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22 de Abril de 2007
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SUMÁRIO
Introdução........................................................................................................03
Introdução ao estudo da numerologia ............................................................04
O significado dos números..............................................................................07
Gematria..........................................................................................................22
Redução Teosófica das letras.........................................................................22
Significado das letras......................................................................................23
Vibração da letras...........................................................................................37
Síntese Pitagórica...........................................................................................39
Bibliografia......................................................................................................41
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Introdução
raíz 1 más 2 más 3 más 4 ser 10. El número 6 tiene como raíz 1 + 2 + 3 + 4
+ 5 + 6 = 21.Números de más de una cifra. - los números a cifras múltiples
son el objeto de observaciones especiales. En primer lugar pueden ser
devueltos por la adición de sus elementos constituyentes una cifra. Es la
Reducción teosófica de L.C. DE SAINT-MARTIN, conocido de toda la
antigüedad. Sea el número 427. Son formadas por tres cifras, por 4, 2, 7. Lo
tiene sumando 4 más 2 más 7, obtenemos 13. Sumando 1 más 3,
obtenemos 4. Lo que nos da la reducción teosófica de 427. Es decir 427
igual místicamente 4. En este caso la adición sirve para volver a levantar un
número de la materia hacia el plano espiritual. Dirigentes. - en todo número
de más de una cifra, es la primera cifra a la izquierda que indica el carácter
y la familia espiritual del número entero. Así en 427, es el 4 las que es la
llave familiar del número, mientras que en el número 724, que regreso lo
mismo, es el 7 los que es dirigente y se señalan con familia
Números simétricos. - todo número compuesto de varias cifras posee su
número simétrico por la caída de las cifras.
Así 41 tiene Para elemento simétrico 14; la primera torpeza, el segundo par.
32 tiene para elemento simétrico 23, el primer par la segunda torpeza.
Los números compuestos mismos de dos cifras o varios idénticos tienen
para elementos simétricos sólo.
Así 22-33-44-333-555-, etc.
Obtenemos luces especiales por la adición de dos números simétricos.
41 y 14 dan 55
32 y 23 dan también 55.
Progresiones ascendientes y descendentes.-En escribiendo todas las
cifras desde la unidad hasta la cifra que precede la cifra considerada,
obtenemos por adición de las cifras de la misma fila en ambas progresiones
ascendientes y descendentes, la cifra estudiada.
Sea el número 4
Escribimos 1 3 Total 4
2 2 id.
3 1 id.
Sea el número 7; escribimos la serie de las 6 primeras cifras:
16
25
34
43
52
61
Está de allí naturalmente también para cualquier número
Total 7 para toda la dispone en serie (PAPUS, 1934, p. 7-8).
No capítulo III do seu Tarô dos Boêmios, Papus (2003, p. 37) apresenta alguns
estudos acerca dos números, basicamente por meio de duas operações
desconhecidas por nossos cientistas: a redução e a adição teosóficas. Assim, as
considera como indispensáveis para entendermos a antiguidade, uma vez que
oferecem um meio de penetrar a essência da Natureza, além de formarem a base
do ensinamento esotérico.
A primeira delas, a redução teosófica, consiste tão somente em reduzir os
números formados por mais de um algarismo a apenas um, somando-se os seus
valores, individualmente (Ex: 10 = 1 + 0 = 1; 127 = 1 + 2 + 7 = 10 = 1 + 0 = 1). Todos
os números, por esta operação, reduzir-se-iam aos nove primeiros algarismos.
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2 – O número dual
Agrippa considera que o número 2 é o primeiro número, uma vez que está
composto unicamente pela unidade, sendo considerado a primeira semente da
unidade, a primeira criação ou produção. É o número da primeira paridade, da
igualdade, da extremidade e do intervalo. Remete à justiça porque significa o
equilíbrio entre duas coisas e também é chamado do número da ciência e da
memória.
También se lo llama mediador de posibilidad, partícipe de lo bueno y lo malo,
príncipe de la división, la multitud y la distinción, y significa la materia. También, a
veces, se lo llama el número de la discordia y de la confusión, de la desdicha y la
impureza. Y san Jerónimo escribió contra Joviano: "Y jamás se dijo en el segundo
día de la creación del mundo: Y el Señor vio que era bueno, porque el número dual
es malo". He aquí porqué también Dios ordenó que todos los animales inmundos
entrasen de a pares en el arca, porque, como dije, el número binario es malo e
inmundo y, sobre todo, desdichado cuando las cosas de donde se extraen algunos
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auspicios son Saturnales o Marciales; pues estos dos infortunados son señalados por
los astrólogos. También se ha dicho que el dual produce los encuentros de las
sombras, los terrores de las larvas, los maleficios de los malos espíritus en quienes
viajan de noche.
Pitágoras, como expresa Eusebio, decía que la unidad era Dios y buena inteligencia,
y que la dualidad era demonio y maldad, en la que se halla una multitud material;
por ello los pitagóricos dicen que el dual no es un número sino una con-fusión de
unidades. Y Plutarco dice que los pitagóricos llamaban Apolo a la unidad, proceso a
la díada, justicia a la tríada, que es la consumación perfecta aunque no deja de
contener muchos misterios. Hay dos tablas de la ley sobre el Sinaí; dos querubines
observan la propiciación de Moisés; dos olivos degustan el aceite en Zacarías; dos
naturalezas en Cristo, la divina y la humana; por ello Moisés vio dos apariciones de
Dios, es decir, el rostro y la espalda; asimismo, dos Testamentos, dos preceptos de
caridad, dos primeras dignidades, dos primeros pueblos; dos clases de espíritus, los
buenos y los malos; dos creadores intelectuales, el ángel y el alma; dos grandes
luminares, dos solsticios, dos equinoccios; dos polos; dos elementos que producen el
alma viviente, la tierra y el agua (AGRIPPA, s.d, p. 7-8).
3 – Ternário
É denominado por Cornélio Agrippa como o primeiro número incomposto,
representando a perfeição por ser sagrado e mais potente que os outros, já que se
considera Deus como formado por três pessoas e, na religião, pelas três virtudes
teologais. Assim, considera o número três como de muita utilidade aos rituais.
Este número trinario, perfecto por su triple dimensión en largo, ancho y
profundidad, sin otra dimensión posterior, se llama primer número cúbico,
porque no se puede agregar nada a un cuerpo de tres medidas o a un
número cúbico. Por ello, Aristóteles, en el comienzo de sus Discursos sobre
el Cielo, lo denomina ley según la cual todas las cosas están ordenadas.
Las cosas espirituales y corporales están compuestas por tres cosas: un
principio, un medio y un fin. El mundo, dice Trismegisto, está compuesto por
tres cosas: el Hemarmene, la necesidad y el orden; es decir, la conjunción
de las causas entre sí, que muchos llaman destino, la ejecución del feto, y
su justa distribución. Toda la extensión o medida del tiempo está encerrada
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4 – O quaternário
O número 4 é chamado pelos Pitagóricos de Tetracto e refere-se ao tetragrama
sagrado hebraico iod-he-vo-he, representando, pois, o retorno à unidade por meio
da personificação do espírito na matéria. Significa a solidez revelada pela figura
quadrada. É o primeiro plano composto por duas proporções. Chefe da segunda
trindade, o quatro é um termo de transição, negativo ao número um. Refere-se ao
Deus Pai englobando o mistério da Trindade
De allí deriva que el Altísimo Nombre de Dios y de la Divina Trinidad sea
Tetragrammaton, a saber, lud, Hei, y Vau; Hei, donde la aspiración Hei
señala que el espíritu procede de uno y otro; pues la sola Hei doble crea
una doble sílaba y termina todo el nombre, y se pronuncia, como quieren
algunos, IOVA, de donde deriva el Júpiter de los paganos, que los antiguos
pintaron con cuatro orejas.
Por ello el número cuatro es fuente y clave de toda la divinidad. Los
pitagóricos lo llaman fuente perpetua de la naturaleza: pues hay cuatro
grados en la escala de la naturaleza, a saber: ser, vivir, sentir y compren-
der. Hay cuatro movimientos en la naturaleza: el ascendente, el
descendente, el hacia adelante y el circular. Cuatro ángulos en el cielo: orto,
ocaso, medio y bajo cielo. Cuatro elementos bajo el cielo: el fuego, el aire, el
agua y la tierra; que siguen estas cuatro triplicidades en el cielo. Cuatro
cualidades primarias bajo el cielo, de donde derivan las cuatro triplicidades
celestes: el frío, el calor, la sequía y la humedad; de allí provienen los cuatro
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5 – Quinário
O número 5 tem a sua principal importância pelo fato de ser a justa metade de
10 (número central da filosofia pitagórica, a década). Assim, o 5 era chamado de
matrimônio, uma vez que continha em si um número masculino (ímpar) e um
feminino (par), de forma a que era consagrado à deusa Afrodite. Simbolizava as
cinco formas atômicas (pirâmide, cubo, octaedro, icosaedro e dodecaedro), que, por
sua vez representavam, respectivamente, os cinco elementos: fogo, terra, ar, água e
éter. Representa, também, os cinco sentidos do homem: a vista, audição, paladar,
olfato e tato; os cinco dedos da mão;
Hay incluso cinco clases de cosas con las que Dios compuso todo, a saber,
la esencia, el mismo, lo otro, el juicio y el movimiento. La golondrina tiene
siempre cinco polluelos que nutre con mucha equidad, comenzando por el
que nació primero, y considerando en todos el orden de su nacimiento. Este
número tiene incluso mucha virtud en las ceremonias, pues en los sacrificios
expulsa a los malos demonios; en las cosas naturales cura y preserva de los
venenos.
También se le llama número de felicidad y gracia, y es el sello del Espíritu
Santo, y el lazo que lo liga todo, y el número de la cruz; se distingue a través
de las llagas principales del Cristo, que éste quiso conservar en su cuerpo
glorificado. Los filósofos paganos lo consagraron y dedicaron a Mercurio,
siendo mucho más excelente que el número cuaternario en la medida en
que un cuerpo animado está por encima de otro que no se halla animado
(AGRIPPA, s.d., p. 18).
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6 – O Senário
É considerado um número de perfeição já que a soma de seus divisores
próprios totaliza 6 (1 + 2 + 3 = 6). Por isso também era chamado de matrimônio,
análogo ao 5, diferindo deste pela substituição da adição pela multiplicação. É
denominado o selo do mundo, uma vez que ao sexto dia a obra da criação divina foi
completada em sua perfeição.
También se le llama el número del hombre, porque el hombre fue creado el
día sexto, e incluso se le denomina el número de la redención, pues el día
sexto el Cristo sufrió por nuestra redención, y es por ello que se vincula
mucho con la cruz. También se le llama el número, del trabajo, y de la
servidumbre; por ello en la ley hebraica se ordenaba trabajar durante seis
días, recoger el maná durante seis días, sembrar la tierra durante seis años,
y que un esclavo sirviera a su amo durante seis años. L oria del Señor se
oscureció durante seis días sobre el monte Sinaí, cubriéndolo una nube. Los
querubines tienen seis alas; hay seis círculos en el firmamento: el ártico, el
antártico, los dos trópicos, el equinoccial y el eclíptico; y hay seis planetas
errantes, Saturno, Júpiter, Marte, Venus, Mercurio y la Luna, que corren a lo
largo del Zodíaco de ambos lados de la eclíptica. En los elementos hay seis
cualidades sustantivas, a saber, la agudeza, la sutileza y el movimiento, y
sus -contrarios, la obtusidad, la densidad y el reposo. Hay seis diferentes
órdenes de posiciones, a saber: alto, bajo, delante, detrás, a derecha y a
izquierda. Hay seis oficios de la naturaleza sin los cuales nada puede existir,
a saber, grandor, color, figura, intervalo, estado y movimiento. La figura
sólida del cuadrado tiene también seis caras. En toda armonía hay seis
tonos, a saber, cinco tonos y dos semitonos que forman un tono, que es el
sexto (AGRIPPA, s.d., p. 20).
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7 – Setenário
O sete é um número que não pode ser gerado por nenhum outro da década ou
10, pois não é divisível por nenhum outro número senão por ele mesmo. Por isso é
chamado número virgem, já que também não gera nenhum outro dentro da década.
Pitágoras considerava-o especial tendo-o consagrado à deusa Atena, nascida da
cabeça de Zeus. Portanto, representa a mente. Está relacionado aos sete planetas
(Marte, Vênus, Mercúrio, Júpiter, Lua, Saturno E Urano) correspondentes aos sete
dias da semana. Ainda, sete é o número das notas musicais e da entonação da voz
humana.
Los pitagóricos le llaman el vehículo de la vida humana, pues no cambia en
función de sus partes sino que se perfecciona por propio derecho de su
totalidad, ya que abarca el cuerpo y el alma; porque el cuerpo está
compuesto por cuatro elementos en cuatro cualidades, el número trinario
considera al alma por su triple fuerza, a saber, la razonable, la irascible y la
concupiscible. El septenario está compuesto, pues, por tres y cuatro junto al
alma en el cuerpo (AGRIPPA, s.d., p. 20).
Também, desde o nascimento e desenvolvimento da vida humana, o número
sete está relacionado às suas fases, tais como a troca de dentição aos sete anos de
idade, a adolescência aos quatorze e a maioridade aos vinte e um anos.
Corresponde ainda ao ciclo da Lua que, durante 28 dias dá a volta em todo o
zodíaco e altera suas fases de sete em sete dias (nova, crescente, cheia e
minguante).
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8 – Octonário
Era considerado pelos platônicos, como o número da justiça e da plenitude,
haja vista que é o primeiro número que se divide em números iguais quatro e
estes quatro, por sua vez, dividem-se novamente, havendo igualdade de divisão
(justiça). Também, é o primeiro que recebe um corpo sólido, o primeiro cubo real
(plenitude).
Por ello Orfeo conjuraba corrientemente a los dioses con el ocho, para
obtener justicia; los nombres que incluía eran: fuego, agua, tierra, cielo,
luna, sol, día y noche. Hay sólo ocho esferas visibles en los cielos; el ocho
nos señala la propiedad de la naturaleza corporal que Orfeo abarcó en el
octonario de los himnos marítimos. También se le llamó número de alianza y
circuncisión; los judíos ordenaban que ésta se cumpliese el octavo día.
Había en la antigua ley ocho ornamentos sacerdotales, a saber, los talares,
la túnica, el cíngulo, la tiara, la estola, que llegaba a los talones, el
superhumeral y la lámina de oro. Este número concuerda también con la
eternidad, y la consumación del mundo, porque sigue al septenario que
simboliza al tiempo; por ello todavía se le llama número de bienaventuranza;
pues el CRISTO nos enseña, en Mateo, que hay ocho grados de
bienaventuranza. También se le llama número de salud y conservación,
porque en el arca de Noé se salvaron del Diluvio ocho seres humanos.
Jessé tuvo ocho hijos, de los cuales David fue el octavo. Zacarías, padre de
Juan, recuperó la palabra al octavo día. Se dice que este número fue
consagrado a Dionisio, que vino al mundo el octavo mes; por cuyo designio
la isla de Naxos, que le está dedicada, obtuvo la prerrogativa de que las
mujeres que allí habiten den a luz con felicidad el octavo mes, y produzcan
hijos que vivan, en lugar de todos los demás que, al nacer en este lapso,
mueren, corriendo sus madres gran riesgo (AGRIPPA, s.d., p. 31).
9 – Novenário
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El número Nueve está consagrado a las Musas, y puede ayudar al orden de las
esferas celestes y de los espíritus divinos, con nueve esferas móviles, y a
continuación de estas nueve esferas, hay nueve Musas, a saber: Calíope, Urania,
Polimnia, Terpsícore, Clío, Melpómene, Erato, Euterpe y Talía; de manera que, en
conexión con estas nueve esferas, la primera de estas nueve Musas representa la
esfera más elevada, que se llama el primer móvil; y así, descendiendo por grados,
según el orden descripto, hasta la última que representa la esfera de la Luna; de esa
manera Calíope tiene relación con el primer móvil; Urania, con el cielo estrellado;
Polimnia, con Saturno; Terpsícore, con Júpiter; Clío, con Marte; Melpómene, con el
Sol; Erato, con Venus; Euterpe, con Mercurio, y Talía, con la Luna. Existen también
nueve órdenes de ángeles bienaventurados, a saber: los Serafines, los Querubines,
los Tronos, las Dominaciones, las Virtudes; las Potestades, los Principados, los
Arcángeles, los Angeles, que Ezequiel representa con nueve piedras, que son el
zafiro, la esmeralda, el carbunclo, el berilo, el ónix, la crisolita, el jaspe, el topacio y
la sardónix.
En este número se halla también el gran misterio de la Cruz, porque Jesús nuestro
Señor entregó su espíritu a la hora novena. Durante nueve días los antiguos
celebraban los funerales de los difuntos; se dice que Minos recibió de Júpiter sus
leyes en una caverna, en nueve años; por ello Hornero observó este número respecto
de leyes a estatuir, respuestas a pronunciar y calamidades a causar estragos. Los
astrólogos también señalan los años novenos, o eneáticos, en las edades y en la vida
de los hombres, al igual que los septenarios que denominan climatéricos, como
famosos por cambio importante. Sin embargo, a veces significa imperfección o
incompletamiento. pues no llega a la perfección del denario, y le falta unidad para
alcanzarlo, como lo explica Agustín respecto de los diez leprosos de las Sagradas
Escrituras; y la altura de nueve codos del Rey de O;. l;asán. que es el tipo del diablo,
no carece de misterio (AGRIPPA, s.d., p. 31).
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10 – Década
A década ou denário é chamado “o número universal” ou total, uma vez que se
o considera a unidade básica de contagem, já que, uma vez atingido, a série
numérica repete-se ad infinitum. Ademais, contém em si todos os outros números e
por isso, em religião, é o número do poder múltiplo e da purificação das almas.
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11 e 12 – Undécimo e Duodécimo
O décimo primeiro número, por ultrapassar o décimo (da lei e dos preceitos) e
estar abaixo do doze (graça e perfeição), é considerado o número dos pecados e
dos penitentes.
por ello se ordenaba confeccionar once sacos de cilicio en el tabernáculo;
aquellos eran la vestimenta de los penitentes y de quienes lloraban sus
pecados. Este número no tiene comunicación alguna con las cosas divinas,
ni con las celestes, ni atracción ni escala alguna que conduzca a los
superiores. Aunque no tiene mérito alguno, empero a veces obtiene alguna
gracia gratuita del cielo, como aquél que fue llamado a la hora undécima a
la viña del Señor, y recibió la recompensa de quienes sufrieran el agobio y
calor de todo el día (AGRIPPA, s.d., p. 35).
Já o duodécimo é considerado divino, uma vez que se relaciona com os doze
signos zodiacais, servindo como medida aos céus, ajudando a governar os espíritos.
Júpiter efectúa su recorrido en doce años, y la Luna recorre doce grados por
día. En el cuerpo humano hay doce articulaciones principales, a saber: en
las manos, en los codos, en los hombros, en los muslos, en las rodillas y en
las vértebras de los pies. La fuerza del duodenario es también grandísima
en los misterios divinos. Dios eligió doce familias' de Israel, y les confió doce
príncipes; ordenó que hubiese doce piedras ubicadas en el fondo del Jordán
y otras tantas sobre el pecho del sacerdote. Hubo doce panes de
proposición; y el altar estaba construido con doce piedras, y el mar de
bronce construido por Salomón estaba sostenido por doce leones; en Helim
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había doce fuentes; a las doce tribus se les adjudicaron doce apóstoles del
Cristo; fueron señalados y elegidos doce mil hombres de los pueblos; la
Reina del Cielo fue coronada con doce estrellas; y en el Evangelio hay doce
cestas de pedazos de pan sobrantes; doce ángeles presidían en las doce
puertas de la ciudad; y había doce piedras en la Jerusalén celeste. Entre las
cosas inferiores, muchos seres crecen con este número: la liebre y el
conejo, que son muy fecundos, engendran doce veces al año; el camello
gesta su fruto durante doce meses, y el pavo real pone doce huevos
(AGRIPPA, s.d., p. 35).
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Gematria
Gematria é o estudo que visa à associação de letras, palavras e frases com os
números. Segundo Aleister Crowley, deriva do grego γραμματεια (grammateia) e
baseia-se no relativo valor numérico das palavras. Está ligada à numerologia
cabalística, atribuindo valores às letras hebraicas. Assim,
1 2 3 4 5 6 7 8 9
א ב ג ד ה ו ז ח ט
10 20 30 40 50 60 70 80 90
י כ ך ם נ מ ע פ ק
100 200 300 400 500 600 700 800 900
ר ש ף פ ךfinal םfinal ןfinal ףfinal ץfinal
B. (2)
É uma consoante e, portanto, não pode ser emitida desacompanhada de uma
vogal. “Exprime hieroglificamente a boca do homem como órgão da palavra. A
palavra é uma produção saída do mais íntimo do ser” (PAPUS, 2003, p. 131).
Significa tudo que é interior. Corresponde à nota Fá e à Lua e seu número é o 2, o
binário, passivo, a dualidade emanando a idéia de reflexo interno.
“Deus mesmo, ou Deus Pai vai se refletir e dá nascimento ao Deus homem, ou
Deus Filho, negativo em relação ao seu criador” (PAPUS, 2003, p. 131). Representa
a imagem de Ísis (Natureza), esposa de Osíris.
“Em Deus, é o reflexo de Osíris, o reflexo de Deus Pai; Ísis, ou Deus Filho. No
Homem, é o reflexo de Adão, do homem absoluto; Eva, a mulher, a vida. No
Universo, é o reflexo da Natureza naturante: é a Natureza naturada”.
No plano espiritual indica o pensamento matriz donde se moldam as imagens,
a fonte criadora manifestação do eterno.
No plano mental remete à compreensão do sentido dos opostos e
ensinamentos ocultos; inteligência manifestando a sabedoria.
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G. (3) C.
A terceira letra primitiva, o Ghimel, “exprime hieroglificamente a garganta, a
mão do homem semicerrada e na ação de pegar. Daí tudo o que fecha, tudo o que é
oco, um canal, um cercado” (PAPUS, 2003, p. 135). É onde o homem se forma e se
corporifica. Simboliza o envoltório material das formas espirituais. “A geração é o
mistério pelo qual o espírito se une à matéria, pelo que o Divino se torna Humano”
(PAPUS, 2003, p. 135).
Simboliza o organismo em função, representando o dinamismo vivente. Está
relacionado ao planeta Júpiter, à cor púrpura e à nota musical Si. Com relação aos
nossos sentidos, diz respeito ao tato. É a matriz universal no ato de dar à luz.
No plano espiritual representa o saber do oculto e do manifestado, o presente,
o passado e o futuro. Imaginação realizada e poder de expressão. No plano mental
diz respeito à trindade representando o espiritual, o mental e o físico; o positivo, o
negativo e o neutro. O Deus pai, o Filho e o Espírito Santo. No plano físico é a
manifestação, a geração dos desejos, idéias e atos que expressam o gozo do
exercício de novos atributos (ADOUM, s.d.).
D. (4)
“O Daleth exprime hieroglificamente o seio. Daqui a idéia de um objeto que dá
com abundância um alimento forte, fonte de um crescimento futuro. A criança é a
união viva que reúne em sua neutralidade o antagonismo dos sexos, e também o
Daleth marca a abundância que nasce da divisão (PAPUS, 2003, p. 139).”
Expressa a criação realizada segundo as leis divinas e representa o tetragrama
sagrado. Está associado ao planeta Urano (simbolizando a autoridade), à nota
musical Fá, aos quatro elementos e à cor roxo escura.
No plano espiritual é a materialização constante e eterna da virtude divina no
homem; e representa a vontade no pensamento. No plano mental representa as
quatro concordâncias: afirmação e negação, discussão e solução. No plano físico é
a realização das coisas materiais, a cristalização do esforço e a obtenção do poder,
segundo o amor, a verdade, a eqüidade e o trabalho (ADOUM, s.d.).
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He. (5)
Esta é mais sagrada letra do alfabeto, pois é o espírito sobre os elementos,
encadeando as entidades ligadas a cada um deles. O he exprime hieroglificamente a
aspiração, o fôlego. É pela aspiração que se entretém e se cria incessantemente a
vida. Daí a idéia de tudo o que anima, atribuída ao he. Mas a vida especializa o ser
diferenciando-o de todos os outros; daí a idéia do próprio ser, associada a essa
letra” (PAPUS, 2003, p. 144). Também é o princípio mediano que liga o material ao
espírito.
Está associado ao planeta Mercúrio, à cor amarelo e à nota musical Sol
sustenido (ou Lá bemol). Relaciona-se com as medidas geométricas, com o corpo
fluídico do homem e com o sistema nervoso.
No plano espiritual associa-se à Lei Universal da quintessência das coisas; é o
princípio andrógino, o fogo vivente criador no homem; representa o homem em
forma de pentagrama; a religião universal, a providência. No plano mental
representa a Lei e a Liberdade, o ensinamento e o conhecimento, o domínio das
paixões, o controle dos impulsos e a nossa identificação conosco e com os demais.
No plano físico representa a liberdade disciplinada no âmbito da lei; a direção e
controle das forças naturais, dos processos orgânicos e das criações físicas e
mentais (ADOUM, s.d.).
O significados do He no Divino é Reflexo da vontade, A Inteligência; no
Humano é o Reflexo do poder, A Autoridade, A Religião, A Fé; no Natural é o
Reflexo da alma do mundo, A Vida Universal.
O. U. (6)
Simboliza a causa operante que dirige nossas determinações. Representa o
princípio do verbo em cada ser (ADOUM, s.d.). Associa-se ao planeta Vênus, à nota
musical Dó (O) e Ré sustenido, ou Mi bemol (U). As cores a eles associadas são o
azul e o verde. Também se relacionam ao processo de geração, às emanações do
corpo astral do ser humano e à ciência cabalística; o conhecimento do bem e do
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mal. É a imagem do mistério mais profundo, a imagem do ponto que separa o ser do
não-ser.
A letra O representa o signo de Touro no Zodíaco. No plano espiritual
representa o conhecimento instintivo da transcendência dos atos, do bom e do mau;
o Mago do Tarô numa encruzilhada, representando a necessidade e a liberdade, o
vício e a virtude. No plano mental representa o dever e o direito; inspira às idéias
que nos determinam a escolher cada caso segundo a lição a que devemos aprender
na vida. No plano físico é a determinação da conduta; a abstenção às inclinações do
apetite ou o desfrute do gozo (ADOUM, s.d.).
O significado do O no Divino é o Equilíbrio da vontade e da inteligência, A
Beleza; no Humano, o equilíbrio do poder e da autoridade, O Amor, A Caridade; no
Natural, o equilíbrio da alma universal e da vida universal, A Atração Universal ou O
Amor Universal.
A letra O é a letra da realização externa; o U representa a realização interna.
Z. (7)
“O Zain exprime hieroglificamente uma flecha. Daí toda idéia de arma, de
instrumento que o homem emprega para dominar e vencer e para realizar seu
objetivo. O Zain exprime a vitória em todos os mundos. Ele corresponde
astronomicamente como letra simples, ao signo zodiacal de Gêmeos” (PAPUS,
2003, p. 156). Está relacionado com o planeta Netuno, a nota musical Si, a cor azul-
prateado, ao sentido olfativo e à astrologia mística. É a força operante no ato de
operar, o espírito feito forma; representa o tempo e o espaço, veneração, fortuna e
integridade. É a letra da vitória, mas também da força sexual do homem levando-o
ao triunfo. (ADOUM, s.d.)
No plano espiritual representa o domínio do espírito sobre a matéria, o
conhecimento dos 7 princípios que dirigem os atos criadores, e a posse das 7
virtudes necessárias ao autodomínio. No plano mental representa a certeza no
saber, no trabalho e a vitalização de nosso ser por intermédio do magnetismo
mental. No plano físico representa o desejo de superação (ADOUM, s.d.).
A letra Z significa, no Divino o Homem como função do criador, o Pai, o
Realizador; no Humano é a Lei, a realização; no Natural é a Natureza fazendo a
função de Adão.
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Heth. (8)
É a oitava letra do alfabeto primitivo hebraico que, no latino é representado
pela letra H muda. “O Heth exprime, hieroglificamente, um campo. Daqui a idéia de
tudo o que exige um trabalho, uma pena, um esforço. O esforço contínuo tem por
resultado estabelecer um equilíbrio entre a destruição das obras do homem pela
natureza entregue a si mesma, e a conservação dessas obras. Daqui a idéia do
poder equilibrante e por conseguinte, de justiça dada a esta letra” (PAPUS, 2003, p.
162).
O planeta a ela associado é Saturno, e sua nota musical é Ré. Corresponde
ainda ao signo de Câncer, à cor Índigo, ao sentido da audição, à astrologia judiciária
e a tudo que se relaciona com o tempo.
Representa, de acordo com Agrippa, o conhecimento humano acerca do bem e
do mal, a justiça, o equilíbrio, a divisão em partes iguais. É, segundo Pitágoras, a
harmonia do Universo, a inspiração divina, o verbo plasmado no ato. Também, a
alma que aspira e respira como corpo.
No plano espiritual está associado à justiça, à razão pura, à compreensão e à
eqüidade. No plano mental representa o direito, o êxito da paz, a ventura como fruto
da moderação. No plano físico é a lei do equilíbrio, a evolução e a involução
(ADOUM, s.d.).
O significado do H no Divino é a mulher como função de Deus, a Mãe; no
Humano é a justiça, reflexo da Realização e da Autoridade; no Natural é o reflexo da
Natureza em função de Eva, a existência elemental, conservação da natureza
naturada no mundo.
Teth. (9)
“O Teth representa hieroglificamente um teto. Daqui a idéia de um lugar de
segurança, de proteção. Todas as idéias geradas por essa letra derivam da aliança
da segurança e proteção dadas pela sabedoria. Corresponde astronomicamente ao
signo zodiacal de Leão” (PAPUS, 2003, p. 165).
Simboliza o princípio da conservação, o amor puro e sem desejos, a sabedoria.
A ela associam-se o planeta Marte, a nota musical Sol, a cor roxo, a alquimia mental
e a faculdade da clariaudiência. Expressa a prudência nos impulsos, o gênio
protetor, a iniciação.
28
I. J. Y. (10)
“O Iod representa hieroglificamente o dedo do homem, o indicador estendido
em sinal de comando. Daí esta letra tornar-se imagem da manifestação potencial, da
duração espiritual, enfim, da eternidade do tempo e de todas as idéias a ele
relacionadas” (PAPUS, 2003, p. 168).
Está associado aos signos de Virgem e Capricórnio, à cor celeste, ao Si como
nota musical, como também à intuição humana e a ciência dos números. Chama-se
roda divina, lei do Karma, causa e efeito. É a energia sexual, a serpente de fogo, o
Mago. Segundo Jorge Adoum, a letra I vibra desde os pés até a cabeça.
No plano espiritual representa a Lei de Compensação, a causa e efeito, a
alternativa que há entre a sucessão do espiritual e do material. No plano mental,
está associada à indução e à dedução; é a projeção infinita do pensamento em seus
distintos aspectos. No plano físico representa a ação e a reação, a aplicação do
moral ao material (ADOUM, s.d.).
Significa: o reflexo da vontade, a necessidade; reflexo do poder e da
realização, a potência mágica da vontade; reflexo da alma universal, a força em
potência de manifestação.
K. (11)
O K, derivado do Caf hebraico, simboliza o princípio dos atos reflexos, o
esforço animador em seu trabalho de criação. Expressa a energia e a manifestação
do poder. É o próprio conceito de força.
Está associado ao planeta Marte, ao signo de Aquário, à cor índigo, e ao Ré
bemol como nota musical. Também, relaciona-se à telepatia e à adivinhação. Aqui, a
persuasão possui maior força que a compulsão. É a inocência dominante, a força
divina e o poder moral. Ainda, representa a ação, o trabalho, a vitalidade.
29
L. (12)
O L simboliza o sacrifício voluntário, o movimento expansivo, a consumação
das coisas, o altruísmo. Associa-se ao signo de Libra, à cor violeta, à nota musical
Mi. É o princípio que nos guia ao transcendente, o sacrifício do que somos no que
desejamos ser; a devoção. Remete também a todo movimento expansivo e ao poder
derivado da elevação.
No plano espiritual representa o apostolado, o sacrifício do superior para a
dignificação do inferior. No plano mental, corresponde ao antagonismo das criações
mentais e a circunspeção na decisão e o que há de penoso no trabalho. No plano
físico é a consumação das coisas e o desassossego material gerado pela moral
(ADOUM, s.d.).
Significa no Divino o equilíbrio entre a necessidade e a liberdade, a Caridade e
a Graça; no Humano, o equilíbrio entre o poder e a coragem, reflexo da Prudência, a
Experiência Adquirida (Saber); no Natural é o equilíbrio entre a manifestação
potencial e a vida reflexa, reflexo do fluido astral, a força equilibrante.
M. (13)
“O mem designa hieroglificamente a mulher, companheira do homem. Daí a
idéia de tudo o que é fecundo e formador. É o signo maternal feminino por
excelência, o signo local e plástico, imagem da ação exterior e passiva. [...] A
criação necessitando de uma destruição igual e contrária, o Mem designou todas as
regenerações nascidas de destruições anteriores, todas as transformações e por
conseguinte, a morte como passagem de um mundo a outro” (PAPUS, 2003, p.
182).
30
N. (14)
“O Nun exprime hieroglificamente a produção da mulher, um filho, um fruto
qualquer, todo ser produzido. Também, essa letra tornou-se a imagem do ser
produzido ou refletido, o símbolo da existência individual e corporal” (PAPUS, 2003,
p. 186). Relaciona-se, segundo Jorge Adoum, com o signo de Libra, com a cor limão
claro, a nota musical Sol bemol. Contém o princípio da afinidade dos opostos, o que
abranda.
No plano espiritual representa a atividade eterna da vida, a afinidade das
coisas opostas, o sacerdócio ao qual se vincula a vida interna e externa do
indivíduo. No plano mental remete à solidariedade das emoções, à associação das
idéias, à reciprocidade nos afetos e a virtude considerada como ponte entre dois
vícios. No plano físico equilibra a relação dos sexos, a força vital, a castidade e o
que destempera as emoções e as paixões (ADOUM, s.d.).
Significa a combinação dos pólos positivo e negativo, a introdução do espírito
na matéria, a involução; A Temperança como reflexo do mundo material; a
encarnação da vida, a vida individual e corporal.
S. (15)
“O Samekh exprime hieroglificamente a mesma idéia que o Zain, quer dizer,
uma flecha, uma arma qualquer; mas a esta idéia acrescenta-se aqui a da flecha
fazendo um movimento circular, de todo círculo delimitando uma circunstância e
fixando sus limites” (PAPUS, 2003, p. 190). Representa também o destino, a
fatalidade, onde age livremente a vontade humana. Simboliza o princípio da luz
31
Ain. (16)
Não possui correspondente em língua latina.
Indica o princípio da divina Providência; é o olho que serenamente vigia. Está
associada ao signo de Sagitário, à cor púrpura viva, à nota musical Si bemol, à
radiação cósmica. Ainda, remete à idéia de a Providência, como Lei, corrigindo com
dor a soberba humana.
No plano espiritual representa o despertar do entendimento em virtude da
aflição com que a fatalidade o comove, bem como a lei da causa e efeito. No plano
mental representa a nulidade dos valores materiais, a pobreza do intelecto que
conduz à soberba humilhante. No plano físico é o rigor, a severidade e a aflição
como espinho que nos desperta à verdade (ADOUM, s.d.).
Significa: Deus na matéria; a queda de Adão, reflexo da morte; a
materialização do Universo, o Mundo Visível.
Ph. F. (17)
“O Fé exprime as mesmas idéias que o Beth, mas num sentido mais expansivo.
Também o Beth, significando mais particularmente a boca do homem como órgão da
palavra, o Fé representa a própria produção do órgão: a palavra. É o símbolo da
palavra e de tudo que se relaciona com ela. É o verbo em ação na Natureza, com
todas as suas conseqüências” (PAPUS, 2003, p.197).
32
Qhaf Q (19)
“O Cof exprime uma arma cortante, tudo que serve ao homem, defende-o; faz
um esforço por ele. Também é o símbolo eminentemente compreensivo,
adstringente e cortante, é a imagem da forma aglomerante e repressora, donde a
idéia de existência material” (PAPUS, 2003, p. 207).
Está relacionado com o signo de Touro, com a cor azul, o Mi sustenido, a
inspiração e a alquimia do organismo. Representa o ato de dar e receber, dor e
glória ao mesmo tempo.
33
R (20)
“O Resch exprime a cabeça do homem. Daqui a idéia de tudo o que possui em
si um movimento próprio e determinante. É o símbolo do movimento próprio, bom ou
mau; exprime a renovação das coisas quanto a seu movimento.” (PAPUS, 2003, P.
211).
Simboliza a ressurreição depois da transmutação, o espertar do Espírito.
Associa-se ao signo de Câncer, à cor verde, à nota Fá sustenido, à doutrina da
reencarnação e às ciências das leis cíclicas. É a decisão e a opinião. Corresponde
ao planeta Saturno.
No plano espiritual produz o despertar da espiritualidade, a iluminação que nos
permite ver o passado e o futuro, a chama que queima e ilumina. No plano mental
gera o estímulo para as coisas elevadas, a conversão do inferior no superior e
representa a revelação da genialidade. No plano físico, harmonia entre o moral e o
material, entre o consciente e o inconsciente (ADOUM, s.d.).
Ch Sh X (21)
O chin exprime uma flecha, mas tendendo a um objetivo. Aqui, “toma a forma
do equilíbrio de um pólo a outro com um ponto de equilíbrio instável no meio. É
também o símbolo da duração relativa e do movimento que com ele se relaciona”
(PAPUS, 2003, p. 214). É o princípio do verbo em sua tripla função de Poder criador,
conservador e renovador.
Está associado ao signo de Áries, á cor roxa, à nota Sol sustenido, à
cromoterapia e à metafísica mística. Representa o Absoluto.
34
T (22)
“A letra tô exprime o seio, assim como o Daleth; mas é sobretudo o símbolo da
reciprocidade, a imagem de tudo o que é mútuo e recíproco. É o símbolo dos
símbolos, pois à abundância do caráter Daleth e à força de resistência e de proteção
do caráter, une a idéia de perfeição, da qual ele é o próprio símbolo” (PAPUS, 2003,
p. 218). Simboliza o princípio do poder plasmante absoluto, a causa unida ao efeito.
Segundo Jorge Adoum, o T é a própria cruz, enquanto signo e ascensão, de
poder e glória (Cruz da Vida). É o homem que representa o macrocosmo com as
quatro formas da esfinge, ou Deus-Homem. É a magia do sexo.
No plano espiritual representa o mistério da vida, o Deus-Homem. No plano
mental é o microcosmo, o resumo do Todo em tudo, o Homem-Deus. No plano físico
gera o sentimento intenso da vida no sem corpo (ADOUM, s.d.).
Tabela de correspondências entre as letras dos alfabetos Grego, Hebraico, Sânscrito, Árabe e
Ocidental.
Sânscrito
Valor Grego Hebraico Letra
Árabe ocidental
associada
Αα a
1 Aleph /a/ א
Alfa a, u, i
Alif
Ββ
2 Beth /b/ ב b
Beta Bá b
Γγ g j, g
3 Gimel /g/ ג
Gama Jim (dependendo
da região)
Δδ
4 Daleth /d/ד d
Delta Dal d
Εε
5 He (h) /h/ ה e Hê h, e
Épsilon
35
F
6 Vau /v/ו v
Digama v
Ζζ
7
Zeta
Zain /dz/ ז z Zai z
Ηη h em inglês,
8 Heth (h*) ח h Ha
Eta gutural
Θθ
9 Thet (t*) ט t Tha t
Teta
Ιι j i
10 Yodh (y) /j/ י
Iota i, j
Alif
Κκ
20
Capa
Kaph /k/ כ k k
Keaf
Λλ
30 Lamed /l/ ל l
Lambda Lam l
Νν n
50
Niu Nun /n/ נ
Nun n
Ξξ
60
Csi Samekh (s) מ s Sin s
Οο
70
Ómicron
Ain (gh) ע gh
Ain gh
Ππ
80
Pi Phé /p/ פ p
p
Q
90
Qoppa Cof /ch/ ק
Qof Q, ch
Ρρ R
100
Ro Resch /r/ ר r como em
Rá
barato
Σ σ,ς
200
Sigma Shin /sh /S/ ש S Shin ch, x
Ττ t
300
Tau Tô /t/ ת Tá
Υυ
400 y
Upsilon Iá y
Φφ
500 origem incerta
Fi
Χχ
600 origem incerta
Chi
Ψψ
700 origem incerta
Psi
Ωω
800 origem incerta o
Omega Uau=U w
36
M
900 Sade (s*) /ts/ Sad s mais forte
San
Tabela de correspondências entre letras, números, notas musicais, gemas, metais, cartas do tarô e
elemento astrológico.
LETRA NÚMERO SOM COR GEMA METAL TARÔ ASTRO
A 1 Fá M Branco e O
violeta / ou Pelotiqueiro
vermelho*
B 2 Fá Verde Esmeralda Prata A Papisa Lua
e ônix
preto
CeG 3 Si Púrpura / ou Cobre A imperatriz Vênus
amarelo*
D 4 Fá Roxo Estanho O imperador Júpiter
escuro/ ou
azul*
E 5 Sol # Amarelo / Ametista e Ferro O papa Áries
ou Diamante
vermelho*
F 80 Dó # Amarelo Cristal e Mercúrio A estrela Mercúrio
vivo/ ou Água-
violeta* marinha
H 8 Ré Índigo Esmeralda Prata A justiça Câncer
e Ônix
preto
IeJ 10 Si Celeste / ou Jaspe Rosa Mercúrio A Roda da Virgem
violeta* e Jacinto Fortuna
J 10 Si Celeste / ou Ônix Chumbo A Roda da Capricórnio
violeta* Branco e Fortuna
Pedra-da-
Lua
K 20 Ré b Índigo/ ou Ferro A força Marte
vermelho*
L 30 Mi Violeta/ ou Diamante e Cobre O enforcado Libra
amarelo* Opala
M 40 Fá # Escarlate A morte
claro
N 50 Sol b Limão Topázio e Ferro A Escorpião
claro / ou Malaquita temperança
vermelho*
O 70 Dó Azul Ônix Chumbo A casa de Capricórnio
Branco e Deus
Pedra-da-
Lua
P 80 Dó # Amarelo Cristal e Mercúrio A estrela Mercúrio
vivo / ou Água-
violeta* marinha
37
Síntese Pitagórica
De acordo com Mário F. dos Santos (2000), a palavra número deriva do latim
numerus que, por sua vez, descende do grego nomos, significando lei, norma.
Ainda, em grego, corresponde à palavra aritmós, proveniente de rytmós, do radical
rhe, de onde rhêo, do verbo rhein, significando fluir, ou ritmo.
Segundo conta, um aforismo pitagórico diz que “o número é a série móvel que
jorra da Mônada”. Está, portanto, ligado à idéia de movimento, existindo “onde há
geração e corrupção, onde há aumento e diminuição, onde há alteração. Todas as
coisas finitas, portanto, que constituem a série das coisas criadas, são números, tem
números” (SANTOS, 2000, p. 111).
Para Pitágoras, apud Santos (2000), Todo ser finito se caracteriza por ser
composto, uma vez que o único ser absolutamente simples é o Ser Supremo, o qual
denomina O Um (Hen Prote = um primeiro). Este não é considerado um número,
como também não o é o Hen Dyas aóristos (o um-díada-indeterminada), porque é
gerado por aquele primeiro (determinação; ato formativo), sendo aquele primeiro em
sua procissão (determinibilidade; potência-materiável), ainda Ser Supremo. Da
oposição entre ambos é que surge o número como “série móvel que flui da Mônada,
produto das relações entre os opostos na substância universal” (SANTOS, 2000, p.
111).
Em Pitágoras o número não é apenas a medida do quantitativo, mas, também,
a forma enquanto proporção intrínseca das coisas. Na essência das coisas está
sempre aquilo que é imprescindível para que esta coisa seja o que é. Daí é
necessário que haja uma ordem, “uma relação das partes com o todo, uma certa
coerência, diferente das outras, para que ela possa ser o que ela é e não o que as
outras coisas são” (SANTOS, 2000, p. 112). De modo que, assim, além do
quantitativo, o número sempre “aponta para o qualitativo, o relacional, a modalidade,
valores e outras categorias” (Id. Ibid.).
40
Bibliografia
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em:< http://www.librosgratisweb.com/html/adoum-jorge/la-magia-del-verbo/
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em:<http://www.emule-project.net>. Acesso em: 20 Abril 2007.
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[S.l., s.n.], s.d. Disponível em:< http://www.upasika.com>. Acesso em: 20 Abril 2007.
GORMAN, Peter. Pitágoras: Uma vida. Tradução Rubens Rusche. Sao Paulo:
Cultrix, 1989.
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PAPUS. La ciência de los números. [S.l., s.n.], s.d. Disponível
em:<http://www.upasika.com>. Acesso em: 20 Abril 2007.
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filosafal, a maconaria. Tradução Luis Carlos Lisboa. Sao Paulo: Três, 1973. v. 1.
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TAFNER, M. A. Reconhecimento de palavras isoladas usando redes neurais
artificiais. Dissertação (Mestrado em Engenharia) – Programa de Pós Graduação
em Engenharia de Produção, Universidade Federal de Santa Catarina, Florianópolis,
1996.
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