figura 2), mientras que el resto del
tubo se comporta en régimen lineal (PEDERSEN, 1995). Resumiendo, consiste en un
modelo de análisis no lineal de rótulas con el que se pueden capturar las 3 fases
siguientes:
• Comportamiento lineal elástico global (Fase 1) hasta que se alcanza la carga de
fisuración en la clave Fc,cr.
• Comportamiento lineal con fisuración en clave (Fase 2). Al detectarse la primera
fisura, se produce una pérdida de rigidez activándose la primera rótula plástica (R),
mientras que el resto del tubo responde de forma elástica. Esta fase se prolonga
hasta que se alcanza la carga de fisuración en riñones (Fs,cr), sección en la que
aparece la segunda y última rótula plástica (S).
• Comportamiento totalmente fisurado (Fase 3). La respuesta está gobernada por
ambas rótulas plásticas, estando éstas conectadas por un segmento de circunferencia
que se comporta de forma elástica.
Por otra parte, la simulación de la respuesta mecánica de las rótulas plásticas se aborda
mediante el modelo Analysis of Evolutionary Sections (AES) (de la FUENTE, et al.,
2012b). Se trata de un modelo que permite discretizar las rótulas R y S en elementos tipo
área (dAc) y obtener su comportamiento tensodeformacional (Figura 3a) imponiendo las
ecuaciones de equilibrio (Ecuaciones 1a y 1b) y de compatibilidad (Ecuaciones 2) y
resolviendo el sistema de ecuaciones resultante mediante un esquema iterativo tipo
Newton – Raphson.

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 5


(a) F (b) F (c) F
R R R
MR MR MR

Rm Rm Rm

S S S
Rm o Rm o Rm o
F F F
MS MS MS
Figura 2 - Esquema en (a) régimen lineal, (b) régimen lineal con fisuración en R y (c) régimen lineal con
fisuración en R y en S.
(a) Deformaciones Tensiones
(a) dAc
εc,t
xn εc(yc) σc(εc)
h yc σ1 Next
G σ2
yG Mext
FRC
εc,b
b
σc
fcm
(b)

𝝈𝟏 = 0.7𝒇𝒄𝒄𝒄,𝒇𝒇 (1.6 − 𝑑) 𝜺𝟏 = 𝝈𝟏 /𝑬𝒄𝒄


𝝈𝟐 = 0.45𝒇𝑹,𝟏 𝒌𝒉 𝜺𝟐 = 𝜺𝟏 + 0.01%
Ecm 𝝈𝟑 = 0.37𝒇𝑹,𝟒 𝒌𝒉 𝜺𝟑 = 2.5%
1
𝒉[𝑐𝑐] − 12.5
𝒌𝒉 = 1.0 − 0.6 |12.5 ≤ 𝒉 < 60|
ε3 ε2 ε1 47.5
σ3 -2.0‰ -3.5‰ εc
σ2 Parámetros para similar la respuesta del CFR
σ1 traccionado (VANDEWALLE, et al., 2003).
Figura 3 - (a) Discretización seccional y (b) ecuaciones constitutivas para simular el CRF.

𝑵𝒆𝒙𝒄 = � 𝝈𝒄 (𝜺𝒄 ) 𝒅𝑨𝑨𝒄 [1a]

𝑴 𝒆𝒙𝒄 = � 𝝈𝒄 (𝜺𝒄 ) (𝒚𝒄 − 𝒚𝑮 )𝒅𝑨𝑨𝒄 [1b]

�𝜺𝒄,𝒃 − 𝜺𝒄,𝒄 �
𝜺𝒄 = 𝜺𝒄,𝒃 − 𝒚𝒄 [2]
𝒉

En el modelo AES se implementaron las ecuaciones constitutivas propuestas en los


códigos normativos a nivel europeo para reproducir el comportamiento a tracción del CRF
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 6
(BLANCO, et al., 2010). Aunque, para este trabajo, se ha considerado adecuado emplear
el modelo constitutivo propuesta en (VANDEWALLE, et al., 2003) (Figura 3b) para simular
la respuesta a tracción, mientras que para la respuesta a compresión se ha fijado la
sugerida en (BARROS & FIGUEIRAS, 1999).

2.3 Respuesta mecánica de TCRF sometidos al ECD


La respuesta mecánica de un tubo en el ECD depende de su geometría (Di y h, ver Figura
2) y del tipo de refuerzo. Respecto a la naturaleza del refuerzo, en el caso de un TCRF,
las variables determinantes son el tipo y la cuantía de fibras (Cf) empleadas.
En la Figura 4 se presentan las curvas cualitativas carga (F) – desplazamiento en clave
(v) para los tres tipos de comportamiento esperables en un TCRF para valores de Cf
crecientes (CfA < CfB < CfC) diferenciando las obtenidas mediante el ensayo continuo o
cíclico así como las obtenidas con el modelo MAP. Nótese mediante la simulación
numérica se pueden capturar los fenómenos tipo snap-trough que se producen al alcanzar
la carga de fisuración de la clave (Fc,cr) y la de fisuración de los riñones (Fs,cr) gracias a
que el algoritmo implementado se basa en un control de los desplazamientos en la clave.
Contrariamente, estas pérdidas de rigidez no se aprecian en los ensayos ya que los
sistemas de medida empleados no eran suficientemente sensibles para apreciar estas
variaciones bruscas que se producen prácticamente de forma instantánea.
Fpos = Fu

F A F B F Fs,cr C
Fs,cr = Fu
Fr,cr = Fu Fr,cr Continuo
Fr,cr
MAP Continuo
MAP
Continuo Fpos
Fs,cr
MAP
Fpos Cíclico
Cíclico
Cíclico
CfA CfB CfC

v
Figura 4 - Curvas F – v cualitativas v
para descrivir el comportamiento de un TCRF en el ECD. v

En las curvas F – v de la Figura 4 se pueden apreciar las 3 fases de comportamiento que


se obtienen durante el transcurso del ECD esquematizadas en la Figura 3:
• Fase 1. Comportamiento lineal elástico en todo el elemento desde el inicio del ensayo
hasta alcanzar Fr,cr. El valor de Fc,cr depende de la geometría del tubo y de la
resistencia a flexotracción de la matriz de hormigón (fct,fl), que es prácticamente
independiente de Cf (de la FUENTE & ARMENGOU, 2007; LARANJEIRA, 2010).
• Fase 2. La clave del tubo trabaja en régimen fisurado mientras que el resto de
secciones mantienen su respuesta lineal. Debido a la pérdida de rigidez a la que
conduce la fisuración y a la hiperestaticidad del sistema, hay una redistribución de

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 7


momentos hacia los riñones (HEGER, 1962). En este sentido, puede apreciarse en
las curvas obtenidas con MAP que cuanto menor es la Cf mayor es el snap – through
y viceversa. La fase 2 finaliza cuando se alcanza Fs,cr, pudiéndose clasificar el
comportamiento de los tubos en tipo A si Fs,cr no logra alcanzar el valor Fr,cr y en tipo B
o C si Fs,cr es superior a Fr,cr. Los tubos con comportamiento tipo A presentan una
respuesta infracrítica siendo Fr,cr igual a Fu, mientras que los tipo B o C presentan una
respuesta supracrítica.
• Fase 3. Al alcanzarse Fs,cr se produce otro snap-through que conduce al régimen post-
rotura. Se obtienen comportamientos tipo softening (tipos A y B) si la Cf es baja o
moderada o hardening (tipo C) si la Cf es alta en relación con las dimensiones del
tubo. Nótese, que para los TCRF con hardening tras la rotura, la carga Fpos es la
mayor en todo el ensayo y corresponde con la carga Fu del tubo. Este tipo de
respuestas sólo se obtienen, según las simulaciones llevadas a cabo con MAP, con
valores de Cf elevados y poco atractivos desde el punto de vista económico.

3 Contrastación resultados experimentales - MAP


Con la finalidad de verificar que el modelo MAP es una herramienta adecuada para
simular el comportamiento de TCRFP en el ECD y que puede emplearse para el diseño
de este tipo de tubos, se contrastan los resultados obtenidos experimentalmente para los
tubos ensayados y presentados en la primera parte de este trabajo (FIGUEIREDO, et al.,
2012) con los deducidos numéricamente con MAP. Las simulaciones numéricas se han
llevado a cabo considerando las dimensiones de los tubos presentadas en la Figura 5 de
(FIGUEIREDO, et al., 2012) y las respuesta mecánica del CRFP en el ensayo de
flexotracción EN 14651:2007 recogidas en la Tabla 4 de (FIGUEIREDO, et al., 2012).
Respecto a las resistencias residuales (fRm,i) de la Tabla 4 (FIGUEIREDO, et al., 2012),
éstas se pueden correlacionar linealmente obteniendo las Ecuaciones 3 y 4 que permiten
obtener los valores de fRm,i para otros valores de Cf no empleados en la campaña
experimental.

𝒇𝑹𝒄,𝟏 = 0,334𝑪𝑪𝒇 + 0.493 [3]

𝒇 𝑹𝒄,𝟒 = 0,849𝒇𝑹𝒄,𝟏 [4]

En la Tabla 2 se presentan los parámetros empleados para generar las ecuaciones


constitutivas del CRFP traccionado (valores σi y εi, ver Figura 3b).
Tabla 2 - Valores de σi e εi para definir la ecuación constitutiva del CRFP traccionado.
Cf,r fRm,1 fRm,4 Ecm σ1 ε1 σ2 ε2 σ3 ε3
CÓDIGO
(kg/m3) (N/mm2) (N/mm2) (N/mm2) (‰) (N/mm2) (‰) (N/mm2) (‰)
TSR 0,0 0,493 0,419 31075 5,586 0,180 0,234 0,280 0,164 25,000
TCRFP-3,0 2,9 1,462 1,241 31075 5,586 0,180 0,695 0,280 0,485 25,000
TCRFP-4,0 3,9 1,796 1,524 31075 5,586 0,180 0,854 0,280 0,596 25,000
TCRFP-5,5 6,0 2,497 2,120 31075 5,586 0,180 1,188 0,280 0,829 25,000

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 8


En la Tabla 3 se recogen los valores experimentales y numéricos obtenidos con MAP para
los distintos TCRFP ensayados (se adopta el código: TSF para el tubos sin fibras,
TCRFP-3,0 para el tubo con Cf = 3,0 kg/m3, TCRFP-4,0 para el tubo con Cf = 4,0 kg/m3 y
TCRFP-5,5 para el tubo con Cf = 5,5 kg/m3). El parámetro ξ es el error relativo (valores
positivos implican que el resultado experimental es superior al obtenido numéricamente y
viceversa).

Tabla 3 - Valores de Fu y Fpos obtenidos experimentalmente y numéricamente com MAP.

Experimental Simulación con MAP


ξFu ξFpos
Fum Fposm Fu Fpos (%) (%)
CÓDIGO
(kN/m2) (kN/m2)
TSF 55,3 - 48,0 - 13,2 -
TCRFP-3,0 52,0 16,2 48,0 18,1 8,0 -11,7
TCRFP-4,0 50,2 20,5 48,0 22,1 2,0 -7,8
TCRFP-5,5 51,1 25,6 48,0 26,1 2,6 -1,9

Atendiendo a los resultados recogidos en la Tabla 3 se deduce que:


• Según el modelo MAP el tipo de rotura de los tubos ensayados responde a un
comportamiento tipo A (Figura 4), pues el valor de Fu no varía en función de la Cf del
tubo y coincide con el valor de la carga de fisuración en la clave (Fcr,c) en todos los
casos. En este sentido, se constata que el modelo MAP arroja valores del lado de la
seguridad para Fu, siendo el valor máximo de ξFu igual a 13,2% (TSF) y el valor
mínimo de 2,0% (TCRFP-4,0). Estas diferencias pueden deberse a que en realidad el
tubo está apoyado sobre dos aristas (Figura 1a) y que conduce a una reducción de
los esfuerzos de flexión en toda la pared del tubo (de la FUENTE & ARMENGOU,
2007; HEGER, 1962) que no se han tenido en cuenta en la simulación del ECD.
• El modelo MAP tiende a sobrevalorar ligeramente los valores de Fpos respecto a los
valores experimentales a medida que aumenta el valor Cf, si bien la diferencia
máxima, en valor absoluto, es del 11,7% (TCRFP-3,0) y la mínima del 1,9% (TCRFP-
5,5). Estas variaciones pueden deberse a que el modelo constitutivo empleado para la
simulación de la respuesta post-fisuración del CRFP (Figura 3b) fue calibrado para
CRFA (VANDEWALLE, et al., 2003). No obstante, se demostró en (BLANCO, et al.,
2010) que este modelo puede emplearse para hormigones con macrofibras plásticas.
A raíz de lo comentado anteriormente y considerando que los valores de ξ obtenidos
(Tabla 3) son reducidos en comparación con la propia dispersión de la respuesta
mecánica del CRF, puede afirmarse que la correlación entre los valores experimentales y
numéricos es satisfactoria. En consecuencia, el modelo MAP puede emplearse como
herramienta para el análisis paramétrico de TCRFP de Di hasta 1000 igual como se
demostró para TCRFA en (de la FUENTE, et al., 2011c; BLANCO, et al., 2010).

4 Nuevo método analítico de diseño


Habiendo demostrado que el modelo MAP es una herramienta adecuada para la
simulación de la respuesta mecánica de TCRFP de Di hasta 1000 mm, se va a emplear
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 9
éste con el fin de simular el comportamiento estructural en el ECD de TCRFP de Di de
300 mm hasta 1000 mm asumiendo el mismo tipo de macrofibras plásticas empleadas en
la campaña experimental y considerando valores de Cf de 0 kg/m3 (TSF), 2 kg/m3, 4
kg/m3, 6 kg/m3 y 8 kg/m3. En esta línea, la simulación de la respuesta a tracción de CRFP
se ha llevado a cabo utilizando la ecuación constitutiva propuesta en (VANDEWALLE, et
al., 2003) (Figura 3b) y las Ecuaciones 3 y 4 para el cálculo de fRm,i en función de Cf. Los
resultados de Fc,cr, Fu y Fpos para los distintos Di de las series B y C de espesores de
pared tipificadas en la UNE 127916 se presentan en la Tabla 4 (espesor serie B, hB) y en
la Tabla 5 (espesor serie C, hC).
De los resultados recogidos en las Tabla 4 y 5 y la clasificación presentada en la Figura 4
se desprende que la respuesta mecánica de los tubos es tipo A (Fc,cr = Fu) si la Cf ≤ 2
kg/m3, mientras que para Cf > 2 kg/m3 la respuesta es tipo B (Fc,cr < Fs,cr = Fu), no
habiéndose observado respuesta tipo C (Fc,cr < Fs,cr < Fpos = Fu) para los valores de Cf
analizados.
Tabla 4 - Valores de Fu y Fpos obtenidos numéricamente con MAP para TCRFP con h de la serie B.
Cuantía de fibras (Cf) Cf = 0 kg/m3 Cf = 2 kg/m3 Cf = 4 kg/m3 Cf = 6 kg/m3 Cf = 8 kg/m3
Di hB Fcr,c Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos
(mm) (kN/m2) (kN/m2) 2
(kN/m ) 2
(kN/m ) 2
(kN/m ) 2
(kN/m )
300 50 141,3 141,3 26,7 141,3 59,3 150,0 90,7 165,3 120,7 180,0 149,3
400 59 111,8 111,8 20,3 111,8 46,0 117,3 70,5 129,0 94,0 140,5 116,3
500 67 93,0 93,0 16,6 93,0 37,4 97,2 57,4 107,4 77,0 117,2 95,2
600 75 80,5 80,5 14,2 80,5 32,0 84,8 49,5 93,5 66,3 102,0 82,3
700 84 74,6 74,6 12,9 74,6 29,1 77,0 45,1 84, 9 60,4 91,9 75,1
800 92 68,5 68,5 11,6 68,5 26,5 71,0 41,0 78,0 55,0 85,3 68,6
900 100 63,8 63,8 10,8 63,8 24,6 66,4 37,9 72,8 50,9 79,4 63,4
1000 109 61,2 61,2 10,2 61,2 23,4 63,5 36,1 69,9 48,5 76,0 60,3

Tabla 5 - Valores de Fu y Fpos obtenidos numéricamente con MAP para TCRFP con h de la serie C.
Cuantía de fibras (Cf) Cf = 0 kg/m3 Cf = 2 kg/m3 Cf = 4 kg/m3 Cf = 6 kg/m3 Cf = 8 kg/m3
Di hC Fcr,c Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos Fu Fpos
(mm) (kN/m2) (kN/m2) (kN/m2) (kN/m2) (kN/m2) (kN/m2)
300 69 252,0 252,0 51,3 252,0 112,3 266,0 170,3 295,7 224,3 322,0 275,0
400 78 185,3 185,3 36,0 185,3 79,3 198,0 120,8 218,0 160,0 237,5 197,0
500 86 146,2 146,2 27,4 146,2 61,0 155,2 93,2 168,2 123,8 183,4 152,6
600 94 122,3 122,3 22,3 122,3 49,8 129,2 76,3 142,3 101,8 154,0 125,8
700 102 106,3 106,3 18,9 106,3 42,6 112,1 65,4 122,4 87,3 133,4 108,1
800 111 96,4 96,4 16,9 96,4 38,1 100,4 58,6 110,5 78,5 120,3 97,1
900 119 87,6 87,6 15,1 87,6 34,2 90,4 52,7 99,6 70,4 108,3 87,6
1000 128 81,9 81,9 14,0 81,9 31,6 84,6 48,8 92,9 65,3 101,9 81,2

En las Figuras 5a y 5b se representan los valores de Fu y Fpos en función de Di obtenidos


con MAP para los TCRFP de la serie de espesores B (Tabla 4). En éstas se constata que
tanto Fu como Fpos decrecen con el aumento de Di, siendo este el comportamiento
esperable debido a la flexibilización del elemento. Además, se que fijado Di, el valor de
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 10
Fpos aumenta con Cf debido a que en este régimen de comportamiento las dos secciones
de control (R y S de las Figuras 1 y 2) están completamente fisuradas y por lo tanto su
respuesta depende principalmente de los valores de fRm,i (crecientes con Cf).
Es importante recalcar que existe un elevado grado de correlación (R2 > 0.99 en todos los
casos) en los puntos (F, Di) cuando se ajustan con una curva potencial (Ecuaciones 5),
siendo esta expresión de gran utilidad de caras al diseño de TCRFP.

𝑭𝑭 = 𝐴𝑫𝐵𝒊 [5]

Los parámetros A y B de la Ecuación 5 dependen de la carga de control (Fu o Fpos) y se


ajustan satisfactoriamente a polinomios cuadráticos con Cf tal como puede verse en las
Figuras 6a (parámetro A) y 6b (parámetro B). Si bien, como puede observarse en ambas
figuras, para Cf ≤ 2 kg/m3 los valores de AFu y de BFu son constates debido a que la
respuesta de los tubos es tipo A y por lo tanto Fu coincide con Fr,cr, que no depende de Cf.
200 200
(a) Fu,8 = 10510Di-0,720 (b)
180 180 Fpos,8 = 10677Di-0,755
Fu,6 = 9649Di-0,720 Fpos,6 = 9002Di-0,762
160 160
Fu,4 = 8591Di-0,716
140 140 Fpos,4 = 7053Di-0,769
Fu,2 = 7339Di-0,700
120 120 Fpos,2 = 4875Di-0,779
F (kN/m2)

Fu,0 = 7339Di-0,700
100 100 Fpos,0 = 2430Di-0,798
80 80
60 60
UCP UCP
40 PFRCP-2 40 PFRCP-2
PFRCP-4 PFRCP-4
20 PFRCP-6 20 PFRCP-6
PFRCP-8 PFRCP-8
0 0
0 300 600 900 1200 0 300 600 900 1200
Di (mm) Di (mm)
Figura 5 - Curvas (a) Fu – Di y (b) Fpos – Di obtenidas con MAP para TCRFP de la serie B (Tabla 4).

12000 -0,680
AFu = -244x10-1Cf2 + 772Cf + 5893 (a) BFu = -700x10-3 (b)
10000 -0,700
BFu = -720x10-3
AFu = 7340 -0,720
8000
BFu = 162x10-5Cf2 - 182x10-4Cf - 669x10-3
-0,740
6000
AFpos = -316x10-1Cf2 + 1284Cf + 2431 -0,760
4000
-0,780
2000 BFpos = -482x10-6Cf2 + 901x10-4Cf - 797x10-2
-0,800
0 -0,820
0 2 4 6 8 10 0 2 4 6 8 10
Cf (kg/m3) Cf (kg/m3)
Figura 6 - Curvas (a) A – Cf y (b) B – Cf para los TCRFP de la serie B (Table 4).
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 11
Esta mima estrategia se ha seguido para los TCRFP de la serie C (Tabla 5), obteniéndose
los resultados de la Figuras 7a y 7b para las relaciones F – Di con unos coeficientes de
correlación (R2) también superiores a 0.99 en todos los casos.
Por último, en las Figuras 8a y 8b se presentan los ajustes obtenidos para los parámetros
A y B, respectivamente, de los tubos de la serie C y para los que se obtienen también
valores de R2 superiores a 0.99 cuando se correlacionan con Cf.
350
(a) (b)
300 Fu,8 = 76570Di-0,965 Fpos,8 = 87173Di-1,017
Fu,6 = 71362Di-0,965 Fpos,6 = 75870Di-1,028
250
Fu,4 = 62807Di-0,958 Fpos,4 = 62101Di-1,042

200 Fu,2 = 51149Di-0,938 Fpos,2 = 44425Di-1,056


F (kN/m2)

Fu,0 = 51149Di-0,938 Fpos,0 = 24113Di-1,086


150

100
UCP UCP
PFRCP-2 PFRCP-2
50 PFRCP-4 PFRCP-4
PFRCP-6 PFRCP-6
PFRCP-8 PFRCP-8
0
0 300 600 900 1200 0 200 400 600 800 1000 1200
Di (mm) Di (mm)
Figura 7 - Curvas (a) Fu – Di y (b) Fpos – Di obtenidas con MAP para TCRFP de la serie C (Tabla 5).

120000 -0,920
BFu = - 938x10-3
-0,940
100000 AFpos = -344x10-1Cf2 + 9153Cf + 24948 BFu = - 965x10-3
-0,960
80000 -0,980 BFu = 162x10-5Cf2 - 197x10-4Cf - 905x10-3
-1,000
60000 AFu = 51149
AFu = -403Cf2 + 8272Cf + 36205 -1,020
40000 -1,040
-1,060
20000
-1,080 BFpos = -679x10-6Cf2 + 137x10-4Cf - 108x10-2
0 -1,100
0 2 4 6 8 10 0 2 4 6 8 10
Cf (kg/m3) Cf (kg/m3)
Figura 8 - Curvas (a) A – Cf y (b) B – Cf para los TCRFP de la serie C (Table 5).

Todo este conjunto de ecuaciones derivadas de las simulaciones llevadas a cabo con el
modelo MAP pueden presentarse de forma más compacta, manteniendo formulación base
de la Ecuación 5, con el fin de sistematizar una metodología de diseño. Así, en el caso de
TCRFP de la serie B, la estimación de Fu puede llevarse a cabo mediante las Ecuaciones
6a y 6b para el cálculo de AFu y BFu, respectivamente, mientras que para deducir el valor
de Fpos se utilizaría la Ecuación 7a para AFpos y la Ecuación 7b para BFpos. Por otra parte,
para TCRFP de la serie C, el cálculo del parámetro AFu se abordaría con la Ecuación 8a y
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 12
BFu con la Ecuación 8b. Por último, AFpos se obtendría con la Ecuación 9a y BFpos con la
Ecuación 9b.
TCRFP de la serie B
7340 𝑖𝑖𝑖𝑖 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3
𝑨𝑨𝑭𝑭𝒖𝒖 = � [4a]
−244 × 10−1 𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 772𝑪𝑪𝒇𝒇 + 5983 𝑖𝑖𝑖𝑖 𝑪𝑪𝒇𝒇 > 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3

−700 × 10−3 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3


𝑩𝑩𝑭𝑭𝒖𝒖 = � 162 × 10−5 𝑪𝑪2𝒇𝒇 − 182 × 10−4 𝑪𝑪𝒇𝒇 − 669 × 10−3 𝟐𝟐 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3 < 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 6 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3 [4b]
−720 × 10−3 𝑪𝑪𝒇𝒇 > 6 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3

𝑨𝑨𝑭𝑭𝒑𝒑𝒑𝒑𝒑𝒑 = −316 × 10−1 𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 1284𝑪𝑪𝒇𝒇 + 2431 [5a]

𝑩𝑩𝑭𝑭𝒑𝒑𝒐𝒐𝒐𝒐 = −482 × 10−6 𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 901 × 10−4 𝑪𝑪𝒇𝒇 − 797 × 10−2 [5b]

TCRFP de la serie C
51149 𝑖𝑖𝑖𝑖 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3
𝑨𝑨𝑭𝑭𝒖𝒖 = � [6a]
−403𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 8272𝑪𝑪𝒇𝒇 + 36205 𝑖𝑖𝑖𝑖 𝑪𝑪𝒇𝒇 > 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3

−983 × 10−3 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 2 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3


𝑩𝑩𝑭𝑭𝒖𝒖 = � 162 × 10−5 𝑪𝑪2𝒇𝒇 −4
− 197 × 10 𝑪𝑪𝒇𝒇 − 905 × 10 −3
𝟐𝟐 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚 < 𝑪𝑪𝒇𝒇 ≤ 6 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚3
3
[6b]
−3 3
−965 × 10 𝑪𝑪𝒇𝒇 > 6 𝑘𝑘𝑘𝑘/𝑚𝑚

𝑨𝑨𝑭𝑭𝒑𝒑𝒑𝒑𝒑𝒑 = −344 × 10−1 𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 9153𝑪𝑪𝒇𝒇 + 24948 [7a]

𝑩𝑩𝑭𝑭𝒑𝒑𝒐𝒐𝒐𝒐 = −679 × 10−6 𝑪𝑪2𝒇𝒇 + 137 × 10−4 𝑪𝑪𝒇𝒇 − 108 × 10−2 [7b]

Las Ecuaciones 5 - 9 son una herramienta valiosa, a falta de otros métodos en la literatura
técnica, para el diseño de TCRFP. El proceso habitual de diseño de un TC consiste en,
partiendo de un Di (derivado de un cálculo hidráulico previo) y de un espesor h (fijado en
las normativas locales y/o nacionales) obtener una estimación de la Cf necesaria para
alcanzar una clase resistente especificada (Tabla 1). Con este método propuesto, se
puede deducir un valor de Cf fiable sin necesidad de tener que recurrir al ECD como
método de diseño indirecto sino sólo como método de comprobación y de control. Este
método es válido para TCRFP de Di de 300 a 1000 mm con espesores de la serie B y C y
Cf no superiores a 10 kg/m3, siendo este último el valor máximo establecido por el
fabricante de las fibras utilizadas en la campaña experimental y la cota de viabilidad
económica.

5 Aplicación del método de diseño propuesto


El método de diseño propuesto basado en las Ecuaciones 5 - 9 se ha empleado para
conocer cuales son las clases resistentes (Tabla 1) que se pueden alcanzar sólo
utilizando fibras como material de refuerzo del hormigón y considerando valores de Cf ≤ 8
kg/m3. Es decir, se han confeccionado unas tablas de diseño para TCRFP con fibras de
prestaciones no inferiores a las empleadas en este trabajo y que pueden considerarse
como herramienta de decisión, junto con otros criterios económicos y estratégicos de
cada planta, para elegir entre un tubo de hormigón armado tradicional o un TCRFP que
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 13
alcance la clase resistente deseada habiendo fijado un Di y un h. En la Tabla 6 se
presentan los resultados obtenidos para los TCRFP de la serie B y en la Tabla 7 para los
de la serie C.
Los resultados recogidos en Tabla 8 y 9 ponen de manifiesto que el empleo de TCRFP
puede conducir a la eliminación de toda armadura y lograr las clases resistentes más
elevadas (C135 y C180) en tubos con Di ≤ 600 mm recurriendo a valores de Cf no
superiores a 8 kg/m3. Asimismo, para Di > 600 mm se pueden alcanzar clases resistentes
moderadas (C60 y C90) con Cf entre 2 kg/m3 y 6 kg/m3 sin la necesidad de emplear otro
tipo de refuerzo adicional.
Tabla 8 - Clases resistentes alcanzadas con TCRFP de la serie B.

Cf = 2 kg/m3 Cf = 4 kg/m3 Cf = 6 kg/m3 Cf = 8 kg/m3


300 C60 C135 C135 C180
400 C60 C90 C90 C135
500 - C60 C90 C90
Di (mm)

600 - C60 C90 C90


700 - C60 C60 C90
800 - C60 C60 C60
900 - - C60 C60
1000 - - C60 C60

Tabla 9 - Clases resistentes alcanzadas con TCRFP de la serie C.

Cf = 2 kg/m3 Cf = 4 kg/m3 Cf = 6 kg/m3 Cf = 8 kg/m3


300 C135 C180 C180 C180
400 C90 C180 C180 C180
500 C90 C135 C135 C180
Di (mm)

600 C60 C90 C135 C135


700 C60 C90 C90 C90
800 - C60 C90 C90
900 - C60 C90 C90
1000 - C60 C90 C90

Estos resultados son especialmente interesantes, pues este rango de diámetros y clases
resistentes moderadas son muy habituales en conducciones de saneamiento y pueden
ser una solución atractiva para hacer frente a las necesidades resistentes particulares y,
sobretodo, para evitar los problemas asociados de durabilidad y costes de mantenimiento
asociado al uso de refuerzo tradicional con barras de acero. Esto último es especialmente
crítico en los sistemas de saneamiento de ciudades, donde el hacer actuaciones de
reparación en la vía pública conduce habitualmente a distorsiones muy importantes al
funcionamiento normal de éstas.
En cualquier caso, las Tablas 8 y 9 son una herramienta orientativa que permite fijar
fronteras de aplicación del TCRFP en tuberías tipificadas en la EN 1916:2002 y de este

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 14


modo poder decidir entre el uso de un TCRFA y un TCRFP. Asimismo, de caras a una
mejor optimización del material, los valores de Cf pueden evaluarse de forma más
ajustada con las Ecuaciones 5 - 9 (en las dosificaciones de este tipo de fibras suele
trabajarse con precisiones de 0,5 kg/m3).

5 Conclusiones
En este artículo se han empleado los resultados experimentales obtenidos en los TCRFP,
presentados en la primera parte de este trabajo (FIGUEIREDO, et al., 2012), para verificar
que el modelo MAP es una herramienta adecuada para simular el ECD en este tipo de
tubos. En esta línea, se destaca lo siguiente:
• El modelo MAP tiende a infravalorar la carga Fu (ξFu máximo de un 8,0%) y
sobrevalorar la carga Fpos (ξFpos mínimo de un -11,7%). Estos resultados a nivel de
simulación numérica, teniendo en cuenta el gran número de variables involucradas así
como el nivel de dispersiones que habitualmente presenta la respuesta a tracción del
CRF.
• Los valores de Fu y Fpos para Di entre 300 mm y 1000 mm de las series B y C de la
UNE 127196 presentan coeficientes R2 próximos a la unidad cuando se ajustan con
curvas exponenciales del tipo F = ADi-B. Asimismo, los coeficientes A y B se ajustan
satisfactoriamente a Cf con polinomios de segundo grado. Todos estos ajustes
derivan en las Ecuaciones 5 - 9 que se proponen como herramienta de diseño de
TCRFP y con las que se pretende facilitar al proyectista la elección de un valor de Cf
fiable para alcanzar la clase resistente requerida en proyecto. Estas ecuaciones están
particularizadas para el tipo de fibras empleadas en la campaña realizada, sin
embargo, pueden emplearse para fibras con prestaciones superiores, obteniendo así
resultados del lado de la seguridad, o, ajustar A y B en base de las curvas fRm,1 - Cf y
fRm,4 - fRm,1 del tipo de fibra que se desee utilizar.
• En base a las Ecuaciones 5 - 9 se han propuesto unas tablas de diseño para TCRFP
con espesores de la serie B (Tabla 8) y serie C (Tabla 9) que reflejan las fronteras del
empleo del CRFP con las fibras empleadas en la campaña experimental desarrollada.
En particular, se pone manifiesto que se pueden alcanzar clases resistentes elevadas,
eliminando toda la armadura tradicional, en tubos de hasta 600 mm de Di. Por otra
parte, se prueba que el CRFP es una alternativa a las barras en tubos de Di superior a
600 mm para las clases resistentes medias, muy habituales en obras de saneamiento.

Actualmente se están llevando a cabo campañas experimentales donde se analiza la


posibilidad de emplear configuraciones mixtas de armadura (barras de refuerzo de acero
+ fibras) con el fin de ampliar el campo de aplicación del CRF a tuberías con Di superiores
a los 1000 mm y las clases resistentes más exigentes.

6 Agradecimientos
Los autores del presente documento quieren poner de manifiesto su agradecimiento por la
concesión por parte del Ministerio de Economía y Competitividad de España del Proyecto
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 15
de Investigación BIA2010-17478: Procesos constructivos mediante hormigones
reforzados con fibras.
Asimismo, el profesor Antonio D. de Figueiredo agradece el apoyo de CAPES
Coordenação de Aperfeiçoamento de Pessoal de Nível Superior por haberle otorgado la
beca postdoctoral desarrollada en la UPC que le permitió su participación en este trabajo.
Por último, Renata C. Escariz agradece el apoyo de la Fundação de Amparo à Pesquisa
do Estado de São Paulo (FAPESP) por haberle otorgado la beca de pos-grado.

Referências
ABNT-NBR 8890:2007. Tubo de concreto, de seção circular, para águas pluviais e
esgotos sanitários. 2007.

BARROS JAO, FIGUEIRAS JA. Flexural behaviour of SFRC: Testing and modelling.
ASCE J Mater Civil Eng 1999; 11(4):331-9.

BLANCO A, PUJADAS P, de la FUENTE A, AGUADO A. Comparative analysis of


constitutive models of fibre reinforced concrete. Hormigón y Acero 2010; 61(256):83-
100.

CAMPOS R. Análise comparativa de desempenho mecânico de tubos de concreto


reforçados com macrofibras poliméricas e fibras de aço. Dissertação de Mestrado.
Universidade de São Paulo, USP. 2011.

de la FUENTE A, CAMPOS R, FIGUEIREDO A, MOLINS C, AGUADO A. A new design


method for steel fibre reinforced concrete pipes. Const build mat 2012; 30:547-55.
2012a.

de la FUENTE A, AGUADO A, MOLINS C, ARMENGOU J. Numerical model for the


analysis up to failure of precast concrete sections. Comp Struct. 2012. [Accepted in
Comp and Struc]. doi: 10.1016/j.compstruc.2012.04.007. 2012b.

de la FUENTE A. New methodology for the design of structural concrete pipes. Tese
Doutorado, Universitat Politècnica de Catalunya, UPC, Barcelona (Espanha), 2011.

de la FUENTE A, AGUADO A, MOLINS C. Diseño óptimo integral de tubos de


hormigón. Hormigón y Acero. 2011; 62 (260):77-91. 2011a.

de la FUENTE A, FIGUEIREDO A, AGUADO A, MOLINS C, CHAMA NETO PJ.


Experimentation and numerical simulation of steel fibre reinforced concrete pipes.
Mater Construct 2011; 61(302):275-88. 2011b.

de la FUENTE A, FIGUEIREDO A, AGUADO A, MOLINS C, CHAMA NETO PJ. Steel fiber


reinforced concrete pipes. Part 2: numerical model to simulate the crushing test. Revista
RIEM 2011; 5(1):12-25. 2011c.
ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 16
de la FUENTE A, ARMENGOU J. Structural applications of FRC: Concrete pipes,
sandwich panels and earth retaining panels. Technical Symposium 2007-JT-02,
Universistat Politècnica de Catalunya, UPC, Barcelona (Espanha), 2007.

di PRISCO M. FRC: Structural applications and standards. Mater Struct 2009;


42(9):1169-71.

FIGUEIREDO A., de la FUENTE A., AGUADO A., SALVADOR RP., ESCARIZ RC. Fibras
plásticas como reforço de tubos de concreto. Parte 1: Caracterização tecnológica.
IBRACON 2012. [no prelo].

FIGUEIREDO A., de la FUENTE A., AGUADO A., Molins C., Chama Neto PJ. Steel fibre
reinforced concrete pipes. Part 1: technological analysis of the mechanical
behaviour. Revista RIEM 2011; 5(1):1-11.

HEGER FJ. A theory for the structural behaviour of reinforced concrete pipes. Tese
Doutorado, Department of Civil and Sanitary Engineering, Massachusetts Institute of
Technology, MIT, Massachusetts (USA), 1962.

LARANJEIRA F. Design-oriented constitutive model for steel fiber reinforced


concrete. Tese Doutorado, UPC, Barcelona (Espanha), 2010.

PEDERSEN EJ. Calculation of FRC pipes based on the fictious crack model.
Department of Structural Engineering. Technical University of Denmark, 1995.

PEDERSEN EJ. Fiber reinforced concrete pipes. UNICON beton I/S. Dezembro, 1992.

RAMOS MF. Análise experimental de tubos de concreto reforçado com fibras de


aço. Universidade Estadual de Campinas, UNICAMP, 2002.

SILVA JL., El DEBS MK., BECK AT. Reliability evaluation of reinforced concrete pipes
in crack opening limit state. RIEM 2008; 1(4):314-30.

EN 1916:2002. Concrete pipes and fittings, unreinforced, steel fibre and reinforced.
2002.

EN 14651:2007. Test method for metallic fibre concrete ― Measuring the flexural
tensile strength (limit of proportionality (LOP), residual). 2007.

UNE-EN 127916. Concrete pipes and fittings, unreinforced, steel fibre and
reinforced. Spanish adaptation of the EN 1916:2002. 2004.

UNE-EN 1916:2008. Tubos y piezas complementarias de hormigón en masa,


hormigón armado y hormigón con fibra de acero. 2008.

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 17


VANDEWALLE L. et al. Test and design methods for steel fibre reinforced concrete.
σ-ε design method. Mater Struct 2003; 36:560-7.

VIÑOLAS B. Applications and advances of the MIVES methodology in multicriteria


decision analysis. PhD thesis, Universitat Politècnica de Catalunya, UPC, Barcelona
(Spain), 2011.

WALRAVEN J. High performance fibre reinforced concrete: progress in knowledge and


design codes. Mater Struct 2009; 42(9):1247-60.

ANAIS DO 54º CONGRESSO BRASILEIRO DO CONCRETO - CBC2012 – 54CBC 18

Você também pode gostar