Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
* O presente texto foi originalmente publicado na Revista Chronos, nº 4, ano 2008, edição da
UNIRIO, de reduzida distribuição dirigida, justificando-se, assim, esta republicação.
** Advogado. Professor Titular de Direito Penal da Universidade Federal do Paraná. Membro de
7
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34 P R EFÁC IO
J UL ./S ET . 2009
1
WALTER, Ingo F. A pintura impressionista, tradução do original alemão por Alice Milheiros e
outros, Singapura: Taschen, 2006, p. 7.
2
Impressionism. Phaidon Press Limited, London/New York/Singapore, 2002, p. 5.
3
O seu quadro Impressão, sol nascente (1872), foi o símbolo do movimento iniciado dois anos após.
8
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
P R EFÁC IO
J UL ./S ET . 2009
9
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34 P R EFÁC IO
J UL ./S ET . 2009
FRAGOSO, HELENO. Lições de Direito Penal – Parte Geral, Rio de Janeiro: Forense, 1985, p. 13.
4
10
LOS ESTRAGOS DE LA LUCHA CONTRA LA
“CRIMINALIDAD ORGANIZADA” EN EL
SISTEMA PENAL: EL CASO COLOMBIANO *
J UAN O BERTO S OTOMAYOR A COSTA **
1 – I NTRODUCCIÓN
Hace algunos años, al estudiar los orígenes de la criminología en
América Latina, ROSA DEL OLMO resaltaba la relación dialéctica existente
entre los cambios en el sistema social general y las transformaciones del
*
Este trabajo fue realizado durante la estancia de investigación del autor en el Área de Derecho
penal de la Universidad de Málaga, financiada por el Ministerio de Educación y Ciencia de
España (Programa de Estancias de Profesores e Investigadores Extranjeros en régimen de año
sabático en España).
** Universidad EAFIT (Medellín, Colombia).
117
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
1 DEL OLMO, R., América Latina y su criminología, México, Siglo XXI, 19842, p. 109.
2 DEL OLMO, R., América Latina y su criminología, p. 117; en general, pp. 108-121. Esto también es
resaltado por ZAFFARONI, E. R., Criminología (aproximación desde un margen), Bogotá, Temis, 1988.
3 Al respecto, con carácter general, GARZÓN VALDÉS, E., “Las funciones del derecho en América
Latina”, en Derecho, ética y política, Madrid, Centro de Estudios Constitucionales, 1993; y LÓPEZ
MEDINA, D. E., Teoría impura del derecho. La transformación de la cultura jurídica latinoamericana,
Bogotá, Legis, 2004, pp. 1 a 69. En el ámbito penal, HURTADO POZO, J., La ley importada, Lima,
Cedys, 1979; para el caso colombiano, VELÁSQUEZ, F., “El derecho penal colombiano y la ley
importada”, en NFP, 1988 (38); SOTOMAYOR ACOSTA, J. O., “Garantismo y derecho penal”, en JD,
1999 (35), pp. 92 y 93; y ARIAS HOLGUÍN, D. P. y SOTOMAYOR ACOSTA, J. O., “Consideraciones
críticas sobre la recepción en Colombia de la ‘teoría de los delitos de infracción del deber’”, en
DPCRI, 2006 (15), pp. 193 y ss.
4 Ver DEL OLMO, R., América Latina y su criminología, pp. 81 y ss.
118
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
5 Cfr. SANTOS, B. DE S., La globalización del Derecho. Los nuevos caminos de la regulación y la
emancipación, Bogotá, Universidad Nacional-ILSA, 1998, pp. 37-67 y 80-85; CAPELLA HERNÁNDEZ,
J. R., “Estado y derecho ante la mundialización: aspectos y problemáticas generales”, en CAPELLA
HERNÁNDEZ, J. R. (Coordinador), Transformaciones del derecho en la mundialización, Madrid, Consejo
General del Poder Judicial, 1999, pp. 85-121, en particular, 119-121; TERRADILLOS, J., “El derecho
penal de la globalización: luces y sombras”, en CAPELLA HERNÁNDEZ, J. R. (Coordinador),
Transformaciones del derecho…, p. 204.
6 En general, cfr. MERCADO, P., “El proceso de globalización, el Estado y el Derecho”, en PORTILLA
CONTRERAS, G., Mutaciones del Leviatán. Legitimación de los nuevos modelos penales, Madrid,
Universidad Internacional de Andalucía – Akal, 2005, pp. 133-138. Sobre los aspectos
estrictamente penales, TERRADILLOS, J., “El derecho penal de la globalización…, pp. 185-217;
DONINI, M., “Escenarios del Derecho penal en Europa a principios del siglo XXI”, en MIR PUIG, S.
y CORCOY BIDASOLO, M. (Directores) – GÓMEZ MARTÍN, V. (Coordinador), La política criminal en
Europa, Atelier, Barcelona, 2004, pp. 43 y 44; SILVA SÁNCHEZ, J. M., La expansión del derecho penal.
Aspectos de la política criminal en las sociedades postindustriales, 2ª edición, Madrid, Civitas, 2001, pp.
81 y ss.; y ARIAS HOLGUÍN, D. P., A propósito de la discusión sobre el derecho penal “moderno” y la
sociedad del riesgo, Cuaderno de Investigación, nº 42, Medellín, Universidad EAFIT, 2006, pp. 22-
28.
7 Cfr. TERRADILLOS, J., “El derecho penal en la globalización…”, p. 185 a 216, en especial, pp. 203-
210; y ARIAS HOLGUÍN, D. P., A propósito de la discusión…, p. 27. Sobre ello han llamado la atención
algunos estudios latinoamericanos: GARZÓN VALDÉS, E., “Las funciones del derecho en América
Latina”, p. 204; en igual sentido, BUSTOS RAMÍREZ, J., “Estructura jurídica y Estado en América
Latina”, en RUSCHE, G. y KIRCHHEIMER, O., Pena y estructura social, Bogotá, Temis, 1984, pp. L a
LV; GARCÍA MÉNDEZ, E., Autoritarismo y control social (Argentina-Uruguay-Chile), Buenos Aires,
Hammurabi, 1987, pp. 231 a 243; SOTOMAYOR ACOSTA, J. O., “Garantismo y derecho penal”, pp. 92
y 93. Recientemente se ha ocupado de analizar este fenómeno con profundidad, LÓPEZ MEDINA,
D. E., Teoría impura del derecho..., pp. 1 a 69.
119
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
8 Al respecto, MEDINA ARIZA, J. J., “Una introducción al estudio criminológico del crimen
organizado”, en FERRÉ OLIVÉ, J. C. y ANARTE BORRALLO, E. (Eds.), Delincuencia organizada. Aspectos
penales, procesales y criminológicos, Huelva, Universidad de Huelva, 1999, pp. 109-134; SÁNCHEZ
GARCÍA DE PAZ, I., La criminalidad organizada. Aspectos penales, procesales, administrativos y policiales,
Madrid, Dykinson, 2005, pp. 42 y ss.; y GARRIDO, V., STANGELAND, P. y REDONDO, S., Principios de
criminología, Valencia, Tirant lo blanch, 2006, pp. 751-776.
9 WEIGEND, T., “Los sistemas penales frente al reto del crimen organizado”, en RIDP, 1997 (68),
p.548. Sobre ello coincide de forma casi unánime la doctrina. Entre otros, BLAKESLEY, L., “El
sistema penal frente al reto del crimen organizado”, en RIDP, 1997 (69), p. 107: “A pesar de los
intentos por definirlo, el crimen organizado es un fenómeno escurridizo, complejo y con múltiples
facetas. Es una idea popular, aunque no jurídica, que la definición puede ser utilizada de una
manera tan genérica que la haga inútil”. Según ZAFFARONI, E. R., El crimen organizado. Una
categoría frustrada, Bogotá, Leyer, 1996, p. 40: “… se trata de una categoría frustrada, o sea de una
tentativa de categorización que acaba en una noción difusa”. En igual dirección, ANARTE
BORRALLO, E., “Conjeturas sobre la criminalidad organizada”, en FERRÉ OLIVÉ, J. C. y ANARTE
BORRALLO, E. (Eds.), Delincuencia organizada…, pp. 20-25; DE LA CUESTA ARZAMENDI, J. L., “El
derecho penal ante la criminalidad organizada: nuevos retos y límites”, en GUTIÉRREZ-ALVIZ
CONRADO, F. y VALCÁRCE LÓPEZ, M. (Directores), La cooperación internacional frente a la criminalidad
organizada, Sevilla, Universidad de Sevilla, 2001, pp. 87-94; FIANDACA, G., “Criminalità
organizzata e controllo penale”, en BASSIOUNI, M. C., LATAGLIATA, A., R. y STILE, A. M., (a cura
di), Studi in onore di Giuliano Vassalli. Evoluzione e riforma del diritto e della procedura penale (1945-
120
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
1990), Volumen II, Milano, Giuffrè, 1991, pp. 33-35; PAVARINI, M., “Lo sguardo artificiale sul
crimine organizzato”, en GIOSTRA, G. e INSOLERA, G. (a cura di), Lotta alla criminalità organizzata:
gli strumenti normativi, Milano, Giuffrè, 1995, p. 79; INSOLERA, G., “Nociones de criminalidad
organizada: concurso de personas y delitos asociativos”, en VIRGOLINI – SLOKAR (Coordinadores),
Nada personal… Ensayos sobre crimen organizado y sistema de justicia, Buenos Aires, Desalma, 2001,
pp. 95-105; ORSI, O. G., Sistema penal y crimen organizado. Estrategias de aprehensión y criminalización
del conflicto, Buenos Aires, Del Puerto, 2007, pp. 3 y ss.
10 Véase SÁNCHEZ GARCÍA DE PAZ, I., La criminalidad organizada…, pp. 46 y ss; y GARRIDO, V.,
STANGELAND, P. y REDONDO, S., Principios de criminología, pp. 751-776. Muy crítico, ZAFFARONI, E.
R., “En torno al concepto de ‘crimen organizado’”, en VIRGOLINI – SLOKAR (Coordinadores), Nada
personal…, p. 10, quien señala, con razón, que “no hay un concepto que abarque todo eso…
Fenómenos tan heterogéneos deben ser combatidos con medidas particularizadas, adecuadas a
las características de cada uno; de lo contrario, todos los intentos nacen destinados al fracaso…
Nada se gana con pretender tratar del mismo modo el secuestro y la sobrefacturación”.
11 ALBRECHT, H. J., Criminalidad transnacional, comercio de narcóticos y lavado de dinero, Bogotá,
Universidad Externado de Colombia, 2001, pp. 11 y ss.; y CERVINI, R., “Los filtros sistémicos del
crimen organizado en materia económica y financiera”, en YACOBUCCI, G. (Coordinador), El
crimen organizado. Desafíos y perspectivas en el marco de la globalización, Buenos Aires, Abaco de
Rodolfo Depalma, 2005, p. 403.
12 Cfr. SILVA SÁNCHEZ, J. M., La expansión del derecho penal…, p. 86.
13 Cfr. SÁNCHEZ GARCÍA DE PAZ, I., La criminalidad organizada…, pp. 83-98.
121
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
122
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
derecho penal…, pp. 159 y ss.; DÍEZ RIPOLLÉS, J. L., La política criminal en la encrucijada, Montevideo-
Buenos Aires, BdeF, 2007, pp. 147-200.
18 Véase, entre otros, a ZAFFARONI, E. R., “Globalización y crimen organizado”, pp. 9-11; SÁNCHEZ
GARCÍA DE PAZ, I., La criminalidad organizada…, pp. 103-215; DE LA CUESTA ARZAMENDI, J. L., “El
derecho penal ante la criminalidad organizada…”, pp. 97-124; CHOCLÁN MONTALVO, J. A.,
“Criminalidad organizada…”, pp. 219-223; ZÚÑIGA RODRÍGUEZ, L., “Criminalidad de empresa,
criminalidad organizada y modelos de imputación penal”, en FERRÉ OLIVÉ, J. C. y ANARTE
BORRALLO, E. (Eds.), Delincuencia organizada…, pp. 199-235.
19 Al respecto, SÁNCHEZ GARCÍA DE PAZ, I., La criminalidad organizada…, pp. 217-286; GÓMEZ DE
español, FARALDO CABANA, P., “Medidas premiales durante la ejecución de condenas por
terrorismo y delincuencia organizada: consolidación de un subsistema penitenciario de
excepción”, en CANCIO MELIÁ – GÓMEZ-JARA DÍEZ (Coordinadores), Derecho penal de enemigo. El
discurso penal de la exclusión, vol. 1, Madrid-Buenos Aires-Montevideo, Edisofer-BdeF, 2006, pp.
757-798.
123
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
21 PAVARINI, M., “Lucha contra la criminalidad organizada…”, p. 24. En igual sentido se manifiesta
WEIGEND, T., “Los sistemas penales frente al reto del crimen organizado”, p. 548: “Deberíamos
además ser conscientes del hecho de que las nuevas y más eficaces armas que podamos
desarrollar, podrán y serán usadas a largo plazo no sólo contra los capos de la droga y las
personas que difunden material pornográfico infantil, sino también – y probablemente con mayor
frecuencia – en la vida penal cotidiana”. Ampliamente, MOCCIA, S., La perenne emergenza…, pássim.
22 DONINI, M., “El derecho penal frente al ‘enemigo’”, en CANCIO MELIÁ – GÓMEZ-JARA DÍEZ
(Coordinadores), Derecho penal del enemigo…, pp. 651-652. Sobre el tema véase también, del mismo
autor, “Non puniblità e idea negoziale”, en DONINI, M., Alla ricerca de un disegno. Scritti sulle
riforme penali in Italia, Padova, CEDAM, 2003, pp. 370-375.
124
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
23 Cfr. MOCCIA, S., La perenne emergenza…, pp. 143-199, en especial pp. 190-193; MUSCO, E., “Los
colaboradores de la justicia entre el ‘pentitismo’ y la calumnia: problemas y perspectivas”, en RP,
1998 (2), p. 44; PAVARINI, M., “Lucha contra la criminalidad organizada…”, pp. 25-36; DONINI, M.,
“Non puniblità e idea negoziale”, pp. 370-375.
24 ALBRECHT, H. J., Criminalidad transnacional…, p. 43. Igual, ORSI, O. G., Sistema penal y crimen
125
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
28 Cfr. BOTTKE, W., “Mercado, criminalidad organizada y blanqueo de dinero en Alemania”, en RP,
1998 (2), pp. 1 y ss; ALBRECHT, H. J., Criminalidad transnacional…, pp. 11 y ss.; ZÚÑIGA RODRÍGUEZ,
L., “Criminalidad de empresa, criminalidad organizada…”, pp. 199 y ss.; SÁNCHEZ GARCÍA DE
PAZ, I., La criminalidad organizada…, pp. 46-57; FOFFANI, L., “Criminalidad organizada y
criminalidad económica”, en RP, 2001 (7), pp. 55 y ss.
126
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
29 Véase el completo análisis realizado por APONTE, A., Guerra y derecho penal de enemigo.
Reflexión crítica sobre el eficientismo penal de enemigo, Bogotá, Ibáñez, 2006.
127
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
por la violencia hasta el 25 de octubre de 2005 y día a día esta cifra aumenta
producto de la violencia política asociada al conflicto armado interno”30.
Como puede apreciarse y así lo señalan algunos analistas, estas cifras
corresponden a las de un país en guerra31, cualquiera sea el nombre que se le
quiera dar. Y aunque es cierto que en estricto sentido gran parte de la
violencia actual no puede atribuirse directamente al conflicto armado,
también lo es que en la situación colombiana actual resulta muy difícil
trazar una frontera entre la violencia política y aquella que no lo es, por lo
que se puede estimar, con PECAUT32, que la violencia puesta en obra por los
protagonistas organizados constituye por lo menos el marco de la violencia
generalizada existente.
Esta problemática se torna aún más grave cuando se tiene en cuenta la
calidad de la respuesta institucional y muy particularmente de la justicia
penal, caracterizada por los elevados índices de impunidad, inclusive en los
casos graves como los reseñados. Pese a las dificultades que hacen que hoy
sea casi imposible saber la verdadera magnitud de la impunidad en
Colombia33, los analistas coinciden en que esta no sólo es muy alta sino
persistente34. Para el caso del homicidio, según RUBIO, “La probabilidad de
que un homicidio sea condenado, del 11% en los sesentas apenas sobrepasa
en la actualidad el 4%”35. Como es de suponer, la situación no es más
pasado y futuro…”, pp. 34-36; RESTREPO, E. M. y MARTÍNEZ CUÉLLAR, M., “Impunidad penal…”,
pássim; UPRIMNY R., “La justicia colombiana…”, p. 2; RUBIO, M, “Crimen sin sumario. Análisis
económico de la justicia penal colombiana”, Bogotá, CEDE, Universidad de los Andes, 1998, en
http://economia.uniandes.edu.co (consultado el 27/06/2007), pp. 11 y ss.; RODRÍGUEZ, C.,
UPRIMNY, R. y GARCÍA VILLEGAS, M., “Entre el protagonismo y la rutina: análisis sociojurídico de
la justicia en Colombia”, pp. 44-49, en http://www.djs.org.co (consultado 21/06/2007); GAITÁN
DAZA, F., “Multicausalidad, impunidad y violencia: una visión alternativa”, en REI, 2001 (5), pp.
78-105.
35 RUBIO, M., “Crimen sin sumario…”, p. 40.
128
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
36 Cfr. RESTREPO, E. M., SÁNCHEZ TORRES, F. y MARTÍNEZ, M., “¿Impunidad o castigo? Análisis e
implicaciones de la investigación penal en secuestro, terrorismo y peculado”, Bogotá, Documento
CEDE 2004-09, Universidad de los Andes, 2004, pp. 1-39, en http://economia.uniandes.edu.co
(consultado el 27.06.2007); CCJ, “Colombia: 2002-2006: situación de derechos humanos y derecho
humanitario”, (consultado en http://www.coljuristas.org), pp. 1-13; ACNUDHC, “Informe de la
Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre la situación de los
derechos humanos en Colombia”, 2006 (consultado en http://www.hchr.org.co), pp. 5-27.
37 Al respecto, APONTE, A., Guerra y derecho penal de enemigo…pp. 486-519. Destaca la
48-49.
129
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
130
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
39 Con amplitud, APONTE, A., Guerra y derecho penal de enemigo…, pp. 292 y ss.
131
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
40 Sobre el particular, GROSSO GARCÍA, M. S., La reforma del sistema penal colombiano, Bogotá, Gustavo
Ibáñez, 1999.
132
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
41 Véase la exposición de motivos de los autores de la iniciativa, el ministro del interior y el fiscal
general de la nación, en GC, 2006 (250) (consultada en: http://www.secretariasenado.gov.co).
42 Cfr. HERNÁNDEZ, T., La ideologización del delito y de la pena, Caracas, Universidad Central de
Venezuela, 1977; TERRADILLOS, J., Peligrosidad social y Estado de Derecho, Madrid, Akal, 1981; y
SOTOMAYOR ACOSTA, J. O., Inimputabilidad y sistema penal, Bogotá, Temis, 1996, pp. 119-129.
133
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
1998.
46 Al respecto la sentencia T-153/1998, en la cual la Corte Constitucional declaró la situación de las
134
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
135
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
136
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
Fuente: CEJOSPA
48Véase la intervención en tal sentido del representante Navas Talero, ponente del proyecto, en la
plenaria de la Cámara de Representantes, en GC, 2004 (391), (consultada en
http://www.secretariasenado.gov.co). Pese a la irracionalidad tanto de las medidas adoptadas
como de los argumentos, la ley ha superado en términos generales las evaluaciones de la Corte
Constitucional (sentencias C-193/2005, C-194/2005, C-823/2005, entre otras). Con una agravante
adicional: la ley 890/2004, a diferencia de lo ocurrido con el sistema acusatorio (ley 906/2004)
cuya implementación ha sido gradual, entró a regir de inmediato en todo el país, con lo cual las
penas se aumentaron para todos los delitos y en todo el territorio, aun cuando los hechos fueran
juzgados conforme a la ley 600/2000, que no prevé posibilidad de negociación entre fiscalía y
defensa y que consagra para la sentencia anticipada una rebaja de pena menor a la del nuevo
CPP; situación que ha dado lugar a graves problemas de aplicación práctica, por la evidente
desigualdad punitiva entre las personas juzgadas conforme al “viejo” y el “nuevo” sistema
procesal. Cfr. CSJ, Sentencias de 14/12/2005 y 7/02/2006.
49 Tomadas de CEJ, “Observatorio ciudadano del sistema acusatorio”, p. 45 y 54, en
http://www.cej.org.co.
137
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
Fuente: CEJOSPA
50 Así por lo demás lo expresa la gran impulsora e ideóloga de la reforma, la Corporación Excelencia
en la Justicia, en CEJ, “Observatorio ciudadano…”, p. 46: “El 80%, aproximadamente, de
sentencias con aceptación de cargos representa un gran avance en comparación con la proporción
de sentencias anticipadas en el sistema anterior que sólo alcanzaba el 29%. Este resultado indica que
el modelo se está desarrollando de la manera en que fue concebido pues se esperaba que un alto número de
procesos concluyera de esta manera” (cursivas fuera de texto).
138
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
139
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
51 Así lo corroboran los datos del CONSEJO SUPERIOR DE LA JUDICATURA, “Sistema penal acusatorio. 2
años de expedición del código de procedimiento penal”, Documento SA-0101, pp. 13-14
(disponible en www.ramajudicial.gov.co).
52 Como informa la CEJ, “Observatorio ciudadano…”, p. 52.
53 Según los datos de CEJ, “Observatorio ciudadano…”, p. 40, entre enero de 2005 y junio de 2006, se
140
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
55 En este sentido, GONZÁLEZ ZAPATA, J., “Verdad, justicia, paz y reparación en la mitología penal. A
propósito de la ley 975 de 2005”, en EP, 2005 (27), p. 50; así también lo han manifestado, HRW,
“Colombia: librando a los paramilitares de sus responsabilidades”, enero de 2005 (disponible en
http://www.hrw.org); Amnistía Internacional, “Colombia: la Ley de Justicia y Paz garantizará la
impunidad para los autores de abusos contra los derechos humanos”, abril 26 de 2005 (disponible
en http://www.amnesty.org); ACNUDHC, “Consideraciones sobre la ley de ‘Justicia y Paz’”,
junio 27 de 2005; CCJ, “Sin paz y sin justicia”, Boletín nº 6, junio 29 de 2005; CIDH, “La CIDH se
pronuncia frente a la aprobación de la ley de justicia y paz en Colombia”, julio 15 de 2005 (los tres
últimos documentos están disponibles en http://www.coljuristas.org).
56 Este hecho también lo resalta GONZÁLEZ ZAPATA, J., “Verdad, justicia, paz…”, p. 58.
141
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
142
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
en términos semejantes, APONTE, A., Guerra y derecho penal de enemigo…, pp. 640-649.
143
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
ABREVIATURAS
ACNUR – Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
Refugiados.
CNUDHC – Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los
Derechos Humanos en Colombia
AP – Análisis Político
ASFADDES – Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos
CCJ – Comisión Colombiana de Juristas
CEJ – Corporación Excelencia en la Justicia
144
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA E STRA NG EIRA
J UL ./S ET . 2009
145
BULLYING, CRIMINOLOGIA E A
CONTRIBUIÇÃO DE ALBERT BANDURA *
L ÉLIO B RAGA C ALHAU **
1 – N OTAS I NTRODUTÓRIAS
É notório que o Brasil passa um grave problema de aumento da
criminalidade. Esse fato fica bem demonstrado quando analisamos as
estatísticas criminais e a situação do sistema penitenciário brasileiro.
* Palestra proferida no I Fórum Paraibano de Combate ao Bullying e incentivo à cultura de paz. João
Pessoa (PB), dia 28.03.2008. Este evento foi organizado pelo MP-PB.
** Promotor de Justiça (criminal) do Ministério Público do Estado de Minas Gerais. Pós-Graduado
13
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
1 Outro fator que diferencia a Criminologia do Direito Penal é a sua preocupação inata com as
vítimas criminais, tratadas com muita pouca importância no sistema da Justiça Criminal
ordinária. É o objeto de estudo da Criminologia moderna: o delito, delinquente, controle social e a
14
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
vítima. O estudo da vítima (Vitimologia) cresceu tanto na Criminologia que alguns doutrinadores
defendem a sua independência.
2 PIMENTA, Carlos. Apontamentos sobre a complexidade e epistemologia nas ciências sociais. In: CANCELLI,
Elizabeth; GAUER, Ruth M. Chittó. Sobre a interdisciplinaridade. Caxias do Sul, Educs, 2005, p. 12-13.
3 CARVALHO, Salo de. Antimanual de Criminologia. Rio de Janeiro, Lumen Juris, 2008, p. 22.
15
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
lançar um novo foco, com a busca de uma visão integrada sobre o fenômeno
criminal.
A Criminologia busca mais que a multidisciplinaridade. Essa ocorre
quando os saberes parciais trabalham lado a lado em distintas visões sobre
um determinado problema. Já a interdisciplinaridade existe quando os
saberes parciais se integram e cooperam entre si.
Toda vez que a Criminologia tentou identificar um fator isolado como
causador da criminalidade ela cometeu um grande erro. Hoje, o que
sabemos é que a criminalidade possui inúmeras motivações e fatores (uns
internos e outros externos) concorrentes e que de uma forma ou outra
facilitam o surgimento dos crimes.
3 – A C ARACTERIZAÇÃO DO BULLYING
Existem alguns critérios básicos, que foram estabelecidos pelo
pesquisador DAN OLWEUS, da Universidade de Bergen, Noruega (1978 a
1993), para identificar as condutas de bullying e diferenciá-las de outras
formas de violência e das brincadeiras próprias da idade. Os critérios
estabelecidos são: ações repetitivas contra a mesma vítima num período
prolongado de tempo; desequilíbrio de poder, o que dificulta a defesa da
vítima; ausência de motivos que justifiquem os ataques. Acrescentamos
ainda que devem levar em consideração os sentimentos negativos
mobilizados e as sequelas emocionais, vivenciados pelas vítimas de
bullying4.
Para CLEO FANTE, o bullying é uma palavra de origem inglesa adotada
em muitos países para definir o desejo consciente e deliberado de maltratar
uma outra pessoa e colocá-la sob tensão; termo que conceitua os
comportamentos agressivos e antissociais, utilizado pela literatura
psicológica anglo-saxônica nos estudos sobre a violência escolar5. Não se
tratam aqui de pequenas brincadeiras próprias da infância, mas de casos de
violência, em muitos casos de forma velada praticadas por agressores
contra vítimas. Elas podem ocorrer dentro de salas de aulas, corredores,
pátios de escolas ou até nos arredores. Elas são, na maioria das vezes,
realizadas de forma repetitiva e com desequilíbrio de poder. Essas agressões
4 FANTE, Cleo; PEDRA, José Augusto. Bullying escolar: perguntas e respostas. Porto Alegre, Artmed,
2008, p. 39.
5 FANTE, Cleo. Fenômeno bullying: como prevenir a violência nas escolas e educar para a paz. Campinas,
Verus, 2005, p. 27.
16
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
17
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
18
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
Tradução de Maria Adriana Veríssimo Veronese. Porto Alegre, Artmed, 2000, p. 466.
19
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
12 Não é preciso ir fundo na análise de tais condutas serem reproduzidas numa sociedade capitalista
como a nossa, onde o sucesso, a competição e o lucro são fontes de desejos e obsessões de um
número cada vez maior de pessoas. São comuns as expressões “o mundo é dos espertos”, que
refletem um terreno propício para a reprodução do bullying.
13 CLONINGER, Susan C. Teorias da personalidade. Tradução de Cláudia Berliner. São Paulo, Martins
20
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
menores que surgem acabam por provocar reações intensas. Às vezes, essas
reações assumem caráter agressivo em razão da tendência do agressor a
empregar meios violentos nas situações de conflitos. Em virtude de sua
força física, seus ataques violentos mostram-se desagradáveis e dolorosos
para os demais. Geralmente o agressor prefere atacar os mais frágeis, pois
tem certeza de dominá-los, porém não teme brigar com outros alunos da
classe: sente-se forte e confiante14.
Quanto aos demais alunos, acabam se tornando testemunhas, vítimas
e coagressores dessa cruel dinâmica. Se não participarem do bullying,
podem ser as próximas vítimas. Não denunciam e se acostumam com essa
prática violenta, podendo até encará-la como normal dentro do ambiente
escolar (e um dia até no ambiente de trabalho). O bullying acaba criando um
ciclo vicioso, arrastando os envolvidos cada vez mais para o seu centro.
Para romper aos poucos com o ciclo vicioso, cada parte deve
examinar sua própria contribuição involuntária para o padrão e fazer algo
diferente que tenha mais chances de reduzir o problema exteriorizado. É
necessário que abandonem essa postura de culpar uma à outra e caminhem
em direção a uma compreensão mais profunda do problema que há entre
elas15.
Lecionam FANTE e PEDRA que os espectadores representam a maioria
dos alunos de uma escola. Eles não sofrem e nem praticam bullying, mas
sofrem as suas consequências, por presenciarem constantemente as
situações de constrangimento vivenciadas pelas vítimas. Muitos
espectadores repudiam as ações dos agressores, mas nada fazem para
intervir. Outros as apoiam e incentivam dando risadas, consentindo com
agressões. Outros fingem se divertir com o sofrimento das vítimas, como
estratégia de defesa. Esse comportamento é adotado como forma de
proteção, pois temem tornar-se as próximas vítimas16.
O sofrimento emocional e moral (até físico eventualmente) da vítima
são patentes. É comum que a vítima mantenha a lei do silêncio, pois, na
maioria das vezes, as agressões são apenas morais e não deixam vestígios.
14 FANTE, Cleo. Fenômeno bullying: como prevenir a violência nas escolas e educar para a paz. Campinas,
Verus, 2005, p. 47-48.
15 BEAUDOIN, Marie-Nathalie; TAYLOR, Maureen. Bullying e desrespeito: como acabar com essa cultura na
escola. Tradução de Sandra Regina Netz. Porto Alegre, Artmed, 2006, p. 82.
16 FANTE, Cleo; PEDRA, José Augusto. Bullying escolar: perguntas e respostas. Porto Alegre, Artmed,
2008, p. 61.
21
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
17 PEDRA, José Augusto em prefácio da obra constante na nota três de Cleo Fante (2005), p. 9-10.
18 COSTANTINI, Alessandro. Bullying: como combatê-lo? Tradução de Eugênio Vinci de Moraes. São
Paulo, 2004, Itália Nova, p. 51.
22
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
7 – C ONSIDERAÇÕES F INAIS
A Criminologia busca a prevenção dos crimes. Ele estuda os
fenômenos que aumentam a probabilidade do surgimento dos crimes. O
estudo do bullying se faz necessário, nesse contexto, para romper com um
modelo de resolução de conflitos que cultua a exploração dos mais fracos ou
os diferentes e que tem como motor a intolerância com o próximo.
É preciso buscar um diagnóstico do bullying naquela realidade escolar
local. O esclarecimento pode, em muitos casos, facilitar o controle dessas
situações. Para que isso possa ser conseguido é necessário que haja um
diálogo franco entre os envolvidos. Isso evitará que os envolvidos tenham
uma mensagem da sociedade de que os problemas devem ser resolvidos
com violência ou com a anulação moral dos mais fracos.
19 MYERS, David G. Psicologia social, 6ª ed. Tradução de A. B. Pinheiro de Lemos. Rio de Janeiro, LTC,
2000,p. 227.
23
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
8 – R EFERÊNCIAS B IBLIOGRÁFICAS
ABRAPIA – Associação Brasileira Multiprofissional de Proteção à Infância e à
Adolescência. Disponível na Internet:
<http://www.bullying.com.br/BConceituacao21.htm#OqueE>.
BEAUDOIN, Marie-Nathalie; TAYLOR, Maureen. Bullying e desrespeito: como acabar com essa
cultura na escola. Tradução de Sandra Regina Netz. Porto Alegre, Artmed, 2006.
24
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
CALHAU, Lélio Braga. Resumo de Criminologia, 3ª ed. Rio de Janeiro, Impetus, 2008.
CALHAU, _________. Criminalidade, infância e a Psicologia. Jornal Hoje em Dia, Belo
Horizonte, Minas Gerais, 01.12.06, página 02. Também disponível no site
www.novacriminologia.com.br.
CARVALHO, Salo de. Antimanual de Criminologia. Rio de Janeiro, Lumen Juris, 2008.
CLONINGER, Susan C. Teorias da personalidade. Tradução de Cláudia Berliner. São Paulo,
Martins Fontes, 1999.
COSTANTINI, Alessandro. Bullying: como combatê-lo? Tradução de Eugênio Vinci de
Moraes. São Paulo, 2004, Itália Nova.
FANTE, Cleo. Fenômeno bullying: como prevenir a violência nas escolas e educar para a paz.
Campinas, Verus, 2005.
FANTE, Cleo; PEDRA, José Augusto. Bullying escolar: perguntas e respostas. Porto Alegre,
Artmed, 2008.
FRIEDMAN, Howard S; SCHUSTACK, Miriam W. Teorias da personalidade: da teoria clássica à
pesquisa moderna. 2ª ed. Tradução de Beth Honorato. São Paulo, Pearson/Prentice Hall,
2004.
HALL, Calvin S; LINDZEY, Gardner; CAMPBELL, John B. Teorias da personalidade. 4ª ed.
Tradução de Maria Adriana Veríssimo Veronese. Porto Alegre, Artmed, 2000.
MYERS, David G. Psicologia social, 6ª ed. Tradução de A.B.Pinheiro de Lemos. Rio de
Janeiro, LTC, 2000.
PEDRA, José Augusto em prefácio da obra constante na nota 03 de Cleo Fante (2005), p. 9-
10.
PIMENTA, Carlos. Apontamentos sobre a complexidade e epistemologia nas ciências
sociais. In: CANCELLI, Elizabeth; GAUER, Ruth M. Chittó. Sobre a interdisciplinaridade.
Caxias do Sul, Educs, 2005.
25
BREVES CONSIDERAÇÕES SOBRE A
REVALORIZAÇÃO DA VÍTIMA E A
REPARAÇÃO DO DANO NO
PROCESSO PENAL BRASILEIRO
R ENATA J ARDIM DA C UNHA R IEGER *
R ODRIGO O LIVEIRA DE C AMARGO **
27
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
1 Sobre a preocupação dos órgãos oficiais com a vitimação, interessante lembrar que, a partir da
década de 70, o Conselho da Europa investiu na problemática, visando a uma melhor salvaguarda
dos direitos e interesses das vítimas no interior dos vários Estados Membros. Dentre os
instrumentos internacionais, destacam-se os seguintes: 1) “Resolução ( 77) 27, de 28 de setembro
de 1977”, tratando da indenização às vítimas dos processos criminais; 2) “Recomendação nº R (83)
7, de 23 junho de 1983”, prevendo a participação do público na elaboração e na aplicação da
Política Criminal e destacando as reações penais não detentivas e o apoio à vítima; 3) “Convenção
Européia, de 24 de novembro de 1983”, abordando a indenização pelo Estado às vítimas de crimes
violentos; 4) “Recomendação nº R (85) 11, de 28 de junho de 1985”, discutindo a posição da vítima
no ordenamento penal e processual penal; 5) “Recomendação nº R (87) 21, de 9 de setembro de
1987, prevendo assistência às vítimas de crimes e prevenção da vitimação. Também a Assembléia
Geral das Nações Unidas tem se debruçado nos últimos anos sobre esta problemática, tendo
adotado, em 29 de novembro de 1985, a Resolução A/RES/40/34, a “Declaração dos princípios
fundamentais de justiça relativos às vítimas de criminalidade e às vítimas do abuso do poder”:
OLIVEIRA, Odete Maria de Oliveira. Problemática da Vítima de Crimes. Reflexos no Sistema Jurídico
Português. Lisboa: Rei dos Livros, 1994, p. 27-52.
2 O termo é utilizado por JORGE DE FIGUEIREDO DIAS. O autor português constata que se refere, cada
vez com maior insistência, como uma nova e autônoma finalidade da pena o propósito de com ela
se operar a possível concertação entre agente e vítima, através da reparação dos danos. DIAS,
Jorge de Figueiredo. Direito Penal. Parte Geral. Tomo I. Coimbra: Coimbra Editora, 2004, p. 56.
Esta parece ser a posição de CLAUS ROXIN, para quem faz parte da função social do Direito Penal a
inclusão da vítima. O autor salienta a importância da reparação voluntária, seja em dinheiro ou
em força de trabalho, e a possibilidade de conciliação entre autor e ofendido. Mais, para Roxin,
28
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
uma compensação do autor à vítima, que satisfaça esta, ou uma reparação pode restabelecer
consideravelmente a paz jurídica para delitos leves, prescindindo-se, até mesmo, da pena. No que
tange aos crimes graves, o autor alemão sugere a concessão de uma suspensão condicional da
pena ou, quando menos, sua atenuação substancial. ROXIN, Claus. Problemas atuais de política
criminal. In Revista Ibero-Americana de Ciências Penais. Ano 2, n° 4, set/dez 2001, p. 11-18, p. 17-18.
Entre nós, em sentido semelhante: SANTANA, Selma Pereira. A reparação como sanção autônoma
e o direito penal secundário. In Direito Penal Secundário. Estudos sobre crimes econômicos, ambientais,
informáticos e outras questões. Fábio Roberto D’Avila e Paulo Vinícius Sporleder de Souza (coord.).
São Paulo: Editora Revista dos Tribunais: Coimbra, 2006, p. 469-506.
3 BALTAZAR JÚNIOR, José Paulo. A Sentença Penal de Acordo com as Leis de Reforma. In: NUCCI,
Guilherme de Souza (org). Reformas do Processo Penal. Porto Alegre: Editora Verbo Jurídico, 2008,
p. 255.
4 A análise restará limitada à legislação brasileira, mas, conforme referido, a preocupação faz-se
presente nos ordenamentos dos mais diversos países. O Direito Penal Português, por exemplo, dá
relevo à problemática em diversos dispositivos: considera a reparação do dano como condição de
legitimidade de aplicação de certas “penas de substituição” (art. 51 – 1) ou como condição da
“dispensa de pena” (art. 74 – 1b) e admite que o lesado postule a reparação no próprio processo
penal (arts. 71 e ss. e 82-A do CPP. DIAS, Jorge de Figueiredo. Direito Penal. Parte Geral. Tomo I.
Coimbra: Coimbra Editora, 2004, p. 57.
5 A sentença absolutória, por sua vez, não impede a propositura da competente ação indenizatória
no juízo cível, salvo se o fundamento da absolvição for o reconhecimento da inexistência material
do fato ou, ainda, de que o acusado não foi o autor do delito ou de que agiu sob o manto de
excludente da criminalidade. Não é demais lembrar que a ocorrência de prescrição ou de
qualquer outra causa extintiva da punibilidade não afasta a obrigação de reparar o dano.
BITENCOURT, Cezar Roberto. Tratado de direito penal. V.1. 13.ed. São Paulo: Saraiva, 2008, p. 691-
692.
29
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
6 No que tange ao delito de fraude no pagamento por meio de cheque (art. 171, § 2º, VI, CP), o
Supremo Tribunal Federal firmou entendimento de que, pago o cheque antes do oferecimento da
denúncia, descaracterizado estará o crime. Sobre o assunto, o Egrégio Tribunal emitiu a Súmula
554, a qual tem a seguinte redação: “O pagamento de cheque emitido sem suficiente provisão de
fundos, após o recebimento da denúncia, não obsta ao prosseguimento da ação penal.”,
significando que, antes da propositura, o pagamento retira a justa causa da ação penal. Trata-se,
portanto, de exceção ao art. 16 do Código Penal. Sobre o assunto, conferir: DELMANTO, Celso.
Código Penal Comentado. 6.ed. Rio de Janeiro: Renovar, 2002, p. 29.
7 Interessante referir que, no que concerne ao delito de estelionato (art. 171, caput, CP), o Tribunal de
Justiça do Estado do Rio Grande do Sul já considerou a reparação do dano – mesmo que posterior
ao recebimento da denúncia – causa extintiva da punibilidade, aplicando analogicamente a norma
expressa no § 2º do art. 9º da Lei 10.684/03. Este dispositivo, vale lembrar, determina a extinção
da punibilidade quando efetuado o pagamento integral de tributo ou contribuição social. Na
decisão, referiu-se que “o Estado, enquanto lei penal, quando trata diferente ao infrator pobre em
relação ao delinqüente de colarinho branco, estabelece uma diferenciação pelo tipo de agente que
pratica o crime, fato que atinge frontalmente aos princípios constitucionais. O poder estatal impõe
ao estelionatário que comete crime contra cidadão pena privativa de liberdade mesmo se este
ressarcir a vítima antes da sentença, mas não pune o ‘estelionatário’ que comete crime contra o
patrimônio do Estado, em situação idêntica. Em ambos os casos há crime patrimonial, logo não há
como tratar diferentemente os criminosos por ter escolhido como vítima o Estado ou cidadão. Ao
restituir os valores integrais ao patrimônio da vítima, mesmo depois do recebimento da denúncia,
mas antes da sentença, em caso de crimes patrimoniais cometidos sem violência ou grave ameaça,
deve ser aplicada – analogicamente – a regra da § 2º do art. 9º da Lei 10.684/03”. TJRS, RSE nº
70021561105, 5ª Câmara Criminal, Rel. Aramis Nassif, j. em 09/01/2008.
30
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
8 A impossibilidade de reparar o dano origina-se das condições financeiras do preso ou, dentre
outros motivos, do paradeiro desconhecido da vítima, do perdão, da prescrição ou novação da
dívida. DELMANTO, Celso. Código Penal Comentado. 6.ed. Rio de Janeiro: Renovar, 2002, p. 165.
9 Não é demais lembrar que a Lei 9.613/98, Lei de Lavagem de Dinheiro, incrementa o sequestro de
bens, valores ou direitos, oriundos dos crimes que deram origem à lavagem (art. 8˚).
31
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
10 Não é demais trazer as lições de AURY LOPES JÚNIOR, no sentido de que “o dever de reparar o
dano não se confunde com a obrigação de aceitar uma exigência abusiva ou virar um instrumento
de coação e excessos por parte da vítima. Se existe uma ação de cunho indenizatório tramitando,
onde se discute a responsabilidade civil e/ou o valor devido, não há obstáculo algum a que se
considere cumprida a suspensão condicional do processo” (LOPES JÚNIOR, Aury. Direito Processual
Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume II. 1.ed. Rio de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2009,
p. 237).
11 Este princípio determina, em síntese, que aquele que empreende uma atividade potencialmente
poluidora tem que incorporar nos custos de produção os custos de prevenção e reparação de
eventual dano ambiental. Sobre o assunto, conferir: BENJAMIN, Antonio Herman de Vasconcellos
e. O princípio poluidor-pagador e a reparação do dano ambiental. In: _____. Dano ambiental:
prevenção, reparação e repressão. São Paulo: Revista dos Tribunais, 1993. p. 226-236, p. 03-04, e
MACHADO, Paulo Affonso Leme Machado. Direito Ambiental Brasileiro. 14.ed. São Paulo: Malheiros
Editores, 2006, p.59-61 e 83-84.
32
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
12 Também no que tange ao meio ambiente, vale lembrar a Lei 6.938/ 81, que dispõe sobre a Política
Nacional do Meio Ambiente. Esta lei prevê, no art. 14, § 1°, que, sem obstar outras penalidades, é
“o poluidor obrigado, independentemente da existência de culpa, a indenizar ou reparar os danos
causados ao meio ambiente e a terceiros, afetados por sua atividade”.
13 BALTAZAR JÚNIOR, José Paulo. A Sentença Penal de Acordo com as Leis de Reforma. In: NUCCI,
Guilherme de Souza (org). Reformas do Processo Penal. Porto Alegre: Editora Verbo Jurídico, 2008,
p. 258.
14 OLIVEIRA, Eugênio Pacelli. Curso de Processo Penal. 10.ed. Rio de Janeiro: Lumen Juris, 2008, p. 165.
33
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
15 SILVA, Ivan Luís Marques da. A reforma processual penal de 2008: Lei 11.719, procedimentos
penais: Lei 11.690/2008, provas: Lei 11.689/2008, júri: comentadas artigo por artigo. São Paulo:
Editora Revista dos Tribunais, 2008, p. 15.
16 Neste sentido, conferir: FERRARI, Eduardo Reale. Código de processo penal: comentários ao projeto de
reforma legislativa. Campinas, SP: Millennium, 2003, p. 149; OLIVEIRA, Eugênio Pacelli. Curso de
Processo Penal. 10.ed. Rio de Janeiro: Lumen Juris, 2008, p. 165.
17 Ressalva-se o entendimento de GUILHERME NUCCI, no sentido de que o juiz pode fixar a
indenização de maneira ampla e definitiva. Nesta situação, o autor entende que seria indevida a
liquidação na órbita do juízo cível. NUCCI, Guilherme de Souza. Manual de processo penal e execução
penal. 5.ed. São Paulo: Revista dos Tribunais, 2008, p. 236.
18 A redação elaborada pela Comissão Pellegrini foi enviada para o Congresso Nacional, onde foi
mantido o trecho e foram acrescentados os demais tópicos do art. 387. Ainda no Senado, foi
apresentada emenda visando à inserção, no § 1˚, do art. 387, da possibilidade de execução da
reparação nos mesmos autos. Na justificativa, o Senador Demóstenes Torres discorreu sobre o
ajustamento do Código de Processo Penal às demandas sociais e sobre a preocupação com a
vítima. A emenda, contudo, não foi aprovada, e a execução deve dar-se no Juízo Cível. CHOUKR,
Fauzi Hassan. Código de Processo Penal. Comentários Consolidados e Crítica Jurisprudencial. 3.ed. Rio
de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2009, p. 619.
34
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
brasileiro com a reparação do dano. Isso porque torna mais célere, para o
ofendido, a reparação dos prejuízos experimentados pelo ato ilícito, pois
não mais haverá necessidade, estando o patamar mínimo do dano
estabelecido, de processo civil de liquidação19.
Vale referir que o Anteprojeto do Código de Processo Penal20 também
trata da questão. Prevê a possibilidade de o juiz arbitrar indenização pelo
dano moral causado pela infração penal, sem prejuízo da ação civil contra o
acusado e contra o eventual responsável civil pelos danos materiais
existentes.
Na exposição de motivos, consta que “a opção pelos danos morais se
apresentou como a mais adequada, para o fim de se preservar a celeridade
da instrução criminal, impedindo o emperramento do processo, inevitável a
partir de possíveis demandas probatórias de natureza civil”. Consta, ainda,
que, “nesse ponto, o anteprojeto vai além do modelo trazido pela Lei nº
11.719, de 20 de junho de 2008, que permitiu a condenação do réu ao
pagamento apenas de parcela mínima dos danos causados pela infração,
considerando os prejuízos efetivamente comprovados”21.
19 Para BALTAZAR JÚNIOR “parece claro, então, que o sentido da regra é tornar mais ágil reparação,
mas sem atrasar o andamento da ação penal. Em outras palavras, havendo dados nos autos da
ação penal que permitam a fixação do valor mínimo do dano, assim se fará”. BALTAZAR JÚNIOR,
José Paulo. A Sentença Penal de Acordo com as Leis de Reforma. In: NUCCI, Guilherme de Souza (org).
Reformas do Processo Penal. Porto Alegre: Editora Verbo Jurídico, 2008, p. 258.
20 O anteprojeto foi elaborado por ANTÔNIO CORRÊA, ANTONIO MAGALHÃES GOMES FILHO, EUGÊNIO
PACELLI DE OLIVEIRA (RELATOR), FABIANO AUGUSTO MARTINS SILVEIRA, FELIX VALOIS COELHO
JÚNIOR, HAMILTON CARVALHIDO (COORDENADOR), JACINTO NELSON DE MIRANDA COUTINHO,
SANDRO TORRES AVELAR e TITO SOUZA DO AMARAL. Anteprojeto/Comissão de Juristas
responsável pela elaboração de anteprojeto de reforma do Código de Processo Penal. — Brasília:
Senado Federal, 2009, 133 p.
21 Apenas a título ilustrativo, colacionam-se os dispositivos do Anteprojeto que tratam da “parte
civil” (na exposição de motivos, explica-se que a vítima, enquanto parte civil, poderá ingressar no
processo, não só como assistente da acusação, mas também, ou apenas, como parte processual a
ser contemplada na sentença penal condenatória): “Art. 79. A vítima, ou, no caso de sua ausência
ou morte, as pessoas legitimadas a ingressar como assistentes, sem ampliar a matéria de fato
constante da denúncia, poderá, no prazo de 10 (dez) dias, requerer a recomposição civil do dano
moral causado pela infração, nos termos e nos limites da imputação penal, para o que será
notificado após o oferecimento da inicial acusatória. § 1º. O arbitramento do dano moral será
fixado na sentença condenatória e individualizado por pessoa, no caso de ausência ou morte da
vítima e de pluralidade de sucessores habilitados nos autos. § 2º. Se a vítima não puder constituir
advogado, circunstância que deverá constar da notificação, ser-lhe-á nomeado um pelo juiz, ainda
que apenas para o ato de adesão civil à ação penal, caso em que o advogado poderá requerer a
extensão do prazo por mais 10 dias improrrogáveis. § 3º. A condenação do acusado implicará,
ainda, a condenação em honorários, observadas as regras da Lei nº 5.869, de 11 de janeiro de 1973
– Código de Processo Civil, devidos ao advogado constituído pela parte civil ou nomeado pelo
35
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
juiz.” “Art. 80. A parte civil terá as mesmas faculdades e os mesmos deveres processuais do
assistente, além de autonomia recursal quanto à matéria tratada na adesão, garantindo-se ao
acusado o exercício da ampla defesa.
Parágrafo único. Quando o arbitramento do dano moral depender da prova de fatos ou
circunstâncias não contidas na peça acusatória ou a sua comprovação puder causar transtornos ao
regular desenvolvimento do processo penal, a questão deverá ser remetida ao juízo cível, sem
prejuízo do disposto no art. 475-N, II, da Lei nº 5.869, de 11 de janeiro de 1973 – Código de
Processo Civil.” “Art. 81. A adesão de que cuida este Capítulo não impede a propositura de ação
civil contra as pessoas que por lei ou contrato tenham responsabilidade civil pelos danos morais e
materiais causados pela infração. Se a ação for proposta no juízo cível contra o acusado, incluindo
pedido de reparação de dano moral, estará prejudicada a adesão na ação penal, sem prejuízo da
execução da sentença penal condenatória, na forma do disposto no art. 82. § 1º. A reparação dos
danos morais arbitrada na sentença penal condenatória deverá ser considerada no juízo cível,
quando da fixação do valor total da indenização devida pelos danos causados pelo ilícito. § 2º. No
caso de precedência no julgamento da ação civil contra o acusado e/ou os responsáveis civis
pelos danos, o valor arbitrado na sentença penal para a reparação do dano moral não poderá
exceder àquele fixado no juízo cível para tal finalidade. § 3º. A decisão judicial que, no curso do
inquérito policial ou da ação penal, reconhecer a extinção da punibilidade ou a absolvição por
atipicidade ou por ausência de provas, não impedirá a propositura de ação civil. “Art. 82.
Transitada em julgado a sentença penal condenatória, e sem prejuízo da propositura da ação de
indenização, poderão promover-lhe a execução, no cível (art. 475-N, II, Lei nº 5.869, de 11 de
janeiro de 1973 – Código de Processo Civil), as pessoas mencionadas no art. 75. Parágrafo único.
O juiz da ação civil poderá suspender o curso do processo, até o julgamento final da ação penal já
instaurada, nos termos e nos limites da legislação processual civil pertinente.” Na parte da
sentença, destaca-se o seguinte dispositivo: “Art. 412. O juiz, ao proferir sentença condenatória:
[...] IV – arbitrará o valor da condenação civil pelo dano moral, se for o caso. [...]”
22 Como é cediço, a doutrina tradicional distingue as leis em penais, processuais penais puras e
mistas. Neste trabalho, interessa analisar, ainda que sucintamente, as duas últimas. Entende-se
que a lei processual penal pura regula o início, o desenvolvimento ou o fim do processo, bem
como os diferentes institutos processais. A ela, é aplicável o princípio da imediatidade. A lei
mista, por sua vez, é aquela que possui caracteres penais e processuais penais. A esta, aplica-se a
regra de direito intertemporal do Direito Penal: a lei mais benéfica retroage e a mais gravosa não.
Não é demais referir que a doutrina moderna já rechaça esta distinção. Observa-se que, à luz da
Constituição, a garantia da irretroatividade da lei penal mais gravosa deve ser aplicada, também,
às leis processuais, sendo frágil e artificial a distinção entre leis puras e leis mistas: LOPES JÚNIOR,
Aury. Direito Processual Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume 1. 3.ed. Rio de Janeiro:
Editora Lumen Juris, 2008, p. 201- 206.
36
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
23 TJRS, Apelação Crime nº 70027798511, 8ª Câmara Criminal, Relatora: Fabianne Breton Baisch,
julgado em 18/02/09. Também: TJRS, 70027575414, 8ª Câmara Criminal, rel.: Isabel de Borba
Lucas, julgado em 01/4/09; TJRS, Apelação Crime nº 70027659226, 8ª Câmara Criminal, Relator:
Isabel de Borba Lucas, julgado em 28/01/09; TJRS, Apelação Crime nº 70027594563, 8ª Câmara
Criminal, Relator: Danúbio Edon Franco, julgado em 17/12/08; TJRS, Apelação Crime nº
70027241017, 8ª Câmara Criminal, Relator: Fabianne Breton Baisch, j. em 17/12/08; TJRS,
Apelação Crime nº 70027069822, 8ª Câmara Criminal, Relator: Isabel de Borba Lucas, julgado em
17/12/08.
24 Ressalva-se o entendimento de ANDREY BORGES DE MENDONÇA, para quem o art. 387, IV, tem
apenas caráter processual penal e, por isso, deve ser aplicado imediatamente. MENDONÇA,
Andrey Borges de. Nova Reforma do Código de Processo Penal: comentada artigo por artigo. São Paulo:
Método, 2008, p. 245.
37
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
25 MENDONÇA, Andrey Borges de. Nova Reforma do Código de Processo Penal: comentada artigo
por artigo. São Paulo: Método, 2008, p. 240-242.
26 BALTAZAR JÚNIOR, José Paulo. A Sentença Penal de Acordo com as Leis de Reforma. In: NUCCI,
Guilherme de Souza (org). Reformas do Processo Penal. Porto Alegre: Editora Verbo Jurídico, 2008,
p. 258.
27 A fundamentação limita-se ao Parecer do Procurador de Justiça: “[...] Quanto à indenização
concedida na sentença, andou bem o insigne Promotor de Justiça Dr. Roberto Bayard Fernandes
Figueiró, ao salientar que ‘compete ao julgador, ao proferir a sentença condenatória, nos termos
do art. 387, inc. IV, do Código de Processo Penal, fixar o valor mínimo para reparação dos danos
causados pela infração, independente de pedido explícito’. E, quanto ao valor, em caso de
eventual impossibilidade de pagamento, deverá ser decidido pelo juízo executório, o
competente”. TJRS, Apelação Crime nº 70028215945, 3ª Câmara Criminal, Rel. José Antônio Hirt
Preiss, julgado em 16/04/09.
28 LOPES JÚNIOR, Aury. (Re)Pensando as condições da ação processual. In: GAUER. Ruth Maria Chittó
(org.) Criminologia e Sistemas Jurídicos Penais Contemporâneos. Porto Alegre: Edipucrs, 2008, p.
280.
29 “O exercício da pretensão acusatória (com todos os seus elementos) é a acusação, fundamental
para aferir-se se é a sentença (in)congruente no processo penal, pois é ela quem demarca os
limites da decisão jurisdicional. O objeto do processo penal é a pretensão acusatória, vista como a
faculdade de solicitar a tutela jurisdicional, afirmando a existência de um delito, para ver ao final
concretizado o poder punitivo estatal pelo juiz através de uma pena ou medida de segurança. […]
A compreensão da complexa estrutura do objeto do processo penal é fundamental para o estudo
do princípio ou regra da correlação, como também o é para a compreensão dos limites do poder
acusatório” (LOPES JÚNIOR, Aury. Direito Processual Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume
II. 1.ed. Rio de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2009, p. 346.)
38
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
30 Sobre o assunto, conferir o trabalho da advogada Natalie Pletsch, ao analisar a formação da prova
no jogo processual penal. A advogada destaca, acertadamente, a necessidade de o juiz manter-se
inerte, imparcial, no decorrer do processo penal. Refere que, para assegurar a imparcialidade, é
preciso proibir o magistrado de se movimentar. Acrescenta que há apenas dois cursos a seguir
(tese defensiva e tese acusatória), e pender em direção a qualquer deles é romper com a
equidistância. Por este motivo, ao lembrar a antiga redação do art. 156 do CPP, Natalie Pletsch
refere que, “dentre tantos, o meio mais grave, porém mais corrente, da quebra desta simetria é
identificado durante a instrução probatória, quando o juiz, apoiado na legislação processual penal
brasileira, diligencia de ofício”. PLETSCH, Natalie Ribeiro. Formação da prova no jogo processual penal:
o atuar dos sujeitos e a construção da sentença. São Paulo: IBCCRIM, 2007, p. 67-73.
31 TJRS, Apelação Criminal 70029444130, 6ª Câmara Criminal, Rel. Aymoré Roque Pottes de Mello, j.
39
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
32 GIACOMOLLI, Nereu José. Reformas (?) do Processo Penal. Considerações Críticas. Rio de Janeiro:
Editora Lumen Juris, 2008, p. 110-111.
33 GRINOVER, Ada Pellegrini; GOMES FILHO, Antônio Magalhães; FERNANDES, Antônio Scarance.
Recursos no processo penal: teoria geral dos recursos, recursos em espécie, ações de impugnação, reclamação
aos tribunais. 4.ed. São Paulo: Editora Revista dos Tribunais, 2005, 78 e ss.
40
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
IV – C ONCLUSÕES
À guisa de conclusão, interessa retomar, sucintamente, os principais
pontos abordados no curso do trabalho. Na parte inicial, demonstrou-se que
a problemática da vítima ocupa um papel de destaque no Direito Penal e na
Política Criminal dos mais diversos países. Destacou-se, ainda, que as
34 MENDONÇA, Andrey Borges de. Nova Reforma do Código de Processo Penal: comentada artigo
por artigo. São Paulo: Método, 2008, p. 244.
35 TOURINHO FILHO, Fernando da Costa. Manual de Processo Penal. 11.ed. São Paulo: Editora Saraiva,
2009, 229-230.
41
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
36 TJRS, Apelação Crime nº 70027798511, 8ª Câmara Criminal, Relatora: Fabianne Breton Baisch,
julgado em 18/02/09. Também: TJRS, Apelação Crime nº 70027659226, 8ª Câmara Criminal,
Relator: Isabel de Borba Lucas, julgado em 28/01/09; TJRS, Apelação Crime nº 70027594563, 8ª
Câmara Criminal, Relator: Danúbio Edon Franco, julgado em 17/12/08; TJRS, Apelação Crime nº
70027241017, 8ª Câmara Criminal, Relator: Fabianne Breton Baisch, j. em 17/12/08; TJRS,
Apelação Crime nº 70027069822, 8ª Câmara Criminal, Relator: Isabel de Borba Lucas, julgado em
17/12/08.
42
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
37 LOPES JÚNIOR, Aury. Direito Processual Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume 1. 3.ed. Rio
de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2008, p. 97.
38 GIACOMOLLI, Nereu José. Reformas (?) do Processo Penal. Considerações Críticas. Rio de Janeiro:
43
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
R EFERÊNCIAS B IBLIOGRÁFICAS
BALTAZAR JÚNIOR, José Paulo. A Sentença Penal de Acordo com as Leis de Reforma. In: NUCCI,
Guilherme de Souza (org). Reformas do Processo Penal. Porto Alegre: Editora Verbo
Jurídico. 2008.
BENJAMIN, Antonio Herman de Vasconcellos e. O princípio poluidor-pagador e a
reparação do dano ambiental. In: _____. Dano ambiental: prevenção, reparação e repressão.
São Paulo: Revista dos Tribunais, 1993. p. 226-236.
BITENCOURT, Cezar Roberto. Tratado de direito penal. V.1. 13.ed. São Paulo: Saraiva, 2008.
CHOUKR. Fauzi Hassan. Código de Processo Penal. Comentários Consolidados e Crítica
Jurisprudencial. 3.ed. Rio de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2009.
DELMANTO, Celso. Código Penal Comentado. 6.ed. Rio de Janeiro: Renovar, 2002.
DIAS, Jorge de Figueiredo. Direito Penal. Parte Geral. Tomo I. Coimbra: Coimbra Editora,
2004.
FERRARI, Eduardo Reale. Código de processo penal: comentários ao projeto de reforma
legislativa. Campinas, SP: Millennium, 2003.
GIACOMOLLI, Nereu José. Reformas (?) do Processo Penal. Considerações Críticas. Rio de
Janeiro: Editora Lumen Juris, 2008.
GRINOVER, Ada Pellegrini; GOMES FILHO, Antônio Magalhães; FERNANDES, Antônio
Scarance. Recursos no processo penal: teoria geral dos recursos, recursos em espécie, ações de
impugnação, reclamação aos tribunais. 4.ed. São Paulo: Editora Revista dos Tribunais,
2005.
LOPES JÚNIOR, Aury. Direito Processual Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume I.
3.ed. Rio de Janeiro: Editora Lumen Juris, 2008.
______. Direito Processual Penal e sua Conformidade Constitucional. Volume II. 1.ed. Rio de
Janeiro: Editora Lumen Juris, 2009.
______. (Re)Pensando as condições da ação processual. In: GAUER. Ruth Maria Chittó (org.)
Criminologia e Sistemas Jurídicos Penais Contemporâneos. Porto Alegre: Edipucrs, 2008.
MACHADO, Paulo Affonso Leme Machado. Direito Ambiental Brasileiro. 14. ed. São Paulo:
Malheiros Editores, 2006.
MENDONÇA, Andrey Borges de. Nova Reforma do Código de Processo Penal: comentada artigo
por artigo. São Paulo: Método, 2008.
NUCCI, Guilherme de Souza. Manual de processo penal e execução penal. 5.ed. São Paulo:
Revista dos Tribunais, 2008
OLIVEIRA, Eugênio Pacelli. Curso de Processo Penal. 10.ed. Rio de Janeiro: Lumen Juris,
2008.
OLIVEIRA, Odete Maria de Oliveira. Problemática da Vítima de Crimes. Reflexos no Sistema
Jurídico Português. Lisboa: Rei dos Livros, 1994.
PLETSCH, Natalie Ribeiro. Formação da prova no jogo processual penal: o atuar dos sujeitos e a
construção da sentença. São Paulo: IBCCRIM, 2007.
44
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
ROXIN, Claus. Problemas atuais de política criminal. In: Revista Ibero-Americana de Ciências
Penais. Ano 2, n° 4, set/dez 2001, p. 11-18.
SANTANA, Selma Pereira. A reparação como sanção autônoma e o direito penal
secundário. In: Direito Penal Secundário. Estudos sobre crimes econômicos, ambientais,
informáticos e outras questões. Fábio Roberto D’Avila e Paulo Vinícius Sporleder de
Souza (coord.). São Paulo: Editora Revista dos Tribunais: Coimbra, 2006.
SILVA, Ivan Luís Marques da. A reforma processual penal de 2008: Lei 11.719, procedimentos
penais: Lei 11.690/2008, provas: Lei 11.689/2008, júri: comentadas artigo por artigo. São
Paulo: Editora Revista dos Tribunais, 2008.
TOURINHO FILHO, Fernando da Costa. Manual de Processo Penal. 11.ed. São Paulo: Editora
Saraiva, 2009.
45
DIREITO PENAL, LITERATURA E
REPRESENTAÇÕES
F ABIO R OBERTO D’A VILA *
47
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
48
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
49
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
6 PESSOA, Fernando. A Hora do Diabo, edição de Teresa Rita Lopes, Lisboa: Assírio e Alvim, 1997,
p.18.
7 PESSOA, Fernando. A Hora do Diabo, p.30 s.
8 NIETZSCHE, apud, BARROS, Fernando de Moraes. Introdução, in: NIETZSCHE, F. Sobre a Verdade e a
Mentira, org. e tradução de Fernando de Moraes Barros, São Paulo: Hedra, 2008, p.15.
50
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
9 HEIDEGGER, Martin. Serenidade, trad. de Maria Madalena Andrade e Olga Santos, Lisboa: Piaget,
p.12.
10 HEIDEGGER, Martin. Serenidade, p.26.
51
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
11 DOSTOIÉVSKI, Fiódor. Crime e Castigo, trad. de Natália Nunes, Porto Alegre: L&PM, 2007, p.79.
52
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
senhor entendeu por bem me dizer que o meu artigo não estava
claro; eu estou disposto a explicá-lo até onde puder. É provável
que eu não me engane supondo que esse é o seu desejo. A meu
ver, se as descobertas de Kepler e de Newton, em conseqüência de
certos acontecimentos, não tivessem chegado ao conhecimento dos
homens de outra maneira senão mediante o sacrifício da vida de
um, dez, cem ou mais homens que se opusessem a essa descoberta
ou se atravessassem no seu caminho como obstáculos, Newton,
então, teria tido o direito, e até o dever... de eliminar esses dez ou
esses cem homens, a fim de que as suas descobertas chegassem ao
conhecimento de toda a humanidade. Disso não se conclui, no
entanto, de maneira alguma, que Newton tivesse qualquer direito
de assassinar quem muito bem lhe parecesse, à toa, nem de ir
todos os dias roubar em praça pública. (...) Eu só tenho fé na minha
teoria essencial, que é aquela que diz concretamente que os
indivíduos se dividem, segundo a lei da natureza, em duas
categorias: a inferior (a dos vulgares), isto é, se me permite a
expressão, a material, que unicamente é proveitosa para a
procriação da espécie, e a dos indivíduos que possuem o dom ou a
inteligência para dizerem no seu meio uma palavra nova. (...) A
meu ver eles têm a obrigação de ser obedientes, por ser esse o seu
destino e por não ter, de maneira nenhuma, para eles, nada de
humilhante. A segunda categoria é composta por aqueles que
infringem as leis, os destruidores e os propensos a isso, a julgar
pelas suas qualidades. Os crimes destes são, naturalmente,
relativos e muito diferentes; na sua maior parte exigem, segundo
os mais diversos métodos, a destruição do presente em nome de
qualquer coisa melhor. Mas se necessitarem, para bem da sua
teoria, saltar ainda que seja por cima de um cadáver, por cima do
sangue, então, no seu íntimo, na sua consciência, eles podem, em
minha opinião, conceder a si próprios a autorização para saltarem
por cima do sangue, atendendo unicamente à teoria e ao seu
conteúdo, repare bem. (...)”12.
A essa precisa forma de ver o mundo corresponde, bem se sabe, uma
igual forma de ver as coisas do Direito e as coisas do Direito Penal, e contra
isso, contra essa forma de instrumentalizar a tudo e a todos, muito já se tem
53
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
13 WILLASCHEK, Marcus. “Der freie Wille. Eine Tatsache des praktischen Lebens“, Forschung
Frankfurt, 4 (2005), p.51.
14 WILLASCHEK, Marcus. “Der freie Wille“, p.51.
15 WILLASCHEK, Marcus. “Der freie Wille“, p.51.
16 HEIDEGGER, Martin. Serenidade, p.12.
54
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
55
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
56
A SEMI-IMPUTABILIDADE SOB O ENFOQUE
DA NEUROCIÊNCIA COGNITIVA
S ILVIO J OSÉ L EMOS V ASCONCELLOS *
R OBERTA S ALVADOR S ILVA **
R OSSANA A NDRIOLA P EREIRA ***
K ARLA R AFAELA H AACK ****
G ABRIEL J OSÉ C HITTÓ G AUER *****
57
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
I NTRODUÇÃO
O termo psicopatia refere-se a uma síndrome cujos principais
sintomas envolvem uma baixa responsividade emocional, bem como a
manifestação, em diferentes níveis, de comportamentos antissociais. Na
esfera do Direito Penal, qualquer alusão a essa categoria nosológica
específica está longe de gerar consenso sobre a possibilidade de imputação
total ou parcial de culpa diante de qualquer ato antijurídico que possa estar
relacionado ao quadro. Recorrentes atribuições de semi-imputabilidade ou
mesmo de imputabilidade ao psicopata têm gerado inúmeras controvérsias,
demonstrando que o diálogo entre as ciências da mente e o Direito Penal
ainda depende de avanços significativos referentes a essa mesma questão.
O presente trabalho tem por objetivo tecer considerações sobre o
estado atual de conhecimento a respeito do assunto como forma de melhor
instrumentalizar os pensadores e operadores do Direito quanto ao
problema da semi-imputabilidade atribuída aos psicopatas. Mostrar-se-á,
com base em uma revisão da literatura científica publicada nas últimas
décadas, que a psicopatia está associada a disfunções cerebrais específicas.
Tais achados sugerem que essas mesmas disfunções podem, de diferentes
maneiras, afetar a capacidade de um indivíduo orientar suas ações, ainda
que se mantenha capaz de compreender a ilicitude das mesmas. Em termos
gerais, uma parte significativa desses trabalhos insere-se no programa de
pesquisa da Neurociência Cognitiva que tem como uma das suas propostas,
examinar a funcionalidade cerebral considerando o processamento de
informações que o cérebro é capaz de executar.
Por outro lado, os autores também elucidam o fato de que tais
achados não corroboram qualquer tipo de determinismo genético. Nesses
termos, o trabalho também se mostra capaz de explicar melhor algumas
questões relativas à etiologia desse transtorno de personalidade. Assinala,
dessa forma, que uma perspectiva biopsicossocial sobre o problema é capaz
de oferecer explanações mais promissoras, ainda que não se mostre
58
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
59
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
60
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
61
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
62
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
63
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
64
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
65
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
C ONSIDERAÇÕES F INAIS
Este trabalho procurou elucidar a psicopatia a partir de achados
recentes oriundos principalmente da Neurociência Cognitiva. Uma
abordagem que procura compreender o funcionamento cerebral levando
em consideração alguns dos seus desempenhos e capacidades específicas.
Entende-se que o exame de algumas disfunções relacionadas à psicopatia
mostra-se capaz de contribuir com o debate sobre a inserção desse quadro
na condição jurídica delimitada pelos critérios vigentes de semi-
imputabilidade.
A problemática relativa ao quão acertado é inserir o psicopata na
categoria dos semi-imputáveis esteve, na análise apresentada, pautada
exclusivamente em considerações sobre a capacidade de autodeterminação
desses indivíduos. Mostrou-se que tal capacidade existe de forma parcial,
uma vez que apresenta certas deficiências neurobiologicamente
sustentadas. Por outro lado, os prejuízos decorrentes da própria falta de
alternativas para impor penas diferenciadas e tratamentos minimamente
eficazes para os semi-imputáveis merecem ser considerados. Um enfoque
sobre os mesmos ultrapassa, no entanto, os objetivos deste trabalho.
Uma pergunta tal como o que há de errado com o cérebro do
psicopata poderia, sem prejuízo semântico aparente, ser substituída pelo
questionamento o que há de diferente com o cérebro do psicopata.
Entretanto, diferenças são características essencialmente humanas.
Conforme assinala a psicóloga Judith Harris, nos seus promissores esforços
para compreender o desenvolvimento da personalidade humana, “não há
dois iguais” (HARRIS, 2007). Sendo assim, a questão crucial parece ser
compreender se alterações semelhantes resultam em disfunções
semelhantes e esse parece ser o caso de indivíduos com psicopatia. Discutir
as implicações mais diretas dessas semelhanças é aprimorar o necessário
diálogo entre o Direito Penal e as ciências da mente.
R EFERÊNCIAS
AMERICAN PSYCHIATRIC ASSOCIATION – Diagnostical and statistical manual of mental
disorder. 4th ed. Washington DC: American Psychiatric Association, 1994.
66
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
67
DIREITO E POLÍTICA NA EMERGÊNCIA
PENAL: UMA ANÁLISE CRÍTICA À
FLEXIBILIZAÇÃO DE DIREITOS
FUNDAMENTAIS NO DISCURSO DO
DIREITO PENAL DO INIMIGO *
F ELIPE D ANIEL A MORIM M ACHADO **
*
Artigo dedicado à Profª Drª Flaviane de Magalhães Barros e ao Prof. Dr. Marcelo Cattoni pelo
incentivo à pesquisa e pela constante interlocução.
**
Graduado em Direito pela PUC Minas (2008). Membro do Conselho Deliberativo do Instituto de
Hermenêutica Jurídica (IHJ). Fundador e atual Diretor-Presidente do Instituto de Hermenêutica
Jurídica (IHJ). Advogado. E-mail: felipemachado100@gmail.com.
69
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
I NTRODUÇÃO
A discussão sobre a relação entre direito e política, especificamente
entre política criminal e garantias fundamentais, tem se destacado
sobremaneira no atual debate penal e político-criminal. A evolução das
sociedades contemporâneas, impulsionada pela globalização, que abriu as
fronteiras dos países não só a mercadorias, mas também a pessoas e
informações, experimenta novas modalidades de criminalidade que
ultrapassam as fronteiras dos Estados nacionais. O terrorismo, a ameaça do
tráfico de drogas, o tráfico de pessoas, crianças e órgãos e a lavagem de
capitais são espécies de crimes que surgiram nas legislações a partir da
segunda metade do século XX, intensificando-se na última década desse
mesmo século em um movimento denominado de “expansão do Direito
Penal” (SILVA SANCHEZ, 2002).
As atividades expostas, na era global, são impraticáveis sem a
utilização de redes logísticas e de comunicação, assim configurando
sofisticadas estruturas organizacionais. Disso conclui-se que, em um
contexto de globalização, algumas dessas quadrilhas voltadas à
criminalidade organizada gozam de maior poder que os próprios Estados,
ou que escapam ao seu controle político-jurídico, esquivando-se, por
consequência, à persecução e punição por seus crimes (MARTÍN, 2007, p.
129).
Diante da ineficiência da persecução estatal frente a estes tipos de
delitos, cresceu no corpo social o sentimento de medo e impunidade,
gerando perversão, rejeição e segregação àqueles que cometem tal tipo
conduta. Para resolver o problema instaurado pela emergência penal o
70
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
71
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
72
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
73
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
2 Em breves linhas, aduz que nenhum cidadão seria privado de sua liberdade e de seus bens sem o
devido processo, e que seria julgado por seus pares. Nesse contexto, o Direito Penal aparece como
garantia do cidadão (substantive due process of law), pois para um cidadão ser processado por um
crime deve haver lei anterior (princípio da legalidade – nullum crimen nulla poena sine lege) que o
defina, bem como uma prévia pena a ele cominada.
74
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
essa nova onda de delitos, “submetendo-o a cargas que ele não pode
suportar” (CALLEGARI; MOTTA, 2007, p. 03).
A solução apresentada pela política criminal estatal tem sido a criação
de mais e mais tipos penais, bem como o aumento das penas, como se não
existissem outros mecanismos de controle social válidos (CALLEGARI;
MOTTA, 2007, p. 03). “A tendência do legislador atual é a de reagir com
‘firmeza’ dentro de uma gama de setores a serem regulados, no marco da
‘luta’ contra a criminalidade, isto é, com um incremento das penas
previstas” (JAKOBS; CANCIO MELIÁ, 2007, p. 62).
Assim, o Estado “Democrático de Direito”, no alargamento da
legislação penal, reclama a legitimidade para declarar uma verdadeira
“guerra contra a criminalidade” (War on terror3), podendo, para isso, dispor
de direitos e garantias do cidadão em prol de políticas de defesa social, de
modo a criar, na perspectiva proposta por JAKOBS (1997), dois tipos de
Direito Penal, um destinado aos cidadãos e outro destinado aos
delinquentes vistos pelo próprio Estado como “os inimigos”.
3 Tal fato se percebe no discurso do ex-presidente dos EUA, George W. Bush, quando afirma: “My
fellow Americans, as we grieve together at our terrible loss, you should know that your
goverment will not be intimidated by this terrorists outrage. This is no time for business as usual;
it is a time for urgent action. I am asking Congress to declare a temporary state of emergency that
will enable us to take aggressive measures to prevent a second strike and seek a speedy return to
a normal life, with all our rights and freedoms intact” (ACKERMAN, 2006, p. 06).
75
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
76
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
5 LUIS GRACIA MARTÍN (2007, p. 95-119), em uma análise dos precedentes históricos do DPI encontra
suas bases já na sofística grega, apresentando seus elementos na teoria penal de Protágoras, e em
seguida no sofista do Anônimo de Jâmblico.
6 Distinção operada por JAKOBS (JAKOBS; CANCIO MELIÁ, 2007, p. 21) entre Direito Penal do cidadão
e Direito Penal do inimigo quer significar a configuração de dois tipos ideais que no plano da
realidade nunca se manifestam de modo puro. Tratam-se, em realidade, de dois polos de um só
mundo ou de duas tendências opostas presentes no mesmo contexto jurídico-penal.
7 Desse modo, conclui-se que o estado de natureza é, na verdade, um estado de guerra, em que
“todo homem é inimigo de todo homem” (HOBBES, 1988, p. 76). No estado de natureza o homem
busca preservar sua existência (HOBBES, 1988, p. 74-77), motivando-se sempre pela busca da
satisfação de seus desejos (HOBBES, 1988, p. 60-64), sendo o primeiro, segundo HOBBES, o
“perpétuo e irrequieto desejo de poder e mais poder, que cessa apenas com a morte”.
77
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
8 “Uma pessoa de cujos atos uma grande multidão, mediante pactos recíprocos uns com os outros,
foi instituída por cada um como autora, de modo a ela poder usar a força e os recursos de todos,
da maneira que considerar conveniente, para assegurar a paz e a defesa comum. Àquele que é
portador dessa pessoa se chama soberano, e dele se diz que possui poder soberano. Todos os
restantes são súditos” (HOBBES, 1988, p. 106).
9 “O direito de representar a pessoa de todos é conferido ao que é tornado soberano mediante um
pacto celebrado apenas entre cada um e cada um, e não entre o soberano e cada um dos outros,
não pode haver quebra do pacto da parte do soberano, portanto nenhum dos súditos pode libetar-
se da sujeição, sob qualquer pretexto de infração” (HOBBES, 1988, p. 107).
10 Referindo-se àqueles que negam a autoridade do Estado, afirma HOBBES (1988, p. 190) que “a
natureza desta ofensa consiste na renúncia à sujeição, que é um regresso à condição de guerra a
que vulgarmente se chama rebelião, e os que assim ofendem não sofrem como súditos, mas como
inimigos”.
78
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
79
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
80
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
81
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
12 Nos EUA destaca-se a Lei da Uniting and Strengthening America by Providing Tools Required to
Intercept and Obstruct Terrorism Act de 26 de outubro de 2001, mais conhecido como US Patriot Act.
Na Espanha, com a lei orgânica 15/2003, houve a elevação do limites das penas privativas de
82
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
liberdade que passou para 40 anos (art. 76 do CP), bem como o aumento dos requisitos para a
concessão da liberdade condicional (art. 90.1., § 2º do CP).
13 Art. 7º, caput, do PLS 150/2006: “Consiste a ação controlada em retardar a intervenção policial
relativa à ação praticada por crime organizado ou a ele vinculado, desde que mantida sob
observação e acompanhamento para que a medida legal se concretize no momento mais eficaz à
formação de provas e obtenção de informações”.
14 Conforme aduz CANCIO MELIÁ “a esquerda política tem aprendido o quanto rentável pode
resultar o discurso da law and order, antes monopolizado pela direita política” (JAKOBS; CANCIO
MELIÁ, p. 62).
83
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
15 “Esse discurso de cunho populista tem um efeito mágico na população que pugna por medidas
mais duras, olvidando-se, no futuro, que será a destinatária das mesmas” (CALLEGARI; MOTTA,
2007, p. 19).
16 Em seu livro “Direito Penal do Inimigo”, JAKOBS e CANCIO MELIÁ (2007, p. 42; p. 79) utilizam a
expressão “demonizar”.
84
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
85
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
86
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
87
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
88
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
C ONCLUSÃO
O equilíbrio entre o direito e a política nunca se fez tão importante
quanto nesse momento de emergência penal, em que se reclama ações
imediatistas do Estado no combate à criminalidade. A Constituição, vista
como intermediadora entre direito e política, é vilipendiada por esta, que
mitiga os limites materiais que lhe são impostos pelos direitos
fundamentais. Desse modo, o Estado, acreditando ser o Direito Penal o
instrumento hábil no combate ao crime organizado, utiliza-o
imoderadamente – Direito Penal simbólico –, terminando por flexibilizar os
direitos e garantias fundamentais na War on terror.
O discurso que permeia essa atuação estatal é fornecido pelo Direito
Penal do inimigo que pensado por JAKOBS, a partir das teorias de ROUSSEAU,
HOBBES e KANT, defende que existem sujeitos, rotulados como “inimigos”,
que são voltados à prática habitual de crimes, não oferecendo, portanto,
uma segurança de comportamento conforme ao direito, devendo ser
banidos da sociedade. A esses indivíduos deve-se aplicar o Direito Penal do
inimigo que é um bloco normativo diferenciado do Direito Penal do
cidadão, ao passo que lhe restringe o exercício de direitos e garantias
fundamentais. Já para o cidadão que eventualmente comete uma conduta
delituosa, aplica-se o Direito Penal nos moldes clássicos, eis que ele não
oferece um risco, devendo assim ser reintegrado à sociedade.
Critica-se o Direito Penal do inimigo, eis que num Estado de Direito,
no qual o direito vincula não só a sociedade, mas também o próprio Estado,
não pode este desrespeitar os direitos e garantias fundamentais do cidadão,
sob pena de um retorno ao Estado de Polícia. Assim, falar em Direito Penal
do cidadão é um pleonasmo, enquanto que dizer Direito penal do inimigo é
uma contradição em seus termos. O encrudelecimento da legislação penal,
através de um discurso populista que flexibiliza as garantias processuais do
cidadão, não resolve o problema da criminalidade, servindo apenas como
um alento ao caos social. A negação dos direitos fundamentais ao criminoso
serve como um motivo a mais para que ele negue a legitimidade do Estado,
pois se este desrespeita a Constituição, então o criminoso se vê ainda mais
89
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
VI – B IBLIOGRAFIA
ACKERMAN, Bruce. Before the next attack: preserving civil liberties in an age of terrorism. New
Haven: Yale University Press, 2006.
BARATTA, Alessandro. La violenza e la forza. Alcune riflessioni su mafia, corruzione e il
concetto di politica, in Dei delitti e delle pene, 2, 1993.
CALLEGARI, André Luís; MOTTA, Cristina Reindolff. Estado e Política Criminal: a
expansão do Direito Penal como forma simbólica de controle social. In: CALLEGARI,
André Luís (Org.). Política criminal, Estado e Democracia. Rio de Janeiro: Lumen Juris,
2007, p. 01-22.
CANOTILHO, J. J. Gomes; MOREIRA, Vital. Fundamentos da Constituição. Coimbra: Coimbra,
1991.
CATTONI DE OLIVEIRA, Marcelo Andrade. Devido Processo Legislativo. 2. ed. Belo Horizonte:
Mandamentos, 2006.
CATTONI DE OLIVEIRA, Marcelo Andrade. Direito, política e filosofia: contribuição para uma
teoria discursiva da constituição no marco do patriotismo constitucional. Rio de Janeiro:
Lumen Juris, 2007.
CASTAN TOBEÑAS, Jose. Los derechos del hombre. 4. ed. Madrid: Reus, 1992.
90
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
CHOUKR, Fauzi Hassan. Bases para compreensão e crítica do direito emergencial. 2005.
Disponível em:
<http://www.mundojuridico.adv.br/sis_artigos/artigos.asp?codigo=673>. Acesso
em: 14.03.2009
DÍEZ RIPOLLÉS, José Luis. De La Sociedad del Riesgo a La Seguridad Ciudadana: un
debate desenfocado. In: CALLEGARI, André Luís (Org.). Política criminal, Estado e
Democracia. Rio de Janeiro: Lumen Juris, 2007, p. 81-128.
DWORKIN, Ronald. Levando os direitos a sério. São Paulo: Martins Fontes, 2002a.
DWORKIN, Ronald. O império do direito. São Paulo: Martins Fontes, 2003.
DWORKIN, Ronald: The Threat to Patrotism. In The New York Review, Volume 49, n° 3, 28
de fevereiro de 2002b. Disponível em <http://www.nybooks. com/articles/15145>.
Acesso em: 01 de março de 2009.
ECKERT, Julia. The politics of security. Max Planck Institute for Social Anthropology
Working Papers. Paper n. 76. 2005.
FERRAJOLI, Luigi. Direito e Razão. São Paulo: Revista dos Tribunais, 2002.
GOMES, Luiz Flávio. Direito Penal do inimigo (ou inimigos do Direito Penal). São Paulo:
Notícias Forenses, out. 2004.
HABERMAS, Jürgen. Direito e Democracia: entre facticidade e validade. vol. 01. Rio de Janeiro:
Tempo Brasileiro, 2003.
HASSEMER, Winfried. Direito Penal Libertário. Tradução de Regina Greve. Belo Horizonte:
Del Rey, 2007.
HASSEMER, Winfried. Crítica al Derecho Penal de hoy: norma, interpretación, procedimento.
Límites de la prisión preventiva. Tradução de Patricia S. Zieffer. 2. ed. Buenos Aires: Ad-
Hoc, 2003.
HOBBES, Thomas. Leviatã ou matéria, forma e poder de um Estado eclesiástico e civil. 4. ed. São
Paulo: Nova Cultural, 1988.
JAKOBS, Günther. Criminalización en el estadio previo a la lesión de un bien jurídico.
Tradução de Enrique Peñaranda. In: JAKOBS, Günther. Estudios de Derecho penal.
Madrid: Civitas, 1997, p. 293-324.
JAKOBS, Günther. ¿Terroristas como personas en derecho?. In: CANCIO MELIÁ, Manuel;
GÓMEZ-JARA DÍEZ, Carlos (Orgs.). Derecho penal del enemigo: el discurso penal de la
exclusión. vol. 02. Madrid: Edisofer S. L., 2006a. p. 77-92.
JAKOBS, Günther. ¿Derecho penal del enemigo? Un estudio acerca de los presupuestos de
la juridicidad. In: CANCIO MELIÁ, Manuel; GÓMEZ-JARA DÍEZ, Carlos (Orgs.). Derecho
penal del enemigo: el discurso penal de la exclusión. vol. 02. Madrid: Edisofer S. L., 2006b.
p. 93-116.
JAKOBS, Günther; CANCIO MELIÁ, Manuel. Direito penal do inimigo: noções e críticas.
Tradução de André Luís Callegari; Nereu José Giacomolli. Porto Alegre: Ed. Livraria
do Advogado, 2007.
KANT, Immanuel. Para a paz perpetua. Tradução de Bárbara Kristensen. Rianxo: Instituto
Galego de Estudos de Segurança Internacional e da Paz, 2006.
91
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
LASCANO, Carlos Julio. La “demonización” del enemigo y la crítica al derecho penal del
enemigo basada en su caracterización como derecho penal de autor. In: CANCIO MELIÁ,
Manuel; GÓMEZ-JARA DÍEZ, Carlos (Orgs.). Derecho penal del enemigo: el discurso
penal de la exclusión. vol. 02, Madrid: Edisofer S. L., 2006, p. 203-232.
MANNA, Adelmo. Erosión de las garantías individuales en nombre de la eficacia de la
cción de lucha contra el terrorismo: la privacy. In: CANCIO MELIÁ, Manuel; GÓMEZ-JARA
DÍEZ, Carlos (Orgs.). Derecho penal del enemigo: el discurso penal de la exclusión. vol. 02,
Madrid: Edisofer S. L., 2006, p. 257-298.
MARTÍN, Luis Gracia. O horizonte do finalismo e o Direito penal do inimigo. Tradução de Luiz
Regis Prado; Érika Mendes de Carvalho. São Paulo: Editora Revista dos Tribunais,
2007.
MENDES, Gilmar Ferreira; COELHO, Inocêncio Mártires; BRANCO, Paulo Gustavo Gonet.
Curso de Direito Constitucional. 2. ed. São Paulo: Saraiva, 2008.
MOCCIA, Sergio. Seguridad y sistema penal. In: CANCIO MELIÁ, Manuel; GÓMEZ-JARA
DÍEZ, Carlos (Orgs.). Derecho penal del enemigo: el discurso penal de la exclusión. vol. 02,
Madrid: Edisofer S. L., 2006, p. 299-320.
NETTO, Menelick de Carvalho. A hermenêutica constitucional sob o paradigma do estado
Democrático de Direito. In: CATTONI DE OLIVEIRA, Marcelo Andrade (Org.). Jurisdição e
Hermenêutica Constitucional. Belo Horizonte: Editora Mandamentos, 2004. Prefácio, p.
25-44.
PORTUGAL. Constituição (2005). Constituição da República Portuguesa. Disponível em:
<http://www.portugal.gov.pt/Portal/PT/Portugal/Sistema_Politico/Constituicao/c
onstituicao_p02.htm>. Acesso em: 24. mar. 2009.
ROUSSEAU, Jean-Jacques. Do Contrato Social. Disponível em
<http://www.cfh.ufsc.br/~wfil/contrato.pdf>. Acesso em 29. mar. 2009>.
SILVA SANCHEZ, José Maria. A expansão do Direito Penal. Tradução de Luiz Otávio Rocha.
São Paulo: Editora Revista dos Tribunais, 2002
ZAFARONI, Eugenio Raúl. O inimigo no direito penal. Tradução de Sérgio Lamarão. Rio de
Janeiro: Revan, 2007.
92
SEMINÁRIO DO GRUPO BRASILEIRO
DA ASSOCIAÇÃO INTERNACIONAL
DE DIREITO PENAL (AIDP-BRASIL)
“RECRUDESCIMENTO PUNITIVO E
SEGURANÇA JURÍDICA” (21 DE MAIO DE 2009,
HOTEL RENAISSANCE EM SÃO PAULO)
(S ECRETÁRIA DE MESA : D RA . D ENISE P ROVASI V AZ )
93
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
94
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
95
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
96
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
97
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
98
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
99
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
100
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
101
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
102
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
103
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
104
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
105
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
106
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
107
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
108
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
109
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
110
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
111
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
112
R EVISTA DE E STUDOS C RIMINAIS 34
D OUTRI NA N AC IONAL
J UL ./S ET . 2009
113